historiografía latina

Anuncio
HISTORIOGRAFÍA LATINA
CARACTERÍSTICAS DEL GÉNERO

La historiografía es el género literario que tiene como objeto los
sucesos acaecidos a un determinado pueblo, estudio y narración de los
hechos del pasado.

Es el género en prosa más importante de la literatura romana por el número,
la calidad y la variedad de autores y obras.

La historiografía romana fue mucho menos rigurosa que la
griega y de intención más moralizante.

El romano no transmitía objetivamente los hechos antiguos, sino que los juzgaba
y los describía desde su propio punto de vista.

Los romanos utilizaron la historia como instrumento político:
o para justificar su supremacía sobre los demás pueblos (como
Tito Livio)
o
para
destacar
dominantes
el
(caso
protagonismo
de
los
de
primeros
las
familias
historiadores, los
analistas)

o
para criticar a la nobleza romana (como hace Salustio)
o
para defender la propia actuación política (como César)
o
para criticar a un régimen político (que es lo que hizo Tácito)
Emplearon para ello no sólo la selección y presentación de los hechos,
sino también la manifestación de sus opiniones: de manera
directa,
mediante
intervenciones
en
primera
persona,
o
indirecta, mediante los abundantes discursos puestos en boca de sus
protagonistas. En una palabra, predomina el tipo de historiador comprometido
políticamente.
FUENTES E INFLUENCIAS
En Roma los documentos más antiguos que podían aportar datos históricos eran:

Textos públicos:
1

o Los archivos de los colegios sacerdotales. Los sacerdotes
anotaban en registros los acontecimientos más importantes.
Por ejemplo: los Annales pontificum en los que se
consignaban los días fastos y nefastos (laborables y no
laborables) así como los principales acontecimientos, los Libri
augurales, etc...
o Los documentos oficiales: tratados, leyes, senadoconsultos,
listas de los magistrados anuales, los registros del censo, etc..
Textos privados:
o Archivos familiares. Las familias patricias tenían sus
propios archivos en los que consignaban los cargos
importantes que desempeñaban sus miembros, así como sus
hazañas militares. Eran relatos a menudo embellecidos o falsificados.
o Laudationes fúnebres.
Discursos de alabanza a los
difuntos pronunciados por un miembro de la familia el día de
los funerales.
Los grandes maestros de los romanos fueron los griegos. El
historiador Polibio (un esclavo griego que entra en el círculo de los
Escipiones) escribió varios libros sobre la historia de Roma y las campañas
de Escipión. Su método era riguroso: consultaba todas las fuentes y,
cuando podía, se trasladaba al lugar de los hechos. Su obra sirvió de
fuente para varios historiadores romanos posteriores y les enseñó
las dos normas f un d a m e n t a l e s p a r a t o d o h i s t o r i a d o r : b u s c a r
l a v e r d a d y c o m p r e n d e r l a s c a u s a s y l a s relaciones entre los
hechos. También tomaron los romanos de Tucídides el sentido moral de la
historia, así como la reflexión sobre la calidad moral de los personajes y
acontecimientos.
ETAPAS Y AUTORES: LA REPÚBLICA
Los primeros historiadores romanos (siglos III y II a.C.)
fueron los analistas. Se les llama así por la palabra latina annales, de
annus “año”. Eran relatos de acontecimientos por orden cronológico y no por
temas. Los primeros analistas romanos, que escribían en griego y no en latín,
se contentaron con narrar los hechos acaecidos sin establecer relaciones
temáticas o de causa y efecto, entremezclándolos con fábulas y relatos de prodigios.
La visión de la historia hasta estos momentos es estrecha: sólo interesa la
2
de Roma; las cuestiones internacionales sólo son importantes en la medida
en que afectan a su nación. Para ellos, la Historia es, esencialmente, una
escuela de civismo y un instrumento de gobierno.
M. Porcio Catón. (234-149 a.C.)
Biografía
Fue el historiador más antiguo en lengua latina, del que hay que destacar
algunos datos biográficos:



Desempeñó varios cargos públicos, entre ellos la censura. De
hecho es conocido también como Catón el Censor.
Fue promotor de la III Guerra Púnica (terminaba todos sus
discursos animando a los romanos a destruir Cartago con la famosa
coletilla "Carthago delenda est").
Era un nacionalista radical que veía con malos ojos la creciente
influencia de la cultura griega en el mundo romano. De ahí que
utilizara el latín en su obra y que su figura terminara
convirtiéndose en el paradigma de lo que debía ser un romano.
Obra
Escribió una obra histórica en 7 libros, los Orígenes ("Origines"), en
la que narraba los principales hechos en los que había participado Roma
desde su fundación. Apenas nos quedan unos breves fragmentos de ella,
aunque son suficientes para formarnos una idea del conjunto y de la
ruptura que supuso con la historiografía anterior:

