1 "La izquierda es una coartada basada en la palabra pueblo, ésa es la bandera de la izquierda: un par de calzoncillos con la palabra pueblo con el cual todos se protegen los cojones." Oriana Fallaci “No puedo negar que fue emocionante ser parte de ese grupo en aquella época, y que cuando me reunía con mis amigos creíamos estar salvando el mundo. Pero era pura basura. No tardé en darme cuente de eso. No queríamos ver lo que realmente estaba pasando en el mundo. Nos obsesionábamos con lo creíamos sucedía en la Unión Soviética. Éramos incapaces de ver que, como todo socialismo, aquello era un desastre, un fracaso (…) Y lo triste es que aún existe mucha gente que, a pesar de las evidencias, continúa apostando al fracaso, hablando en nombre de un pensamiento progresista, que no es otra cosa que anti-progresista.” Doris Lessing, Premio Nóbel de Literatura 2007 2 Periodismo y libertad van de la mano Soy periodista. Ejerzo este oficio desde 1983, cuando aún era estudiante de la carrera de Comunicación Social. No es posible serlo en un modelo distinto a la democracia liberal. En los países socialistas hay gente que escribe en la prensa oficial. No son periodistas. Este es un oficio para la disidencia. No es posible en regímenes autocráticos o totalitarios. De ahí mi interés de concienciar sobre el tema. La enorme ignorancia que afecta a buena parte del pueblo venezolano no puede auspiciar la consolidación de un modelo despótico, fracasado y anacrónico. Y debo aclarar que no soy un “oligarca”. Todo lo contrario. Vengo de un humilde hogar que siempre estuvo lleno de lo más importante: amor. Y no me refiero al que propugna el régimen que pretende adueñarse del poder político, económico y social en Venezuela. Siempre he sido sensible al tema de las injusticias. He puesto mi carrera y mis conocimientos al servicio de los más débiles de la sociedad. De eso pueden dar testimonio muchos. Incluso, algunos confundidos que apoyan este “proceso”. Por la obligación del oficio a ser prospectivo es que advierto lo que viene. Las opciones se agotan. Debemos hacer algo. Pronto. El modelo de lo óptimo, del paradigma a seguir, está en la isla de Cuba, donde un solo hombre ha gobernado durante casi 50 años. Es casi el tiempo de mi existencia. En ese mismo lapso he visto a 10 presidentes, uno tras otro, electos por el pueblo, mientras que el ciudadano cubano de mi edad o menos, solamente ha visto a Fidel Castro. Además, su régimen ha sido cruel y despiadado. Por ejemplo, en julio de 2006, la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, un respetado grupo local, publicó una lista de 316 prisioneros que fueron encarcelados por razones políticas. La lista incluía los nombres de 12 disidentes pacíficos que habían sido arrestados y detenidos en la primera mitad 3 del año 2006, de los cuales cinco fueron acusados del cargo de “estado peligroso”. De los 75 disidentes políticos, periodistas independientes y defensores de derechos humanos que fueron juzgados en abril de 2003, 59 permanecen encarcelados. Al cumplir las sentencias, que alcanzan un promedio de casi 20 años, estos disidentes soportan en prisión condiciones inadecuadas, por decir lo menos. Así mismo, el gobierno de la isla prohíbe que los ciudadanos del país salgan o regresen sin obtener previamente un permiso oficial, que a menudo es negado. El viaje no autorizado puede dar como resultado sanciones penales. En mayo de 2006, la Universidad de Columbia, en Nueva York, otorgó a Oswaldo Payá, un famoso defensor cubano de derechos humanos, el Doctorado “Honoris Causa” en leyes. Fue en reconocimiento a su trabajo. Las autoridades le negaron la visa de salida, y por lo tanto, no pudo recibir el título en persona. De igual forma, el régimen frecuentemente prohíbe a los ciudadanos, que cuentan con autorización de viaje, llevar a sus hijos con ellos al extranjero. Se trata de tener como rehenes a los niños para garantizar el regreso de los padres. Cualquier médico cubano de los que están en nuestro país, se los puede confirmar (si los del G-2, es decir la llamada “inteligencia cubana”, que siempre los acompañan, se lo permiten). El gobierno mantiene en la isla el monopolio en los medios de comunicación, lo que hace que la libertad de expresión sea inexistente. De acuerdo con la prestigiosa organización internacional “Reporteros sin Fronteras”, actualmente existen 23 periodistas que cumplen penas privativas de la libertad en Cuba, la mayoría de ellos acusados de amenazar la independencia nacional y la economía de la isla. Esto pone a este país en el segundo lugar ¡en el mundo!, después de China, con respecto al número de periodistas en prisión. Por cierto, los dos se autodenominan “socialistas” y “marxistas”. Además, en Cuba se restringe el acceso a la información mediante Internet. En agosto de 2006, el disidente y periodista independiente Guillermo Fariñas, puso fin a una huelga de hambre infructuosa de siete meses en oposición a la política impuesta sobre el uso de la red. Fariñas inició la huelga después de que las autoridades cubanas suspendieran 4 su correo electrónico, el cual había estado utilizando para enviar mensajes al extranjero describiendo los ataques contra los disidentes y otros abusos a los derechos humanos. De la misma manera, el régimen niega el reconocimiento jurídico a los grupos locales de derechos humanos. Quienes pertenecen a estos movimientos, sufren persecuciones sistemáticas, vejámenes y hasta cárcel. Por otra parte, las organizaciones internacionales de derechos humanos, tales como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, tienen prohibido enviar misiones de indagación sobre lo que allí sucede. De hecho, la isla sigue siendo uno de los pocos países en el mundo que niega el acceso a sus prisiones al Comité Internacional de la Cruz Roja. Estamos por enterrar a Venezuela. Nosotros podemos impedirlo o escribir su epitafio. Está en nuestras manos. 5 Laudes: Entre la civilización y la barbarie Es singularmente curioso (¡y alarmante!) cómo Venezuela y los venezolanos damos vueltas en círculos existenciales, como lo hace un perro al perseguir su cola. La diatriba civilización-barbarie regresa como certeza histórica. Deambulamos como ciegos, perdidos por una enorme ignorancia que hace metástasis en estupidez (Magister dixit), en un permanente ciclo repetitivo, como si estuviéramos perdidos en un laberinto impuesto por el destino manifiesto de los genes que insisten en demostrarnos que sí es verdad, que los venezolanos (mas no el hombre) procedemos de los monos…¡y allá inexorablemente regresamos! Y nosotros, los que gozamos de forma extraña de una lucidez ajena a esta mayoría de enanos mentales, somos “aliens” que invadimos este suelo maldito por Dios y por la historia. Regresamos, pues, al dilema propuesto por muchos autores nuestros, entre los que destaca Rómulo Gallegos, quien nunca cesó de advertirnos que es a la luz de la civilización que debemos dirigir nuestros pasos. Y utilizó los arquetipos de Doña Bárbara, Marisela, Mister Danger y Santos Luzardo para graficar de forma fácil, digerible por la masa, que, a pesar de sus esfuerzos (no sólo como novelista, sino como político y primer Presidente de la democracia moderna), insiste en mantenerse en el lodazal de los primates que sólo comen, mean y cagan. Ese es nuestro drama. Vivimos la pesadilla de aquel que despertaba para repetir de forma interminable el mismo día, donde acontecía siempre de igual forma y se lograban predecir los hechos con exactitud matemática, donde ni siquiera el suicidio podía ser alternativa. El infierno eterno prometido a los malvados, que en el caso nuestro, en lugar de fuego y azufre, nos hundimos en el estiércol que impone la ignorancia, con título universitario bajo el brazo inclusive, que no sabe diferenciar el sol del dedo que lo apunta (Magíster dixit, again). Esa 6 fatalidad es la que nos embarga y abruma, sobre todo cuando tenemos hijos y debemos cuidarlos y cuidarnos, además de la multitud de primates de quienes ya nos hemos referido, de aquellos que suponemos al lado nuestro en la trinchera de la inteligencia y, de pronto transmutados en absurdos enemigos, nos disparan ráfagas de hiriente estupidez en la búsqueda de notoriedad inmerecida. Los hacen y lo siguen haciendo, por ejemplo, los politicastros que defecaron y defecan sobre las esperanzas del pueblo ilusionado. Cuando las promesas no cumplidas hicieron sucumbir las bases de la frágil democracia. Y ese pueblo imbécil salió corriendo a perseguir gorilas, gritando consignas y alzando banderas, brincando, además como monos de alegría, aunque la muerte los espera a la vuelta de la esquina. Es el regreso al planeta de los simios recordado por Hollywood que sustenta sus sueños en cartón, tablas y pinturas de colores. Socialismo: lago de estúpidos Y es que el comunismo (o socialismo, como ustedes prefieran) sustenta su edificio en cientos, miles, millones de muertos. De hombres, mujeres, ancianos y niños. Con nombres y apellidos. Que albergaban en su ser sentimientos nobles y sueños intangibles. Y todos no murieron con un tiro de gracia, como aspiraría aquel que huye del dolor y el sufrimiento. Comenzaron a dejar de existir cuando entregaron su libertad por un plato de comida. Soñaban con del paraíso de ese Adán bíblico, desnudo y asexuado. Que tomaba los frutos de la tierra sin ningún esfuerzo. Y el cielo era una especie de hipermercado sin fin, donde el aire climatizado nunca se dañaba. Pasaban los hijos del dios de los flojos consumiendo todo, de las neveras que sobre nubes edificaba el creador del universo de los vagos. Cientos de estantes ofreciendo paquetes de multisápidos manjares, gratuitos para la pareja estéril, sin descendencia prometida. Todo lo esperan del padre que crea ociosos y malandros, de lodo formado con excrementos de planetas. Pero la realidad es otra. Satán disfrazado de ese falso dios ofrece quimeras e imposibles, en una 7 igualdad que sólo existe en las fosas comunes que se tapan con tierra movida por tractores, conducidos por autómatas que obedecen, para no ser ellos parte aún del festín de los buitres, que vestidos verde oliva, disfrutan las migajas que caen de la mesa opulenta que traga todo y a todos. Y disfrazan la fetidez que producen los cadáveres con pachulí del barato que es lo que consiguen. Una hediondez sustituida por otra, con menor inclinación hacia la náusea. Todo está listo para la matanza del espíritu, que abruptamente desaparece y perdemos, de un plumazo, el cielo y el infierno. Porque sólo en libertad vencemos a la nada y volvemos a ser espirituales con derechos a apostar por Dios o por el diablo. Sin ella, dejamos de ser hombres y nos volvemos animales con rey, como escribió alguna vez Aristóteles el griego, hace muchos siglos. De eso se trata. De conmover al alma si es que la tienen aquellos que aún creen que la barbarie no se impondrá tan pronto: “quizás un año, o dos, o cinco, y hay tiempo de seguir dilapidando”. Creen que podrán huir de la guadaña que oscila sobre cabezas, torsos y piernas desnudas por la prisa de quien se ve corto en el tiempo de consolidar su tétrico proyecto. Dispuesto a amputarlo todo y teñir de rojo gris nuestra la existencia. Y en su ceguera, estos que se niegan a creer lo que nos llega, no perciben que ya llueve cántaros de sangre anunciados por experiencias tenebrosas de otros tiempos y otras latitudes. Algunas no lejanas, como la de los espantajos andantes de la isla de Cuba. El lago de estúpidos que había mermado por la certeza de dolores anteriores, es llenado nuevamente con nuevas generaciones de incautos que corren a lanzarse a ese pozo fétido de vanas ilusiones, de igualdades imposibles, de sueños irrealizables. Asesinan la única certeza que existe: la de que hombre y libertad son sinónimos y no es posible ser lo uno sin lo otro. Aún los fantasmas de experiencias anteriores, aterradoras como todas las impuestas en nombre del marxismo, deambulan, nos gritan sonidos inaudibles, para advertirnos del limbo que se acerca. La nada está llegando y no lo percibimos. Estamos a punto de entrar al congelador de la historia, al oscurantismo más feroz que hace palidecer atrocidades medievales. 8 Juventud: semilla de esperanza Y ante la decrepitud totalitaria y abrupta, que busca instalarse para siempre, aún queda la esperanza de los jóvenes que, pese a su poco discurso y pensamiento, se mueven por la intuición que les alerta que por ahí no hay camino, sino abismo. Que la historia es la maestra de los vivos y que no debe ser posible repetir los horrores del pasado. Sobre esa esperanza es que depositamos el aliento que nos queda, al seguir advirtiendo que debemos romper la maldición que nos condena a volver siempre sobre pasos vividos que abren huecos en la tierra y nos hunden cual lombrices en la arena. Nuevos bríos debemos sacar quienes andamos buscando transitar los pasos ciertos de rescatar la ruta extraviada, por quienes se empecinan en seguir burlando todo para continuar la trocha de la astucia que nos ha conducido reiteradamente al Seol de la historia. En esta encrucijada nos hallamos. Entre libertad y nihilidad. Ser humano o animal. Hombre libre o cosa esclava. Tener el derecho a disentir o decir simplemente “ordene “ y “entendido”, como cualquier autómata soldado. Debemos decidir si escogemos mito o ciencia, verdad o mentira que quiere ser creída (que es el engaño, según el maestro que me guía), certeza histórica o promesa imposible de cumplir. Vida o muerte. Rapidez o desfallecer de cansancio, lentamente, de forma indefinida o continuada. Canales de televisión por cable o volver a la pantalla en blanco y negro. Medicina moderna con tomógrafo incluido o correr hacia pequeños “consultorios” con milicianos cubanos vegetales, que son brujos con bata y lentes viejos, armados de fusiles para disparar a los incautos que protestan lo elegido. Quienes nunca, por cierto, habían comido carne de bovino y retratos mandaban a sus casas al ver gente de verdad y no sombras que caminan. Modernos carros de inyección directa multivalvulares o armatostes, cachivaches con ruedas de caucho natural descontinuado. Penicilina o sulfa. Ese es el dilema, lo que debemos decidir. Hay que luchar contra todo el dinero del imperio que no le interesa, a fin de cuentas, nuestro triste destino manifiesto de perro que persigue su cola para siempre. Lo único 9 importante para ellos es que llegue el petróleo puntualmente y pagarlo al precio que indiquen las fluctuaciones del mercado negado por quien cobra, aunque esos recursos sirvan para aniquilarnos a los que aún quedamos vivos y pensamos, que, por cierto, es una redundancia.. Rezar ya no sirve para nada Llorar menos. Sólo nos queda continuar con las palabras que alertan el paso final de nuestra vida como pueblo en democracia, que camina hacia nada, de la mano de un canalla que sabe que nos mata y que sólo él sobrevivirá para quedarse montado en la opulencia eterna del poder, el cielo negado a Nerón, Hitler y también Mussolini. Pero que Marx logró resolver a través de la superstición de los mortales; conducir con éxito a los déspotas con la receta perfecta de quedarse para siempre. Allí está el insepulto Fidel para mostrarnos esos éxitos. No queda más que invocar la lucidez para impedir que la barbarie se imponga nuevamente y que podamos recobrar el camino cierto de vivir en libertad y democracia. De recuperar el alma que se muere y que nos deja con sólo cuerpos animales, muertos en vida que sólo desandan como zombis. 10 Capítulo I: En camino hacia la nada Resulta que ahora, con la reforma de la “bicha” (léase, Constitución Nacional) que quiere impulsar el Presidente Chávez de manera recurrente, nos llamaremos “República Socialista Bolivariana de Venezuela”. Vamos al socialismo, pues, del siglo XXI. ¿Y qué es eso? ¿Qué es el socialismo? Cuando los prelados católicos venezolanos le hacen esa pregunta al mandatario venezolano, él los remite a leer a Marx y Lenin. Hagamos un ejercicio intelectual que nos ayude a ubicarnos en la discusión. Carlos Marx (1818-1883) fue un pensador quien junto a Federico Engels (1820-1895) hizo la propuesta teórica de lo que después sería conocido como el sustento ideológico del movimiento comunista internacional. Fundamentaron sus tesis en dos propuestas: una filosófica, sustentada en la lucha de los contrarios de Hegel (Tesis-Antítesis-Síntesis), como motor de la historia. Así diagnosticaron los cambios sociales por contradicciones de clases. Sociedad Primitiva, Esclavismo (Amo-Esclavo), Feudalismo (Señores Feudales-Siervos de la gleba), Capitalismo ( burguesía-Proletariado) y Socialismo (Dictadura del Proletariado) como paso previo al comunismo, es decir, la sociedad sin clases. Esta propuesta la basaron en un hallazgo económico aportado por Marx: el concepto de plusvalía, como explicación del origen de la riqueza y, por ende, también de la pobreza. El secreto estaba en ser propietario de los medios de producción, es decir, de las organizaciones empresariales. Los burgueses hacían que los trabajadores produjeran en largas jornadas (de hasta 18 horas y más en tiempos de estos autores) y los propietarios de las empresas pagaban salarios miserables. La diferencia entre lo realmente producido y lo cancelado a los trabajadores, es la plusvalía. Marx y Engels se murieron sin consolidar su experimento de cambio social. Hasta que Vladimir Illich Úlianov (Lenin) realiza la primera revolución marxista en la Rusia de 1917, 11 logrando instaurar la tan ansiada Dictadura del Proletariado. A su muerte en 1924, fue sucedido por Josef Stalin (1879-1953) quien consolidó, aprovechando el centralismo excesivo y el régimen de partido único impuesto por su predecesor, un régimen genocida y de terror cuyos excesos aún no se han evaluado en su justa dimensión. Algunos historiadores aseguran que el georgiano superó con creces a Hitler en sus desmanes contra las minorías dentro de esta confederación de naciones (solamente en Ucrania se habla de 7 millones de muertos durante el gobierno comunista). Aprovechando el contragolpe dado a los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, Stalin se apropió de amplios territorios de Europa, países a los que sometió implacablemente. Entre estas naciones debemos recordar a la República Democrática Alemána (RDA), a Polonia, Hungría y Checoslovaquia. En estas dos últimas naciones, fueron aplastados brutalmente movimientos civiles que buscaban mayores márgenes de libertad y de democracia. Luego la muerte de Stalin, sus sucesores Nikita Khrushchev, Ledonid Brezhnev, Yuri Andropov y Konstantin Chenenko continuaron con la línea dura buscando consolidar el modelo comunista hegemónico. A Khrushchev le tocó confrontar la crisis de los misiles auspiciada por Fidel Castro en 1962 que casi acaba con la humanidad entera. Su capacidad de negociación junto a la de John F. Kennedy evitó la hecatombe. A la llegada al poder de Mijail Gorbachov se produce una implosión, al final de la década de los 80 del siglo pasado, de la que hasta entonces era la superpotencia militar que disputaba el control geopolítico del planeta con los Estados Unidos. Una vez ocurrido ese hecho, se conoció la falacia del llamado “socialismo real”. La Unión Soviética, salvo en la industria militar, era un país atrasado tecnológicamente y los individuos soportaron el fardo de un colectivismo impuesto a sangre y fuego. El empobrecimiento del ciudadano medio era brutal. Había dos clases sociales: los funcionarios de alta jerarquía del Partido Comunista, quienes disfrutaban de las mieles del poder, y el resto de la población que vivía hacinada en viviendas múltiples, trabajando por un salario de hambre o yendo a morir en nombre del “internacionalismo proletario” 12 en las guerras que disputaban el control del mundo con “el imperialismo norteamericano”. Toda oposición fue aplastada implacablemente e, incuso, hasta los niños fueron ideologizados para obedecer a los intereses del régimen. Niños y jóvenes convertidos en informantes de los cuerpos de seguridad para el castigo implacable de padres, hermanos o familiares que osaran criticar el sistema socialista. Los países se convirtieron en verdaderos campos de concentración y sometimiento. El muro de Berlín fue testigo mudo de ello. Nadie podía huir del comunismo. Una simple conversación con sobrevivientes de esa pesadilla confirmará todas estas afirmaciones Modelos como el soviético fueron impuestos posteriormente (con algunas diferencias impuestas por la cultura, historia y geografía) en China, Corea, Yugoslavia, Vietnam, Albania y Cuba, por sólo mencionar algunos países. Los alemanes, por ejemplo, han tenido que postergar su abrumador crecimiento económico y tecnológico por la rémora impuesta por sus hermanos del este, a quienes han debido arrastrar literalmente para intentar colocarlos al mismo nivel cultural y tecnológico de sus compatriotas occidentales. Este es el socialismo “del siglo XXI que nos trae Hugo Chávez. En los próximos capítulos trataremos de explicar los enormes riesgos que corremos en esta apresurada carrera que nos lleva hacia la nada, a la involución más feroz, a la desaparición de todo vestigio de modernidad y civilización. Los antecedentes demuestran que esta afirmación no es exagerada.. 