Berezi@ Bebidas Energéticas

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Bebidas
Energéticas
Las bebidas energéticas son refrescos enriquecidos con ingredientes
como vitaminas, taurina, etc. y un alto contenido en cafeína.
Normalmente su capacidad “energética” es baja, ya que tienen pocas
calorías, pero sus ingredientes les confieren propiedades “excitantes”
más que “energéticas”.
Como producto de consumo, es más atractivo el nombre de “Bebidas
Energéticas” que “Bebida Excitante” por lo que esta nomenclatura ha
sido la adoptada para su comercialización por las grandes empresas.
Composición
Los ingredientes activos que se encuentran en
estas bebidas, principalmente son la cafeína,
la taurina y la D-glucurono-y-lactona.
La cafeína es un estimulante presente en
muchas bebidas y productos alimenticios, con
la diferencia de que en estas bebidas, su
concentración puede ser relativamente alta
(entre 70 y 400 mg por litro e incluso más).
Para que nos hagamos una idea, el contenido
medio de cafeína de una taza (150 ml) de café
tostado molido es de alrededor de 85 mg; de
café instantáneo, de 60 mg; de café
descafeinado, de 3 mg; de té en hojas o en
bolsa, de 30 mg y de cacao o chocolate
caliente, de 4 mg. Un vaso (200 ml) de
refresco con cafeína tiene entre 20–60 mg de
cafeína.
Con estos datos podemos calcular que una
lata de una bebida energética equivaldría a 4
cafés (o 2 cafés espressos) o a 2-3 refrescos
de cola.
No existe interacción entre cafeína y taurina, así
como sus potenciales efectos acumulativos en
la actividad renal.
Según datos proporcionados por la EFSA, para
un consumo de media lata diaria de este tipo de
bebidas, la exposición a la taurina sería 120
veces menor al Nivel sin Efecto Adverso
Observable (NOAEL) para esta sustancia.
Estas bebidas NO deben ser confundidas
con las “Bebidas Isotónicas”, destinadas a
recuperar los hidratos de carbono y/o
electrólitos después de la realización de
una actividad deportiva intensa
D-glucurono-y-lactona es una sustancia
natural presente en el cuerpo humano. Es un
componente estructural importante de los tejidos
conectivos.
Con un consumo de media lata diaria, la
exposición sería 200 veces menor al NOAEL,
por lo que para dicho consumo estipulado, no
existe riesgo para la salud del consumidor.
Nota: Estos datos dependen de la marca y el
volumen de la bebida energética.
Se estima que un consumo total de cafeína
inferior a los 300 mg al día no supone ningún
problema. Para exceder esta cantidad se
necesitaría un par de bebidas energéticas
(dependiendo de marcas), si a esto se le
añade el consumo de otras fuentes que
aportan cafeína (té, café, etc…), estos valores
pueden superarse fácilmente (ver apartado
“Consumo en Europa”).
La taurina es un aminoácido producido
naturalmente por el cuerpo humano. Es
esencial para el sistema cardiovascular, el
sistema nervioso central y para el normal
funcionamiento del músculo esquelético.
La Cafeína
La cafeína es un compuesto alcaloide del grupo
de las xantinas presente en varias plantas,
como en los granos de café y cacao, las hojas
de té, las bayas de guaraná y la nuez de cola.
En la naturaleza, a parte del uso que le dan los
humanos, actúa como pesticida natural,
protegiendo las plantas de los insectos que se
alimentan de ellas.
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Bebidas Energéticas
Presentación
recipiente
volumen
contenido en
cafeína (mg/L
o mg/kg)
Cafeína
ingerida por
unidad (mg)
Café Espresso
taza
0,03
1916
57,48
Café (instantáneo,
en grano, bebida
de café…)
tazón
0,24
400
96
Cappuccino
taza
0,15
250
37,5
Té (instantáneo,
bolsitas, bebida de
té…)
Chocolate a la taza
taza/vaso
0,25
100
25
tazón
0,25
150
37,5
Tableta
Chocolate
peso
0,1
180
18
Negro
peso
0,1
340
34
Chocolate con
leche
Blanco
peso
0,1
183
18,3
peso
0,1
0
0
unidad
0,05
140
7
Negro
unidad
0,05
264
13,2
Chocolate con
leche
Blanco
unidad
0,05
142
7,1
unidad
0,05
0
0
vaso
0,25
79,2
19,8
Barritas
Chocolate
de
de
Bebidas de cola
Una vez consumida, la cafeína llega al
torrente sanguíneo en 30-45 minutos y se
distribuye
por
el
organismo,
para
posteriormente ser metabolizada y expulsada
por la orina. La vida media de la cafeína en el
interior del cuerpo es de 4 horas (los cálculos
oscilan entre 2 y 10 horas, y dependen de la
sensibilidad de la persona y de otros
parámetros).
otro lado, la cafeína puede ocasionar agitación
y una pérdida del control motor fino. En
cantidades superiores a 2.000 mg pueden
causar insomnio, temblores y respiración
agitada (Estos síntomas se manifiestan a
veces con dosis menores). Las propiedades
estimulantes de la cafeína afectan menos a
los consumidores habituales de café que a los
consumidores ocasionales.