No se emplea el sistema de narración anual, tan característico de
los analistas.
 No se consignan sólo los hechos, sino que se profundiza en sus
causas y consecuencias.
 Se utiliza el latín.
 No se citan apenas nombres propios de generales o soldados
porque, a juicio de Catón, hacerlo sería restar protagonismo a
quien realmente lo merecía, Roma.
Las características mencionadas llevan a considerar a Catón como un
adelantado a su tiempo. De hecho buena parte de los historiadores romanos
3
del siglo II a.C., los llamados "analistas latinos", sólo adoptaron de él una
innovación, el uso del latín, y volvieron al modelo seguido por los analistas
griegos. Habrá que esperar al siglo I a.C. para que surja con César la
historiografía en el sentido estricto de la palabra, superando los límites y
condicionamientos de la obra de los analistas.
Cayo Julio César (100-44 a.C.)
Biografía
Es uno de los grandes historiadores romanos, no sólo por su gran
personalidad, sino también por el carácter único en su género de su obra
literaria. Narrar la vida de César equivale a escribir la historia de su época,
caracterizada por dos notas fundamentales:


La crisis de la República, como institución, y
La lucha de individualidades por el poder.
Además de historiador, y antes de ello, fue la personalidad política más
importante de su época, el protagonista de la evolución fundamental por la
que Roma pasó de un régimen republicano oligárquico a otro basado en el
poder personal. No en vano se le han adjudicado definiciones populistas,
pero rigurosamente ciertas, que retratan a la perfección al personaje y su
circunstancia: "Julio César fue un dictador que quería ser rey, pero fue
asesinado en el Senado".
Nació en Roma en el año 100 a.C. Pertenecía a una familia aristocrática,
pero desde joven mostró claras simpatías por la facción popular (a finales
de la Repúbica en Roma había dos facciones políticas, la facción de los
optimates, que defendía los intereses de la nobleza, y la facción popular,
que velaba por los intereses del pueblo llano). Comienza tardíamente una
carrera política que, sin embargo, fue deslumbrante: recorrió todas las
magistraturas y desempeñó además otros cargos públicos de gran prestigio
como el de Pontífice Máximo; formó con Pompeyo y Craso el primer
triunvirato; conquistó la Galia y derrotó finalmente a Pompeyo en la Guerra
Civil (Farsalia, 48 a.C.).
A partir de entonces asumió todos los poderes y aún participó en varias
empresas bélicas, como la guerra en Alejandría en defensa de Cleopatra, la
guerra contra Mitrídates y de nuevo contra partidarios de Pompeyo... hasta
4
que fue asesinado el día de los Idus de Marzo (15) del año 44 a.C.: su
talante conciliador y sus numerosas reformas legislativas y sociales no
fueron suficientes para ganarse las simpatías de todos los senadores,
algunos de los cuales aterrados ante la idea de la pérdida de poder que
conllevaría al final la República, promovieron la conspiración que acabó con la
vida de uno de los estadistas y autores literarios más influyentes y
fundamentales en la relación y desarrollo del proceso histórico.
Obra
Cesar combinó la política con la literatura, destacando como
extraordinario orador y escribiendo obras sobre distintos temas. De todas
ellas las dos únicas que nos han llegado completas son las tituladas
genéricamente Commentarii Rerum Gestarum, acerca de dos de las más
grandes acciones bélicas que llevó a cabo: la guerra de las Galias (58-52)
(De Bello Gallico) y la guerra civil (49-48) (De Bello Civili).
De Bello Gallico ("Sobre la guerra de las Galias") es una obra que
consta de ocho libros, cada uno de los cuales se corresponde con un año de
la campaña de conquista que él llevó personalmente a cabo entre el año 58 y
el 51 a.C. De estos libros sólo el VIII no es obra de César, sino de su
lugarteniente, Aulo Hircio.
Respecto a los contenidos podemos decir que tras una descripción
geográfica de la Galia el autor va siguiendo sus conquistas y
enfrentamientos con los diversos pueblos galos:





