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Los que Vieron y Creyeron - Herbert Edgar Douglass

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Relatos de personas que fueron testigos
del don profético de Elena de White.
Compilado y redactado por
Herbert Edgar Douglass
LOS
QUE VIERON ...
Y CREYERON
V
ieron a Elena de White.
La escucharon hablar.
¿Por qué son importantes sus historias para nosotros, hoy?
* Un pastor con dos esposas.
* Una mujer evangelista con un secreto oscuro en su vida.
* Un hombre cuya mera presencia impedía que Elena de White hablara.
Estos son solamente algunos de los 24 relatos fascinantes que encontrarás
en este libro. Los adventistas que escucharon predicar a Elena de White o la
vieron en visión eran hombres y mujeres muy parecidos a nosotros. Al igual
que nos sucede ahora, tenían interrogantes, problemas y ansiedades al tratar de vivir su fe mientras llevaban a cabo sus actividades diarias de trabajo,
familia e iglesia. Pero, a diferencia de nosotros, muchos de ellos tuvieron la
oportunidad de ver personalmente el don profético en acción.
Cada uno de los individuos involucrados en estas historias fue afectado
directamente por Elena de White y sus visiones. Estuvieron allí, y vieron por sí
mismos el poder de Dios que acompañó la labor de Elena de White mientras lidiaba con situaciones desconcertantes. Algunos continuaron resistiéndose; pero,
para muchos, el resultado fue una confirmación poderosa de su fe en la vida y el
ministerio de la mensajera del Señor. En cada caso, Elena de White, la constante
ganadora de almas, apeló a las personas a caminar más cerca del Señor.
Atesorarás este libro como un recurso, un lugar donde encontrar algunas
de las historias más fascinantes sobre Elena de White. Pero también descubrirás que es un libro de "buena lectura". Al leerlo, te convencerás de que 2
Crónicas 20 :20 es tan aplicable hoy como en cualquier otro momento de la
historia: "Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados".
El Dr. Herbert E. Douglass ha escrito más de 16 libros. Ha disfrutado
de una trayectoria distinguida como profesor universitario en el Pacific
Union College, como vicerrector académico y rector del Atlantic Union
College, como editor asociado de la Adventist Review [Revista Adventista
en inglés], como vicepresidente de la Pacific Press Publishing Association
y presidente del Instituto Weimar. Actualmente, ya jubilado, vive con su
esposa, Norma, en Lincoln Hills, California, EE.UU.
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Los que vieron ...
y creyeron
Relatos de personas que fueron testigos
del don profético de Elena de White.
Compilado y redactado por
Herbert E. Douglass
DIGITALIZADO POR
IMERMERA
ASOCIACIÓN CASA EDITORA SUDAMERICANA
Av. San Martín 4555, Bl604CDG Florida Oeste
Buenos Aires, Rep. Argentina
Título del original: They Were There, Pacific Press Publishing Association, N ampa, ID, E.U.A., 2005.
Título: Los que vieron ... y creyeron
Autor: Herbert Edgar Douglass
Dirección: Walter E. Steger
Traducción: Claudia Blath
Diseño del interior y de la tapa: Nelson Espinoza
Ilustración de la tapa: Shutterstock
IMPRESO EN LA ARGENTINA
Printed in Argentina
Primera edición
MMXI-4M
Es propiedad. Copyright de la edición en inglés © 2005 Pacific Press® Publishing
Association, Nampa, Idaho, USA. Todos los derechos reservados.
Esta edición en castellano se publica con permiso del dueño del Copyright.@
2011 Asociación Casa Editora Sudamericana
Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723.
ISBN 978-987-567-851-4
Douglass, Herbert Edgar
Los que vieron ... y creyeron/ Herbert Edgar D'ouglass f Dirigido por Walter
E. Steger. - 1ª ed. -Florida :Asociación Casa Editora Sudamericana,
20II.
128 p. ; 21 x 14 cm.
Traducido por: Claudia Blath
ISBN 978-987-567-851-4
l. Profecías. I. Steger, Walter E., dir. II. Claudia Blath, trad. III. Título.
CDD 236
Se terminó de imprimir el 02 de noviembre de 2011 en talleres propios (Av. San
Martín 4555, Bl604CDG Florida Oeste, Buenos Aires).
Prohibida la reproducción total o parcial de esta publicación (texto, imágenes y
diseño), su manipulación informática y transmisión ya sea electrónica, mecánica, por
fotocopia u otros medios, sin permiso previo del editor.
-104755-
Dedicatoria
A diez preciosos nietos, candidatos para la vida eterna:
Vanessa, Vivyan, Emily, Cady, Clijf, Candi,
Britney, Ryan, Randy, Kelli
IMERMERA
Índice
Prefacio ............................................................................................................................ 5
Introducción .................................................................................................................... 7
Primera parte
Personas que nunca más fueron las mismas
1. Huevo en jugo de uva: cómo se salvó el Dr. Daniel Kress ................................. 12
2. La visión que dio inicio a un movimiento: el camino angosto ......................... 14
3. La visión más larga y esa Biblia pesada: Randolph, Massachusetts ................... 25
4. La lección de astronomía: Bates se convenció .................................................... 29
5. "iEsperen un mes!": Hiram Patch ........................................................................ 32
6. "iSe entregó otro rebelde!": Stephen Smith ........................................................ 34
7. "iDios conoce mi corazón!": la evangelista mentirosa ...................................... 37
8. La incursión de Waukon: la recuperación de dos predicadores cansados ..... 41
9. Joven predicador finalmente satisfecho: Daniel Bourdeaus ........................... 47
10. Tierna carta a un joven con adicciones: Victory Jones .................................... 50
11. Ningún derecho a estar en el púlpito: el predicador bígamo ........................... 52
12. Una carta justo a tiempo: cómo se salvó el pastor Cornell ............................... 54
13. El barco fantasma: Dudley Canright ................................................................. 58
14. Señales masónicas secretas: N. D. Faulkhead.................................................... 62
15. Vaya, ¿en la plataforma conmigo?: Nathaniel Davis ........................................ 68
Segunda parte
Intervenciones que mantuvieron el rumbo de la iglesia
16. Votación en sábado: Des Moines, Iowa ................................................................ 76
J7. "iAnoche! iAnoche!": la visión de Salamanca y Battle Creek ......................... 78
18. Una rival potencial: la visión de Salamanca y Battle Creek ............................ 83
19. Enfrentar el iceberg: la crisis del panteísmo, 1903...........................................86
20. Sentido común para abrir una escuela:
Elmshaven, 14 de enero de 1904.... :.. ,:,., ......... ,..................................................... 91
21. Dos damas compran un sanatorio: origen del Sanatorio Paradise Valley ... 96
22. ''Actuar de inmediato": el milagro de Loma Linda ..'...................................... lOO
23. "El Señor prohíbe ...": la conservación del Sanatorio Boulder ...................... 114
24. El testimonio más escueto: cómo se salvó el templo de Battle Creek .................. 119
Fuentes ......................................................................................................................... 123
Prefacio
La Biblia está llena de historias maravillosas que describen la relación
de Dios con las personas. A veces él daba consejos mediante sus profetas.
Otras veces daba advertencias. Si las advertencias eran atendidas, como
resultado caían bendiciones; pero si eran ignoradas, se obtenían consecuencias nefastas. Es evidente que nuestro Creador no quiere más que lo
mejor para sus criaturas. Sin embargo, la obstinación humana y la falta
de fe con frecuencia frustran los propósitos de Dios. Afortunadamente,
a lo largo de los siglos hubo gente como Josué, Daniel, Pablo, Noemí,
David y muchos otros que proveyeron pruebas positivas de que seguir la
dirección de Dios siempre es lo mejor.
En 1903, Elena de White instó a que se reimpriman las historias
que narran la conducción de Dios en los primeros días del movimiento
adventista. En las siguientes páginas, el Dr. Herbert E. Douglass hace
exactamente eso: no solo comparte las historias sino también revelaciones
significativas sobre la importancia de los eventos de antaño que narra.
Como hizo Dios en los tiempos bíblicos, así también en los tiempos
modernos envió a una profetisa para guiar y advertir a los que escuchen.
Este libro está lleno de relatos, a veces asombrosos pero otras veces trágicos, de cómo reaccionaron los fundadores de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día a los consejos de Dios dados a través de Elena de White. A
menudo les prestaban atención, y ellos y el movimiento del que eran parte
prosperaban. Lamentablemente, otras veces se negaron a escuchar y a ser
guiados, y los resultados nos advierten que, si ignoramos las instrucciones
de Dios hoy, lo hacemos por cuenta y riesgo propios.
Cada persona o acontecimiento descripto en este libro se vio directamente afectado por una o más visiones de Elena de White. Los nombres de
personajes casi olvidados, como Daniel Kress, Hiram Patch y Nathaniel
Faulkhead, entre otros, cobran vida a medida que sus fascinantes historias
se desarrollan para el lector. En cada caso, Elena de White, una constante
ganadora de almas, es vista en su mejor momento, exhortando a la gente
a cambiar de dirección y así evitar la ruina espiritual. En otras historias
podemos alcanzar a ver de qué modo Dios obra a través de Elena de White
para salvar a la iglesia en su conjunto.
Así como podemos aprender del estudio de las personas y los acontecimientos de los tiempos bíblicos, también podemos aprender del estudio
de las personas y los acontecimientos de la historia del movimiento adventista. Tal como las historias de este libro lo demuestran sobradamente,
6
- Los que vieron ... y creyeron -
la amonestación del rey Josafat que encontramos en 2 Crónicas 20:20 es
tan aplicable hoy como cuando fue pronunciada por primera vez: "Creed
en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis
prosperados".
James R. Nix, director del
Centro de Investigación White
IMERMERA
Introducción
Las 24 historias incluidas en este libro son una muestra de los setenta
años de servicio de Elena de White al mundo. Sin embargo, estas historias
se centran solo en un aspecto de su extenso ministerio: su contribución
directa a hombres y mujeres que tenían ansiedades, dudas y problemas
como los que todos tenemos de tanto en tanto.
Los lectores modernos tienen poco o ningún acceso a estos momentos
especiales que cambiaron vidas para siempre. No obstante, hoy podemos
revivir esos acontecimientos e identificarnos con los protagonistas de
las historias registradas en las páginas siguientes. Aun en el siglo XXI,
podemos identificarnos con sus circunstancias y regocijarnos igual que
ellos cuando de pronto se dieron cuenta de cuánto pensaba Dios en ellos,
tanto como para interesarse en su vida personal, ya sea para consolarlos
o a modo de advertencia.
Los años pasaron, pero no la condición humana: tenemos los mismos sueños, esperanzas y debilidades que los jóvenes y los ancianos que
vuelven a vivir en estas páginas.
Traté de relacionar estas historias con la edad de Elena de White y
sus circunstancias personales para mostrar de qué manera cumplió su
rol como la mensajera del Señor a los veinte años, a los treinta, etc. Muchas de estas historias también se encuentran en mi libro Mensajera del
Señor, pero sin muchos de los detalles fascinantes que he podido incluir
en el presente libro.
Estas historias pueden ser usadas eficazmente en el culto familiar, en
la Escuela Sabática y en sermones. Cada una puede ser fuente de mucha
reflexión al revivir cada circunstancia. La mayoría de estas situaciones
se repiten vez tras vez. Los principios dados en el pasado son tan actuales
como el rocío de esta mañana.
Ninguno de nosotros ha tenido el privilegio de conocer personalmente a esta intrépida dirigente de la iglesia. Nunca hemos escuchado a esta mujer de 1,57 metros de altura hablando en público, donde
podían escucharla veinte mil personas sin la ayuda de un sistema de
amplificación. Solo podemos leer de su devoción hacia sus cuatro hijos
y su amado esposo, y de la devoción que ellos le tenían a ella. Pero estas
historias nos dicen mucho acerca de la mujer que ayudó a formar un
movimiento mundial.
Esperamos que en estas 24 historias podamos revivir algunas de las
contribuciones extraordinarias de Elena de White que han cambiado la
8
- Los que vieron ... y creyeron -
vida de millones de personas en el mundo, que se sienten cercanos a ella
como la mensajera del Señor, en aquel entonces y ahora.
Herbert E. Douglass
Lincoln Hills, EE.UU.
IMERMERA
IMERMERA
Primera Parte
IMERMERA
Personas que nunca más fueron las mismas
IMERMERA
1
Huevo en jugo de uva
Cómo se salvó el Dr. Daniel Kress
En la lejana Australia, el Dr. Daniel H. Kress estaba agonizando, y
apenas tenía cuarenta años.
Después de unirse a la Iglesia Adventista, Kress y su esposa, Lauretta,
hicieron juntos la carrera de Medicina en la Universidad de Míchigan.
Trabajaron durante tres años con el Dr. John Harvey Kellogg en el Sanatorio de Battle Creek antes de recibir un llamado en 1898 para establecer
la obra médica en Inglaterra.
En 1900 fueron enviados a Australia para fomentar la obra médica
allí. Un año después, Kress se estaba muriendo. El problema: Kress defendía fervientemente la dieta vegetariana estricta. Anteriormente, en
Battle Creek, había sido un fiel seguidor del Dr. John Harvey Kellog y sus
colegas. En Inglaterra, y ahora en Australia, Kress enseñaba sistemáticamente que la manteca, la leche y los huevos deberían ser omitidos de
la dieta. Posteriormente escribió: ''Aspiraba a practicar lo que enseñaba.
Se me hacía difícil conseguir alimentos apropiados al viajar de un lugar
a otro y, como resultado, mi alimentación carecía de algunos elementos
esenciales. Mi salud se debilitó casi hasta el punto de morir".
Ahora de regreso en California después de sus nueve años en Australia, Elena de White vio en visión que el Dr. Kress estaba en los umbrales
de la muerte. Con su acostumbrada franqueza, le ordenó que "hiciese
cambios inmediatamente. Incorpore a su dieta algo que ha excluido".
Ella le dijo: "Por el hecho de que hay quienes están muy rezagados,
usted no debe, a fin de servir de ejerp.plo para ellos, ser extremista. [...]
Su devoción a los buenos principios lo induce a someterse a un régimen
que lo hace pasar por una experiencia que contraría la reforma pro salud".
Esta es la prescripción de Elena de White, basada en una visión, para
que Kress recuperara la salud:
- Huevo enjugo de uva -
13
Obtenga huevos de aves sanas. Consúmalos cocinados
o crudos. Mézclelos con el mejor jugo de uva sin.fermentar
que pueda obtener. Esto suplirá lo que es necesario para su
organismo. Ni por un instante piense usted que este proceder no sería correcto...
Apreciamos su experiencia como médico, y sin embargo
digo que la leche y los huevos deben incluirse en su menú.
Luego añadió: "Vendrá el momento cuando no se podrá usar la leche
con tanta abundancia como se la emplea ahora; pero actualmente no es el
momento para suprimirla. Y los huevos contienen propiedades curativas
que contrarrestan venenos".
Lo que Elena no sabía en ese entonces -pero nosotros sí lo sabemos
ahora- es que el Dr. Kress se estaba muriendo de anemia perniciosa, una
enfermedad a menudo fatal. Su dieta, sin una amplia variedad de verduras
y frutas, carecía de ácido fólico y de las vitaminas B6 y B12 •
El Dr. Kress siguió inmediatamente el consejo de Elena de White
de comer huevos y jugo de uva, y en pocas semanas logró una rápida
recuperación. Vivió 55 años más, y falleció a los 94 años de edad. Regresó a Norteamérica con su esposa en 1907 para pasar a ser el primer
director médico del Sanatorio y Hospital de Wáshington, en Takoma
Park, Maryland.
Vivió 55 años más porque Elena de White intervino en su vida con
un mensaje de Dios.
Kress fue uno de los tantos hombres y mujeres a quienes Dios dio
consejos, ánimo o amonestaciones individuales a través de su mensajera,
Elena de White. Antes de leer las historias de las demás personas que
recibieron consejos personales específicos de la mensajera de Dios, repasaremos el hecho -una visión- que inició las siete décadas de servicio
de Elena como mensajera de Dios.
2
La visión que dio inicio a
un movimiento
El camino angosto
i1844! iQué año! Samuel F. B. Morse transmite el primer mensaje
telegráfico ("Lo que ha hecho Dios"). Se inventa el proceso de pasta de
celulosa a partir de la madera, con lo que se reduce el precio del papel
prensa. Un odontólogo de Boston, pionero de la anestesiología con óxido
nitroso, se extrae su propia muela. Brigham Young es elegido para liderar
a los mormones después de que Smith es asesinado en Carthage, Illinois.
Karl Marx, de 26 años, escribe: "La religión es el suspiro de la criatura
oprimida ... el opio de los pueblos".
Y Dios se inclina para hablar con Elena Harmon, de 17 años, con una
invalidez casi total, en Portland, Maine, durante la primera semana de
diciembre.
Pocas semanas antes, Elena y aproximadamente otros cien mil metodistas, bautistas y presbiterianos sufrieron un triste chasco cuando, el 22
de octubre de 1844, Jesús no regresó como ellos esperaban. Ella recordó:
Fue un chasco muy amargo que sobrecogió al pequeño
grupo cuya.fo había sido tan.fuerte y cuya esperanza había
sido tan elevada. Pero quedamos sorprendidos al ver que
nos sentíamos tan libres en el Señor y que éramos tan poderosamente sostenidos por su fortaleza y su gracia ...
Aunque estábamos chasqueados no nos sentíamos
desanimados.
La salud precaria de Elena empeoró rápidamente. Como apenas podía
hablar con susurros, se le hacía difícil respirar acostada y a menudo se
despertaba por la tos y las hemorragias pulmonares. Agonizante por la
- La visión que dio inicio a un movimiento
15
tuberculosis, Elena estaba tan debilitada que tenía que ser transportada
en silla de ruedas y con frecuencia era alimentada por otros.
En esta condición, respondió a una invitación de una amiga íntima,
la Sra. Elizabeth Raines, para que ella y otras tres mujeres la visitaran en
su casa en Portland del Sur para una reunión de oración. Estas mujeres
también estaban confundidas y desanimadas. Habían abandonado su
confianza en la validez de la fecha de octubre, pero todavía esperaban que
Jesús regresara en algún momento del futuro cercano.
Hoy podemos recordar un chasco amargo similar que afligió a los
discípulos después de la crucifixión de su Señor. Cuán oprimido tenían
el corazón cuando Jesús se les apareció a dos de ellos en el camino a
Emaús, pocas horas después de su crucifixión. iQué diferencia significó
su presencia! iQué manera totalmente nueva de ver el futuro!
Así es que, aquella mañana de diciembre de 1844, nuestro Señor visitó
a esas creyentes turbadas con la misma clase de alimento que necesitaron
aquellos turbados creyentes 18 siglos antes.
Más adelante, Elena recordó: "No había excitación ... Mientras yo
oraba, el poder de Dios descendió sobre mí como nunca lo había sentido.
Quedé arrobada en una visión de la gloria de Dios. Me parecía estar
elevándome cada vez más lejos de la Tierra, y se me mostró algo de la
peregrinación del pueblo adventista hacia la Santa Ciudad". 1
Aunque Elena relató esta experiencia y la visión en forma oral, no
la registró por escrito hasta más de un año después, porque no podía
mantener la mano firme para sostener una pluma.
¿cuál fue la visión que inició su ministerio de setenta años, una visión
que se volvió más significativa a medida que pasaban los años?
Mientras estaba orando ante el altar de la familia, el
Espíritu Santo descendió sobre mí, y me pareció que me
elevaba más y más, muy por encima del tenebroso mundo.
Miré hacia la Tierrapara buscar al pueblo adventista,
pero no lo hallé en parte alguna, y entonces una voz me
dijo: 'Vuelve a mirar un poco más arriba".
El sendero recto y angost.o
Alcé los ojos y vi un sendero recto y angosto trazado
muy por encima del mundo. El pueblo adventista andaba por ese sendero, en dirección a la ciudad que se veía en
su último extremo. En el comienzo del sendero, detrás de
los que ya andaban, había una brillante luz, que, según
16
- Los que vieron ... y creyeron -
me dijo un ángel, era el "clamor de media noche." Esta luz
brillaba a todo lo largo del sendero, y alumbraba los pies
de los caminantes para que no tropezaran.
La vista fija en Jesús
Delante de ellos iba Jesús guiándolos hacia la ciudad, y si
no apartaban los ojos de él iban seguros. Pero no tardaron
algunos en cansarse, diciendo que la ciudad estaba todavía
muy lejos, y que contaban con haber llegado más pronto
a ella. Entonces Jesús los alentaba levantando su glorioso
brazo derecho, del cual dimanaba una luz que ondeaba
sobre la hueste adventista, y exclamaban: "iAleluya!"
Algunos negaron la luz que brillaba tras ellos
Otros negaron temerariamente la luz que brillaba tras
ellos, diciendo que no era Dios quien los había guiado
hasta allí. Pero entonces se extinguió para ellos la luz
que estaba detrás y dejó sus pies en tinieblas, de modo
que tropezaron y, perdiendo de vista el blanco y a Jesús,
cayeron fuera del sendero abajo, en el mundo sombrío
y perverso. Pronto oímos la voz de Dios, semejante al
ruido de muchas aguas, que nos anunció el día y la
hora de la venida de Jesús. Los 144.000 santos vivientes
reconocieron y entendieron la voz; pero los malvados
se figuraron que era fragor de truenos y de terremoto.
Cuando Dios señaló el tiempo, derramó sobre nosotros
el Espíritu Santo, y nuestros semblantes se iluminaron
refulgentemente con la gloria de Dios, como le sucedió a
Moisés al bajar del Sinaí.
Los 144.000 estaban todos sellados y peifectamente unidos. En su.frente llevaban escritas estas palabras: "Dios,
Nueva Jerusalén': y además una brillante estrella con el
nuevo nombre de Jesús.
Los impíos se enfurecieron al vernos en aquel santo y
feliz estado, y querían apoderarse de nosotros para encarcelarnos, cuando extendimos la mano en el nombre del
Señor y cayeron rendidos en el suelo. Entonces conoció la
sinagoga de Satanás que Dios nos había amado, a nosotros que podíamos lavarnos los pies unos a otros y salu-
- La visión que dio inicio a un movimiento
-
darnos fraternalmente con ósculo santo, y ellos adoraron a
nuestras plantas.
La nube en el este
Pronto se volvieron nuestros ojos hacia el oriente, donde había aparecido una nubecilla negra del tamaño de
la mitad de la mano de un hombre, que era, según todos
comprendían, la señal del Hijo del Hombre. En solemne silencio, contemplábamos cómo iba acercándose la
nubecilla, volviéndose cada vez más esplendorosa hasta
que se convirtió en una gran nube blanca cuya parte
inferior parecía fuego. Sobre la nube lucía el arco iris y
en torno de ella aleteaban diez mil ángeles cantando un
hermosísimo himno.
En la nube estaba sentado el Hijo del Hombre. Sus
cabellos, blancos y rizados, le caían sobre los hombros; y
llevaba muchas coronas en la cabeza. Sus pies parecían de
fuego; en la mano derecha tenía una hoz aguda y en la izquierda llevaba una trompeta de plata. Sus ojos eran como
llama de fuego, y escudriñaban de par en par a sus hijos.
¿Quién podrá permanecer?
Palidecieron entonces todos los semblantes y se tornaron negros los de aquellos a quienes Dios había
rechazado. Todos nosotros exclamamos: "¿Quién podrá
permanecer? ¿Está mi vestidura sin manchas?" Después
cesaron de cantar los ángeles, y por un rato quedó todo
en pavoroso silencio cuando Jesús dijo: "Quienes tengan
las manos limpias ypuro el corazón podrán subsistir.
Bástaos mi gracia". Al escuchar estas palabras, se iluminaron nuestros rostros y el gozo llenó todos los corazones.
Los ángeles pulsaron una nota más alta y volvieron a
cantar, mientras la nube se acercaba a la Tierra.
Luego resonó la argentina trompeta de Jesús, a medida
que él iba descendiendo en la nube, rodeado de llamas de
fuego. Miró las tumbas de sus santos dormidos. Después
alzó los ojos y las manos hacia el cielo, y exclamó: "iDes-
17
18
- Los que vieron ... y creyeron -
pertad! iDespertad! iDespertad los que dormís en el polvo,
y levantaos!" Hubo entonces unformidable terremoto. Se
abrieron los sepulcros y resucitaron los muertos revestidos
de inmortalidad. Los 144.000 exclamaron: "iAleluya!" al
reconocer a los amigos que la muerte había arrebatado de su
lado, y en el mismo instante nosotros fuimos tranifiJrmados
y nos reunimos con ellos para encontrar al Señor en el aire. 2
¿Por qué Dios dio esta extraordinaria visión a una adolescente agonizante que apenas podía susurrar y que guardaba el domingo?
Podemos pensar en varias razones que nos dirían algo acerca de Dios
mismo y de lo que piensa sobre los creyentes fieles dondequiera que estén
en su experiencia espiritual.
Dios no está lejos de sus fieles
Así como él comprendía el amargo chasco de esos dos discípulos en
camino a Emaús, entendía el pesar vacío de aquellas cinco mujeres de
Portland, Maine. Y él no está lejos de los lectores de estas páginas que
han sufrido una gran desilusión y quizás abandono.
Dios sabe cómo consolar
Aquellas primeras creyentes adventistas necesitaban ser consoladas.
Estaban confundidas en cuanto a lo que parecían ser claras verdades
bíblicas; la experiencia cristiana de ellas parecía ser auténtica. No habían
abandonado su confianza en Dios; pero, aun así, estaban confundidas.
Esta visión les dio a esas cinco mujeres, y luego a un creciente grupo
que posteriormente percibió los detalles de la visión, el consuelo intelectual y emocional de que los años de preparación para el regreso de Jesús
en 1844 no habían sido desperdiciados en ardides teológicos. No habían
sido engañados, solo estaban confundidos con respecto a lo que debía
ocurrir el 22 de octubre. Y esta certidumbre de que el Señor los había
estado guiando en su experiencia pasada los pudo ayudar a enfrentar
mejor el ridículo de sus ex amigos.
Esta visión también les dio la seguridad de que, si eran fieles, un día
verían a su Señor cara a cara. No importaba qué clase de dificultades pudieran surgir, si continuaban siguiendo la luz, ellos también terminarían
en el mar de vidrio y caminarían por las calles de oro.
- La visión que dio inicio a un movimiento
-
19
Dios sabe cómo instruir a los fieles
Durante varios años, estas cinco jóvenes habían creído que Jesús regresaría en 1843, y luego en 1844, basadas en una cuidadosa investigación
bíblica. Pero, después del 22 de octubre, se habían hundido cada vez más
en el desánimo porque Jesús no había venido. Su fe comenzó a vacilar, no
en su experiencia cristiana sino en su confianza en el estudio de la Biblia.
Para diciembre, la mayoría de los creyentes adventistas habían abandonado su sólida creencia en que el 22 de octubre tenía importancia.
En otras palabras, ellos creían que la profecía de los 2.300 días-años
no había terminado; peor aún, algunos ahora creían que todo el cuadro
profético había estado equivocado. Según escribió Elena en 1847: "En el
momento en que tuve la visión del clamor de medianoche [diciembre de
1844], había abandonado la idea de que [el cumplimiento de la profecía]
fuera en el pasado y la esperaba para el futuro, y también le pasaba lo
mismo a casi todo el grupo". 3
Pero esta visión de diciembre les dio un panorama totalmente diferente
a estos entristecidos creyentes adventistas. iDios había estado guiando a su
pueblo! El inolvidable "clamor de medianoche" del verano de 1844 ahora
debía brillar como una luz sobre el sendero de quienes se dirigían gozosos
hacia la Canaán celestial. La promesa: Si seguían confiando en esa luz y
mantenían la vista fija en Jesús, entrarían a salvo en su recompensa.
iQué promesa! iQué consuelo!
¿Qué nos dice esta visión a nosotros hoy?
Recuerdo el día cuando leí esta visión por primera vez. Estaba entrando en la adolescencia y me acababa de bautizar. Alguien pensó que me
sería útil leer Primeros escritos. Ese sábado de tarde es tan vívido como
ayer. Estaba atravesado en mi cama leyendo esas páginas asombrosas,
página tras página, capítulo tras capítulo.
No supe hasta más adelante que me estaba introduciendo en el tema
del gran conflicto, y de cómo piensa Dios llevar a su conclusión la historia
del pecado y de este mundo. Mi lectura aquel sábado de tarde se convirtió en mis primeros pasos para captar la historia general de por qué se
desarrolló el pecado y de qué manera Dios hace lo mejor de su parte para
contar su versión de la historia.
"Mira un poco más arriba"
La instrucción de "mirar un poco más arriba" se convirtió en una de
las frases que me ha ayudado a salir de la oscuridad y el desánimo desde
20
- Los que vieron ... y creyeron -
entonces. Cuando las preguntas obvias parecían no tener respuestas fáciles,
cuando mis amigos de confianza me decepcionaban, la voz tranquilizadora
me hacía elevar la vista: "iMira un poco más arriba!"
"El sendero recto y angosto"
Las palabras "recto y angosto" traen a la mente las palabras de nuestro
Señor en Mateo 7:13 y 14, donde nos recuerda que la vida ofrece elecciones. Tenemos un viaje que terminar, pero uno puede elegir la dirección.
