La institucion

Anuncio
1
La Institución
En el lenguaje corriente la institución designa un organismo que tiene una estructura estable, que
obedece a ciertas reglas de funcionamiento y persigue ciertas funciones sociales (se habla de
instituciones políticas, económicas o escolares). En un sentido más amplio, las ciencias humanas ven en
la institución una forma fundamental de organización social, definida como un conjunto estructurado
de valores, de normas de roles, de formas de conducta y de relación (la familia, la educación, la
religión, las formas de alimentación son, por tanto instituciones). En este sentido, cada cultura aparece
como un sistema más o menos coherente de instituciones que organizan y regulan diferentes aspectos
de la vida social. Es decir, que no existe relación social que no se inscriba en un cierto contexto
institucional: este contexto no es solamente en un marco donde la interacción tiene lugar; es
esencialmente una matriz que aporta a la relación un código, reprsentaciones, normas de roles y
rituales que permiten la relación y le dan sus características significativas.
Por eso un análisis de la interacción social quedaría muy parcial si se limitase al nivel de la
comunicación inmediata, si no se considerara como un fenómeno institucional.
Si se trata, pues , de estudiar la manera en la que la institución influye en las relaciones
interpersonales, destacaremos como ejemplo, la organización, que constituye a la vez una forma
estructurada y estable de institución y el marco en el que se desarrollan una gran parte de las
interacciones sociales cotidianas (profesionales, educativas, asociativas, políticas, etc.)
Se acuerda generalmente considerar la organización como un sistema que hace interactuar diferentes
elementos (individuos, grupos, servicios, tecnologías…) y que realiza distintas funciones
(informativas, productoras, administrativas, técnicas, comerciales, etc.) obedeciendo a ciertas reglas. Es
un sistema abierto en la medida en que está en relación permanente de intercambio con su entorno.
A partir de esta amplia definición, los intereses y los puntos de vista divergen. La aproximación de
inspiración marxista ha visto en la organización un sistema de prohibiciones, lugar de actualización de
relaciones de producción y de relaciones sociales de denominación. Otras se ven obligadas a mostrar la
estrecha interdependencia entre los componentes sociales y los componentes técnicos de la
organización, cuya eficiencia depende de la sinergia entre estos dos polos (es la visión de una
organización como sistema sociotécnico). Otras, en una perspectiva sistémica, se refieren al modelo
cibernético para analizar el funcionamiento de la organización en términos de información,
comunicación, interrelaciones, retroacciones. Otras, a partir de un análisis de tipo estratégico, se
centran en el actor, estudiando sus modos de comportamiento, sus márgenes de iniciativa y de
libertad en el interior de las limitaciones institucionales.
A la luz de estas diferentes aproximaciones se estudiarán las modalidades según las cuales el
contexto organizacional maca las relaciones sociales que instaura, y esto desde tres ángulos:
- El de la comunicación, de su forma, de su contenido y de sus canales.
El de los interactuantes, de sus roles y de sus status.
- El de las estrategias y relaciones de poder que laten en las interacciones.
1. LA COMUNICACIÓN EN LA ORGANIZACIÓN
La organización se refiere a su vez a la forma y al contenido de los mensajes y a la forma en que
circulan.
1. La forma de las comunicaciones en la organización comportan dos caracteres específicos:
Por un lado, la mayor parte de los mensajes concernientes al servicio están codificados por los usos,
se trate de una entrevista, una nota del servicio, una convocatoria, una solicitud de información…: la
utilización del tono, estilo, vocabulario, usos de periodicidad, etc…
Por otra parte, las características de los intercambios dependen en gran medida del status de los
interactuantes (la organización es un universo jerarquizado en el que cada individuo está en gran parte
representado por su status). La comunicación jerárquica es fundamentalmente asimétrica: un jefe
puede llamar a su secretaria por su nombre, lo contrario es raro. Además, el aspecto limitado de la
comunicación entre superior y subordinado puede ser voluntario por las dos partes: el primero no
quiere arriesgarse a perder su prestigio y el segundo a ser desaprobado.
De hecho, las representaciones que se hacen el uno del otro, desempeñan un papel importante en
la naturaleza de su comunicación (si un superior no estuviera considerado como un juez, si un
subordinado no se viera como un ser falsamente sumiso arriesgándose a obtener provecho de toda
debilidad o buscando la admiración y adhesión, los riesgos serían menores).