Campañas contra los Belgas
Campañas contra los Germanos
Expediciones a Britania
Levantamiento general de la Galia dirigido por Vercingetórix y
Triunfo final de César con la toma de Alesia
No se tiene certeza sobre si fueron escritos año tras año o todos los
libros juntos una vez terminada la guerra; en cualquier caso parecer ser que
fueron editados como obra unitaria en los años 51-50 al solicitar su autor de
nuevo el consulado.
De Bello Civili ("Sobre la guerra civil") consta de tres libros en los que se
narra el enfrentamiento del propio César con Pompeyo para hacerse con el
5
poder en Roma. Comienza con la exposición de las causas de la guerra y sigue
con los sucesos principales de la misma:






paso del Rubicón por César.
huida de Pompeyo hacia Oriente
toma de Marsella
derrota en Hispania de los lugartenientes de Pompeyo
enfrentamiento y derrota definitiva de Pompeyo en Farsalia y, por
último,
huida de éste a Egipto y su posterior asesinato.
Los libros de De Bello Civili debió escribirlos entre el 49-48 y el 44, pero
tampoco en este caso se aducen pruebas convincentes sobre la fecha exacta
de su publicación.
En cuanto a su estilo y valor literario, éste es indiscutible y aquél posee
una serie de rasgos que merecen la pena destacarse: sus formas de
expresión eran simples y elegantes. Tiene un vocabulario básico restringido
a unos 1.200 términos y el uso de la sintaxis y expresiones habituales,
siempre dentro de las normas lingüísticas más rigurosas.
Algunos de sus rasgos más característicos son el uso del estilo indirecto
en los discursos, dejando el estilo directo casi exclusivamente para
expresar emociones. Llama también la atención el hecho de que siempre se
refiera a sí mismo en tercera persona, con lo que el relato gana claridad y
distanciamiento, provocando en los lectores una impresión de objetividad.
El hecho de que estas dos obras históricas se refieran a acciones de las
que él mismo es el principal protagonista pone en evidencia su carácter
político y propagandístico: trata de justificar su política militar dando una
visión favorable de la misma, puesto que la legalidad de sus actuaciones era
puesta en duda.
En De bello Gallico, gracias a los informes que mandaba (verdadera
"memoria oficial" del momento), documentación detallada al hilo de los
acontecimientos y de primerísima mano, además de inundar Roma con
noticias sobre la geografía, idiosincrasia y personalidades de los pueblos
galos, germanos y britanos, naturalmente no dejaba atrás otros aspectos de
interés, como:
o
Los éxitos de su diplomacia y su estrategia, a través de su
política de alianzas, de amistad (amicitia) y compromisos de
servicio (beneficium), mediante los cuales los pueblos, antiguos
6
o
adversarios, pasaban ahora a estar bajo su protección ( in
fidem accipere).
o El comportamiento ejemplar de sus oficiales y tropas, a los que
su coraje y el valor de su verbo era capaz tanto de animar en
momentos de decaimiento como de disciplinar en plena crisis.
o La grandeza, incluso, de personajes enemigos, como el caso de
Vercingetórix... para realce de la suya propia.
o Sus propias realizaciones, manifestando tanto los hilos
rectores de su política como los rasgos dominantes de su
personalidad, retratándose como el mantenedor de la tradición
romana y la encarnación de la virtus, que le hacían acreedor a
ejercer como caudillo de ese gran pueblo.
Ya desde el principio de la obra (Gallia est omnis...) indica con
claridad que su pensamiento estaba puesto en el dominio total de las
Galias; todos los conflictos y operaciones individuales se subordinan a
esta idea. De hecho el conflicto bélico en las Galias se presenta ante
la oposición senatorial como una guerra "defensiva" en ayuda de unos
aliados amenazados
En De bello Civili, narración de un episodio políticamente mucho más
complicado, se muestra a un César defensor del pueblo romano frente a la
soberbia y arbitrariedad del Senado. No fue él, sino sus enemigos, quienes
desencadenaron la escalada de la discordia política, los que deseaban la
lucha... aunque luego fuese él quien le recondujese con mano firme y
enérgica al resultado apetecido. La proverbial clementia cesariana, de la que
ya había hecho gala en su obra anterior, se manifiesta aquí en toda su
generosidad para con los vencidos, evitando el derramamiento de sangre
gratuito. Asimismo su insistencia por demostrar que gozaba del favor del
pueblo itálico e incluso de parte de las tropas enemigas, le retrataba como
un hombre capaz de mantener la disciplina, imponer su soberana energía y al
mismo tiempo manifestar justicia, moderación y generosidad. En suma, tanto
un suceso como el otro responden realmente a unos cálculos cuidadosamente
elaborados por César que le conducirían a la conquista del poder,
estableciendo sin fisuras la base de su autoridad.
Cayo Salustio Crispo (87-35 a.C.)
Vida
7
Cayo Salustio Crispo nació en el 87 a.C. en Amiterno, ciudad de
Sabina, en el seno de una familia plebeya pero acomodada. Siendo aún muy
joven se trasladó a Roma y se lanzó con pasión a la política, campo en el que
fue enemigo acérrimo de Cicerón y gran
amigo de César. A pesar de ser "homo novus"
(no
tenía
parientes
que
hubieran
desempeñado cargos públicos relevantes), con
el
apoyo
de
César
ocupó
importantes
magistraturas. Fue nombrado gobernador de
la provincia de África, donde abusando de su
cargo se enriqueció escandalosamente. Vuelto
a Roma, tras la muerte de César, se retiró de
la política y se consagró a la redacción de su
obra histórica. Murió en el 35 a.C.
Obra
Salustio escribió tres obras de contenido histórico, una genérica y
dos monografías:

