FACIES PALATINA INFANTIL • (BASADA EN 373 OBSERVACIONES) Dr. J. ROIG RAVENTÓS Numerario de la Real Academia de MediciAa de Barcelana gran profesor Enrique FINKELSTEIN, en su obra "Exploración del describe nünuci.osamente el ~étodo explora~ori,o clímco tan completo que, de segUIrlo con fidelidad de buen dl'SClpulo, J.'ararnente se sentirá la decepción de no conquistar el anhelado diagnóstico. Recohüendaempezar por la cabeza y descender: nuestras observaciones por el cuello, tórax, abdomen y extremidades:. Nosotros, que nos honr¡:ünos .s1endo discípulos del 'malogrado maestro, ¡que murió en el destierro y que conoci'mos en Berlín después de la. primera guerra mundial, 'seguimos~su 11l,étodo, pero desde la publicación de la obra inglesa del Profesor Eric PRITCHARD, nos he'mos conViencido ,de que en las obras de pediatría, incluso en las más extensas, falta. un capítulo es,encial, ,que es el que haga referencia a la exploración metódica del rostro, la boca, ,el paladar y las fauces. Ya hace muchos años que publiqué una monografía en que decía que un :médico no tiene derecho :a cobrar la visita si no explora minuciosa'rnente, cada día, la garganta de los febricita.ntes. Hoy añado que tampoco puede cobrar la vis:tta ¡de los niños apiréticos, si no explora :minucio'samente Ia boca, ya que con harta frecuencia veo que pasan des,apercibidos defectos de construcción facial que, de no descubrirlos a su tiempo, ¡pueden acarreariconsecuencias lamentables e irreparables y des;acreditauoras ¡para la fama más encumbrada. La pri:mera actitud explorativa del pediatra,es mere1l1ente pasiva. Nuestros: ojos, ávidos de descubrir, han de ¡empezar una tarea analítica y 'antes de emprender la exploración física con nuestra:s manos y aparatos, debemos observar un buen rato al ienfermo siguiendo un método íntimo, ¡al impulso de una atención .silente intensa. De esta exploración .apalientemente pasiva, ante los' deU!dos del niño, debemos inquirir cÓmo es la expresión del enfermo, sus rasgos fisollómi:cos, su mímica, su color, la actitud de la cabeza. Mientras nuestros oj os ',van adquiriendo datos, nuestros oídos han de seguir el ritmo 'exploratorio escuchando la voz, el E L n~ñoenferíno", • Conferencia dada en la Real Academia de Medicina de Barcelona el día 11 de abril de 1950. Presiden-cia: Dr. F. Coraminas. ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA Vol. XXX, - N,o 76 llanto, la tos, las pa.1ahras, las risas. Los m:édicos antiguos no's hablan de la facies pulmonar, facies abdominal. Además se han des~l'ito: la facies, dolomsa, facies luctuosa (descon'suelo, tdsteza, dolol' en la tuber-culosis y enfermedade's crónicas); facies ansio.sa ('miedo, temor nocturno); facie's hidro cefálica (seriedad, lIeflexión, piedad, meningitis); facies paralítica (abandono, cansanCio, resignación); facies sardónica (Jnol~osidad,. ironía, ceguera, trismo's, tétanos, corea); facies fastidiOsa (asco, náuseas, i"Blpugnancia); facies ,sle:nil, "fisonomía: de Voltaire" (cara de viej o, atrep'sia, sífilis, hidrocefalia)'; ,facies libidinolsa: (masturbación); facies rígida (cara de 'máscara, parálisis); facies idiota (expresión vacía, nada espiritual); faciesl de la aprosexia (degenetación, vegetaciones); faCies de Hutchinson. (oftalmoplegia ,progresiva nuclear); fa-cies Cirrótica (SirR. HUTCHINSON), nefrítica, sa.rlampionosa, pertúsica, escrofulosa, mangólica; facies adenoidea, y yo ineatrevo a añadir a la lista del Profe.soi.' M. ,PFAUNDLER, la facriies 'que yo llamo palatina,. objeto de esta coiY~uni­ cación. Cuando se conternpla un cráneo a distancia prudente, que el niñoconfiado no te'me, por imaginatseque no ,eS objeto de la: viSita, pode'nios de:scubrir las características de su forma y !por ,sólo este dato conquistar el diagnóstico deenfermeda:des como el raquitismo, la :hidrocefalia, adetnás de las múltiples anomalías coino la Plagiocefaüa (a~imdría craneal) ; la Acrocefalia, Pirgocefalia (forina de torre acurrünada); Mkr'ocelalia(cráneo pequeño, fisonomía de pájaro, para de mono por afección cerebral; Mo,crocefalia (Ihipertrofia del cerebro; hidrooefalia). Cráneo cuadrado (frente olímpica, cráneo natiforme); cráneo pla'no\ (hipotiroideos). Aplanamiento del occi'pucio. CapU't succedJa·'Y/J.B>um (piel edeinatosa). celalohernp,tom){J). lexterno (heroorragiade la ga,lea). EnClelalocele..,. HidromeningOlceleg,. Torus po,lati (exüstosis medio palatina: idiüeia degeneración). Hip,siOlS!tafilia (aboveda:miento alto del paladar; raquitismo, adenoides hipertróficas,mongolismo, hücromelia). PaZalo etsquisis (división lateral del paladai' duro y mediana del blando). Nuestra 'mirada inquisitoria dirigida a la facies del enfermo podrá de'scubrir la cara raquítica, y 10 que debe'rnos denoüiinal> la boca raquítica descrita pOI' los Profesores !MARFAN y PFAUNDLER. Nuestra mirada de frente podrá des-cubrir la asimetría en la epilepsia, ,los 'síntomas característicos del mongolisn'lO, del ,miXl8ide:ma y roicromelia. Las anomalías de la narizcomo la Microrrinia, Hiplerproxlfirrinia, nariz roma, nariz de silla de montar, nariz de monóculo (sífilis), hematrofias faciales por todículis o parálisis, deformaciones faciales por decúbito del mismo lado; ojos ,que nÜ' están al mismo nivel, labios que no son horizontales, bocas abiertas peren- " .' Octubre 1951 ANALES DE M:EDICINA y CIRUGIA neiriente. Mirando al enfermo de perfil se descubrirán despro'porciones anormales enWe la frente, nariz y mentón, los cuales dehen tener la misin:a m'edida, imaginándose que cuatro rayas dividen la cara en cuatro porciones, pasando una por encima de la ,frente, otra por encima del oj o, otra pór encima del labio superior y la última por debajo del :mentón. Tal ,es la importancia de esta primo'rdialexploración meramente visual, aparentemehte pasiva, que, un médico sordo 'que vivía en un pueblo, con ,sólo :mirar a 10is ,enfermos, los diagnosti'caba de pulmonía. Esto lo consigno para agudizar la voluntad de los médicos noveles que, a media exploración, piden auxilio al laboratorio, renunciando a los inmensos y fieles tesoros que la clínica nos brinda a cada pa'So. Cada enfermo, ¡es un 'libro abierto a nuestros oj os; cada ,página un tesoro de So'r:pr,e'sas y [enseñanzas; nuestra ,observación debe ser minuciosa, atenta: y con la constancia die saber discernir