DECOCCIÓN Se aplica a algunas plantas cuyos principios activos no pueden ser extraí­ dos fácilmente. Se hace hervir la planta o las partes que interesen de la mis­ ma en agua durante un tiempo determinado a fuego lento, y posteriormente se la deja macerar antes de pasar a la filtración. Este método puede modificar algunos compuestos de la planta y puede ocurrir que se quiera obtener un principio activo y se obtenga otro de acción contraria. Debido al calor que alcanza el agua en la ebullición, se pierden la mayoría de los principios activos que presentan un bajo punto de ebullición, por lo que la decocción no tendrá nunca los principios iniciales de la planta. INFUSIÓN Este método se emplea cuando se quieren extraer los principios activos de las partes blandas de la planta, como son las flores, yemas u hojas. Mediante la infusión se obtienen gran parte de los principios que por decocción se per­ derían; en cambio, no se extraen otros que necesitan un grado de calor ele­ vado. Para preparar una infusión se echa agua hirviendo sobre una cantidad de­ terminada de la planta, a ser posible desecada, en un recipiente de cerámica o vidrio, tapándolo seguidamente; de esta manera se condensan los vapores con abundante concentración de principios activos, que se vuelvan a incor­ porar a la infusión. Se deja un tiempo determinado para cada especie y des­ pués se filtra. MACERACION Se utiliza cuando las plantas tienen principios activos que son solubles en agua y contienen una alta proporción de aceites volátiles y mucílagos. Con­ siste en sumergir las plantas en agua a la temperatura atmosférica durante al­ gunas horas, filtrándose posteriormente. TISANAS Son infusiones, decocciones o maceraciones muy suaves, por lo que tie­ nen efectos menos acusados que las anteriores. Se toman como bebida habitual, siendo muy empleadas por sus propieda­ des diuréticas, sudoríficas o pectorales. EXTRACCIÓN DE LOS JUGOS Es necesario que la planta sea fresca y que contenga abundante agua. El ju-