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PREVENCIÓN E INTERVENCIÓN. PROYECTO ATENEA
Nora Rodríguez Vega
Pedagoga y escritora (Argentina).
poco a poco dan paso a la motivación para proyectos mayores, como el voluntariado
o el padrinazgo, en donde los alumnos participan activamente en campos como la no
discriminación, la resolución de conflictos u otras estrategias de contención.
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Hoy la escuela tiene más que nunca la responsabilidad de aplicar métodos pedagógicos para afrontar la violencia y las conductas problemáticas dentro de los centros
educativos. Sin embargo, resulta utópico buscar resultados con una única terapia o un
método aislado, se necesita un proyecto que implique redes de trabajo dentro y fuera
del ámbito educativo, con personas dispuestas a trabajar con aquellos casos donde las
conductas problemáticas son difíciles de erradicar, además del equipo de psicólogos
y gabinete psicopedagógico. Cuando hay conductas disruptivas, así como cuando
hablamos de trastornos del comportamiento la escuela debe actuar con estrategias
adaptadas a las edades en que los alumnos, no sólo con el que las produce y los que
la aceptan, sino con todos los de su edad sobre las que ellas recaen. De este modo, el
trabajo individual y grupal abarcará siempre tres áreas básicas para promover cambios
de conducta:
a. La mejora personal.
b. El reconocimiento del grupo.
c. La toma de conciencia de que los actos tienen también consecuencias sociales.
En los casos de prevención la dirección es desde lo individual a lo social. En casos de
intervención la dirección es desde el trabajo social a lo individual. Trabajando con los
alumnos permanentemente, e incluyendo en la prevención el trabajo de las “microviolencias” que a diario refuerzan aquellas ideologías que las aceptan, resulta posible detectar
cuáles son las carencias en los diferentes grupos y qué aspectos hay que reforzar. En
este sentido, uno de los principales objetivos en que confluyen las tres líneas de trabajo
mencionadas es la construcción de la autonomía moral e intelectual.
Para ello resulta imprescindible:
1. Contextualizar el tipo de centro.
2. Dinamizar espacios dentro del colegio para que ellos se expresen y encuentren que
hay “lugares” donde se trabaja para frenar la violencia. De este modo los espacios
El Proyecto Atenea es por ello un método de trabajo en el que la creación de dos espacios adaptados a las edades y al tipo de pensamiento cumplen un papel fundamental
para la concreción de estos objetivos:
· El Rincón de la concordia, y
· El Aula de convivencia.
Espacios en los que se trabaja tanto individual como colectivamente a partir de protocolos de actuación y de redes de trabajo. Desde estos dos espacios alumnos descubren
que existen lugares en el centro educativo en los que la violencia encuentra vías de
escape. Es importante que el trabajo desde estos espacios sea continuo, que se trabaje
con los alumnos conflictivos en períodos de mayor a menor, y que sean los propios
alumnos los que den muestras de haber llegado a un aprendizaje ayudando a otros. La
toma de conciencia siempre será mayor cuando una persona aprenda a volver sobre sus
pasos y pueda transmitir este aprendizaje.
Un trabajo de intervención en red permanente posibilita que padres, docentes, técnicos
de juventud y servicios sociales puedan organizar su trabajo dentro del centro educativo y hacia fuera de éste. Incluso a la inversa, desde el barrio al centro, convirtiendo
al barrio en un educador más, y todo ello con la colaboración de padres, profesores
trabajando sólo en un área.
En efecto, el trabajo en red que se propone desde el Proyecto Atenea implica un compromiso y una formación permanente en un área de trabajo. Una red estará destinada
al estudio de un único tema, y por ello será la encargada de promover la prevención,
intervención, actividades de voluntariado, o bien estrategias acordes a la problemática
y/o realidad del centro, fomentando “espacios de intersección” (socioeducativos, socioculturales, etc.), y permitiendo la coordinación de diferentes agentes, la integración de
actuaciones, la colaboración, la complementariedad, el trabajo de los docentes y otros
facilitadores del proceso, como padres, y personas representativas de la comunidad...).
IV CONGRESO MULTIDISCIPLINAR SOBRE TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO EN MENORES
IV CONGRESO MULTIDISCIPLINAR SOBRE TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO EN MENORES
3. Crear redes humanas de trabajo cuyo objetivo es que el alumno pueda reconocerse
y sentirse protagonista y actor para construir su propia autoría. Que comprenda que los
actos violentos deben ser entendidos como síntomas. El trabajo del adulto consistirá en
que la rebelión se convierta en una fuerza positiva y creativa para el sujeto, tomando
otros canales.