Todos sabemos que no transitamos automáticamente por el sendero recto
y angosto. Por alguna razón, comenzamos a caminar por el sendero fácil,
el camino ancho, con bastante compañía. De hecho, en realidad no sabemos que existe un camino mejor hasta que Jesús y el Espíritu Santo nos
dan vuelta: el giro en U que llamamos conversión. Pero ese giro de 180
grados nos coloca en un sendero más angosto, un sendero que requiere
elecciones y decisiones mientras caminamos.
Lamentablemente, algunas traducciones españolas sustituyen lapalabra difícil por angosto. Jesús no se contradice a sí mismo. Cuando dice
que su "yugo es fácil" y su carga es "ligera" (Mat. 11:30), nos está diciendo
que el Espíritu Santo suaviza nuestro sendero, ilumina nuestra mente y
potencia nuestras decisiones, y ¿qué enemigo puede igualar esa promesa?
iLa dificultad en la vida cristiana se da cuando la persona trata de andar
por ambos caminos al mismo tiempo!
"La luz que brillaba tras ellos"
La referencia a la luz que brillaba tras ellos estremeció a las cinco
mujeres y luego al creciente grupo de adventistas al ver la gran importancia de los acontecimientos del 22 de octubre de 1844. Sin esa "luz
brillante" llamada "el clamor de medianoche", aquellos primeros adventistas desanimados habrían cavado sus propias tumbas en desesperación. El clamor de medianoche había sido el tema de reunión durante
el verano de 1844, una frase tomada de la parábola de Mateo 25. Había
unido a muchos, muchos miles al centrarse en el 22 de octubre. En otras
palabras, Dios estaba respaldando la confianza y el compromiso incondicional de ellos en la profecía de tiempo de Daniel 8:14. iQué alivio!
Qué motivo ahora para reunirse y comenzar el viaje en ese "sendero
angosto", buscando más luz a lo largo del camino.
- La visión que dio inieio a un movimiento
-
21
"La vista fija en Jesús"
A los primeros adventistas no se les dio el cuadro completo de inmediato. Ese nunca ha sido el plan de Dios. A lo largo del ministerio terrenal
de nuestro Señor, este guiaba a sus discípulos paso a paso: "Aún tengo
muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar" (Juan
16:12). La gente no puede asimilar demasiada información o cambios
simultáneamente. Pero lo que podemos hacer con toda seguridad es
mantener la vista "fija en Jesús".
Al aceptar esta sencilla instrucción, todos podemos encaminarnos
por el sendero angosto. El Espíritu Santo nos conduce a diferentes velocidades, dependiendo del contexto intelectual, los hábitos sociales y las
conexiones familiares. Incluso las esposas y los esposos devotos no están
exactamente en el mismo lugar del sendero angosto. El secreto manifiesto
es continuar leyendo la Palabra escrita, seguir relacionándose con los
demás en ese sendero angosto y nunca retroceder.
"Iban seguros"
iPreciosa promesa! Sigamos la luz que brilla a lo largo del sendero, la
luz que fue afirmada en los acontecimientos de 1844, la luz de adelante
que nos guía constantemente a la ciudad; iy estaremos seguros durante
todo el camino! Quizá no vivamos lo suficiente como para entrar caminando por la puerta de la ciudad antes de descansar en la tumba, pero si
hemos estado caminando constantemente en la luz brillante, iestamos
seguros de que recibiremos la vida eterna!
La seguridad cristiana descansa en esta sencilla verdad: los que caminan en la luz que tienen, no siempre en la luz que puede estar guiando
a otros, los que siempre confían y obedecen la luz, a medida que entienden cada vez más, estos tienen la tranquila fortaleza de la seguridad de
la salvación.
"No tardaron algunos en cansarse"
Los primeros creyentes adventistas tenían la esperanza de que Cristo
regresaría pronto. El mensaje de los últimos días para todo el mundo les fue
revelado lentamente, paso a paso. Algunos no percibieron rápidamente que
la calidad de la iglesia de los últimos días, como se la describe en Apocalipsis
(2:17; 14:12; 19:7-9), llevaría tiempo para desarrollarse y que el desarrollo
tenía que ver absolutamente con el tiempo del advenimiento. Lamentablemente, algunos realmente se cansaron, y pusieron sus esperanzas en caminos
más cortos. Otros, a la larga, entendieron los planes de Dios para el tiempo
22
- Los que vieron ... y creyeron -
del fin, juntaron fuerzas y escogieron pertenecer a los que seguían "la luz
de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto" (Prov. 4:18).
Eso es lo que ocurre cuando las personas fieles a Dios fijan la vista en Jesús.
"Negaron temerariamente la luz que brillaba tras ellos"
¿Que podría significar esto? Cualquiera que fuera la razón, algunos
rechazaban el pensamiento de que Dios había estado guiando a los creyentes adventistas. Perdieron la confianza en la profecía de los 2.300 días
de Daniel 8:14, y su fe ardiente se convirtió en amargura, al pensar que
habían sido engañados. La luz se apagó y regresaron a los encantos que
se desvanecen rápidamente en este mundo actual.
"Los impíos se enfurecieron"
La realidad se repite. Así como los primeros adventistas soportaron
el ridículo y cierto grado de enojo por parte de los que rechazaban a los
adventistas antes del22 de octubre, también los adventistas de los últimos
días afrontarán la misma ira al fin de la historia de este mundo, justo antes del regreso de Jesús. Esta vez la confrontación será espantosa y a nivel
mundial; la única defensa de ellos serán las promesas de Jesús y la luz que
los ha estado guiando. En el momento más desapacible de estos últimos
días, recibirán señales celestiales de que la ayuda viene en camino. Los
arcos iris, las nubes blancas, los coros angelicales: itodo valdrá la pena!
"Solemne silencio"
¿podría haber un momento más cargado de sobrecogimiento en la
historia del planeta Tierra? Los malvados están conmocionados y se
quedan sin palabras; los justos se hacen una humilde pregunta: "¿Quién
será digno?" Nadie, ni siquiera el más fiel de los creyentes, sabe si es digno
de encontrarse con Jesús cara a cara. Entonces esa voz reconfortante,
que han "oído" muchas veces en su caminar por el sendero angosto, les
recuerda: "Bástate mi gracia". El simple evangelio, pleno y completo, ha
alcanzado su tremendo objetivo: la buena nueva del perdón y del poder
finalmente los ha conducido a los pies de su amante y fiel Señor.
"Trompeta de plata"
Los primeros adventistas que escucharon esta visión revelada inmediatamente recordaron la trompeta de 1 Tesalonicenses 4, cuando las tumbas
- La visión que dio inicio a un movimiento
23
se abren y se reúnen los viejos amigos. Posiblemente hoy no existan palabras
en la Tierra que puedan abarcar todo lo que los creyentes leales de todas
las edades oirán, verán y pensarán. iNuestra única respuesta a esta visión
es reconsagrar nuestra vida para estar allí!
Durante sus setenta años de ministerio, Elena de White se refirió
a la metáfora del sendero angosto al menos 135 veces. En el fragmento
siguiente de una carta a un joven que estaba en peligro de desviarse del
camino, Elena muestra su claridad mental y moral:
Se me han mostrado los peligros que acechan a los
jóvenes. Sus corazones están llenos de altas aspiraciones
y ven la carretera descendente sembrada de tentadores
placeres de aspecto atractivo, pero la muerte es su final.
La estrecha senda hacia la vida quizá les parezca desprovista de atractivos, llena de cardos y espinas, pero no es
así. Es la senda que requiere la negación de los placeres
pecaminosos; es estrecha, para que aquellos a quienes
el Señor rescató puedan andar por ella. Nadie puede
andar por esa senda y cargar con elfardo del orgullo, la
obstinación, el engaño, la falsedad, la deshonestidad, las
pasiones y las concupiscencias carnales. La senda es tan
estrecha que quienes anden por ella deberán dejar esas
cosas. Sin embargo, la carretera ancha y cómoda tiene
la suficiente amplitud para que los pecadores viajen por
ella con todas sus tendencias pecaminosas.
Joven, si rechazas a Satanás y todas sus tentaciones,
podrás andar sobre las huellas del Redentor, y gozar la
paz del cielo y el gozo de Cristo. La concupiscencia del
pecado no traerá consigo laftlicidad. Podrás engañarte
y creer que eres ftliz, pero no podrás conocer la verdadera
ftlicidad. El carácter se diforma con la complacencia en
el pecado. El peligro está al acecho en cada escalón que se
desciende y los que podrían ayudar a los jóvenes no se dan
cuenta de ello. No se manifiesta el tierno y amable interés
que debiera mostrarse por los jóvenes. Muchos podrían
ser protegidos de influencias pecaminosas si estuvieran
rodeados de buenas amistades y escucharan palabras
amables y amorosas. 4
Esta primera visión de unas dos mil que vendrían durante los siguientes setenta años fija el rumbo para millones de creyentes adventistas. Su
24
- Los que vieron ... y creyeron -
claridad gráfica es difícil de olvidar. Nadie puede leerla cuidadosamente
y alegar desconocimiento en la segunda venida.
Hoy podemos agradecer a Dios, al igual que aquellos primeros adventistas, porque él se inclina hasta los creyentes confundidos incluso de
la actualidad, y enciende una luz en la senda de cada persona. Y continúa
demostrándonos hoy cómo permanecer en ese sendero angosto. La luz se
vuelve más fuerte y la seguridad se profundiza mientras anhelamos escuchar las trompetas y el sonido silbante de las alas de los ángeles cuando
reúnan a los que estuvieron separados durante tanto tiempo, para aquel
viaje a la Ciudad Santa.
Primeros escritos, p. 13.
Ibíd., pp. 14-16.
3
Carta 3,1847.
4
Testimonios para la iglesia, t. 4, pp. 357, 358.
1
2
La visión más larga
y esa Biblia pesada
Bandolph, Massachusetts
La visión más larga de Elena de White (cuatro horas) ocurrió en
1845, un año antes de su casamiento con Jaime. Una de las acusaciones
que se le hacían era que no podía tener una visión si Jaime White y Sara,
hermana de Elena (ambos acompañaban a Elena en sus primeros viajes),
no estuvieran presentes.
Otis Nichols, de Boston, con la esperanza de desenmascarar la acusación, "invitó a Elena y a Sara a su casa, dejando a Jaime en Portland. Entre
los que se hallaban en el área de Boston que impugnaban la validez de la
experiencia de Elena Harmon estaban dirigentes fanáticos, incluyendo a
Sargent y a Robbins, que también sostenían que era un pecado trabajar".
El mensaje de Sargent y Robbins a los adventistas milleritas era: "Vendan lo que tienen, y den limosnas", queriendo decir, por supuesto, que les
paguen sus gastos de mantenimiento. Sostenían que ahora estaban en el
"jubileo, la tierra debía descansar y los pObres debían ser mantenidos sin
trabajar". Denunciaron las primeras visiones de Elena Harmon diciendo:
"son del diablo", porque ella había estado exponiendo los errores suyos.
Pocos días después de que Elena y Sara habían llegado a la casa de
Nichols, Sargent y Robbins fueron invitados a ir y compartir estudios
bíblicos, y a orar. Cuando llegaron y se enteraron de que ambas hermanas estaban en la casa, salieron a toda prisa en medio de un aluvión
de excusas.
Pero, antes de irse, Nichols les dijo a ambos que Elena quería asistir
a la reunión de su grupo de "No trabajar" en Boston el siguiente domingo. Cuando preguntó si los dos dirigentes tenían objeciones para oír el
testimonio de ella, respondieron: "Ninguna en absoluto. Que venga el
próximo domingo".
26
- Los que vieron ... y creyeron -
Así que, se hicieron arreglos para que Elena y Sara Harmon asistieran a la reunión de este grupo para el domingo siguiente. "Pero la noche
previa a la reunión propuesta, se le mostró en visión a Elena que esos
hombres no tenían planes de encontrarse con ella; habían alertado a sus
seguidores para reunirse en Randolph, veinte kilómetros al sur de Boston.
En esa visión también se le dijo que debía encontrarse con este grupo en
Randolph, que Dios le daría un mensaje que convencería a 'los honestos
y libres de prejuicios si sus visiones eran del Señor o de Satanás' ".
Cuando Elena, Sara y la familia Nichols llegaron al día siguiente a
Randolph, encontraron un gran salón lleno de gente en la casa de Thayer.
Elena escribió posteriormente: "Cuando entramos, Robbins y Sargent se
miraron sorprendidos y comenzaron a refunfuñar. Me habían prometido
que se encontrarían conmigo en Boston, pero pensaron que nos decepcionarían yendo a Randolph, y mientras nosotros estuviéramos en Boston,
advertirían a los hermanos contra nosotros".
Durante la reunión matinal, i"Robbins le dijo a Sarah [. ..] que Elena
no podría tener una visión si él estaba presente"! En la reunión de la
tarde, Elena tuvo la visión que supuestamente no podría haber ocurrido.
Más tarde informó:
La bendición del Señor se posó sobre mí, y .fui arrebatada
en visión. Se me volvieron a mostrar los errores de estos
hombres malvados y de otros que estaban unidos a ellos.
Vi que no podrían prosperar, sus errores confundirían y
distraerían; algunos serían engañados por ellos; pero que la
verdad triunfaría finalmente, y el error sería abatido.
Se me mostró que ellos no eran honestos, y luego fui
llevada alfuturo y se me mostró que continuarían
despreciando las enseñanzas del Señor, despreciando la
amonestación y que serían dejados en oscuridad total,
para resistir al Espíritu de Dios hasta que su capricho
se hiciese manifiesto ante todos. Me fue presentada una
cadena de verdad de las Escrituras, en contraste con los
errores de ellos.
Cuando salí de la visión, las velas ardían. Había estado
en visión casi cuatro horas.
Otis Nichols registró que cuando Elena comenzó a orar, pronto fue
"arrebatada en visión ... y continuó hablando en visión con una voz aguda
que todos los presentes podían entender claramente, hasta alrededor de
la puesta del sol".
-
La visión más larga y esa Biblia pesada
27
Es fácil comprender la consternación y la exasperación de Sargent,
Robbins y los demás. ¿cómo respondieron? Nichols dijo que estos dirigentes avergonzados "agotaron toda su influencia y sus fuerzas físicas
para destruir el efecto de la visión. Se unieron para cantar en voz muy
alta, y luego hablaban y leían de la Biblia alternadamente en alta voz a
fin de que Elena no pudiera ser oída, hasta que se les agotó la fuerza y les
temblaban las manos, de modo que no podían leer de la Biblia".
Algunos de los seguidores de estos dirigentes humillados los reprendían,
pidiéndoles que acabaran con su interferencia. Robbins respondió: "Ustedes
están inclinados ante un ídolo. Están adorando a un becerro de oro".
El señor Thayer, el dueño de casa, tuvo su propia forma de satisfacerse en cuanto a si la visión era del diablo. Había oído que al colocar una
Biblia abierta sobre la persona en visión se podía detener a la gente bajo
influencia satánica. Thayer le pidió a Sargent que colocara una Biblia
sobre Elena, pero él se negó.
Thayer fue más allá. "Tomó una pesada y enorme Biblia familiar que
estaba sobre la mesa y casi nunca se la usaba, la abrió y la colocó abierta
sobre el pecho de Elena mientras esta estaba en visión, inclinada hacia
atrás contra la pared en un rincón de la habitación". Esto es lo que ocurrió
a continuación:
Inmediatamente después de que la Biblia fue colocada sobre ella, se puso de pie y caminó hasta el medio de
la sala, con la Biblia abierta en una mano y la levantó
lo más alto que pudo, y con la vista fija mirando hacia
arriba, declaró con solemnidad: "El testimonio inspirado
de Dios': o palabras de la misma importancia, y luego
continuó durante mucho tiempo, mientras la Biblia era
extendida en una mano y sus ojos miraban hacia arriba
y no a la Biblia, dando vuelta las hojas con la otra mano
y colocando el dedo sobre determinados pasajes y pronunciando correctamente las palabras con una voz solemne.
Si usted hubiese estado en esa habitación, ¿qué habría hecho? iExactamente lo que muchos hicieron! iSe pusieron de pie y observaron aquellos
textos bíblicos que Elena estaba señalando mientras mantenía la vista fija
hacia arriba! Para el asombro de todos, ella citaba perfectamente esos textos.
¿cuáles fueron algunos de esos textos? Nichols dijo que "algunos de
los pasajes mencionados eran juicios contra los malvados y los blasfemos;
y otras eran amonestaciones e instrucciones relacionadas con nuestra
condición actual.
·
28
- Los que vieron ... y creyeron -
"En este estado continuó toda la tarde hasta casi la puesta del sol,
cuando salió de la visión".
Cuando Elena salió de la visión, Sargent, Robbins y su grupo estaban
callados. Por el resto del tiempo estuvieron inquietos aunque desafiantes,
y se negaban a reconocer la importancia de lo que habían experimentado.
¿Qué ocurrió con Sargent, Robbins y su grupo de "No trabajar"?
Nichols informó que, pocas semanas después, Elena Harmon visitó Randolph por última vez y le dijo al grupo que mediante las visiones se había
enterado de que la "maldición de Dios pronto seguiría su curso".
iY así fue! En pocas semanas, el grupo se disolvió cuando algunos
confesaron "actos de lo más vergonzosos" y los de corazón honesto se
separaron para siempre. Unos veinte siguieron a Sargent y a Robbins, y
continuaron denunciando las visiones de Elena Harmon y a los que se
oponían a sus doctrinas de "No trabajar". Un año después, incluso este
grupo se desintegró, y muchos "ise declaraban libres de todo pecado!"
Para Elena, de 18 años, era toda una responsabilidad enfrentarse
con hombres tenaces, no solo de a uno por vez sino icon una sala llena
de adultos desafiantes que la ridiculizaban! Pero, cuando una persona,
sin importar la edad, ha visto la luz de la verdad, ninguna persona mala
o terca puede desplazar esa luz.
¿Qué ocurrió con los pocos que se mantuvieron de parte de Elena
aquel largo día observando su "visión más larga"? ¿Usted cree que alguna
vez se olvidaron de Elena y de esa Biblia de entre ocho y nueve kilos sostenida en alto durante tanto tiempo? ¿o de sus descripciones perspicaces
de la clase de oposición que la denunciaba a ella tan hipócritamente?
¿o su predicción enérgica de que este grupo de "No trabajar" pronto se
desintegraría en sus propios pecados?
Pronto aprendieron que siempre es más seguro "cree[r] a sus profetas"
(2 Crón. 20:20).
4
La lección de astronomía
Bates se convenció
José Bates, un capitán de barco convertido, gastó su fortuna promoviendo el mensaje millerita. Se convirtió en uno de los primeros adventistas sabatarios (1845) y el primero en imprimir un folleto sobre el verdadero día de reposo, The Seventh-day Sabbath,A Perpetua[ Sign [El séptimo
día sábado, una señal perpetua] (1846). Este folleto se convirtió en una
confirmación importante para Jaime y Elena de White, recientemente
casados, de que el sábado, no el domingo, es el día de reposo cristiano.
Sin embargo, el capitán Bates al principio no estaba convencido de
que las visiones de Elena de White "fuesen de Dios". Las visiones, en
ese entonces, se confundían con sesiones espiritistas o el mesmerismo.
Bates pensaba que las visiones eran resultado de la mala salud de Elena:
"nada 'más que lo que produjo un prolongado estado de debilidad de
su cuerpo' ". Pero cambió de parecer después de observarla en varias
experiencias de visiones.
"Una visión, en particular, lo impresionó. En noviembre de 1846, en
el hogar de Stockbridge Howland, en Topsham, Maine, se había reunido
un pequeño grupo de observadores del sábado. Entre ellos estaban José
Bates y los White. Elena de White fue arrebatada en visión y 'por primera vez tuvo una visión de otros planetas'. Después de la visión, relató lo
que había visto" durante ella. J. N. Loughborough narró por impreso la
descripción de la reunión según se la contó Bates:
La señora de ~ite, mientras estaba en visión, comenzó
a hablar sobre Zas estrellas, dando una descripción de cinturones de color rosado que veía a lo largo de la superficie
de algún planeta, y añadió:
-Veo cuatro lunas.
-iAh! -dijo el pastor Bates-, iestá viendo Júpiter!
Luego de hacer gestos como si estuviera viajando a
30
- Los que vieron ... y creyeron -
través del espacio, comenzó a describir unos cinturones y
anillos con diversidad de belleza, y dijo:
-Veo siete lunas.
El pastor Bates exclamó:
-Está describiendo Saturno.
Después vino la descripción de Urano, con sus seis
lunas; luego una maravillosa descripción de los "cielos
abiertos': con su gloria, que describió como una abertura
a una región más iluminada. El pastor Bates dijo que su
descripción sobrepasaba en mucho cualquier relato de los
cielos abiertos que alguna vez hubiese leído de algún autor.
Mientras ella hablaba y todavía estaba en visión, él se
puso de pie y exclamó:
-iOh, cuánto desearía queLordJohnRosse estuviera
aquí esta noche!
El pastor VVhite preguntó:
-¿Quién es Lord John Rosse?
-Ah -dijo el pastor Bates-, es un extraordinario astrónomo inglés. Desearía que estuviese aquí para escuchar a
esta mujer hablar de astronomía, y oír la descripción de
los "cielos abiertos". Es más avanzado que todo lo que leí
sobre el tema.
Posteriormente, Elena de White informó de esta experiencia... en el
hogar de Curtís.
Después de salir de la visión, describí lo que había visto.
El hermano Bates me preguntó si yo había estudiado astronomía. Le dije que no tenía memoria de haber investigado sobre astronomía alguna vez.
-Esto es del Señor -dijo él.
Nunca antes lo vi tan libre yftliz. Su semblante brillaba
con la luz del cielo, y exhortó a la iglesia con poder.
Pocos meses después, Jaime White escribió lo que recordaba de esta
"visión de astronomía":
En nuestro congreso de Topsham, Maine, en noviembre
pasado, Elena tuvo una visión de las obras de Dios. Ellafue
guiada a los planetas Júpiter, Saturno y creo que uno más.
Después de salir de visión, ella pudo dar una nítida des-
- La lección de astronomía -
31
cripción de sus lunas, etc. Es bien sabido que ella no sabía
nada de astronomía, y no podía responder ni una pregunta
con relación a los planetas, antes de tener esta visión.
Al repasar esta visión a partir de los informes de John Loughborough
y Jaime White, debemos reconocer al menos siete hechos:
l. Elena de White nunca puso por escrito esta "visión de astronomía''.
2. Nunca identificó por nombre los planetas que vio.
3. Nunca mencionó la cantidad de lunas que algún planeta pudiera tener.
4. Bates atribuyó los nombres de los planetas a lo que él pensaba que
Elena de White estaba describiendo.
5. Loughborough y Jaime White informaron lo que Bates pareció
haber entendido a partir de sus breves comentarios.
6. Los telescopios actuales revelan mucho más acerca de los planetas,
la cantidad de lunas que tienen y otros fenómenos celestiales que lo que
Bates podría haber soñado alguna vez.
7. Lo que realmente dejó atónito a Bates no fue la descripción de los
"planetas" sino la descripción de la señora White de los "cielos abiertos", una
referencia al denominado "espacio abierto de Orión" que, para Bates, "sobrepasaba'' cualquier descripción hecha por astrónomos contemporáneos.
Pues bien, ¿cuál es el propósito de esta visión? Esta "visión de astronomía'' no era una lección sobre astronomía que posteriormente sería
verificada por el telescopio Hubble.
Pero, "si Elena de White hubiese dado un anticipo de lo que el telescopio
Hubble reveló en los años noventa, José Bates por cierto se hubiese convencido de que Elena de White era una impostora, una fanática desorientada.
Sus dudas se hubiesen confirmado. Probablemente no se hubiese identificado más con los adventistas del séptimo día''.
En otras palabras, esta interesante "visión de astronomía'' correspondía al conocimiento que tenía Bates sobre lo que mostraban los telescopios
en 1846. Lo más probable es que esta visión haya sido dada en presencia
de Bates para darle confianza en el ministerio de Elena de White.
Y la visión fue otro ejemplo de cómo Dios guía a su pueblo "paso a paso".
Era el método de Jesús: '~ún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora
no las podéis sobrellevar" (Juan 16:12). La gente no puede identificarse con
demasiados cambios simultáneamente. El principio de paso a paso se aplica
a una amplia variedad de temas, incluyendo la reforma pro salud, el desarrollo gradual de la verdad, como por ejemplo cuándo comienza el día de
reposo, y la creación del Centro Médico de la Universidad de Loma Linda.
5
"¡Esperen un mes 1"
HiramPatch
Era a fines del invierno de 1850. Elena, que acababa de cumplir 23
años, era madre de dos varones: Henry, de tres años y medio, y Edson,
de seis meses.
Jaime White, ahora con unos 29 años, estaba dirigiendo reuniones
en Oswego, Nueva York, mientras redactaba la copia del primer periódico
misionero adventista del séptimo día. Su obra había incomodado a los
metodistas de la ciudad, que ahora estaban celebrando sus propias reuniones. El orador de ellos, el tesorero del condado, también servía como
predicador laico metodista.
Durante este período, dos jóvenes no creyentes, Hiram Patch, de 21
años, y su novia, asistían a ambas series de reuniones. Con el tiempo, se
acercaron a los White, confundidos, sin saber a quién creerle. Durante
esa consulta, Elena de White tuvo una visión que ellos presenciaron. Remitió a la pareja a Oseas 5:6 y 7: "Con sus ovejas y con sus vacas andarán
buscando a Jehová, mas no lo hallarán: iSe ha apartado de ellos! Contra
Jehová prevaricaron, porque han engendrado hijos de extraños; ahora
serán consumidos en un solo mes ellos y sus heredades".
Entonces le dijo a la joven pareja:
-Esperen y vean el resultado del asunto. Esperen un mes, y sabrán por
ustedes mismos el carácter de las personas que están participando de este
reavivamiento y que profesan tener un peso tan grande por los pecadores.
-Esperaré -dijo Hiram.
Dos semanas después, al tesorero se le rompió un vaso sanguíneo
del estómago mientras gritaba en una de sus oraciones. Fue llevado a
su casa y confinado a guardar reposo. El jefe de policía del condado y el
alguacil asumieron el control de las finanzas del condado y descubrieron
un faltan te de exactamente mil dólares. Fueron a la casa del tesorero, con
-
"iEsperen un mes!" -
33
la esperanza de obtener alguna ayuda. Pero él y su esposa levantaron las
manos hacia el cielo, poniendo a Dios por testigo de que ellos no sabían
nada del dinero que faltaba.
No obstante, cuando el jefe de policía entró por la puerta del frente, el
alguacil se había ido por detrás de la casa y se escondió en un cobertizo.
De repente se abrió la puerta de atrás, y la esposa rápidamente enterró
un costal en un montículo de nieve. Momentos después, mientras el jefe
de policía y el tesorero estaban conversando sobre la discrepancia, el alguacil entró en el dormitorio con el dinero que faltaba. El reavivamiento
evangelizador del tesorero se desplomó de repente, e Hiram Patch y su
futura esposa escogieron unirse a los adventistas que guardaban el sábado. Fueron miembros fieles hasta su muerte.
¿Qué aprendemos de este pequeño incidente? iElena de White era
una constante ganadora de almas! Dios le dio una visión que ayudó a
traer a dos jóvenes a la seguridad de la verdad bíblica. Al mismo tiempo,
Dios les dio a dos hipócritas la oportunidad de hacer las cosas bien, pero
rechazaron la oportunidad de confesar la verdad.
6
"¡Se entregó otro rebelde I"
Stephen Smith
En noviembre de 1851, aunque Elena de White todavía no había
cumplido los 24 años, ya participaba activamente en ayudar a resolver
opiniones divergentes de hombres decididos. La naciente Iglesia Adventista del Séptimo Día estaba ganando miembros, y la necesidad de que
la iglesia se organizara era obvia.
Una de las razones de este énfasis temprano en el orden eclesiástico
fue una reacción a la obra destructiva de Stephen Smith, de Unity, Nueva
Hampshire (a pocos kilómetros de Wáshington, Nueva Hampshire, donde
todavía existe el primer templo adventista del séptimo día). Smith rechazaba el consejo de que creer en una fecha profética para la segunda venida
de Cristo ya no era un prerrequisito para ser miembro de iglesia. Smith
recogió otras ideas que no eran bíblicas y luego se unió a la oposición a
los White y a otros dirigentes de la iglesia.
Elena tuvo una visión en relación con el descontento, y vio que la
iglesia debía actuar para limitar los errores y la disensión, desmembrando
a Stephen Smith y a otros que promovían enseñanzas erróneas. Jaime
White informó en su carta general delll de noviembre: "En Wáshington
conocimos al hermano Smith, duro, duro, lleno de errores". "Fue una lucha ... El domingo, el hermano Smith estuvo presente. Duro como siempre.
Hablamos claramente. Finalmente, la asamblea votó apartarse de él".
"Casi un año después de ser desglosado, Stephen Smith llegó a ver sus
errores, los confesó, y fue reintegrado como miembro". Pero pronto "nuevamente participó de creencias erróneas y fue desglosado de nuevo. En
1857 volvió a encontrar el camino de regreso, pero solo por poco tiempo.
"En algún momento de la década de 1850, después de uno de los lapsos
de Smith, Elena de White le escribió un testimonio en el que describía
cómo sería su vida si persistía en el rumbo que estaba siguiendo. Cuando
recibió la carta, temió que fuese un testimonio de reproche [...] así que
[...] la guardó bien al fondo de un baúl, sin abrirla ni leerla".
