DIAGNOSIS ISLAM PROYECTO “ISLAM Y DEMOCRACIA”

PROYECTO “ISLAM Y DEMOCRACIA”
DIAGNOSIS ISLAM
Noviembre 2015
Con el apoyo de
Índice
página
1.
Introducción....................................................................................................3
2.
Islam. Principios...............................................................................................3
3.
El Islam filosófico.............................................................................................4
4.
Situación geopolítica........................................................................................5
5.
La radicalización extremista.............................................................................8
6.
Conclusión.......................................................................................................11
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Introducción
Veinte años después de la firma de la Declaración de Barcelona que marcó un
momento álgido y clave en las relaciones entre la UE y los países de la región
mediterránea los profundos procesos políticos de transformación han tenido en los
últimos meses un desarrollo diferente, permitiendo en Túnez una consolidación del
funcionamiento democrático, pero por el contrario, la situación se ha deteriorado en
procesos como Egipto, Libia o Siria. La irrupción de Estado Islámico ha supuesto una
radicalización del islamismo que ha impactado en nuestra sociedad y que ha
provocado en algunos países de la unión cierta islamofobia, pero también una
radicalización de jóvenes musulmanes que acuden a la llamada de Estado Islámico.
Lo proyecto “Islam y democracia” se plantea como un conjunto de actividades que
permitirán analizar la situación y proponer medidas para poder actuaciones que
ayuden en la democratización de los países del Mediterráneo que son objeto de
estudio.
Este informe recoge las conclusiones de las tres jornadas de trabajo y el seminario
realizado durante la implementación del proyecto.
Islam. Principios
Islam etimológicamente significa sumisión [a Dios]. Es una religión monoteísta que
surgió de la Revelación el arcángel Gabriel, mensajero de Alá, a Muhammad a quien
transmitió el mensaje definitivo y verídico, al siglo VII a la Península Arábiga. El Islam
fue fuertemente influenciado por las religiones locales y por el judaísmo, que entonces
estaba muy difundido en aquella región incluyendo la Arabia Félix (el actual Yemen).
Los artículos de fe de esta religión son: unidad y unicidad de Dios; existencia de los
ángeles; veracidad de las Sagradas Escrituras; creer en los profetas enviados de Dios:
Musa (Moisés), Ibrahim (Abraham), Dawud, (David) Sulayman (Salomón), Issa ( Jesús),
Nuh (Noé) y la existencia del Juicio Final.
La rama mayoritaria del Islam es el sunismo, que representa el 85% de los miembros
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de esta religión, sus adeptos cruzan en la predestinación. Los chiitas, son la minoría y
con todas las diversas ramas representan el 15% restante y cruzan en el libre albedrío,
para escoger entre el bien y el mal.
Deberes del buen musulmán son la profesión de fe: “No hay más Dios que Ala y
Mohammad es su profeta”; rezar cinco golpes al día: el viernes a las 12 es obligado ir a
rezar a la mezquita; se tiene que hacer limosna, que tiene que ser del 10% de las
rentas; se tiene que hacer ayuno por el Ramadán (9º mes del calendario lunar); y se
tiene que hacer, al menos un golpe a la vida, el peregrinaje a la Meca.
El Islam filosófico
La división entre suníes y chiitas se produjo a raíz de la muerte de Mahoma (632), por
la sucesión. Los más querían que la Umma (la comunidad de los creyentes) decidiera y
un grupo más pequeño se postuló por Alí, yerno de Mahoma. Chiitas y suníes no
reconocen el mismo sucesor de Mahoma. Ambos sectores tienen una forma diferente
de interpretar el Corán.
Sunismo
Los suníes son fieles a la "Sunna", los hechos y las acciones de Mahoma. Mahoma es el
último profeta, por lo tanto cómo no puede haber ninguno otro no se pueden hacer
actualizaciones, modificaciones o reinterpretaciones del Corán. Esto hace que la
religión se convierta en un compendio inamovible y dificulta su adaptación a la
modernidad.
Una de las ramas más destacadas del sunismo es el wahhabismo: movimiento
reformador, puritano y legalista, creado al s. XVIII por Ibn Abd-al-Wahhab en la Arabia
Saudita que pretendió restaurar el Islam puro, sin las tradiciones que en muchos
lugares lo acompañaban y que consideraban que eran supersticiosas y idolátricas. Para
ellos sólo son ejemplares cinco generaciones de musulmanes: las tres que conocieron
Mahoma y las dos siguientes.
