Irán no frena el programa nuclear a pesar de la amenaza de

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Irán no frena el programa nuclear a pesar de la amenaza
de sanciones
• La agencia atómica de la ONU acusa a Teherán de mantener el plan de
enriquecimiento de uranio
• Bush asegura que el desafío iraní "debe tener consecuencias" y Francia aboga por el
diálogo
EL PERIÓDICO
VIENA TEHERÁN
Parece el cuento de nunca acabar. Una vez más, el Organismo Internacional de la
Energía Atómica (OIEA) constató ayer de forma oficial que Irán sigue enriqueciendo
uranio a pesar de que el Consejo de Seguridad de la ONU le ordenó detener esta
actividad. Una vez, el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, desafió a las
Si desea ver el
potencias occidentales y repitió ayer que Teherán "no abandonará nunca su derecho
gràfico en PDF
a la tecnología nuclear". Y, una vez más, la diplomacia internacional vuelve a
haga click en la
activarse con la música de fondo de una amenaza de sanciones que tiene pocos visos
imagen.
de materializarse más allá de lo simbólico.
"Irán no ha suspendido sus actividades de enriquecimiento de uranio", asegura el
informe que la OIEA dirigió ayer al Consejo de Seguridad de la ONU para verificar si Teherán cumple o
no con la resolución 1696 que le obligaba a cesar dicha actividad antes del 31 de agosto.
PRUEBAS EN NATANZ
El informe constata que "Irán continua probando las centrifugadoras P-1 en su fábrica piloto" de Natanz
y que, después de varios intentos, Teherán "reinició, el 24 de agosto del 2006 o sea la semana pasada,
la alimentación con gas hexafluoruro de uranio de la cascada de las 164 centrifugadoras" de que dispone
dicha planta, desoyendo por tanto el ultimátum de la ONU. Un alto responsable de la OIEA indicó a los
periodistas que "los inspectores no han encontrado ninguna prueba tangible de que el programa nuclear
de Irán sea de naturaleza militar". Pero el propio director del organismo, Mohamed El Baradei, ha
afirmado en múltiples ocasiones que tampoco puede descartar que Irán haga un uso militar de su
programa nuclear.
La respuesta de EEUU no se hizo esperar. El presidente, George Bush, afirmó en Salt Lake City, donde
participaba en un congreso de veteranos de la Legión, que el desafío iraní "debe tener consecuencias".
"Es hora de que Irán elija. Nosotros ya hemos elegido. Continuaremos cooperando estrechamente con
nuestros aliados para encontrar una solución diplomática, pero la actitud de desafío de Irán debe tener
consecuencias y no hay que permitir a Irán fabricar el arma nuclear", subrayó el mandatario
estadounidense.
Más matizada fue la reacción de Francia. "Deploro la respuesta insatisfactoria de Irán a las propuestas
ambiciosas de negociación que se le ofrecieron", afirmó el ministro de Exteriores, Philippe Douste-Blazy.
Pero añadió: "Continuo convencido de que la vía del diálogo debe siempre tener prioridad". El jefe de la
diplomacia francesa dijo "lamentar" que el Alto Representante de la Política Exterior de la UE, Javier
Solana, y el principal negociador iraní, Ali Larijani, "no se hayan podido reunir antes del 31 de agosto".
ENCUENTROS EN BERLÍN
Solana y Larijani hablaron ayer por teléfono y celebrarán finalmente un encuentro el 6 de septiembre, en
Berlín. Un día después se reunirán en la capital alemana las seis grandes potencias implicadas en la
cuestión iraní; es decir, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EEUU, Rusia, Gran
Bretaña, Francia y China) más Alemania.
EEUU presiona a las otras potencias para la adopción rápida de sanciones. Pero aún en el caso de que
Washington lograra convencer a sus aliados europeos, no parece que China y Rusia estén dispuestos a
medidas punitivas contra Irán. Consciente de que no hay un consenso claro, el secretario general de la
ONU, Kofi Annan, hizo ayer gala de su escepticismo: "Incluso si el ultimátum ha expirado, no creo que el
Consejo de Seguridad vaya a actuar mañana".
ESCASA PREOCUPACIÓN
Irán, por su parte, no parece preocupado. De hecho, el vicepresidente de la Organización Iraní de la
Energía Atómica, Mohammed Saïdi, declaró ayer que el informe de la OIEA "no es negativo". Saïdi
insistió en que "las actividades de enriquecimiento de uranio se realizan en un marco de investigación y
bajo control de la OIEA".
Incluso horas antes de que el organismo internacional emitiera su informe, Ahmadineyad volvió a
prometer ayer que "la nación iraní no renunciará nunca al derecho a la tecnología nuclear". El líder iraní
dejó también clara su decisión de no ceder cuando el pasado sábado inauguró una planta de producción
de agua pesada en Arak.
Más información en la página 16
Noticia publicada en la página 8 de la edición de 1/9/2006 de El Periódico - edición impresa. Para ver la página
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