-
"iSe entregó otro rebelde!" -
35
Durante casi treinta años, Stephen Smith continuó oponiéndose a su
confesión religiosa anterior con críticas alevosas e hirientes. "La señora
de Smith siguió siendo fiel, y la Review and Herald, el periódico de la
Iglesia Adventista del Séptimo Día, llegaba semanalmente a la casa de
ellos. Entonces, un día Smith la tomó y leyó un artículo de Elena de White.
Siguió leyendo sus artículos semanalmente y descubrió que le hablaban
al corazón". Finalmente, su actitud comenzó a suavizarse.
En 1885, E. W. Farnsworth regresó a Wáshington, Nueva Hampshire, para celebrar reuniones de reavivamiento. El padre de Eugene era
William Farnsworth, miembro fundador de la primera iglesia adventista
de Wáshington, Nueva Hampshire. Stephen Smith había conocido a
Eugene de muchacho, y ahora caminó casi veinte kilómetros para escuchar su sermón sabático. Farnsworth predicó sobre el surgimiento
y el desarrollo de la Iglesia Adventista. "Una vez concluido el sermón,
Smith se puso de pie y pidió que se le concediera el privilegio de hablar.
La audiencia, que lo conocía bien, esperaba una ... embestida de críticas
y maldades.
"-No quiero que me tengan miedo, hermanos -comenzó Smith-. No
he venido para criticarlos. Abandoné esa clase de asuntos.
"Entonces repasó el pasado, su odio por la organización de la iglesia,
su asociación con un grupo opositor tras otro, los cuales había visto caer
y sus simpatizantes quedaban desconcertados.
"-Los hechos -dijo- son contumaces, pero la realidad es que los que
se han opuesto a esta obra terminaron en nada, mientras que los que
han estado en simpatía con ella han prosperado, han mejorado, se han
vuelto más devotos y piadosos. Los que se oponían a ella solo aprendieron
a luchar y a debatir. Han perdido toda su religión.
"-Ningún hombre honesto puede dejar de ver que Dios está con ellos
y contra nosotros. Quiero estar en comunión con este pueblo, de corazón
y en la iglesia.
"Smith tenía intenciones de permanecer un tiempo en Wáshington
para la reunión del sábado siguiente, pero el miércoles recordó la carta
de Elena de White que estaba en el baúl de su casa. Al sentir que no podía
esperar a leerla, inició el viaje de regreso el jueves de mañana y recorrió
los casi veinte kilómetros hasta su casa y pronto tuvo el sobre cerrado en
sus manos. Lo rompió para abrirlo y leyó su contenido.
"De regreso en Wáshington el sábado siguiente, escuchó a Farnsworth
predicar sobre el Espíritu de Profecía en la iglesia remanente. Al concluir
el sermón, se puso de pie nuevamente. Esto es lo que dijo:
"-Yo mismo recibí un testimonio hace 28 años. Lo llevé a casa y lo
guardé en mi baúl, y nunca lo leí hasta el jueves pasado".
36
- Los que vieron ... y creyeron -
Explicó que todos esos años no lo había leído, "por temor a volverse loco.
"-Pero -dijo-, en realidad estuve loco todo el tiempo.
"Finalmente, dijo:
Hermanos, cada palabra del testimonio para mí es
cierta, y lo acepto. Y he llegado hasta ese lugar donde
finalmente creo que todos ellos [los testimonios] son de
Dios, y si hubiese tenido en cuenta el que Dios me envió
a mí, al igual que el resto, habría cambiado todo el rumbo de mi vida, y hubiese sido un hombre muy diferente.
Cualquier hombre que es honesto debe decir que los testimonios siempre conducen a un hombre hacia Dios y la
Biblia. Si es honesto, dirá eso; si no dice eso, no es honesto.
Si yo los hubiese tenido en cuenta, me habría ahorrado un montón de problemas. Los testimonios decían
que no debía predicarse más ningún "tiempo difinido"
después del movimiento del '44, pero pensé que sabía
tanto como las visiones de una anciana, como solía calificarla. iQue Dios me perdone! Para mi pesar, descubrí
que las visiones eran correctas, y el hombre que pensaba
que se las sabía todas estaba equivocado, porque yo prediqué el tiempo en 1854 y gasté todo lo que tenía, cuando,
si hubiese tenido esto en cuenta, me habría ahorrado todo
eso y mucho más. Los testimonios son correctos y yo estoy
equivocado.
"Después de hablar por algún tiempo, concluyó:
"-Hermanos, soy demasiado viejo como para desandar todo lo que
hice. Estoy demasiado débil como para ir a nuestras reuniones con gran
concurrencia, pero quiero que le digan a nuestro pueblo en todas partes
que se ha entregado otro rebelde.
"Ocurrió un verdadero cambio en la vida y en la experiencia de Stephen Smith, y fue recordado en sus últimos años como un adventista del
séptimo día amable, dulce e incondicional".
Por muchas razones, no vale la pena ignorar un mensaje claro del
Señor, ni en la década de 1850 ni en el siglo XXI.
7
"¡Dios conoce mi corazón!"
La evangelista mentirosa
El lugar: Vergennes, Míchigan. Elena de White tenía 26 años; Jaime,
32. A fines de mayo de 1853, los White hacían su primer viaje a Míchigan;
su hogar todavía estaba en Rochester, Nueva York. Battle Creek aún no
era un centro adventista. En Tyrone, Míchigan, Elena tuvo una visión
relacionada con varias empresas de observadores del sábado que ella,
por supuesto, todavía no había conocido.
Una porción de la visión tenía que ver con una mujer que profesaba
una santidad extraordinaria y que se estaba esforzando por darse a conocer a los nuevos creyentes de Míchigan. Todo lo que Elena sabía sobre
ella le fue revelado en esa visión de Tyrone justo después de que ella y
Jaime acababan de llegar al Estado. M. E. Cornell, un joven que recientemente había aceptado el mensaje del tercer ángel, había conocido a
la mujer pocos días antes de que los White llegaran a Míchigan, pero
no hizo mención de ella frente a los White. Cuando se enteró de lo que
Elena había escrito sobre la situación, le dijo al pastor Loughborough,
con quien estaba realizando reuniones de evangelización:
"-Ahora observaremos y veremos cómo salen Zas cosas".
No le dijo a Loughborough dónde vivía la mujer.
Cuando Elena de White le preguntó a Cornell sobre el
asunto, él respondió:
"-Si existe una mujer así, probablemente tú la hallarás,
ya que tienes conftrencias donde podrás ver a la mayoría,
si no a todos, los observadores del sábado del Estado".
Loughborough escribió posteriormente:
En la descripción escrita acerca de la mujer por parte de
la hermana White, no solo contó el proceder de la mujer,
sino también que, cuandofuese reprendida, pondría un
38
- Los que vieron ... y creyeron -
gesto santurrón, y diría: "Dios ... conoce ... mi... corazón".
Ella dijo que esta mujer estaba viajando por el país con un
joven, mientras que su esposo, un anciano, estaba en casa
trabajando para sustentarlos en su mal proceder. La señora
de rvhite dijo que el Señor le había mostrado que 'a pesar
de todas las pretensiones de santidad de la mujer, ella y el
joven eran culpables de violar el séptimo Mandamiento':
Con esta descripción de la mujer en el bolsillo, Loughborough esperó
con curiosidad para ver cuál sería el resultado del caso.
El 11 de junio llegaron a la casa donde debían ser recibidos en Vergennes. Loughborough recordó lo que ocurrió:
Cuando nos apeamos del carruaje, y estábamos parados
bajo un gran manzano frente a la casa, la hermana rvhite
le dijo a su esposo:
-Jaime, tenemos que ir a la iglesia a la que asiste esa
mujer que vi en la visión de Tyrone.
-¿Por qué? -dijo el hermano rvhite-. Esta no es la casa
donde vive ella, ¿verdad?
-No -dijo la hermana rvhite-, pero vi a este hombre y a
esta mujer en conexión con el caso. La mujer de esta casa
no tiene confianza en esa mujer, pero el hombre de aquí
piensa que ella tiene razón.
Loughborough continuó:
Pensé que se corría un riesgo muy grande en el asunto,
ya que no había habido intercambio de palabras sobre el
tema entre la hermana rvhite y estas personas.
Mientras aún estábamos debajo del árbol, el pastor
Cornell habló y d'ljo:
-El hermano Brigham está viniendo.
La hermana rvhite alzó la vista, mientras todavía estaban a unos cincuenta metros de distancia, y dijo:
-iOh! Los veo en conexión con este caso. Ninguno de
todos ellos tiene confianza en las ínfulas de esa mujer.
Luego llegó otro carruaje. Al observarlos, ella dijo:
-Este grupo está dividido con respecto al caso. Los del
asiento de adelante no tienen ninguna confianza en la mujer;
los del asiento trasero piensan que ella está en lo correcto.
-
"iDios conoce mi corazón!" -
39
Entonces apareció un tercer carruaje. Ella dijo:
-Todos ellos están bajo la influencia de la mujer.
Luego dijo:
-Esta debe ser la iglesia donde vive esa mujer, porque he
visto a todas estas personas en conexión con ese asunto.
"El sábado de mañana, la reunión se llevó a cabo en un amplio granero a casi cinco kilómetros de distancia de donde estaban alojadas las
visitas". Loughborough recuerda:
Mientras el hermano Ulhite predicaba, entraron un
anciano, un joven y una mujer. Los dos primeros sesentaron adelante, directamente alfrente del hermano Ulhite,
mientras que la mujer tomó asiento cerca de la puerta del
granero. Después de un breve sermón del hermano Ulhite,
la hermana Ulhite se puso de pie para hablar. Presentó sus
comentarios hablando del cuidado que deberían tener los
pastores para no arruinar la obra que se les asignó. Dijo
que Dios no podía llamar a una mujer a viajar por todo el
país con algún otro hombre que no fuese su esposo.
Finalmente, dijo:
-Aquella mujer que se acaba de sentar cerca de la puerta
afirma que Dios la ha llamado a predicar. Está viajando
con este joven que se acaba de sentarfrente al púlpito,
mientras que este anciano, su esposo ODios tenga piedad
de él!) se esfuerza grandemente trabajando en su casa para
ganar los medios que ellos utilizan para continuar con su
iniquidad. Ella profesa ser muy santa; estar santificada.
Con todas sus pretensiones y discursos sobre la santidad,
Dios me ha mostrado que ella y este joven han violado el
séptimo Mandamiento.
Todos en ese granero sabían que la hermana Ulhite
nunca había visto personalmente a estas personas hasta
que entraron en ese granero. La distinción que hizo de
las personas y su difinición del caso pesaron en favor de
su visión.
Ahora, todas las miradas se volvieron hacia la mujer
en cuestión, una tal Sra. Alcott. ¿cuál sería su reacción a
esta descripción explícita de su testimonio extraño y de
su adulterio?
40
- Los que vieron ... y creyeron -
Loughborough continuó:
Después de quedarse sentada durante un minuto, lentamente se puso de pie, puso una cara de santurrona, y dijo:
-Dios... conoce ... mi... corazón.
Eso fue todo lo que dijo, y se sentó. Eso fue justamente lo
que el Señor mostró (el28 de mayo) que diría la mujer. El
11 de junio hizo exactamente lo quefue dicho que haría, y
pronunció las mismas palabras predichas que diría cuando fuese reprendida, y nada más.
"Durante las semanas siguientes, creció la oposición, lo que llevó al
joven implicado a regresar a Canadá. Antes de irse, uno de los adventistas
le preguntó si la visión de Elena de White relacionada con él era cierta.
Él respondió:
"-Esa visión era muy cierta''.
Cuando un profeta está en nuestro medio, "vuestro pecado os alcanzará". ¿Qué sucedería en cualquiera de nuestras iglesias hoy si Elena de
White llegara, pasara a la plataforma y echara una mirada alrededor?
8
La incursión de Waukon
La recuperación de dos predicadores cansados
¿se podía cruzar el río Mississippi? Algunos decían que no y otros
decían quizá, ipero nadie dijo que sí! Una visión marcó la diferencia.
El primer fin de semana de diciembre de 1856, Elena, ahora de 29
años, y Jaime, con 35, estaban en Round Grove, Illinois, para encontrarse
con creyentes adventistas, algunos de los cuales habían conocido en Nueva
Inglaterra. "Era una época en la que 'el Oeste' se estaba abriendo para los
colonos". En comparación con Nueva Inglaterra, la tierra fértil a ambos
lados del río Mississippi parecía el cielo. Muchos adventistas les habían
dicho adiós a las fincas pedregosas de Nueva Inglaterra, donde la pobreza
era generalizada, y habían seguido el llamado de las ricas praderas. Entre
los que se habían dirigido hacia el oeste estaban las familias Andrews,
Stevens y Loughborough: algunos de los fuertes líderes adventistas.
Por ejemplo, el matrimonio Loughborough, a los 25 años de edad,
dedicó el año 1856 a realizar reuniones en carpas durante las noches y a
trabajar durante el día en tareas tales como cultivar heno y cosechar, y se
esforzaban por ganar un promedio de cuatro o cinco dólares por semana.
Después de asentarse durante el otoño, Mary Loughborough dijo: .
-Esto es demasiado; ya no podemos vivir más así.
John había sido carpintero, y le dijo a Mary que irían a Waukon y se
reencontrarían con John Andrews y su familia, que ya estaban en Iowa.
En Iowa, descubrieron que Andrews, ya el mejor teólogo adventista
a los 28 años de edad, estaba muy enfermo. John Loughborough, desanimado y cansado después de un año de realizar reuniones en carpa,
tenía poca energía para ayudar a reintegrar a las familias titubeantes
que se estaban comprando toda la tierra y trabajaban duro, siguiendo el
atractivo de la prosperidad.
Ahora, regresemos a Round Grove, Illinois: El9 de diciembre, Elena
de White tuvo una visión: "Se me mostró que un grupo de hermanos de
Waukon, Iowa, necesitaba ayuda; que la trampa de Satanás debía ser
42
- Los que vieron ... y creyeron -
quebrada, y que estas preciosas almas debían ser rescatadas. Mi mente
no se pudo tranquilizar hasta que decidí visitarlos".
Pero el invierno había comenzado, y "había que cruzar el río Mississippi, en barco o por sobre el hielo". Los White se hospedaban en casa
de los Hart y los Everts, otras de las familias que habían venido de Nueva
Inglaterra. Estos dos hombres habían aprendido a confiar en las convicciones de Elena, y fueron impresionados a llevar a los White a Waukon
en trineo.
Elena de White relata la historia:
En ese momento era adecuado viajar en trineo, e hicimos
los preparativos para ir con dos caballos y un trineo; pero
como llovió durante 24 horas, y la nieve estaba desapareciendo rápidamente, mi esposo pensó que el viaje debía
suspenderse. Sin embargo, mi mente no podía descansar;
estaba inquieta con respecto a Waukon.
El hermano Hart me dijo:
-Hermana White, ¿y Waukon?
-Iremos -le dije.
-Sí -respondió-, si el Señor obra un milagro.
Muchas veces aquella noche me acerqué a la ventana
a observar el clima, y casi al despuntar el alba hubo un
cambio, y comenzó a nevar. A la tarde siguiente, a las 5 en
punto, nos pusimos en marcha en dirección a Waukon ...
Al llegar a Green Vale, fllinois, tuvimos reuniones con los
hermanos allí.
Pero en Green Vale "se desató [otra] nevada, que demoró el viaje
casi una semana. El lunes 15 de diciembre, Jaime White informó [en el
periódico de la iglesia]: 'Esperamos poder abrirnos camino y proseguir
nuestro viaje ... en pocos días'.1 En su informe siguiente habló de la continuación del viaje cuando se abrieron las rutas, y que cuando paraban
en hoteles hacían reuniones para presentar el mensaje del tercer ángel.
Pero tuvieron que rechazar invitaciones para realizar reuniones en los
poblados. La misión de ellos, escribió, era 'visitar a los hermanos y las
hermanas que se habían mudado de Maine, Massachusetts, Vermont y
Nueva York, unos treinta en total'...
"Al acercarse al río Mississippi, hicieron muchas averiguaciones para
cruzar. Nadie pensaba que pudiera hacerse tal cosa. Los caballos se enterraban en la nieve endurecida a cada paso. El hielo sobre el río mayormente estaba compuesto de nieve, y había aproximadamente treinta
-
La incursión de Waukon
-
43
centímetros de agua que se extendían sobre ella. Elena de White relató
la impresionante experiencia:
Cuando llegamos al río, el hermano Hart se incorporó en
el trineo y dijo:
-¿Es Iowa o regresamos a fllinois?...
-Sigue adelante, confiando en el Dios de Israel.
Nos aventuramos sobre el hielo, orando a medida que
avanzábamos, y fuimos transportados a salvo de un
lado al otro. Al ascender por la margen del río del lado de
Iowa, nos unimos en alabanza al Señor. Una cantidad de
personas nos dijo, después de que hubimos cruzado, que
ninguna cantidad de dinero los hubiese tentado a aventurarse sobre el hielo, y que varios equipos habían penetrado
el hielo, y los conductores apenas escaparon con vida.
Después de pasar el sábado con los miembros de iglesia en Dubuque, a
diez kilómetros del cruce, continuaron hacia Waukon, que todavía estaba
a cuatro días de distancia en trineo.
Elena escribió: "Nunca presencié un clima tan frío. Los hermanos
se miraban entre sí para ver si se estaban congelando; y a menudo escuchábamos: 'Hermano, su cara se está congelando, será mejor que se frote
la escarcha lo antes posible'. 'Su oreja se está congelando'; o 'Su nariz se
está congelando' ".
Obviamente, Elena encontraba poco tiempo para escribir, pero el
miércoles, al aproximarse a Waukon, despachó una pequeña nota dirigida
a los 'Queridos amigos de casa':
Aquí estamos, a 22 kilómetros del otro lado de Waukon.
Todos estamos bastante bien. Hemos tenido un tiempo más
bien tedioso para llegar hasta aquí. Ayer por kilómetros no
había huellas. Nuestros caballos tenían que abrirse camino por la nieve, muy profunda, pero salimos adelante.
Oh, a qué precio hemos hecho este viaje. El lunes pasado no pudimos conseguir comida decente y no probamos
ni un bocado más que una manzanita de la mañana
hasta la noche. La mayor parte del tiempo nos hemos
sentido cómodos, pero este es el clima frío más amargo
que hayamos experimentado alguna vez.
44
- Los que vieron ... y creyeron -
Después de llegar a Waukon, "Elena escribió:
Llegamos a Waukon el miércoles de noche y descubrimos que casi todos los observadores del sábado se
lamentaban de que hubiéramos llegado. Existía mucho
prejuicio con respecto a nosotros, porque se habían dicho
muchas cosas que tendían a perjudicar nuestra influencia. (En Iowa en ese entonces, The Messenger Party [El
grupo del mensajero], dirigido por los ex pastores J. M.
Stephenson y D. P. Hall, habían planteado muchas argumentaciones contra los White.) Sabíamos que el Señor
nos había enviado, y que allí tomaría la obra en sus
propias manos.
'~ños después, Loughborough dio una descripción vívida de la reunión de los viajeros con los creyentes de Waukon:
Mientras el hermano Hosea Mead y yo estábamos
trabajando en un almacén de Waukon, un hombre que
levantó la vista me vio y me preguntó:
-¿conoce a un carpintero por aquí llamado Hosea
Mead?
-Sí, señor, está aquí trabajando conmigo -respondí.
El hermano Mead d'ljo:
-Esa es la voz de Elon Everts.
Entonces se acercó y miró hacia abajo, y el hermano
Everts dijo:
-Baja; el hermano y la hermana White y el hermano
Hart están aquí afuera en el trineo.
Cuando llegamos al trineo, la hermana White me saludó con la pregunta:
-¿Qué haces tú aquí, Elías?
Asombrado por tremenda pregunta, respondí:
-Estoy trabajando con el hermano Mead en obras de
carpintería.
Por segunda vez ella repitió:
-¿Qué haces tú aquí, Elías?
Ahora me sentía tan avergonzado con esa pregunta, y
la asociación de mi vida con Elías, que no supe qué decir.
Era evidente que había algo detrás de todo esto, y que
debía oír más al respecto.
-
La incursión de Waukon
-
45
Por tercera vez repitió la pregunta:
-¿Qué haces aquí, Elías?
Fui llevado por estas preguntas escuetas a considerar
muy seriamente el caso de Elías, lejos de la obra directa
del Señor, escondido en una cueva ... El saludo me convenció completamente de que iba a haber un cambio, y una
'vuelta' del trabajo en el que estaba ocupado".
Jaime y Elena de White dedicaron el sábado y el domingo a reunirse
con los creyentes desanimados y a analizar la aplicación del mensaje laodicense. Durante "una de las reuniones, Elena de White fue arrebatada en
visión, y en visión repitió solemnemente las palabras 'iVolveos a mí y yo
me volveré a vosotros!, ha dicho Jehová'. Estas palabras trajeron consuelo
y esperanza ... [para] Mary Loughborough, que ... se había quedado sola
en casa mientras su esposo salía a predicar, y fue tentada a murmurar".
En un testimonio poderoso, "ella confesó su amargura de espíritu [...] y
exhortó a su esposo a regresar al ministerio.
"En otra reunión, John Andrews renovó su consagración a Dios y al
servicio en la causa del Señor". Cada miembro del grupo aceptó el ánimo
y la reprensión, y se restableció su concentración para servir al Señor, en
vez de fijarla en alcanzar la prosperidad.
El largo y peligroso viaje invernal de Jaime y Elena en un trineo
abierto para pasar algunos días en Waukon fue de lo más provechoso.
iPensemos en esto! Además de restablecer una iglesia creciente en Iowa,
dos líderes especiales en el desarrollo de la Iglesia Adventista fueron
recuperados. John Andrews, después de recuperar la salud, regresó aBattle Creek. Se convirtió en un notable estudioso de la Biblia e historiador,
y fue el primer misionero de ultramar.enviado por la Iglesia Adventista
del Séptimo Día. Hoy recordamos a este ,hombre que le dio la espalda
a la posibilidad de amasar una fortuna en Io~a cuando pensamos en
la Universidad Andrews. John Loughborbugh regresó con su valiente
esposa e ingresó en una destacada carrera como presidente de cinco
asociaciones, tesorero de la Asociación General, sembrador de iglesias
en muchos campos y autor de varios libros que son muy valorados en
la actualidad.
Nunca más vacilaron estos dos hombres. Todavía les esperaban pruebas y bendiciones, perplejidades y providencias, pero nunca volvieron
atrás. En una de las reuniones de Waukon, el joven Loughborough se
levantó y dijo:
-iGuardé el martillo! iClavé el último clavo! De ahora en adelante
mi mano sostendrá la espada del Espíritu, y nunca la abandonará. iLo
46
- Los que vieron ... y creyeron -
prometo ante Dios!
Elena de White sabía del valor de los hombres y las mujeres. El viaje
invernal a Waukon fue solo un ejemplo del peligro y la incomodidad que
debió soportar para alentar a creyentes cansados y descorazonados, en
este caso a dos predicadores jóvenes con gran potencial. iPeligro que
hasta incluyó cruzar el río Mississippi en trineo en medio del invierno!
1
Review and Herald, 1° de enero de 1857.
9
Joven predicador finalmente
satisfecho
Daniel Bourdeau
Mientras todavía era adolescente, Daniel Bourdeau hacía obra misionera en Canadá para los bautistas cuando se enteró de que sus padres
y su hermano mayor (Augustin C.) se habían unido a los adventistas
sabatarios en el norte de Vermont.
Aunque Daniel hizo todo lo posible para disuadir a su familia de
seguir a los adventistas, ellos terminaron persuadiéndolo a él en cuanto
al sábado y otras doctrinas. Pero Daniel seguía siendo "incrédulo en
las visiones". Esa incredulidad se convirtió en certeza el 21 de junio
de 1857, cuando observó a Elena de White en visión en Buck's Bridge,
Nueva York. Se le dio permiso a Daniel para examinar a Elena durante
la visión. Este es su informe:
Para satisfacer mi mente en cuanto a si respiraba o no,
primero puse la mano sobre su pecho lo suficiente como
para saber que no había más exhalación de los pulmo"
nes de la que habría habido si hubiese sido un cadáver.
Entonces tomé mi mano y la coloqué sobre su boca, apretando sus fosas nasales con el índice y el pulgar, de modo
que era imposible que ella exhalara o inhalara aire, aun
si ella lo hubiese querido. La sostuve así con mi mano
unos diez minutos, tiempo suficiente como para sofocarla
en circunstancias normales; ella no se vio afectada en lo
más mínimo por esta prueba.
48
- Los que vieron ... y creyeron -
Desde que presencié esteftnómeno maravilloso, ni
una vez me sentí inclinado a dudar del origen divino de
sus visiones.*
Un año después, Daniel fue ordenado. Siempre manteniendo las
prioridades en orden, dedicó los siguientes tres años a buscar esposa. En
1861 se casó con Mariqn Saxby en Bakersfield, Vermont. La ceremonia
tuvo lugar en una casa particular en la que ofició Jaime White.
"Como el servicio se realizó tarde en el día, los recién casados aceptaron la invitación de su anfitrión de pasar la noche de bodas en su casa.
Los White también se quedaron como huéspedes.
"Cuando Elena de White subió las escaleras para descansar, vio a un
joven muy nervioso yendo y viniendo frente a la puerta cerrada de un dormitorio. Ella sospechó que había un problema. Dulcemente le dijo al joven
novio (según la novia citó la narración de su esposo sobre el incidente):
"-Daniel, dentro de la habitación hay una joven asustada en la cama,
petrificada de miedo. Ahora entra hasta donde está ella inmediatamente,
ámala y confórtala. Y, Daniel, trátala con dulzura, y trátala con ternura,
y trátala con amor. Eso le hará bien.
"Entonces agregó:
"-Daniel, itambién te hará bien a ti!
''Aquí tenemos a una mujer victoriana que tenía sus prioridades en orden; y esa pareja joven" estuvo inmensamente agradecida desde entonces.
Daniel tenía buenas razones para confiar en Elena de White. Un año
después, en 1862, escribió un artículo para el periódico de la iglesia, Review
andHerald, que respondía algunas de las preguntas básicas que la gente a
veces formulaba contra las mujeres que recibían visiones, así como también
contra mujeres que hablaban en la iglesia. Terminó su estudio con este
llamado: "Tenemos estas producciones que consideramos sagradas y, antes
de consentir en rechazarlas, nuestros oponentes tendrán que presentar
pruebas palpables de que son espurias".
En 1868, Daniel partió para California con J. N. Loughborough, respondiendo a una petición de un grupo de adventistas de San Francisco. Los
dos comenzaron la obra organizada de la Iglesia Adventista del Séptimo
Día en California. En 1870 regresó al Este, retomando la obra entre las
audiencias de habla francesa e inglesa. Organizó iglesias en Wisconsin y
* Bourdeau no basó su confianza en Elena de White solo en los fenómenos fisicos, y
nadie debería hacerlo. Después de todo, Satanás tiene poderes sobrenaturales, y él puede
falsificar todos los fenómenos fisicos que generalmente se asocian con los profetas, tanto
en la Biblia como en la vida de Elena de White. La Iglesia Adventista del Séptimo Día
siempre ha sostenido que los fenómenos fisicos pueden ser evidencia del don profético,
pero no necesariamente prueba de que cualquier fenómeno en particular es del Señor.
-
Joven predicadorfinalmente satitifecho
49
en Illinois. Luego, en 1882, él y su hermano, A. C., partieron hacia Europa,
donde estuvieron siete años, realizando obra evangélica en lugares como
Francia, Suiza, Córcega, Italia, Alsacia y Lorena.
Daniel concluyó su carrera ministerial como un notable predicador y
escritor, siempre consciente de sus experiencias personales con la mensajera de Dios, que iluminó la Biblia de una manera totalmente nueva. Un
testigo de primera mano es la mejor evidencia de la verdad, y la reacción
en cadena de ese testimonio sigue su curso para siempre.
1
1
Tierna carta a un joven con
adicciones
Victory Jones
Elena de White hablaba ante audiencias grandes y pequeñas, muchas
veces a líderes de iglesia, agobiados por las preocupaciones, que estaban
lidiando con importantes problemas administrativos o de personal. Pero
también hacía tiempo para escribir cientos de cartas a jóvenes individuales que luchaban con problemas personales.
Victory Jones fue uno.de esos jóvenes que recibieron un mensaje de
la mensajera de Dios. En 1861, Elena de White tenía 34 años y estaba
muy ocupada con viajes extensos: Pero tuvo tiempo para Victory Jones,
miembro de la iglesia de Monterey, Míchigan, que era adicto al tabaco
y al alcohol.
Victory recibió una carta que incluía estas palabras: "Si hubieses
abandonado el tabaco completamente y nunca hubieses tocado esa mala
hierba asquerosa después de empezar la últíma vez, podrías haber vencido
muy fácilmente tu apetito por la bebida fuerte".
Después de otros consejos, concluyó la carta con este sincero llamado,
haciendo un juego de palabras con su nombre:
He tratado de escribirte lo que me fue mostrado. Ahora,
querido amigo, te suplico, ¿te aferrarás a este aliciente
que el Señor te presenta ahora? ¿Echarás mano de la
esperanza que el Señor te da ahora? Sentimos profundamente por ti. No podemos dejar que perezcas. Queremos
que vayas con nosotros.