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Otra interpretación del sunismo, el Deobandi, surgió el 1886, liderado por Abu-Hanifa
en la India. Es un movimiento integrista que influyó en los talibanes. Ambos son
propagandistas del salafismo, que es un movimiento suní que reivindica el retorno a
los orígenes del Islam. Por salaf se designa a Mahoma y especialmente los cuatro
primeros califas. Para ellos la expansión islámica fue por la pureza de su fe, obviando
las conquistas militares que es como se ha expandido la fe por todas partes. Y, cuando
tienen problemas, preconizan un regreso al islam de los Salaf. Una especie de sociedad
armónica y feliz.
Chiismo
El chiismo tiene un clero jerarquizado y formato. Los imams suníes son elegidos por
el poder o por la umma, aceptan que la autoridad política y religiosa esté en una
sola persona. Los chiitas diferencian más entre el poder político y el religioso.
Los jaridjites culparon Ali de tomar una decisión humana para decidir el líder de la
comunidad. Un jaridjita mató a Alí. Tiene implantación entre los amazics.
Los Alauitas, o "Partidarios de Ali" lo consideran como la encarnación de Dios en la
tierra. Son poco rigurosos ya rezan en casa y pueden beber alcohol.
Los Drusos, como los alauitas, tienen ritos secretos. Creen que Dios se manifiesta
en forma humana. Están implantados en el Líbano, Norte de Israel y Siria.
Situación geo-política
Se trata de una zona con una gran heterogeneidad étnica y religiosa. Composición
étnica de la zona: 45% árabes, 19% turcos, 12% persas, 8% kurdos, 6% azaríes y
un 10% otros. Los suníes son mayoría en toda la zona, sacado de la Irán donde los
chiitas son mayoría. Turquía, Iraq, Bahreim, Yemen y Líbano son los otros países
con una importante presencia chiita. En la zona existe una fuerte conciencia
antieuropea debida a la herencia colonial y la presencia de un islamismo que
considera que occidente no es ningún modelo a seguir, es el enemigo histórico la
peligrosidad del cual se evidenció con la colonización del s. XIX. y pretende volver a
la sociedad islámica ’primigenia’, en que había una simbiosis “perfecta” entre
Estado y religión.
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Cronología política de la zona:
- 1922: independencia limitada de Egipto y establecimiento de un régimen
monárquico con Fuad I. La plena independencia se logra el 1936, a pesar de que el
Reino Unido se reserva el control del Canal de Suez. El 1928 Hassan al-Banna había
fundado a Ismailiya los Hermanos Musulmanes.
- 1928: Transjordania, independencia limitada.
- 1930: Independencia de Iraq.
- 1932: Constitución del Reino de Arabia Saudí.
- 1934: Independencia del Yemen.
- 1946: Independencias de Siria y Líbano.
- 1947: Independencia de Pakistán y separación de la India.
- 1948: proclamación del Estado de Israel. Inicio del conflicto árabe – israelí.
Transjordania pasa a denominarse Reino de Jordania.
- 1961: Independencia de Kuwait.
- 1971: Independencias cataríes, Omán, Unión de Emiratos Árabes y Bahreim.
- Afganistán era un estado independiente desde medios del siglo XVIII.
- 1979: Revolución Islámica en la Irán.
- 1979-1989. Guerra de Afganistán entre el Ejército Rojo y los mujaidines.
- 1980-1988. Guerra Iraq – Irán.
- 1983. Atentados del Líbano.
- 1990-1991. Guerra Iraq. Iraq invade Kuwait y una coalición internacional liderada
por Estados Unidos libera el emirato pero no acaba con el régimen de Saddam
Hussein.
- 2001. Atentados de la 11 S. Guerra contra el terrorismo del Presidente George
Bush.
- 2001-2003. Invasiones de Afganistán e Iraq.
- 2011. Primavera árabe y surgimiento del Estado Islámico.