todas las letras, COmO las descifran los estudiosos que ~onsigen lee1' los perga:minos más añosos ¡y carcomidos. La exploración de la boca,que yo llaino la cueva de misterios, merece mucho detenüniento y mucha atención. Es en la boca donde muchas enferm,edades infantiles nos ofrecen los prihl,erOS síntomas de una afec,ción. La S-e).niÓtica bucal les rica y a veees única para conducirnos a un diagnóstico prematuro, como acontece en la difteria con sus placas características; en el sarahlpión con la mancha de Koplik y el enante).na; ,en el escorbuto con sus síntomas gingivales; el muguet; la escarlatina sin escarlatina o 'sea sin exenteina y en la cual no falta la lengua escarlata característica; las e,stomatitis, antes rebeldes él. todo tratamiento; las aftas mo~estas; la ránula; el frenillo excesivo; la's anOinalías del desa1~rollo, como las fisuras palatinas; las hipertrofias de las amígdalas y la lengua: geográfica. Todas estas afecciones :s¡e nos revelan estáticamente. Sólo eon nuestra mirada nesolvehios la exploración ,minuciosa, pero, la boca y la nariz constituy;en dos entrada:s de dais' grandes avenidas biológica's de nuestro organismo: ,el aparato respiratoho y ,el digestivo, y nuestra inisión ineludibLe es descubhr cómo funcionan estas entradas que están juntasen la cara. Su funcionamiento :escapa a veces él. nuestra exploración con la ¡s:ola mirada.. Por esto, en nuestro inerrogatorio, siempre se formulan, sisteináticamente, cuatro preguntas; a saber: ¿ El niño come bien? ¿ Va de vientre bien? ¿ Duerme bien? ,¿ Duer:me con la boca cerrada o abierta? Las ma:dres casi siehlpre saben res'ponder con exactitud, ya que al despedirse del hijo, antes de dormir, le dan un beso y se dan ,cuenta de si su hij o respira con la poca abierta, o cerrada. ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA Vol. XXX. - N.o 76 Insuficiencia respiratoria Empecemos por afirmar las pr,emisas de que : Respiración nasal, respiración normal. Respiración bucal, .respiración anormal. Una respiración anormal delata un obstáculo en la entrada del aparato respiratorio, que dificulta, la circulación del a,ire con ·la a):nplitud necesaria .para la IImspiración, y este .obstáculo ha de ser descubierto por el médico para tratarlo con urgencia. La función respiratoria debe ser: Na,sa,,z. Suficiente: A cada respiración debe ingresar el pulmón 500 c.c. de .aire. Comp.leta: La inSlpiradón normal s~para el ¡esternón de la columna '\Oertebral, eleva ·las costillas al mis·mo tiempo que se separan y el diafrag.ma baja como un émbolo. Sirnéttrica: Los dos lados del tórax deben dilatarse igualinente. Regula.r:: Los m:ovimientos deben ser: amplios, regulares, sin sacu'didas, rítmicas, iguales. En los recién nacidos, 40. A los cinco añO's, 25. En adultos, 15. La inspira"ción es :más corta que la expiración en la proporción de 3 a 5. Las causas queseña'la la ·escuela francesa, de la insuficiencia respiratoria alta, son: las ve.g1etaciones adenoideas; que obstruyen el orificio ,posterior de las fosas na,·sales. La hipertrofia de la pituitaria. Desviaciones del tabique. Espolones, cr.e.stas, h~pertrofias de las amígdalas que, obstr.uyendo la faringe, pueden ocasionar insuficienciit alta respiratoria; la ,glosoptüsis (la lengua cae y obstruye 'el paso del aire inspirado). Una insuficiencia respiratoria alta, puede producir rl.efor:maciones torácicas, algunas vec~s acompañadas de escoliosis. Una mala respira;.ción puede producir disnea, pal'Pitaciones, sueño agitado, chirrido de dientes, insomnio, terrores nocturnos, enuresis noctur.na, transtornos circulatorios, como hipertensiÓn, acrocianosis, sudores, albuminuria ortostática, trastornos diB'estivos, constipación, aerofagia, disnea de esfuerzo, anemia, depresión general. Todos estos trastornos bien pueden agruparse bajo el título del élJf1eccciones por falto; de aire, o, Jnej or dicho, s'e'd de aire limpio y tibio. ' La ,integridad de la función nasal tiene en nuestras ciudades una importancia extraordinaria, ya que el menoscabo de la funCión de tarnriJz nJasalacarrea múltiples 'enfermedades. Los niños que habitan en las montañas inspitan un aire limpio, que puede ingerirse, valga la expresión, .. Octubre 1951 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA 18, 'sin la función tamiz, sin gran riesgo :para la salud. Alconlrario, el niño, de las ciuda:despopulosas respira un aire sucio; la atmósfera ciudadana. está siempI1e turbia por ejercer la función de cloaca de las ejüanaciones funesta's, como CJhün:eneas fabriles, ferrocarriles, gas1es de escape de los il\OtOre's industriales, automóviles y el polvo levantado por la: circulación incesante de vehículos de todas clases. La impurificación del aire de la ciud8Jd, como afir'ma ,e'l profesor GLANZMANN, alcanza tales grados, que se le debe atribuir un papel patológico. Entre los. gases tóxicos e'xisten los productos nitrogenados, las combinaciones sulfuradas, el óxido de carbon;o, fenoles le hidrocarburos. Los estudios realizados en París acusan una vaporización anual ,de 13.000 tonelada:s de, ibenzol y 27.000 de a"ceites pe-o sados. En Chicagose encuentran 5 'miligramos de anhídddo sulfuroso por 'metro cúbico de aire de los alrededores de la ,ciudad, y 62 miligramos en el de su interior. La: 5nvasión de automóviles ,en las ciudades haaumentado la im'pui'eza de la atmósfera hasta el punto que antes se calculaba el volumen del óxido de carbono de 0,3 a 0,4 por mil, negando, en la actualidad, dicho volum,en a: 50 por mil. A'demás de los gases perniciosos" flotan en la atmósfera de' las ciudades, partículas sólidas, de ta:maño ultra:microscópiCo, denOminadas aero-· soles, variando su núrnero alrededor de unos~ 10.000 porc. c. Cuanto }nás impurificada ,está la atmóstera con polvo y hUlno, tanto má's aUluenta el numero de aerosoles del aire. Los bacteriólogos se han ocupado de la: abundante flora Ílücrobiana de las gra.ndes ciudades, que favorece la aparición de las luás div81~sas' afecciones, es:pecialmente ,las de naturaleza ,gripal (GLANzMANN). Ante ,este aire denso de impurezas, oon ,la complicidad de la neblina, los rayos purificadores ultravioleta encuentran una muralla en su camino hasla ,el punto de poderse utilizar tan sólo ,el 1 por 100. El ¡polen y ,los mictoalérgenos contribuyen a itnpurificariel aire, for-· mando