13 Capítulo II: El cuento chino de Mao En 1949, mucho tiempo después que los rusos, los comunistas chinos logran darse con el poder en el gigante asiático. Fueron conducidos por Mao Tse Tung. Como los bolcheviques, se trata de una “Dictadura del Proletariado” (o socialismo) en un país eminentemente campesino. Está prohibido el pluralismo político, se castiga ferozmente la disidencia y la propiedad se colectiviza. Se sigue la propuesta hecha por Carlos Marx (1818-1883) y Federico Engels (1820-1895). La religión es el opio de los pueblos. Así que el ateísmo es un ingrediente consustancial con el nuevo modelo. Todo se sustenta en el “materialismo histórico” o lo que es lo mismo, el “comunismo científico”. Esto ocurre en un país superpoblado y empobrecido por un modelo semifeudal , que sirve de aliciente para que los líderes de esta ideología consigan adeptos. En los años que gobernó Mao, ocurrieron más de 22 millones de muertes, lo que superó a los crímenes cometidos por Stalin y Hitler. Una vez consolidado en el poder, el régimen socialista chino (recuerden que socialismo y dictadura del proletariado son sinónimos) empieza la confrontación con las potencias capitalistas por el control geopolítico, principalmente en el sudeste asiático, con apoyo de la Unión Soviética. En el marco de esta realidad es que se producirán las guerras de Corea (1950-53), país que había sido dividido, al igual que Alemania, después de la rendición de Japón al final de la Segunda Guerra Mundial, y Vietnam (1965-75), áreas de influencia del gigante rojo. En la guerra de Corea se calcula murió más de un millón de chinos enviados defender el “internacionalismo proletario” de sus “hermanos socialistas”.También fallecieron 600 mil coreanos. Vietnam fue otro escenario de confrontación. Principalmente, porque, en el caso de los Estados Unidos, este gobierno libraba una doble confrontación: en el propio 14 campo de batalla y con la opinión pública de su país que siempre vio con ojeriza esta guerra que le parecía ajena a sus intereses. A comienzos del conflicto, Estados Unidos apoyó a Francia, país europeo que había mantenido un enclave en la zona. Luego, en 1965, actuó directamente contra el ejército rojo vietnamita que tenía como centro de operaciones el norte del país. Al frente de los socialistas coreanos estuvo Kim Il-Sung mientras que en Vietnam lo hizo Ho Chi Minh. En ambos países, donde los occidentales sufrieron reveses, se impusieron regímenes similares a los de la Unión Soviética y China. Los opositores muertos se calculan, en ambas naciones, en cientos de miles. Modelos políticos cortados con la misma tijera. Partido único que controla todas las actividades de los ciudadanos, ningún tipo de disidencia e ideologización de los diferentes sectores de la sociedad. Todo sustentado en una estructura piramidal y militarista acérrima. Durante la Revolución Cultural impulsada por Mao al final de su vida, hubo una feroz persecución contra los sectores intelectuales y vinculados a cualquier quehacer espiritual en ese país. En 1968, por ejemplo, en la provincia de Guangxi, cerca de 100 mil personas murieron asesinadas entre julio y agosto. El escritor Zheng Yi informó que sólo en el Condado de Wuxuan hubo prácticas de canibalismo en más de 100 víctimas, ya que devorar a los enemigos era la única manera de probar el amor por la revolución. A las víctimas se les sacaron los riñones, los ojos o los sesos estando todavía vivas. Mao murió queriendo exterminar la cultura china. Su revolución cultural causó más de dos millones de muertes, sin mencionar la destrucción de lazos familiares, culturas enteras exterminadas y erradicaciones totales de grupos humanos, desenraizados de sus tierras y tradiciones. Tras la muerte del líder y promotor de la revolución, Deng Xiao Ping asumió el control del Partido Comunista. Este dirigente auspició el castigo de la denominada “Banda de los cuatro”, dirigentes socialistas incondicionales a Mao quienes, según él, auspiciaron los desmanes cometidos durante este proceso de exterminio cultural.. Deng Xiao Ping ,a diferencia de Mijail Gorbachov en la Unión Soviética, impulsó un régimen mixto que mantiene el control político 15 férreo pero con una apertura hacia el modelo económico liberal. Después de su muerte, sus herederos políticos han continuado con esta línea de conducción. Eso ha convertido al gigante asiático actualmente en el tercer país con mayor crecimiento económico del mundo. Nada que ver con la propuesta inicial de los fundadores del modelo político, seguidores de Marx y Engels. Sin embargo, la violación de los Derechos Humanos continúa. Tal como ocurrió en 1989. Desde abril de ese año, representantes de diversos sectores de la colectividad china se ubicaron en la Plaza de Tiananmen en la capital, Pekín, para exigir mayores libertades políticas. Sus protestas fueron acabadas a tiros. A pesar de las versiones contradictorias impuestas por un régimen enemigo de la libertad de expresión, se calcula que ese día murieron cerca de cuatro mil personas y otras 30 mil resultaron heridas por la actuación del Ejército Rojo. Lo más curioso de las experiencias socialistas primigenias del mundo, es que todas se impulsaron en países económicamente atrasados, con economías rurales y anacrónicas, donde el capitalismo se conocía sólo por referencia. 16 Capítulo III: ¡Malditos genocidas! Continuando con el caso del socialismo chino, el pueblo en ese gigantesco país asiático ha sido víctima del genocidio más brutal en nombre del “socialismo”, modelo que se intenta imponer en Venezuela. He aquí algunos testimonios que pueden ilustrarnos en torno a lo que se nos avecina si tal proyecto se consolida: Testimonio del padre Raymond J. De Jaegher, publicado en su libro “Enemigo Interno”: “Un día —relata D Jaegher, testigo presencial de los hechos—, el Partido Comunista Chino (PCCh) reunió a todos los habitantes de una aldea en la plaza principal. Los maestros acudieron con sus alumnos. El propósito de la reunión era presenciar la ejecución de 13 jóvenes patriotas. Después de dar a conocer los cargos inventados contra las víctimas, el PCCh le ordenó a una maestra horrorizada que les hiciera cantar a los niños canciones patrias. Entre tanto, en el escenario no aparecieron bailarines sino un verdugo que sostenía una cuchilla filosa en las manos. El verdugo era un soldado comunista joven, robusto, de brazos fuertes y aspecto feroz. Se ubicó detrás de la primera víctima, levantó rápidamente la cuchilla en el aire, la bajó con fuerza y cayó la primera cabeza. La sangre manaba como de una fuente, mientras la cabeza rodaba por el suelo. El canto histérico de los niños se transformó en gritos y llantos desconsolados. Con sus palmas la maestra marcaba el compás de los cánticos, tratando de que no se detuvieran. En medio del caos, yo oía sonar una campana una y otra vez. El verdugo asestó 13 golpes y 13 cabezas cayeron al suelo. Luego, varios soldados comunistas se acercaron, abrieron el torso de las víctimas y les extrajeron el corazón para festejar. Semejante bestialidad se llevó a cabo delante de los niños. Ellos empalidecieron y 17 algunos comenzaron a vomitar a causa del macabro ritual del que eran testigos. La maestra los regañó por sus reacciones, y luego los hizo formar para volver a la escuela.” El Padre de Jaegher también escribió que un miembro del PCCh de la provincia de Shanxi inventó una forma de tortura macabra. Un día, mientras caminaba por la ciudad, se detuvo frente a un restaurante y se quedó mirando una gran caldera que hervía. Entonces él compró varias calderas gigantes y de inmediato arrestó a opositores del Partido Comunista. Durante el acelerado juicio, se llenaron las calderas con agua hirviendo. Luego de la condena, desnudaron a tres personas y las arrojaron adentro para que murieran quemadas. En Pingshan, el Padre De Jaegher vio como despellejaban a un hombre vivo. Los miembros del PCCh obligaron a su hijo a participar de la inhumana tortura: vio morir a su padre en medio de un dolor inconmensurable mientras oía sus gritos. Los torturadores vertieron vinagre y ácido sobre el cuerpo del padre y así toda la piel se le peló pronto. Comenzaron por la espalda, siguieron por los hombros y en un rato le habían extirpado la piel de todo el cuerpo, salvo la de la cabeza. El hombre murió en cuestión de minutos. Canibalismo “socialista”: El canibalismo de Guangxi fue incluso más inhumano que la Masacre de Daxing. El escritor Zheng Yi, autor de “Recuerdo Escarlata”, describió el canibalismo como un proceso que se dio en tres etapas: “La primera fue la etapa inicial, en la que el terror era disimulado y tenebroso. Los registros locales documentan una escena típica: a medianoche, los asesinos ingresan en una casa en puntas de pie, y una vez que hallan a su víctima, le abren el torso para extirparle el hígado y el corazón. Como no tienen experiencia y están asustados, por error le sacan un pulmón y tienen que volver. Una vez que cocinan el hígado y el corazón, algunos llevan licor de sus casas, otros aportan los condimentos y entonces se sientan a comer en silencio a la luz del fuego del horno. La segunda etapa fue el punto de esplendor, cuando 18 el terror se volvió abierto y público. En ese momento, los asesinos veteranos mostraban gran experiencia para extirpar el hígado y el corazón mientras la víctima está viva, y se lo enseñaban a otros y refinaban su técnica hasta la perfección. Por ejemplo, cuando abrían a una persona viva, lo único que necesitaban hacer era cortar el vientre en forma de cruz, subirse a la víctima (si ésta estaba atada a un árbol, los asesinos le golpeaban la parte inferior del abdomen con la rodilla), y el corazón y demás órganos salían del cuerpo. El asesino principal tenía derecho a disponer del hígado, el corazón y los genitales, mientras que los otros se repartían el resto. Esas escenas imponentes pero aterradoras, estaban adornadas con banderines y eslóganes. La tercera etapa fue la del descontrol, cuando el canibalismo se convirtió en una práctica masiva. En el condado de Wuxuan, al igual que cuando los perros salvajes se comen los cuerpos en épocas de epidemias, la gente se comía entre sí, totalmente fuera de control. A menudo, las víctimas primero se “acusaban en público”, tras lo cual siempre seguía la ejecución y luego el canibalismo. No bien la persona caía al suelo, viva o muerta, la gente sacaba los cuchillos que tenía preparados, la rodeaba y le cortaba la parte del cuerpo que pudiera agarrar. En esta etapa, los ciudadanos comunes participaban del canibalismo. El canibalismo se extendió como una plaga y la gente disfrutaba de estos festines. Cualquier parte del cuerpo humano era comestible: corazón, hígado, riñones, hombros, pies, tendones. Los cuerpos se cocían de muchas maneras: hervidos, al vapor, al horno, fritos, asados. La gente tomaba licor o vino y jugaba a juegos de mesa mientras se comía los cuerpos. En el momento de esplendor de este movimiento, incluso la cafetería de la organización gubernamental más importante, el Comité Revolucionario del condado de Wuxuan, ofrecía platos hechos con carne humana” Prácticas actuales de “nuestros hermanos chinos”: “Como el pueblo de China ingresó en la era de la computación y de los viajes espaciales, y puede hablar en privado acerca de los derechos 19 humanos, la democracia y la libertad, muchos creen que las atrocidades espantosas del régimen comunista son parte del pasado, que el PCCh se puso ropas civiles y está listo para conectarse con el mundo. Sin embargo, esa idea está muy lejos de la verdad. Las golpizas crueles son el método más común para torturar a los practicantes del movimiento Falun Gong (que significa “Verdad, Benevolencia y Tolerancia”). La policía y los líderes entre los prisioneros golpean directamente a practicantes y también incitan a otros prisioneros a golpearlos. Como consecuencia de los golpes, muchas víctimas han perdido la audición y sufrido daños y mutilaciones varias en diversas partes del cuerpo: orejas arrancadas, ojos aplastados, dientes partidos y fracturas de cráneo, columna vertebral, costillas, clavícula, pelvis, brazos y piernas, o la amputación directa de las extremidades. Algunos torturadores punzan y aplastan sin piedad los testículos de practicantes varones y patean los genitales de mujeres. Si los practicantes aún no se someten, continúan las golpizas hasta que les arrancan la piel y les abren las carnes. Las descargas eléctricas son otro método habitual de tortura para los practicantes de Falun Gong en los campos de trabajos forzados de China. La policía utiliza bastones que descargan electricidad en las partes sensibles de los practicantes, como boca, parte superior de la cabeza, pecho, genitales, caderas, planta de los pies, senos en las mujeres y pene en los varones. A veces se hacen descargas con varios bastones eléctricos a la vez hasta que la carne despide olor a quemado y las zonas lesionadas se ponen negras o moradas. Otras veces, se realizan descargas sobre la cabeza y el ano al mismo tiempo. La policía suele torturar a los practicantes con diez bastones o más simultáneamente para que el castigo pueda durar más tiempo. Normalmente, un bastón eléctrico descarga hasta diez mil voltios. Durante la descarga, emite una luz azul junto con el sonido de la estática. Cuando la corriente se transmite al cuerpo, la persona siente el efecto de una quemadura o de una mordida de serpiente. La piel de la víctima se pone colorada y se abre, y las heridas se pudren. Hay bastones más poderosos que hacen sentir al torturado que lo están 20 golpeando con un martillo en la cabeza. Los cuerpos quedan completamente deformados y bañados en sangre por los tormentos. No obstante, los guardias van más allá, y les vierten agua con sal y les pasan electricidad con bastones eléctricos. El olor de la sangre y la carne quemada junto a los gritos de agonía producen un cuadro miserable. Además, se les cubre la cabeza con bolsas de plástico para que el miedo al ahogo los lleve a ceder a la humillación. También, la policía quema con cigarrillos encendidos, manos, cara, plantas de los pies, pecho, espalda, tetillas o pezones y otras partes del cuerpo de los practicantes, o directamente pasan el fuego de encendedores sobre las manos y los genitales. Calientan al rojo vivo barras de hierro especialmente diseñadas y las apoyan sobre las piernas de los torturados. También les queman la cara con carbón encendido. Los policías golpean los senos y los genitales de las practicantes. Realizan violaciones individuales y grupales de las prisioneras. Las desnudan, las arrojan a celdas con internos varones y dejan que las violen reiteradamente. Usan bastones para descargarles electricidad en senos y genitales. También les queman los pezones con encendedores. Les insertan los bastones en la vagina y luego efectúan la descarga. Juntan cepillos de dientes de a cuatro, los insertan en la vagina y allí los frotan y los retuercen. Enganchan las partes privadas de las practicantes a anzuelos de hierro. También les esposan las manos detrás de la espalda, les conectan cables eléctricos a los pezones y efectúan las descargas”. Este es el momento de reflexionar para impedir la consolidación de un régimen de oprobio como este en Venezuela. 21 Capítulo IV: Tito, 35 años en el poder Las dos guerras mundiales impusieron, durante el siglo pasado, importantes transformaciones en muchos países, sobre todo el llamado “viejo continente”. Josip Broz “Tito” nació en Croacia en mayo 1892. Su padre, Franjo, también era Croata y su madre, Marija, eslovena. Fue el séptimo hijo de la pareja cuando esta región estaba anexada al imperio austro-húngaro. Fungió como suboficial durante la primera de las grandes confrontaciones y en 1920 desertó al Ejército Soviético, para incorporarse a las filas del Partido Comunista. En 1937, Tito fue nombrado, obedeciendo instrucciones de los soviéticos, Secretario General del Partido Comunista de Yugoslavia. En 1941 fue designado Jefe del Comité Militar que buscaba la independencia de Alemania, en plena confrontación bélica internacional. En 1945, Tito firma un tratado con Stalin para auspiciar la invasión del Ejército Rojo, lo que facilita la imposición de un modelo socialista (Dictadura del Proletariado) en Yugoslavia. Una vez consolidado el proyecto hegemónico de partido único y control férreo de la sociedad sin libertades individuales, Tito comienza a impulsar un proceso de distanciamiento con los rusos hasta que, en 1948, es expulsado de la Internacional Comunista (Kominform), organización que agrupaba a las organizaciones que se ubicaban bajo la égida soviética. En 1953, Tito crea la República Federativa de Yugoslavia, integrada por Serbia, Eslovenia, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Macedonia y Montenegro. A pesar de su distanciamiento con los rusos, en 1956 aprueba la intervención de los nuevos imperial-socialistas en Hungría, aunque, años después, en 1968, condenará una acción similar impuesta en Checoslovaquia. Tito impuso a todas estas naciones (hoy autónomas, luego de una cruenta guerra racial y cultural sufrida a raíz de su muerte) un régimen de partido único, sin respeto de los derechos 22 humanos, que denominó “socialismo autogestionario” (casi todos los mandatarios socialistas lo hicieron de por vida, como los reyes del medioevo). De cerca conocimos la experiencia de apertura hacia la democracia liberal experimentada por estas repúblicas, luego de superada la guerra. Un gerente formado en las empresas del sector aluminio de la región Guayana, víctima de persecuciones impuestas por el “proceso bolivariano” (pese a que era militante del Movimiento Quinta República, el nombre entonces del partido de Hugo Chávez, conocido por sus siglas MVR), lo obligó a buscar trabajo en el extranjero. Lo logró en la República de Montenegro, parte de la antigua Yugoslavia. En entrevista que le realizamos hace algunos años, en una de sus visitas a Venezuela, este ingeniero, oriundo del estado Bolívar, nos contó la realidad que vio en ese país, dos años después de la debacle de modelo socialista. En primer lugar, los obreros del sector aluminio en esa nación tenían un promedio de vida de 40 años, ya que los equipos de seguridad indispensables para disminuir los graves niveles de contaminación ambiental que afecta a este tipo de plantas reductoras de aluminio, no existían. Nos dijo, además, que fue muy difícil convencer al personal técnico subalterno de la planta donde laboraba (para la época, recientemente privatizada) de que se reunieran para evaluar el trabajo que realizaban, ya que los únicos encuentros permitidos durante el gobierno socialista de Tito eran las del Partido Comunista. Resaltó en la larga conversación que tuvimos, que duró dos años para convencerlos de la necesidad que había al respecto. Este profesional que sufre del exilio impuesto por la intolerancia y la complacencia con la corrupción (había denunciado situaciones irregulares detectadas por él en la empresa estatal CVGVenalum) nos contó que había sido dirigente del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) durante su etapa estudiantil en la Universidad de Oriente y luego militante del MVR. “¡Que bolas tengo yo!”, confesó. “Lo que es la ignorancia. La vida tuvo que imponerme viajar a un país que fue socialista para ver de cerca los desmanes y abusos cometidos en este tipo de régimen”. El nombre de este profesional de la ingeniería me lo reservo, debido a que su familia aún 23 permanece en el país. En todo caso, seguimos con esta historia de sangre, sudor y lágrimas que hundió a muchos pueblos y naciones en el ostracismo, cárcel, muerte y, a los sobrevivientes, en el más absoluto atraso. 