Dudar si el islam y democracia son compatibles es un planteamiento erróneo. La
democracia se incompatible con determinantes grupos que hacen determinadas
visiones del islam. Hay que entender la violencia en la orilla oriental de la
Mediterránea
como
una
batalla
entre
aquellos
que
quieren
evolucionar
democráticamente y aquellos que se oponen. La crisis actual es de tipo
revolucionario la causa del cual es la negación total de la mínima reforma por
regímenes que han controlado por la fuerza la independencia nacional.
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El debate no es sobre islam, es sobre la forma que la democracia puede tener en el
mundo árabe puesto que dictadores y yihadistas comparten la negación de la
soberanía popular. De hecho no hablamos de un conflicto nuevo.
Las primaveras árabes sueño movimientos de fondos que venden de lejos. No es
del todo cierto que las primaveras árabes sueño resultado de las redes sociales. En
Túnez el 2008 ya se convocaron huelgas del sindicato UGTT que dejaron de apoyar
al dictador Ben-Ali. En Egipto la oposición laica empezó el 2004.
Los atentados de 1983 en Líbano fueron el resultado de una lectura que vio una
alianza potencialmente peligrosa entre la revolución iraní de los ayatolas, el
régimen de Siria y Hezbollah.
Ante esta alianza la conjunción de intereses por parte de los Estados Unidos y
Arabia Saudí considera oportuna la aparición de un radicalismo suní de base
wahabita. Se creó una alianza
anti-chiita entre Arabia Saudí, Pakistán y
asesoramiento militar de los Estados Unidos.
Los atentados de Nueva York el 11 de septiembre cambian la perspectiva y nos trae
a una lectura del islam totalmente sesgada en la cual vemos el islam con los ojos
de Al Qaeda. Al Qaeda introduce el principio del tafir, la posibilidad de declarar mal
musulmanes, infieles, a todos aquellos que no siguen las líneas de actuación
propugnadas para Al-Qaeda. Se una concepción profundamente antichiita que hace
del término yihad o yihadismo un uso común. Por estos islamistas occidente no es
ningún modelo a seguir, es el enemigo histórico, la peligrosidad del cual se
evidenció con la colonización del siglo XIX y pretenden volver a la sociedad islámica
’primigenia’, en que había una simbiosis “perfecta” entre Estado y religión.
Rol de las dictaduras árabes
Existe una responsabilidad directa entre las dictaduras árabes y el islamismo
radical. Las dictaduras, que son mafias securitarias necesitan del yihadismo para
poder vender su protección a occidente. Los dos, los regímenes dictatoriales y el
islamismo radical que representa DAESH (Estado Islámico) comparten la meta de
aplastar la protesta popular democrática. La fortaleza militar de DAESH y su
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amenaza europea refuerzan la idea de su peligro, y en consecuencia la sensación
occidental que los dictaduras son indispensables para el control o derrota militar de
DAESH.
DAESH basa parte de su éxito en la amenaza militar a occidente y su capacidad
para hacer real esta amenaza, así como una islamofobia occidental que refuerza el
discurso de DAESH ante muchos musulmanes que occidente e islam son
incompatibles.
Desde los bombardeos de agosto de 2015 por parte de los Estados Unidos DAESH
ha crecido. De hecho, DAESH busca una reacción militar desproporcionada por
parte de Europa que refuerce el planteamiento que el mundo musulmán es víctima
de occidente. En este sentido, la guerra global de Bush fue muy beneficiosa para
estos regímenes para luchar por su propia oposición con la excusa que estas eran
yihadistas. Durante los años 2000 las ayudas de Estados Unidos en Yemen fueron
en teoría un pago para poder activar la lucha antiyihadista pero en la práctica no se
lucho contra estos grupos (que siguieron creciendo) y muchos de estos regímenes
utilizaron estos recursos para el propio fortalecimiento.
La radicalización extremista
La
aparición de DAESH ha supuesto un nuevo fenómeno que afecta a las
sociedades occidentales: el reclutamiento de jóvenes que sueño incorporados a sus
filas y utilizados como mecanismo de propaganda. Se trata de jóvenes que recorren
todo un proceso de radicalización y acercamiento al extremismo religioso.
Entendemos extremismo como la aceptación por proselitismo y adoctrinamiento de
un corpus doctrinal (ideología) no moderado y la aceptación de una determinada
priorización de valores y de unos determinados objetivos. El extremista se convierte
en activista cuando el simpatizante admite la legitimidad del espaldarazo o la
ejecución de actos ilegales con finalidades políticas.