un conjunto de condiciones desfavol'ables que disminuyen la re-o sistencia a las infecciones, ,bacterianasl y la ,tuberculosis. Recientemente 's:e haco:mprobado que en el ai~e existe una flora comparable al placton de las aguas marinas. y fluvia.les, llam'ado pla.cton del aiI1e, hallado, entre nosotros, ¡por ',el Dr. FROUCHTMAN, y que puede ser causa de enfermedades alérgi'cas. . Reflexionando un poco ante lo que antecede, bien podemos üomparar el aire de la:¡; ciudades a un río ,infectado,. cuyas aguas deben ser filtradas" purificadas, antes de ser ingeridas. El ail1e séptico, tutbio, tóxico de la ciudad, debe ser depurado: antes' de ser ingeddo, como 10 es el agua, y como esto, actualmente, no es posible, dehelllos procurárnos un filtro efi-- ;I88 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA Vol. XXX. - N.o 76 caz. Este filtro natural, repres;entado por las fosas nasales, ha de funcionar -con completa normalidad. El médico ha de vigilarlo en su's funciones deflensivas de la ,entrada del aparato respiratorio, para descubrir sus defi,ciencias y corregirlas, con el fin de ,que ejerzan, ante el aire nefasto de las grandes ciudades, una acción Iprotectora parecida .a la de las caretas contra lo,s gaSjes asfixiantes. Goma puede verse, son muchas las causas que nos inducirán a formualr la pregunta ineludible de toda visita al pediah'a, que será, como hemos dicho: ¿Su hijo duerme con la ,boca abierta o cerrada? Nosotros,a pesar de la respuesta afirmativa de la madre, nos cercioraremosescuchandosi el niño respira con los labios totalmente cerrados y completaremos nuestra, exploración,a:pIícando siempI'leel espejo de GlatzeI. . ROSENTHAL prueba la permeabilidad nasal por su procedimiento, que consiste en tener al enfermo en reposo 'e invitarle a respirar con una 'sola ventana nasal, mientras la otra se obtura con el dedo. Normalmente, pueden hacerse veinte respiraciones nasales en un minuto. En los estudios de la Escuela franee'sa, no s'e mencionan para nada las obstrucciones duras, óseas, representadas por 'el paladar ,ojival. Como ve'mos, ·esta'moshasta ahOra ante el enfermo, sin invitarle a que, abra ,la boca. Hemos visto 'su perfil facial, hemos visto la cara de frente, heü10s 'explorado la respiración .alta, y, si todo noS: parece normal, pasa'mos a la "~egunda parte: de laexploraclón, o sea, observando los di,entes con los In,axilares completamlente cerrados. Se nos presenta 10 que llamo "fachada dental". Con sól,o mirar la fachada dental, podeiuo's diagnosticar algunas afecciones. La semiología denta:l refleja enfermedades tan importantesco'tIlo ~el ra1quitis:m:o, la heredosífilis (sífilis innata); dientes de Hutchisson (triada-oculo-oto-dental); caries. Un inciso im¡portante: Se tiene la idea errónea que '¡os dientes llamados de leche: no se han ,de tratar afecto's de caries. Esta idea, inclusü la he visto defendida por algún odontólogo. El des,precio clínico al diente te'mporal, mereoe ,nuestra ,protesta, ya que una caries es una herida abierta, un foco séptico y una causa de contagio para las otras piezas dentabas. El pedialtra deb,e diescubrir la.s caries y recomendar .su tratamiento, sist!emáticamente. Un di'ente temporal es. digno de' toda atención y merece ,ser sistemáticamente explorado, ya que durante su presencia transitoria en la vida, puede ,ser perjudicial si enferma. Ellos delatan, al ,parecer, con sus estigmas y distrofias, ciertas caI'lencias ,en los primeros 'meses de la gestación. Son, pues, un testimonio de calidad clínica, ¡porque con la transparencia: Octubre 1951 ,f ANALES DE MEDICINA Y ClRUGIA 189 del esmalte y SU3 caries, nos J'evelan anormalidad del metabolismo del calcio. SCHEIDT ha estudiado la funesta influencia de las caries de la prúnera d.entición sobre los dientes ¡permanentes. La profilaxia de loos dient'8s de leche, debe pormar parte del mínimto programade'l puericultor, que ha á.rJ des'cubrirla y trata,rla. La caries dental de los dientes de l,eche, puede s:er causa de una mala for'mación y posición de los dient.es per"tnanentes. Mientras se mira la fachadn denta,l, otra pregunta es imprescindible,: ¿Su hijo '3e chupa el dedo? ¿Le han dado chupete? ¿Lo han criado -con lactancia materna o artificial? Suponiendo, pues, que el niño r,espira bien, o sea que la ,entrada del aparato respiratorio está ,normaJmente -constituída, va~nos a v,er si la entrada:del aparato digestivo es normal. Las consecuencias de una lles¡piración bucal, son numerosas y constituyen todo un ,capítulo de deficiencias fisiológicas abarcadas baj o el epípeto de insuficiencia respimtoiria;. Las fosas nasales y la nariz, tienen una función ineludible ,de chim,eI1Jea para inspirar y expirar. Una pern1,eabilidad normal de la parte pasiva de la chi'nlJenea, es indispensable para que la respiración, :magna función del organismo, se verifique con toda nor'nialidad. Exai.n'inemos la parte de tubo o chimenea o sea la parte estática. Una insuficiencia respiratoria alta, debe: distinguirse de una insuficiencia pulmonar, que puede ser producida por lesiones 'profundas del aparato respiratorio, como neumonías, pleul1esías, tutnores. Una respiración alta, normal, debe seresenciahnente nasal, 8uficie¡nte, regular. rítmica y silenciosa. "Le nez c'est :la de! des voile:s rle,spiratoires". Toda respiración que no se ,efectúa: c'on la boca cer'ea'da, no es fisiológica. La puel·ta del a,parato respiratorio, puede seratrésica por suconfor:mación, por causas intranasales o por defori:naciones extranasales. Las consecuencias de la insuficiencia respiratoria fueron muy bien estudiadas ¡por la Escuela francesa. Por la simple inspección ocular, podemos descubrir las consecuencias de un.a insuficiencia respiratoria .eLe entrada, especialmente si el niño es un poco 'mayor (de 10 a 15 años). Las insufi.ciencias de la entrada respiratoria, tienen un aspecto .muy bien descrito por PASQUIER: pálidos, altos, delga,dos, con la boca perpetuai.nente abierta. Al desnudarlos, se ¡observa un tórax estrecho, que yo d.enomino "tórax sediente de aire", plano, como deshinchado, vacío de aire; los lIiúscu}üs del tórax están como atrofiados en comparación¡con los de la mita:d .inferior del cuei.'po normalmente desarrollado; omoplatos salientes, abdotnen prominente y :cierto grado de ,escoliosis .. El ha1nb'f'ie