Propuesta de Monitoreo de Organismos Genéticamente Modificados en Embarques de Importación Un organismo genéticamente modificado (OGM), se caracteriza por contener una fracción del ácido desoxirribonucleico (ADN) de otro organismo en su propio ADN. Es decir, el OGM presenta una nueva pieza de ADN, lo que lo hace diferente de su contraparte convencional, confiriéndole una nueva característica. La capacidad de manipular el material genético de los seres vivos y de transferirlo de una especie a otra, se da gracias a la ingeniería genética que no es más que un conjunto de técnicas modernas, que permiten como ya se dijo, la manipulación específica de información genética de los seres vivos. La comercialización de dichos productos, está sujeta a la evaluación que se haga de la información técnica de los resultados de estudios que sustenten su inocuidad y estabilidad. Los responsables del desarrollo de los productos deben presentar ante la Secretaría de Salud. Desde el año 1995 la Secretaría de Salud ha evaluado OGMs, habiendo aprobado hasta el momento 49 eventos de transformación que incluyen productos como: jitomate, alfalfa, papa, algodón, canola, soya, remolacha y maíz. Hasta el momento no se han detectado efectos adversos de los OGMs a la salud de los consumidores, hecho que ha determinado que no se exija un etiquetado diferencial para los alimentos elaborados con este tipo productos. No obstante, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), considera necesario establecer un sistema de monitoreo de OGMs en los productos destinados al uso o consumo humano, que busque alcanzar los siguientes objetivos: Determinar la proporción de embarques que ingresan al país con OGMs destinados al uso o consumo humano Determinar los eventos específicos contenidos en dichos embarques Detectar la presencia de OGMs no autorizados por esta Comisión Federal para proteger la salud pública, dando cumplimiento a lo establecido en la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados Dentro de los eventos liberados para su comercialización por parte de la COFEPRIS figuran: algodón, canola, papa, jitomate, remolacha, alfalfa, arroz, soya y maíz. Los OGMs de algodón y canola se emplean básicamente para la obtención de aceites, productos que por su propio proceso no presentan restos de ADN y sólo trazas de proteínas. Debido a que las proteínas transgénicas se encuentran presentes en muy bajas concentraciones; estos productos no son elegibles para ser incluidos en el muestreo. Los eventos de jitomate y papa aprobados en los años 1995, 1996 y 1998, no se encuentran actualmente en el mercado por no haber presentado buena aceptación ni desempeño agronómico. La alfalfa y la remolacha no son productos que se empleen como base para un gran número de alimentos de consumo humano, siendo sus usos casi exclusivamente para alimentación animal. Por lo anterior, los productos elegidos para el muestreo son los siguientes: Maíz (base de la alimentación en México y cultivo de alta sensibilidad social). Como etapa inicial del programa de monitoreo y a modo de programa piloto, se propone enfocarse exclusivamente a este cultivo Arroz (existen muchos desarrollos a nivel mundial aunque ninguno está disponible de manera comercial; pese a lo cual se han presentado casos de contaminación de cultivos comerciales) Soya (extractos proteicos de esta oleaginosa son empleados extensamente en leches de soya, sopas instantáneas, etc.) Trigo (cereal que se emplea como base de numerosos productos alimentarios, que si bien no está liberado para su comercialización en México, existen desarrollos aprobados en otros países que proveen trigo a México) La toma y envío de la muestra estaría coordinada por la Comisión de Operación Sanitaria y la realizaría la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación; debido a que es esta dependencia cuenta con personal en frontera para realizar esta actividad. El procedimiento para la toma de muestra y remisión a laboratorio, se desarrollaría de acuerdo al “Manual de Procedimientos para el Muestreo y Tratamiento de Granos” en su Parte I “Muestreo de Granos”. La cantidad de muestras a tomar para cada uno de los productos anteriormente señalados y de los puntos de ingreso a nuestro país, serían fijadas por la COFEPRIS de manera anual con base en la información estadística sobre importaciones de estos productos. Para tal fin, se consideraría el número de muestras estadísticamente apropiadas siguiendo un muestreo aleatorio estratificado. Hasta que se cuente con información estadística sobre la prevalencia de eventos transgénicos en embarques de importación, se considerará una prevalencia del 50%, un límite de error del 1.5% y un desvío estándar de 10. Las muestras serían remitidas al Laboratorio Estatal de Salud Pública del Estado de Veracruz para su análisis cuantitativo evento específico. La información resultante se remitiría a la COFEPRIS para su análisis y toma de decisiones. Es conveniente aclarar que la Secretaría de Salud participa en el proyecto “Fortalecimiento de Capacidades Institucionales y Técnicas en la Toma de Decisiones en Materia de Bioseguridad”, el cual está financiado con recursos fiscales del Gobierno de México a través de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad y Organismos Genéticamente Modificados (CIBIOGEM), bajo la asistencia administrativa del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). El mencionado proyecto tiene como objetivo instrumentar la vigilancia sanitaria de los OGMs, establecida en la Ley de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados y dar continuidad al fortalecimiento de las capacidades nacionales para estar en posibilidad de cumplir con las obligaciones firmadas y ratificadas en el Protocolo de Cartagena en materia de Bioseguridad. En el marco del mencionado proyecto, la Secretaría de Salud participa con el tema: “Capacidades institucionales y de infraestructura efectuada a través del equipamiento y certificación de laboratorios”, y fundamentada en dos actividades: Desarrollo de metodologías que permitan elaborar un sistema de monitoreo y vigilancia, respecto de la presencia de secuencias transgénicas en granos y productos de maíz en México; posteriormente transferir los métodos más apropiados a los laboratorios nacionales de salud. Esta actividad se encuentra en proceso, siendo desarrollada por el Programa Universitario de Alimentos de la Universidad Nacional Autónoma de México. Equipamiento del Laboratorio Estatal de Salud Pública de Veracruz, para la identificación y determinación de secuencias transgénicas en grano destinado al uso o consumo humano. Sobre esta actividad, ya se ha realizado la cotización del equipamiento, materiales, insumos y reactivos necesarios, donde ya se cuentan con metodologías de extracción de ADN, secuencias específicas para el diseño de oligonucleótidos de cada evento, así como de las técnicas para la detección y cuantificación de OGMs (PCR en punto final o en tiempo real RTQ-PCR y de la selección de técnicas inmunológicas para la detección de proteínas transgénicas disponibles comercialmente ELISA y tiras reactivas). Para estas dos actividades se presupuestó un total de U$S 161,937.00 Esquema General del Monitoreo de Organismos Genéticamente Modificados destinados al uso o consumo humano procedente de la Importación COFEPRIS define al principio del año: Número de muestras a tomar a nivel nacional Número de muestras por punto de ingreso al país Embarque al cual se le tomará la muestra SAGARPA recibe la información sobre las muestras a tomar y las envía a cada punto de ingreso al país para su colecta de acuerdo al Manual de Procedimientos para el muestreo y tratamiento de granos. SAGARPA remite al Laboratorio Estatal de Salud Pública de Veracruz las muestras para su análisis El Laboratorio Estatal de Salud Pública de Veracruz realiza los análisis correspondientes (cuantitativos y evento específicos) y remite los resultados a la COFEPRIS para su análisis y toma de decisiones. El Laboratorio Estatal de Salud Pública de Veracruz, turnara copia de los resultados de los análisis correspondientes remitidos por las Oficinas de Inspección de Sanidad Agropecuaria.