24 Capítulo V: Masacre en Hungría Luego de Nikita Khrushchev denunciara el genocidio cometido por Stalin en la Unión Soviética, en el mundo llamado “socialista” comenzó a producirse una evaluación de todo ese proceso de aglutinación brutal de poder en muy pocas manos, acompañado de asesinatos en masa de millones de personas. La conmoción provocada sirvió para legitimar en cierta medida el movimiento de protesta que, en el verano de 1956, afectó en Hungría a todos los grupos sociales y en especial a estudiantes e intelectuales. Pero la burocracia estalinista, no sólo tenía un frente abierto en Hungría, sino que también en Polonia pasaba algo similar. En junio de 1956 una manifestación de trabajadores fue duramente reprimida en Poznań dejando al menos 53 muertos y varios centenares de heridos. La conmoción, en tal sentido, nació en solidaridad con los polacos y luego comenzó a develar una gigantesca crisis política dentro de Hungría socialista. Los trabajadores ocuparon las fábricas, tomaron una planta de armamento y se enviaron al centro de la ciudad de Budapest camiones cargados de armas en donde miles de trabajadores se las repartieron. Durante las protestas, los consejos obreros, una estructura impulsada en 1919, se reprodujeron por todas las empresas. Su exigencia era liberarse del control burocrático del Partido Comunista Soviético. Entre las reformas exigían la renovación de los cuadros de liderazgo dentro del partido único que regía los destinos de la nación y su distanciamiento del Kremlin. Previamente a la designación de Imre Nagy (un reformista que proponía apertura democrática) al frente del Comité Central del Partido Comunista Húngaro y de su anuncio de distanciamiento de ese país del Pacto de Varsovia, el primero de noviembre de 1956, las 25 tropas rusas habían entrado a Budapest para ayudar al gobierno de Rakosi, estalinista odiado por el pueblo que precedió a Nagy, pero encontraron una furiosa resistencia. Apertrechados sólo con armas ligeras y cócteles molotov, miles de personas resistieron y confrontaron a los soldados rusos. Después de tres días de confrontaciones, 30 tanques fueron destruidos y tripulaciones de los blindados se empezaban a poner del lado de los rebeldes. Por otra parte, en Polonia había más quebraderos de cabeza para los soviéticos ya que los obreros de la fábrica Zerán de Varsovia escribieron una carta al Comité Central del Partido Comunista en la que expresaban su descontento con la dominación de los rusos. En Hungría, mientras tanto, desde el primer día de protestas, las estaciones de radio liberadas emitían noticias por todo el país. En el curso de la huelga general, los trabajadores agrupados en consejos comenzaron a federarse y apenas en una semana establecieron una República de Consejos. Poco antes, el Partido Comunista húngaro, ya en manos de Nagy, había respondido a los señalamientos de “Pravda” (diario oficial de la Unión Soviética): “En su último número, Pravda publicó un artículo de su corresponsal sobre los acontecimientos de Hungría. El trabajo se titulaba 'Fracasa la aventura antipopular en Hungría'. Esto es un error. Lo que sucedió en Budapest no fue una aventura, ni fracasó. Durante cinco días, explotaron bombas y las ametralladoras sembraron la muerte. En ese lapso, esta infortunada ciudad sufrió y derramó su sangre con un millar de muertos. Fueron las ideas del verdadero patriotismo y la verdadera democracia las que animaban los corazones y los cerebros, por una democracia. El pueblo quiere libertad. Libertad para el pueblo, y una vida sin despotismo y sin terror, más pan y más independencia nacional. ¿Puede llamarse a esto una aventura antipopular?”. A finales de octubre, los consejos obreros lanzaron un ultimátum: la huelga continuaría hasta que todas las tropas rusas hubieran dejado el país. Hubo un amague, y los tanques rusos salieron, sólo para regresar el 4 de noviembre con nuevas tropas de soldados fanatizados que reprimirían sin contemplación las protestas, a sangre y fuego. Esa era la orden. . Las 26 tropas soviéticas iniciaron una masacre que produjo más de 20 mil muertos, entre hombres, mujeres y niños. Cientos de miles fueron detenidos y enviados a campos de concentración y exterminio en Hungría y la propia Unión Soviética. El 22 de aquel mismo mes, Nagy fue detenido y acabaría siendo fusilado en junio de 1958. Su sucesor, Janos Kadar, reinstauró la dictadura pro-soviética. El socialismo se había salvado y los rusos mantenían el control. Eso duró hasta la implosión auspiciada por Mijail Gorbachov, al final de la década de los 80. 27 Capítulo VI: La invasión a Checoslovaquia Luego del fallido proceso de apertura y democratización ocurrido en Hungría, se produce en Checoslovaquia un proceso similar. Ocurrió en la primavera de 1968. Las conferencias distritales del Partido Comunista de ese país del este europeo, se negaron a confirmar en sus cargos a varios funcionarios conocidos por sus métodos dictatoriales. En esta atmósfera fue elegido presidente de la República el general retirado, héroe de la Segunda Guerra Mundial, Ludvík Svoboda, de 72 años de edad. El entusiasmo popular ante la elección del general Svoboda al cargo presidencial era comprensible, ya que por vez primera, desde la llegada de los comunistas al pode, en 1948, ocupaba el sillón de mando una persona cuyas manos no estaban manchadas de sangre. El escogido no era un político profesional, sino un militar de carrera, héroe, al desempeñarse como comandante de la unidad checoslovaca formada en la Unión Soviética. La designación causó sorpresa. Todo fue decidido de antemano por el Partido Comunista Checoslovaco, y la votación de la Asamblea Nacional fue tan sólo formal. Ludvík Svoboda formó el nuevo Gobierno, presididio por Oldrich Cerník. Josef Smrkovsky, ex prisionero de los estalinistas, fue elegido presidente de la Asamblea Nacional. Los nuevos dirigentes eran, obviamente, comunistas, ya que el partido no pensaba en renunciar al monopolio del poder. En mayo de 1968, el pleno del Comité Central del Partido Comunista aprobó las directrices de un nuevo modelo económico que se proponía eliminar el dirigismo en la economía e intentaba conciliar el mercado con la economía planificada. En el país provocó nerviosismo un ejercicio de las tropas del Pacto de Varsovia, realizado en territorio checoslovaco, que coincidió con las nuevas medidas anunciadas. Durante todo el 28 mes de junio de 1968, unidades soviéticas y de otros países "amigos" se trasladaban de un extremo de Checoslovaquia. Los jefes militares soviéticos aprovecharon las maniobras para preparar perfectamente la invasión que se llevaría a cabo el 21 de agosto de 1968. Las cúpulas de los partidos comunistas de la Unión Soviética, Polonia, Hungría, Bulgaria y la República Democrática Alemana empezaron a preparar la invasión militar a Checoslovaquia, ya que llegaron a la conclusión de que los comunistas checoslovacos habían perdido el control sobre el proceso de democratización. La prensa de los llamados países "hermanos" orquestaba rencorosas campañas contra la vía democratizadora checoslovaca y los ideólogos estalinistas afirmaban que allí estaba desarrollándose una contrarrevolución. A mediados de julio de 1968, los dirigentes de la Unión Soviética, la República Democrática Alemana, Polonia y Hungría celebraron en Varsovia una reunión consultiva en la que aprobaron la doctrina Brezhniev, es decir, el deber de los partidos comunistas de intervenir en los asuntos internos de otros países socialistas. De acuerdo con la mencionada doctrina, el 21 de agosto de 1968 las tropas del Pacto de Varsovia invadieron Checoslovaquia. 6 mil los tanques y 750 mil los soldados del Pacto de Varsovia aplastaron el proceso democratizador en ese país europeo. Tropas de cinco países socialistas- Unión Soviética, República Democrática Alemana, Hungría, Polonia y Bulgaria, comandadas por generales soviéticos, ocuparon Checoslovaquia. Las tropas de ocupación soviéticas allanaron los recintos del Comité Central del Partido Comunista de Checoslovaquia, en Praga,y deportaron a la Unión Soviética al máximo dirigente Alexander Dubcek, al primer ministro Oldrich Cerník y al presidente de la Asamblea Nacional, Josef Smrkovsky. Al frente del país invadido se quedó, en solitario, el presidente Ludvík Svoboda, un hombre de casi 73 años. La delegación checoslovaca firmó en Moscú el acta de capitulación. El documento denominado " Protocolos de Moscú" que estipulaba las condiciones impuestas por los invasores nunca fue dado a conocer en Checoslovaquia. Pensando que obraban en bien del país, que evitaban el derramamiento de sangre y un duro régimen de 29 ocupación, los dirigentes checoslovacos - Dubcek, Svoboda y Cerník asumían, en realidad, el compromiso de de estrangular con sus propias manos el proceso de democratización iniciado en Checoslovaquia .Los soviéticos permanecieron 23 años dentro de su territorio, como ejército de ocupación. Todo en nombre del “internacionalismo proletario” y del “materialismo histórico”. El socialismo (dictadura del proletariado) había sido “salvado” con la rápida intervención de los ejércitos sometidos a la política soviética. 30 Capítulo VII: Hitler era socialista El nombre original del partido Nazi, que exterminó 6 millones de judíos y generó una cruenta guerra que causó más de 50 millones de muertes, fue el de Partido Obrero Alemán. Luego, en febrero de 1925, el futuro Fürer lo llamó Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores. Si bien es cierto que Hitler no era marxista y persiguió implacablemente a quienes propugnaban esta doctrina, las coincidencias filosóficas (hegelianas) y luego en el modelo de organización de la sociedad, fueron sospechosamente semejantes a lo impuesto por Stalin y sus conmilitones en Rusia. Incluso, en los 25 puntos ideológicos, que permanecieron intactos hasta la disolución de esta organización política totalitaria, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, hay importantes puntos comunes de que, efectivamente, los nazis tenían una propuesta socialista. Hemos tomado algunas de estas directrices doctrinales que nos servirán para respaldar lo aseverado: “6). El derecho respecto a la conducción y creación de las leyes del Estado debe recaer exclusivamente sobre los ciudadanos. 7). Demandamos que el Estado se comprometa a interesarse, en primer lugar, en las posibilidades de trabajo y de vida de sus ciudadanos. 13). Reivindicamos la estatización de todas las empresas que han existido hasta el presente bajo la forma de Sociedades.14).Reivindicamos la participación [de los asalariados] en los beneficios de las grandes empresas. 16). Reivindicamos la creación y protección de una sana clase media. 17). Reivindicamos una reforma agraria adaptada a nuestras necesidades nacionales, la promulgación de una ley que sustente la expropiación sin contrapartida de los bienes raíces en provecho de empresas de utilidad pública. La abolición de la renta territorial y la prohibición de toda especulación con bienes raíces. 20) Con el objeto de permitir a 31 todos los capaces y diligentes alcanzar un nivel de formación superior y acceder a puestos de responsabilidad, corresponde al estado emprender el desarrollo sistemático del conjunto de la educación del pueblo. Los programas de estudio de todos los establecimientos escolares, deben adaptarse a las necesidades de la vida práctica. Siempre que las propias facultades lo permitan, la escuela debe alcanzar de los jóvenes que comprendan el sentido del civismo (instrucción cívica). Reivindicamos la formación, a expensas del Estado, de los niños dotados intelectualmente de forma particular, pero nacidos de familias pobres, sin distinción de su pertenencia social o profesional. 21) Corresponde al Estado mejorar la sanidad pública protegiendo a la madre y al niño, y prohibiendo el trabajo de los jóvenes, poniendo en acto todos los medios conducentes a promover la educación física, por la prescripción legal de la participación obligatoria a la práctica de la gimnasia y los deportes, y por el sostenimiento generoso de todas las asociaciones que se consagran a la formación física de la juventud. 23) Reivindicamos la lucha legal contra la mentira política internacional y su propagación a través de la prensa (…).Los periódicos que se opongan al bien común deberán prohibirse. 24) Reivindicamos la libertad, en nuestro Estado, de todas las confesiones religiosas, en la medida en que aquellas no pongan en peligro su existencia o no contravengan las concepciones morales de la raza germánica. 25) Para realizar todas estas reivindicaciones, exigimos para el Reich la instauración de un poder central fuerte.”. Hemos sacado de los 25 puntos doctrinarios del Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores, aquellos que propugnan la pureza de la raza aria y el antisemitismo. Si hacemos un pormenorizado análisis de las propuestas aquí citadas, podemos notar que se trata de un modelo muy parecido al del socialismo (no es coincidencia que explicite el nombre) marxista-leninista. Tampoco es coincidencia que en septiembre de 1939, Hitler y Stalin firmaran un pacto de no agresión y de colaboración mutua. De esta manera, ambos países acordaron no atacarse, ni independientemente ni en alianza con otros estados; no apoyar a otro tercer país que pudiera 32 atacar a la otra parte del pacto; no unirse a ningún grupo de potencias que directa o indirectamente pudiera amenazar a cualquiera de las partes firmantes y a resolver sus diferencias mediante la negociación. A esto le unió un protocolo secreto que dividía Europa oriental en zonas de influencia germana y soviética. Se acordó la partición de Polonia y se dejó a Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania y la Besarabia en el área de influencia soviética. Así, cuando Alemania invadió Polonia, pocos días después, el 1 de septiembre de 1939, los soviéticos entraron en el país, estableciéndose la mutua frontera en el río Bug. En noviembre de 1939, la URSS atacó Finlandia y la forzó a ceder el istmo de Karelia. Las repúblicas bálticas fueron también anexionadas por Stalin, pasando a configurarse como repúblicas soviéticas en agosto de 1940. Finalmente, el pacto de no agresión fue roto por Hitler el 22 de junio de 1941, cuando las tropas nazis se lanzaron a la invasión de la URSS. Peleas entre socialistas, pues. 33 Capítulo VIII: Las Brigadas Rojas Las Brigadas Rojas son una organización socialista italiana, fundada en 1969. Tiene como planteamiento inicial, atraer a una parte del “proletariado” ( a pesar de que los obreros europeos son de los mejores pagados del mundo) hacia sus posturas insurreccionales. El creador de las Brigadas Rojas fue Renato Curcio, un estudiante de la Universidad de Trento. Este grupo insurreccional socialista inicia su núcleo de actividad en Milán y Turín (las zonas más industrializadas de Italia). Se trata de recabar apoyos sindicales. Sus miembros, en esta primera etapa, son fundamentalmente estudiantes y trabajadores. Se dedican a realizar sabotajes en grandes empresas industriales y asaltos a las sedes de los sindicatos. En 1972, toman por primera vez a un rehén. Fue un jefe de la fábrica de cauchos Pirelli, al que secuestraron durante unas horas para recabar información acerca de los métodos de control de la empresa sobre los trabajadores. Fue posteriormente liberado y encadenado a las puertas de la fábrica. A partir de 1974, la organización se extendió por otras zonas de Italia. Fue la época de los secuestros de importantes personalidades políticas y económicas. Su manifiesto de 1975 llamaba a realizar una "huelga general contra el corazón del Estado". De esta forma, combinaban sus ataques contra las fuerzas de seguridad con otros dirigidos a la clase política italiana, en especial contra dirigentes de la gobernante Democracia Cristiana. En junio de 1974, las Brigadas Rojas cometieron su primer atentado mortal, asesinando a dos miembros del neofascista Movimiento Social Italiano. Eso los obligó a pasar a la clandestinidad, debilitando su presencia en las fábricas. En 1976, los Carabinieri (policía italiana) arrestaron a un gran número de militantes. En abril del año siguiente, las Brigadas anunciaron la fundación del Partido Comunista di Combattimento, como "vanguardia de la clase trabajadora". Las acciones armadas, especialmente contra la policía y los jueces, se incrementaron. La mayoría de la militancia de esta etapa estaba compuesta por estudiantes. En 1978, 34 secuestraron y asesinaron al ex -Primer Ministro italiano Aldo Moro. Este cruel homicidio fue el principio del fin de las Brigadas Rojas. El gobierno los persiguió sin contemplaciones. El 7 de abril de 1979, la policía hizo importantes detenciones de líderes de esta organización socialista. En 1981, los brigadistas secuestraron al general de brigada del ejército estadounidense, James Dozier. Fue rescatado en una rápida operación policial. En esta acción, las autoridades arrestaron a varios brigadistas que proporcionaron valiosa información sobre otros activistas, conduciendo a nuevas detenciones. En 1984, las Brigadas Rojas se escindieron en dos facciones. En el mismo año, cuatro de sus líderes en prisión, Curcio, Moretti, Ianelli y Bertolucci, rechazaron públicamente la lucha armada. Ese año, las Brigadas Rojas reivindicaron el asesinato de Leamon Hunt, responsable estadounidense del Grupo de Observadores Internacionales para la Península del Sinaí.. En febrero de 1986, una de las facciones asesinó un ex - Alcalde de Florencia, e intentó matar a un consejero del primer ministro Bettino Craxi. En marzo de 1987, la otra facción asesinó al general Licio Giorgieri en Roma. El 16 de abril de 1988 fue masacrado el senador Roberto Ruffilli. Golpes contundentes dados por las autoridades minimizaron sus actuaciones. Actualmente, los pocos activistas que le quedan, están presos o en la clandestinidad..Sin embargo, lograron en1999 asesinar a Massimo D'Antona, consejero del gabinete centroizquierdista de Massimo D'Alema. También, el 20 de marzo de 2002 mataron a Marco Biagi, otro consejero económico, en este caso del gobierno de Silvio Berlusconi,. El 3 de marzo de 2003, dos activistas, Mario Galesi y Nadia Desdemona Lioce, iniciaron un tiroteo con la policía en un tren estacionado en la estación de Terontola. Galesi y Emanuele Petri (uno de los policías) murieron. Lioce fue detenida. El 23 de octubre de 2003, los Carabinieri arrestan a seis miembros de las Brigadas en redadas simultáneas en Florencia, Cerdeña, Roma y Pisa. Esta operación está relacionada con el asesinato de Massimo D'Antona. Las Brigadas Rojas desde sus inicios recibieron apoyo económico y logístico de la Organización para la Liberación de Palestina y otros grupos socialistas de Europa Occidental. Criminales que secuestran y asesinan en nombre del socialismo y la igualdad. Actualmente han sido reducidas por las autoridades hasta prácticamente desaparecer. 