Las Historias ("Historiae"), en cinco libros. Era una historia
contemporánea que narraba los sucesos posteriores a la
muerte de Sila (desde el 78 a.C. hasta el 67 a.C). Sólo nos
quedan unos pocos fragmentos.

La Conjuración de Catilina ("Catilina o Bellum Catilinae").
Narra la tentativa de Catilina de dar un golpe de estado
durante el consulado de Cicerón (63 a.C.).

La Guerra de Yugurta ("Bellum Iugurthinum"). Esta segunda
monografía se centra en la figura de Yugurta, noble africano
que se había apoderado del trono de Numidia eliminando a
todos aquellos que pudieran hacerle sombra. Los romanos, que
tenían un estrecha relación con Numidia, se sintieron obligados
a hacer justicia y declararon la guerra a Yugurta (111 a. C.). La
guerra se prolongó porque Yugurta, a pesar de tener un
ejército muy inferior, sobornaba sistemáticamente a los
8
generales enviados por Roma. Finalmente un general íntegro,
Mario, lo derrotó en el 105 a.C.
Salustio escribe, como el mismo reconoce, para denunciar la
corrupción de la vida pública romana y la pérdida de los "mores maiorum",
esto es, de las costumbres de los antepasados. Por esa razón escogió como
protagonistas de sus monografías a Catilina y Yugurta.
Pero por muy ciertas que fueran sus denuncias - y lo eran -, resultan
poco convincentes en boca de una persona como él, que fue expulsado del
Senado por conducta impropia, que se enriqueció en el ejercicio de un cargo
público y que abandonó la vida política no por estar asqueado de ella, sino
porque, muerto César, le faltaban apoyos.
Uno de los grandes méritos de Salustio es la maestría con que
caracteriza a los protagonistas de sus obras. Para ello recurre a
descripciones directas hechas por él mismo y a discursos puestos en boca
de los personajes. En ese sentido es muy conocido aquel famoso retrato de
Catilina del capítulo V: " L. Catilina, nobili genere natus, fuit magna vi et
animi et corporis, sed ingenio malo pravoque..."
El estilo de Salustio es inconfundible y constituye una de las señas de
identidad de su obra. Las características más destacadas de él serían:

Brevedad en la expresión. Este rasgo se manifiesta en el
abundante uso del infinitivo histórico, la frecuente elipsis en
las oraciones de infinitivo, la omisión del verbo auxiliar en las