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En los centros educativos donde ya se lleva a cabo este proyecto las redes tienen por
objetivo:
1. Identificar la existencia del problema y elaborar objetivos.
2. Crear estrategias de prevención e intervención según los objetivos determinados.
3. Realizar un seguimiento para constatar los cambios producidos en la conducta
del grupo.
IV CONGRESO MULTIDISCIPLINAR SOBRE TRASTORNOS DEL COMPORTAMIENTO EN MENORES
Para la formación de estas redes las personas elegidas deben tener como características principales:
1. Estar motivadas sobre el tema.
2. Tener una visión positiva y creativa para abordar los conflictos.
3. Capacidad de trabajar en grupo y comprometida con el proyecto.
En este ejemplo, debido a la realidad sociocultural de algunos centros las redes se
crearon dando prioridad a temas urgentes.
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· Red de la inmigración. Objetivos:
1. Incorporar e integrar a los alumnos recién llegados al centro.
2. Conseguir una adaptación de estos alumnos en el aula y en el centro.
3. Mantener y mejorar los posibles cambios logrados de aquellos alumnos
inmigrantes que llevan uno o más años en el centro.
4. Evaluar el proceso de enseñanza-aprendizaje y su evolución.
5. Promover y facilitar la comunicación de la familia con los diferentes miembros
de la comunidad educativa.
Otras redes son:
· Red de ayuda a las víctimas
· Red sobre gestión de las emociones.
· Red de atención psicológica.
· Red para la prevención de la violencia.
· Red para el absentismo formado por 7 profesores, 1 psicóloga, el equipo directivo
(director del centro y secretario) y la educadora social del municipio. Un total de 11
profesionales que controlen el absentismo y se estudie de forma individualizada con
alumnos y padres.
· Red de coordinadores: coordinador 1º E.S.O, coordinador 2º E.S.O, coordinador 3º
E.S.O, coordinador 4º E.S.O, 3 coordinadores de Bachillerato, coordinador de Ciclo
Formativo de Grado Medio y coordinador de Ciclo Formativo de Grado Superior. Profesores con el interés común de crear una red para la resolución de conflictos en las
aulas. Mediante reuniones debidamente programadas, crearan una serie de materiales
para la hora de tutoría mediante dinámicas de grupo de confianza, conocimiento y
sobretodo de resolución de conflictos.
· Red para controlar la violencia a la hora del patio. Un total de 13 profesores que darán
los recursos necesarios para este interés.
· Red para el bajo rendimiento escolar formado por un profesor de cada materia para crear
aulas de estudio supervisadas por ellos mismos para solucionar esta puesta en común.
· Red de recepción de bienvenidos extranjeros: red de 5 profesores para la plena integración del extranjero.
· Red “el barrio como educador”.
También se formaron redes de grupo - clase.
· Colaboradores en las aulas para repartir información de los diferentes servicios
de juventud coordinando la información con el punto de información presente
a la hora del patio.
· Creación de una red asociativa de estudiantes para participar en los consejos
escolares.
· Red de acompañamiento para proyectos con alumnos discapacitados.
La dinamización de espacios y las redes de trabajo permiten la intervención del acoso
en cualquiera de las cinco fases del bullying con una actuación rápida.
En cualquier caso el objetivo de las redes es trabajar estrategias para poner en marcha
en los alumnos procesos de resiliencia, para que la víctima deje de sentirse culpabilizada, y que no acabe siendo sobreprotegida ni victimizada por su familia, el colegio o
el entorno. Como cualquier chaval que es víctima de un compañero de clase que puede
o no vivir en el mismo barrio, lo que necesita es atención emocional rápida, que pueda
expresar cómo se siente, qué le sucede, y planificar conjuntamente con sus padres u
otros apoyos cómo será su vida de ahora en más. Es probable que él o ella crea que no
puede enfrentar la situación ni ahora ni nunca, pero en los padres y en los adultos que
le rodean está el que no se sienta culpable y salga adelante. El trabajo con el acosador,
si bien sigue unos protocolos de intervención diferentes, también tiene por objetivo
promover su proceso de resiliencia.
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Pero también proponiendo talleres en los colegios para que los alumnos puedan formar
sus propias redes de apoyo, crear sus propias normas de convivencia, y participar
activamente en la convivencia positiva.
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