ANALES DE j\ilEDlClNA y CIRUClA 190 Vol. XXX, - N,o 76' de aire se revela en el desal'rollo del tÓl'ax, C0)11.0 la sed die agua len un campo ,en plena sequía. Después de Ipreguntar ,si el niño respira con la boca abi,erta, nuestra, segunda ¡pregunta es: ¿ Padece resfriados frecuentes? La vulnerabilidad del aparato respiratorio sel~evlela pOi' enferi:nedades producidas por un aire que penetra 'en los, pulmones sin estar caliente, filtrado, humedecido y purificado y sea un aparato respil'atol'io s~n la: defensa: nasal, sin ,la depuración, 'en suma. Toda obstrucción nasal" por ligera que sea, dis:minuye la habituar capacidad vital y si suscita una 'respÍl'ación bucal vicariante, parte del aire 'inspirado, escapa a la protección de la vía nasal fisiológica que, con sus jnfranctuosidades y ca'mbios de dirección de la columna aél'ea inspirada humedece, libre de las partículas de ¡polvo, polen y placton aéreo y ataca los 'microbios con ,el poder bactericida de las secreciones nasales y con el principio de'Scubilertopor Flein:ing, La respiración bucal, antifisiológica, se acoinpaña de una insuficiencia respiratoria, de una fragilidad particulal'de las ,vías respiratorias y debe considerarse como ,una; enferin:edad. La res'pira0Íón nasal debe ,sler, pues; Com.pl'e1la) s'ilenciosa y ;exclusiva.rn¡en~e nasa.l. He observado que 1ft 'm,ala oclusión dental presenta múltiples variedades que ,designa'rnos, Jlara facilitar su I'Iecuerdo, en: Mala oclusión en forma de valla,. Los ,dientes están separados entl'e sf por espacios que asemejan las' :piezas dentadas a }os tablones de una valla, Dientes en forina de ,tenaza. La.s piezas dentarias contactan por sus cÚ'spidescomo unas tenazas. si,endo imposiMe lograr que los incisivos superiores ,sobrepasen a los inferiores. Dientes en cal~ejón. Las piezas: :denfal'ias quedan a distancia las superiores de las inferiores, dej ando un espacio que puede compararse a un callejón formado por las pieza:s dentaria's que representan las casas blancas que Jorinan dicho callejón. Dientes en forma de buzón. Las pieza's dentarias no sólo no ajustan entre ¡sí, 'sino que dej an un espacio por el cual 'podría penet.rar un obj eto del in'isiTW inodo que una carta en un buzón. Dientes de pez. LaSí piezas dentarias inferiores sobrepa:san a. las superio~es, coino en -m:uchos peces (prognatisi110). Todo's estos defectos de oclusión deben ser estudiados, anotados en la historia clínica, para que nuestro descubi'iinietno sea después aprovechado oportuna'nlente por el odontólogo. Sieiupre, los padres nos han agradecido nuestro conserjo de consultar un ,odontólogo para que, con OpOl'tu- T • Octubre 1951 .. ANALES DE MEDICiNA Y CiRUGlA 19 1 nidad, corrija los defectos de la mala oclusión que hoy los ortodoneedistas pueden corregir de un modo admirable. En una segunda explOi.'ación, nos .s:o'r'pr,enderemos de la cantidad ele niños 'que no son nortIiales, Iporque las p1ezas dentarias no ocluyen bien. Una buena oclusión dentaria, se cara:cteriza porque 'los incisivos superior,es están por delante de los inferiores, contactando entre sí. Podría compararse la Oclusión dental a una caja que al cerrada, la tapa sobr:epasa la 'parte infedor que está destinada: a contener los objetos que guarda. Los incisivos superiores deben estar por delante de lo.s inferiones, como las aguas de una pi.'esa hidráulica, que saltan por encim:a, sin violencia, sin dej al' e'spacio Ubre entre la pIlesa y el sa:lto de agua. Las anomalías que hemo's observado con más frecuencia, son las de la ,primera dentición,consistente en desviaciones haciaa:delante de los incisivos superiores por el !hábito pernicioso de chuparse el dedo y de uSai.> el chupete ¡fune·sto. Una buena oclusión dental garantiza una buena masticación. Una perfecta masticación, garantiza un ¡preludio de una buena digestión. Se explora la; nutrición de los enfermos, ~on ,las pesadas metódicas; se ,explora el creciiniento con la cinta il1.étrica; exploramos el aparato respiratorio, ,e,l digestivo y se olvida explorar la ¡>espi'r'a:ción (función chimenea) ~n .los órganos destinados a captar ,el aire. Si la boca es el embudo del apa:rato digestivo, donde empi,eza la digestión, las fosas nasales constituyen la pUM'ta de 'entra:da del aire, que ha de 'ser completa, nutritiva, inetabólicamente útil. Una respiración alta normal es el preludio de una buena ;he:matosis. Por ,esto, el pediatra, cuando está ante la faci,es del niño, debe sentir que la responsabilidad de su omisión se reflejará para sieiTipre en la cara, del niño, que será víctima de un estigma de la insuficiencia: de una ,ex¡ploración ineludible. Un niño fué víctima de un :médico mal observadOr. Las deficiencia:s nasales desvían la: función i.>espiratoria ha:cia la boca. La nariz pide 'a,u:vilio a, ~ boca, Y como ,ésta ,no ,está creada para esta función respiratoria, se ,esta:blece un mal hábito, con gran perjuicio para el organismo. La boca pa,r'a, miJ;sflí,car y la nJariz para respirar. La confluencia funcional de los dos apara:tos, dig,estivo y respiratorio, debe evitarse después de descubrirse ,sus defici'encias, ya¡ ~e :cada una Henle su propia saIída: 'Y entrada paracomunica'r'se con el exterior. . .. Explol'ada la fa:chada dental, convenc'idos de su buena oclusión, de la integridad de las piiezas; dentarias, exentas de caries, pasamos a 1ier"clera ,exploraci6n, o sea,. al examen de la bóveda palatina. ANALES DE MEDICINA Y CIRUCIA Vol. XXX.' N.O 76 La ,bóveda; ,palatina es, para el niño, el escudo nobiliario de su constituciónbiológica) que plor tSUS '(:amcteresrllOlsrev'ela, !no sólo S1l ,estado actua:l, s,ino qwe fJ, veces 11JOIS descubre defidencias de sus progenitores. Al abrir la boca, nos !fijaremos 'en la forina del arco de los ,maxilares. Normalmente, tienen la forma de una circunferencia, con dos ramas casi paralelas, forInando, /ensuconjunto, la for:ma de la letra U. La bóveda palatina debe formar una cavidad 'Semejante a un arco ~:o­ l11ánico, que 'por la forma lo ,compal:'o a una concha de peregrino de concavidad ,dirigida hacia abajo: El arco dentario puede desviars,e de su forma normal de letra U, para adquirir la form,a que recuerda la Letra V, o :sea, paralelizándose las ramas del maxilar y cambiando la forma decircunferencia del arco diel maxilal:'. La forma de V le da