LA i RED FLUVIAL Formación al nivel de los yebeles de la extensa llanura estructural hamadiense a consecuencia de la regresión cretácica. Elevación en el O h g o c e n o d e la masa continental. L e v e y amplia ondulación de E . a W . de la llanura debido a fenómenos tectó- Red fluvial post-ere- I C o m i e n z o de la disección por erosión normal de la extensa llanada hamadiense q u e se reduce poco a poco. A) Formación concomitante de una red fluvial consecuente in­ clinada hacia el A t l á n t i c o y q u e se acomoda en las amplias de­ presiones sinclinales. B) Iniciación d e los primeros beles y formación de una ienómerios d e red afluente epigenia en los y e consecuente d e N . - S . o de S . - N . Formación de Red fluvial post- miocénica llanuras estructurales litorales a consecuencia d e regresiones miopliocénicas y desarrollo de la red las fluvial, heredera algunos portillos directa de la post-cretácica. Prosiguen los fenómenos de epigenia, quedando epigénicos y valles afluentes colgados. Regresión litoral cuaternaria principal y encajamiento de la red flu­ vial, continuando la evolución natural de la misma y los fenó­ menos epigénicos. Red fluviar naria cuater­ Establecimiento de la red fluvial actual por natural evolución de la anterior q u e se inició en los tiempos posteretácicos. A l g u n o s valles colgados o muertos c o m i e n z a n a rejuvenecerse por fenómenos erosivos remontantes, pero persistiendo aún amplias zonas endorreicas y arreicas. Vemos, pues, que la red fluvial cuaternaria es heredera directa de la premiocénica, fraguada fundamentalmente durante el Oligoceno, debido a la elevación en masa del continente, pero tal red se inicia inmediata­ mente después de la regresión cretácica. Dicha transgresión separa así dos ciclos erosivos totalmente diferentes, el que se inició en los tiempos postpaleozoicos y anteriores al Cretáceo, y el que comenzó al finalizar esta edad. D e la red paleozoica sólo sabemos que se inicia al rejuvenecerse la anti­ quísima penillanura prepermotriásica, red que quedó fosilizada por la trans­ gresión cretácica que dio origen a la formación hamadiense. La sencillez, pues, de las formas topográficas, y en particular, su con­ figuración en monótonas y seguidas alineaciones, destacando sobre países llanos, hace relativamente fácil el poder sintetizar los diferentes ciclos de erosión normal que se han sucedido en estas tierras. Hacia la costa, en ocasiones, es posible relacionar el fenómeno de en­ cajamiento de la red fluvial y las terrazas que a ello son debidas y forma­ das en las márgenes de los principales cauces, con los niveles marinos, ele> vados recientemente, pudiendo aquí deducirse, cómo ambos fenómenos han podido provocar encajamientos de la red fluvial, que teniendo en oca-