35 Capítulo IX: Pol Pot, el genocida de Camboya Saloth Sar, el futuro Pol Pot, nació en Prek Sbauv, Provincia de Kompung Thom de Camboya, el 19 de mayo de 1925. Fue hijo de un próspero hacendado. A los seis años se traslada con su familia a la ciudad de Phnom Penh, la capital. A partir de ese momento, vivirían con un hermano quien fungía como oficial de la guardia Real. Su estadía en la Pagoda de Plata, vecina al Palacio, lo pondría en contacto con lo más selecto del budismo. Aprendió muy pronto el francés y estudió en una escuela católica, aunque sin obtener título alguno. A través de la lucha anticolonialista, se une al Partido Comunista Indochino, que seguía las directrices por Mao Tse Tung. Antes había estudiado en Paris, con recursos dados por su opulento padre, y aunque nunca se graduó, su permanencia en Europa le permitió incorporarse con otros paisanos suyos al Partido Comunista Francés. Al regresar a su país, forma parte del Partido Revolucionario Popular de Kampuchea, facción adscrita al Partido Comunista Indochino, que luego cambiará su nombre al de Partido Obrero de Camboya. Al asumir liderazgo dentro de esta organización de corte marxista-leninista, se va desligando de la influencia vietnamita (que obedecía más a la corriente soviética) y se acerca al socialismo chino. Luego de un golpe de estado registrado en 1970, deja la capital y conforma una guerrilla que denomina “Oficina 100”. Motivado por los chinos, abre tienda aparte y conforma el Partido Comunista de Kampuchea que será designado por el pueblo de su país como los Jemeres Rojos (Jémer es el idioma mayoritario de Camboya). En 1973, luego de bombardeos realizados por aviones norteamericanos en su guerra contra los nor-vietnamitas que se refugiaban en este país, los Jemeres Rojos fueron aumentando su popularidad. Ese año la guerrilla socialista logra controlar el 60 por ciento del territorio del 36 país. Dos años después, en 1975, toman la capital, Phnom Penh. Los guerrilleros son recibidos con júbilo por la población quienes ven esperanzados el final de la guerra. Poco tardó el nuevo régimen en mostrar sus verdaderas y crueles intenciones. Saloth Sar cambió su nombre al de Pol Pot y decretó el “Año Cero” para el inicio del “hombre nuevo” que el socialismo recién llegado necesitaba como base de la novel sociedad. Se trataba de realizar una purificación frente al “capitalismo salvaje” y el “imperialismo atroz”. Eso implicaba la destrucción de todo vestigio cultural del pasado (religión, idioma, educación, arte, etc.). Se aplican medidas de carácter socialista de forma sorprendentemente rápida: la moneda es abolida y aparece el trueque como forma de comercio, desaparece el mercado, las escuelas y cualquier infraestructura urbana dejan de existir. Todas las ciudades y aldeas son vaciadas y sus habitantes empiezan a trabajar en el campo. En este experimento, que duró poco más de dos años, una cuarta parte de la población fue aniquilada en nombre del socialismo. Fue tal el genocidio impuesto por el socialista Pol Pot, que sus antiguos compañeros de causa, los comunistas vietnamitas, son quienes dan al traste con esta locura, para luego imponer (¡claro está!) un estalinismo mas proclive a las directrices de la Unión Soviética (recuerden que había una lucha por el control geopolítico de la zona entre la URSS y China). En 1977 fue escrito en la revista “Gente” un trabajo que se refería a este experimento socialista: “El infierno está en la tierra, queda entre Tailandia, Laos y Vietnam. Se llama Camboya. Todo lo que sucede allí no es parte de un relato fantástico ni de una película de terror. Tampoco ha ocurrido hace tiempo. Todo pasa en estos momentos mientras usted lee estas mismas líneas. En ese lugar, un pueblo está condenado. Es castigado con trabajos forzados, está esclavizado, torturado y muchas veces asesinado, en nombre de una ideología que se propone crear un "hombre nuevo". Camboya (la actual, la de la bandera roja) se está construyendo sobre un inmenso osario. Sobre las lágrimas y los despojos de los intelectuales, de los funcionarios, de las mujeres, de los campesinos y de los niños. Porque en esta Camboya perseguida y quebrantada, los 37 niños ofician obligadamente de espías, de delatores de sus propias familias.” En este lapso se calcula que fueron asesinados entre dos y tres millones de personas. Pol Pot murió en abril de 1998 cuando iba a ser juzgados por sus propios compañeros de armas, aunque de esta versión se duda mucho. Sobre todo porque ya se habían activado los mecanismos internacionales para procesarlo en un Tribunal Penal Internacional. Sus restos nunca fueron recuperados. Su nombre implica, para los sobrevivientes, una pesadilla que no quiere ser recordada. 38 Capítulo X: Milosevic, el Hombre Nuevo Slobodan Milosevic nació en Posaverac, Serbia, en 1940. Es decir, había experimentado, durante su adolescencia, el nacimiento y fortalecimiento del socialismo en su país lo que, sin duda, le permitió interiorizar los valores del “hombre nuevo” que siempre pregonó el marxismo pero, en este caso, en su versión yugoslava .Era hijo de una maestra militante socialista. Su padre, un ex-seminarista ortodoxo reclutado al comunismo, se suicidó en 1961, cuando el joven “Slobo” (como lo llamaban) tenía 21 años. Doce años después de ese lamentable suceso, su madre haría lo mismo. Se casó con Mirjana Markovic una activista socialista, hija de una importante familia comunista serbia. En el año 1959, se unió a la Liga de los Comunistas de Yugoslavia, y, cinco años después se graduó en derecho por la Universidad de Belgrado. Recuerden que todo esto sucede en pleno gobierno de Josip Broz “Tito” quien, como señalamos en un capítulo anterior, gobernó con mano férrea durante 35 años en la República Federativa de Yugoslavia, integrada por Serbia, Eslovenia, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Macedonia y Montenegro. Milosevic fue director del principal banco de Belgrado entre 1978 y 1983. En 1984, Ivan Stambolic, presidente de la Liga de los Comunistas de Serbia, le designó como jefe de la organización del “partido único” en Belgrado. En enero de 1986, sucedió a Stambolic en la presidencia de la organización de la hoz y el martillo. Tras alcanzar la presidencia de Serbia, en 1989, en plena crisis del llamado “socialismo real”, y al inicio de lo que luego sería la disolución de la República de Yugoslavia, este personaje se convierte en el máximo exponente del nacionalismo serbio y aprovechó el sexto centenario de la batalla de Kosovo contra los otomanos para anular el régimen autonómico de la provincia autónoma de Kosovo (de mayoría musulmana) mediante una revisión constitucional. Kosovo contaba con autonomía desde 1974. En mayo de 1989, Milosevic, el “hombre nuevo”, repetimos, formado por el socialismo y sus valores desde su más temprana edad, asume la presidencia de Serbia, sustituyendo a Stambolic. En las primeras 39 elecciones, celebradas en diciembre de 1990, fue reelegido presidente de la República de Serbia por mayoría y ese mismo año funda su propio movimiento político, el Partido Socialista de Serbia (PSUS) sobre los fundamentos de la disuelta Liga de los Comunistas de Serbia. O sea, “socialista rancio”, o como diríamos en Venezuela, “de uña en el rabo”. En ese período comienza la tragedia de los Balcanes, en la que Milosevic juega un papel fundamental. Sus abiertas pretensiones de hegemonía, que le llevaron a vulnerar la rotación presidencial de Yugoslavia, que regía desde la muerte de Tito, condujeron a las declaraciones de independencia por parte de todas las repúblicas de Yugoslavia, excepto Serbia y Montenegro, y a las guerras de Croacia, en 1991, y Bosnia-Herzegovina. En plenas sanciones económicas internacionales por su apoyo a la minoría serbia en las otras repúblicas, Milosevic fue reelecto en 1992 presidente de su partido, al tiempo que se constituía una nueva versión de la República Federal de Yugoslavia, formada por Serbia y Montenegro. En esa época, “Slobo” se presenta como el único interlocutor serbio en Occidente, y su popularidad alcanza las mayores cotas en su país. La coalición izquierdista formada por su organización política (Partido Socialista Serbio) y el de su esposa Mirjana Markovic (Izquierda Unida Yugoslava), obtiene la mayoría absoluta en las elecciones al Parlamento yugoslavo de noviembre de 1996. En septiembre presenta a su candidato para la presidencia de Serbia, Milan Milutinovic, el cual triunfa, entre acusaciones de fraude, a finales de diciembre de 1997. Durante su mandato, de forma directa o a través de interpuestos, Milosevic, el formado con los valores del socialismo y contra el llamado“capitalismo salvaje”, es acusado de presidir un plan maestro para crear una "Gran Serbia". Este proyecto tuvo como resultado la muerte de aproximadamente un cuarto de millón (¡250 mil personas!) de ciudadanos no-serbios en Croacia, Bosnia-Herzegovina y Kosovo. La política de "limpieza étnica" le valió el descrédito y la condena internacional, siendo acusado de crímenes de guerra. En el año 2001, Milosevic fue arrestado por el gobierno yugoslavo a solicitud de la comunidad mundial y se inició su posterior procesamiento en el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia, ubicado en La Haya, Holanda. El ex mandatario ordenó, según la fiscalía, el exterminio sistemático de croatas, musulmanes y albaneses durante tres sangrientos conflictos: Croacia, de 1991 a 1995; Bosnia, de 1992 a 1995, y Kosovo, de 1998 a 1999. El 11 de 40 marzo de 2006, Slodoban Milosevic fue encontrado muerto en su celda. El “hombre nuevo”, formado por la sociedad socialista yugoslava, era historia. Sólo quedaba el mal sabor de sus desmanes y la frustración de las víctimas de no haber logrado justicia. 41 Capítulo XI: Islam y marxismo: cóctel de la muerte Muammar el Gaddafi, nació en el desierto de Sirte en Libia, sin que se haya podido establecer con exactitud la fecha (se estima que fue en 1946 ). Su familia pertenecía a un grupo de beduinos, por lo que llevo una infancia de profunda formación islámica. Durante su adolescencia tuvo contacto con la ideología de Gamal Abdel Nasser, líder del integrismo islámico-socialista en Egipto. A la edad de 21 años se graduó en Leyes. Ingresó a la Academia Militar de su país y organizó la "Unión de Militares Libres", algo así como el MBR-200 de Libia. En 1965, Gaddafi viaja a Gran Bretaña para asistir a cursos de perfeccionamiento. El 1 de septiembre de 1969 tomó parte en el derrocamiento del régimen del rey Idris. Tenía el rango de Coronel. Se puso al mando de la junta militar, el Consejo del Mando de la Revolución, y anunció los puntos programáticos del nuevo régimen. En realidad, desde el comienzo él es quien controla el poder en esta mezcla explosiva y homicida de socialismo e Islam. En 1970 exige y obtiene que se retiren las bases extranjeras y se nacionalizan algunas empresas petroleras. En 1973 publica El libro verde en tres volúmenes: La solución del problema de la democracia: el poder del pueblo; La solución del problema económico: el socialismo, y El fundamento social de la Tercera Teoría Universal. El 1 de marzo de 1977 proclamaba la Jamahiriya (Estado de las Masas) Árabe Libia Popular y Socialista. El Congreso General Popular asumió el poder legislativo y el Comité General Popular sustituyó al Consejo del Mando Revolucionario en el ejecutivo. Todo cambia para que siga igual Gadafi siempre es quien tiene realmente el poder y lo controla desde entonces (va para 40 años). De esta forma, ha impuesto un régimen de partido único con este cóctel de muerte que mezcla Islam con socialismo. Durante sus años de régimen, ha servido de cobijo y apoyo a numerosos grupos terroristas. Tal es el caso de Abu Nidal, conocida como Organización Revolucionaria de Musulmanes 42 Socialistas o también como “Septiembre Negro”, dirigida por Sabri AlBanna. Se separó de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en 1974. Ha realizado atentados en una veintena de países, ocasionando más de 900 víctimas entre muertos y heridos. Todo esto con apoyo del socialista Coronel Gadafi, Sus objetivos comprenden Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Israel, palestinos moderados, la OLP y varios países árabes. Entre sus principales ataques se cuentan los realizados contra los aeropuertos de Roma y Viena, en diciembre de 1985; la sinagoga Neve Shalom, en Estambul, en septiembre de 1986; el secuestro del vuelo de la desaparecida línea aérea norteamericana Pan Am 73 en Karachi, en septiembre de 1986, y el ataque contra un barco de excursiones en el puerto de Poros, en julio de 1988, en Grecia. La Organización Revolucionaria de Musulmanes Socialistas asesinó a un diplomático jordano en el Líbano, en enero de 1994, y se le ha relacionado con la muerte del representante de la OLP en dicho país. En un informe presentado por la organización de defensa de los Derechos Humanos, Amnistía Internacional (A.I.) en el año 2004, luego de una visita realizada al país, destacan el caso de un grupo de miembros de la Hermandad Musulmana declarados culpables en aplicación de la Ley 71 de 1972, que penaliza la formación de partidos políticos (¡viva el socialismo!). Así mismo, los delegados de la organización pusieron de relieve una práctica reiterada de celebración de juicios sin las debidas garantías ante tribunales excepcionales, concretamente el llamado “Tribunal Popular”. De igual manera, expresaron su preocupación por la práctica generalizada de la reclusión prolongada en régimen de incomunicación, especialmente por parte de los servicios de seguridad interna. Dicha práctica propicia la tortura, frecuentemente utilizada en Libia como han confirmado los testimonios pormenorizados recogidos durante la visita. El 16 de febrero del 2004, Amnistía Internacional asistió a una vista del juicio relacionado con 426 niños que resultaron infectados con el virus del sida cuando estaban al cuidado del hospital infantil Al Fateh de Benghazi. La organización se reunió con abogados de todas las partes y con familiares o niños pertenecientes a la Asociación en favor de los Niños Víctimas del Sida de Benghazi. Los delegados escucharon, de boca de los búlgaros y los palestinos acusados, graves denuncias de tortura, incluida la aplicación de descargas eléctricas, durante varios meses de reclusión. También entrevistaron a agentes del Estado que actualmente están siendo 43 juzgados por tortura en relación con el mismo caso. A.I. planteó, asimismo, la necesidad de establecer la verdad en relación con los casos de desaparición forzada pendientes desde hace tiempo, ocurridos en circunstancias controvertidas dentro o fuera de Libia. Entre ellos están los de los ciudadanos libios Jaballah Matar, 'Izzat Yousef al-Magrif y Mansour al-Kikhiya, así como el del imán Musa Sadr, líder chií libanés, y sus dos compañeros. Socialismo, sinónimo de despotismo, represión y muerte. Con el Islam de compañero como carburante de carácter religioso, la actitud genocida se potencia “ene veces”. 44 Capítulo XII: Carlos Ilich Ramírez, El Chacal El 12 de octubre de 1949, nace Ilich,Ramírez Sánchez , hijo mayor de un acaudalado y contradictorio venezolano que era comunista. Luego de otros dos nacimientos, la madre de los pequeños, Elba María Sánchez, se separa de su esposo y se traslada a Londres, en 1966. Allí, el joven venezolano resulta un fracaso en los estudios, lo que se convierte en la excusa perfecta para que su padre retome su tutoría. En 1968, con el apoyo del Partido Comunista de Venezuela, consigue un cupo en la Universidad Patrice Lumumba de Moscú. Establecerá contacto con estudiantes palestinos cercanos a la lucha armada. De esta forma, viaja a Jordania, participa en un campamento del Frente Popular de Liberación de Palestina y cumple actividades en la guerrilla del Rey Hussein. Es cuando comienza a ser llamado “Carlos”. Regresa a Londres, se reencuentra con su madre e ingresa a la Universidad. Durante el año 1972, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) secuestra un avión de la aerolínea alemana Lufthansa en Londres, ataca el aeropuerto de Tel Aviv y asesina atletas judíos en el marco de los Juegos Olímpicos de Munich. La lucha armada árabe atrae a Carlos. El 28 de junio de 1973, el líder del FPLP, Mohamed Boudia, es asesinado por paramilitares israelíes. Michel Moukharbal lo sucede y Carlos es designado su asistente. En París, se le atribuyen estallidos de coches bombas en las sedes de algunos diarios. En 1974, miembros del Ejército Rojo de Japón toman la Embajada de Francia en La Haya, en Holanda. Carlos es colaborador del plagio. Es cuando los medios de comunicación comienzan a llamar al joven socialista venezolano, “Carlos, El Chacal”. En enero de 1975, trata infructuosamente de explosionar un avión comercial israelí en Francia, haciendo uso de una bazuca. Él y sus cómplices se ven obligados a tomar un grupo de rehenes y escapan a Bagdad. En una operación internacional, Moukharbal es arrestado y brinda información sobre “El Chacal” a los cuerpos de seguridad 45 franceses. En junio, agentes de los servicios secretos galos, acompañados por el líder capturado, visitan en el número 9 de Rue Toullier, un domicilio de una novia de Carlos. Moukharbal identifica al buscado "Chacal", quien dispara contra la humanidad de su delator, asesinándolo. Dos agentes resultan muertos y un tercero herido. “El Chacal” es invitado a dirigir el secuestro de los ministros de los países Organización de Países Exportadores de Petróleo, OPEP, que estaban reunidos en Viena, Austria. El golpe se da el domingo 21 de diciembre de 1975. Los terroristas entran a la sede de la OPEP y someten a los presentes. Desobedeciendo las órdenes del FPLP, “El Chacal” perdona la vida a los ministros de Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Irán y Qatar y los libera. La falta le vale la expulsión del frente rebelde. Algunos señalan que el socialista accedió a la liberación, tras recibir 50 millones de dólares. Rápidas negociaciones dieron a los captores un avión en el que viajaron hacia Argelia. Luego se esconde en Hungría y en Rumania, países que entonces pertenecían al mundo socialista, que siempre prestaron apoyo al terrorista venezolano en nombre del “internacionalismo proletario”. Posteriormente, se le adjudica el secuestro y traslado hasta Uganda de un avión de Air France en 1976. También se le acusa de la toma de la Embajada de Estados Unidos en Teherán, en 1979. Autoridades de Francia detienen en París, en 1982, a la alemana Magdalena Kopp, mujer de “El Chacal”. Exigiendo la libertad de Kopp, el terrorista venezolano realiza sangrientos ataques en la red ferroviaria del país galo, el 31 de diciembre de 1983. En mayo de 1985, Kopp es liberada por la justicia francesa y se encuentra con “El Chacal” en Siria, país que recibe al socialista. A principios de los 90, se separa de Kopp y se casa con la jordana Abdel Salam Adhman Jarrar Lana, se aproxima al Islam y colabora con la policía de Sudán, país que lo recibe; sin embargo, no puede evitar sucumbir a mujeres, alcohol y una vida relajada, lo que irritó al gobierno musulmán sudanés. Mientras tanto, Francia sigue pacientemente la pista del rebelde. En 1994, los servicios secretos del país galo consiguen autorización para actuar dentro de Sudán. El sábado 13 de agosto, en la ciudad de Jartún, “El Chacal” ingresa a un hospital para someterse a una intervención quirúrgica. Finalizada la operación, y aún bajo los efectos de la anestesia, es trasladado al pueblo de Taif bajo engaño de un posible atentado. Allí un grupo comando le inyecta un narcótico, lo mete en un saco y lo traslada a Francia en un jet privado. Ya en territorio francés, 46 “El Chacal” es imputado por sus numerosos delitos. Fue condenado a dos cadenas perpetuas y todavía espera otros sumarios. En el año de 2001, cautivo, contrae matrimonio con la francesa Isabelle CoutantPeyre, quien se desempeña como su abogada. En reiteradas ocasiones, el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, ha expresado su afecto por este connotado terrorista internacional. 