la configuración de pico de ave. El paladar pierde 'la forma de arco románico para transformarse ,en un arco gótico. Este cambio de estilo arquitectónico, no reportaría ningún perjuicio de estética, ya que ambos lestilos tienen su propia belleza, ¡pero en el niño es perjudicial porque la elevación del paladar representa una dis:minución de la capacidad respiratoria de la nariz. Acordémonos que el paladar es el teooo de la boca y el suelo de las fosas na.s'ales, que invade y disminuye su luz de ,entrada I\espiratoria y esto puede ser una'causa :más de insuficiencia te:spiratoria que escapa a la ,exploración. Hemos recomendado que -entre en nuestro interrogatorio: si el niño se chupa el dedo, si duerme con la boca abierta, si padece frecuentes afecciones I\espiratorias, si 'se le ha dado a conoCler 'el chupete y si está cdado con lactancia materna. E-sta'scircunstancias pueden ser causa de la deformación palatina. Ocupémono.S: del último extremo . .h:l Dr. S. DREYFUS, llamó la atención a los médicos de la ventaja de ,la lactancia a ,pecho para el desarrollo normal de las arcadas dentarias y los músculos masticatoI'ios. Los labios, por el trabaj o de los músculos intI'línse'cO's, hacen una verdadera gimna'Sia y los: fortalecen, adquiriendo un tono suficiente que les !permite oponerse a la protusión de los incisivos. La tetada fisiológica es ).lll ej,ercicio indispensable para el desarrollo racional ;de 10s1 labios. Por otra parte, el trabaj o de los masticadores influye en el desarrollo normal del maxilar inferior y del piso superior de la cara. Así, las piezas dentarias encuentran ,suficiente espacio en un hueso normalmente conformado. El niño ,criado con biberón, no cierra ,herméticamente los labios contra ,la tetina como hace con el pecho. La: lengua comprime la tetina contra 'el ;paladarpara; extrae!' 'la '.Leche. Esta acción lingual, ejerciendo l .' Octubre 1951 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA 193 tracción de delante hacia atrás, acarrea, por consecuencia, la proyecclOn ha:cia adelante del maxilar y de el,evar la parte media del ,Paladar. Esta acción produce la: protusión ~d!e los in:cisivos y la formación de un paladar ojival con todas las consecuencia,s morfológicas flsiológicas de estas deformaciones. ' La: succión del pec,ho fa,vorece el desarrollo del hueso y de los músculos de la cara y la conformación y amplitud de las fosas nasale's,per:rnitiendo la respiración fisiológica de la nariz. Las deformaciones raquíticas de la boca, pueden comparar3e a las del tórax. Las partes laterale~ de los maxilares, en lugar de conSiervar su líneacurva,se-aplanan para, ser rectas, como acontece con las paredes latera}es del tórax raquítico; de leste modo la boca adquiere la ,fol'ma de pico :de' ave, como lel tórax adquiere la forma de proa de barco o de tórax de pollo (pecho de pollo). También la bóveda palatina se eleva, se estrecha y roba espacio a, las fosas nasa}es y aplasta el tabique desviándolo, arrugándolo de su Iperpendicularidad. Este ,estrechamiento palatino puede compararse al estrechamiento torácico con hundimiento del esternón du" rante las fu~rtes inspiracioneS". Poi.' esto hemos dicho que la bóveda pa,latinaconstituye ,es escuda nobiliario die su clons'titución hasta el punto que nuestra exploración bucal ya hos ¡pone en el terreno de formular el diagnóstico prematuro de raquitismo. Es una manifestación ra,quítica. La boca raquítica nos debe conducir a agudizar nuestra:s actividades terapéuticas" porque una boca raquítica puede ir acompañada de una, pelvis raquítica y de unas piezas dentarias de segunda dentición, deformadas y antiestéticas. La concomitancia de la boca raquítica vista, nos ):Iev,elará la posibilidad de un raquitismo dental invisib,le, ya que los dientes de la dentición futura, 'se desarrollan en el interior del ;maxilar durante los primeros 'meses de la vida, en pleno l'aquitismo activo (hipoplasias totales, erosiones puntiformes en surco, en SUlPeríicie, verdaderas distrofias dentales debidas al raquitismo in trama, I xilar). Ya el profesor MARFÁN ,s,eñaló 181 paladar ojival COluO uno de los signos de raquitismo. El maxilar está alargado en sentido antero posterior y estrechado transv'ersalm'ente; la bóveda palatina, es aÚa y estrecha, tom'ando ,el aspecto ojival.E'sta deformación del maxilar superior sería debida, según MARFÁN, a la acción de los músculos que, ejercida sobre los huesos reblandecidos, disminuyendo el diámetro transversal del macizo faéial yaproxi:mando las arcadas dentarias, hacen sobresalir el hueso incisivo y eleva,n le1 rafe del paladar. Las fosas nasales están atrésicas, y el 194 ANALES DE MEDICINA Y CIRUCIA Vol. XXX. - N.o ¡6 ta!h1que desviado, y esto 'es la causa de que la .respiración nasal !esté marcadam,ente dificultada. ' Como se ve, el descubrimiento de una bóveda palatina que pasa desaper<libida len un número enorme de enfermos, debe ser buscada sisf<emáticamiente en el sieguruiJo ItiJe'mipo de nuestra 'exploración facial para instituir uflli, p'l'>ofilna:ia, de la segunda dtentición. Ya en la exploración del cráneo, podemos sospechar la existencia de la boca r.aquítica .al descubrir las deformaciones craneanas. Frente saliente yabombruda, frente olímpica, fm;;as pari,etales salientes y !el vértice craneal deprimido (carneo natiforme); diámetros de la cabeza sensibleüiente iguales pot aumento del transViersal y ,disminución del antero posterior (braquicefalia). Así, pues, debl8'm!ols conJsid)¡erarel paladar: oji'/Y¡al como síntoma de un raquitismo io'culto qu.e debe busc'arsle siempre. Las deformaciones ,palatinas no son siempre iguales. He vi~to, en los ca'sos que forman la estadística que presento, cuatro variedades que, para para facilitar su tecuerdo, renuncio a nomenclatura odontológica: Paladar en forma de concha;. Esta es, a mi juicio, la forma ideal de arquitectura humana má~: pedle:cta; se presenta en Un buen tanto por ciento. 