Introducción a Django
Django es un framework web de alto nivel que permite el desarrollo rápido de sitios
web seguros y mantenibles. Desarrollado por programadores experimentados,
Django se encarga de gran parte de las complicaciones del desarrollo web, por lo
que puedes concentrarte en escribir tu aplicación sin necesidad de reinventar la
rueda. Es gratuito y de código abierto, tiene una comunidad próspera y activa, una
gran documentación y muchas opciones de soporte gratuito y de pago.
Django te ayuda a escribir software que es:
Completo
Django sigue la filosofía "Baterías incluidas" y provee casi todo lo que los
desarrolladores quisieran que tenga "de fábrica". Porque todo lo que necesitas es
parte de un único "producto", todo funciona a la perfección, sigue principios de
diseño consistentes y tiene una amplia y actualizada documentación.
Versatsil.
Django puede ser (y ha sido) usado para construir casi cualquier tipo de sitio web
— desde sistemas manejadores de contenidos y wikis, hasta redes sociales y sitios
de noticias. Puede funcionar con cualquier framework en el lado del cliente, y puede
devolver contenido en casi cualquier formato (incluyendo HTML, RSS feeds, JSON,
XML, etc). ¡El sitio que estás leyendo actualmente está basado en Django!
Internamente, mientras ofrece opciones para casi cualquier funcionalidad que
desees (distintos motores de base de datos , motores de plantillas, etc.), también
puede ser extendido para usar otros componentes si es necesario.
Seguro
Django ayuda a los desarrolladores evitar varios errores comunes de seguridad al
proveer un framework que ha sido diseñado para "hacer lo correcto" para proteger
el sitio web automáticamente. Por ejemplo, Django, proporciona una manera segura
de administrar cuentas de usuario y contraseñas, evitando así errores comunes
como colocar informaciones de sesión en cookies donde es vulnerable (en lugar de
eso las cookies solo contienen una clave y los datos se almacenan en la base de
datos) o se almacenan directamente las contraseñas en un hash de contraseñas.
Un hash de contraseña es un valor de longitud fija creado al enviar la contraseña a
una cryptographic hash function. Django puede validar si la contraseña ingresada
es correcta enviándola a través de una función hash y comparando la salida con el
valor hash almacenado. Sin embargo, debido a la naturaleza "unidireccional" de la
función, incluso si un valor hash almacenado se ve comprometido es difícil para un
atacante resolver la contraseña original.
Django
permite
protección
contra
algunas
vulnerabilidades
de
forma
predeterminada, incluida la inyección SQL, scripts entre sitios, falsificación de
solicitudes entre sitios y clickjacking (consulte Seguridad de sitios web para obtener
más detalles sobre dichos ataques).
Escalable
Django usa un componente basado en la arquitectura "shared-nothing" (cada parte
de la arquitectura es independiente de las otras, y por lo tanto puede ser
reemplazado o cambiado si es necesario). Teniendo en cuenta una clara separación
entre las diferentes partes significa que puede escalar para aumentar el tráfico al
agregar hardware en cualquier nivel: servidores de cache, servidores de bases de
datos o servidores de aplicación. Algunos de los sitios más concurridos han
escalado a Django para satisfacer sus demandas (por ejemplo, Instagram y Disqus,
por nombrar solo dos).
Fuente: Introducción a Django - Aprende desarrollo web | MDN (mozilla.org)
Así fue el impacto de Tunguska en Siberia, el día que el cielo se
encendió como el infierno
En 1908 se destruyeron miles de kilómetros de un bosque en Rusia, sin una
explicación aparente.
El 30 de junio de 1908, en una región boscosa de Siberia, alrededor de 80 millones
de árboles fueron destruidos de un momento a otro. Este ha sido uno de los
misterios más grandes de la historia, ya que la teoría más fuerte sostiene que un
meteorito impactó en el bosque, pero no se encontró rastro de cráter o restos de
roca espacial.
El fuego que arrasó la tundra siberiana dejó arrancó unos 80 millones de árboles
en un área de 2 mil 100 kilómetros cuadrados de bosque. Las ondas expansivas
generadas se captaron por barómetros en toda Europa y golpearon a personas que
se encontraban a más de 65 kilómetros de distancia.
Los siguientes años, el incidente fue visto casi con temor religioso por parte del
gobierno zarista ruso. Fue hasta 1927 que las primeras investigaciones llegaron
hasta aquella región para descubrir lo ocurrido la mañana de junio de 1908.
Leonid Kulik, mineralogista soviético, fue el encargado de dirigir la primera
expedición a Siberia. Apenas llegó, el científico se dio cuenta de que lo más
probable es que se tratara de un meteorito. Pero no de cualquiera, sino de
un bólido.
Los meteoritos tipo bólido son aquellos que presentan un enorme brillo y se ven
como si fueran enormes bolas de fuego.
Pese a los esfuerzos, Kulik y su equipo nunca lograron encontrar ni el objeto que
causó aquella destrucción ni un cráter que quedara como evidencia.
Leonid Kulik entrevistó a testigos del impacto. El siguiente quizás se trate del más
detallado y amplio de cuantos se recogieron.
