16/04/2003 Entra en vigor en EEUU la ley de confidencialidad La norma americana sobre confidencialidad de historias clínicas ha entrado en vigor, después de seis años de comenzar su tramitación y dos de su aprobación. La ley, que prohíbe dar información clínica a terceros con fines comerciales o laborales, tiene ámbito estatal y es aplicable a aseguradoras, clínicas, hospitales y farmacias. La primera ley federal que garantiza en Estados Unidos la confidencialidad de datos clínicos ha entrado en vigor y es aplicable a las compañías de seguros, los hospitales, clínicas, médicos y las empresas farmacéuticas. El proyecto nació en la época del presidente Clinton, en 1997, y fue Donna E. Shalala, la titular del departamento de Salud en la anterior legislatura, su principal impulsora. Desde ahora, existe un respaldo legal al derecho de los pacientes para acceder a su historia clínica y requerir la corrección pertinente cuando alguien ha recogido algún dato de forma incorrecta. La norma también prohíbe que los hospitales y médicos proporcionen información a terceros con fines publicitarios o a empresarios con fines laborales, excepto si tienen la autorización específica del paciente. La ley permite la revelación incidental de información, pero ello exigirá establecer medidas adecuadas de seguridad que protejan la información privada de los pacientes. Esta previsión legal significa que, por ejemplo, en las áreas de recepción podrán utilizarse hojas de registro pero los pacientes no podrán ser interrogados acerca de sus circunstancias concretas, ya que otros pacientes pueden ver los formularios. No a la vista Los tablones de anuncios de las salas de urgencias, donde aparecen los nombres y problemas médicos de los pacientes, deberán ser trasladados a una ubicación alejada de la vista del público. Según la nueva norma, el software deberá permitir al médico identificar al paciente por su nombre completo o sólo con iniciales en el caso de que otras personas puedan echar una mirada a la pantalla. Por otra parte, los centros deben dar la opción al paciente para decidir si quiere o no que permanezcan sus datos en el listín telefónico de cualquier hospital. En caso afirmativo, sólo podrá darse información limitada, siempre que el comunicante pregunte sólo por el nombre. DM informó en su día que esta reforma legal coincide con las propuestas que realizaron expertos españoles en Derecho Sanitario para regular la confidencialidad de datos clínicos, algo que ya se ha hecho con la Ley de Autonomía del Paciente. Información facilitada por HELGUERO ASOCIADOS C/ Magallanes, 24 – 1º C 28015 Madrid Tfno. 902.440.003 www.protegemostusdatos.com 1