Oraremos por ti. Ora y vela por tu cuenta. Busca el
poder de la verdad en el alma. Una mera teoría de la
verdad nunca te fortalecerá para vencer tus fuertes há-
-
Tierna carta a un joven con adicciones -
51
bitos. La vida eterna está delante de ti. Por gratificar un
apetito depravado, no hagas que tu familia sea desdichada, no alejes toda la felicidad de ellos y no seas miserable
contigo mismo, porque al final recibirás la paga del
pecado, que es la muerte...
Debo terminar. Mi oración es que demuestres ser digno
de tu nombre. Sé un vencedor y camina con Jesús en la
luz, porque serás hallado digno, lavado y emblanquecido
en su sangre. 1
¿Te gustaría recibir una carta similar de aliento cuando enfrentas
una tentación abrumadora? Puedes recibir la misma ayuda que recibió
Victory; tan solo coloca tu nombre en esta carta.
1
Carta 1, 1861.
ll
Ningún derecho a estar
en el púlpito
El predicador bígamo
No todos los mensajes de Elena de White fueron dados en forma privada, personalmente. A veces, tenían que hacerse en público para el bien
de todos los involucrados. Pero no tanto para el predicador traicionero
y tramposo en el púlpito de la reunión campestre de Wisconsin en 1870.
El predicador "ya había comenzado [su sermón] cuando llegaron los
White [a la carpa]. Elena y Jaime se detuvieron por un momento mientras
ella le decía algo a Jaime. [:..] Los que estaban más cerca oyeron que Jaime
dijo: 'iDe acuerdo!' Fueron hasta el pasillo central pero Elena de White
no se sentó. Miró al predicador, lo señaló con el dedo y dijo:
-Hermano, he oído su voz en visión y, cuando esta mañana entré en
esta carpa, reconocí esa voz y el Señor me dijo que sin vacilar, cuando oyera esa voz, le diera el mensaje que me dio para usted, y tendré que hacerlo.
"El predicador se detuvo. Elena de White continuó:
"-Hermano, conozco a una mujer en Pennsylvania con dos niñitos.
Esa mujer le dice a usted esposo y esos niños lo llaman a usted papá, y
lo están buscando por todas partes y no pueden encontrarlo. No saben
dónde está. Aquí hay otra mujer con seis hijos que se aferran a sus faldas,
y ella lo llama esposo y ellos le dicen papá. Hermano, usted no tiene nada
que hacer detrás de ese púlpito.
"El predicador se lanzó hacia el pliegue de la carpa y desapareció.
Su hermano, que estaba sentado entre la concurrencia, se levantó de un
salto y les dijo a los oyentes estupefactos:
"-Hermanos, lo peor de esto es que es totalmente cierto".
"El pastor Armitage contó esta historia en la iglesia de Redlands,
California, a comienzos de 1931, donde G. B. Starr era pastor". Pero hay
más. "Cuando el pastor Armitage contó esto en Redlands, también dijo
- Ningún derecho a estar en el púlpito
53
que cuando su madre murió, su padre se casó con la hermana de esa
mujer de Wisconsin con los seis hijos. Los seis eran miembros de iglesia
y uno de ellos 'ocupaba un lugar muy importante en el Hospital de Loma
Linda' ". Y ahora eran sus primos.
Entonces, el hermano Armitage hizo que la historia fuese aún más
dramática. "Señaló a la madre que había sido engañada por su esposo
bígamo [que ahora era su tía]; ella estaba en la iglesia ese día visitando a
su hija, uno de los seis hijos".
Una carta justo a tiempo
Cómo se salvó el pastor Cornell
El pastor Merritt E. Cornell nació en 1827, el mismo año que Elena
de White. Fue guiado a la Iglesia Adventista del Séptimo Día por José
Bates en 1852 e inmediatamente se dispuso vigorosamente a proclamar su
nueva fe. Él y el pastor Loughborough condujeron las primeras reuniones
adventistas en carpa en Battle Creek en 1854, un año antes de que los
dirigentes de la iglesia trasladaran la casa editora y sus casas de Rochester,
Nueva York, a Battle Creek. Él y Loughborough, desde luego, lideraban.
En junio de 1871, en ese entonces con 44 años, Cornell se sumó a
Loughborough en las reuniones de evangelización llevadas a cabo en San
Francisco, California. Se bavtizaron más de cincuenta personas y se organizó una iglesia. La esposa de Cornell, Angeline, había estado trabajando
con él como la primera instructora bíblica adventista del séptimo día y
a veces se quedaba para enseñarles a los nuevos conversos los principios
fundamentales del mensaje adventista. Y quizás eso creó un incidente en
San Francisco que probablemente salvó su matrimonio.
No obstante, a medida que las reuniones progresaban, Cornell se
volvió descuidado en su conducta, especialmente con las damas. Loughborough, con la dulzura de Pablo, amonestó a Cornell a evitar toda apariencia de mal. Para gran sorpresa de Loughborough, Cornell asumió
una actitud atrevida y desafiante, al declarar que tenía derecho a hacer
lo que quisiera.
Loughborough regresó al condado de Sonoma para supervisar unas
cinco iglesias que había organizado con D. T. Bourdeau. Cuando Loughborough regresó a San Francisco, inmediatamente vio que la iglesia era
un hervidero. Cornell tenía amigos que simpatizaban totalmente con él,
pero un grupo mayor veía la crisis que se avecinaba. La situación empeoró
rápidamente. Cornell era una mariposa a punto de ser consumida por las
llamas. Muchos antes y después de él no pudieron resistir la atracción fatal.
El sábado 27 de enero de 1872, la iglesia decidió que era necesaria una
-
Una carta justo a tiempo
-
55
investigación. Había que hacer algo decisivo para salvar la reputación de
la joven iglesia. El momento se fijó para la mañana siguiente, el domingo
28 de enero, a las 9 en punto.
El domingo de mañana, cuando Loughborough iba de camino a la
reunión, se encontró con Cornellllorando y diciendo que no iba a ir a la
reunión. Loughborough respondió:
"-¿No irás a la reunión? iLa reunión tiene que ver con tu caso!
"-Ya lo sé -dijo Cornell-, peroestoytotalmente equivocado. Tú tienes
razón con la postura que has tomado con respecto a mí. Aquí hay una
carta de confesión que escribí para la iglesia; llévala y léesela. Será mejor
para ustedes, y mejor para los que podrían estar inclinados a simpatizar
conmigo, si yo no estoy allí".
Loughborough, totalmente sorprendido, preguntó:
"-¿Qué ocasionó este gran cambio en ti desde ayer?"
Cornell respondió:
"-Fui a la oficina de correos anoche, después del sábado, y recibí
una carta de la hermana White, desde Battle Creek, Míchigan. Es un
testimonio que escribió para mí.
"Me la entregó y me dijo:
"-Léela, y verás cómo ve mi caso el Señor".
Este es el mensaje de Elena de White:
Battle Creek, Míchigan, 27 de diciembre de 1871. Apreciado pastor Cornell: ~ntes que Ud. reciba esta carta,
podrá notar que el Señor ha visitado una vez más a su
pueblo dándome un testimonio. En la visión me fue mostrado que Ud. no estaba parado debajo de una luz clara, y
corría el peligro de causar oprobio a la causa de Dios por
conducirse de la manera como cree que puede conducirse.
El designio de Satanás es causar su ruina ...
Se me mostró que precisamente ahora Ud. debería ser
muy circunspecto en su comportamiento y en sus palabras. Está siendo observado por enemigos. Es muy débil,
aunque aparenta ser un hombre muy fuerte cuando mueiJe
las multitudes. [.J Si no es cuidadoso, acarreará un oprobio sobre la causa de Dios que después no podrá borrar. 1
"Cornellle pidió a Loughborough que le dijera a la iglesia que había recibido un testimonio de la hermana White, amonestándolo por su
conducta, y que él lo aceptaba, ya que era cierto. La iglesia se salvó de la
división. Para todos fue evidente que hubo sincronización divina en esta
- Los que vieron ... y creyeron -
56
experiencia única. Loughborough hizo algunas verificaciones, y escribió:
f
Esto fue parte de una visión dada a la señora de White
en Bordoville, Vermont, ellO de diciembre de 1871. Ella
comenzó a redactar la parte relacionada con el caso de
este hermano el27 de diciembre de 1871 pero, por alguna
razón, la conclusión del documento se demoró hasta el18
de enero de 1872,jecha en que.fue terminado y despachado
desde Battle Creek. Luego se requerían nueve días para
recibir cartas por tierra desde Míchigan hasta California ...
Al momento de la visión [a principios de diciembre], no
había más que una sombra de lo que realmente sucedía
cuando el testimonio llegó a San Francisco. Se verá, a
partir de una comparación de.fechas, que el clímax del
caso de San Francisco se dio después de que el testimonio
escrito partiera del lugar de origen. Nuestros hermanos
de San Francisco vieron inmediatamente que ninguna
persona podría haber escrito a Battle Creek para comunicarle la información a la señora de White a tiempo
para que ella escribiera esta carta, porque la situación no
existía entonces.
"Loughborough [...] naturalmente sintió curiosidad en cuanto al momento exacto del mensaje. Esto es lo que descubrió con su investigación:
A una hora muy temprana de la mañana del18 de
enero de 1872, la señora de Whitefue despertada con el
testimonio antes mencionado vívidamente impreso en
su mente. La impresión fue tan marcada como si hubiese sido expresada en forma audible: ''Escribe inmediatamente ese testimonio para California, y envíalo en
el próximo correo; es necesario". Cuando esto se repitió
por segunda vez, ella se levantó, se vistió a toda prisa y
terminó el escrito.
Justo antes del desayuno se la entregó a su hijo, Guillermo, diciendo:
-Lleva esta carta a la oficina de correos, pero no la
pongas dentro del buzón. Entrégasela aljife de correos, y
asegúrate de que la ponga en la bolsa del correo que sale
esta mañana.
Después él dijo que pensaba que las instrucciones de
-
Una carta justo a tiempo -
57
ella eran un tanto extrañas, pero no hizo preguntas e hizo
como se le pidió y "me aseguré de que la carta.fuese colocada en la bolsa del correo".
¿Qué hemos aprendido? Que si Elena de White hubiese escrito la
visión en diciembre de 1871 y la hubiese despachado como era su costumbre, el mensaje habría tenido poca aplicación. Si la carta llegaba el
lunes siguiente, un día después de la reunión del domingo en la iglesia, la
iglesia se habría dividido y hubiese quedado con sentimientos amargos.
Esa carta le llegó al pastor Cornell precisamente en el momento indicado.
El pastor Cornell aceptó la amonestación, dejó su conducta inapropiada y continuó su ministerio evangélico con el pastor Loughborough.
Pocos años después, Elena de White escribió: "He sido despertada de
mi sueño con una sensación vívida de asuntos previamente presentados a
mi mente; y he escrito a medianoche cartas que han cruzado el continente,
y, llegando en un momento de crisis, han evitado gran desastre a la causa
de Dios. Esta ha sido mi obra durante muchos años". 2
Carta 23, 1871, publicada en Testimonios acerca de conducta sexual,
adulterio y divorcio, pp. 189, 190.
2
Consejos para la iglesia, p. 166.
1
El barco fantasma
Dudley Canright
Dudley M. Canright era un orador y escritor enérgico y elocuente, que
tenía muchas habilidades para ofrecer a la Iglesia Adventista. Jaime White
reconoció el potencial de Canright cuando, a los 21 años, Canright pidió
consejo en relación con su futuro. White dedicó casi una hora para animarlo. Además, le dio una Biblia y un par de láminas a Canright diciendo:
"-Dudley, toma estos, sal y pruébalos. Cuando quedes satisfecho de
que has cometido un error, devuélvemelos".
En el próximo mes de mayo, White se encontró con Canright y le
preguntó:
"-¿Qué tal esas láminas y la Biblia?"
---X Canright respondíó:
"-Hermano White, usted las ha perdido".
En 1865, cuando tenía 26 años, Canright fue ordenado. Primero
trabajó con evangelistas destacados, y posteriormente se abrió paso por
su cuenta en todo el Medio Oeste de los Estados Unidos y en algunos
Estados del Este. Canright pronto fue presidente de Asociación y trabajó
en la junta de la Asociación General durante dos años.
Pero, algunos años después, las emociones de Canright superaron
su buen juicio, y lo irritaban el control administrativo y la estrecha conducción de Elena de White. Dudley Canright era un hombre de muchas
habilidades, pero era atormentado por períodos recurrentes de dudas y
desánimo. En el otoño de 1882, dejó de predicar y se fue como agricultor
a Otsego, Míchigan.
Para septiembre de 1884 (dos años después), en la reunión campestre
de Jackson, Michigan, Canright confesó públicamente su error de dejar
la predicación y declaró que ahora sus dudas se habían disipado. Regresó
a la predicación como un hombre cambiado. El 7 de octubre de 1884, la
Review and Herald publicó un artículo en el que Canright repasaba sus
preocupaciones. Se remitió once años atrás a un testimonio de Elena de
-
El barcofantasma -
59
White que él y su esposa habían rechazado. Y a otro de 1879 que habían
rechazado. Canright escribió que, después de reexaminar estas experiencias, ahora veía que "había dado un significado erróneo a algunas cosas, y
que otras cosas eran verdaderamente ciertas. [...] Realmente puedo decir
que creí en los testimonios. Todos mis resentimientos hacia la hermana
White desaparecieron en un momento, y sentí un amor más tierno hacia
ella. Todo se veía diferente".
Al referirse a la reunión campestre de Jackson, escribió:
Sentí en mi corazón el cambio más sorprendente que
alguna vez haya experimentado en mi vida. Fue una reversión completa de todos mis sentimientos. [. ..]Quiero
decir a todos mis amigos que ahora no solo acepto sino
también creo que los testimonios son de Dios. Sabiendo
la oposición que sentía por ellos, este cambio en mis
sentimientos es más asombroso para mí que para los
demás.
Estoy plenamente satiifecho de que mi propia salvación y mi utilidad en la salvación de otros depende de
que yo esté conectado con este pueblo y esta obra. Y aquí
adopto una postura para arriesgar todo lo que soy, o tengo, o espero, en esta vida y en la vida venidera, con este
pueblo y esta obra.
Durante los años en que Canright fue un fiel adventista también trabajó como profesor de Biblia en el Colegio de Battle Creek y como~autor
de lecciones de escuela sabática, dos libros y muchos folletos. Elena de
White estuvo varias veces en la casa de Canright y escribió alegremente
sobre sus conversaciones.
Pero, para fines de 1886, las antiguas debilidades reaparecieron después de que Canright hubo pasado por varios puestos administrativos,
incluyendo el de presidente de la Asociación de Míchigan.
Su amigo íntimo, George I. Butler, escribió en la revista de la iglesia
en diciembre de 1887, en relación con la deserción más reciente, y la
última, de Canright, en febrero de 1887: "Cuando todo iba sobre ruedas,
generalmente podía ver las cosas con claridad. Cuando era maltratado,
como siempre pensaba cuando las cosas no salían como a él le convenían,
las evidencias de nuestra fe comenzaban inmediatamente a opacarse".
Estos acontecimientos fueron el origen de una carta que Elena de
White le escribió a Canright desde Basilea, Suiza:
60
- Los que vieron ... y creyeron -
Estimado hermano M [Canright]: Anoche tuve un sueño
impresionante. Me parecía que usted estaba en una fuerte
embarcación navegando por aguas muy agitadas. A veces
las olas pasaban por encima del puente y usted quedaba
empapado de agua. Usted dijo: ''Me bajaré; este barco se
hunde". ''No -dijo alguien que parecía ser el capitán-, este
barco va a llegar al puerto. Nunca se hundirá". Pero usted
contestó: ''Seré arrebatado por las olas. No soy ni capitán
ni segundo qficial; ¿a quién le importa lo que haga? Deseo
aprovechar la oportunidad de llegar a ese barco que se ve
más allá". Dijo el capitán: ''No lo dejaré ir allí; porque sé
que aquel barco encallará en las rocas antes de llegar al
puerto': Usted se enderezó y dijo con tono positivo: ''Este
barco ha de naufragar; lo puedo ver tan claramente como
si ya hubiese sucedido". El capitán lo miró con ojo escrutador y dijo firmemente: ''No permitiré que usted pierda su
vida subiendo a aquel barco. Su maderamen está carcomido, y es una embarcación engañosa. Si usted tuviese más
conocimiento, podría discernir entre lo espurio y lo genuino, lo santo y lo que está destinado a la ruina completa".
~desperté; pero este sueño me induce a escribirle. Me
agitaron sentimientos profundos acerca de algunas de
estas cosas, cuando llegó una carta diciéndome que usted
estaba "bajo gran tentación y prueba." ¿De qué se trata,
hermano M? ¿Lo está tentando nuevamente Satanás?
¿Está permitiendo Dios que se vea puesto en el mismo
lugar donde fracasó antes? ¿Permitirá usted ahora que
la incredulidad se apodere de su alma? ¿Fracasará usted
cada vez, como los hijos de Israel? iDios lo ayude a resistir
al diablo y salir más fuerte de cada prueba de sufe!
Tenga usted cuidado acerca de los pasos que dé. Haga
sendas rectas para sus pies. Cierre la puerta a la incredulidad, y haga de Dios sufortaleza. Si se halla perplejo, guarde silencio; no dé ningún paso en la oscuridad. Me siento
profundamente preocupada por su alma. Esta puede ser
la última prueba que Dios le conceda. No avance un solo
paso en el camino que lleva hacia la perdición. Aguarde, y
Dios lo ayudará. Sea paciente, y aparecerá la clara luz. Si
usted cede a las impresiones, perderá su alma, y el alma es
de gran valor para Dios. 1
-
El barco fantasma
-
61
Lamentablemente, Canright no hizo caso de la advertencia de esta
carta. ¿Qué fue de Canright, que en ese entonces todavía tenía cuarenta
y algo de años? Durante algunos años, predicó para las iglesias bautistas,
pero nunca se destacó en sus reuniones. Sus congregaciones disminuyeron, y finalmente dedicó su tiempo a escribir libros que atacaban a los
adventistas del séptimo día y a vender libros para niños. Su libro de 1889,
Seventh DayAdventism Renounced [Renuncia al adventismo del séptimo
día], fue analizado y refutado en In Difense ofthe Faith [En defensa de
la fe] (1933), de W. H. Branson, al igual que por otros autores.
En sus últimos años, Canright fue recordado como un "señor mayor
alto, mal vestido" que entraba a la cocina del Sanatorio de Battle Creek
por la puerta de atrás con su "cupón de comida de obsequio" para comer
en la mesa de los empleados. "Se paraba derecho, y su porte indicaba que
había sido un hombre de cierta distinción. [...] El cabello largo, las uñas
sucias sin cortar, el atuendo descuidado, la falta de un ojo, hacían que
este extraño fuese un tanto repulsivo para las muchachas que le servían".
Lo llamaban el "señor X", hasta que se informaron mejor.
El24 de julio de 1915, Dudley M. Canright asistió al funeral de Elena
de White en Battle Creek. Elena había predicho el peligroso peregrinaje
de Canright y lloró cuando él escogió abordar el barco fantasma de otra
confesión religiosa. Testigos presenciales describieron la conmovedora
congoja incontrolable de Canright en su última despedida de la señora
de White. Después de que la larga fila de asistentes al funeral hubo
pasado por el ataúd, Canright le dijo a su hermano, Jasper,Jiú.e le gustaría darle una despedida más, la última. Jasper más tarde escribió: "Mi
hermano apoyó su mano al costado del ataúd y, mientras las lágrimas
le corrían por las mejillas, dijo entrecortadamente: 'Se ha ido una noble
mujer cristiana' ".
1
Joyas de los testimonios, t. 2, pp. 216, 217.
Señales masónicas secretas
N. D. Faulkhead
Era diciembre de 1892, y el primer período de la Escuela Bíblica
Australiana acababa de terminar, para gran alegría de Elena de White.
Ella había invertido fondos personales para establecer la escuela, y había
dado mucho apoyo personal a los nuevos dirigentes. Ahora tenía 65 años.
Las ceremonias de clausura habían terminado, pero Elena de White
tenía más trabajo que hacer antes de terminar el día. Guillermo White
había citado a una reunión de la junta escolar, a fin de hacer planes para el
siguiente año académico. El tesorero de la casa editora, N. D. Faulkhead,
estaba en su oficina cuando Guillermo le dijo que Elena de White quería
verlo antes de que se fuera del predio. $-fientras iba por el pasillo hacia la
habitación de ella, Faulkhead recordÓ un sueño que había tenido varias
noches atrás, en el que Elena de White tenía un mensaje para él.
"El señor Faulkhead era un hombre de negocios alto, agudo, despierto
y enérgico. Cuando se hizo adventista del séptimo día, era miembro de
varias organizaciones secretas, pero no se retiró de ellas. Según escribió de
su experiencia algunos años después en una carta general a 'Mis queridos
hermanos en la fe', habló de estas afiliaciones:
Estuve estrechamente conectado con la Logia Masónica
[..J ejercí los más altos cargos, en las siguientes logias, que
se me pudieron conceder: primero,fui Maestro de la Logia
de Maestros Masones (o Logia Azul); segundo, fui el Primer
Jife del Santo RealArco (de Canadá); tercero,fui Preceptor
de los Caballeros Templarios, además de muchas otras logias menores: los Buenos Templarios, los Recabitas, los Extraños Camaradas, en los que también ((jercí altos cargos':
Cuando la familia Faulkhead se hizo adventista, "su habilidad inusual
fue reconocida, y fue empleado como tesorero de la Echo Publishing
-
Señales masónicas secretas -
63
Company [Compañía Publicadora Eco]. Trabajó bien al comienzo, pero
a medida que el tiempo avanzaba se enfrascó cada vez más en su trabajo
de las logias, y sus intereses en la obra de Dios comenzaron a menguar.
"Esta era su situación cuando Elena de White llegó a Australia en
diciembre de 1891. [. ..] Pocos días después de su llegada", tuvo una visión
que le reveló cuestiones relacionadas con la casa editora en general; ella
"redactó los testimonios a una cantidad de personas implicadas, incluyendo al señor Faulkhead y su esposa. El documento dirigido a ellos trataba
de la relación que él tenía con la casa editora y su afiliación a la Logia
Masónica, y llenó cincuenta páginas. Cuando pensó en despachárselo, fue
refrenada. Dijo: 'Cuando adjunté la comunicación lista para despachar,
me pareció que una voz me hablaba diciendo: 'Todavía no, todavía no,
ellos no recibirán tu testimonio' ".
Elena de White conservó ese documento por casi doce meses y, mientras tanto, mantuvo un "profundo interés en el señor y la señora Faulkhead
y su bienestar espiritual. Algunos de sus colegas de la casa editora estaban
muy preocupados porque observaban su creciente infatuación con la obra
de la logia y su" interés cada vez menor en la casa editora. "Le imploraron,
exhortándolo a considerar el daño de su curso. 'Pero', como consigna el señor
Faulkhead, 'mi corazón estaba lleno de otras cosas; de hecho, pensaba más
en ellas que en cualquier otra cosa'.
"Enfrentaba las exhortaciones con actitud desafiante y con la atrevida
declaración de 'que él no renunciaría a su conexión con los francmasones
a pesar de todo lo que [el hermano] Starr o White o cualquier otro pastor
pudieran decir. Él sabía en qué andaba, y no iba a dejarse enseña:rpor
ellos'. Era evidente para los responsables de la obra que, a menos que se
produjera un cambio notorio en su actitud, pronto tendría que encontrar
otro empleo".
A principios de diciembre, pocos días antes de la junta escolar, "J. H.
Stockton, uno de los primeros adventistas de Australia, estaba conversando con el señor Faulkhead. Le preguntó qué haría sí Elena de White
tuviese un testimonio para él relacionado con su conexión a la logia. A esto
Faulkhead respondió con descaro: 'Este tendría que ser tremendamente
fuerte'. Ninguno de los dos hombres era consciente de que casi un año
antes todo el asunto le había sido revelado a ella.
"Pocos días después, la noche del sábado 10 de diciiembre [...] el señor Faulkhead soñó que el Señor le había mostrado su caso a Elena de
White, y que ella tenía un mensaje para él". Ahora, tres días después,
"Faulkhead se encontró con Elena de White, que lo saludó cordialmente.
Él le preguntó si tenía algo para él. Ella respondió que el peso de su caso
estaba sobre la mente de ella, y que tenía un mensaje para él de parte del
64
- Los que vieron ... y creyeron -
Señor, que deseaba que él y su esposa oyesen. Solicitó una reunión en el
futuro inmediato, donde presentaría ese mensaje. Faulkhead preguntó
con ansiedad: 'lPor qué no me da el mensaje ahora?' "
Elena de White levantó el manuscrito. "Le dijo a Faulkhead que varias veces se había preparado para enviarle el mensaje, pero que se 'había
sentido impedida por el Espíritu del Señor a hacerlo' [. ..].
"Entonces ella leyó y habló. Una parte de las cincuenta páginas que
fueron leídas aquella noche eran de naturaleza general, relacionada con la
obra de la Compañía Publicadora Eco. [. ..] Pero la parte más importante
tenía que ver específicamente con la experiencia del señor Faulkhead y su
conexión no solo con el trabajo de la oficina sino también con su afiliación
a la Logia Masónica. Le leyó sobre los esfuerzos que él hacía para mantener
principios elevados que la logia alegaba defender, y a menudo formulaba su .
mensaje en lenguaje masónico. También le dijo dónde lo había visto sentado
en la sala de reuniones de la logia [...]. Ella habló del creciente interés de
él en la obra de estas organizaciones y de su interés cada vez menor en la
causa de Dios; de haberlo visto en visión dar las monedas pequeñas de su
monedero en el platillo de la ofrenda sabática y las monedas más grandes
en los cofres de la logia. Oyó que lo llamaban 'Maestro Venerable'.
Faulkhead posteriormente escribió: "Pensé que esto estaba llegando
casi a su final cuando ella comenzó a hablarme en relación con lo que
estaba haciendo en las logias".
Pero Elena no había terminado. Le acJytrtió seriamente que" 'a menos
que él rompiera todos los lazos que lo unían a estas asociaciones, perdería su alma'. Entonces, haciendo cierto movimiento con la mano que
fue hecha por su guía, dijo: 'No puedo contar todo lo que me fue dado',
·~ esto, Faulkhead palideció. Al narrar el incidente, escribió:
Inmediatamente me dio esta señal. Le toqué el hombro
y le pregunté si sabía lo que había hecho. Ella levantó la
vista sorprendida y dijo que no había hecho nada inusual.
Le dije que me había dado la señal del Caballero Templario. Pues bien, ella no sabía nada al respecto.
"Siguieron conversando. Ella continuó hablando de la francmasonería
y de la imposibilidad de un hombre de ser francmasón y cristiano incondicional. Luego hizo otro signo secreto, del cual dijo: 'Mi ángel ayudante
me lo hizo a mí'.
"Nuevamente el señor Faulkhead se sobresaltó, y empalideció. Elena
de White había hecho una señal secreta por segunda vez, conocida solo
por la orden superior de los masones. Era una señal que ninguna mujer
-
Señales masónicas secretas -
65
podría conocer, porque era guardada bajo el secreto más estricto: el
lugar de reunión era custodiado por dentro y por fuera contra extraños.
'Esto me convenció de que su testimonio era de Dios', afirmó.
"Al continuar hablando de su reacción a esto, escribió:
Puedo asegurarles[ ..] que esto hizo que me sintiera muy extraño. Pero, como dijo la hermana White, el
Espíritu del Señor había venido sobre mí y había tomado
posesión de mí. Ella continuó hablando y leyendo como si
nada hubiese ocurrido, pero yo noté que se le iluminaba
el rostro cuando la volví a interrumpir y le hablé sobre
la señal. Ella parecía sorprendida de haberme dado una
señal así. No sabía que había movido la mano. Inmediatamente cruzó por mi mente como un relámpago la
declaración que le había hecho al hermano Stockton, de
que el testimonio tendría que ser sumamente poderoso
antes de que pudiese creer que ella tenía un mensaje para
mí procedente del Señor.
"Cuando la señora de White terminó la lectura, había lágrimas en
los ojos del hombre. Dijo:
Acepto cada palabra. Todo esto me pertenece. [ ..]Acepto
la luz que el Señor me ha enviado a través de usted. Obraré
en consecuencia. Soy miembro de cinco logias, y otras
tres están bajo mi control. Yo realizo todas sus gestiones.
Ahora no asistiré más a sus reuniones, y pondréfin a mis
relaciones comerciales con ellos lo antes posible.
"También expresó: 'Me alegra mucho que no me haya enviado ese
testimonio, porque entonces no me hubiese ayudado' ".
El testimonio escrito sin las señales secretas con las manos no habría
convencido a Faulkhead de que Elena de White verdaderamente era una
mensajera del Señor.
