¿Cuál es el secreto de la larga vida de los centenarios? Las personas centenarias han llegado a esta edad tan avanzada por unas causas y condicionamientos que han sido bien estudiados por los gerontólogos y sociólogos. Aunque una persona puede llegar a una edad muy avanzada por su propio modo de vivir y a través de sus propias circunstancias existen unas características generales bastante coincidentes en todas ellas que conviene estudiar en este artículo. Así, por lo general, este tipo de personas se caracterizan por: - No han fumado, han fumado poco ó esporádicamente - Peso constante durante toda la vida (me refiero un peso óptimo o adecuado) - Físicamente activas (desarrollan labores agrícolas, ganaderas, pastoreo, caza, pesca, artesanales, etcétera) - Fuerte sentido del propósito en sus vidas (sentido o misión “quién no tiene un sentido para vivir es que tiene alguna razón para morir “ ).A este respecto se recuerda también el pensamiento de Buettner “las personas que viven mucho tiempo tienen siempre una razón para levantarse de la cama” - Sentido de la independencia. Suelen saber lo que quieren y tratan de conseguirlo, muchas veces con independencia del criterio de los demás - Confianza en sí mismas - No tienen miedo al qué dirán - Actitud positiva y optimista ante la vida y ante el futuro (retienen sobre todo los recuerdos agradables) - Buen humor - Comportamiento generoso o altruista con los demás - Responden creativamente y positivamente ante el cambio - Tienen deseos de seguir viviendo (“tienen la sensación de que les queda algo por hacer o cumplir “ ). Esto se da sobre todo en personas creativas como filósofos, escritores, poetas, pintores, músicos, escultores, artistas, artesanos, etcétera Por otra parte, resulta interesante conocer los factores que favorecen o propician una longevidad prolongada y que han sido estudiados por los gerontólogos: - Influencias hereditarias o genéticas. Se conoce el dicho “de padres longevos hijos longevos “. Aunque encierra una cierta verdad este argumento existe un debate en gerontología sobre qué es más importante en el proceso del envejecimiento si la herencia, la conducta saludable o la influencia del medio ambiente. - Factores dietéticos y nutricionales. Las personas longevas suelen seguir una alimentación sencilla principalmente a base de alimentos naturales sin refinar (algunos crudos), abundante agua, fibra, frutas, verduras, cereales integrales, frutos secos, leches fermentadas, semillas, especias y condimentos saludables, etcétera. Todo ello con moderación. En cuanto a la moderación, precisamente uno de los factores, mejor evidenciados por la gerontología actual y que más contribuye en la prolongación de la vida es la restricción calórica. No obstante, en lo referente a la nutrición favorecedora de la longevidad o por la que se llega a centenario no existe una dieta única o modélica para conseguir tal fin, sino más bien diferentes tipos de dietas en lugares diversos del mundo favoreciendo todas ellas, de algún modo, la prolongación de la vida. Así, por ejemplo: abundan los centenarios en la isla de de Creta (Grecia) y en la isla de Cerdeña (Italia) posiblemente por efecto de la dieta mediterránea (a base de frutas, legumbres, 1 ajo, cebolla, aceite de oliva, un poco de vino tinto, etcétera) y también en una isla japonesa llamada Okinawa, donde se consume mucho arroz, soja, verduras, pescado, algas, hierbas, té verde, etcétera. - Consumo de cantidades moderadas de alcohol, aunque muchas de ellas son abstemias - Actividad física durante toda la vida (caminar, labores agrícolas, hortícolas, ganaderas, pastoreo, artesanales, bailes populares, actividades lúdicas y deportivas que requieren movimiento...) - Seguimiento fluido de los ritmos biológicos (sueño- vigilia, trabajo- descanso, tensiónrelajación..) - Prolongación hasta edades avanzadas de una actividad sexual sana - Influencias favorables del medio ambiente, entendiendo el disfrutar de un entorno físico o hábitat natural saludable libre de contaminación atmosférica o acústica. También se contempla en este apartado la ausencia de iones desfavorables y de ondas electromagnéticas perjudiciales y la riqueza en minerales del agua y de los suelos - Factores psicológicos y sociales favorables, incluyendo