47 Capítulo XIII: Juan Pablo II, hombre libre El 1º de mayo de 1991 el Papa Juan Pablo Segundo publicó su Carta Encíclica “Centesimus Annus”, en recordatorio a la escrita cien años antes ( eso es lo que significa: “cien años”) por su predecesor León XIII. Lo más impresionante de ese pronunciamiento del entonces máximo líder de la Iglesia Católica durante las postrimerías del siglo XIX, en 1891, fue la capacidad prospectiva de este líder eclesiástico con respecto al socialismo. En 1867 Carlos Marx había publicado el primer tomo de “El Capital” y este Papa, poco más de 20 años después y antes de que se impusiera en un país del mundo ( la revolución bolchevique entronizó a los marxistas en 1917) , pudo advertir los enormes riesgos que tal propuesta significaban para la humanidad. Viniendo de Juan Pablo II no podía ser de otra manera. Siendo, primero estudiante, luego sacerdote y finalmente Cardenal, sufrió la dura experiencia del largo totalitarismo impuesto por el partido único de Polonia, que además obedecía a las directrices de los soviéticos y sus pretensiones hegemónicas. Antes, en sus años mozos, le había tocado sufrir la invasión de los nazis y los atropellos realizados por este modelo autoritario y criminal. Es decir, que debió padeció las dos caras de la misma moneda: fascismo y socialismo. Hubo de estudiar su carrera sacerdotal en la clandestinidad, porque era un delito en ese momento, primero por la ocupación alemana, y luego por la prohibición impuesta por los socialistas. Se ordenó como presbítero el 1º de noviembre de 1946. Acababa de culminar la pesadilla que impuso Hitler para seguir con la que trajo Stalin. El 28 de 48 septiembre de 1958 fue consagrado Obispo y designado Auxiliar de Cracovia. El 18 de enero de 1964 fue nombrado Arzobispo de Cracovia, por el Papa Pablo VI. Desde este alto cargo y luego como Papa, impulsaría una defensa de los derechos humanos que nunca culminaría hasta ver rescatada toda la Europa del Este de las garras de este modelo de sociedad empobrecedor y genocida. De ahí la importancia que este Obispo de Roma dio a la lucha contra el totalitarismo socialista. Su posición en defensa de la libertad causó que el 13 de mayo de 1981 sufriera un atentado que casi le costó la vida. Todos los analistas coinciden que este intento de asesinato fue ordenado por socialistas búlgaros, obedeciendo órdenes de sus amos soviéticos. Debido a esta cadena de terribles experiencias, es que Juan Pablo II enaltece el aporte intelectual hecho por Leon XIII al visualizar lo que vendría con el marxismo: un régimen criminal que dejó en su camino 100 millones de muertos y la cifra continúa creciendo en los pocos países que se atreven a permitir semejante infamia. Hemos escogido algunos párrafos de lo escrito por este singular líder de la Iglesia católica que dejó, sin duda, una huella imborrable en las generaciones que tuvimos la dicha de conocerlo. A continuación, compartimos párrafos de su encíclica “Centesimus Annus” que Juan Pablo II escribió en honor a su predecesor Leon XIII, quien advirtió en 1891 lo que vendría con el socialismo en su Carta “Rerum Novarum”. Caída del socialismo europeo Sobre el derrumbamiento de ese oprobioso modelo, en la década de los 90, escribe Juan Pablo Segundo: “Esto mismo queda confirmado, en particular, por los acontecimientos de los últimos meses del año 1989 y primeros del 1990. Tales acontecimientos y las posteriores transformaciones radicales no se explican si no es a la luz de las situaciones anteriores, que en cierta medida habían cristalizado o institucionalizado las previsiones de León XIII y las señales, cada vez más inquietantes, vislumbradas por sus sucesores. En efecto, el Papa 49 previó las consecuencias negativas —bajo todos los aspectos, político, social, y económico— de un ordenamiento de la sociedad tal como lo proponía el «socialismo», que entonces se hallaba todavía en el estadio de filosofía social y de movimiento más o menos estructurado. Algunos se podrían sorprender de que el Papa criticara las soluciones que se daban a la «cuestión obrera» comenzando por el socialismo, cuando éste aún no se presentaba —como sucedió más tarde— bajo la forma de un Estado fuerte y poderoso, con todos los recursos a su disposición. Sin embargo, él supo valorar justamente el peligro que representaba para las masas ofrecerles el atractivo de una solución tan simple como radical de la cuestión obrera de entonces. Esto resulta más verdadero aún, si lo comparamos con la terrible condición de injusticia en que versaban las masas proletarias de las naciones recién industrializadas(...).Es necesario subrayar aquí dos cosas: por una parte, la gran lucidez en percibir, en toda su crudeza, la verdadera condición de los proletarios, hombres, mujeres y niños; por otra, la no menor claridad en intuir los males de una solución que, bajo la apariencia de una inversión de posiciones entre pobres y ricos, en realidad perjudicaba a quienes se proponía ayudar. De este modo el remedio venía a ser peor que el mal. Al poner de manifiesto que la naturaleza del socialismo de su tiempo estaba en la supresión de la propiedad privada, León XIII llegaba de veras al núcleo de la cuestión(...).Merecen ser leídas con atención sus palabras: «Para solucionar este mal (la injusta distribución de las riquezas junto con la miseria de los proletarios) los socialistas instigan a los pobres al odio contra los ricos y tratan de acabar con la propiedad privada estimando mejor que, en su lugar, todos los bienes sean comunes; pero esta teoría es tan inadecuada para resolver la cuestión, que incluso llega a perjudicar a las propias clases obreras; y es además sumamente injusta, pues ejerce violencia contra los legítimos poseedores, altera la misión del Estado y perturba fundamentalmente todo el orden social». No se podían indicar mejor los males acarreados por la instauración de este tipo de socialismo como sistema de Estado, que sería llamado más adelante «socialismo real»(...). 50 Desaparece el individuo en la masa Ahondando ahora en esta reflexión y haciendo referencia a lo que ya se ha dicho en las encíclicas Laborem exercens y Sollicitudo rei socialis, hay que añadir aquí que el error fundamental del socialismo es de carácter antropológico. Efectivamente, considera a todo hombre como un simple elemento y una molécula del organismo social, de manera que el bien del individuo se subordina al funcionamiento del mecanismo económico-social. Por otra parte, considera que este mismo bien puede ser alcanzado al margen de su opción autónoma, de su responsabilidad asumida, única y exclusiva, ante el bien o el mal. El hombre queda reducido así a una serie de relaciones sociales, desapareciendo el concepto de persona como sujeto autónomo de decisión moral, que es quien edifica el orden social, mediante tal decisión. De esta errónea concepción de la persona provienen la distorsión del derecho, que define el ámbito del ejercicio de la libertad, y la oposición a la propiedad privada. El hombre, en efecto, cuando carece de algo que pueda llamar «suyo» y no tiene posibilidad de ganar para vivir por su propia iniciativa, pasa a depender de la máquina social y de quienes la controlan, lo cual le crea dificultades mayores para reconocer su dignidad de persona y entorpece su camino para la constitución de una auténtica comunidad humana (...).Por el contrario, de la concepción cristiana de la persona se sigue necesariamente una justa visión de la sociedad. Según la Rerum novarum y la doctrina social de la Iglesia, la socialidad del hombre no se agota en el Estado, sino que se realiza en diversos grupos intermedios, comenzando por la familia y siguiendo por los grupos económicos, sociales, políticos y culturales, los cuales, como provienen de la misma naturaleza humana, tienen su propia autonomía, sin salirse del ámbito del bien común. Es a esto a lo que he llamado «subjetividad de la sociedad» la cual, junto con la subjetividad del individuo, ha sido anulada por el socialismo real(...). 51 criminal lucha de clases De la misma raíz brota también la elección de los medios de acción propia del socialismo, condenado en la Rerum novarum. Se trata de la lucha de clases. El Papa, ciertamente, no pretende condenar todas y cada una de las formas de conflictividad social. La Iglesia sabe muy bien que, a lo largo de la historia, surgen inevitablemente los conflictos de intereses entre diversos grupos sociales y que frente a ellos el cristiano no pocas veces debe pronunciarse con coherencia y decisión. Por lo demás, la encíclica Laborem exercens ha reconocido claramente el papel positivo del conflicto cuando se configura como «lucha por la justicia social».Ya en la Quadragesimo anno se decía: «En efecto, cuando la lucha de clases se abstiene de los actos de violencia y del odio recíproco, se transforma poco a poco en una discusión honesta, fundada en la búsqueda de la justicia»(....). Lo que se condena en la lucha de clases es la idea de un conflicto que no está limitado por consideraciones de carácter ético o jurídico, que se niega a respetar la dignidad de la persona en el otro y por tanto en sí mismo, que excluye, en definitiva, un acuerdo razonable y persigue no ya el bien general de la sociedad, sino más bien un interés de parte que suplanta al bien común y aspira a destruir lo que se le opone. Se trata, en una palabra, de presentar de nuevo —en el terreno de la confrontación interna entre los grupos sociales— la doctrina de la «guerra total», que el militarismo y el imperialismo de aquella época imponían en el ámbito de las relaciones internacionales. Tal doctrina, que buscaba el justo equilibrio entre los intereses de las diversas naciones, sustituía a la del absoluto predominio de la propia parte, mediante la destrucción del poder de resistencia del adversario, llevada a cabo por todos los medios, sin excluir el uso de la mentira, el terror contra las personas civiles, las armas destructivas de masa, que precisamente en aquellos años comenzaban a proyectarse. La lucha de clases en sentido marxista y el militarismo tienen, pues, las mismas raíces: el ateísmo y el desprecio de la persona humana, que hacen 52 prevalecer el principio de la fuerza sobre el de la razón y del derecho.” Cualquier semejanza con nuestra realidad ¿es pura coincidencia? 53 Capítulo XIV: Socialistas y asesinos El 13 de mayo de 1981, el turco Alí Mehmet Agca, contratado por los comunistas búlgaros –que obedecían directrices de Moscú- disparó en repetidas ocasiones contra el Papa Juan Pablo II. Lo hirió en el vientre, en el codo derecho y en el dedo índice de su mano izquierda. Las balas también lesionaron a otras dos personas que se encontraban en la plaza de San Pedro en Ciudad del Vaticano. El anciano líder de la Iglesia Católica se había convertido en una amenaza contra el socialismo, impuesto a sangre y fuego, en los países de Europa del este, una vez culminada la Segunda Guerra Mundial. Las bases de este modelo de sociedad descansaban -para el momento de resultar electo Papa Karol Wojtyla- sobre 100 millones de cadáveres. Entre las naciones sometidas por la bota del militarismo colectivista se encontraba su Polonia natal, país al que sirvió, primero como sacerdote, luego como obispo, arzobispo y finalmente como Cardenal de Cracovia. Dos años antes del atentado, en junio de 1979, el Papa había ido a su tierra natal, todavía sometida –como ya dijimosa la dictadura socialista. La mayoría de los analistas políticos de occidente coinciden en que este hecho marcó el principio del fin del imperio socialista, desmoronado sólo diez años después. De allí el odio que le tenían al Santo Padre, porque, ciertamente, sus palabras y su liderazgo mundial significaron una amenaza cierta al modelo totalitario que hacía aguas debido a su fracaso en lo económico, en lo social y en lo político. A continuación ofrecemos esta segunda entrega de la encíclica “Centesimus annus”, publicada en 1991 en conmemoración de los cien años de la Carta Papal “Rerum novarum” de León XIII, quien advirtió sobre las terribles consecuencias de la implantación del socialismo en el mundo. Allí Juan Pablo Segundo, de 54 la mano de su predecesor, continúa evaluando lo que ya había sufrido como testigo de excepción en la Polonia socialista: “La Rerum novarum se opone a la estatalización de los medios de producción, que reduciría a todo ciudadano a una «pieza» en el engranaje de la máquina estatal. Con no menor decisión critica una concepción del Estado que deja la esfera de la economía totalmente fuera del propio campo de interés y de acción. Existe ciertamente una legítima esfera de autonomía de la actividad económica, donde no debe intervenir el Estado. A éste, sin embargo, le corresponde determinar el marco jurídico dentro del cual se desarrollan las relaciones económicas y salvaguardar así las condiciones fundamentales de una economía libre, que presupone una cierta igualdad entre las partes, no sea que una de ellas supere talmente en poder a la otra que la pueda reducir prácticamente a esclavitud. A este respecto, la Rerum novarum señala la vía de las justas reformas, que devuelven al trabajo su dignidad de libre actividad del hombre. Son reformas que suponen, por parte de la sociedad y del Estado, asumirse las responsabilidades en orden a defender al trabajador contra el íncubo del desempleo. Históricamente esto se ha logrado de dos modos convergentes: con políticas económicas, dirigidas a asegurar el crecimiento equilibrado y la condición de pleno empleo; con seguros contra el desempleo obrero y con políticas de cualificación profesional, capaces de facilitar a los trabajadores el paso de sectores en crisis a otros en desarrollo. Por otra parte, la sociedad y el Estado deben asegurar unos niveles salariales adecuados al mantenimiento del trabajador y de su familia, incluso con una cierta capacidad de ahorro. Esto requiere esfuerzos para dar a los trabajadores conocimientos y aptitudes cada vez más amplios, capacitándolos así para un trabajo más cualificado y productivo; pero requiere también una asidua vigilancia y las convenientes medidas legislativas para acabar con fenómenos vergonzosos de explotación, sobre todo en perjuicio de los trabajadores más débiles, inmigrados o marginales. En este sector es decisivo el papel de los sindicatos que 55 contratan los mínimos salariales y las condiciones de trabajo. En fin, hay que garantizar el respeto por horarios «humanos» de trabajo y de descanso, y el derecho a expresar la propia personalidad en el lugar de trabajo, sin ser conculcados de ningún modo en la propia conciencia o en la propia dignidad. Hay que mencionar aquí de nuevo el papel de los sindicatos no sólo como instrumentos de negociación, sino también como «lugares» donde se expresa la personalidad de los trabajadores: sus servicios contribuyen al desarrollo de una auténtica cultura del trabajo y ayudan a participar de manera plenamente humana en la vida de la empresa (....) “El odio y la injusticia se apoderan de naciones enteras, impulsándolas a la acción, sólo cuando son legitimados y organizados por ideologías que se fundan sobre ellos en vez de hacerlo sobre la verdad del hombre”. La Rerum novarum combatía las ideologías que llevan al odio e indicaba la vía para vencer la violencia y el rencor mediante la justicia. Ojalá el recuerdo de tan terribles acontecimientos guíe las acciones de todos los hombres, en particular las de los gobernantes de los pueblos, en estos tiempos nuestros en que otras injusticias alimentan nuevos odios y se perfilan en el horizonte nuevas ideologías que exaltan la violencia (...) Entre los numerosos factores de la caída de los regímenes opresores, algunos merecen ser recordados de modo especial. El factor decisivo que ha puesto en marcha los cambios es sin duda alguna la violación de los derechos del trabajador. No se puede olvidar que la crisis fundamental de los sistemas que pretenden ser expresión del gobierno y, lo que es más, de la dictadura del proletariado da comienzo con las grandes revueltas habidas en Polonia en nombre de la solidaridad. Son las muchedumbres de los trabajadores las que desautorizan la ideología, que pretende ser su voz; son ellas las que encuentran y como si descubrieran de nuevo expresiones y principios de la doctrina social de la Iglesia, partiendo de la experiencia, vivida y difícil, del trabajo y de la opresión (....). Merece ser subrayado también el hecho de que casi en todas partes se haya llegado a la caída de semejante «bloque» o imperio a través de una lucha pacífica, que emplea solamente las armas de la verdad y de la justicia. Mientras el 56 marxismo consideraba que únicamente llevando hasta el extremo las contradicciones sociales era posible darles solución por medio del choque violento, las luchas que han conducido a la caída del marxismo insisten tenazmente en intentar todas las vías de la negociación, del diálogo, del testimonio de la verdad, apelando a la conciencia del adversario y tratando de despertar en éste el sentido de la común dignidad humana (...) Los acontecimientos del año 1989 han tenido lugar principalmente en los países de Europa oriental y central; sin embargo, revisten importancia universal, ya que de ellos se desprenden consecuencias positivas y negativas que afectan a toda la familia humana(...). En la crisis del marxismo brotan de nuevo las formas espontáneas de la conciencia obrera, que ponen de manifiesto una exigencia de justicia y de reconocimiento de la dignidad del trabajo, conforme a la doctrina social de la Iglesia. El Movimiento obrero desemboca en un movimiento más general de los trabajadores y de los hombres de buena voluntad, orientado a la liberación de la persona humana y a la consolidación de sus derechos; hoy día está presente en muchos países y, lejos de contraponerse a la Iglesia católica, la mira con interés (...) La crisis del marxismo no elimina en el mundo las situaciones de injusticia y de opresión existentes, de las que se alimentaba el marxismo mismo, instrumentalizándolas. La segunda consecuencia afecta a los pueblos de Europa. En los años en que dominaba el comunismo, y también antes, se cometieron muchas injusticias individuales y sociales, regionales y nacionales; se acumularon muchos odios y rencores (...). Naturalmente, la caída del marxismo ha tenido consecuencias de gran alcance por lo que se refiere a la repartición de la tierra en mundos incomunicados unos con otros y en recelosa competencia entre sí; por otra parte, ha puesto más de manifiesto el hecho de la interdependencia, así como que el trabajo humano está destinado por su naturaleza a unir a los pueblos y no a dividirlos. Efectivamente, la paz y la prosperidad son bienes que pertenecen a todo el género humano, de manera que no es posible gozar de ellos correcta y duraderamente si son obtenidos y mantenidos en perjuicio de otros pueblos y naciones, violando sus 57 derechos o excluyéndolos de las fuentes del bienestar(....) Para algunos países de Europa comienza ahora, en cierto sentido, la verdadera postguerra. La radical reestructuración de las economías, hasta ayer colectivizadas, comporta problemas y sacrificios, comparables con los que tuvieron que imponerse los países occidentales del continente para su reconstrucción después del segundo conflicto mundial. Es justo que en las presentes dificultades los países ex comunistas sean ayudados por el esfuerzo solidario de las otras naciones: obviamente, han de ser ellos los primeros artífices de su propio desarrollo; pero se les ha de dar una razonable oportunidad para realizarlo, y esto no puede lograrse sin la ayuda de los otros países. Por lo demás, las actuales condiciones de dificultad y penuria son la consecuencia de un proceso histórico, del que los países ex-comunistas han sido a veces objeto y no sujeto; por tanto, si se hallan en esas condiciones no es por propia elección o a causa de errores cometidos, sino como consecuencia de trágicos acontecimientos históricos impuestos por la violencia, que les han impedido proseguir por el camino del desarrollo económico y civil.” 