Santo Tomás de Aquino (Edad Media)

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Santo Tomás de Aquino (Edad Media)
Nuestro conocimiento parte de los sentidos, tiene su origen en los datos que nos suministra la experiencia
sensible. El entendimiento humano va ligado a la experiencia sensible, su objeto adecuado es la realidad
sensible. El conocimiento tiene dos consecuencias: la filosofÃ−a se construye desde el conocimiento de las
realidades sensibles y la posibilidad de alcanzar noticias de Dios es por fuerza imperfecta y analógica.
Nuestro conocimiento tiene lÃ−mites, la fe proporciona información más allá de los lÃ−mites donde se
mueve la razón, sobre la naturaleza de Dios y el destino del hombre. La fe perfecciona y no tiene porque
entrar en conflicto con la razón.
Existen contenidos de la razón y de la fe, aunque también existen verdades de ambos, esto implica que la
razón contradiga a la fe pero la razón no se desvincula de la fe. Esto es útil ya que muchos hombres
carecen de tiempo y de preparación filosófica y sin fe no podrÃ−an llegar al conocimiento, además de la
posibilidad de error de la razón. La teologÃ−a toma sus contenidos en la fe, mientras que la filosofÃ−a las
recibe de la razón.
La razón presta ayuda a la fe por sus procedimientos de ordenación cientÃ−fica, por sus armas
dialécticas y por los datos cientÃ−ficos. La fe también ayuda a la razón como criterio extrÃ−nseco y
negativo por que se trata de una fuente de conocimiento distinta y porque no se puede apoyar en los datos de
la revelación.
La autonomÃ−a de la razón es limitada, para demostrar la existencia de Dios se utilizan cinco vÃ−as, esta
existencia al no ser evidente hay que demostrarla a partir de los seres del mundo, considerados como efectos
hasta llegar a Dios como su causa, a posteriori.
Las cinco vÃ−as tienen una estructura similar: constatación de un hecho de experiencia, principio de
causalidad, negación de serie infinita de causas y afirmación de la existencia de Dios.
VÃ−as: - Partiendo del movimiento hasta llegar a Dios como motor inmóvil
• Hay causas causadas para dar una causa incausada
• Hay seres contingentes para llegar a un ser necesario
• Diversos grados de perfección para llegar a un ser sumamente perfecto
• Parte del orden para llegar a la inteligencia ordenadora.
Aquino afirma la inmaterialidad del entendimiento y del alma, el entendimiento se halla unido a un cuerpo
material y tiene su raÃ−z en la unión sustancial entre cuerpo y alma, el entendimiento elabora los conceptos
a partir de los datos suministrados por la percepción sensible.
Los conceptos son universales pero las percepciones sensibles no, el problema es el paso de la individualidad
de las perfecciones sensibles a la universalidad de los conceptos. Se da una doble capacidad abstractiva y la de
conocer universalmente, también llamados entendimiento agente y entendimiento posible.
El proceso es el siguiente: los sentidos perciben la figura agitada por movimientos peculiares, estas se
registran en la imaginación, el entendimiento universaliza el contenido con la función abstractiva y formula
el concepto de hombre con la función cognoscitiva.
Dios existe y tiene que existir, en cambio, el resto de los seres son contingentes, esto lleva a una distinción
entre lo que las cosas son (esencia) y el hecho de que existan o no (existencia).
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El principio primero (Dios) se caracteriza por se Uno, frente a la composición de las demás realidades,
Aquino distingue en las realidades una esencia y una existencia, la esencia es lo que una cosa es y la
existencia el acto de existir. Estas realidades existen pero pueden no existir, en cambio, Dios si es necesario ya
que su esencia y su existencia se identifican al contrario que en las sustancias.
La esencia es potencia y la existencia acto que va actualizando la capacidad de ser propia de la esencia.
La existencia es caracterizada como acto de la esencia, además posee distintos niveles de perfección
según las esencias que en cada caso actualiza, la perfección con que se realiza depende de la esencia, de la
potencia o de la capacidad de ser.
Dios no tiene limitación e incluye toda perfección, su esencia es su ser.
Los entes creados participan del ser en grados distintos según la capacidad de ser.
La felicidad es el fin último del hombre y el conocimiento permite especificar unas normas que forman la ley
natural. El fin a cuyo cumplimiento esta orientado el ser humano es la concepción finalista de la naturaleza.
La lÃ−nea de conducta orientada a un fin especÃ−fico determina la tendencia del individuo.
Se da la ley natural en la que el hombre por ser un ser racional puede formular ciertas normas de conducta de
acuerdo con las exigencias de su propia naturaleza, dentro de esta se dan tres ordenes: El hombre al ser
sustancia tiende a conservar su propia existencia procurando la conservación, en tanto que es animal tiende a
procrear además de cuidar de los hijos y en tanto que es ser racional tiende a conocer la verdad y a vivir en
sociedad buscando la verdad y respetando las exigencias de la justicia. El contenido de esta ley es evidente,
universal e inmutable, sus preceptos han de ser fácilmente cognoscibles y debe continuar constante a
través de los años.
La ley positiva es una exigencia de la ley natural, esta es exigida por la naturaleza del hombre en cuanto ser
social, también constituye una prolongación de la ley natural para concretar las normas naturales,
además las exigencias de la ley natural han de ser respetadas por la legislación positiva que señala los
lÃ−mites.
El derecho se halla incardinado en la moral y el punto de incardinación no es otro que la idea de justicia, esta
debe dar a cada uno lo suyo, es una exigencia moral y es también el fundamento del derecho.
Dios es causa creadora del universo, es la ley divina, definida como la razón de la sabidurÃ−a divina en
tanto que rectora de todos los actos y movimientos.
Los seres naturales se rigen por las leyes fÃ−sicas y no tienen libertar, el hombre al ser libre tiene una ley
moral. La ley natural es aquella parte de la ley eterna que se refiere especÃ−ficamente a la conducta humana.
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