la implicación productiva continua en los asuntos familiares y comunitarios. - Influencia de un entorno cultural y político favorable al envejecimiento sano y positivo que incluya el desarrollo óptimo de la persona - Una visión trascendente y espiritual relajada sobre el sentido de la vida En el libro sobre la vejez de Simone Beauvoir se expone: “ que las personas centenarias trazan cuidadosos planes para el futuro, están interesadas en los asuntos públicos y son capaces de un entusiasmo juvenil. Además tienen sus reglas irónicas de actuación y un agudo sentido del humor. Generalmente gozan de buena salud mental, son optimistas y no presentan signos de temor a la muerte “. Aunque los centenarios o supercentenarios ( más de 110 años de edad ) mueren de las mismas enfermedades que en otras edades más tempranas, dichas enfermedades se presentan más tarde en las personas centenarias, posiblemente por seguir un estilo de vida más saludable , disfrutar de un entorno más favorable y poseer una buena constitución. Todo esto no contradice la afirmación que hoy en día es posible morir de centenario en cualquier país desarrollado del mundo por las buenas condiciones higiénicas y sanitarias existentes en los mismos. Es más, la esperanza de vida va aumentando progresivamente en dichos países y de hecho está aumentando también el número de centenarios pero será muy difícil en el futuro traspasar el límite máximo biológico de la vida humana que está en unos 120 años. Por otra parte, siempre nos debemos acordar del principio, que además de darle muchos años a la vida, hay que darle sobre todo mucha vida (calidad de vida) y salud a los años. Y todo ello solo se consigue si se sigue un estilo de vida saludable y se cuida permanentemente la salud Las personas centenarias están repartidas prácticamente por todo el mundo, a saber por el sur de China, Bulgaria, España, Italia, Cuba, Escandinavia, Estados Unidos, etcétera. Pero llama la atención su concentración en ciertas zonas relativamente al abrigo de la civilización como en el valle de Vilcabamba( “valle de los centenarios”) en los Alpes ecuatorianos, región del Cáucaso ( que abarca Georgia, Armenia y Azerbaiján ), en el Himalaya occidental ( Valle del Hunza ) al norte de Pakistán y en la isla japonesa de Okinawa, ya mencionada. También resulta interesante señalar aquí que ciertos colectivos que llevan una vida sana, austera y regular como ciertos monjes que se dedican a la agricultura o los integrantes de algunas confesiones religiosas como los Adventistas del séptimo día de California (que son vegetarianos y andan mucho) también alcanzan una excelente longevidad. 2 Aunque algunos gerontólogos famosos se han desplazado a estos lugares para estudiar “in situ” la vida y costumbres de los centenarios aún no se han puesto de acuerdo sobre cuales son realmente los factores principales o prioritarios que propician esta longevidad prolongada. Por otra parte, a veces también resulta muy difícil probar las fechas de nacimiento en algunas de estas regiones pues muchos centenarios han nacido en lugares donde no hay un registro civil oficialmente establecido y por otra parte, ciertos ancianos de edades superavanzadas (más de 100 años) son muy valorados por sus gentes y la comunidad ya que esas edades tan avanzadas representan un signo de distinción y un privilegio extraordinario. Ellos mismos se dan mucho a valer y exageran en algunos casos su edad o tienen fallos de memoria. Finalmente, a veces también hay intereses turísticos y políticos involucrados. ¿Y qué nos enseña todo esto? Que podemos aprender de la larga vida de los centenarios, para que nos sirvan de modelo de imitación de muchas cosas buenas y positivas, para indicarnos también que la vida merece la pena vivirse plenamente hasta el fin de sus días aunque eso sí como he anotado, al menos, con una calidad de vida satisfactoria. Como hemos podido observar muchas de estas personas centenarias se caracterizan por seguir un estilo de vida sano y sencillo en un entorno natural favorable, que está estimulado en todo momento con un propósito de mantenerse activas y de desarrollar actividades y prestar servicios para el bien de la familia y la comunidad Dr. Víctor López García, médico gerontólogo Mayo, 2010 3