58 Capítulo XV: Conceptos excluyentes No se puede ser socialista y cristiano. Son cosmovisiones irreconciliables. Quien diga que sí es posible es, simplemente, un comunista que se hace pasar por cristiano. Lobo vestido de oveja. El mismo Jesús, en su evangelio, advirtió que ocurriría. Solamente con evaluar lo que le ha pasado a muchos cristianos (entre ellos monjas, curas, pastores protestantes y obispos) es suficiente para constatarlo. Porque el cristiano ama la libertad, la tolerancia y el respeto al otro. Estimula el libre albedrío y llama a la conversión (cambio de vida) sincera, sin imposiciones. Es cierto que el ser cristiano tampoco se amolda fácilmente hacia otros tipos de organización de la sociedad, sobre todo si en ella hay abusos, injusticias y explotación. Ante todo ama la paz (y el socialismo invoca la lucha de clases que se sustenta en el aniquilamiento del otro). Por eso quien le asegura que Jesús fue socialista es un mentiroso, un manipulador. El comunismo es un virus que aparece, sobre todo, en aquellas sociedades humanas debilitadas por la enorme pobreza de un vasto número de sus pobladores. Como todo buen virus, muta para engañar el sistema inmunológico de las organizaciones humanas y destruirlas desde su interior. Su último cambio es querer aparecer, no sólo como si no fuera atea (socialismo es ateo. Lo dijeron sus fundadores Marx, Engels, Lenín y Mao), sino disfrazarla con un ropaje de cristianismo. Y utiliza a algunos curas confundidos o manipulados a través de la codicia. A punta de dinero, que es lo que le sobra a este régimen perverso que se ha enquistado en Venezuela usufructuando los petrodólares que paga puntualmente el “imperio”, es que pretende quedarse para siempre. Sobran los ejemplos de las persecuciones sufridas por los cristianos en 59 regímenes socialistas de la Unión Soviética, China ( aún es un delito profesar la fe cristiana allí), Vietnam, Camboya. Albania, Alemania Oriental y Cuba, donde ha habido una tímida apertura (sólo en el aspecto litúrgico, mas no de los derechos humanos) después de la visita realizada por el Papa Juan Pablo Segundo a la isla. Debido al papel histórico que ha cumplido este Papa de origen polaco, es que ofrecemos a ustedes la tercera entrega de la Encíclica “Centesimus annus” en honor a su predecesor Leon XII, quien en 1891 advirtió de los males que llegarían al mundo de la mano del socialismo: ¿Socialista y cristiano? ¡Qué va! “De este proceso histórico ( la caída del socialismo en Europa) han surgido nuevas formas de democracia, que ofrecen esperanzas de un cambio en las frágiles estructuras políticas y sociales, gravadas por la hipoteca de una dolorosa serie de injusticias y rencores, aparte de una economía arruinada y de graves conflictos sociales(...) El segundo factor de crisis es, en verdad, la ineficiencia del sistema económico, lo cual no ha de considerarse como un problema puramente técnico, sino más bien como consecuencia de la violación de los derechos humanos a la iniciativa, a la propiedad y a la libertad en el sector de la economía. A este aspecto hay que asociar en un segundo momento la dimensión cultural y la nacional. No es posible comprender al hombre, considerándolo unilateralmente a partir del sector de la economía, ni es posible definirlo simplemente tomando como base su pertenencia a una clase social. Al hombre se le comprende de manera más exhaustiva si es visto en la esfera de la cultura a través de la lengua, la historia y las actitudes que asume ante los acontecimientos fundamentales de la existencia, como son nacer, amar, trabajar, morir(...). Por esto, la lucha por la defensa del trabajo se ha unido espontáneamente a la lucha por la cultura y por los derechos nacionales. La verdadera causa de las «novedades», sin embargo, es el vacío espiritual provocado por el ateísmo(...) 60 Socialismo es ateo (aunque pretenda disimularlo su discurso) El marxismo había prometido desenraizar del corazón humano la necesidad de Dios; pero los resultados han demostrado que no es posible lograrlo sin trastocar ese mismo corazón (...)Sin embargo, no se pueden ignorar los innumerables condicionamientos, en medio de los cuales viene a encontrarse la libertad individual a la hora de actuar: de hecho la influencian, pero no la determinan; facilitan más o menos su ejercicio, pero no pueden destruirla. No sólo no es lícito desatender desde el punto de vista ético la naturaleza del hombre que ha sido creado para la libertad, sino que esto ni siquiera es posible en la práctica. Donde la sociedad se organiza reduciendo de manera arbitraria o incluso eliminando el ámbito en que se ejercita legítimamente la libertad, el resultado es la desorganización y la decadencia progresiva de la vida social(...).De hecho, donde el interés individual es suprimido violentamente, queda sustituido por un oneroso y opresivo sistema de control burocrático que esteriliza toda iniciativa y creatividad. Cuando los hombres se creen en posesión del secreto de una organización social perfecta que hace imposible el mal, piensan también que pueden usar todos los medios, incluso la violencia o la mentira, para realizarla. La política se convierte entonces en una «religión secular», que cree ilusoriamente que puede construir el paraíso en este mundo(....) En la crisis del marxismo brotan de nuevo las formas espontáneas de la conciencia obrera, que ponen de manifiesto una exigencia de justicia y de reconocimiento de la dignidad del trabajo, conforme a la doctrina social de la Iglesia.(...) La crisis del marxismo no elimina en el mundo las situaciones de injusticia y de opresión existentes, de las que se alimentaba el marxismo mismo, instrumentalizándolas(...) 61 Socialismo acentúa la alienación El marxismo ha criticado las sociedades burguesas y capitalistas, reprochándoles la mercantilización y la alienación de la existencia humana. El marxismo acaba afirmando así que sólo en una sociedad de tipo colectivista podría erradicarse la alienación. Ahora bien, la experiencia histórica de los países socialistas ha demostrado tristemente que el colectivismo no acaba con la alienación, sino que más bien la incrementa, al añadirle la penuria de las cosas necesarias y la ineficacia económica(....)A esta concepción ( la que respeta la libertad y los derechos humanos) se ha opuesto en tiempos modernos el totalitarismo, el cual, en la forma marxista-leninista, considera que algunos hombres, en virtud de un conocimiento más profundo de las leyes de desarrollo de la sociedad, por una particular situación de clase o por contacto con las fuentes más profundas de la conciencia colectiva, están exentos del error y pueden, por tanto, arrogarse el ejercicio de un poder absoluto. A esto hay que añadir que el totalitarismo nace de la negación de la verdad en sentido objetivo(....)La cultura y la praxis del totalitarismo comportan además la negación de la Iglesia. El Estado, o bien el partido, que cree poder realizar en la historia el bien absoluto y se erige por encima de todos los valores, no puede tolerar que se sostenga un criterio objetivo del bien y del mal, por encima de la voluntad de los gobernantes y que, en determinadas circunstancias, puede servir para juzgar su comportamiento. Esto explica por qué el totalitarismo trata de destruir la Iglesia o, al menos, someterla, convirtiéndola en instrumento del propio aparato ideológico. El Estado totalitario tiende, además, a absorber en sí mismo la nación, la sociedad, la familia, las comunidades religiosas y las mismas personas. Defendiendo la propia libertad, la Iglesia defiende la persona, que debe obedecer a Dios antes que a los hombres (cf. Hch 5, 29); defiende la familia, las 62 diversas organizaciones sociales y las naciones, realidades todas que gozan de un propio ámbito de autonomía y soberanía. Iglesia y Democracia La Iglesia aprecia el sistema de la democracia, en la medida en que asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus propios gobernantes, o bien la de sustituirlos oportunamente de manera pacífica . Por esto mismo, no puede favorecer la formación de grupos dirigentes restringidos que, por intereses particulares o por motivos ideológicos, usurpan el poder del Estado. Una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho y sobre la base de una recta concepción de la persona humana. Requiere que se den las condiciones necesarias para la promoción de las personas concretas, mediante la educación y la formación en los verdaderos ideales, así como de la «subjetividad» de la sociedad mediante la creación de estructuras de participación y de corresponsabilidad (....)Una democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto, como demuestra la historia.(...) Estas consideraciones generales se reflejan también sobre el papel del Estado en el sector de la economía. La actividad económica, en particular la economía de mercado, no puede desenvolverse en medio de un vacío institucional, jurídico y político. Por el contrario, supone una seguridad que garantiza la libertad individual y la propiedad, además de un sistema monetario estable y servicios públicos eficientes. La primera incumbencia del Estado es, pues, la de garantizar esa seguridad, de manera que quien trabaja y produce pueda gozar de los frutos de su trabajo y, por tanto, se sienta estimulado a realizarlo eficiente y honestamente. La falta de seguridad, junto con la corrupción de los poderes públicos y la proliferación de fuentes impropias de enriquecimiento y de beneficios fáciles, basados en actividades ilegales o puramente especulativas, es uno de los obstáculos principales para el desarrollo y para el orden económico.” 63 Otra incumbencia del Estado es la de vigilar y encauzar el ejercicio de los derechos humanos en el sector económico; pero en este campo la primera responsabilidad no es del Estado, sino de cada persona y de los diversos grupos y asociaciones en que se articula la sociedad. El Estado no podría asegurar directamente el derecho a un puesto de trabajo de todos los ciudadanos, sin estructurar rígidamente toda la vida económica y sofocar la libre iniciativa de los individuos. 64 Hora Tercia: Me parece estar dormido Me parece estar dormido. Viviendo en sueños lo que pasa. Energúmenos fanáticos pidiendo a gritos que nos entreguemos para ser carne enlatada. Pájaros en jaula comprada con verdes billetes. Me parece estar dormido. Y nadie me pellizca o grita desde fuera para hacerme despertar y cerciorarme que la patria de Bolívar no regresa sobre sus pasos para volver a la monarquía superada, enterrada en el pasado. Cuando quemaban a hombres y mujeres, como teas, en la hoguera por manifestar certezas o cualquier cosa que afectara la versión “oficial” del supersticioso omnipotente. Y morían esos seres vomitando alaridos por experimentar lo absurdo de ser aniquilados por defender ideas, expresar palabras que caminan y construyen mundos nuevos, creer en posibilidades ciertas de cosas y hechos que están aún por verse. Las llamas que pretenden incinerar las ideas, cuando estas son autónomas y huyen escurridizas, para posarse, cuál mariposas, sobre cabezas de otros que dirán lo mismo hasta que, nuevamente, sean pasto de las llamas de la ignorancia que apuesta a la muerte compartida, igualitaria. Como si las ideas no fueran seres vivos, y simplemente los pensantes somos vitrinas para verlas. Y así el pensamiento prosigue en cadena imposible de romper porque eso es la libertad a la que sólo el que nació hombre (varón y varona) apuesta, sin resignar su futuro y el de otros que siguen sus huellas, para luego hacer caminos propios, únicos, irrepetibles. Me parece estar dormido. Y en esta pesadilla que aplasta cual choque de planetas, sueño que se van desvaneciendo los colores y todo queda rojo sangre con matices que se acentúan sólo por el odio, con olor a carne pútrida que no se aleja nunca. Cementerios fangosos de osamentas con carne, rictus de la muerte, testimonio fiel de barbaries cometidas en un pasado reciente. Y me ahogo y trato de buscar nuevamente el aire puro, y salir a espacios donde el verde sea verde y 65 no rojo, y el amarillo del turpial, o de la margarita, aún lo sea, y no púrpura inclemente, con calor que destruye, agota, deja estéril a todo el que se acerca, que no sólo que afecta al sexo de unos y de otros, sino de las ideas que mueren cual hojas secas con el mismo color de oscuridad que baña todo, cual pegoste que no sale con nada que le eches. La maldición de Moisés al faraón egipcio, pero en lugar de convertir sólo las aguas en sangre, todo se torna como supernova que está por fenecer y se traga autoritaria a todos los planetas que la rodean, para finalizar siendo un punto de la nada, hecho microscópico polvo de destrucción y muerte. Me parece estar dormido. Veo los labios moverse, los brazos y manos agitarse, pronunciando silencios para siempre. Masas amorfas de cuerpos vacíos que caminan, autómatas repitiendo credos de religiones del pasado, en dioses que demostraron ser quimeras. Sonidos ensordecedores de cañones que disparan, sangre que bulle de seres perforados con balas rusas, o españolas, adquiridas con dólares del imperio. Mueren jóvenes que sembraron sueños y se marchita el retoño que surge porque desapareció la tierra fértil, abonada con ilusiones, metas, futuro que no existe porque la estupidez impuesta obligó a retroceder hacia el pasado. Me parece estar dormido. Y aún no despierto. El sol de sangre joven Pero asoma un sol resplandeciente. Pese a todos los augurios, almas libres luchan sin cesar y no le temen a la muerte, porque ella sólo existe cuando la libertad deja de ser un don presente. Minutos antes de amanecer, se intuyen los albores de la luz que pronto recobrará con fuerza todo, y volverán a aparecer los colores porque un prisma fresco, transparente, distribuye luz que sólo pueden verla aquellos corazones nobles y genuinos. El azul del cielo y del mar que son espejos, los verdes de la naturaleza, el amarillo y el naranja se mezclan para lograr tonalidades, el violeta y también el plateado o el oro que encandilan a todos los que ven. La diversidad en la unidad que nos hace uno y muchos, distintos e iguales sólo en la existencia. Y también en los mismos derechos que nos damos en conjunto, como 66 sociedad pacífica y de sana convivencia. Manos blancas que se alzan abiertas al unísono, y que esconden detrás almas genuinas, de hombres y mujeres que sueñan con una patria posible y distinta a la que hoy y ayer existen convivientes. El futuro hecho presente y que quiere dejar lo malo del pasado. Y eso es posible solamente en libertad, que siempre es una conquista. Y no debe darse nunca como tácita o sobrentendida. Los niños deben ser educados para defenderla, a pesar de los macacos con fusiles y también de sus cañones, sus aviones y bombas incendiarias comprados con dinero venido desde lejos. De su “reserva” de tostadoras alineadas, licuadoras que marchan a la par de un grito: “uno, dos…uno, dos”, que funcionan luego de apretar un botón que le da órdenes, con armas en el cinto incorporadas. Diciendo “camaradas” a los de rangos superiores (como si ese otro aparato que se activa también con un dedo, así tenga estrellas o insignias más lustrosas, pudieran ser llamados mayor, general o comandante). Es la lucha de luz y oscuridad la que se edita nuevamente. Como película de cine continuado. Que pasa el mismo film una y otra vez. Y vemos a Ava Gardner, Humphrey Bogart o a cualquier actor de películas viejas y amarillas sepia, en un sin fin de repeticiones que aparecen cada vez que la ignorancia toma fuerzas y es preciso salir a dar una nueva batalla, en la lucha de la lucidez contra los bolsas que emergen de ultratumba. Y se cumple lo escrito por el sabio Einstein. Que es posible viajar por el tiempo y el espacio. Pero sólo si nos acercamos a la luz y su prisa indestructible de 300 mil kilómetros que cumple siempre en un segundo. Y antes de llegar a los confines del espacio, los hombres debemos dar saltos en el tiempo, porque la oscuridad que no se resigna a que haya luz, pretende enterrarnos en etapas prehistóricas, con olores a especies no existentes y rugidos de animales gigantescos que defecan montañas enormes de estiércol, más grandes que un camión o un carro del futuro dejado en el pasado. Así que antes de que aparezcan las naves que se acerquen a transitar con la luz de las estrellas, los hombres y mujeres libres debemos hacerlo desde el pensamiento, y buscar el rayo luminoso que sólo da 67 la libertad. Y así emprender el viaje de alcanzarla a la rapidez que sólo ella tiene. Y luego de lograrlo, vivir en la paz que da la lucidez, cuando se detienen el tiempo y el espacio, para luego aparecer, de pronto, en el futuro, un millón, un trillón de años después, y confirmar que ya podemos ir a otras galaxias a través de gusanos siderales, y la ciencia nos permite vivir casi dos siglos. Eso es posible en el mundo liberal y libérrimo de la inteligencia acumulada por la historia, que da saltos gigantescos cuando no existen zopilotes con boinas rojas y uniformes, parándose firme y corriendo para obedecer órdenes como la de servir un café o pulir botas. Obedecer a estúpidas o criminales directrices, son dos caras de la misma moneda de curso libre en la barbarie. Poder popular El “poder popular” que cacarean iracundos delincuentes, como si nunca hubiera existido antes, me lo dio mi padre, humilde oficinista de una empresa, cuando vivíamos escasos y anhelando tiempos mejores de abundancia que llegaban con gotero. Con su esfuerzo logramos, mis hermanos y yo, estudiar; hoy somos lo que somos. Poco o mucho, pero somos. Lo que pudimos ser gracias a sus desvelos y también los de mi madre, que hoy avanza lentamente a pasos torpes, lerdos, pese a que su alma límpida sigue intacta, luchando por alcanzar cúspides solo accesibles a los que llegan transparentes cuando se acerca el salto hacia la otra dimensión que da la muerte. Ese es el verdadero poder que necesita el pueblo. El de soñar y colocar el germen de lo posible, si no en ellos, en sus hijos y nietos para lograr un sembradío que florecerá y dará frutos a tiempo, al veinte, al cincuenta, o al ciento por uno. De poder ser, para todos los que salieron de su sangre y vientre. En libertad –que es la única forma de lograrlo- para impulsar siempre los cambios necesarios. No volver a la era glacial que congelaba todo. Mentes que murieron por un cielo inexistente. Prometido antes para seres que hoy no son y que fueron testigos, de que el socialismo es sólo fantasía que beneficia solamente a quien detenta el omnímodo poder y su séquito conformado por aquellos que se atreven a lamer los calcetines de su amo. Esa es la meta a cumplir 68 a toda costa, apostando siempre por la paz negada por los ciegos. Para que no se consolide ese tétrico proyecto de convertirnos a todos en carne congelada, que uniforme la existencia rojo sangre, con los únicos matices que da el odio. Que podamos elegir y ser electos. Que nuestros hijos puedan estudiar donde queramos. Que recen al dios de Abraham, de Jesucristo o de Confucio, sin ningún otro impedimento que aquellos que pongan las leyes que son las que nos igualan como seres con cerebro. Que la propiedad obtenida honestamente, sea poca, mediana o con exceso (si es que lo logrado con afán pueda así denominarse) sea nuestra y podamos heredarlas a los que vienen detrás con paso cierto. Que sea posible estar organizados, sin que nadie meta su nariz en lo que hacemos. Todo eso está en juego, a la hora de salir a defender lo nuestro, logrado con sangre y sacrificio, por hombres sepultados en el pasado reciente (porque el tiempo es un invento de los vivos), y que ven desde el Olimpo lo que hacemos. Para cerciorarse si somos ilustres herederos o despilfarramos sus esfuerzos en juergas y parrandas de embusteros. Por eso muy temprano, para poder despertar de este sueño que aplasta, atolondra y atormenta, diré “No” confiadamente. Para sumar voluntades por lo bueno, pues es la salida cierta que tenemos. Para luego poder mirar confiadamente los limpios ojos de mis hijos que preguntarán “Papá, ¿qué tienes?”