¿TENGO UN NIÑO ÍNDIGO EN CASA? Hoy día el termino “NIÑO INDIGO” está de moda hace un tiempo y muchos lo hemos escuchado, pero ¿sabe Ud. realmente si su hijo es Índigo? Todas las personas que permanecemos en contacto con niños, sabemos que hoy día ellos nacen sabiendo, son muy sensibles, más maduros, críticos y se comportan y hacen todo diferente a como nosotros los adultos, padres y abuelos solíamos hacerlo. Estos niños tan especiales muestran una serie de características poco comunes en su comportamiento y en su manera de ser. Los antiguos métodos disciplinarios, sistemas educativos tradicionales y autoritarios no funcionan para estos niños. Muchas veces son etiquetados con déficit de atención y/o hiperactividad, medicados innecesariamente, son niños incomprendidos, además de la frustración a la que los exponemos. Su hijo suele decir frases como: “pero yo ya sé hacerlo”, “no quiero comer eso”, “yo tengo una misión”, “por qué te sientes tristes” sin que Ud. le haya dicho nada, “debemos de cuidar la tierra”, “no se deben matar los animales”, “tengo angelitos que me cuidan”, “yo puedo hacerlo” aunque sea algo muy difícil o riesgoso y frecuentemente sin ninguna razón le abraza y le dice: “te amo”. Puede que sí tenga a un hermoso y maravilloso niño Índigo en casa. Los niños Índigos, también son conocidos como: Niños azules, Rompedores de Sistemas o Niños Rebeldes. El término surgió a mediados de los años 70’s y existen varias teorías sobre la existencia de estos niños. Algunas de sus características o atributos que posen son: una gran sensibilidad, son niños muy espirituales, tienen dificultad con la autoridad, son intuitivos, son muy pero muy inteligentes, tienen un corazón lleno de amor para todo el mundo, tienen un detector de mentiras en sus cabecitas, requieren del pensamiento creativo, actúan y miran como pequeños sabios dentro de un cuerpo chiquito, se frustran con facilidad, son rebeldes, tienen energía en exceso, siempre tiene otra forma de hacer las cosas (a su propia manera), se distraen fácilmente, suelen ser alérgicos a muchos componentes (como el colorante), son seres compasivos con otros niños, animales y la naturaleza. Estos niños tan especiales vienen al mundo con una misión clara (que muchas veces ellos mismos recuerdan) de ayudarnos a mejorar, conectarnos y recordar que somos seres con esencia divina y a deshacernos de viejos modelos sociales, entre otras cosas. Las investigaciones en el tema y libros publicados señalan que existen 3 clases de niños índigos: el humanistas (se manejan con grupos, sociables y distraídos), el conceptual (controladores y se interesan en proyectos individuales), el artista (sensibles, creativos, pequeños e inventores), y el interdimensional (más altos, muy espirituales y suelen decir: Yo ya lo sé). Algunas de las cosas que debemos aprender y recordar para no perdernos el brillo de estos niños son: tratarlos con respeto, honrar su existencia en la familia, ayudarlos a crear soluciones propias y manejar sus frustraciones, dejarlos elegir, explicarles el por qué con razones lógicas, ser muy honesto, establezca limites claros, mantenga su palabra, aprenda a negociar y muéstrele siempre su amor. En cuanto a la educación, ya sea en la escuela o casa, debemos de estar concientes que estos niños necesitan ser expuestos a sistemas no tradicionales, que les enseñen CÓMO pensar y no decirles QUÉ pensar. Sería muy injusto ignorarlos, sabiendo que muchos animales han evolucionado y mejorado la raza y que la raza humana no hubiera ya evolucionado, con estos nuevos niños. Debemos ser transmisores de sabiduría, guía y comprensión para estos niños tan especiales. De esta manera los niños pueden SER y tendremos NIÑOS INDIGOS FELICES! Teacher Sonima Ferrufino [email protected] - 6664-7298