La radicalización es un proceso por el cual un individuo o grupo tiende a asumir
puntos de vista políticos intransigentes y doctrinarios. En la medida en que este
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puntos
de
vista
pueden
vincularse
con
ideologías
extremistas,
creencias
fundamentalistas y determinadas prácticas y dinámicas de grupo los individuos
pueden fanatizarse y llegar a liderar, apoyar o ejecutar acciones antidemocráticas
y/o terroristas.
Los indicadores de la radicalización:
• Retraimiento y polarización social.
• Marc referencial de un corpus ideológico.
• Admisión de que la polarización social se concreta en la dicotomía ideológica de
"nosotros" y "ellos”.
• Pérdida gradual de capacidad crítica.
• Tendencia gradual a adoptar estructuras cognitivas e ideológico-discursivas
doctrinarias: rechazando analizar las consecuencias prácticas de las acciones
derivadas de las ideas.
• Adopción de criterios de legalidad basados en interpretaciones religiosas.
• Propensión al fundamentalismo (integrismo, dogmatismo, intransigencia,
intolerancia).
• Intolerancia respecto a desviaciones religiosas.
• Retirar como padres o tutores a las niñas de la escuela al tener el primer ciclo
menstrual
• Pedir exención de clases de gimnasia a las hijas.
• Ser contrario a la participación de mujeres en actividades socioculturales.
• Pedir subvenciones a las administraciones para clases de árabe o urdú sin ningún
tipo de asesoramiento / control de los profesores. No admitir no musulmanes en las
clases y segregar por sexos.
• Apoyar a peticiones maximalistas a las administraciones públicas que pretenden
explícitamente el enfrentamiento y la radicalización de la Comunidad.
• Cambios estéticos en ropas y apariencia física para identificarse más con el grupo.
• Gradual pérdida de interés en otros amigos y actividades.
• Crecientes visitas en webs yihadistas o audición de discursos radicales.
• Participación en seminarios religiosos radicales.
• Admisión de que la religión es capaz de explicarlo "todo" y por eso se hace un uso
constante de ella en un proceso creciente de disonancia cognitiva.
• Gradual ruptura con la familia y creciente importancia de los "nuevos amigos”.
• Asunción de la teoría de la conspiración para destruir el Islam y reconstruir la
"Umma".
• Juzgar incompatible el Islam y Occidente.
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• Declarar que la Religión es muy importante o el más importante en su vida.
• Rechazar y despreciar los valores democráticos occidentales.
• Demonización de los enemigos. Utilización de la palabra judío como adjetivo y no
como sustantivo.
• Admisión de la necesidad de integrarse en estructuras organizativas:
disciplinadas, especializadas, jerárquicas y de vocación totalizando.
• Efectuar tareas de proselitismo.
• Adopción de medidas de seguridad.
• Creación de falsas identidades.
• Compras o robos de material para perpetrar actas ilegales y/o violentos.
• Ejecución de faltas, delitos o crímenes para mantener la seguridad del grupo.
• Participación en seminarios de formación en artes marciales y en técnicas de
supervivencia.
• Formación en idiomas extranjeros previos a viajes.
• Poner al servicio del grupo conocimientos específicos que faciliten la realización de
acciones ilegales.
• Repentino retorno a la adopción de pautas estéticas occidentalizadas previo a la
perpetración de actos ilegales y/o delictivos
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Conclusión
La estabilización política de toda la Mediterránea es uno de los elementos
importantes por el futuro de Europa. Europa tendría que jugar por lo tanto un rol
activo desde un punto de vista político, económico y militar para poder ayudar los
grupos que luchan por el desarrollo democrático de estos países. No se trata de una
lucha entre el islam y occidente, se trata en cambio de una lucha entre los valores
democráticos y los valores totalitarios que en este caso se expresan en forma de
extremismo religioso.
Islam y democracia son tan compatibles como lo sueño democracia y cristianismo.
Hay que hacer frente a la problemática enfocando el problema de una forma
adecuada y priorizando qué es el enemigo real a batir: el totalitarismo. Bien sea
aplicado por parte de grupos terroristas o por gobiernos en forma de dictaduras.
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