"Cuando el señor Faulkhead dejó la habitación de Elena de White,
ya era tarde. Tomó el tranvía hasta la estación de tren y, mientras viajaba por la calle Collins, pasó frente al salón de reuniones de la logia. De
repente recordó que él debía haber estado asistiendo a una reunión de
los Caballeros Templarios aquella misma noche. Al aproximarse a la estación, vio que salía el tren de Preston, así que se vio obligado a caminar
66
- Los que vieron ... y creyeron -
el resto del camino hasta su casa. Eligió un camino poco frecuentado
para poder tener oportunidad de meditar [. ..]. Tenía muchas ganas de
encontrarse con Daniells, Starr o W. C. White para contarles que era un
hombre nuevo, y de lo libre y feliz que se sentía con su decisión de cortar
su conexión con todas las sociedades secretas. Le parecía que se había
caído una tonelada de peso de sus espaldas. iY pensar que el Dios que
gobierna el universo y guía los planetas había visto su peligro y había
enviado un mensaje solamente para él!"
A la mañana siguiente, el señor Faulkhead les contó a sus colegas lo
que había ocurrido la noche anterior. Luego, "llamó a su asistente y le
dictó su renuncia a las diversas logias. Entonces entró A. G. Daniells, y el
señor Faulkhead le contó su experiencia. Mientras ambos conversaban,
le pasaron sus cartas de renuncia al señor Faulkhead para firmar. Las
firmó, las ensobró y se las entregó a Daniells para despacharlas [. ..].
"Pero apenas Faulkhead le hubo entregado las cartas a Daniells, lo
inundó un sentimiento de desconfianza; sintió que él mismo debería
haber despachado las cartas. Entonces le agradeció al Señor por lo que
había hecho, porque creyó que no podría haber confiado en sí mismo
para despachar las cartas.
"El jueves 15 de diciembre, el señor Faulkhead, acompañado por su
esposa, tuvo otra entrevista con la señora de White. A ambos se les leyó
una cantidad de páginas de cuestiones nuevas, y todas fueron aceptadas.
"Quiero que sepa'', le dijo a la señor~e White, "cómo veo este asunto. Me considero profundamente honrado por el Señor. Se ha dignado
a mencionarme, y no estoy desanimado, sino animado. Cumpliré con la
luz que el Señor me ha dado".
Pero la batalla no había acabado. "Los amigos de la logia [de
Faulkhead] se negaron a desprenderse de él, así que tuvo que cumplir
con sus períodos en los cargos, otros nueve meses. Se pusieron en marcha los esfuerzos más denodados para retenerlo en su sociedad, pero él
había tomado una posición firme y la mantuvo. A veces sus colegas de la
iglesia temblaban por él. Elena de White escribió cartas alentadoras para
apoyarlo en su decisión. Él obtuvo la victoria finalmente.
"Con la caducidad de su período como dirigente de varias de las logias,
se ganó una victoria completa, y el señor Faulkhead pudo escribirle, el18
de septiembre de 1893, a Elena de White y a su hijo:
-
Señales masónicas secretas -
67
Apreciados hermano y hermana White:
Me da mucho placer contarles que mi período de gestión
como Maestro de la Logia Masónica terminó el mes pasado. Y siento el deseo de agradecerle a Dios por esto. Cuán
agradecido estoy a él por enviarme una advertencia de que
estaba transitando por la ruta equivocada. Lo alabo por la
bondad y el amor que me demostró, al llamarme de entre
esa gente. Ahora puedo ver muy claramente que continuar
con ellos habría sido mi perdición, ya que debo confesar
que mi interés por la verdad se estaba enfriando. Pero,
gracias sean dadas a Dios, él no me permitió continuar
con ellos sin darme una advertencia a través de su sierva.
No puedo expresar mi gratitud a él por ello[..].
Puedo alabar a Dios con todas mis fuerzas, y luego no
puedo expresar suficientemente mi gratitud a él por el
amor que me ha mostrado.
N. D. Faulkhead
"Esta experiencia trajo gran confianza a[...] los miembros de iglesia de
Australia, y siempre fue una fuente de aliento [...] para el señor Faulkhead.
Con la renovación de su primer amor y del interés en la causa de Dios,
continuó sirviendo en la casa editora durante muchos años, entregando
su tiempo, sus fuerzas y su vida a la propagación del mensaje".
Vaya, ¿en la plataforma conmigo?
1\Tathaniel Davis
A veces soy llevada muy lejos en lo futuro, y se me muestra lo que ha de suceder. Luego otra vez se me muestran
cosas que han ocurrido en lo pasado. Después de que salgo
de la visi6n, no recuerdo inmediatamente todo lo que he
visto y el asunto no es tan claro delante de mí hasta que
escribo. Entonces la escena surge delante de mí como fue
presentada en visi6n y puedo escribir con libertad. A veces
las cosas que he visto están ocultas de mí después de que
salgo de la visi6n y no puedo recordarlas hasta que soy
llevada delante de una congregaci6n donde se aplica la visi6n. Entonces vienen con fuerza a mi mente las cosas que
he visto. Dependo tanto del Espíritu del Señor para relatar
o escribir una vü;/6n como para tenerla. Es imposible que
yo recuerde cosas que me han sido mostradas a menos que
el Señor las haga surgir delante de mí en el momento que a
él le place que yo las relate o escriba. 1
La historia de Nathaniel Davis es un ejemplo de quizá cientos que
corroboran la verdad de esta declaración que Elena de White escribió
con su pluma en 1860.CElena ~scribió mucho acerca del drama del gran
conflicto, y se explaya en cómo Dios y Satanás elaboran sus versiones en
el conflicto. A menudo, las reveladcmes de Elena de White marcaban la
diferencia cuando surgían grandes probl~mas en la obra mundial de la
Iglesia Adventista del Séptimo Día. Pero frecuentemente se centraba en
las luchas de hombres y mujeres aislados, uno por uno, que necesitaban
luz, esperanza y salvación en su conflicto contra el mal.
Nattie, como lo llamaban sus amigos, se hizo adventista en algún
momento alrededor de 1895, hacia la mitad del período en que Elena
de White estuvo en Australia. Un amigo lo describió como un hombre
-
Vaya, ¿en la plataforma conmigo? -
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desgarbado de "unos 1,95 metros". Elena de White lo describió como un
hombre con "ventajas en educación [...] habilidades agradables", con
"revelaciones claras de la Palabra'' de Dios, y "bendecido [...] con poderes
para comunicar esa Palabra de manera aceptable". 2
El primer contacto que tuvo Elena con Nattie fue cuando él le escribió
una carta de ocho páginas el 9 de septiembre de 1896. Ella tenía 69 años.
Era una carta increíblemente atribulada. Se describía como habiendo
"deshonrado a mi Señor, desacreditado mi profesión, hecho añicos la fe, y
ahora estoy desesperado, porque solo veo la ruina más rotunda, y [...] no
tengo a nadie a quien culpar más que a mí mismo". Terminó la carta: "Suyo
con temor y temblor".
Nattie había admitido sus problemas cuando se vio inducido por
"enemigos personales, la codicia y la envidia''. Había perdido su puesto
de colportor y no podía encontrar un empleo secular a causa del sábado.
También estaba muy endeudado con la casa editora. Su esposa todavía no
estaba enterada de la pérdida de su trabajo y de la deuda, pero él temía
que ella descubriera cómo eran las cosas en realidad.
Pero Nattie tenía problemas aún mayores. En agosto del año siguiente, 1897, Nattie conversó con Elena en Sidney. En su diario, ella escribió:
Tuve una larga conversación con el hermano Da vis
esta mañana. Pobre hombre, está en problemas. Una vez
se entretuvo con el espiritismo y la teosofía, y esa influencia sombría lo ha rodeado desde entonces. Aunque
ve la verdad y cree en la verdad, sin embargo parece haber un sometimiento a este poder que para él es difícil de
romper. Solo podría decirle: "Mira y vive': Un Salvador
levantado sanará la mordedura de la serpiente y, aunque
su veneno se esparció por todo el cuerpo, podría decirle:
"Mira y vive". [..J Es mi oración que el Señor lo libre del
cruel poder de Satanás. 3
Pero Nattie era persistente. Pocos días después, el15 de agosto, Nattie
volvió a encontrarse con Elena en la casa de ella, en Cooranbong. Durante
la noche, ella tuvo una idea clara de su problema, y comenzó una carta
que no terminó hasta varios días después.
Lo esencial de la carta era (1) Nattie estaba bajo el control de agentes
satárticos. Ella escribió: "Si usted decide romper el poder de los agentes
satánicos que está sobre usted, presente su caso ante los siervos de Dios,
humille su corazón delante de Dios, y pídales que oren por usted para
que Dios tenga misericordia de usted". 4
70
- Los que vieron ... y creyeron -
(2) Nattie estaba profundamente endeudado. Elena de White, generosa como siempre lo era, declaró que estuvo a punto de adjuntar algo de
dinero en la carta, pero el Espíritu Santo inmediatamente le prohibió el
impulso de ayudar: "El Espíritu del Señor me enseña que así como usted
está ahora, utilizará el dinero del Señor para lastimarse a usted mismo
y a otras almas". Y le dio algunos consejos prácticos sobre cómo salir a
flote de debajo de su enorme carga.
(3) Nattie estaba encadenado a la inmoralidad. Ella escribió: "Usted
tiene pensamientos viles, y ha corrompido sus caminos delante de Dios.
[...] Su actuar es inmoral. Está trayendo desgracia sobre la causa de la
verdad. [...] Ha traído corrupción moral sobre las almas. Es un hombre
peligroso que no se esfuerza por controlarse en ningún lado". Elena de
White le imploró a N attie, como si fuese su propio hijo, que corrigiera sus
caminos. Pero él no tuvo en cuenta su consejo.
Es fácil imaginar por qué Nattie no quiso solicitar ayuda a los dirigentes de la iglesia: tenía pecados secretos que no quería compartir, ni
siquiera con su esposa. Además, ahora era empleado de la casa editora.
Más adelante aquel verano de 1897, hubo un hecho un sábado de
tarde en North Fitzroy, un suburbio de Melbourne, que le abrió los ojos a
Harold Blunden, un adolescente que posteriormente llegó a ser director
de publicaciones de la Asociación General. Lo conocí bien, cuando se
jubiló, en el norte de California.
Quizás al igual que muchos otros australianos, el concepto de una
"profetisa estadounidense" le molestaba a Harold Blunden. Como dijo
más tarde: "iSin duda había suficientes australianos por allí, para que
Dios no tuviese que escoger a una estadounidense! iY por cierto que había
suficientes hombres disponibles, como para que Dios no tuviese necesidad
de escoger a una mujer!"
La señora de White iba a hablar el sábado de tarde en la capilla de
ladrillos rojos a la que pertenecía Blunden. Harold fue temprano y se sentó
en la segunda fila desde el frente, del lado del pasillo. Queríaver y escuchar
todo. La capilla finalmente se llenó, quedando espacio solo para estar de pie.
Como el tren de la señora de White se demoró casi dos horas, la audiencia dedicó ese tiempo a cantar y dar testimonios personales.
Finalmente apareció Elena, caminando del brazo del joven misionero
estadounidense, Arthur Daniells, presidente de la Unión Australasiana,
recientemente organizada. Después de presentar a Elena, el pastor Daniells
ocupó uno de los dos asientos vacíos en el estrado, entre los otros pastores.
Elena llevaba un fajo de manuscritos en la mano que dejó en el púlpito. Mirando a la audiencia, sonrió y abrió la boca para hablar, pero no
salió nada. Parecía sorprendida y recorrió a la audiencia con la vista.
-
Vaya, ¿en la plataforma conmigo? -
71
Entonces volvió a acomodar su manuscrito y abrió la boca, y nuevamente no pudo hablar. Volvió a contemplar a la audiencia, más lentamente esta vez. Luego se dio vuelta para ver los rostros de los que estaban
sentados en el estrado.
Dándole la espalda a la audiencia, lo que dijo a continuación pudo ser
oído solo por los que estaban en las primeras filas. Al darse cuenta de que
N athaniel Davis estaba sentado al lado del pastor Daniells, le preguntó al
presidente por qué Davis estaba en la misma plataforma que ella.
Nattie se incorporó con su altura de 1,95 metros, elevándose por encima de la profetisa estadounidense de 1,57 metros. La miró con odio y se
marchó de la plataforma por el pasillo central hasta afuera de la capilla.
Elena de White acomodó el manuscrito, sonrió, y volvió a abrir la boca;
esta vez habló durante cuatro horas y cuarto. Pero el joven Blunden escuchó
poco del mensaje. No hizo más que preguntarse: ¿Qué significa todo esto?
Ni bien pudo, después del servicio, Blunden se acercó al pastor
Daniells, y esto es lo que descubrió: Nathaniel Davis tenía problemas
con el dinero, las mujeres y el espiritismo. Sentado en la plataforma
aquel sábado de tarde, era un representante viviente de las tinieblas
satánicas. Dios no soltaría la boca de la profetisa hasta que esta oscuridad saliera.
El joven Blunden había querido probar a la profetisa, ipero nunca se
imaginó esta clase de prueba! Para el joven Blunden, el problema estaba
resuelto. Dijo:
"-Nunca tuve ningún problema ni duda sobre Elena de White después
de eso. [...]Yo lo sé, yo estuve allí. Fui un testigo presencial".
¿y Nathaniel Davis? Como Nattie no quiso, o no pudo, tener contactos
posteriores con los dirigentes de la iglesia, la señora de White les rogó a
Daniells y a otros que ayudaran a Davis a romper con los espíritus malignos que lo poseían. El 2 de septiembre, hizo un seguimiento con una
carta para Davis, y le pidió a Daniells que se la leyera.
Esto es lo que Daniells informó de la experiencia:
Cuando comencé a leérsela, se puso muy nervioso. Después de un rato, escuché una especie de interrupción y, al
mirar para arriba, lo vi con un cuchillo desenfundado y la
mano levantada. Le pregunté:
-¿Qué sucede?
Él rechinó lo dientes y me fulminó con la mirada
como un loco.
Su esposa y yo le suplicamos que bajara el cuchillo, pero
nos estaba amenazando tan descontroladamente que no
72
- Los que vieron ... y creyeron -
me atreví a seguir leyendo. No sabía si me lo clavaría a mí,
a su esposa, o si se lo clavaría a sí mismo. Le dije:
--Arrodillémonos y oremos a Dios. Hay un Dios en Israel
que puede ayudarnos, y debemos buscar su ayuda.
Nos arrodillamos, y debo decirle que nunca estuve en un
lugar más desconcertante. Sabía que los demonios estaban
en la habitación, y sabía que debíamos tener el poder de
ese mismo Cristo que sometió al diablo y echófuera a los
demonios mientras estuvo entre los hombres.
Lo primero que dije fue:
-Oh, Señor, venimos a ti en el por siempre soberano
nombre de Jesús.
Al mencionar el nombre de Jesús, aquel hombre arrójó
el cuchillo hacia el otro lado de la habitación con una
violencia terrible. Al mencionar el todopoderoso nombre
de Jesús, se quebró en llanto y la violencia desapareció.
Después de que su esposa y yo oramos, él oró con todo
fervor a Dios para que lo librara de esos demonios que lo
atormentaban.
Después de que se levantaron, Nattie dijo:
-Hermano Daniells, cada palabra de esto es verdad.
Durante semanas he sido atormentado por estos malos
espíritus. Estos demonios me han arrojado de la cama y
me han dado una paliza en el piso; esto me destmzó los
nervios, y estaba a punto de rendirme a ellos para volver a
convertirme en su esclavo obediente': 5
Tres años después, el 29 de agosto de 1900, Elena de White salió del
puerto de Sidney en el Moana, que navegaba hacia San Francisco. Antes
de partir, sus amigos le entregaron un atractivo álbum d~tógrafos. En
él habían escrito mensajes diarios para que ella los leyera, un mensaje
para cada día. Exactamente siete días después de iniciado el viaje, el 4
de septiembre, Elena de White abrió el álbum para el saludo de ese día.
Había sido escrito el 6 de agosto y estaba firmado por "N. A. Davis".
Me permito el más sincero placer de tener el privilegio
de registrar mi aprecio por la obra de la hermana E. G. de
líVhite y mi gratitud a mi Padre celestial por los mensajes
que envió a través de ella a su pueblo.
-
Vaya, ¿en la plataforma conmigo? -
73
La testigo fiel me reveló los medios por los que la esclavitud de Satanás se rompió cuando, debido a la influencia
del espiritismo, estuve muy cerca de convertirme en una
ruina espiritual.
Tengo todas las razones para ser positivo en mi confianza en la hermana E. G. de Whíte como una verdadera
prqfetisa.
Que el Señor de amor y misericordia, gracia y verdad,
la guíe y guarde a salvo hasta elfin, y prolongue sus días
para que ella pueda continuar advirtiendo, amonestando
y fortaleciendo al pueblo remanente de Dios.
¿Quién le habló de Nattie a Elena de White? Sin duda nadie de Australia. ¿Quién le cerró la boca cuando trató de hablar aquel sábado de tarde?
Este álbum de autógrafos ahora descansa en las oficinas del Centro
de Investigación White en Silver Spring, Maryland, para aquellos que
quieran leer por sí mismos las palabras de despedida de Nattie. Dios, y
sus profetas, sí se preocupan por las personas, una por una. "Creed en
Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis
prosperados" (2 Crón. 20:20).
1
Mensajes selectos, t. 1, p. 41.
Carta 36, 1897.
3
Manuscript Releases, t. 13, pp. 3, 4.
4
Carta 36, 1897.
5
Australasian Record, 13 de agosto de 1928.
2
Segunda Parte
IMERMERA
Intervenciones que mantuvieron
el rumbo de la iglesia
IMERMERA
Votación en sábado
Des Moines, Iowa
En el verano de 1881, tanto Jaime como Elena de White estaban
enfermos. Ella tenía 53 años de edad; y Jaime, 59. Jaime, el guerrero
cansado, moriría en pocas semanas.
No obstante, Jaime y Elena tuvieron su participación habitual en la
reunión campestre de principios de junio en Spring Arbor, Míchigan. Después del cierre de la reunión campestre, Elena tuvo la profunda impresión:
"Vayan a Iowa; tengo una obra que quiero que hagan". La reunión de Iowa
comenzaría en pocos días apenas, pero estaba a muchos kilómetros de
distancia. Elena, escribió, en una carta, que ella consideraba que el viaje
a Iowa era tan difícil como si tuviese que ir a Europa. Cuando le habló de
su impresión a su cansado esposo, Jaime, él respondió:
-Iremos.
Cuando llegaron a Des Moines, ella le dijo a un pastor:
-Bueno, estamos aquí por voluntad del Señor; no sabemos con qué
prop~,sito especial, pero sin duda lo sabremos ~uando se desarrolle la
reumon.
Los White, como de costumbre, tuvieron a su cargo gran parte de
las predicaciones. El domingo de noche, después de que Elena se retiró a
su carpa para la noche, los delegados del congreso tuvieron una reunión
administrativa sobre el tema de votar, especialmente en relación con la
temperancia y la prohibición de bebidas alcohólicas. Más tarde aquella
noche, Elena recibió el mensaje de. que el grupo quería su consejo.
El pastor G. B. Starr más tarde recordó que Elena de White había
contado un sueño, aquella noche, que describía la circunstancia de Iowa,
aunque no sabía exactamente cómo ni dónde se aplicaba. El portavoz
celestial había dicho: "Dios tiene el propósito de ayudar al pueblo en un
gran movimiento sobre este tema. También estableció que ustedes, como
pueblo, sean cabeza y no cola en el movimiento; pero ahora la postura
que han tomado los colocará en la cola".
-
Votación en sábado -
77
En la reunión, se le preguntó a la señora de White si los adventistas
de lowa debían votar por la prohibición. Su respuesta fue rápida:
"-Sí, todos ellos, sin excepción, en todos lados; y quizás algunos de
ustedes se horroricen si les digo que, si es necesario, voten por la prohibición en sábado si no pueden en ningún otro momento".
Más adelante, al escribir, Starr enfatizó: "Puedo testificar que el
efecto del relato de ese sueño fue eléctrico sobre todo el congreso. Un
poder convincente lo asistió y, por primera vez, vi el poder unificador del
don de profecía en la iglesia".
Por cierto, se necesitaría un gran libro para seguirles el rastro a los
viajes de Elena de White y el profundo efecto que tuvo sobre las decisiones que se tomaban. Al historiador actual se le haría imposible intentar
separar a Elena de White de su influencia en la historia de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día.
"¡Anoche! ¡Anoche!"
La visión de Salamanca y Battle Creek
Una de las visiones más interesantes y más convincentes de las
dos mil que tuvo Elena de White es conocida como la visión de Salamanca. La ocasión: el congreso de la Asociación General de marzo de
1891 en Battle Creek, Míchigan. La presencia de Elena de White evitó
que los dirigentes de la iglesia cometieran errores graves en decisiones
relacionadas con el programa de libertad religiosa y las políticas de
publicaciones.
Una porción de los extraordinarios eventos que rodearon a esta visión
comenzó en noviembre de 1890, varios meses antes de que se celebrara el
congreso de la Asociación General en Míchigan. Salamanca, un pueblo
pequeño al oeste del Estado de Nueva York, cerca del límite con Pennsylvania, ha sido famoso entre los círculos adventistas desde entonces debido
a una visión extraordinaria que Elena de White recibió allí.
Como era su costumbre, Elena co~nzó a escribir la visión en su
diario. Pero no escribía la visión completa inmediatamente. A veces dejaba páginas o medias páginas en blanco, sabiendo que las podría llenar
más adelante cuando Dios continuara completando los detalles. Pero,
cuando trató de escribir o contar en público una escena particularmente
dramática que había visto en la visión de Salamanca, la mente de Elena se
ponía en blanco repetidamente. En consecuencia, esas páginas quedaban
en blanco, mes tras mes.
Elena tuvo muchas oportunidades de aplicar gran parte del mensaje
de la visión a las condiciones actuales de la iglesia, pero la descripción
central de la visión era ocultada de su memoria. Al volver la vista atrás,
ahora podemos ver que si Elena hubiese informado toda la visión en
cualquier momento que no fuese un fin de semana en especial durante
el congreso de marzo de la Asociación General, habría sido considerada
un fraude absoluto.
-
"iAnoche! iAnoche!" -
79
En el congreso de la Asociación General de marzo, uno de los puntos
era el peligro inminente de atenuar creencias adventistas distintivas,
especialmente en revistas de la iglesia. Los dirigentes del Departamento
de Libertad Religiosa creían que los adventistas tendrían mayor reconocimiento en su revista, el American Sentinel [Centinela Norteamericano], si omitían el término adventista del séptimo día de sus columnas y
no decían nada acerca del día de reposo sabático. Elena había dicho en
varias ocasiones que esta política era "el primer paso en una sucesión de
pasos equivocados".
En su sermón del sábado de tarde en el congreso de la Asociación General, Elena enfatizó una vez más el peligro de esa opinión. Urías Smith,
el editor de la revista de la iglesia, resumió el sermón de ella:
La hermana White habló de la importancia de predicar
la Palabra, y del peligro de encubrir y mantener en un
segundo plano los rasgos característicos de nuestrafe, bajo
la impresión de que de ese modo se evitará el prejuicio. Si
se nos ha confiado un mensaje especial, como creemos, ese
mensaje debe comunicarse sin riferencia a las costumbres
o los prejuicios del mundo, ni estando gobernados por
una política de temor ofavor. Algunos lo recibirán y serán
santificados por él, aunque multitudes se opondrán a él y
lo rechazarán [..J,
El discurso fue oportuno e hizo una profunda impresión
en la vasta congregación.
A. T. Robinson observó algo más en relación con ese sermón vespertino: "Tres veces ella intentó relatar la escena que pasó delante de ella
en la reunión de Salamanca; cada vez su mente parecía pasarse a otro
canal. En la tercera referencia a la reunión de Salamanca, en un tono de
voz casi impaciente, ella comentó: 'Pero tendré más para decir acerca de
eso en algún otro momento' ".
Después de la reunión, el presidente de la Asociación General, pastor
Olsen, le preguntó a Elena si hablaría en la reunión de pastores el domingo de mañana temprano. Ella respondió que ya había hecho su parte y
estaba cansada, así que tenía otros planes. Elena les dijo a sus secretarios
que podían dormir el domingo de mañana, así como ella. Ellos quedaron
extasiados: una mañana para dormir y no trabajar como de costumbre.
Mientras caminaba hacia la reunión de las cinco y media a la mañana
siguiente, Guillermo, el hijo de Elena, y otras dos personas pasaron por
la casa de Elena y notaron que las luces estaban encendidas. Guillermo
80
- Los que vieron ... y creyeron -
dijo que entraría para ver si su madre estaba enferma. La encontró muy
ocupada escribiendo, una tarea que había estado haciendo durante dos
horas. Elena informó que Dios la había despertado a las tres en punto,
y le dijo que fuera a la reunión de pastores y que relatara algunas cosas
que se le mostraron en Salamanca.
Así que, Elena salió con los tres hombres. Cuando llegaron, la reunión ya había comenzado. El pastor Olsen recordó que Elena "entró con
un fajo de manuscritos bajo el brazo". Al cierre de la oración, Elena "se
levantó y declaró que no tenía pensado asistir a esta reunión" pero que
"fue impresionada de que debía presentar algunas cosas que le habían
sido mostradas en noviembre del año anterior [...] en Salamanca".
Elena repasó las tantas veces que había tratado de revelar porciones
de esa visión. Pero ahora añadió algo más. Describió lo que le dijo su
Guía: "Sígueme", y la condujo a un concilio de hombres donde dijo que se
manifestaba mucho celo y fervor, pero no mucho conocimiento. Uno de los
miembros del grupo sostenía el Sentinel [Centinela] (la revista de libertad
religiosa) y con la mano frente a la revista dijo: " 'esto debe salir', y luego
hizo comentarios totalmente contrarios a los principios de nuestra fe".
Cuando Elena terminó de hablar, el editor de la revista, A. F. Ballenger, se puso de pie y dijo con lágrimas: ''Yo estuve en la reunión del concilio
que se celebró anoche hasta una hora avanzada, y la hermana White la
describió con precisión. Las mismas palabras que ella dice haber oído que
se dijeron fueron pronunciadas anoche. Yo estaba del lado equivocado
del asunto, y ahora me pongo del lado correcto".
Alguien que describió la reunión dijo: "Nunca olvidaré la mirada de
perplejidad en el rostro de la querida mujer, mientras miraba al hermano
Ballenger y exclamaba 'iAnoche! iAnoche!'"
El capitán Eldridge, un dirigente clav~e la casa editora, dijo:
Yo estuve en esa reunión. Anoche, después del cierre del
congreso, algunos nos reunimos en mi habitación en la
oficina de la Review, donde nos encerramos, sacamos a
colación las cuestiones y el tema que se habían presentado
esta mañana [..J.
Si tuviese que comenzar a dar una descripción de lo
que ocurrió, y la actitud personal de los que estaban en la
habitación, no podría haberlo hecho de una manera más
exacta y correcta de como lo ha hecho la hermana JiVhite.
Ahora veo que yo estaba equivocado; que la postura que
adopté no era correcta; y, por la luz que se nos ha dado esta
mañana, reconozco que estaba equivocado.
-
"iAnoche! iAnoche!" -
81
Otros que asistieron a esa reunión aquel sábado a altas horas de la
noche y domingo de madrugada dieron testimonios similares. Pero un
hombre permaneció sentado, estupefacto. El pastor Olsen, presidente de
la Asociación General, escribió respecto de esta sorpresa:
Personalmente, me quedé allí sentado con una rotunda perplejidad. No sabía a qué se estaba rifiriendo ella.
Nunca había escuchado ni tenía ningún conocimiento de
las cosas que ella presentaba, ni tampoco de una reunión
como la que describió. De hecho, estaba tan sorprendido,
y las cosas que ella presentó como que habían ocurrido en
esa reunión parecían tan irrazonables, que estaba bastante confundido en mi mente en cuanto a qué significaba
esto. Ella habló largo y tendido, y nos presentó el asunto
con mucha firmeza, y mostró el espíritu errado que se manifestó, y el error de la postura que había sido adoptada
por algunos en su análisis [..J.
La hermana White no había tenido ninguna oportunidad de tener conocimiento de lo que había ocurrido
en esa habitación durante la noche en la oficina de la
Review [..J. El Señor se lo había mostrado antes de que
ocurriera; y ahora, la misma mañana en que sucedió,
había sido llamada de una manera especial por el Señor
para presentar lo que se le había mostrado. Huelga decir
no solo que trajo alivio a muchas mentes, sino también
que dio pie a un tremendo agradecimiento porque, en un
momento tan crítico, el Señor intervino, y nos salvó de la
perplejidad y la confusión que parecían estar surgiendo
en asuntos importantes.
"Los archivos del Centro de Investigación White poseen el testimonio
de otros que estuvieron presentes aquel domingo de mañana. Una de esas
declaraciones, firmada por seis pastores destacados, afirma:
El informe de esta visión ca~.tSÓ una impresión profunda y solemne sobre la numerosa cmigtegación de pastores
adventistas del séptimo día en aquella reunión matutina.
Cuando oyeron que los que habían sido reprendidos por la
dirección equivocada que habían tomado en aquel concilio
confesaron que todo lo que la señora de White había dicho
sobre ellos era cierto hasta el último detalle, vieron que
82
- Los que vieron ... y creyeron -
el sello de la inspiración divina había sido puesto sobre
aquella visión y testimonio. El poder y la solemnidad de
esa reunión causaron una impresión sobre la mente de los
presentes que no será fácilmente olvidada.