. “No tengo nada, hijos. Es sólo que salí a defender lo nuestro. Lo demás lo hizo el milagro de confiar en la gente, que no resignó su libertad a los demonios recurrentes”. Y respiraré en paz, al abrir los ojos, y recobrar la Venezuela que ya no se nos irá por el retrete. 69 Capítulo XVI: Socialismo, enemigo de los trabajadores Chacumbele es un personaje tomado de la realidad cubana. Él mismito se mató, reza la letra de una canción en esa isla caribeña. Buscando los orígenes de esta historia en una página sobre música latinoamericana, encontramos lo siguiente: “se supone que fue un hombre muy mujeriego que vivió en La Habana a principios del siglo XX y del cual una mujer se enamoró perdidamente. El tal Chacumbele se le corría con otras y en una de esas, la mujer emberrenchinada con el dichoso hombre, lo persiguió por las calles de La Habana, hasta que lo encontró con otra y lo cosió a puñaladas. De esa historia, surgió una canción que cantó Miguelito Valdés y luego el dicharacho de que “el mismito se mató como Chacumbele”, lo cual implica, que la persona con sus actos se busca la muerte”. Muy pertinente por lo que pretenden hacer buena parte de los mal llamados sindicalistas nuestros que están amolando, con el llamado “Socialismo del Siglo XXI”, el cuchillo para su garganta. Me explico: la Constitución de la República de Cuba, “mar de la felicidad” según el Presidente Hugo Chávez, expresa lo siguiente: “Art. 1. La República de Cuba es un Estado socialista de obreros y campesinos y demás trabajadores manuales e intelectuales. Art. 4. En la República de Cuba todo el poder pertenece al pueblo trabajador que lo ejerce por medio de las Asambleas del Poder Popular y demás órganos del Estado que de ellas derivan, o bien directamente. El Poder del pueblo trabajador se sustenta en la firme alianza de la clase obrera con los campesinos y las demás capas trabajadoras de la ciudad y el campo, bajo la dirección de la clase 70 obrera” Todo, hasta aquí, va muy bien. Muy bonita la serenata. Sigamos: “Art. 5. El Partido Comunista de Cuba, vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera, es la fuerza dirigente de la sociedad y del Estado, que organiza y orienta los esfuerzos comunes hacia los altos fines de la construcción del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista.” Ya comienza a aparecer el PUS de allá (Partido Único Socialista) y su papel estrangulador del pluralismo ideológico. Continuemos: “Art. 7. El Estado socialista cubano reconoce, protege y estimula a las organizaciones sociales y de masas, como la Central de Trabajadores de Cuba, que comprende en sus filas a la clase fundamental de nuestra sociedad, los Comités de Defensa de la Revolución, la Federación de Mujeres Cubanas, la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, la Federación Estudiantil Universitaria, la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, la Unión de Pioneros de Cuba y otras que, surgidas en el proceso histórico de las luchas de nuestro pueblo, agrupan en su seno a los distintos sectores de la población, representan intereses específicos de éstos y los incorporan a las tareas de la edificación, consolidación y defensa de la sociedad socialista” Es decir, que todo, incluyendo el sector laboral y productivo, está controlado por el Estado Socialista. No hay autonomía del movimiento sindical. Los sindicatos bajo la égida del PUS cubano y del aplastante aparato estatal cubano) quedan controlados por el Jefe Máximo, Fidel Castro. El sindicalismo cubano no existe Sindicalismo y autonomía van de la mano. Si el Estado controla a los sindicatos (tal como ocurre actualmente en Cuba y pretende imponerse en Venezuela), tal sindicalismo es sólo nominal. Una vez consolidado en el poder Fidel Castro, vació de toda condición de autonomía e independencia a la Central de Trabajadores de Cuba, al ser absorbida por el PUS (Partido Comunista Cubano) y convertirla en 71 un apéndice de la política totalitaria estatal castrista. Ninguna decisión se tomó, luego de este cambio esencial, sin la aprobación del dictador y de su instrumento, el llamado Partido de la Revolución Socialista. Además, toda actividad de rebeldía o disidencia fue castigada de forma implacable por el régimen cubano. Son muchos los casos de detenciones arbitrarias y juicios contra dirigentes sindicales que han osado impulsar movimientos u organizaciones sindicales autónomas en la isla. De esta forma, se destaca el arresto y condena de prisión de los dirigentes sindicales cubanos. Estas sanciones fueron impuestas por los tribunales “rojos, rojitos” en 2003, cuando comenzaron a aparecer algunas iniciativas que buscaban la autonomía sindical: *Carmelo Díaz Fernández, 63 años de edad. Presidente de la Unión Sindical Cristiana y subdirector del Centro Nacional de Capacitación Sindical y Laboral. 16 años de prisión. *Miguel Galván Gutiérrez, 38 años de edad. Miembro del ejecutivo del Centro Nacional de Capacitación Sindical y Laboral. 26 años de prisión. *Pedro Pablo Álvarez Ramos, 53 años de edad. Secretario general del Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos (CUTC). 25 años de prisión. *Alfredo Felipe Fuentes, delegado del Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos en la provincia de La Habana. 26 años de prisión. *Nelson Molinet Espino, 37 años de edad. Presidente de la Confederación de Trabajadores Democráticos de Cuba. 20 años de prisión. *Héctor Raúl Valle Fernández, 35 años de edad. Vicepresidente de la Confederación de Trabajadores Democráticos de Cuba. 12 años de prisión. 72 *Iván Carrillo Hernández. Miembro del Comité Ejecutivo de la Confederación Obrera Nacional Independiente de Cuba. 25 años de prisión. *Oscar Espinoza Chepe, miembro del CUTC. 20 años de prisión. El único delito que cometieron fue el haberse atrevido a organizar los trabajadores fuera del PUS (Partido Comunista Cubano) y exigir reivindicaciones laborales al patrón, es decir, al Estado Cubano que lo controla todo. El sindicalismo es libre y autónomo Desde el mismo mes de marzo del 2003, estos sindicalistas independientes de Cuba han sentido la solidaridad de organizaciones internacionales o nacionales en el exilio como son la Central Latinoamericana de Trabajadores, CLAT y la Confederación Mundial de Trabajadores, CMT, a las cuales está afiliado el CUTC. La Organización Internacional del Trabajo, OIT, en su informe del Comité de Libertad Sindical publicado en noviembre de 2003, recoge la denuncia de su afiliada, la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL) que asevera “que las autoridades cubanas sólo reconocen una central sindical, la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) fuertemente controlada por el Estado y el Partido Comunista que designa a sus líderes. El Gobierno prohíbe los sindicatos independientes. La negociación colectiva no existe. El derecho a la huelga no está autorizado por ley y prácticamente no existe. El Gobierno no ha cumplido aún con las promesas de reformar el código laboral. En la realidad existen varios sindicatos independientes que desarrollan sus actividades en un ambiente muy hostil. Es así que los trabajadores/as que tratan de unirse a estos sindicatos son perseguidos y pueden perder sus puestos de trabajo”. Por su parte, la Comisión Internacional de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA), señaló en su informe del año 2005 que “el 20 de agosto de 2005, agentes de la Seguridad del Estado allanaron el apartamento de la señora Maybell 73 Padilla, Secretaria General Adjunta del Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos (CUCT), cuyo secretario general, Pedro Pablo Álvarez Ramos, se encuentra en prisión desde abril del 2003 cumpliendo una condena de 25 años de prisión. Según la información allegada a la Comisión, en el registro, le fue incautado a la señora Padilla un equipo FAX, documentos de su organización, periódicos nacionales y extranjeros, y dinero. Acto seguido, la dirigente sindical fue conducida a una estación policial de la ciudad de La Habana, donde le hicieron un acta de ocupación y se le informó que más adelante se le citaría. Durante el año 2005, la CIDH continuó recibiendo información sobre la situación de los derechos humanos de los trabajadores y dirigentes sindicales en Cuba. Al respecto la información refiere principalmente a las precarias condiciones a las que están sometidos los sindicalistas detenidos en marzo de 2003 y posteriormente condenados; a la restricción del derecho de libertad sindical y la continuidad de actos de hostigamiento dirigidos contra colaboradores y activistas del movimiento sindical independiente; a la forma de organización salarial de los trabajadores en Cuba y a las especiales condiciones laborales a las que estarían sometidos trabajadores de empresas estatales cubanas que ejercen sus servicios fuera del territorio nacional. En relación con la libertad de asociación, la Comisión reitera su preocupación por la existencia de una sola central sindical reconocida oficialmente y mencionada en la legislación cubana, lo cual ha sido motivo de atención permanente de la Organización Internacional del Trabajo. La Comisión desea destacar que uno de los principios rectores de la Constitución de la Organización Internacional del Trabajo, de la cual Cuba es signataria, incluye el “reconocimiento del principio de libertad sindical” como requisito indispensable para “la paz y armonía universales”. En este sentido, la Comisión considera que los actos de hostigamiento contra sindicalistas que intentan defender el derecho a la libertad sindical son contrarios a los derechos humanos”. Los trabajadores deben verse en este espejo. Este es el modelo de sociedad que se está implantando en Venezuela. El llamado “mar de la felicidad”. Más claridad, 74 imposible. Le pregunto a los trabajadores de Guayana y del país que se autodefinen como chavistas (no a los sindicaleros comprados por el gobierno que están allí a punta de real, de güisqui 18 años y camionetotas de lujo): ¿están ustedes dispuestos a vivir una situación como la que sufren sus compañeros cubanos? ¿Se arriesgan a perder todas sus reivindicaciones logradas tras años de lucha del movimiento obrero venezolano (a saber prestaciones sociales, bono nocturno, primas para la educación de los hijos, seguro de HCM, útiles escolares, juguetes en Navidad, etc.)? Estos casos concretos, denunciados por organizaciones de prestigio a nivel internacional (como la OIT y la OEA) y que recogemos en nuestro trabajo de hoy, son suficientes como para alertar de lo que viene. Permítanse un momento de silencio y reflexión. Están haciendo como Chacumbele. Como señaló el Papa Juan Pablo II ( quien enfrentó heroicamente al socialismo en Europa hasta poner en riesgo su vida) : “Despierta y reacciona. Es el momento”. 75 Capítulo XVII: Juventud sin futuro Esta lucha que tenemos contra el comunismo encarnado por Hugo Chávez Frías, la asumimos por el simple hecho de ser hombres libres que ejercemos nuestro derecho a disentir. Eso sólo puede hacerse en la democracia, tal como la conocimos hasta el ascenso al poder de este gorila acaramelado. Y nunca, para los periodistas que asumimos esta profesión en su esencia, nos fue fácil. Siempre enfrentamos situaciones de conflicto con los poderosos; fueran políticos, de sectores económicos, sociales o religiosos. Pero siempre tuvimos alternativas. Ahora no. Por primera vez, nos encontramos en un callejón sin salida. El totalitarismo busca consolidarse. El Estado que se adueña de todo y de todos. No existe sindicalismo autónomo, ni universidades ídem, ni educación laica y plural, la religión se somete a los dictámenes del déspota, el Ejército se uniforma del color que él disponga y repite las frases que ordena el caudillo. Por eso iniciamos esta lucha asumiendo riesgos enormes. Porque es demasiado lo que está en juego: la libertad que es mucho mas valiosa que la vida. Para las generaciones que se vienen levantando, el riesgo es mucho mayor porque tienen todo que perder. En ellos la libertad y la vida se identifican. El camino está por recorrer y se encuentran en una encrucijada: la autopista de la democracia o el farallón del totalitarismo despótico. De ahí que los pasos, algunos asertivos y otros no tanto, pero, en todo caso, dirigidos a impedir que se solidifique el proyecto castro-chavista, son y serán imprescindibles. Son ellos, nuestros jóvenes, los llamados a aportar la energía necesaria para aplicar el freno “de manos” necesario para detener esto. Son tres las estrategias que utiliza el titiritero de La Habana para adueñarse , de 76 forma definitiva, de nuestro futuro: la codicia ( y de ahí los enormes sueldos que cobran los “jóvenes” representantes del chavismo, “empresarios” dispuestos a vender su arma al Diablo), el miedo (y por eso las amenazas de muerte que se ciernen contra quienes nos oponemos a este modelo genocida) y la ignorancia ( representada por ese pueblo esperanzado, acompañados por sectores de la clase media totalmente desprovistos de visión histórica), que en no pocas veces – como asevera el intelectual guayanés, Rafael Marrón González- hace metástasis en estupidez. Por eso nuestra insistencia en seguir advirtiendo que “por ahí no es”. Los futuricidas con petrodólares aportados por “el imperio”, buscan, de forma paralela, instaurar el socialismo, no sólo en Venezuela, sino de forma confederada con otros países (como Bolivia y Nicaragua) que han sido absorbidos por este agujero negro recurrente, esta pústula hedionda que ha permitido trascender por la maldad, a asesinos en masa como Stalin, Mao, Fidel o Pol Pot. Detengámonos a analizar, una vez más las características del régimen, adoptando el modelo propuesto, el de Cuba, llamado por el propio Chávez “mar de la felicidad”. “Con socialismo, todo; sin socialismo, nada” O lo que es lo mismo: socialismo o muerte. Porque “patria” es simplemente un cliché que manipula el nacionalismo presente en quienes tenemos sentido de pertenencia con el país donde nacimos o nos desarrollamos. Es una melcocha que se adapta a cualquier situación. Está desprovista, totalmente, de ideología y sentido histórico. Así que, quienes propugnan este modelo distribuidor de la miseria y nivelador por debajo (¡pero bien por debajo!) no aceptan el pluralismo. Usted puede hacer de todo, mientras que no vaya contra el socialismo. Eso se traduce en que “usted puede hacer lo que a nosotros nos parezca bien. Sólo eso”. Y entonces, ¿cuál es la democracia de la que tanto hablan? Para que no queden dudas de ningún tipo, citemos algunos artículos de la Constitución de la República de Cuba. Por ejemplo, lo que tiene que tiene que ver con a “libertad” de expresión en el régimen de Fidel Castro: “Art. 52: Se 77 reconoce a los ciudadanos libertad de palabra y prensa conforme a los fines de la sociedad socialista. Las condiciones materiales para su ejercicio están dadas por el hecho de que la prensa, la radio, la televisión, e l cine y otros medios de difusión masiva son de propiedad estatal o social y no pueden ser objeto, en ningún caso, de propiedad privada, lo que asegura su uso al servicio exclusivo del pueblo trabajador y del interés de la sociedad. La ley regula el ejercicio de estas libertades” ¿Qué clase de libertad de expresión es esa? ¡Solamente se puede opinar mientras esté “conforme” a los fines de la “sociedad socialista”! Si hay algo verdaderamente inconforme, es precisamente el derecho, en democracia, a disentir. De eso trata la Libertad de Expresión. Pero es que el artículo 61 es aún mucho más diáfano: “Ninguna de las libertades reconocidas a los ciudadanos puede ser ejercida contra lo establecido en la Constitución y las leyes, ni contra la existencia y fines del Estado socialista, ni contra la decisión del pueblo cubano de construir el socialismo y el comunismo. La infracción de este principio es punible”; es decir, que si usted se opone a ese régimen oprobioso que ha causado la muerte de más de 100 millones de seres humanos en menos de un siglo de experiencia, es reo de la “justicia”. Juventud “desjuventizada” “El que desjuventice a la juventud venezolana, buen desjuventizador será”. Y ese es el próximo paso a dar por Fidel Castro y su monigote que está en Miraflores. Va por la autonomía universitaria y la ideologización de la educación preescolar, básica y diversificada. Los artículos de la “carta magna” cubana, al respecto, señalan: “Art. 39. La educación de la niñez y la juventud en el espíritu comunista es deber de toda la sociedad. La niñez y la juventud disfrutan de particular protección por parte del Estado y la sociedad. La familia, la escuela, los órganos estatales y las organizaciones sociales y de masas tienen el deber de prestar especial atención a la formación integral de la niñez y la juventud”. Es decir, van por las escuelas, los niños y los jóvenes. Y por eso se habla de que la “patria potestad” será 78 obligatoriamente compartida con el Estado “socialista”. Todos esos proyectos de ley están listos y cuentan con el “visto bueno” Fidel Castro. Pero veamos el artículo 54: “El Estado socialista, que basa su actividad y educa al pueblo en la concepción científica materialista del universo, reconoce y garantiza la libertad de conciencia, el derecho de cada uno a profesar cualquier creencia religiosa y a practicar, dentro del respeto a la ley, el culto de su referencia. La ley regula las actividades de las instituciones religiosas. Es ilegal y punible oponer la fe o la creencia religiosa a la Revolución, a la educación o al cumplimiento de los deberes de trabajar, defender la patria con las armas, reverenciar sus símbolos y los demás deberes establecidos por la Constitución”. Es decir, usted puede tener la creencia que le de la gana, mientras eso no vaya con la cosmovisión impuesta desde arriba por el régimen que se sustenta n el llamado “materialismo histórico”, que no es otra cosa que el “Marxismo-leninismo” Organizaciones ¿juveniles? Así, los niños y jóvenes que queden, una vez esté todo consumado, serán apéndices del único líder, del único partido, de la única creencia, que permite