los expertos nutricionistas DE EROSKI CONSUMER RESPONDEN ABC de la nutrición Este verano he cogido unos kilos de más y me gustaría saber si las llamadas dietas depurativas son efectivas para bajar peso. No me gustaría sufrir el efecto “yoyó” y recuperar después el doble de los kilos que vaya eliminando. Las llamadas dietas “detox” o dietas depurativas prometen eliminar toxinas a través de distintos métodos como el ayuno, las restricciones de alimentos o los zumos diuréticos, entre otros, con el objetivo de perder peso de forma rápida y depurar supuestamente el organismo. Sin embargo, debe saber que la pérdida de peso por sí misma no la causa la depuración del organismo, sino la restricción calórica severa que la acompaña. Además, la escasez calórica y nutritiva de esa dieta depurativa puede desencadenar fácilmente una recuperación del peso inicial cuando se retoma el consumo de los alimentos habituales, provocando el llamado efecto “yoyó” que usted comenta. Para los científicos, estas dietas se basan en un concepto inexistente. El aparato digestivo necesita relajarse después de los excesos, pero no precisa dietas desintoxicantes, para eso ya está el hígado y los riñones que limpian las toxinas de nuestro organismo. Uno de los mayores detractores de las dietas “detox” o depurativas en el mundo es Edzard Ernst, profesor de la Universidad de Exeter (Reino Unido). No solo sostiene que no existe evidencia científica que avale este tipo de dietas, sino que las afirmaciones sobre estas supuestas toxinas son equivocadas y peligrosas, y una cuestión de marketing. Por otro lado, el Instituto de Obesidad (IOB) subraya que con estas dietas se pierde peso, pero que cuando se vuelve a comer de manera organizada, lo que se ha perdido se recupera inmediatamente. Aconsejan, por tanto, una dieta hipocalórica, supervisada por un profesional con un seguimiento cada poco tiempo y que incluya variedad de alimentos con un orden. Recomiendan también regímenes equilibrados y adaptados a cada paciente, con especial atención a sus hábitos de vida, así como al incremento de la actividad física de forma regular. Mi hijo de tres años está muy delgado. Come fatal, pero tiene bastante tripa. Varias personas me han comentado que quizá sea celiaco. ¿Cómo se puede determinar si lo es y en qué consisten las pruebas? En niños de la edad de su hijo, las manifestaciones clínicas más frecuentes de la enfermedad celiaca son la distensión abdominal (bastante tripa como nos comenta), diarrea crónica, falta de apetito, vómitos, dolor abdominal recurrente, apatía y malnutrición, entre otras. Le aconsejamos que acuda a su pediatra y, si existen datos clínicos y analíticos que sugieran el diagnóstico de celiaquía, le mandará al pediatra gastroenterólogo para llegar a un diagnóstico seguro. El diagnostico de sospecha de la enfermedad celiaca se realiza mediante un examen clínico cuidadoso y una analítica de sangre. Para un diagnóstico seguro, es imprescindible realizar una biopsia intestinal, que consiste en la extracción de una muestra de tejido del intestino delgado superior para ver si está o no dañado. Para realizar esta prueba no se debe retirar el gluten de la dieta. Un correcto diagnóstico de la celiaquía es esencial, tanto para evitar dietas restrictivas innecesarias, como para abordar de manera correcta la pauta alimentaria cuando la enfermedad se ha confirmado. La Federación de Asociaciones de Celíacos Españoles (FACE) ofrece abundante información. El objeto del Consultorio Nutricional es ofrecer una respuesta a las dudas que pueden surgir a los consumidores sobre cualquier aspecto vinculado con la alimentación, nutrición y dietética. Nuestros expertos nutricionistas seleccionarán de entre todas las cuestiones que lleguen a través del consultorio online, disponible en www.consumer.es/alimentacion, dos consultas, que se responderán en esta sección de la revista. 10 Se habla de… La calidad de la proteína Impuesto al azúcar añadido Las proteínas son el constituyente principal de las células y son necesarias para el crecimiento, la reparación y la continua renovación de los tejidos corporales. En su estructura se componen de aminoácidos: el organismo puede sintetizar algunos (son los llamados no esenciales), pero no otros (los esenciales), que debe aportar la dieta. La calidad de la proteína depende en gran parte de la composición de sus aminoácidos. Si la proteína ingerida contiene todos los aminoácidos esenciales en las proporciones necesarias, se dice que es de alto valor biológico. Por el contrario, si tiene pequeñas cantidades de uno de los dos tipos, será de menor calidad. En general, las proteínas de los alimentos de origen animal tienen mayor valor biológico que las de procedencia vegetal, pero aunque estas últimas son de menor calidad que las