formas del perfecto pasivo…
Tendencia a la asimetría, con el quiasmo y la variatio. El quiasmo
consiste en disponer de manera asimétrica los elementos que
integran dos sintagmas paralelos ("satis eloquentiae, sapientiae
parum" en lugar de "satis eloquentiae, parum sapientiae"). La
"variatio" supone expresar de manera diferente dos conceptos
semejantes ( "pars..., alii..." en lugar de "alii.., alii..." o "pars...,
pars...").
Gusto por el arcaismo y las palabras inusuales (medio empleado
por Salustio para expresar el rechazo que sentía hacia el mundo
en que vivía). Estos arcaísmos pueden ser fonéticos ("voster" en
lugar de "vester"), morfológicos (teminación "-e" en lugar de "-
9
ei" en el Gs. de la quinta declinación) y sintácticos (uso de "quo"
con el valor de "ut" final).
ETAPAS Y AUTORES: EL IMPERIO
Tito Livio (59 a.C.-17 d.C.)
Biografía
Tito Livio nació en Padua en una familia acomodada. Sus primeros
estudios de retórica los cursó en su ciudad natal, pero después pasó a
Roma, donde completó sus estudios. Sus simpatías por el régimen
republicano no le impidieron ser recibido en el círculo de Augusto, a quien
alaba en diversos pasajes de su obra por haber restaurado la religión y por
haber procurado la paz al mundo. Incluso se cuenta que el emperador le
encomendó
la
educación
del
futuro
emperador
Claudio.
Obra
La gran obra de su vida fue Ab Urbe Condita en 142 libros, que se extendía
desde
la
fundación
de
Roma
hasta
Augusto.
Sus libros se publicaron por separado, según los iba escribiendo, pero
pronto se agruparon de diez en diez (Décadas). La mayor parte de su obra
se ha perdido, sólo la conocemos por los resúmenes que se hicieron de cada
libro
(Periochae),
que
sí
se
han
conservado.
Poseemos la primera década (libro 1-10), que va desde los orígenes hasta la
tercera guerra samnita (-293); la tercera década (libros 21-30), que trata
de la segunda guerra púnica (-218 - -201); la cuarta década (libros 31-40),
que cuenta la conquista del Mediterráneo oriental; y la mitad de la quinta
década (libros 40-45), que narra la conquista de Macedonia (-167).
Tito Livio, como los dos grandes poetas contemporáneos Virgilio y
Horacio, pretende glorificar el pasado de Roma, exaltar el sentimiento
patriótico y colaborar en la renovación nacional que pretende llevar a cabo
Augusto. Para Livio, la Historia es un repertorio de ejemplos, unos buenos,
que hemos de imitar, y otros malos, que hemos de desechar. Por eso,
10
remontando al pasado, quiere glorificar las virtudes que hicieron posible el
imperio y dar a sus contemporáneos, escépticos y corrompidos, una lección
moral.
Tito Livio se inspira en los libros conservados de los analistas y en el
escritor griego Polibio, sobre todo en la tercera década. Pero no se
preocupa demasiado por consultar las fuentes que tiene a su alcance y por
apoyar sus afirmaciones en autoridades. Es indiferente a las precisiones
geográficas y a las condiciones económicas; a veces, exagera en el cálculo
de fuerzas militares, botines, etc… No obstante, escribe de buena fe y nos
informa de las distintas opiniones de diversas fuentes sobre el mismo
hecho.
No tiene la concepción moderna y científica de la Historia. Ésta es para
él un género literario y oratorio, y su tarea consiste esencialmente en
embellecer los hechos que narra, utilizando los recursos artísticos de la
retórica. El conjunto de la obra lo divide en amplios bloques que giran
alrededor de un tema central de interés, por ejemplo, la segunda guerra
púnica. Los episodios que narra los presenta como verdaderos dramas, en
los que brillan los discursos, inventados por el propio autor, pero que
responden
presumiblemente
a
los
que
se
pronunciaron.
Como autor, no era partidario de la concisión de Salustio, sino más bien
del período ciceroniano largo, aunque sus períodos son más variados y
menos simétricos que los de Cicerón. Su frase es amplia, clara, llena de
riquezas sintácticas y de gran colorido poético.
Tácito (55-120 d.C.)
Biografía
Publio Cornelio Tácito nació hacia el año 55, en el seno de una familia
rica y noble, pero no se sabe dónde. En el año 77 se casó con la hija del
cónsul Julio Agrícola, gobernador de Britania. Estudió elocuencia, que le dio
un gran renombre, y accedió al Cursus Honorum llegando al consulado el año
11
97, con el emperador Nerva, y obteniendo luego el proconsulado de Asia.
Parece que murió el año 120.
Obra
Tácito dejó escrita la historia del siglo I en dos obras que nos han llegado
incompletas: Los Annales, que abarca desde la muerte de Augusto hasta la de
Nerón
(año
68)
Domiciano(96
e
Historiae
que
cubrían
desde
Galba
a
d . C . ) . La narración es mucho más detallada en las
Historiae, quizá por la mayor proximidad de los hechos que en ellas se