“A la hora del desayuno estaba sentado junto a la casa de postas en Vanavara (…)
de repente, vi que directamente hacia el norte, sobre la carretera Tunguska de
Onkoul, el cielo se partió en dos y apareció un fuego a lo alto y ancho sobre el
bosque. La división en el cielo se hizo más grande y todo el lado norte estaba
cubierto de fuego.
En ese momento me puse tan caliente que no pude soportarlo, como si mi camisa
estuviera en llamas; del lado norte, donde estaba el fuego, llegó un fuerte calor.
Quería arrancarme la camisa y tirarla abajo, pero luego el cielo se cerró y sonó un
fuerte golpe y me arrojaron unos metros.
Perdí el sentido por un momento, pero luego mi esposa salió corriendo y me llevó a
casa (…) Cuando el cielo se abrió, el viento caliente corrió entre las casas, como de
los cañones, que dejaron rastros en el suelo como caminos, y dañaron algunos
cultivos. Más tarde vimos que muchas ventanas estaban rotas y en el granero, una
parte de la cerradura de hierro se rompió”.
S. Semenov
Para explicar el impacto de Tunguska se han aventurado toda clase de teorías,
algunas francamente anticientíficas.
Primero se dijo que la causa había sido un cometa. Los cometas están compuestos
en su mayor parte de agua congelada, lo cual explicaría que no hubiera rastros de
objeto alguno. Sin embargo, Kulik seguía pensando en que el meteorito era la
explicación más plausible.
En 1965 se dijo que el impacto de Tunguska pudo haberse originado por
un meteorito de antimateria. Años después, en 1973, se afirmó que lo que chocó
contra la Tierra en Siberia fue un agujero negro (algo francamente imposible).
Incluso no faltaron las teorías ufológicas que afirmaban que una nave
extraterrestre se había estrellado en Siberia.
Hasta la década de 1990, un grupo de científicos confirmó la teoría de Leonid Kulik.
Solo quedaba una incógnita: ¿por qué no se encontraron restos del meteorito?
Un grupo de expertos dijo en su momento que el objeto implosionó debido a un rayo
que generó el mismo meteorito. Este fenómeno ocurre cuando un objeto entra a
gran velocidad en la atmósfera terrestre y alcanza temperaturas tan altas que
provoca una enorme liberación de electrones.
Al perder estos electrones, el meteorito se carga positivamente, causa una
diferencia de potencia y genera una descarga eléctrica. Ese pudo ser el motivo por
el cual no se encontró nada: el meteorito se consumió tras una explosión que él
mismo generó.
La duda sigue en el aire. No se sabe a ciencia cierta qué causó el impacto de
Tunguska. Lo único cierto es que la explosión se produjo en el cielo y liberó una
energía de treinta megatones (equivalente a 300 bombas atómicas, el doble que la
liberada por las bombas arrojadas sobre Hirsohima y Nagasaki en la Segunda
Guerra Mundial).
Fuente: Así fue el impacto de Tunguska en Siberia, el día que el cielo se encendió
como el infierno (muyinteresante.com.mx)
Regla 10 20 30 en PowerPoint explicada por Guy Kawasaki
La Regla 10 20 30 en Powerpoint, propuesta por Guy Kawasaki, se ha convertido
en un principio fundamental para mejorar la calidad de las presentaciones. Este
enfoque establece tres elementos clave que deben considerarse al crear una
presentación efectiva.
¿En qué consiste la Regla 10 20 30?
10 diapositivas: Según esta regla, una presentación efectiva no debe exceder las
diez diapositivas. Limitar la cantidad de diapositivas obliga al presentador a ser
conciso y enfocarse en los puntos más relevantes de su mensaje. Esto evita la
saturación de información y mantiene la atención del público.
20 minutos: La regla también sugiere que una presentación debe durar alrededor
de veinte minutos. Este tiempo es considerado como el ideal para mantener el
interés de la audiencia sin sobrecargarla con información innecesaria. La brevedad
y precisión son elementos clave para una presentación exitosa.
Fuente tamaño 30: El número «30» en la regla se refiere al tamaño mínimo
recomendado para la fuente utilizada en las diapositivas: 30 puntos. Utilizar un
tamaño de fuente adecuado garantiza que el texto sea legible para todos los
asistentes, incluso aquellos ubicados en la parte trasera de la sala.
Beneficios de aplicar la Regla 10 20 30:
Claridad: Al seguir esta regla, se promueve la claridad en la presentación al
enfocarse en los puntos clave y evitar la sobrecarga de información.
Concisión: Limitar el número de diapositivas y el tiempo de presentación obliga al
orador a ser conciso y directo, lo que resulta en una comunicación más efectiva.
Reticencia visual: Al utilizar fuentes legibles y evitar el exceso de contenido en
cada diapositiva, se fomenta una reticencia visual que facilita la comprensión del
mensaje por parte del público.
En resumen, la Regla 10 20 30 propuesta por Guy Kawasaki representa un enfoque
eficaz para mejorar la calidad de las presentaciones al limitar el número de
diapositivas, la duración y el tamaño de fuente. Al aplicar este principio, los
presentadores pueden transmitir sus ideas de manera más clara, concisa y
atractiva, captando así la atención y el interés de su audiencia.
Fuente: Descubre la regla de 10 20 30 de Guy Kawasaki y mejora tu presentación
(byronvargas.com)