animales, cuando se combinan con cereales y legumbres, pueden reemplazar a la leche, la carne o los huevos. Por ejemplo, en garbanzos con arroz, lentejas con pan u otras combinaciones. También se pueden combinar alimentos de origen vegetal y animal, es decir, incluir cereales o legumbres, junto a una pequeña cantidad de carne o huevos, para que los aminoácidos de estos últimos alimentos complementen a los que carecen los primeros y lograr juntos una proteína de buena calidad. Se trata de aprovechar la combinación de distintos alimentos para compensar unos con otros la carencia nutricional. A esto se le llama complementación proteica. Los científicos advierten del peligro de la cantidad de azúcar añadido que contienen las bebidas azucaradas y los productos procesados como cereales industriales, latas de bebida carbonatada, batidos, bollería industrial, pizzas o salchichas, entre otros. Un equipo de investigadores españoles pertenecientes a la red CIBEROBN del Instituto de Salud Carlos III ha publicado un informe que señala directamente a las bebidas azucaradas, incluyendo las light y los zumos de fruta envasados, como causantes del aumento del riesgo a sufrir síndrome metabólico. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó en 2015 una directriz mundial para reducir la ingesta de “azucares libres” (distintos de los intrínsecos y saludables que encontramos de forma natural en frutas y verduras) al 10% y 5% de la ingesta calórica total. La OMS sostiene que el establecimiento de un impuesto al azúcar puede desincentivar el consumo y, a su vez, reducir los niveles de sobrepeso, obesidad e incluso la diabetes. Países como México, Francia o Italia han puesto en marcha impuestos elevados sobre productos edulcorados para reducir su consumo. Reino Unido impondrá esta medida a las bebidas azucaradas dentro de dos años. Por su parte, la Sociedad Española de Salud Publica y Administración Sanitaria se ha mostrado a favor de tasar el consumo de bebidas azucaradas o comida basura para desincentivar su consumo. Una opinión similar a la de la Sociedad Española de Epidemiologia o la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad. Los consejos del mes Hierro para mejorar el rendimiento El hierro es un componente esencial para el organismo. Sin él la sangre no transporta el oxígeno por los órganos de la manera adecuada. Cuando los niveles de hierro disminuyen, el cuerpo se siente fatigado y cansado sin haber hecho mucho esfuerzo, provocando además mal humor y cansancio. Un estudio reciente llevado a cabo por investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania en Estados Unidos alerta sobre las posibles consecuencias de tener bajos niveles de hierro. El objetivo del estudio era analizar cómo una deficiencia de hierro en mujeres sin anemia y en edad reproductiva podría afectar al rendimiento en tareas mentales. Los resultados mostraron que tener un buen nivel de hierro se asociaba con mejores tiempos de reacción y de retención, y mejor capacidad de planificación. Además, demostraron que este mineral no es solamente esencial en personas anémicas, sino también en jóvenes sanos, ya que mantiene activo el cerebro. Por ello, es importante consumir alimentos ricos en hierro: carnes rojas con moderación, pescado, yema de huevo, lentejas y cereales para conseguir el aporte de hierro que necesita nuestro cuerpo. Es recomendable combinarlos con otros ricos en vitamina C, para favorecer la absorción de este mineral. Supervisar las dietas vegetarianas en niños La Agència de Salut Pública de Catalunya, en su guía “Recomendaciones para la alimentación en la primera infancia (0-3 años)”, asegura que la alimentación vegetariana y la vegana, bien planeadas y suplementadas cuando sea preciso, pueden satisfacer las necesidades de niños y adolescentes. Según Álex Vidal, profesor en Nutrición de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC), todas las personas, incluidos los niños, pueden seguir una dieta vegana, siempre y cuando la supervise un dietista o nutricionista que garantice que no hay ningún déficit. Una de las carencias más importantes con la que se encuentran los veganos es la vitamina B12. En el mundo vegetal son pocas las fuentes disponibles de esta vitamina y no siempre tienen una absorción correcta. Se escoja la dieta que se escoja para los niños, Vidal deja claro que debe ser equilibrada para garantizar todos los nutrientes necesarios para el crecimiento y el desarrollo correctos del menor. Una dieta bien planificada debe basarse en frutas y verduras (si puede ser de temporada), en fuentes proteicas de calidad (en el caso de este tipo de dietas, legumbres y derivados, frutos secos, semillas, cereales) y en un buen aporte de grasas (como el aceite de oliva virgen extra, los frutos secos o el aguacate). 11