lera de mano, colgando una cortina se le fue un pie, y cayendo, recibió varias contusiones en los brazos, rodillas y en la barba, resultándole en todas las d i chas partes equimosis muy notables. Le aplicaron por pronta providencia unos fomentos de agua con vinagre y le sangraron. Después fuimos llamados, y le dispusimos la infusión de las hojas de la Árnica, que tomó por seis dias continuos, fomentando también las partes contusas con la misma infusión*, en este tiempo experimentó mucha mas agilidad en todo su cuerpo, y menos dolores en las contusiones, observando también que los equimosis se resolvían, y a la continuación de otros seis dias quedó enteramente bueno. Otro de edad de veinte y nueve años, temperamento sanguíneo colérico, y de estado casado en el mes de Setiembre del año de 1 7 8 6, al tiempo de o 2