2. El contenido de las comunicaciones está influenciado por la institución en la medida en que ella
mediatiza las relaciones entre los individuos (y no las afinidades electivas). Se habla de forma natural
de la tarea, de otros miembros de la organización (los colegas, superiores jerárquicos, subordinados y
clientes o usuarios…) de actividades ligadas a los roles y funciones. No obstante, la proximidad casi
diaria de los colegas puede hacer que se tenga con ello conversaciones de orden más o menos amistoso
que podrían ser mantenidas fuera (actividades extraprofesionales, noticias familiares, problemas
personales, hobbys…). Sin embargo, incluso en este caso, su ritmo se rompe por la organización en la
medida en que el tiempo de ocio es o bien un tiempo previsto como tal ( la pausa de la comida, el
recreo), o bien un tiempo< robado>y que es por tanto susceptible de ser constantemente interrumpido
por la tarea o por la autoridad( es la situación de los estudiantes que intercambian algunas palabras
rápidas mientras el profesor escribe en la pizarra y que interrumpen inocentemente cuando se gira; o
las conversaciones que mantienen las mecanógrafas cuando el jefe se ha ido…)
2
3. La manera en que circulan los mensajes está inducida por las redes de comunicación.
Se distingue generalmente, desde los estudios de Elton Mayo (1933), la existencia de dos tipos de
redes: una estructura <formal>, querida por la organización, en función de los objetivos, y una
estructura < informal> no prevista por ella y que se creó por los grados de afinidad, encuentros ,
negociaciones. La primera puede deducirse del organigrama; la segunda no puede aprehenderse más
que por una observación fina y por un largo seguimiento de las comunicaciones efectivas.
A nivel formal, la circulación de los mensajes está dirigida por los < pasos obligados> y los <pasos
prohibidos>(o barreras). Los primeros pueden tener como objetivo facilitar la circulación de los
mensajes evitando las dificultades y las paradas inútiles. El concepto de < segregación adaptativa> de
E. Jacques (1972) muestra que a veces se hace seguir a los individuos y a las informaciones un camino
complejo con el fin de una mayor eficacia: si está prohibido al público la oficina del jefe de servicio es
porque éste perderá tiempo; ya que el jefe no tiene generalmente conocimiento de los informes y sería
necesario reenviar a los clientes al servicio competente. Lo que es aparentemente una barrera se recoge,
de hecho, en el análisis, como un paso.
Pero las barreras reales existen igualmente bajo la acción de una < segregación inadaptada>
(siempre según E. Jacques) que corresponde a una actitud defensiva de los individuos o grupos que
los lleva a aislarse de otros para protegerse. Así es, como los directores de un establecimiento o servicio
hacen preceder, a menudo, el acceso a su despacho, por los del secretariado, a fin de no estar nunca en
contacto inmediato con los solicitantes, los demandantes, los visitantes imprevistos.
A nivel informal, las informaciones circulan más libremente sin que la organización pueda tener
sobre ellas un control real y según las redes no oficiales: es lo que a veces se llama <radio macuto>.Esta
red paralela no es, sin embargo, totalmente independiente de la estructura formal en la medida en que
representa, a menudo, un desvío, o se añade para paliar las carencias; así, en ciertas organizaciones
burocráticas, el peso de la jerarquía y la estrecha y estricta definición de funciones pueden llevar a
uniforme a estancarse durante meses, mientras que un simple intercambio telefónico entre dos
secretarias influidas por un cliente impaciente puede resolver la gestión en algunos días.
Esta breve constatación muestra que el contexto institucional nunca es un< telón de fondo> neutro en
un proceso de comunicación sino que forma parte intrínsecamente de él.
2. STATUS Y ROLES
La organización estructura las posiciones de los individuos en relación con los otros, posiciones
definidas en términos de status (que indica el lugar del individuo en una estructura jerárquica) y de
roles.
El rol, expresión dinámica del status, aparece como un conjunto organizado de conductas; pero no
tiene sentido, como señala J. Maisonneuve (1973), más que si se actualiza en una relación concreta; ya
que el ejercicio del rol no es solitario (no se es padre más que en la relación que se mantiene con el hijo
o profesor en la que se mantiene con el estudiante). El rol se inscribe, pues, en una relación y es este
aspecto el que ha sido señalado por diferentes autores. Así, para G. Mead (1963), el rol es la actitud que
adopta un individuo en una relación interpersonal, actitud que es a la vez una respuesta a la actitud de
los otros y un estímulo que busca influenciarlo; se trata de un proceso intersubjetivo ya que es el
significado atribuido al comportamiento, la interpretación que el sujeto hace, que , más que el
comportamiento mismo , funciona como estímulo.Parsons (19529 no lo considera como una relación
entre yo y los demás sino entre dos actores que se sitúan idénticamente como actores; el rol se
convierte en lo que define la participación de un actor, en un proceso de interacciones posible
igualmente ver a las organizaciones como sistemas de roles en interacción y considerar las relaciones
institucionales en términos de roles, de expectativas de roles , y de conflicto de roles.
La Interacción Social. Cultura, Instituciones y Comunicación. Edmond Marc-Dominique Picard.
Editorial Paidós. 1992. Capítulo 2. La Institución.
Descargar