'Sigue, ¡por ,su frecuencia, el paladar 'en forma de p'ezuña de cabOtllo,o sea que las arcadas dentarias están .separada·s del paladar ;pOr una depresión discr,eta, poco profunda,que recuerda el interior de la pezuña del caballo. Este paladar es normal en todos los niños de· m'eno:sde un año. Después, encontramo~ !el paladar ojival que, co:mo indica SU nombre, tiene la forma de ventanal gótico, y,por últi'rno, y ésta es la forma más rara: que he visto, vien.e el paladar en forma de tie1jado, o ¡sea que el paladar tiene la forma de, tej ado die dos ve'rtientes que se reúnen en forma de ángulo y que, como 'el paladar ojival, .es patológica y roba 'espacio a las fosas nasales. Terc.em explomción. Exa'rn,inado el 'paladar éseo, debemos, con ayuda de un dep'r,esor de lengua, examinar el paladar blando, representado por la úvula, amígdalas y, si sospechamos que la obstrucción está en el cavum, debemos explorar las v,egetaciones adenoideas con ,el tacto retro nasal. Hasta aquí hemos descrito las obstrucciones duras representadas por' las anomalías del paladar ; ahora nO'soouparemos de las. obstrucciones blandas. Es indudable !que, una de las causas mAs frecuentes de la insuficiencia respiratoria altá, 'es las vegetaciones hipertróficas.; siguen las amigdalitis taü1bién. Del ):rÜsmo 'modo que las piernas se deforman con el peso del cuerpo al gravitar ,en un esqueleto enfermo de raquitismo, la cara se deforma si los huesos están blandos, representando raquitismo .faciaL Octubre 1951 .. ANALES DE MEDICINA ,y CIRUGIA 195 Las vegetaciones adenoideas obligan al enfermo a res'pirar por la boca, y, por consiguiente, a tener en estado de contracción a los músculos de~ presores de la mandíbula; sobre todo, durante el sueño, se deforman los huesos. Los raquíticos presentan !pronasia y, retromentonismo. El conflicto gravle se presenta en la ,segunda dentición. En los maxilares deformados, no caben los dientes de la segunda dentición, como una. multitud que no guai~dá las reglas cívicas de una 'Úola ordenada, las pieza's dentarias Se apiñan, cabalgando las unas sobre las otras y apareciendo graves anoma~ lías de 'posición. Ramilletes de anomalías, ramiUetes de dientes y rarllilletes de descrédito para el pediatra que no ha explorado bien la cavidad bucal. Una boca semi-abierta provoca desórdenes ,eh la erupción dentaria, a :más de, la insuficienCia respiratoria alta, la hipertrofia de las vegetaciones adenoides, constituyen el problema más fácil de~ resolver. Entre las estenosis nasales, es la más leve, ya que con su extirpación,quei se, 'efectúa sin ningún riesgo, IpUlede curar el 'enfermo. Pero he visto calsos de niños 'que después de 'ser :extirpadas sus ,v,egetaciones (estenosis blanda, posterior), seguían respirando con la boca abierta, Sin que el especialista hubiera visto el paladar ojival que, seguía obstruYlendo las foSas nasal,es ('estenOsis dura, anterior). No íha mucho, se presentó en mi con$ultorio un niño que estaba en manos de un distinguido pediatra. La ¡nadre estaba contristada, porque su hijo siempre 'estaba ,enfiermo de ,rinitis, faringitis y bronquitis. Respiraba con la boca abierta. ,Le practiqué un tacto retro-nRsal desbridador y h1econvencí que sUS: vegetaciones no eran capaces de estenosar las fosas nasalles, pero un paladar 'en forma de teja, profundísimo, reveló la causa de sus dolenciM y la recomendación de un odontólogo ortodoncentista, seguramente resolverá el problema. La impresión deprim:ente que los deudos 'experimentan al v,er descubrü: una anomalía fácil de explorar y de la cual ,ellos se dan cuenta des,pués, de nuestra exploración, es un hecho cuotidianoque despr,estigia a los médicos. La hipertrofia de las amígdalas, cuando 'puede demostrarse ,que ,estenosan la Ipuerta del aparato respiratorio, hace que deban ,extinparse. Pero este capítulo es de una dificultad y una 'extensión,que 10 dleja:mos para otra comunicación. Hoy he visto un caso interesantísimo. Un niño de tres años con facies adenoidea típica. Varios especialistas lo han explorado. Sus vegetaciones adenoideas son tan discr,etas, que no merece la pena de extirparlas. El niño está sie:nipre con la boca abierta. Acude a mi consultorio 196 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA Vol. XXX, - N ,0 76 para que le vea un estrOfulus urtieariadosin importan'da. Me llama la atención su facies adenoidea y al explorado, le descubro un paladar ojival ,exagerado y una mala oclusión notable. Al notificar a sus padres que la obstrucción nasal no era debida a las vegetaciones, sino al paladar, qUe le invade la's fosas nasa:les, exclam,an: ... j Cómo es posible! i Siete médicos lo han visitado y ninguno nos ha hablado del paladar oj ival como usted! Exploro a la: madre y ti,erre maloclusión, con paladar normal. Exploro al padre y tiene máloclusión y un paladar ojival que, con1,o no se practicó la ortodoncia a su tiempo, 'es imposible, a 'mi juicio, modificar las anomalías de su boca. Kstá en 'muchos tratados de pediatda la fotografía de un niño con facies adenoidea. La sintom'atología de esta afección: todos la eonocehlOS: sordera, fades de estupidez, resfriados continuos, rinitis, etc., pero al lado de estos enfermos escapan al diagnóstico otros similares. Los SÍlltornas de obstrucción son los mismos, unos anteriores y otros Iposteriore. Eric PRl'rCARD, afir'ma que una bóveda palatina demasiado alta y estrecha, se hunde entre los conductosnasall8s anteriores, originando obstrucción nasal, respiración por la boca y otra's lamentables consecuencias. CUanto más pronto se !empieza el tratamiento ortodóncico, tanto más fácil es 'moldear la: mandíbula, y cuanto más pr'Onto crezca en posición correcta, serán )Tl,ej ores~ los resulta:d¿s finales. Existe, pues, una facies adenoidea y una facies palatina. Al ver una de las, fotografías que presento, no es posibl,e difei'encial'la:s. Como no sé si se ha escrito esta anomalía en ningún libro, con la extensión de esta co:municación, ignoro si algún autor le ha puesto nombre yyo, humildemente, propongo el de fa,des palatina, para diferenciarla de la facies adenoidea. Las dos producen los mis'mos trastornos, ya que a:mbas constituyen un mismo obstáculo; la primera, una a'tresia ósea anterior, y la segunda, una atrelSia blmnda posteroir. La primera de difícil 1'esolución, requi,e,re 'pericia, tie'mpo y constancia. La 'segunda, de resolución fácil y breve. Consecuencias clínicas Las funciones trastornadas por una insuficiencia nasal, son: DefOrmaciones dento-máxilo-faciales, causadas por alteraciones rinofaríngeas. La r,espiración bucal puede s.er causada por: Desviación del tabique. Octubre 1951 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA 197 Co.rizas. Rinitis hipertrófica. Pólipo.s nasales. Vegetacio.nes adeno.ideas. Estas alteracio.nes pueden pro.ducir la pro.nasia y atresia palatina. La hi!pertro.fia de las amígdalas causa pro.mento.nismo., lo. pro.pio. que la glo.so.pto.sis. La facLes adeno.idea de estúpido. Ique he)no.