Sensibilidad a la cafeína
Riesgos e interacciones
La sensibilidad a la cafeína varía mucho de
una persona a otra. Hay personas que la
eliminan más lentamente y por lo tanto, su
efecto es más prolongado.
La EFSA, en el documento “Update on EFSA’s
activities on Emerging Risks 2012-2013”,
publicado en abril de 2014, lista 45 temas que
valora como prioritarios. Entre ellos, se
encuentra la realización de un estudio, a
escala europea, sobre el consumo de bebidas
energéticas.
Por otro lado, durante el embarazo, disminuye
la velocidad a la que se metaboliza y las
mujeres
embarazadas
mantienen
generalmente los niveles de cafeína durante
más tiempo.
Los efectos de la cafeína
Dosis bajas de cafeína resultan estimulantes y
mejoran la coordinación corporal, aunque por
El Instituto Federal de Evaluación de Riesgos
(BfR) afirma que para consumos de altas
cantidades de estas bebidas, en combinación
con alcohol, en situaciones de falta de
descanso o una actividad física intensa,
pueden desencadenar efectos adversos. Este
riesgo puede incrementarse en personas con
mayor sensibilidad a la cafeína o personas
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Bebidas Energéticas
que padezcan algún desorden cardiovascular.
Consumo en Europa
En un reciente estudio llevado a cabo por este
instituto, se recopilaron las cantidades
consumidas entre los llamados “Grandes
consumidores” de estas bebidas (más de
medio litro consumido en 24 horas). Entre
estos
“Grandes
Consumidores”
se
encontraban personas asiduas a discotecas, a
eventos deportivos o musicales y personas
asistentes a ciber-encuentros.
Actualmente
existe
una
preocupación
manifiesta de varias organizaciones de
Seguridad Alimentaria europeas por las
consecuencias para la salud que puede tener
el consumo inadecuado de este tipo de
bebidas.
El BfR ha llegado a recomendar que el
etiquetado de estas bebidas debería informar
sobre los posibles efectos no deseados que
pueden ocurrir en combinación con el esfuerzo
físico excesivo (deporte, actividades lúdicas
extenuantes,..) o el alcohol.
Más aún, cuando en 2013 la EFSA publicó un
estudio a nivel europeo, que afirmaba que los
adolescentes eran el grupo más propenso a
consumir bebidas "energéticas", el 68% de
todos los encuestados. Otro de los datos a
destacar, es que estas bebidas eran la fuente
del 43% de la exposición total a cafeína, entre
los niños de 3 a 10 años.
Estos son parte de los resultados del estudio:
El alto contenido en cafeína es el responsable
de la mayoría de los efectos adversos
generados por un consumo excesivo de las
bebidas energéticas.
Los efectos adversos pueden ser:
Cardiovasculares: La taquicardia es uno
de los efectos más comunes en una
intoxicación por cafeína, además del
aumento de la presión arterial.
Arritmias y otros desordenes
cardiovasculares más severos han sido
descritos en algunos casos.
Trastornos psicoconductuales: Los
efectos más frecuentemente observados
son la irritabilidad, nerviosismo, ansiedad
o incluso ataques de pánico.
Trastornos del sueño
Trastornos gastrointestinales: el
contenido en cafeína puede provocar la
aparición de reflujo gástrico.
Efectos renales: El consumo de bebidas
energéticas incrementa el riesgo de
deshidratación y puede llegar a afectar al
correcto funcionamiento de los riñones en
personas con insuficiencia renal o con
otras patologías previas (en especial,
obesidad y diabetes)
Además si se mezclan con alcohol el
riesgo de deshidratación es mayor.
Adultos (18-65 años):
Aproximadamente el 30% de los adultos
entrevistados son consumidores de bebidas
"energéticas". De estos, el 12% eran altos
consumidores (consumo regular de 4-5 días a
la semana o más), con un consumo medio de
4,5 litros por mes.
Adolescentes (10-18 años):
Aproximadamente el 68% de los entrevistados
consumían bebidas "energéticas". De estos, el
12% eran consumidores de altas cantidades,
con un consumo medio de 7 litros al mes.
Niños (3-10 años):
Aproximadamente el 18% de los entrevistados
eran consumidores de bebidas "energéticas".
Entre éstos, alrededor del 16% eran altos
consumidores, con un consumo medio de 0,95
litros a la semana (casi 4 litros por mes).