·~. T. Robinson contó que los que asistieron a la reunión aquella
mañana no desayunaron ese día:
La reunión, que comenzaba a las cinco y media, y que
generalmente terminaba a las seis y media, continuó hasta cerca del mediodía. Fue una de las reuniones más asombrosas a las que he tenido el privilegio de asistir. Hombres
de voluntad de hierro, que la noche anterior manifestaron
un espíritu de obstinación inflexible, confesaron con
lágrimas y con su voz quebrada. El pastor Dan Jones dijo:
'Hermana White, yo pensé que tenía razón. Ahora sé que
estaba equivocado' ".
Todos entendieron claramente por qué Elena de White no pudo contar esta parte de la visión de Salamanca durante los cuatro meses que lo
había intentado. Especialmente, era evidente por qué se le impidió darla
cuando intentó hacerlo tres veces el sábado de tarde en Battle Creek.
Se obtuvieron dos lecciones formidables: (1) la Iglesia Adventista
había evitado un error grave y (2) todos los presentes tuvieron evidencias
innegables con respecto a la veracidad y la integridad de Elena de White,
especialmente los que se habían quedado con dudas durante esos últimos
dos años posteriores al congreso de Minneapolis de 1888.
Capítulo
Una rival potencial
La corrección de dos dirigentes de la iglesia
En 1894, cuando Elena de White tenía 67 años, otra "profetisa"
emergió en la confesión adventista del séptimo día. Su nombre era Anna
Phillips.
Esta joven llegó a creer que Dios le daba sueños que contenían consejos para otras personas. Basada en esos sueños, escribía "testimonios"
a esposos y esposas sobre la vida personal de ellos y enviaba mensajes a
los dirigentes de la iglesia. Muchos consideraban que Anna era auténtica.
A medio mundo de distancia, mientras Elena de White aún estaba en
Australia, el Espíritu Santo, el Espíritu de Profecía, le hizo saber de estos
acontecimientos y del daño que esto le estaba haciendo a la joven Anna.
Elena se enteró de que A. T. Jones, un pastor sumamente respetado en
ese entonces, era uno de los más destacados en promover los "mensajes"
de Anna Phillips. De hecho, públicamente, Jones intercaló los mensajes
de Anna con los de Elena de White y luego le preguntó a la congregación
si podían distinguir entre las dos autoras.
Al día siguiente de que el pastor Jones respaldara públicamente a
Anna Phillips en la iglesia de Battle Creek, Jones recibió una carta desde
Australia, una carta de Elena de White que había sido escrita muchas
semanas antes. Jones estaba tan ansioso por leerla que rompió el sobre
en la oficina de correos. Parte de la carta decía: "Tengo un mensaje para
usted. ¿supuso usted que Dios lo había comisionado para que presentara
las visiones de Ana Phillips, las leyera en público y las equiparara con los
testimonios que al Señor le ha complacido darme?"
El pastor A. O. Tait, colega de Jones, informó que él estaba con Jones
en el correo aquel día. Observó que le caían lágrimas al pastor Jones
cuando recibió esta carta el día siguiente de su sermón sabático. El pastor
Jones se dirigió a su amigo pastor y le preguntó:
-¿Quién le dijo a la hermana White hace un mes atrás que yo iba a
predicar ese sermón sobre Anna Phillips como profetisa?
84
- Los que vieron ... y creyeron -
-Tú lo sabes, Alonzo -respondió el pastor Tait.
Al sábado siguiente, en la iglesia de Battle Creek, el pastor Jones
leyó porciones de la carta de Elena de White y se disculpó ante la
congregación:
-Me equivoqué, y lo confieso. Ahora estoy en el camino correcto.
Al oír la lectura de esta carta, Anna Phillips reconoció su engaño.
Con el tiempo llegó a ser una instructora bíblica fiel y eficiente. Elena
de White había salvado a la iglesia de Battle Creek del disentimiento y a
una joven de la catástrofe emocional.
Pero la historia no termina allí. W. W. Prescott, rector del Colegio de
Battle Creek, también era promotor de Anna Phillips. Mientras visitaba
el Colegio de Walla Walla, pensó en presentar a Anna Phillips ante los
alumnos leyéndoles uno de sus testimonios. Prescott no había estado en
Battle Creek cuando Jones leyó la carta de Elena de White. Apenas pocas
horas antes de su presentación, Prescott recibió una copia de la misma
carta de Elena de White.
El pastor Stephen Haskel también estaba de visita en Walla Walla
en ese momento, y le informó de los acontecimientos a Elena de White:
Su testimonio llegó justo a tiempo para ahorrar algunos problemas en el Colegio. Yo había escuchado algo por
el estilo anteriormente cuando sus cartas o su testimonio
llegaban justo a tiempo cuando estaba sesionando una
reunión y llegaba a las personas a tiempo para ahorrar
problemas, pero [yo] nunca lo había experimentado
antes [..J. El hermano Prescott iba a leer el testimonio
deAnna Phillips, aunque ya se había enterado algo del
asunto. Pero su carta llegó en el momento justo y entonces
él, por supuesto, tuvo oportunidad de leerla. Esto resolvió
el problema par¡z él. Dijo:
-Entonces deksto se trata todo. Ahora tomaré algo de la
misma medicina que les he dado a otras personas. [..J
Dios en su providencia hizo llegar ese testimonio en el
tren exacto en que debía llegar.
¿cómo sabía Elena que su carta para Prescott y Jones llegaría en el
momento en que sería más apreciada? Probablemente no lo sabía. iPero
el Espíritu que la guió sí lo sabía! ¿cómo se resolvió este fenómeno generalizado después de la carta a Jones y a Prescott?
Elena de White aconsejó enérgicamente a los miembros de iglesia de
Battle Creek que "la hermana Phillips no sea condenada ni denunciada.
-
Una rival potencial -
85
[...] Ha habido quienes le han dado impresiones erróneas; la han halagado
y alentado, y las palabras de ellos han tenido influencia sobre su vida y
sobre la obra que está haciendo, y ella cree que Dios se la ha dado".
Después de enterarse de las confesiones de Jones y Prescott, Elena
escribió un mensaje para confirmar a los hombres:
Tengo más confianza en ellos hoy que en el pasado [..J.
Tengo los más tiernos sentimientos hacia nuestros hermanos que han cometido este error, y diría que a los que
desprecian a los que han aceptado la amonestación se les
permitirá pasar por pruebas que pondrán de manifiesto
sus debilidades personales y sus difectos de carácter [..J.
Si bien no puedo aprobar sus errores, simpatizo y me
uno a ellos en su obra en general.
En estas dos anécdotas, vemos el rol predominante de un profeta
auténtico que influye en hechos a miles de kilómetros de distancia en el
momento más crítico. Pero también vemos su ternura hacia una joven
que había sido inducida al error por aquellos en quienes debería haber
podido confiar. Además, vemos a una profetisa en su faceta redentora:
siempre ofreciendo esperanza para que las cosas mejoren en el futuro, si
la gente presta atención a los consejos de la mensajera del Señor.
Enfrentar el iceberg
La crisis del panteísmo, 1903
El desafío de Elena de White: "iEnfréntalo!" de cara a un "iceberg"
cambió el rumbo de la historia adventista en 1903. Y sus consejos francos
han sido el desafío de los dirigentes de la iglesia desde entonces.
Gran cantidad de puntos colmaban la agenda del Concilio Otoñal de
1903 en Wáshington, D.C. Pero un punto se cernía por sobre los demás:
las enseñanzas panteístas del Dr. John Harvey Kellogg, apoyadas por el
Dr. E. J. Waggoner, el pastor A. T. Jones y el Dr. David Paulson. El libro
del Dr. Kellogg The Living Temple [El templo viviente] parecía estar
dividiendo al liderazgo de la Iglesia Adventista.
Se dedicó un día entero, en el Concilio Otoñal, a estudiar la filosofía
panteísta. Todo el día los delegados lucharon con el asunto. "A eso de
las nueve de la noche, el pastor Daniells [presidente de la Asociación
General] consideró que era hora de levantar la sesión, pero no se atrevió a requerir un voto. La gente estaba muy confundida e indecisa, y
él no quería tomar una medida que solidificara cualquier conclusión.
Así que, despidió a la asamblea'' y los delegados se fueron a sus lugares
de alojamiento.
El joven "Dr. Paulson, que era un enfático adepto del Dr. Kellogg,
acompañó a Danieljs [ ..].Al llegar a la casa donde se hospedaba Daniells,
se quedaron parados bajo 'un poste de luz y conversaron un rato. Finalmente, el Dr. Paulson, mientras señalaba con el dedo a Daniells, declaró:
"-Usted está cometiendo el error de sv vida. Después de toda esta
confusión, uno de estos días se despertará rodando en el polvo, y otro
estará liderando el movimiento.
"El pastor Daniells se irguió a pesar de su cansancio [...] y respondió
con firmeza:
"-No creo en su profecía. De todos modos, preferiría rodar en el polvo haciendo lo que creo en mi alma que es lo correcto que caminar con
príncipes haciendo lo que mi conciencia me dice que está mal.
- Enfrentar el iceberg -
87
"Después de despedirse, Daniells entró a la casa, donde encontró
a un grupo de gente que lo esperaba. Parecían aliviados y exclamaron:
"-iRa llegado liberación! Hay dos mensajes de la señora de White".
Daniells escribió sobre esto más tarde: "Nadie puede imaginarse la
ansiedad con la que leí los documentos que habían llegado con la correspondencia mientras estábamos en medio de nuestras discusiones. Hubo
un testimonio de lo más positivo en cuanto a los errores peligrosos que
se enseñaban en The Living Temple [El templo viviente]".
Esto es parte del consejo que leyó:
Tengo algunas cosas que decirles a nuestros maestros
en relación con el nuevo libro The Living Temple [El
templo viviente]. Tengan cuidado de cómo apoyan las
opiniones de este libro en lo que respecta a la personalidad de Dios. Tal y como el Señor me presenta las cosas,
estas opiniones no cuentan con la aprobación de Dios.
Son una trampa que el enemigo tiene preparada para
estos últimos días [..J.
No necesitamos el misticismo que hay en este libro.
"El manuscrito completo de siete páginas [...] puede leerse en la Review and Herald del 22 de octubre de 1903". Pero la historia no termina
allí. El segundo documento estaba dirigido a los "Líderes de nuestra obra
médica" e incluía este consejo:
Después de asumir su posición de manera firme, sabia y
cautelosa, no hagan ninguna concesión en ningún punto
en cuanto a lo que Dios ha dicho claramente. Estén tan
tranquilos como una noche de verano, pero tan inconmovibles como las colinas eternas [. ..]
Al asumir esta postura, me veo ante la necesidad de
llevar la pesada carga de mostrar el mal de los planes que
sé que no provienen del Cielo. Esta es la carga que muchas
veces en el pasado el Señor ha puesto sobre mí, para que su
obra avance por los carriles correctos. iCuánto cuidado y
ansiedad, cuánta angustia mental y trabajo físico agotador podría ahorrarme en mi vejez!
Pero todavía estoy ante la necesidad de salir a la
batalla, y de cumplir en presencia de reuniones importantes el deber que el Señor ha puesto sobre mí: el deber de
corregir el curso errado de los hombres que profesan ser
88
- Los que vieron ... y creyeron -
cristianos, pero que están haciendo una obra que tendrá
que ser invalidada con enormes pérdidas, tanto financieras como en la vacilación de la confianza de la gente.
''A la mañana siguiente, los dirigentes se reunieron para el Concilio.
Después de orar, el pastor Daniells se puso de pie y les dijo a los hermanos
que había recibido dos mensajes importantes de parte de la hermana
White [...].Ellos permanecieron sentados en atento silencio mientras él
leía. A medida que se presentaba ante la asamblea una declaración tras
otra que exponían la falsedad de las enseñanzas de The Living Temple [El
templo viviente], se escuchaban muchos amenes en voz alta y las lágrimas
corrían libremente". En ese momento, la opinión se volvió en contra de
aceptar las enseñanzas panteístas del libro.
El pastor Daniells estaba abrumado por estos acontecimientos. Pocos
días después, mientras el Concilio Otoñal todavía estaba sesionando, le
escribió a Elena de White:
Estamos en la mitad de nuestro Concilio, y estoy terriblemente presionado con el trabajo, pero debo tomarme un minuto esta mañana para decirle qué bendición maravillosa
han sido sus comunicaciones para nuestro Concilio. Los
mensajes de Dios nunca.fueron más necesarios que en este
preciso momento; y los mensajes que él le envió a su pueblo
nunca fueron más al punto que los que usted nos.envió.
Han sido exactamente lo que necesitábamos, y llegaron
en el momento justo de día en día a nuestro Concilio [..J.
Llegaron exactamente en el momento oportuno. El conflicto
fue duro, y no sabíamos cómo saldrían las cosas. Pero su
mensaje claro, limpio y hermoso llegó y resolvió la controversia.
digo que todas las partes lograron una armonía
perfecta, pero a los que estaban del lado correcto les dio
fuerzas para mantenerse de pie, y mantuvieron su postura.
No
Pocos días después, Daniells se refirió a una segunda carta dirigida a
"Los líderes de nuestra obra médica'' que había recibido de Elena de White.
Su mensaje llegó justo el día apropiado: un día antes
habría sido demasiado temprano. Lo leí ante el Concilio
ayer, y produjo una impresión muy profunda...
En cuanto a mí, cuando recibí esta última comunicación, lo único que pude hacerfue sentarme a llorar. Du-
- Enfrentar el iceberg -
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rante un año entero había estado bajo una terrible presión
mental. Había visto lo malo, pero no me atreví a decir todo
lo que sabía que debía decirse. No podía renunciar ni a un
centímetro de terreno. Sabía que no sería lo correcto, y sin
embargo muchos de mis hermanos me malinterpretaron,
y me acusaron de un espíritu duro e inflexible, y con un
deseo de hacer la guerra.
Esta comunicación, que llama a nuestros hermanos
a asumir una postura firme, me trajo gran alivio, y la
terrible carga que a veces me aplastaba, en cierta medida,
se desprendió de mí.
Pocos días después le escribió a Guillermo C. White, el hijo de Elena,
sobre la relevancia y la puntualidad de los testimonios que acababa de
recibir:
Sería imposible para mí hallar palabras para exponer, de manera tan clara y convincente y, me temo, tan
fiel como yo quisiera, los hechos relativos a la recepción,
presentación e influencia de los testimonios recibidos de
su madre durante nuestro reciente Concilio. Nunca en mi
vida he visto evidencias tan señaladas del liderazgo de
un Ser omnisapiente como lo que vi en conexión con las
experiencias mencionadas. Solo la mente divina podría
haber previsto nuestra condición y nuestras necesidades,
y nos ha enviado la ayuda exacta que necesitábamos
precisamente en el momento oportuno. Creo que este es el
sentimiento de casi cada miembro del Concilio.
Pero hay más en esta historia, probablemente la parte más sorprendente. Después de "recibir estas comunicaciones del pastor Daniells,
Elena de White le escribió explicándole por qué recibió los mensajes en
el momento preciso:
Poco antes de enviarle los testimonios que usted dijo que
llegaron justo a tiempo, leí un incidente acerca de un barco
que hizo frente a un iceberg en una neblina. Dormí poco
durante varias noches. Me parecía estar aplastada como un
carro bajo las gavillas. Una nochefue presentada claramente una escena delante de mí. Navegaba un barco en medio de
una densa neblina. De pronto el vigía exclamó: "ilceberg a
90
- Los que vieron ... y creyeron -
la vista!"Allí, como una elevada torre por encima del barco,
estaba un gigantesco iceberg. Una voz autorizada exclamó:
"iHazlefrente!" No hubo un momento de vacilación. Se demandaba acción instantánea. El maquinista dio marcha a
todo vapor y el timonel dirigió el barco directamente contra
el iceberg. Con un crujido golpeó el témpano. Hubo una
terrible sacudida, y el iceberg se rompió en muchos pedazos
que cayeron sobre la cubierta con un estruendo semejante
al trueno. Los pasajeros fueron violentamente sacudidos
por la.fuerza de la colisión, pero no se perdieron vidas. El
navío se dañó, pero no sin remedio. Rebotó por el contacto,
temblando de proa a popa como una criatura viviente.
Entonces siguió adelante en su camino.
Bien sabía yo el significado de esta visión. Había
recibido mis órdenes. Había oído las palabras, como una
voz de nuestro Capitán: "iHazlefrente!" Sabía cuál era
mi deber y que no había un momento que perder. Había
llegado el tiempo de una acción decidida. Sin demora,
debía obedecer la orden: "iHazlefrente!"
Por eso usted recibió los testimonios en ese momento.
Esa noche estaba en pie a la una, escribiendo a toda la
velocidad con que mi mano podía correr sobre el papel.
Todos hemos estado en nuestros puestos como centinelas fieles, trabajando día y noche para enviar al Concilio la instrucción que pensamos que le sería de ayuda.
"Elena de White muchas veces comenzaba a trabajar a medianoche.
Cuando sus empleados llegaban a la oficina por la mañana, comenzaban a
copiar las hojas que ella había escrito. Estas copias le eran pasadas a ella para
editar. Mientras tcy1to, ella había escrito aún más, y ellos trabajaban durante
todo el día. Entonces, los secretarios trabajaban durante toda la noche para
preparar el material a fin de poder enviarlo en el primer tren de la mañana.
"Trabajaban hasta el último minuto y, cuando escuchaban el silbido del
tren en la estación Barro, al norte de Elmshaven, D. E. Robinson, uno de los
secretarios, se subía de un salto a una bicicleta con las cartas en el bolsillo.
Se apresuraba por recorrer los tres kilómetros con el tren hasta el paso a
nivel, y de allí hasta la estación, para echar las cartas en el vagón postal. Días
después llegaban a destino justo en el momento necesario. Todos entendían
que la mano de Dios estaba obrando". Este episodio fue uno de los tantos en
donde Dios gravitaba sobre su mensajera y su mensaje, incluso hasta la hora
y el día exactos en que se los necesitaba, ni un día antes ni un día después.
Capítulo 20
Sentido común para abrir una
escuela
Elmshaven, 14 de enero de 1904
El sentido común de Elena de White fue un rasgo distintivo de su carácter durante toda su vida. Se podrían escribir muchos capítulos acerca
de cómo ejerció el sentido común para resolver polémicas sobre muchos
temas durante todo su extenso ministerio.
Una de estas veces ocurrió en su propia sala de estar, en Elmshaven,
ell4 de enero de 1904, cuando tenía 77 años. El problema: a qué edad
deberían comenzar la escuela los niños. "Se había iniciado una escuela de
iglesia para atender a la iglesia del sanatorio, de la que ella era miembro
[. ..].Tres maestros enseñaban a 35 niños [. ..].Sin embargo, no se hizo
ninguna provisión para los niños más pequeños, porque se argumentaba
que Elena de White había aconsejado [...] que 'los padres deberían ser
los únicos maestros de sus hijos hasta que estos hayan llegado a los ocho
o diez años de edad [. ..]. La única aula para niños de ocho a diez años
debería ser el aire libre, en medio de las flores que se abren y de las hermosas escenas de la naturaleza. Y su único libro de texto debería ser el
de los tesoros de la naturaleza' ".
Pero había surgido una división en la iglesia sobre la edad adecuada para
inscribirlos en la escuela. De modo que un jueves de mañana, temprano, la
junta de la escuela de iglesia del sanatorio se reunió en la sala de Elena en
Elmshaven. La agenda: "analizar con Elena de White si la escuela de iglesia
del sanatorio debía brindar enseñanza para niños menores de diez años [...].
"Como iglesia, los adventistas del séptimo día recién estaban comenzando a establecer escuelas que aceptaban a niños por debajo del noveno
grado. En los colegios de Battle Creek y de Healdsburg durante años se
habían impartido los grados inferiores, pero [. ..] se habían hecho pocos
esfuerzos en otros lados".
92
- Los que vieron ... y creyeron -
Pero la cuestión más importante esa mañana era cómo entender
ciertas directivas específicas de Elena de White y de qué manera debían
interpretarlas los líderes de la iglesia.
Con antelación a la reunión, Elena de White se había enterado de que
había niños menores de diez años a los que se les negaban los privilegios
de la enseñanza debido a sus declaraciones anteriores en los Testimonios.
Hay un informe estenográfico archivado de 25 páginas de esa importante reunión. Elena de White abrió el debate diciendo: ''A través de
los años he recibido mucha instrucción con respecto a la importancia
de mantener una firme disciplina en el hogar. He tratado de poner por
escrito esa instrucción y de transmitirla a los demás".
Elena, entonces, "analizó las responsabilidades de la paternidad y la
importancia de las influencias hogareñas correctas. Hizo hincapié en la
responsabilidad de que las madres les enseñen a sus hijos lecciones que
deberían aprender en los primeros años de vida''. Luego señaló que, según
la luz que se le dio, muchas familias estaban lejos del ideal:
Muchos de los que entran en la relación matrimonial no
se dan cuenta de todas las sagradas responsabilidades que
trae aparejadas la maternidad. Muchos carecen de capacidad disciplinaria. En muchos hogares hay poca disciplina, y a los niños se les permite hacer lo que quieran. Tales
niños andan a la deriva de aquí para allá; no hay nadie
en el hogar capaz de dirigirlos correctamente, nadie que
pueda sentar los debidos fundamentos que debe gobernar
su futura educación.
Elena de White "estaba especialmente preocupada por las influencias
que tenían sobre los pacientes del sanatorio los niños que andaban sueltos,
'con ojos penetr~Yites, ojos de lince, que deambulan sin nada que hacer'
y 'haciendo travesuras'.
"Considerando las circunstancias [de la desatención de los padres],
ella declaró que, según la luz recibida, 'lo mejor que se puede hacer es
tener una escuela [ ...] para aquellos que pueden ser enseñandos, y ejercerse una acción guiadora sobre ellos, lo cual puede hacer un maestro
de escuela'.
"Pidió una división inferior en la escuela del sanatorio donde se pudiera instruir a niños de siete u ocho años. 'Aprenderán en la escuela
aquello que con frecuencia no aprenden fuera de ella, excepto por la
asociación con otros' ".
-
Sentido común para abrir una escuela -
93
Elena de White explicó el contexto de la declaración sobre los niños
de diez años que había hecho años antes:
Cuando escuché las objeciones: que los niños no podían
asistir a la escuela hasta que cumplieran diez años, quise
decirles que cuando me fue dada la luz de que los niños
no deberían asistir a la escuela hasta que tuvieran edad
suficiente para ser enseñandos, no había [entonces] una
escuela que guardara el sábado. A los niños debe enseñárseles en el hogar la debida conducta para que no sean
descarriados cuando asistan a la escuela. La maldad que
se manifiesta en las escuelas públicas sobrepasa casi toda
concepción posible. Esto es así.
Luego "prosiguió expresando su preocupación por aquellos que hacen
una aplicación irrazonable de sus escritos:
He estado bien preocupada con respecto a la idea: 'La
Hna. White ha dicho tal y tal cosa, y la Hna. White ha
dicho esto y aquello, y por lo tanto vamos a proceder como
ella dice'.
Dios quiere que tengamos sentido común, y que razonemos con sentido común. Las circunstancias alteran las
condiciones. Las circunstancias cambian la relación de
las cosas".
"Dirigiéndose a la junta después de estas palabras de apertura, declaró: 'No diré más por ahora, porque quiero saber bien de qué debo hablar.
Quisiera que se trajeran las objeciones, el por qué los niños no deberían
tener una educación' ".
Una maestra señaló que "si tenemos algunos niños más, debemos
tener un poco más de ayuda''. A esto, Elena de White respondió que deberían tenerse en cuenta muchos factores:
Quiero que tomen nota de lo que he dicho. En primer
lugar, entiéndanlo. [Elena de White no comía pavo. Decía
lo que pensaba cuando era necesarioJ Esta es la luz que
me ha sido dada en cuanto a estas cosas.
Aquí hay niños que son despiertos. Son niños de cinco
años de edad que pueden ser educados tan bien como
muchos niños de diez años, desde el punto de vista de sus
94
- Los que vieron ... y creyeron -
capacidades, para entender los asuntos y los temas de la
madre.
Elena de White coincidió en que quizá tendría que agregarse otra
sala al edificio escolar, y declaró: "Cada uno de nosotros debe sentir la
responsabilidad de proporcionar esa pieza". Continuó dando razones
para su consejo:
Las madres que quieran tener a sus hijos en casa, y son
competentes del todo para hacerlo y prifieren disciplinarlos ellas mismas, nadie tiene objeción alguna para que lo
hagan. Ellas pueden hacerlo. Pero debe hacerse provisión
para que sean educados los niños de todos los que están relacionados con estafábrica de alimentos, con el sanatorio
y con las cosas que se hacen aquí. Debemos hacer que [esa
obra] alcance las más altas normas. [..]
Digo que estos niños pequeños deben tener una
educación, precisamente la que adquirirían en la
escuela. Deben tener la disciplina de una escuela bajo
una persona que entienda cómo tratar con los niños de
acuerdo con sus diferentes temperamentos. Deben tratar
de hacer que estos niños entiendan sus responsabilidades mutuas y su responsabilidad para con Dios. Deben
haberse grabado en sus mentes los mismos principios
que los capacitarán para los grados superiores y para la
escuela más alta.
[..]Él desea que esta educación comience con los pequeñitos. Si la madre no tiene el tacto y la capacidad, si no
sabe cómo tratar con las mentes humanas, debe ponerlos
bdjo alguijlt que los eduque con disciplina, los modele y
forme sus mentes.
¿He presentado este asunto de tal manera que pueda ser
entendido?
Guillermo C. White, el hijo de Elena, también asistió a la reunión.
Él explicó que su interés en la situación era grande. Le preocupaba que
se adoptaran políticas y currículos consistentes, ya que se estaban estableciendo escuelas de iglesia en todo el país, y a lo largo y a lo ancho del
mundo. Declaró:
-
Sentido común para abrir una escuela -
95
Mi interés en esta escuela reside en el hecho de que nosotros tenemos el privilegio de sentar un modelo. Los éxitos,
los fracasos y los reglamentos de esta escuela afectarán la
obra de nuestras escuelas de iglesia por toda California y
mucho más allá, debido a la larga experiencia de la Hna.
Peck como maestra, y a la obra que ella ha hecho contigo,
madre, al ayudar en la preparación del libro sobre educación. Todas estas cosas han colocado a esta escuela en
un lugar en que se ha convertido en una ciudad asentada
sobre un monte.
Así es como Elena de White resumió la reunión:
Debemos educar a nuestros hijos de modo que podamos
llegar a las puertas de la ciudad y decir: ''He aquí, Señor,
yo y los hijos que me has dado". No debemos llegar sin
nuestros hijos para oír las palabras: "¿Dónde está mi rebaño, mi pequeño rebaño que te di, ese hermoso rebaño que te
di, dónde está?" Y nosotros respondemos que han sido dejados a la deriva directamente en el mundo, y por lo tanto
están incapacitados para el cielo. Lo que nosotros queremos es capacitarlos para el cielo para poder presentar al
pequeño rebaño ante Dios, y decir: ''Hice todo lo posible':
"No se publicó ninguna declaración en ese momento, pero el análisis
en esta reunión ayudó a establecer un modelo que guió a los padres que
no estaban tan asentados como para poder enseñarles a sus hijos en casa
hasta que tuviesen ocho o diez años. En consecuencia, las necesidades
de sus hijos de una educación primaria cristiana podría ser satisfecha"
si los miembros de iglesia y los padres trabajaban juntos.
"Entonces, ¿qué aprendimos aquí en esta pequeña junta escolar?
Primero, que Dios quiere que usemos el sentido común: las declaraciones
bíblicas y los escritos de Elena de White son entendidos correctamente
solo cuando se tienen en cuenta el momento, el lugar y las circunstancias. Segundo, que Elena de White no era una espectadora sin fuerza de
carácter en los asuntos de la iglesia. Tercero, que los consejos de Elena
de White son tan relevantes y actuales como las noticias de las seis.
Cuarto, que siempre es más seguro escuchar a Elena en la mayoría de
las circunstancias donde sean necesarios la claridad moral y el sentido
común. "iCreed a sus profetas!"
Dos damas compran un sanatorio
Origen del Sanatorio Paradise Valley
En 1900, Elena de White regresó a América después de vivir en Australia durante nueve años. Muchos, a los 73 años, se habrían jubilado;
pero no Elena. Su mente estaba llena de lo que podría hacerse en el sur
de California.
En la primavera de 1902, el Dr. T. S. Whitelock, de San Diego, había
descubierto la propiedad de un sanatorio que había estado desocupado
durante años. Una fuerte sequía en el sur de California había afectado
enormemente el turismo y muchas empresas. Una institución de cuatro
pisos y 38 camas en ocho hectáreas de terreno podía adquirirse por veinte
mil dólares, una fracción del costo original. En septiembre, el acreedor
hipotecario redujo el precio a doce mil dólares.
El13 de octubre de 1902, Elena escribió que se le mostró que habría
"propiedades en venta en las que ya hay edificios construidos que podrían
ser utilizados para nuestra obra, y que esas propiedades nos serán ofrecidas a un precio mucho menor que el costo original".1
Pero no había dinero disponible (y mucho menos doce mil dólares)
en la Asociación local, de unos mil cien miembros y con una deuda de
cuarenta mil dólare§y!>ero Elena vigilaba de cerca la propiedad. Pocos
meses después, la hipoteca fue ofrecida a la iglesia por ocho mil dólares. En enero de 1904, el Dr. Whitelock visitó nuevamente la propiedad.
