PRESENTACION DEL LIBRO “FILOPOESIA” Un intento de unir poesía y filosofía Domingo 19 agosto 21 hs en: Arpillera Cultural Alderete 511 - Neuquen Prólogo “El mundo sin arte sería un horror” Parafraseando a Nietzsche Al filo de la literatura y al margen de la filosofía Este libro que tiene en sus manos, es producto de años de trabajo, de lecturas, de reflexiones, de creación, de corrección, de superación constante. Digo que es al filo de la literatura porque no hay límites precisos en su género, sino fugas constantes en su movimiento; y en los márgenes de la filosofía porque no expresa ninguna doctrina ni se sirve de método alguno. Se ha usado a la filosofía como excusa y a la literatura como motivo. Aquí viven pensamientos poéticos y poemas que dan qué pensar. Creo junto a Deleuze que la filosofía es el arte de crear conceptos. Pero no conceptos abstractos, sino conceptos concretos, que son la expresión de nuevos problemas, de nuevas metas, síntomas de una voluntad sana y superadora que busca escapar a la rigidez conservadora del status quo. La filosofía no es simplemente pensar. En el filósofo hay más de artista que de intelectual a secas. Pero también más responsabilidad. Tiene la tarea de transformar al hombre y al mundo, destruyendo mediante la crítica las instituciones que hacen del hombre un cadáver bien vestido y al mundo una bolsa de recursos para satisfacer necesidades alienantes. En su vuelo creativo construye nuevos valores, sirviéndose del pensamiento poético, que plantea nuevas metas y siembra las condiciones para el despertar de una nueva conciencia. Por eso Nietzsche y Platón, dos filósofos antagónicos, se sirvieron del arte como medio efectivo de encarnar sus ideas, de dramatizar el pensamiento buscando el conflicto, la acción, el humor, la ironía, el mito, la poesía, el aforismo, la profecía, para que la filosofía no sea una abstracción insípida e inútil, la manifestación de un ocio degenerado. El artista también tiene mucho de filósofo, nunca podrá ser un artista a secas. También construye, experimenta, destruye y vuelve a construir. Piensa y reflexiona sobre lo que hace; siente el mundo y se hace eco emotivo de la humanidad. Luego lo traduce en su lenguaje y su técnica, para darlo al mundo como imagen de su propio espejo. Por eso también tiene una gran responsabilidad, quizás más ligada a lo emotivo, porque el arte da qué pensar, como decía Kant, pero sobre todo nos hace sentir, nos hace llorar, nos hace reír, nos deja pasmados, nos enseña la belleza, nos hunde en lo sublime. El arte también tiene la tarea de transformar al hombre y al mundo, y lo ha hecho en miles de oportunidades, hemos aprendido más de él que de los libros de historia, nos ha rescatado de las peores catástrofes espirituales, nos ha mostrado que a pesar de todo la belleza sigue habitando en el mundo y en el hombre, y que la belleza no es siempre la misma sino que se reinventa a cada paso, a cada generación. Ya lo dijo Stendhal: “La belleza es una promesa de felicidad”. Alberto Noguerol es este Filósofo-Artista, que reinventa la filosofía y el arte a cada paso. Con un sentido del humor característico y una sensibilidad particular, ha reelaborado, en sus poemas, pensamientos y filosofías enteras de forma magistral. Su intuición y su plasticidad hacen que sus textos brillen con originalidad propia. Una máquina de escribir. En todo encuentra un motivo o una excusa para empuñar la pluma. Este libro reúne una pequeña parte de su producción. Nacida en un taller literario que reunía a una docena de personas, que entremezclaban sus voces, sus opiniones, sus sentires, sus haceres, sus fantasmas. Junto a Susana Boyadjian y Estaban Sanchez, sabios gurúes de la literatura, emprendí hace más de tres años esta fantástica aventura en donde la filosofía se ponía al servicio de la literatura, para dejar de ser madre de todas las ciencias y ser partera de todas las artes. Alberto ha sabido encarnar este proyecto y darle una dimensión inesperada, siempre nueva, sin repetirse, sin aburrirse, sin ser previsible. Desplazándose a través del lenguaje, en un viaje que siempre es de ida, hacia lo desconocido, con vértigo pero sin miedo. Gracias a él por este nuevo parto. Andrés García Amigo y admirador NOTA DEL AUTOR Después de haber participado en varias antologías y de publicar tres libros autogestivos, experiencia riquisima de compartir textos con otros escritores y cuyo resultado fuera el nacimiento de trillizos gestados colectivamente; “A un paso de la soledad y a medio de los sueños”, “En el Tramway de los delirios” e “Historias…de ustedes”. . Ahora, éste que hoy da a luz, es mi primer libro escrito en soledad , pero paradojicamente pensado en multitud. Ya que es el fruto de innumerables y hermosas vivencias, experiencias, anécdotas y conversaciones, reflexiones e ideas que engalanaron la relación con mis seres más queridos, también con mis compañeros de ruta por los caminos de la escritura con quienes he compartido el “Taller de Capacitación Literaria sobre Filosofía-Lenguaje y Estética”, del Centro Cultura Activa, promovido por Ediciones Baobab y especialmente con los coordinadores del taller, que me guiaron por estos senderos atrevidos y fantásticos dónde albergan los cuentos, los relatos y las poesías, y a cada paso, en cada recodo o en pleno recorrido; uno descubre como las palabras mágicamente se congregan en asamblea para transformar el pensamiento en prosa o quizás en un poema. Y dónde habitan los desfiles incesantes de imágenes y la imaginación resigna las fronteras. Asi se seguido nos podemos sorprender en un encuentro con lo bello y lo sublime de Immanuel Kant, o situarnos más allá del bien y del mal de la mano de Friedrich Nietzsche, o quizá pensarnos, para reconocernos existentes en sintonía con René Descartes, alcanzar la identidad absoluta con Hegel reduciendo la diferencia, o bien confraternizar con el materialismo y la dialéctica de Karl Marx, despedazar el placer para sentir el goce junto a Roland Barthes, incluso internarnos en las cavernas platónicas o fluír con Heráclito por las aguas inquietas de los ríos. Mientras resuenan las palabras de Aristóteles en su Poética: "No corresponde al poeta decir lo que ha sucedido, sino lo que podría suceder, esto es, lo posible según la verosimilitud o la necesidad. En efecto, el historiador y el poeta no se diferencian por decir las cosas en verso o en prosa (...) la diferencia está en que uno dice lo que ha sucedido, y el otro, lo que podría suceder. Por eso también la poesía es más filosófica y elevada que la historia, pues la poesía dice más bien lo general y la historia, lo particular". EL AUTOR P.d.:El agrupamiento de los pensadores es totalmente arbitrario, no pretende hacer ningún tipo de clasificación, que por otra parte siempre sería relativo, es simplemente un modo cronológico de presentarlos.