INTERESES, CRÉDITOS ORDINARIOS DE LIBRE ASIGNACIÓN Concepto Nº 94021718·1. Mayo 10 de 1994. SÍNTESIS: Interés legal comercial. Usura. Interés convencional. [§ 0166} EXTRACTOS.-«( ... ) En primer término debemos precisar que la legislación vigente no ha definido en parte alguna el concepto de "intereses", limitándose a relacionarlo con el concepto de "frutos civiles", tal y como ocurre con el artículo 717 del Código Civil; así las cosas "(...) ha correspondido a la jurisprudencia y la doctrina reunir los elementos dispersos en la legislación civil y comercial para integrar una noción de interés, partiendo del principio que lo concibe como el provecho que se reconoce sobre un capital, o la suma de dinero que produce un capital durante cierto tiempo". (Concepto 90075816-1, dic. 5/90. Superbancaria). Este concepto de "intereses" ha sido materia de diferentes clasificaciones atendiendo su origen, como el bancario corriente, el convencional y el legal; según su oportunidad, como el remuneratorio y el moratorio o según la forma de liquidarse, como el interés simple y el interés compuesto. Una vez hecha esta aclaración procedo a absolver su consulta en el orden planteado: 1. El interés bancario corriente. Es el aplicado por las entidades crediticias en sus operaciones de crédito en una plaza, durante un lapso de tiempo determinado. Corresponde entonces, al interés promedio cobrado como práctica general, uniforme y pública en cuanto al pacto de intereses en el crédito ordinario otorgado por los establecimientos bancarios. De otro lado, el artículo 884 de nuestro ordenamiento comercial, realiza la determinación legal del interés comercial, en aquellos eventos en los cuales no hubiere sido pactado con anterioridad por las partes, fijando tales montos con base en el interés bancario corriente. Así las cosas, el interés legal comercial, es el bancario corriente, certificado por la Superintendencia Bancaria, para un período determinado, y se aplica "(...) cuando en los negocios comerciales hayan de pagarse intereses sin que esté especificada la cuota o tasa; también cuando se presuman intereses, como en el caso del mutuo comercial (C.Co., art. 1163) o en el de suministros o ventas al fiado (C.Co., art. 885); finalmente en los casos de mora de obligaciones comerciales pues por analogía con la materia civil, en la mora comercial el acreedor puede cobrar a la más alta tasa entre la convencional del plazo, si la hubo. la corriente en los casos en que esté autorizada y la legal, que será comercial dada la materia". (Jorge Cubides Camacho, Revista Universitas, núm. 57, dic.179, págs. 115 y 116). 2. Créditos ordinarios de libre asignación. Es el que pueden cobrar los establecimientos de crédito, en sus operaciones activas ordinarias, a plazo no mayor de un año, esto es en operaciones que no son redescontables. A su vez, el artículo 235 del Código Penal recoge este concepto con el objeto de tipificar el delito de usura a partir del monto del interés certificado por la Superintendencia Bancaria para los créditos bancarios de libre asignación, determinando que: "El que reciba o cobre, directa o indirectamente, de una o varias personas en el término de un (1) año, a cambio de préstamo de dinero o por concepto de venta de bienes o servicios a plazo, utilidad o ventaja que exceda en la mitad del interés que para el período correspondiente estén cobrando los bancos por los créditos de libre asignación, según certificación de la Superintendencia Bancaria, (...)”. En este orden de ideas, cuando el sujeto activo de un crédito, recibe por concepto de intereses una tasa que supere la mitad del interés que cobran los bancos para los créditos de libre asignación, esta extralimitación ingresa dentro de la órbita del derecho penal, toda vez que se encuadra dentro del tipo previsto para el delito de usura. Así las cosas, para los efectos del artículo 235 del Código Penal, el elemento integrador dentro del tipo penal denominado usura es el interés que "(...) estén cobrando los bancos por los créditos de libre asignación (...)". 3. Interés corriente. En el ordenamiento jurídico colombiano, interés corriente es el usual en un mercado y en un momento determinado; en materia civil sólo puede hacerse uso de ellos cuando la ley expresamente así lo autoriza. El término "(...) al tiempo de la convención", debe ser entendido en su sentido natural y obvio, cual es sencillamente, "el momento de realizar el pacto o contrato" o "la fecha del acuerdo". Ahora bien, al analizar los conceptos de "interés corriente" y "al tiempo de la convención" dentro del contexto del artículo 2231 del Código Civil, encontramos que el interés convencional, es decir el pactado por las partes para un negocio en particular, no podrá exceder en una mitad el interés usual en el mercado (interés corriente), para la época en que éste se celebre (al tiempo de la convención), so pena de ser reducido por el juez, al valor del interés corriente, si así lo solicitare el deudor».