Mientras estaba en ella, una mujer que llegó en coche dijo que venía de
parte del acreedor hipotecario que quería que la iglesia hiciese una oferta.
Luego dijo que quizá seis mil dólares cerrarían el trato.
Pero aún no había dinero a la vista. Sin embargo, "cuando le llegó la
noticia a Elena de White", en Elmshaven, al norte de California, inmediatamente "consultó con una amiga íntima, Josephine Gotzian, y luego
telegrafió al Dr. Whitelock para que ofreciera cuatro mil dólares por la
hipoteca'', que fue aceptada el27 de enero de 1904. "La [...] propiedad ahora
pertenecía a los adventistas, pero no a la Asociación de California del Sur".
- Dos damas compran un sanatorio -
97
Así es como Elena describió la propiedad:
Aquí había un edificio bien construido de tres pisos
[. ..]con galerías amplias, asentado sobre una agradable
elevación del terreno, que dominaba un hermoso valle.
Muchas de las habitaciones son grandes y bien ventiladas
[. ..].Además del edificio principal, hay un buen establo, y
también una casa de campo de seis ambientes, que puede
ser acondicionada para los ayudantes. La propiedad está
ubicada convenientemente, a menos de once kilómetros
de San Diego, y a un kilómetro de la oficina de correos de
National City. Hay nueve hectáreas de terreno. Casi la
mitad alguna vez tuvo plantaciones de árboles frutales,
pero durante la larga sequía que sufrió este país, todos
los árboles murieron excepto los árboles ornamentales y
los arbustos que rodean los edificios, y unos setenta olivos
en las terrazas [. ..]. Nunca vi un edificio ofrecido para la
venta que estuviese mejor adaptado para la obra de un sanatorio. Si este lugar se acondicionara, se vería igual que
los lugares que me fueron mostrados por el Señor.
¿cómo hicieron las dos mujeres para conseguir cuatro mil dólares?
"Elena de White [...] pidió prestada su parte de dos mil dólares [...] al Banco de Santa Helena con el ocho por ciento de interés. La señora Gotzian
proveyó los otros dos mil". Y juntas "se dieron la mano en un acuerdo de
unirse para ayudar a comprar el Sanatorio Potts". 2 No tenían pensado
hacer dinero con su especulación; "lo compraron solo para conservarlo
hasta que se pudiera organizar la entidad y que la Asociación asumiera
el control".
Pronto, un puñado de hombres y mujeres comenzaron a restaurar
el edificio, que había estado desocupado durante más de doce años. Se
reparó el edificio principal, se realizó la instalación eléctrica, se amueblaron catorce habitaciones con muebles de alta calidad comprados a
precios muy bajos a varias familias adineradas que se estaban yendo de
la zona por la prolongada sequía.
A pesar del precio milagroso y del edificio ideal, la propiedad no
era apta. El intrépido gerente, E. R. Palmer, describió la situación del
agua: "La extensión de ocho hectáreas de tierra en la que se encuentra
el edificio era tan seca como las colinas de Gilboa, con solo una perspectiva remota de que hubiese agua subterránea''. Pero "Palmer y sus
colegas sabían, por sus contactos con Elena de White, que la institución
98
- Los que vieron ... y creyeron -
se había comprado por la providencia de Dios. Tenían confianza en que
Dios encontraría una forma de satisfacer sus necesidades. N o obstante,
durante el verano de 1904", veían que los árboles se secaban y morían
por la sequía, que ya había durado más de ocho años.
Incluso Elena de White escribió acerca de los árboles: "Los pobres árboles que se secan y mueren, con su apariencia nos suplican que les demos
corrientes de agua refrescantes". Y así, Elena de White entró en acción, y
"recomendó que Palmer consiguiera los servicios de un buen pocero que era
conocido suyo, Salem Hamilton, que en ese entonces vivía en Nebraska. Por
consiguiente, fue llamado al oeste a cavar el pozo". Según relató Palmer:
Con qué ansiedad examinamos el terreno, probamos
con la vara de rabdomancia y analizamos las posibilidades [..J.
Finalmente, escogimos un lugar y comenzamos a cavar
en la tierra seca donde el polvo calaba a más de seis metros
bajo la superficie.
Eligieron un lugar justo debajo de la institución, y comenzaron a
cavar.
Elena de White viajó al sur desde Elmshaven, "y llegó a la propiedad
Potts el lunes 7 de noviembre. Hamilton había alcanzado una profundidad
de 25 metros", itodo cavado a mano! "Diariamente ella escuchaba con
interés los informes de progreso y, a menudo, conversaba con Hamilton.
Un día preguntó:
"-¿Qué va a hacer, hermano Hamilton?
"-Tengo que hacerle una pregunta -respondió él-. Si usted me la
responde, yo le daré mi respuesta. El Señor lle dijo que comprara esta
propiedad?
"-iSí! iSí! -respondió Elena-. Tres veces se me mostró que debíamos
adquirir esta propiedad específica.
"-Está bien -dijo Hamilton-, tengo mi respuesta. El Señor no nos
daría un elefante sin proveer agua para que beba -y continuó cavando.
''A esta altura ya había pasado el nivel de los 25 metros y [...] no había ninguna señal de humedad. Pero un día Hamilton creyó haber oído
el sonido de una corriente de agua en la grava en el fondo del pozo [...].
Hamilton llamó desde el pozo:
"-Señor Palmer, lle daría miedo bajar? Creo que hay agua no muy lejos.
"Palmer descendió, y escuchó claramente:
"-Como el tintinar de una campana o el sonido de un pequeño salto
de agua en las profundidades del bosque -dijo.
- Dos damas compran un sanatorio -
99
"Hamilton había cavado un túnel en una dirección, pero en vano.
Ahora hizo un túnel en otra dirección y con un golpe vigoroso y repentino su pico atravesó la arcilla hasta una buena corriente de agua tan
grande como el brazo de un hombre. El pozo pronto comenzó a llenarse.
Ni siquiera hubo tiempo para sacar todas las herramientas. Esa noche el
agua se elevó casi cinco metros en el pozo.
"Entusiasmado, E. R. Palmer se apresuró a ir a la habitación de Elena de White para anunciarle la buena noticia". Al día siguiente ella les
escribió a sus nietos:
Ayer de mañana el hermano Palmer llegó a mi habitación
en compañía del padre de ustedes [..J y nos dijo que había
casi cinco metros de agua en .el pozo. Esta mañana hay seis
metros de agua y las herramientas están en elfondo del
pozo. No puedo expresarles cuán contentos estamos todos.
iAbundancia de agua para muchos propósitos! Esto no se
puede valuar en oro o plata. El agua significa vida[..] El
Señor ha respondido a todas nuestras expectativas, y tendremos razones para agradecer [..J. Quiero alabar al Señor
con corazón, alma y voluntad.
Debido al interés inmediato de las comunidades vecinas, comenzaron a llegar pacientes antes de que el hospital abriera oficialmente. Al
comienzo, ni siquiera se había preparado alojamiento para el personal
de enfermería, que inicialmente vivió en carpas. Pero nació un hospital
admirable y extraordinario.
Hoy, el Hospital Paradise Valley tiene una capacidad de 237 camas
con todas las especialidades de un hospital moderno, incluyendo un helipuerto. Toda esta extraordinaria historia debido a una pequeña señora
que vio lo que otros no podían ver y a otros que confiaron con su vida en
lo que vio Elena de White. Ni siquiera un pozo en busca de agua escapó
de la atención de la mensajera del Señor.
1
2
Carta 157b, 1902.
Carta 97, 1904.
"Actuar de inmediato"
El milagro de Loma Linda
En 1905, Elena de White tenía 78 años, pero la palabra jubilación
no era parte de su vocabulario. Ni del vocabulario de otros dirigentes de
la iglesia, como Stephen Haskell y John Loughborough. Elena ya tenía
mucho que hacer con el establecimiento de dos centros adventistas de
salud al sur de California: uno en Paradise Valley (1904), cerca de San
Diego, y otro en Glendale (1904), cerca de Los Ángeles. Sin su visión y
liderazgo, esas dos instituciones, que actualmente están en funcionamiento, probablemente nunca hubiesen visto la luz del día.
Y Dios tenía planes adicionales para la obra médica adventista en el
sur de California. Durante algún tiempo, antes de su viaje para asistir al
congreso de la Asociación General de 1905 en Wáshington, D.C., los pensamientos de Elena de White "en repetidas ocasiones habían sido llamados
a la zona de Redlands-Riverside-San Bernardino [...] como un lugar donde
la iglesia debía tener un sanatorio [...] el tercero [. ..] al sur de California.
"Por increíble que les pareciese a los mil cuatrocientos miembros de
la Asociación local y sus líderes, a quienes se les había advertido que no
entrasen más en deuda, la mensajera de Dios escribió estas instrucciones
a J. A. Burden, gerente del Sanatorio de Glendale: 'Se me han presentado
Redlands y Riverside como lugares que deberían ser trabajados [...]. Por
favor, consideren la conveniencia de establecer un sanatorio en la vecindad
de esas poblaciones'.
"En respuesta [.. .] se designó una comisión para buscar un lugar.
Ellos creían" que el complejo hotelero Loma Linda era una propiedad
adecuada, pero el precio de Sti mil dólares era demasiado para tenerlo en
cuenta. Sin embargo, para el1° de abril, el precio había bajado, y el hotel
podía comprarse por 45 mil dólares.
"El [...] 4 de mayo, cuando el tren en dirección al este se detuvo en la
estación de Los Ángeles, algunos de los hermanos, incluyendo al pastor
Burden, abordaron el coche para contarle a la hermana White sobre
-
"Actuar de inmediato" -
101
Loma Linda. Ella se interesó inmediatamente y les rogó con entusiasmo:
"-Averigüen todos los detalles y escríbanme inmediatamente a
Wáshington".
Tres días después de que Elena llegara a Wáshington, el viernes 12
de mayo, la carta prometida fue puesta en manos de Elena de White.
"Se la leyó en voz alta a su hijo Guillermo C. White:
Apreciada hermana White: Mientras estábamos en
el tren en Los Ángeles, le hablamos de una propiedad
para la venta cerca de Redlands que parecía estar bien
adaptada para un sanatorio [..J. Le estoy enviando un
pequeño folleto que contiene algunas imágenes y una
descripción breve de la propiedad, pero las palabras y
las fotos apenas pueden describir débilmente su belleza.
Sencillamente, es ideal y espléndida para un sanatorio.
Los edificios están en excelentes condiciones, bien amueblados, califaccionados con calor por vapor e iluminados
con electricidad. Todo está completo como para comenzar
a funcionar inmediatamente. El edificio principal tiene
46 habitaciones, y hay cuatro casas con cuatro habitaciones cada una, con baño incluido. Tres de estas casas tienen
cuatro porches cada una, con amplias ventanas, para que
las camas puedan ser llevadas sobre ruedas hasta el porche, y los pacientes puedan dormir al aire libre. Hay otro
hermoso edificio: una casa de dos plantas y nueve habitaciones con baño incluido. Otro edificio que se ha utilizado
como pabellón recreativo, y que tiene cuatro salas preciosas, serviría para un buen gimnasio y como capilla.
Hay establos y galpones, y una casa para los obreros.
Hay cuatro hectáreas de huerto de naranjos con buena .
producción, seis hectáreas de alfalfa, tres hectáreas de damascos, ciruelos y almendros. El resto de los terrenos está
hermosamente organizado en forma de césped, caminos
de acceso y aceras, habiendo unos dos kilómetros de veredas pavimentadas. Los edificios principales están sobre
la cima de una hermosa colina a unos cuarenta metros
sobre el valle. El edificio principal está rodeado de laureles de montaña de entre nueve y doce metros de altura.
Hay cinco caballos, cuatro vacas, 150 gallinas, 35
pavos, algunos cerdos, herramientas agrícolas, sulkys,
carruajes y carros.
102
- Los que vieron ... y creyeron -
El lugar tiene una amplia provisión de agua de las
montañas. Un pozo artesiano, que tiene una buena estación de bombeo, da agua en abundancia, si por alguna
razón el agua de la montaña se acabara. El agua es
conducida mediante tuberías en toda la extensión de las
treinta hectáreas.
El lugar les costó 150 mil dólares a los dueños actuales.
Ellos trataron de explotarlo como un hotel turístico, pero
fue un fracaso, y perdieron dinero, así que se cerró ell 0
de abril. Los accionistas están sofocados financieramente, y han dado orden de que la propiedad se venda por
cuarenta mil dólares. Solo el mobiliario de los edificios
costó doce mil dólares, y tiene solamente dos años y medio
de uso.
Varios de nosotros fuimos a ver el lugar hoy, y quedamos profundamente impresionados de que este es el lugar
que el Señor le ha mostrado a usted, cerca de Redlands
y Riverside, en el que debería llevarse adelante la obra
médica. Está a ocho kilómetros de Redlands.
La pregunta es: ¿qué haremos? Debemos actuar inmediatamente, porque la empresa está ansiosa por vender, y
hay otros que lo quieren [..J.
No deseamos avanzar apresuradamente; nos gustaría
saber qué opinan sobre el tema usted y los hermanos de
Wáshington que han salido de este campo. Deseo que, si
fuese posible, usted lleve el tema y lo analice en consulta
con ellos, y que ellos nos envíen un telegrama. No sé por
cuánto tiempo podemos mantener la qforta en pie, pero
trataremos de hacerlo hasta que tengamos noticias de
ustedes. Creo que los que están considerando el asunto
aquí tienen una convicción tan fuerte de que deberíamos
conseguir el lugar que pagarán el depósito al contado, aun
cuando lo perdamos, antes que permitir que la propiedad
se nos escape de las mano:.: antes de poder tener noticias de
los hermanos de Wáshington.
Cómo me hubiese gustado que se haya detenido para ver
la propiedad de camino a la junta; pero quizá pueda regresar por este camino y verla entonces. Espero que pueda
enviarnos algún consejo ni bien reciba esta carta.
Le deseo muchas bendiciones del Señor en la junta. La
saluda atentamente, J. A. Burden.
-
'JI.ctuar de inmediato" -
103
''Al terminar de leer, le dijo a Guillermo que creía que el lugar era el
que le había sido presentado varios años atrás.
"Posteriormente escribió que la descripción dada por el pastor Burden respondía en cada aspecto a los lugares que había sido instruida que
se abrirían para la iglesia, a precios por debajo de su costo original. Los
términos que le ofrecieron al pastor Burden eran de cinco mil dólares al
contado y montos iguales en agosto [...] septiembre [ .. J y diciembre [...]
que hacían un total de veinte mil dólares. El plazo de los veinte mil dólares
restantes se cumpliría en tres años". ¿cómo podrían reunir el dinero? La
Asociación de California del Sur estaba muy endeudada, y la Asociación
General también afrontaba problemas financieros agobiantes.
"-Debemos actuar de inmediato -le dijo Elena a su hijo.
"-Guillermo -preguntó ella-. ¿Harás lo que te pida?
"-Generalmente lo hago -respondió él.
"Entonces vino su pedido:
"-Quiero que le envíes un telegrama al pastor Burden para que adquiera la propiedad inmediatamente.
"Mientras Guillermo salía de la sala para enviar el telegrama, ella lo
hizo volver y le hizo prometer que enviaría el telegrama inmediatamente,
antes de buscar consejo de otra persona en cuanto al asunto.
"Él se lo prometió, y el telegrama fue enviado". Elena sentía una profunda convicción de que Loma Linda era el lugar que Dios deseaba que su
pueblo tuviese. Más adelante, "ella explicó su instrucción a W. C. White
así: 'No consulté con nadie, porque pensé que esto nos retrasaría, y creí
que podíamos avanzar con el tema sin colocar el peso sobre la junta.
"El telegrama del viernes fue seguido de una carta al pastor Burden
el domingo 14 de mayo, que comenzaba así:
Acabo de leer su carta. Ni bien terminé de leerla, dije:
'No consultaré con nadie; porque no tengo ninguna duda
al respecto'[..]. Asegure la propiedad a toda costa, para
que pueda ser adquirida, y luego obtenga todo el dinero
que pueda y haga suficientes pagos como para poseer el
lugar. Esta es exactamente la propiedad que debemos tener. No se demore; porque es exactamente lo que necesitamos[. ..). Nosotros haremos todo lo posible para ayudarlo
a reunir el dinero. Sé que Redlands y Riverside deben ser
trabajados, y oro para que el Señor sea misericordioso, y
no permita que ningún otro obtenga esta propiedad en
vez de nosotros [. ..].
104
- Los que vieron ... y creyeron -
Esta es la palabra del Señor. Abran todo lugar posible.
Debemos trabajar confe, aferrándonos de un poder que
se nos prometió que haría grandes cosas por nosotros.
Debemos extendernos con fe en Los Ángeles, en Redlands y
en Riverside.
"Durante las tres semanas siguientes, las cartas y los telegramas [...]
cruzaban el continente de un lado al otro. Los dirigentes de la Asociación de California del Sur, después de pedir consejo a los dirigentes de la
Unión, telegrafiaron diciendo que la Asociación no podía asumir ninguna
responsabilidad en el asunto".
¿De dónde saldrían los fondos? "El jueves 25 de mayo, el pastor Burden y un amigo de confianza, el pastor R. S. Owen, profesor de Biblia del
colegio San Fernando, tomaron el tranvía interurbano hacia la costa para
visitar a un agricultor que creían que tenía cierta cantidad de dinero. Vivía
a dos kilómetros y medio de la parada del tranvía. Cuando llegaron a su
cabaña, no había nadie en casa[...]. Los dos hombres regresaron hasta
la parada y esperaron.
"Ya era tarde ahora y, cuando el tranvía interurbano avanzaba en
dirección a ellos, no llegaron a hacerle señas para que pare [. ..].Tendrían
que esperar otras dos horas para el próximo tranvía, así que los hombres
regresaron a la cabaña, que ahora tenía luz. Al encontrar al agricultor,
a su esposa y a su hija, se presentaron y pronto explicaron su misión. El
pastor Burden informa que, cuando le leyeron el telegrama de la señora
de White y las cartas posteriores al agricultor, este exclamó de repente:
"-iAlabado sea el Señor!"
"Él había estado orando para que el Señor enviara a alguien para
comprar su campo. Lo había vendido pocos días antes y ahora estaba
dispuesto a facilitar dos mil cuatrocientos dólares para el proyecto de
Loma Linda. Al día siguiente, el pastor Burden telefoneó al representante
de la Asociación Loma Linda [propietarios del hotel] para avisarles que
estaba dispuesto a negociar. Se pagaron los mil dólares, y se comenzó
a trabajar en un contrato [...].Cuatro mil dólares más tenían que estar
disponibles para el15 de junio, para cubrir el primer pago de cinco mil
dólares, o el depósito se perdería[...].
"Los planes de viaje disponían que [Elena de White y su hijo Guillermo] llegasen a Redlands a las diez de la mañana del lunes 12 de junio. Los
obreros locales y de la Unión saldrían de Los Ángeles y se encontrarían
con ellos en Loma Linda. Mucho dependía de esta reunión''. Si la compra
no se aprobaba, el pastor Burden perdería los mil dólares prestados para
cumplir el contrato.
-
':Actuar de inmediato" -
105
Cuando Elena de White vio el edificio principal, dijo:
"-Guillermo, he estado aquí antes.
"-No, mamá -respondió él-, nunca antes estuviste aquí.
"-Entonces este es exactamente el lugar que el Señor me ha mostrado
-dijo ella-, porque me resulta muy familiar.
"Elena de White se dirigió a uno de los pastores y declaró:
"-Debemos conseguir este lugar. Deberiamos razonar de causa a
efecto. El Señor no nos ha dado esta propiedad para ningún uso común".
'~l ver el terreno y los edificios, Elena dijo vez tras vez:
"-Este es exactamente el lugar que el Señor me ha mostrado".
Mientras recorrían los edificios, Elena comentó:
"-Este edificio será de gran valor para nosotros. Se establecerá una
escuela aquí. Redlands se convertirá en un centro al igual que Loma
Linda. Battle Creek se está cayendo. Dios restablecerá su obra médica
en este lugar".
Pero, "a pesar de las evidencias de la conducción de Dios [.. .] el grupo que encaraba un proyecto tan estupendo no estaba preparado para
tomar ninguna decisión. Los problemas financieros parecían demasiado
grandes.
'~sí que, antes de tomar alguna medida, se creyó que el asunto debía
ser presentado ante la Iglesia Carr Street de Los Ángeles, la más grande
de la Asociación. Se citó la reunión para las diez de la mañana del día
siguiente".
Elena "no se reunió con la junta de la Asociación esa noche, pero
allí se sostuvo que si cien hombres de negocios y médicos, con todos sus
recursos, habían fracasado con su proyecto de Loma Linda, ¿qué deberia
llevar a pensar al grupo de la iglesia que podrían tener éxito? De modo
que, faltando cuatro días para ell5 de junio, cuando se vencía el primer
pago, la junta suspendió esa reunión para esperar a ver qué sucedería en
la reunión citada en Los Ángeles al día siguiente.
"Para las diez de la mañana [...] la iglesia de Carr Street estaba llena
de gente. La hermana White repasó lo que se le había revelado sobre la
obra médico-misionera que debía ser llevada a cabo en el sur de California.
Le dijo a la audiencia que Loma Linda trajo a su mente las visiones de
las propiedades que debían adquirirse para un sanatorio. Los miembros
de iglesia votaron a favor de adquirir la propiedad para un sanatorio.
"Sin embargo, los administradores de la Asociación de California
del Sur pensaban que debían contar con la opinión de más de una iglesia
antes de que la Asociación pudiera'' patrocinar el proyecto. Decidieron
que los delegados de las iglesias de toda la Asociación se reunieran el 20
de junio para tomar una decisión.
106
- Los que vieron ... y creyeron -
Mientras tanto, el pago de cuatro mil dólares vencería ell5 de junio.
"El agricultor de la costa había suministrado dos mil cuatrocientos dólares. El pastor Burden habló con una hermana, Belle Baker. Ella no veía
razón para dudar y dijo que pondría mil dólares.
"-Puede llegar a perderlos -le advirtió Burden.
"-Asumiré el riesgo -respondió ella.
"Entonces Burden consultó con su amigo R. S. Owen.
"-No tengo el dinero -declaró Owen-, pero hipotecaré mi casa
para esto.
"[...] El pago de junio se hizo a tiempo.
"Cinco días después, el 20 de junio, se reunieron los miembros
de la Asociación de California del Sur. Se les presentó el tema de si
Loma Linda debía comprarse, y si así era, si sería administrado 'por
una asociación privada o por la Asociación, que asumiría la responsabilidad financiera del proyecto'. Elena de White estaba presente en
la reunión. Habló por más de una hora sobre lo que debía hacerse en
el sur de California y suplicó que se comprara la propiedad de Loma
Linda [...]. Declaró:
"-Esta es exactamente la propiedad que debemos tener.
"Aun así, los principales dirigentes de la Asociación de California del
Sur dudaban. ¿cómo podrían, con la tremenda deuda de la Asociación,
involucrarse más para adquirir propiedades e iniciar sanatorios? [...]
"Entonces, el pastor G. A. lrwin, el vicepresidente de la Asociación
General recientemente electo, se paró para hablar. Estaba en una misión
especial en California, y mientras pasaba por Los Ángeles se había visto
impulsado a visitar Loma Linda. Esa mañana acababa de llegar desde
allí; ahora hábló en favor de adquirir esa institución. Repasó una cantidad
de incidentes" del pasado, en los que los obreros y los miembros de iglesia
habían seguido el consejo de la señora de White y, como resultado, Dios
había bendecido los proyectos con éxitos.
"La audiencia escuchaba atenta mientras el pastor Irwin hablaba
con palabras medidas:
"-Aunque la Asociación está sumamente endeudada, creo que será
para la gloria de Dios que asuma esta responsabilidad.
"Las palabras del pastor Irwin [...] hicieron cambiar las cosas. Los
miembros votaron por unanimidad a favor de adquirir la propiedad
de Loma Linda y abrir un tercer sanatorio al sur de California. Se
ofreció dinero en efectivo y promesas de pago por un total de mil cien
dólares en apoyo al voto tomado. La respuesta entusiasta de una nueva
miembro de iglesia, la hija del general Harrison Gray Otis, fundador
del Times de Los Ángeles, que prometió dar diez mil dólares, si es
-
')ictuar de inmediato" -
107
que lograba que el dinero fuese liberado de otro compromiso, dio un
apoyo alentador [ ...].
"Pero, a medida que los días pasaban, seguía estando la fastidiosa
pregunta: ¿De dónde saldrían los cinco mil dólares para el pago [de
agosto]?
"Elena de White [...] se estaba esforzando por recaudar dinero.
Pero no había respuestas inmediatas". Una sugerencia parecía ofrecer una solución lógica: ivender algo de tierra! '~l enterarse de esto,
Elena de White le escribió a Burden el 5 de julio: 'Pensé en escribirle
algunas líneas para asegurarle que ni un metro de ese terreno debe ser
vendido para recaudar dinero. Pediremos préstamos al banco antes
de hacer esto'".
Finalmente, el miércoles 26 de julio "amaneció sin ningún dinero a la
vista todavía. Si el pago no estaba disponible para las dos de la tarde, la
propiedad y el pago inicial de cinco mil dólares se perderían". La junta de
la Asociación se reunió esa mañana en Los Ángeles bajo una densa nube.
"Algunos pensaban que las circunstancias justificaban las inquietudes
que habían sopesado desde el comienzo. Otros, relató el pastor Burden,
'recordaban las claras palabras que nos habían llegado mediante los Testimonios, y se negaban a reconocer que hubiese sido un fracaso'. Cuando
alzaron las manos al cielo en busca de liberación, alguien sugirió que el
correo de la mañana aún no había llegado".
El pastor Burden continuó:
Poco después de esto, se escuchó que el cartero subía por
las escaleras.Abrió la puerta y entregó la correspondencia. Entre las cartas, había una que tenía el sello postal de
Atlantic City, Nueva Jersey.
La carta fue abierta y se descubrió que contenía un giro
por cinco mil dólares, exactamente el monto necesario
para el pago.
Huelga decir que los sentimientos de los que habían sido
críticos cambiaron rápidamente. Los ojos se llenaron de
lágrimas, y uno que había sido especialmente crítico fue el
primero en romper el silencio. Con voz trémula, dijo:
-Parece que el Señor está en este asunto.
-Sin duda alguna -fue la respuesta-, y lo seguirá estando hasta llevarlo a su victoria.
La influencia que llenó la sala aquel día acalló el espíritu de crítica. Fue tan solemne como el Día del Juicio.
108
- Los que vieron ... y creyeron -
lQuién envió ese cheque desde Atlantic City? Una mujer a quien
Elena de White le había pedido ayuda. El pastor Burden señaló:
El Señor puso en su corazón el deseo de responder y de
despachar la carta justo a tiempo, cuando nuestrafe había
sido probada casi hasta el límite, para que pudiera revivir
y fortalecerse.
Pronto estábamos en la ventanilla del banco para pagar
los cinco mil dólares. Cuando nos entregaron el recibo en
el mostrador, parecía que una voz nos decía: "Fíjense que
por poco pierden ese pago. ¿cómo van a hacer para saldar
el próximo, dentro de un mes?" De corazón, respondimos:
"Llegará sin duda alguna, aunque no sepamos la fuente':
Le agradecimos a Dios y recobramos el valor de creer que el
Señor iba delante de nosotros.
"El pago de cinco mil dólares del 26 de agosto se hizo a tiempo y,
pocos días después, también se cumplió con el pago del 31 de diciembre.
De hecho, en vez de que el pago, de veinte mil dólares, de la segunda parte
del precio de compra llevara tres años, como lo permitía el contrato, este
fue cubierto en seis meses".
Pero la adquisición del terreno para un sanatorio y una escuela de
capacitación para enfermeros solo era el comienzo de la visión de Elena
de White para Loma Linda. ¿y la escuela de medicina?
En 1905, la señora de White escribió: "Con respecto a la escuela,
diría que hagan todo lo posible en la educación de enfermeros y médicos".
"En su informe a los redactores de la Review and Herald sobre la
dedicación de Loma Linda el15 de abril de 1906, ella anunció:
Loma Linda ha de ser no solamente un sanatorio, sino
también un centro educacional[. ..]. Ha de establecerse una
escuela aquí para la preparación de misioneros médicos
evangelistas':
El "20 de septiembre, se inauguró el Colegio de Evangelistas de Loma
Linda, aunque sin un claro sentido de dirección [ ...].
"El30 de octubre de 1907, Elena de White [...] les habló a los alumnos
y a los docentes sobre los principios elevados que debían caracterizar
los rasgos educativos de la obra. Al cierre de su presentación, el pastor
Burden le hizo una pregunta que ocupaba el primer lugar en su mente:
-
''Actuar de inmediato" -
109
Quiero hacerle una pregunta. La escuela de la que usted
habló üs simplemente para preparar enfermeros, o también debe abarcar el título de Medicina?
~
esto, ella respondió:
''Los médicos deben recibir su educación aquí':
Cuando ella supo que los dirigentes de la escuela estaban avanzando
en esta dirección, pero con el plan de ofrecer una capacitación aceptable
de dos años en Loma Linda antes de enviar a los alumnos a una escuela
médica acreditada en otro lado para terminar su preparación, ella tuvo
mucho para decir.