~ mencio.nado.. To.do.s esto.s trasto.rno.s o.bedecen a una i:rüsma causa: Obstáculo.s a la respiración nasal co.mpleta. Una mala respiración es causa de "rrialpo.sicio.nes dentarias, además de lo.s trasto.rno.s generales ya mencio.nado.s,co.mo. el tórax hundido.. Cuanto. :más jo.v'en es el enfer:mo, :más éxito. puede esperarse de una co.rrección o.rto.dóncica. Es el Iperío.d o. de maleabilúJ,a¡d o. die hueso. blando y lesta misma circunstancia que o.frecepro.babilid8!des de éxito., es la causa de las defo.rmacio.nes causadas po.r lo.s hábito.s defo.rmado.res co.n el chupete yel chuparse el dedo.. Las fosas nasales cumplen una misión respiratoria olfativa, fonétir:a, dlefensivQ, y estétka. Todo.s no.s hemo.s percatado. de las íno.dificacio.nes de Ia Vo.Z, que s'e hio.dificatransito.riamente en las a"migdalitis agudas! (voz amigdalina). Esta mo.dificación puede 'persistir permanentemente en la ,amigdalitis crónica. Hay dificultad en la emisión de las guturales, Co.mo. la g y la 1'. Las éün:ígdalas faríngeas o. superio.res hipertróficas dificultan la fo.rmación de difto.ngo.s an, en, in, on, un. En nuestras viSitas es una eXlplo.l'ación co.rriente invitar al enfermo. a pro.nunciar las letras y difto.ngo.s que no.s revelarán la presencia de un o.bstáculo. respirato.rio. y fo.nético. A rnjJ,la pronunciación, intervención. El aparato. reso.nadoi'constituído ,por las cavidade:s bucal, nasal, faríngeas, fo.sas nasales, fo.rman la modulación de la palabra, junto.co.n la lengua, úvula, cal'rillo.s y mandíbula. Voz de nariz, voz p.'l~ológica. La estética debe set, po.r parte del pediatra, un capítulo. muy digno. de atención. La expresión de la cara: tiene una impo.rtancia trascendental, ya que en ella: se reflejan lo.s sentimiento.s del alma. El ro.stro. de una persona debe ser no.rmal. Una cara: asim:étrica Ipor una parálisis facial, una asi)n:e.tría po.t tum:oración, una rostro. alargado., de cara de caba.llo., po.r insufici:encia respirato.ria, co.nstituyen un drama íntimo. gravísimo., sobre to.do si se tl'ata de una niña, Ipo.l'que la hace vícti:ma de una, fealdad que la ANALES DE jHEDIClNA y ClRUGlA Vol. XXX. - N.o 76 aleja de la: m,lSlo.n sagrada de ser >bella para triunfal' en la vida. Una {acriles pala;tina o. adJenoidea o. co.n mala o.clusión dental, se refleja len la cara y el pediatra es el pri):nero. que ha de des:cubrir 'esto.s de'Íecto.s a su tiempo. opo.rtuno., si no. quuere caer en una 'r\esponsabilida'd so.cial y médica, ya que belleza de ,la no.rmalidad, ,es la .misión ineludible del pediatra. Un tabique co.mpleta'mente perpendicular es raro.. y co.nstituye un índice de belleza interna, que sólo.. lQS o.to.-rino.-laringólo.go.s pueden admirar Co.n su espe;culum. El pleditJJ~m ha de ser un buen ar'q-uiteicto humano, ya qu,e a él a,cuden los organismos ·en plena formación :biológica y él 'ha dfJ m;odificar '[os fJ.e1ectos con una, oportunidad ineludible. La boca tiene un Ipapel prepo.nderante; múltiples funcio.nes: prensión, inasticación, insalivación, deglución, gustación, fo.nación, escupir, defensas, expl:1esión. La bo.ca, entrada del aparato. digestivo., co.n sus funcio.nes mo.dificado.ras de lo.s alimento.s masticado.s y mezclado.s co.n lo.s líquido.s salivares, puede co.nsiderarse co.mo. 'el estómago {acial. Un bo.lo. albnenticio. bien preparado., ,es ,el preludio. de una buena digestión. Esta s'e lo.gra con una no.rinalida;d dental y esta no.rmalidad dental depende de la no.rn.lalidfld arquitectónica de la bo.caco.n un ,paladar no.rmal y una buena o.clusión. Lo.s incisivo.s co.rtan lo.s alimento.s .co.mo. una tijera, lo.s canino.s seccionan lo.s alimento.s que necesitan :más pi~esión, y lo.s premo.lares y mo.lal'es trituran. Sus superficies ,eclusantes, dispuestas' en fo.rma de surCo.s y cúspides que se intro.ducen recípro.camente co.n sus antago.nistas, trituran, po.r encaje recíproco., lubrificado.s po.r la saliva. Esías funCio.nes fracasan en la jnala eclusión. El 'estómago. pro.testa cuando.. se le sirve un bo.1Q mal co.ndicio.nado.. Lo.s dientes deben adaptarse recípl'o.camente, como. las ,ranUl'as de unapinza de P,ean. ' Tratamiento . ,. LlegamQs al punto. final de nuestra terapéutica, que es esencialOl,ente í'enuncialista. El camino. del médico. pediatra 'se bifurca en do.s sendas: la del o.rto.dencista y la del o.to.-rino-laringólo.go.. El pediatra: se ha de percatar de la impo.rtan:ciá que tiene descubrir, lo. :más prematuramente po.sible, un raquitismo. o.culto., po.r la trascenden'cÍa ulterior del paladar o.jival abando.nad o. o. el crecimiento. de una pelvis plana, defo.rmacio.nes que no. se ven Co.mo. las piernas deforIl1adas, sino. que So.n ano.malías ,ocultas. Alguno.s punto.s pertenecen al pediatra, Co.mo. el tratamiento. de las hipe,rtro.fías linfáticas amigdalinas, las rinitis de reI Octubre 1951 ANALES DE MEDICINA Y CIRUCIA 199 petidón y las mismas aÜ1igdalitis que, 'en un principio, todavía tienen un ffralarm'tentQ e'8'encial mente médiclol, con toques antiséipticos, tónicos, autova:cuna'3 y ca;m;bios de clima. P,ertenecen también al ,pediatra loS. tratam.ientos contra el raquitismo para evitar deformaciones ulteriores de los dientes de la segunda dentición, evitando las causas que pueden producí'r deformaciones bucales, como ,los hábitos de ohuparse el dedo y 'el uso del chupete. El primero, según esté en contacto con el paladar o no, produce una defor:mación distinta. yario's 'son los ,procedimientos pata combatir -este p.