tratan.
De Annales se conservan los cuatro primeros libros, el comienzo
del quinto, el sexto, con excepción de su comienzo, y luego los libros XI a
XVI con lagunas a principio y fin. Los seis primeros están dedicados al
reinado de Tiberio. En la segunda parte conservada se incluyen los reinados de
Claudio desde el año 47 y de Nerón hasta el 66. Los hechos se disponían
anualmente, de ahí su nombre. Aunque los Anales de Tácito se organicen de
esta manera, trascienden el género analístico, pues se p l a n t e a n m i r a s
muchos
más
amplias,
relacionadas
con
las
causas
y
e f e c t o s d e l o s acontecimientos y la influencia en ellos de los
rasgos de carácter y las pasiones de sus protagonistas. En este
sentido, tienen mucho de biografía, ya que el retrato psicológico ocupa un
espacio importante en la obra. La primera parte contiene un soberbio —y
tendencioso— retrato de Tiberio. En la parte final los personajes de Nerón
y Agripina compiten por el poder y crean una situación en la que ya no caben
hombres como Lucio Anneo Séneca, quien con sus doctrinas estoicas tanto
había contribuido a temperar las conductas del emperador.
En las Historiae siguió el procedimiento expositivo típico de la
historiografía romana: exponer los hechos año tras año, alternando la
narración de los acontecimientos internos con la de los externos.
Tácito es un historiador riguroso. Antes de empezar a escribir sus
obras se documentó bien consultando los archivos oficiales y estudiando los
historiadores anteriores. Esta tarea si vio facilitada porque fue un alto
funcionario y utilizó a menudo los archivos imperiales. Quería escribir los
hechos sin ira y sin parcialidad. A pesar de todo esto, a veces, su mentalidad
12
retórica le lleva a exagerar las cosas falseando la realidad. Otras veces su
pesimismo le inclina a ver el lado malo de los hombres y de las cosas.
La lengua de Tácito es sumamente concisa creando un estilo personal.
Sus frases, muy breves, están llenas de contenido, pero en ocasiones
resulta oscuro. Utiliza voluntariamente los períodos asimétricos y las
construcciones extrañas y poco frecuentes. El gran valor de su obra es
que nos da un retrato muy vivo de la época que describe y un estudio
psicológico de los personajes.
Gaius Suetonius Tranquillus (70-140 d.C.)
Biografía
Comúnmente conocido como Suetonio, fue un historiador y biógrafo
romano de la época del emperador romano Trajano. Estuvo en el círculo
de amistades del propio Plinio el Joven y al final, del mismo emperador
Adriano, hasta que cayó en desgracia por enemistarse con él.
Obra
Su obra más importante es La vida de los doce césares (De vita
Caesarum), donde narra las vidas de los gobernantes de Roma desde Julio
César hasta Domiciano. Esta obra ha brindado a la historiografía una gran
cantidad de datos sobre la vida privada y el gobierno de los
emperadores
romanos,
aunque
en
ocasiones
se
centra más en
cuestiones superficiales, y en algunos casos escandalosos, que en un estudio
profundo de los hechos históricos. Pese a ello, este libro fue muy
popular durante la Edad Media, en especial por su estilo de escritura
fluido y llano, libre de artificios, en el que S u e t o n i o
siempre
en
primer
lugar
del
párrafo
la
palabra
pone
más
i m p o r t a n t e ; u s a tecnicismos, términos griegos y muchas citas, a
veces bastante extensas. En cuanto a la estructura de sus biografías no
procede tanto por orden cronológico como por categorías, como se hacía en
el caso de las biografías de personalidades literarias: estirpe, familia,
nacimiento, educación,toga virilis, comienzos de la carrera, empresas
guerreras, vida privada, prodigios, muerte, testamento.
13
ETAPAS Y AUTORES: ÉPOCA DECADANTE
En este momento, el género de la historia se caracteriza por ser una
compilación y resumen de las obras históricas de períodos anteriores,
materia atractiva para un público que buscaba la distracción en la lectura de
temas históricos.
Citaremos a autores como:

Floro (s. II d. C.). Escribió dos libros en los que se condensa la
producción de Tito Livio.

Eutropio. (s. IV d. C.) Resumió la historia de Roma en su obra
Breviarium ab urbe condita. Es un escrito de estilo muy sencillo, por
lo que se utilizó posteriormente como obra de estudio, especialmente
en la Edad Media.
En cuanto a creaciones originales destaca Amiano Marcelino (330-400 d. C.)
que escribió Los 31 libros de los hechos en los que se narra la historia de
Roma desde la muerte de Nerva (96 d. C.) hasta el año 378. Sobresale
también la obra Historia Augusta, una colección de biografías de los
emperadores y de personalidades de su entorno: desde Adriano (117) hasta
Numeriano (284). Se cree que fue compuesta por seis autores.
14
Descargar