Co-consumo de alcohol:
El consumo de bebidas energéticas junto a
alcohol en adultos (56%) y adolescentes
(53%) es similar.
Consumo asociado
deportivas:
a
las
actividades
Aproximadamente el 52% de los adultos y el
41% de los consumidores adolescentes
dijeron que consumían bebidas "energéticas"
mientras llevan a cabo actividades deportivas.
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Bebidas Energéticas
Etiquetado que tienen que mostrar estas
bebidas
Las bebidas que contienen más de 150 mg de
cafeína por litro (mg/l) deben estar etiquetadas
con la frase “Alto contenido en cafeína",
cuya denominación incluya el término café o
té.
El nuevo Reglamento (UE) 1169/2011, sobre
información al consumidor, que entrará en
vigor a partir del 13 de diciembre del 2014 y
que derogará la actual normativa sobre
etiquetado,
prevé
nuevas
indicaciones
obligatorias dirigidas a grupos vulnerables
como las mujeres embarazadas y los niños,
relacionadas con la presencia de cafeína
como ingrediente en determinados alimentos
(véase la tabla).
Tipo o categoría de alimento
Indicación
Bebidas, excepto las fabricadas a base de café,
té o extractos de té o café, en las que la
denominación del alimento incluya las palabras
café o té que:
“Alto contenido en cafeína. No recomendado
para niños ni mujeres embarazadas o en
período de lactancia”, en el mismo campo
visual que la denominación de la bebida
seguida del contenido de cafeína expresado en
miligramos por 100 ml.
•
estén destinadas al consumo sin ninguna
modificación y contengan cafeína, sea cual
sea su origen, con una proporción
superior a 150 mg/l, o
•
estén en forma concentrada o seca y
después de la reconstitución contengan
cafeína, sea cual sea su origen, en una
proporción superior a 150 mg/l.
Otros alimentos a los que se añada cafeína con
finalidades fisiológicas.
“Contiene cafeína. No recomendado para
niños ni mujeres Embarazadas”, en el mismo
campo visual que la denominación del alimento,
seguida del contenido de cafeína expresado en
miligramos por 100 g/ml. En el caso de los
complementos alimentarios, el contenido en
cafeína se expresa por porciones, según el
consumo recomendado diario indicado en la
etiqueta.
REGLAMENTO (UE) Nº1169/2011 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO
de 25 de octubre de 2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor y por el que se
modifican los Reglamentos (CE) Nº 1924/2006 y (CE) Nº1925/2006 del Parlamento Europeo y del
Consejo, y por el que se derogan la Directiva 87/250/CEE de la Comisión, la Directiva 90/496/CEE del
Consejo, la Directiva 1999/10/CE de la Comisión, la Directiva 2000/13/CE del Parlamento Europeo y
del Consejo, las Directivas 2002/67/CE, y 2008/5/CE de la Comisión, y el Reglamento (CE) Nº
608/2004 de la Comisión
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Bebidas Energéticas
CONCLUSIONES
• No consumir bebidas energéticas con cafeína simultáneamente con alcohol: La
cafeína no es antagonista de los efectos del alcohol y enmascara los síntomas de la
embriaguez, lo que puede conllevar una reducción de la percepción del estado de
intoxicación alcohólica e incrementar el riesgo de sufrir efectos adversos.
• Evitar el consumo de bebidas energéticas en los siguientes grupos de población:
mujeres embarazadas y en período de lactancia, niños, personas sensibles a la
cafeína, con patologías cardíacas o trastornos neurológicos.
• Si se realiza alguna actividad física intensa, no se han de consumir bebidas
energéticas. La cafeína tiene efectos diuréticos que alteran el equilibrio electrolítico y
pueden aumentar el riesgo de deshidratación. Hay que beber agua u otras bebidas para
deportistas concebidas para esta finalidad.
BIBLIOGRAFÍA
• Riesgos del Consumo de Bebidas Energéticas - ELIKA
HU
UH
• The use of taurine and D-glucurono-γ-lactone as constituents of the so-called “energy” drinks - EFSA
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• La Cafeína y la Salud - EUFIC
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• So-called energy drinks: ANSES warns against dangerous consumption patterns - ANSES
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• Recomendaciones de la ASPCAT sobre el consumo de bebidas energéticas - ACSA
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• Update on EFSA’s activities on Emerging Risks 2012-2013 – EFSA
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• People consuming high amounts of energy drinks ignore the pick-me-up risk - BfR
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• Infographie sur l'avis Evaluation des risques liés à la consommation de boissons dites "énergisantes" – ANSES
HU
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• Opinion of the French Agency for Food, Environmental and Occupational Health & Safety on the assessment of
risks concerning the consumption of so-called “energy drinks” - ANSES
HU
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HU
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