ábito: los manguitos rígidos, la bolsa atada a cada mano, los amargos como las sajes de quinina, el esparadrapo y unos aparatos e~peciales que, :puestos en el dedo, evitan la presión bucal. La terapéutica que llamo l'enuncialista se refi.ere a que el pediab.'a debe descubrir los defectos y recomendar ,la cooperación del ortodoncedista y del rinólogo 'para que ambos puedan normalizar las dos entrada.s. (embudo y chimenea) de los aparatos' vespiratorio y digestivo. No ha mucho ~l problema de las maloclusiones y palabras ojivales no tenía solución. Aun Se pueden obs,ervar muchos adultos con implantadones i:mperfectas y caras alargadas (facies caballar) que han vivido con una cavidad bucal completamente deformada y con una implantación denial ,fatal. Hoy los progresos \inmensos de la odontología no nos eximen -de ,esta responsabilidad, iuuy al contrario,. nos ofrecen unas posibilidades admirables para podei' corregÍl~ paladaI'les ojivales, rnaloclusiones, prognatislnos y desterrar las facies palatina. En nu.estra ciudad, antes eran contados los ortodoncistas. Hoy .constituyen una especia.lida-d dentrCi de la odontología, hasta el punto que ha.y un odontólogo que se niega a ,practicar una extracción dental ,porque sólo se dedica a la ortodoncia. Nunca dejaremos de explorar a 10'3 progenitoii ,8<S del enfer'm.o y nos hemos admirado de la cantida:d de paladares deformados de los padl'es .que coinciden con los paladares, también deformados, de sus hijos. En las inspecciones escolalles debieran entrar en las exploracione's los -epítetos de: insuficienCia respiratoria,eclusión dental y bóveda palatina. El paso 'Por las escuelas de los :médicos inspectores podría descubrir centenares deo niños que han llegado a la edad escolar sin ser diagnosticados y que muchos de ellos todavía podrían ser tributarios de un trata:mi,ento ortodóncico eficaz para un ulterior desarrollo correcto y nor:mali.dad de las. funciones fonéticas, respil'atoria~ y digestivas. El niño normal debe respirar bi,en, :masticar Meon, hablar bien, ser bello, ,Y todos estos atributos redundarán en un buen desarrollo corporal yeSipiritual. 200 ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA Vol. XXX,· N,o 75 Adrede hemos mencionado la parte espiritual. Estudios recientes han demostrado 'que la patología dental influye en el espíritu y entre los escolares poco aplicados, abundan ,extraoI\dinariamente los defectos de las piezas dentarias. Además, una boca normal representa una buena masticación y una buena trituración alimenticia garantiza una digestión normal y ésta predispone al trabajo y al optimismo de la salud completa. Una dentadura anol'ínal, especialmente en la mujel', suprime la dsa, tan higiénica, para evitar la ostentación de unos dientes feos. Un C01npIejo de inferioridad puede seguir a una mala eclusión no tratada. Una boca constantemente abierta, es una causa de hilaridad entre los escola1~e:S, ,además de ser una actitud facial antihigiénica, antiestética y de resolución ineludible. Esta 'comunicación debiera ser leída por un odontólogo, pero los odontólogos hablan en sus academias y sólo paral ellos, como los urólogos Ipara los urólogos y los pediatras pal'a los pediatras, y resulta que SU3 conocii.liientos ¡quedan enrm'ecidos en los cenáculos de las especialidades. La divulgación intra'médica se resiente de estas actitudes por falta de una irradiación amplia y ,eficaz. ya que mi ti.'abaj o es sim:plen1Jente una silueta científica si la con::ipafamos con la Jnagnífica obra de ,ortodoncia del profesor A. MONTI,catedrático de Buenos Aires~ que tiene más de quinientas páginas. De esta obra he apI\endido muchos detalles ¡que han sido comignaclós en mi conferencia. • Conclusiones Desde hoy ha de figurai' 'en las obras de Pediatría en el estudio de la: exploración infantil, el capítulo del lexamen oi.'denado y minucioso de la cara, boca y fosas nasales, ordenado por cuatro tiempos, como intel'vención reglada. Podenios, desde ahora, incluir la facies palatino, ,entre las facies estudiadas en Pediatría. Esta facies les similar a la facies adenoidea, ya que a'mbas ,defornraciones obedecen ,a una :causa similar, o sea a una obstrucción de la entrada de la chimenea respiratoria. La:, facies palatina es debiila a una cama ósea y la adenoidea a una causa blanda. . Primer tiempo. - Examen de la cara, de frente y de perfil! no olvidando de .observar la relación entre ésta y el cráneo. La mirada del perfi'l, Sie.rá siempre imaginándose las cuatro líneas que dividen la cara, para t,ener una idea de la proporción de la frente, nariz, labios y inentón. FOI'm:a de )a nariz y nivel de los órganos ante un plano imaginario. En suina: estudio del perfil facial. . Octubre 1951 • ANALES DE MEDICINA Y CIRUGIA 20~, El examen de frente 's,erá con la boca cerrada. Se¡gundo tiempo. - Exaínen de la boca abierta, con los maxilares cerrados. Exploraremos los dientes para ver como están implantados. Si hay buena oclusión. Descubrir los dientes de for'm:a de valla, en forma de buzón, en ,forma de ,callej ón, en foi'ma de pez 1 en forma de tenazas. Tercer' tiemplo,. - Examen de la boca abierta. Buscar sistemáticatnente si hay caries para tratarla. Forma de las rama's de los íl1.axilares. Ejxatnen del palada:r óseo: forma de pezuña, for"rria de tej ado, forma de bóveda gótica 9 románica, concha. Examen del paladar blando: amígdalas~ faringe, úvula, 'epigloUs. Cuartol tiempo. - Examen de la fonación, invitando a pronunciar' las letras G, R Y los diptongos an, en, in, on, un. Examend~; la :ry:,sp'i¡ra,ción con el espejo Glatlier. Examen ,del cavum con el tacto retro nasal. Quinto tiempo. - Examen de la respiración, buscando si existe una: insuficiencia respiratoria,a:lta y si esta respiración insuficiente ha causado ya defoi'maciones torácicas 'por deficiencias de la chimenea, COmo tórax estrechos, paralíticos. Síntomas de hematosis insuficientes, que den'omino sied ~e aiT)e. , n.espué~ .de estos cinco tiempos y conv,encidos de, la nor'malidad de la bo'ca (embudo)' y de la chimenea, entradas de los dos aparatos, dige3tívo. y 'l'espiratorio, seguiremos la ¡exploración del cuello, tórax, abdomen y ,exti~emidades, 'según el método propuesto por el 'e'minente profesor' FlNKlELSTEIN. El pediatra ha de acordarse, al iniciar la ,ex;ploración del niño, que' tien:e :ante sus ojos un punto esencial, un problema ineludible, un escollo oculto que puede ser la causa de que naufrague la reputación ,más acri'solada, ya que la omisión de su exploración en sus cinco tiempos expuestos,puede causar un gran ,perjuicio al enfermo y un descrédito para su fama. Bien podríamos decir con una frase pintoresca, que sólo ,es lícita pronunciarla' ,en favor de que se grabe' en la memoria que :' El nfño qU'B mas-, lica mal, con su 'mala ocluSiión, puede morder bien la que lo ha vis1Jtad6. , • !1ama. ¡dle:l plediatf>r1,.