"El pastor Burden, el 20 de septiembre de 1909, le pidió consejo
sobre el tema a Elena de White en su casa. Descubrió que a ella la
angustiaba cualquier plan que exigiera 'obtener los toques finales de
su educación en alguna institución del mundo'. Exclamó: 'No permita
Dios que se siga un plan tal'. Y comentó: 'Debo decir que la luz que recibí
es que debemos levantarnos como un pueblo distinto, que guarda los
mandamientos'[. ..].
"Cuando se tomaron medidas para obtener la autorización del Estado
para la educación en medicina en Loma Linda, Elena de White dio un
consejo enérgico el 5 de noviembre de 1909:
Me han hecho algunas preguntas en cuanto a nuestra relación con las leyes que rigen sobre los médicos.
Debemos proceder con inteligencia, porque el enemigo se
complacería en cercar nuestra obra para que nuestros
médicos solo tengan una irifluencia limitada. Algunos
hombres no actúan en el temor de Dios, y pueden tratar
de hacernos caer en problemas colocando yugos sobre
nuestros cuellos que no podríamos consentir en llevarlos.
No podemos someternos a reglamentos si está involucrado el sacrificio de principios, porque esto pondría en
peligro la salvación del alma.
Pero toda vez que podamos acatar las leyes del país sin
colocarnos en una postura falsa, deberíamos hacerlo. Se
han redactado leyes sabias a fin de salvaguardar a la gente contra la imposición de médicos no calificados. Deberíamos respetar esas leyes porque nosotros mismos somos pro-
110
- Los que vieron ... y creyeron -
tegidos de simuladores presuntuosos. Si manifestásemos
oposición a esos requerimientos, esto tendería a restringir
la irifluencia de nuestros médicos misioneros.
"El9 de diciembre de 1909, con la plena aprobación de la junta de la
Asociación General, se obtuvo la autorización, bajo las leyes del Estado de
California, que permitía que el Colegio de Médicos Evangelistas otorgara
títulos en ciencias liberales, odontología y medicina".
El voto de una autorización venció un obstáculo. Pero, en realidad,
ese fue solo un paso para establecer una escuela de Medicina con todos
los costos que implicaba. Hubo dirigentes clave en la Costa Oeste que se
oponían, debido a los costos enormes.
"En la junta de la Unión del Pacífico, a fines de enero de 1910, celebrada en Mountain View, el futuro de la educación médica dirigida por
los adventistas del séptimo día estaba en juego".
No solo no estaban convencidos los dirigentes clave, sino también
había desacuerdo sobre cómo interpretar el término educación médica. La dirigencia de la Asociación no se sentía libre de recomendar un
proyecto de esas características sin primero satisfacerse de que interpretaban correctamente la instrucción de Elena de White. De modo
que "el martes 25 de enero se decidió hacerle una consulta especial a
Elena de White [...]:
Apreciada hermana White: Hemos leído los testimonios
que usted ha dado, hasta donde sabemos, en relación con
Loma Linda, y con el establecimiento de una escuela de
medicina en relación con la obra en ese lugar. Hasta donde
sabemos, nuestro pueblo está ansioso de llevar a la práctica la luz que el Señor ha dado; pero hay una diferencia
de opinión entre nosotros en cuanto a lo que quiere decir
cuando usted utiliza el término 'una escuela de Medicina'
[..J.
La respuesta de ella llegó el jueves 27 de enero por la mañana, con
un lenguaje clarísimo.
Por la luz que me ha sido dada, debemos proveer lo
esencial para nuestros jóvenes que desean ser médicos, a
fin de que puedan prepararse inteligentemente y pasar
los exámenes requeridos para probar su ificiencia como
médicos. Se les debe enseñar a tratar comprensivamente
-
'~ctuar de
inmediato" -
111
los casos de enfermedad, a fin de que no pueda ningún
médico sensato imaginar que en nuestra escuela privamos a los jóvenes de la instrucción necesaria para habili. tarlos debidamente para ejercer la medicina. Los jóvenes
que se han diplomado deben progresar continuamente en
conocimiento, porque la práctica hace perfecto.
La escuela de Medicina de Loma Linda ha de pertenecer
a la categoría más elevada, porque los que estudian en
ella tienen oportunidad de mantener una relación viva
con el más sabio de todos los médicos, que les comunica
un conocimiento de orden superior. Y, para la instrucción
especial de los jóvenes que, por una convicción clara, se
sientan en el deber de obtener una educación médica que
les permita pasar los exámenes que la ley exige a todos los
que l(jercen como médicos regulares, debemos proveer lo
que sea necesario, afin de que estos jóvenes no necesiten
verse obligados a ir a Zas escuelas de medicina dirigidas
por hombres que no son de nuestra fe. Así, cerraremos una
puerta que el enemigo quisiera ver abierta; y nuestros
jóvenes, cuyos intereses espirituales el Señor desea que
salvaguardemos, no se verán obligados a relacionarse con
incrédulos a fin de obtener una cabal preparación médica.
(Firmado) Elena G. de White.
Cuando la junta presentó su plan detallado para la escuela de medicina ante la asamblea general, l. H. Evans, vicepresidente de la Asociación
General, dijo:
Estoy profundamente interesado en lo que nos.fue leído
esta noche del Espíritu de Prqfecía. La pregunta previa
a la reunión es de gran importancia, y necesita la más
cuidadosa consideración desde todo punto de vista.
El establecimiento de una escuela de Medicina ha sido
estudiado durante varios años por algunos de nuestros
principales hermanos. No pocos de nuestros hermanos han
creído que deberíamos tener una escuela. Dudaban en establecer una escuela debido a su falta de experiencia para
administrar una iniciativa así, y porque no sabían dónde
conseguir los profesores ni el dinero para seguir adelante.
Cuando se lea la declaración de la hermana White, estoy
seguro de que la mayoría de nuestros hermanos opinará
112
- Los que vieron ... y creyeron -
igual que nosotros esta noche: que el Señor ha hablado,
y nosotros obedeceremos. Para algunos, este consejo de la
hermana "White quizá sea una prueba para su fe; para
otros, estoy seguro de que las palabras dichas parecerán
dadas por Dios y oportunas. A menudo, la luz que Dios ha
enviado a su pueblo parecía ser insensatez para los que no
veían las cosas como las veía el Cielo.
Ahora bien, si siempre fuésemos sabios, y viéramos todo
como el Señor quisiera que lo viéramos, no habría necesidad de mayor luz a través del Espíritu de Profecía; pero
somos mortales, y nuestra visión es limitada, y a menudo
vemos cosas con una luz desviada. Debido a nuestrafalta
de percepción clara, el Señor, en su misericordia, le habla a
su pueblo mediante el Espíritu de Profecía. Ha tenido que
hacer esto en el pasado, y bien podemos esperar que desee
continuar hablándonos en cuanto a nuestro deber y las
necesidades de su causa[..].
No puedo pensar en una sola iniciativa que haya sido
originada por la instrucción del Espíritu de Profecía que
no haya sido para el bien de la obra del Señor. Muchas
veces se nos ha dicho que avancemos, cuando el Mar Rojo
parecía estar ante nosotros y las montañas a ambos lados;
pero cada vez que hemos aceptado la instrucción y hemos
dado un paso adelante con alegría, el Señor ha despejado
un sendero en el que pudiéramos caminar, y hemos descubierto no solo prosperidad para la causa de Dios, sino
también que nuestro corazón se alimentó del Señor[..].
Esta noche tenemos delante de nosotros una declaración
llana y directa de la hermana "White respecto del establecimiento de una escuela de medicina. No hay conjeturas
al respecto; no hay una equivocación; no hay una.falsa
interpretación que debe colocarse sobre estas palabras. La
pregunta es: ¿seguiremos el consejo dado? ¿Tenemos intenciones de obedecer lo que d Señor nos ha dicho con respecto
al establecimiento y el mantenimiento de una escuela de
medicina?[..].
Algunos tal vez digan: ''El momento es de lo más inoportuno': Pero la pregunta es: Cuando el Señor nos revela su
deseo de que establezcamos una escuela de medicina, y que
lo hagamos pronto, ies inoportuno el momento de hacer
esa obra? Puedo pensar en muchas razones por las cuales
-
'~ctuar de
inmediato" -
113
en este momento estamos mal preparados para establecer
y administrar una escuela de medicina. No es difícil que
alguien diga que no tenemos el dinero a disposición. Nadie
necesita ser muy sabio para decir: "No sabemos dónde conseguiremos médicos capacitados y equipados para asumir
esta obra. Pero la pregunta es: ¿Estableceremos esta escuela
de Medicina cuando el Señor nos ha indicado cuál es nuestro deber de una manera tan clara? Creo, hermanos, que si
avanzamos en el temor de Dios, y hacemos un eifuerzo por
establecer esta escuela, el Señor nos ayudará y nos despejará el camino. Creo que veremos cada vez más luz a medida
que avancemos porfe, de acuerdo con las palabras del
consejo que nos ha llegado mediante la sierva del Señor'~
Ese discurso resumía la fe y el compromiso del movimiento adventista; la misma fe y compromiso que había surgido sesenta años antes,
cuando el futuro parecía aún más desalentador. ¿Dónde estaría hoy la
Universidad de Loma Linda sin el coraje de Elena de White y sus consejos
recibidos del Señor?
El historiador Richard Utt bien dijo: "El surgimiento de la Universidad de Loma Linda no estuvo tan cargado de lo inevitable como de lo
imposible. El hecho de que la hazaña se haya logrado totalmente se debió
a una rara receta de fe, obras y empeño, espléndidamente ligada con lo
improbable, lo milagroso y lo heroico".
Capítulo 23
"--
-----.
"El Señor prohíbe ... "
La conservación del Sanatorio Boulder
La crisis del Sanatorio Boulder, en Colorado, ocurrida en 1905, es
un estudio de caso en el que la misión de una institución debe tener
prioridad sobre la viabilidad de la institución como un mero proyecto
financiero. En el caso del Sanatorio Boulder, los dirigentes de la iglesia
veían a la institución, que pasaba apuros, como un problema financiero
que se resolvería utilizando las prácticas comerciales seculares, mientras
que Elena de White veía un cuadro más grande que abarcaba la misión:
Mediante la obra de nuestros sanatorios, se debe aliviar
el sufrimiento y restaurar la salud. Hay que enseñar a
la gente la forma de mantenerse sana por medio de la
práctica de hábitos correctos. Cristo murió para salvar de
la ruina a los seres humanos. Nuestros sanatorios deben
ser su mano ayudadora en la enseñanza de la forma de
vivir para honrar y glorificar a Dios. Si no se lleva a cabo
esta obra en nuestros sanatorios, los que los administran
cometerán un grave error.
El Sanatorio Boulder, fundado en 1895 por los Adventistas del Séptimo
Día, fue construido con dínero prestado de la Asociación General, dinero
que provino de fondos invertidos por adventistas a tasas de interés bajas.
El costo del sanatorio no debía excederlos treinta mil dólares, pero, al igual
que tantos proyectos, el costo final alcanzó los 75 mil dólares, excediéndose
del presupuesto. El plan era que "la organización que invirtió en el Sanatorio lo administre, y que las ganancias de la institución no solo cubran los
gastos de funcionamiento, sino también con el tiempo devuelva el dinero
a los miembros de iglesia que invirtieron de sus fondos personales".
Pero eso no fue lo que sucedió. El control del sanatorio "fue transferido a la International Medical Missionary Association [Asociación
-
"El Señor prohíbe... " -
115
Médico-Misionera Internacional], controlada por Kellogg. La Asociación
General recibió un pagaré por 45 mil dólares a cambio de su inversión de
75 mil dólares. Los dirigentes de la Asociación de Colorado fueron sacados de la junta. Durante años, la institución luchó financieramente[...].
"Estas eran las circunstancias cuando, en el congreso de la Asociación
General de 1905, en Wáshington D.C.", un médico adventista ofreció comprar la institución por cincuenta mil dólares. Durante algún tiempo, este
médico había estado administrando una institución competente a solo
un kilómetro del Sanatorio Boulder. Funcionaba "con menor disciplina,
normas más bajas y remuneración más alta para los empleados", junto
con una diferencia significativa en el estilo de vida: servían carne a los
pacientes y a las visitas.
"Durante los meses previos al congreso de la Asociación General, [el
médico] había logrado hacerse amigo de los miembros de la junta de la
Asociación de Colorado que habían sido sacados de la junta del sanatorio
Boulder. Teniendo en cuenta todos los factores, esperaba" comprar el
Sanatorio Boulder por cincuenta mil dólares. Y, para muchos dirigentes,
cansados de los apuros financieros, la oferta del médico parecía razonable.
Cuando Elena de White se enteró de estos planes, se presentó ante la
junta de la Asociación General el lunes 29 de mayo protestando vigorosamente contra la venta propuesta del Sanatorio Boulder. Su mensaje se
basó no solo en la propuesta del médico sino también en una visión que
recibió después de llegar a Wáshington, D.C.
"Recientemente", dijo, "ha surgido la pregunta: ¿qué haremos con el
Sanatorio Boulder?" Entonces Elena analizó la situación: "La luz que me
fue dada ha sido que los planes seguidos en la construcción de este sanatorio no estuvieron enteramente de acuerdo con la mente y la voluntad
de Dios. Se invirtió demasiado dinero en la construcción".
Sin embargo, Elena "señaló que la solución [. ..] no estaba en vender
[el sanatorio] para sacárselo de encima, sino en hacer de la institución un
éxito a pesar de los problemas. Había más que dinero en juego:
Después de haber hecho la inversión, de haber erigido
los edificios y de que nuestros obreros hayan entrado allí,
y hayan luchado y luchado para hacer que la obra sea un
éxito, y que el Sanatorio haya logrado tanto bien, üntregaremos el lugar en manos privadas? Después de que los
obreros han luchado todos estos años, los que están relacionados con él, ¿se darán por vencidos? No podemos permitir
esto. Nuestra obra no debe riflejar esto ante el mundo.
116
- Los que vieron ... y creyeron -
Elena fue positiva en cuanto al futuro de la institución: "Dios quiere
que nunca hagamos semejante cosa de desprendernos del Sanatorio Boulder. Esta institución todavía hará su obra, y la hará bien". Luego afirmó
que no estaba en el plan de Dios que funcionara una segunda institución
médica en Boulder. "Había lugares de sobra donde podía ir un médico a
establecer otro sanatorio", ipero no en Boulder y no este médico!
Otro factor hacía que la situación fuera aún más complicada: "Los
que tienen responsabilidades en el Sanatorio, antes del congreso de la
Asociación General, no sabían nada de la propuesta de que la institución
sea vendida. Cuando se enteraron de lo que estaba sucediendo, y que el
presidente de la Asociación tenía que ver con esto, quedaron horrorizados"
y se sintieron traicionados. No fue una ocasión agradable para nadie en
ese momento.
Elena de White escribió una carta confidencial a este médico emprendedor:
Usted no pudo haber considerado como es debido las
consecuencias sobre los demás, o de lo contrario no hubiese
fundado un sanatorio donde está ubicado ahora. Su manipulación en este asunto no le ha agradado al Señor...
¿Por qué se fundó el Sanatorio Boulder? ¿No fue para
enseñar la riforma pro salud, y para utilizar los métodos
racionales en el tratamiento de las enfermedades? [..J Si
su institución permite que se coma carne y otros antojos,
entonces, ¿su influencia no va en contra del sanatorio ya
establecido, donde se sostienen los principios de la riforma pro salud? [..J
Pero, debido a la ubicación de otro sanatorio tan cercano, cuyos principios en algunos aspectos son bastante
diferentes de los del Sanatorio Boulder, se presentarán dificultades que no deberían existir.
El testimonio directo de Elena en el congreso de mayo en Wáshington
D.C. retrasó cualquier gestión para vender el sanatorio. Pero no todos estaban convencidos en Colorado. Se presentó otro plan: "La proposición de
establecer un nuevo sanatorio [...] en Canon City, a 160 kilómetros al sur de
Boulder [...].La principal atracción era que se pensaba que los nuevos pozos
artesianos de agua mineral recientemente cavados tenían valor curativo".
Los planificadores hicieron bien su trabajo. Los diarios de Denver del
5 de agosto transmitían la historia de una nueva empresa que abriría un
sanatorio turístico general en Canon City. ¿Quiénes eran los que cons-
-
''ElSeñorprohibe ... " -
117
tituían la sociedad? Dos médicos, el tesorero del condado, un banquero
y el presidente de la Asociación de Colorado. En primer lugar en la lista
de la propuesta, según salió en los diarios, estaba "la fundación de un
sanatorio turístico general". El resto del terreno sería arrendado a fábricas
y a otros negocios, incluyendo la ganadería. Los promotores esperaban
recaudar unos cuarenta mil dólares. ¿De dónde planeaban conseguir el
dinero? iDe los adventistas!
Este anuncio público desanimó a los que trataban de hacer que el
Sanatorio Boulder fuese un éxito, y llevó a que Elena de White volviera a
entrar en escena. Esto es lo que escribió Elena ellO de agosto a los médicos y a los pastores de Colorado: "Tengo un mensaje para los hermanos
que contemplan la posibilidad de establecer un sanatorio en Canon City.
El Señor prohíbe, en este momento, cualquier movimiento que tienda
a atraer hacia otros proyectos la simpatía y el apoyo que el Sanatorio
Boulder necesita justamente ahora. Este es un momento crítico para esa
institución". Exhortó a que la atención y los fondos de ellos se centraran
en el Sanatorio Boulder hasta que estuviera libre de deudas.
Ahora entró un nuevo actor en el debate. La reunión campestre de Colorado estaba programada para el 17 al27 de agosto en Denver. "El pastor
G. A. Irwin, vicepresidente de la Asociación General, estaba en la Costa
Oeste esperando la llegada de su esposa desde Australia [...]. Él debía asistir
a la reunión de Colorado como representante de la Asociación General y
era plenamente consciente de lo confusa y crítica que era la situación en
ese Estado. Le pidió a Elena de White que le permitiera tener copias de lo
que ella había escrito de tanto en tanto sobre el Sanatorio Boulder. Llevaría
consigo lo que pudiera, y otros documentos le serían enviados a Denver.
"Elena de White debía partir ellO de agosto para la reunión campestre de Los Ángeles. Antes de salir, se quedó despierta la mayor parte de
dos noches enteras escribiendo y preparando testimonios para Colorado.
Ella y sus empleados reunieron los materiales, y los secretarios copiaron
cinco documentos clave que, después de una lectura final cuidadosa por
parte de Elena de White, fueron despachados rápidamente por correo.
para el pastor Irwin".
En su comunicación del lO de agosto, Elena volvió a tratar muy claramente estos tres problemas: (1) la necesidad de convertir el Sanatorio
Boulder en una institución médica próspera; (2) la compra sugerida del
Sanatorio Boulder por parte del médico que administraba la institución
rival en Boulder; y (3) el plan de construir el Sanatorio Canon City por
parte de promotores que incluían al presidente de la Asociación. El
pastor Irwin recibió estos nuevos mensajes por correo en Denver; y los
utilizó eficientemente.
118
- Los que vieron ... y creyeron -
"Después de la difícil reunión de Denver, el pastor Irwin escribió
cuánto había temido esa reunión, porque 'había demasiados conflictos de interés que armonizar'. Pero, informó, 'los testimonios ... llegaron
justo en el momento correcto'. Primero llevó aparte al presidente de la
Asociación ... y le leyó los testimonios... El presidente escuchó con mucha
atención ... Él había propiciado la transferencia del Sanatorio Boulder [al
médico], y también estaba... de acuerdo con el proyecto de Canon City...
Pero aceptó el consejo.
"El pastor lrwin les habló" a otros individualmente, y ellos reconocieron el consejo de Elena de White, "aunque era evidente que era" un chasco
para ellos. Luego, el pastor lrwin leyó los mensajes de Elena de White "a
la junta de la Asociación y después a todos los obreros de la Asociación
de Colorado. Al contar con el compromiso de los obreros, el pastor Irwin
llevó el asunto ante todo el cuerpo de creyentes reunidos, donde se tomó
un voto. No hubo ni un voto discrepante". Este fue un logro asombroso
del liderazgo cristiano del pastor Irwin.
El consejo del Señor fue aceptado y acatado. "La junta de la Asociación emitió una declaración, que en primer lugar aludía al consejo dado,
que 'contaba con una respuesta general vigorosa de parte de los obreros
de nuestra Asociación y de los delegados de la Asociación' ".
Cuando Irwin repasaba los acontecimientos que habían tenido lugar
en la reunión campestre, advirtió que el consejo de Elena "parecía cortar
completamente los planes que se creían correctos y que concordaban con
el buen criterio de los implicados". No obstante, cuando los obreros de la
Asociación recibieron un mensaje claro de parte del Señor, de buen grado
abandonaron sus planes y aceptaron la instrucción enviada por parte de
la mensajera del Señor.
Más adelante, la junta de la Asociación se dio cuenta de que "en la
reorganización del Sanatorio Boulder, ahora era 'más que nunca antes una
institución denominacional'. Se solicitó el respaldo total de los miembros
de la Asociación".
La intervención de la mensajera del Señor convirtió al Sanatorio
Boulder en una institución denominacional próspera. El consejo de ella
contradecía los planes trazados por poderosos hombres de negocios con
buenas intenciones. Pero la mensajera del Señor pudo ver más de lo que
llegaban a ver los mejores hombres. Aún hoy, el episodio del Sanatorio
Boulder es un recordativo para los dirigentes y los miembros de iglesia
de que la misión de una institución, no su éxito financiero, es la base
de su existencia.
El testimonio más escueto
Cómo se salvó el templo de Battle Creek
El testimonio más corto que Elena de White haya dado alguna vez
fue un telegrama recibido por el pastor de la iglesia de Battle Creek a
comienzos de 1907 durante la pugna por la propiedad de ese edificio
eclesiástico. No fue un momento placentero para los implicados.
Durante años se había suscitado una crisis por la posesión y el control
de esta iglesia tan amada, "que podía acomodar holgadamente a dos mil
cuatrocientas personas, y a tres mil doscientos cuando estaba totalmente
llena". Por lejos, era la iglesia más grande del pueblo.
A corta distancia estaba el mundialmente famoso Sanatorio de Battle
Creek. Para 1907, el Dr. John Harvey Kellogg y sus seguidores habían
forcejeado con la iglesia por el control del sanatorio, y ahora su atención
se centró en incautar la iglesia más grande de nuestra confesión (a menudo conocida como el Dime Tabernacle [Tabernáculo Dime]). Por más
extraño que parezca, la mayoría de los directivos de la iglesia se inclinaba
a apoyar los deseos del grupo del sanatorio.
En julio de 1906, pocos meses antes de que la crisis alcanzara el
punto crítico, Elena había escrito: "He visto que los líderes de la obra
médica de Battle Creek tratarán de tomar posesión del Tabernáculo. Su
confabulación es tan sutil que siento un gran temor de que esto pueda
cumplirse". Aunque en ese momento no existía ninguna evidencia de.
que eso ocurriera, ella le escribió a su hijo Guillermo, diciéndole que
"se requerirá un esfuerzo denodado para salvar el Tabernáculo para la
iglesia".
Durante meses la iglesia había estado sin pastor, probablemente
porque nadie quería exponerse al estrés. Finalmente fue elegido M. N.
Campbell, de 32 años de edad y recientemente ordenado. Poco después
de mudarse a Battle Creek, en noviembre de 1906, descubrió que "la carta
orgánica [de la iglesia] se había vencido en 1892, catorce años antes, y los
directivos no habían hecho nada para renovarla. Él hizo bien su tarea,
120
- Los que vieron ... y creyeron -
buscó asesoramiento legal y estudió los pasos que debían tomarse para
conservar el Tabernáculo" dentro de la iglesia.
Sin embargo, la mayoría de los miembros de junta "eran muy favorables al Dr. Kellog y al pastor [A. T.] Jones. El nuevo pastor se hizo amigo
de los directivos" y conversó con ellos para reincorporar la carta orgánica.
"Discutieron a fondo y decidieron hacer exactamente eso. Se fijó la fecha
para la asamblea legal.
"Pero el acuerdo no duró mucho. Cuando Campbellllegó a su casa, sonó
el teléfono. Los directivos dijeron que si ellos debían llevar a cabo [la reunión], A. T. Jones debía tener el derecho de participar de la reunión legal. La
repuesta de Campbell fue un iNo! resuelto". ¿por qué?, preguntaron. Porque
"Jones no era miembro de la iglesia de Battle Creek, y no era un hombre en
el que la iglesia tuviese confianza''. Le propusieron otras condiciones que
Campbell no podía aceptar, y los directivos declararon que la reunión que
habían acordado no se llevaría a cabo. A esto, el joven pastor respondió:
"-Yo estoy aquí para decirle, mi hermano, que la reunión se llevará
acabo.
"Pero Campbell no sabía cómo hacer [...]. Uno o dos días después, las
minutas de una junta directiva del Sanatorio de Battle Creek en el que se
analizaba el derecho de propiedad del Tabernáculo llegó a sus manos".
Cuando Campbell confrontó a la junta de su iglesia con esta documentación de su deslealtad, les dio a elegir: seguir adelante y tener la asamblea
legal para reincorporar la iglesia o que esas minutas fueran leídas a la
congregación el sábado siguiente.
"Ellos rápidamente accedieron a realizar la asamblea legal", expresando su temor de que si el pastor leía esas minutas " 'Tendremos que
irnos del pueblo'. Campbell prometió guardar en secreto el tema si ellos
accedían a no 'mover ni un dedo para interferir con los procedimientos
que se llevarían a cabo para salvaguardar el Tabernáculo'.
"Pero cuando se celebró la primera asamblea legal, se hizo todo lo
posible para demorar [...] lo que debía hacerse. En total, se realizaron
cinco álgidas asambleas legales, cada una de ellas llena de incertidumbres. Tanto Campbell como" George Amadon, un obrero veterano de la
casa editora, que había llegado a Battle Creek en 1857 y era anciano de
iglesia desde hacía mucho tiempo, "hicieron un informe de la última y
la más crucial de las" reuniones. "Debían votarse nuevos artículos de
incorporación y elegirse nuevos directivos.
"Poco tiempo antes de la reunión, el pastor reunió a algunos de los
principales hermanos para[.. .] orar. 'Todos eran hombres buenos y fieles',
informó Campbell, 'pero no sé si alguna vez he visto un grupo de hombres
más temerosos. El anciano hermano Amadon, uno de los cristianos más
-
El testimonio más escueto
-
121
excelentes que haya vivido alguna vez, se lamentaba: "Si solo estuviera
aquí la hermana White, si solo estuviera aquí la hermana White" '.
"Campbell respondió: 'Bueno, hermano, ella no está. No sirve de
nada que se lamente por eso. Pero nosotros estamos aquí. Tenemos que
encargarnos de esto'.
"Todos sabían que Elena de White estaba en California, pero Amadon continuaba diciendo: 'Oh, si solo estuviera aquí la hermana White'.
"Diez minutos antes de la apertura de la reunión, un mensajero de
Western Union llegó a la puerta y averiguó:
"-¿Está aquí el señor Campbell?
"-Sí -dijo Campbell y extendió la mano para recibir el telegrama
dirigido a él. Al abrirlo, encontró este mensaje: 'Filipenses 1:27 y 28.
(Firmado) Elena G. de White'.
"Era un testimonio, el testimonio más corto que haya escrito alguna
vez. Al abrir sus Biblias en la referencia dada, leyeron:
Solamente os ruego que os comportéis como es digno del
evangelio de Cristo, para que, sea que vaya a veros o que
esté ausente, oiga de vosotros que estáisfirmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes por Zafe del evangelio
y sin df[jaros intimidar por los que se oponen, que para
ellos ciertamente es indicio de perdición, pero para vosotros de salvación; y esto procede de Dios.
El pastor Campbell, más adelante, escribió:
Eso resolvió la cuestión. Había comunicación de la hermana Mlite que necesitábamos precisamente en ese momento. Dios sabía que estábamos celebrando esa reunión y
que teníamos a un grupo de hombres atemorizados, y que
necesitábamos su ayuda, de modo que nos dio el mensaje
que nos llegó en el momento crucial. Nos pareció extraordinariamente bueno.
"A pesar del hecho de que la oposición tomó todas las medidas
imaginables para trabar la obra de la reorganización, la reunión se
llevó a cabo con éxito y la sesión se levantó después de las 23. El pastor
Campbell volvió a leer en esa reunión el consejo de Elena de White para
salvaguardar el Tabernáculo[...].
''A la mañana siguiente, George Amadon le escribió a Guillermo
White, a Elmshaven:
122
- Los que vieron ... y creyeron -
Con mucho gozo le escribo rápidamente unas pocas
líneas. Muchas gracias por el telegrama. Cuán apropiados
fueron los versículos. Bueno [..J se hicieron las once y media antes de volver a casa. Hubo una oposición persistente
e irrazonable para cada medida tomada.
''Amadon informó que tres cuartos de la congregación de la iglesia
votó por los artículos y los estatutos.
"El Señor, mediante su sierva, había enviado mensajes de advertencia" por muchos meses. Pero nada podría haber sido más dramático u
oportuno que el escueto telegrama, el testimonio más corto de Elena.
iSu cálculo del tiempo fue impecable! "El Tabernáculo de Battle Creek
fue salvado para los adventistas del séptimo día''. Una razón más entre
muchas para confiar en la mensajera del Señor.
Fuentes
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