los únicos medios de comunicación aceptados, con los únicos sindicatos, las únicas universidades para las únicas carreras permitidas. Único poder en manos del único líder. Univocidad total. La sociedad convertida en rebaño y el Estado en redil. Si eres oveja, “sobrevives” sometido y esclavo. Si no, serás exilado, preso o asesinado. No hay alternativas. Para que los muchachos y muchachas que entregan su futuro por unas monedas de plata (como Judas, por cierto) sería prudente que se miraran en este espejo. En Cuba existen las siguientes organizaciones “juveniles” que son las únicas permitidas por el “Führer” de la isla: La Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) fue fundada el 4 de Abril de 1962 y es la organización política de la juventud cubana. El ingreso a ella es de carácter voluntario y selectivo (como el PUS). Su objetivo principal está en la continua “preparación” cultural, política e ideológica de los jóvenes cubanos en función de seguir consolidando las “conquistas de la Revolución” ( que Castro y 79 sus conmilitones o se vayan nunca del poder). La Federación Estudiantil Universitaria (FEU) es la organización que agrupa a los estudiantes universitarios cubanos. Tiene entre sus objetivos agrupar a todos los estudiantes universitarios en torno a la Revolución Cubana y a su continuidad; promueve el perfeccionamiento del nivel y el rigor docente ( es decir, una especie de “consejos estudiantiles” que persigue y acaba con la disidencia dentro de las aulas).Finalmente, la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM) . En diciembre de 1970 se acordó la creación de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, estructura destinada a ideologizar a los jóvenes cubanos que se encuentran en este nivel. ¿Pueden tolerar nuestros jóvenes, en busca de futuro cierto, la imposición de estructuras similares a estas en nuestro país? ¿Podemos nosotros, los herederos de Bolívar, Sucre, Páez, Arismendi, Piar, Urdaneta y muchos otros libertadores, permitir que esto se consolide? ¿Verdad que no? 80 Capítulo XVIII: Galenos “tapa amarilla” La medicina cuba es, sin duda, un mito sustentado en el aparato propagandístico de Fidel Castro, que ahora cuenta con los petrodólares venezolanos que Hugo Chávez le da de manera incontinente. A diferencia de lo que, gracias a la democracia, disfrutamos los jóvenes de varias generaciones en nuestro país, quienes tuvimos acceso a la educación universitaria por los esfuerzos de nuestros padres y los propios, los pocos cubanos que logran llegar a las mal llamadas “universidades” de la isla no tienen la libertad de elegir la carrera que deseen. Todos deben obedecer la imposición del régimen que los obliga a acceder al área del conocimiento que más le convenga a la oligarquía comunista. Luego son utilizados como esclavos, en el afán de producir dólares para continuar enriqueciendo a la godarria socialista, a través de los turistas que llegan por cientos a las paradisíacas playas negadas al pueblo cubano o, en su defecto, ser enviados al extranjero con el mismo objetivo, tal como ocurre actualmente con Venezuela, Bolivia y Nicaragua. Allí cientos de “médicos” cubanos son puestos a trabajar por sueldos de hambre con el fin de cobrar los petrodólares venezolanos que servirán para abultar las arcas de Fidel Castro y sus cortesanos. Medicina cubana: un mito: Sólo basta acercarse a la sede de la fulana “Misión Barrio Adentro” y constatar que la mayoría de los tales médicos no llegan ni a enfermeros. Su impericia, los pocos conocimientos que demuestran, 81 dan fe de ello. La mayoría no aguantaría una breve discusión técnica con cualquiera de los muchachos recién graduados de las escuelas de medicina de las universidades de Los Andes (ULA), Central de Venezuela (UCV), de oriente (UDO), Centro Occidental Lisandro Alvarado (UCLA) o Universidad de Carabobo (UC). Mientras aquí un muchacho debe estudiar, en condiciones normales (es decir sin retrasar un semestre), siete años de pre-grado, uno de rural, dos de internado, y luego el postgrado que oscila entre tres y cinco años, según el caso, sus homólogos formados por el “socialismo del Siglo XXI” de la isla caribeña, estudian mucho menos y, además, tienen una rémora tecnológica y de conocimientos causada por el hecho de estar inmersos en el congelador de la historia que es el socialismo. Hay que recordar que el régimen Castro-chavista tiene un contingente de venezolanos engañados quienes realizan estudios de “Medicina Integral” en Cuba y que amenazan con convertirse en auténticos matasanos por ignorancia, anacronismo e impericia. El “facultativo” cubano, por imposición totalitaria, tiene acceso restringido a Internet, a revistas médicas, a hallazgos de estudios internacionales, a presentaciones en el exterior y a intercambios de conocimiento técnico. De ahí la razón de sus limitados conocimientos. Un elemento muy importante a considerar es que en el pensum de estudios de las diferentes facultades de medicina que existen en la isla, la “formación” ideológica priva por encima de la propiamente médica. Por ejemplo, un texto oficial de la especialidad de Medicina General Integral (que, como señalamos, están cursando actualmente varios centenares de venezolanos en la isla), incluye un capítulo para adiestrar al mentado "Médico de Familia" en la manipulación y modificación de aquellas "actitudes no deseables" de aquellos pacientes, que se aparten de la denominada "moral socialista". Toda una gama de recetas destinadas al lavado de cerebros destinados a programar al “hombre nuevo”: un ser anulado, acrítico, sumiso, no deliberante, muerto de hambre, convertido en asquerosa masa autómata. 82 Las denuncias de la Dra. Hilda Molina Hilda Molina es especialista en Neurocrirugía y Restauración Neurológica en la isla. Fue fundadora de las Escuela Cubana y Latinoamericana de Restauración Neurológica (CIREN). Elegida diputada al parlamento cubano en 1993, conoció el monstruo totalitario desde su interior. En el año 1994, apenas un año después de ser “diputada”, renunció a todo lo que la vinculaba al régimen cubano porque el gobierno se proponía convertir el CIREN en una institución exclusiva para extranjeros que pagaran en dólares (para seguir enriqueciendo a Fidel Castro y su entorno). Estas fueron sus revelaciones dadas, vía telefónica, a un grupo de docentes y estudiantes de medicina de Argentina, quienes la contactaron en octubre de 2005: “El sistema de salud en Cuba es totalmente controlado por el Estado. Al tomar el poder, el gobierno comunista se apropió de todas las instituciones de salud; se eliminaron las modalidades de medicina privada; y desaparecieron los colegios médicos y otras organizaciones independientes de profesionales. Estas arbitrarias medidas, además de sus múltiples implicaciones negativas, tuvieron nefastas consecuencias desde el punto de vista ético: se sustituyó la sagrada relación médico-paciente, por una impersonal relación Estado-paciente. Cuando los enfermos están obligados a atenderse con los médicos y en los centros que decide el gobierno, sin otras opciones, viven consciente o inconscientemente inmersos en una angustiosa sensación de inseguridad. Salud politizada El sistema de salud es absolutamente politizado. Se ejerce control político por el gobierno de las instituciones médicas y científicas, de las universidades médicas, y de los profesionales; se politizan, además, todas las instancias. Jamás el régimen comunista ha garantizado a los que habitamos esta isla, ni igualdad ni equidad en lo 83 que a servicios médicos se refiere. La élite gobernante, sus familiares, amigos y protegidos, han recibido siempre una atención diferenciada, superior a la de la población. Los profesionales de la Medicina carecen de libertad, de estímulos y de motivaciones. Todos son asalariados del gobierno, cumplidores obedientes de sus órdenes, sin libertad de acción, no sólo en el contexto laboral, sino incluso en el de la creatividad y en el de la superación. Estos profesionales se forman basados en concepciones que definen como indisolubles, sus deberes médicos y sus obligaciones con el comunismo. Por tratarse de una sociedad cerrada, los viajes y nexos con el exterior están férreamente controlados por el gobierno, lo que ha impedido o reducido al mínimo, los intercambios de los profesionales del sector con sus homólogos de la comunidad científica internacional y el acceso sistemático a fuentes de información actualizadas. Esta política absurda, retrógrada y violadora de los derechos elementales, afecta con especial énfasis a los jóvenes, cuyos necesarios contactos con colegas de otras naciones, están aún más restringidos por las autoridades. Las estadísticas médicas se controlan políticamente y no por especialistas independientes. Los procesos de validación al respecto, tanto los nacionales extra-gubernamentales, como los internacionales, son inexistentes. Esto ha permitido el manejo de los indicadores de salud, en función de intereses político-ideológicos, y con fines propagandísticos. Médicos como ejército invasor Gran parte de las llamadas misiones internacionalistas, han consistido en movilizaciones de verdaderos ejércitos de profesionales hacia regiones no siempre afectadas por eventos catastróficos. Y puedo hablar de este tema a partir de vivencias personales, pues participé en una de estas misiones como neurocirujano en Argelia, durante más de dos años. A los gobiernos ineptos y/o corruptos de todas las latitudes, les resulta más barato y cómodo, alquilar cubanos como mano de obra esclava, que desarrollar buenos sistemas de salud en sus respectivos 84 países. Un número significativo de estas misiones no son desinteresadamente humanitarias: los médicos trabajamos, y el gobierno cubano cobra las divisas. Los especialistas de la medicina cumplimos estas misiones lejos de nuestras familias, en condiciones muy adversas; y obligados a vivir en colectivo con personas desconocidas. Además de lo señalado, se priva a los enfermos cubanos de la atención de estos profesionales, durante el tiempo que permanecen en el extranjero. Estas misiones deben realizarse con carácter voluntario, si son realmente necesarias; sin utilizarse por regímenes totalitarios como instrumentos de campañas políticas y sin que los que realizan tan sacrificado trabajo, sean explotados. El sistema de salud de Cuba está hipertrofiado, pues especialmente en los últimos años, se aplican programas de formación masiva y acelerada de profesionales, con una preocupante afectación de los aspectos cualitativos. Ha existido permanente control y racionamiento por el gobierno de los alimentos que recibe la población, con los subsiguientes problemas nutricionales (eso aquí en Venezuela lo llamamos “hambre hereje”). Las disposiciones vigentes en relación con la literatura especializada, son francamente violatorias de derechos elementales: las publicaciones científico-médicas, y la prensa en general del país, están totalmente subordinadas al régimen, con vistas a imponer los criterios estatales en materia de salud y a emplear los logros de la medicina, como elementos de propaganda. Por otra parte, corresponde exclusivamente al gobierno, la decisión de las publicaciones internacionales a las que pueden acceder los profesionales del sector, con el agravante de que las vías al respecto no son nunca suscripciones personales, sino que toda esta literatura, patrimonio de la ciencia universal, se controla, se concentra y se censura, por instituciones oficiales. Los aspectos negativos que expuse, están presentes desde el inicio del proceso comunista. Sin embargo, en los últimos años se ha producido un gran deterioro evolutivo de la atención de salud en Cuba, que en mi opinión, no es consecuencia de la debacle del comunismo en Europa del Este. El sistema de salud cubano, como toda obra, depende básicamente de 85 los seres humanos, más que de los recursos materiales. Pienso que es precisamente el accionar negativo de los seres humanos, cruelmente dominados por un gobierno totalitario, lo que ha determinado el progresivo deterioro de los servicios médicos en nuestro país. Recordemos además, dos lamentables realidades de la Cuba post-1959: Primera, el máximo responsable del caos reinante en esta nación, y por ende en su sistema de salud, es el gobierno vitalicio que nos oprime; y la segunda, como ya les expresé, somos una sociedad enferma, que se ha fomentado bajo constante represión policial, pero sin contenedores cívicos, religiosos, ni morales” ¿Es esto lo que queremos? Ciertamente, el Sistema de Salud venezolano ha tenido muchas deficiencias generadas, sobre todo, por el explosivo crecimiento de la población y la consabida corrupción que hoy sufrimos como nunca antes. Sin embargo, al leer estas aseveraciones de la Dra. Hilda Molina, donde reconoce las graves deficiencias de la medicina en Cuba, nos preguntamos: ¿Es esto lo que queremos para nuestro país? ¿Estamos dispuestos a adoptar un modelo empobrecido, anacrónico y totalitario de la salud que nos sumergirá a todos en una brutal miseria sin libertad? 86 Capítulo XIX: Cubanos en África Poco se ha escrito sobre los crímenes cometidos por el régimen cubano contra la juventud de este pueblo en las mal llamadas “gestas heroicas” impulsadas en África en nombre del “internacionalismo proletario”. En la década de los sesenta del pasado siglo, el Frente Nacional de Liberación de Angola (FNLA), liderado por Holden Roberto, era uno de los más antiguos movimientos anticolonialistas de las posesiones de Portugal en el llamado “Continente Negro”. Por otra parte estaba Jonás Sabimbi, jefe de la UNITA (otro grupo independentista), quien era uno de los dirigentes angoleños más importantes. También contaba con el apoyo del régimen chino y mantenía estrechos vínculos con el argelino Ben Bella. Finalmente, estaba el Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA), de tendencia francamente pro soviética, quien era apoyado por la URSS. Estaba conducido por Agostino Neto, relacionado desde principios de los 60 con Ernesto “Che” Guevara. En 1966, Neto viaja a La Habana y se inicia una relación permanente con Fidel Castro. Desde el punto de vista militar, era el más débil, por lo que la asistencia de cubanos, comunistas portugueses y soviéticos sería decisiva en su fortalecimiento bélico. En septiembre de 1973 se da la alianza entre el Partido Comunista Portugués (PCP) y los militares socialistas, agrupados en el Movimiento de las Fuerzas Armadas (parecido a lo que sería en Venezuela, muchos años después, el MBR-200 de Chávez), que perseguía dar un golpe de estado para instaurar un régimen socialista en Portugal. Alvaro Cunhal, secretario del PCP, comienza a moverse entre Cuba y la URSS para preparar una asonada y abatir al dictador Marcelo Caetano. La acción golpista lo sorprende en La Habana. Cunhal busca de inmediato fortalecer en las colonias a los movimientos de orientación marxista, y comienza a 87 ejercer una gran presión sobre la Junta Militar encabezada por el general Antonio Sebastiao Ribeiero de Spinola. Los militares rojos en el poder permriten a Cuba que se involucre en los procesos de descolonización de Mozambique y Guinea Portuguesa. Desde finales de 1974, los soviéticos incrementan la ayuda militar al MPLA, y con la asistencia de los militares socialistas portugueses, Agostino Neto logra estructurar una organización militar capaz de equipararse a la UNITA y al FNLA. En 1975, el MPLA se apresta a disputarle el control de Luanda a los dos movimientos rivales. El 4 de febrero de ese año, Neto llega a la capital angoleña, escoltado por militares cubanos y soviéticos. Entre mayo y junio, Fidel Castro comienza a concentrar unidades militares en Cabinda, y en julio se acelera la entrada de combatientes cubanos en Angola, con el fin de ayudar a Neto a librar la batalla por Luanda. Holden Roberto, líder del Frente Nacional de Liberación de Angola (de inspiración democrática liberal), comienza a concentrar sus batallones en el poblado norteño angolano de Ambriz, donde ha instalado su gobierno provisional. Su suegro Mobutu le presta toda la ayuda necesaria desde Zaire. En el mes de agosto llega a Luanda una representación de los militares socialistas portugueses, encabezada por el almirante Coutinho. Días después, Portugal designa a Leonel Cardoso como Alto Comisionado para Angola, con la misión de facilitar la entrega del poder al marxista MPLA. Desde mediados de julio del 75, zarpan de La Habana los primeros buques cargados con unidades militares, bajo el mando del general Raúl Díaz Argüelles. Comienza una cruenta guerra civil entre las diversas facciones. En resumen, entre 1975 y 1988, unos 350.000 cubanos se vieron implicados en la contienda que sacudió a esa nación africana. Los militantes del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC) y de la Unión de Jóvenes Comunistas, eran expulsados de sus filas, vilipendiados y perseguidos, si no aceptaban participar en la llamada "Operación Carlota".Cuba envió el primer contingente militar a Angola en octubre de 1975 a solicitud de Agostinho Neto, el líder del socialista MPLA, que asumiría el gobierno tras la independencia el 11 de noviembre de ese mismo año. Se estima que al menos un tercio de 88 estos jóvenes caribeños (unos 120 mil) murieron en los combates en una lucha totalmente ajena ocurrida en una tierra hostil y extraña. “Son unos niños. La mayoría no llega a tener ni siquiera a tener la mayoría de edad”, aseguró un veterano sobreviviente. No existen estadísticas sobre secuelas de la guerra como heridas, mutilaciones y otras enfermedades. Tras 13 años de guerra, el 22 de diciembre de 1988, se firmaron los acuerdos de Nueva York entre Cuba, Angola y Sudáfrica (que había intervenido también en el conflicto), con la mediación de Estados Unidos. Las tropas cubanas iniciaron su retirada. Aún hoy, en el silencio de la noche, miles de madres cubanas lloran a sus hijos porque ni siquiera tuvieron el consuelo de recibir sus cadáveres. 89 Capítulo XX: Cautivos en su propia tierra La mayor demostración del fiasco del socialismo (que como hemos señalado antes, es la misma vaina que comunismo) es la fuga masiva de sus ciudadanos quienes, convencidos de que no es posible cambiar esa cruel realidad, deciden huir de sus países de origen por cualquier medio, a costa de su vida si es necesario. Sobran los ejemplos. Quizás el más conocido fue la extinguida, por implosión, Alemania Oriental. Una vez derrotado Hitler y los Nazis, los países aliados (entre los que se encontraba la Unión Soviética) la dividieron en cuatro zonas. Al final, con el inicio de la llamada “Guerra Fría”, quedaron dos Alemanias: la Occidental, en manos de los defensores de la democracia, y la Oriental, en poder de Stalin y su asqueroso socialismo genocida. Éste ordenó, en agosto de 1961, la construcción de un muro que separaba la ciudad de Berlín en dos sectores. De lo que se trataba era de que los ciudadanos ubicados dentro del área controlada por los comunistas pro-soviéticos no pudieran escapar hacia la libertad. Presos, humillados, perseguidos y muertos de hambre en su propia tierra. Antes de que se construyera este paredón, cerca de tres millones de alemanes huyeron del lado de Berlín oriental, sometido por el fulano socialismo, hacia el occidental, el de los países que impulsaban la democracia liberal. Como cosa curiosa (¿notan algún parecido con lo que hoy escuchamos en Venezuela?), la propaganda que los alemanes comunistas proclamaron para justificar la construcción del Muro fue el de que serviría de “protección antifascista, contra la emigración, la infiltración, el espionaje, el sabotaje, el contrabando, la liquidación y agresión procedentes del Oeste”. El imperialismo “mesmo”, pues. En realidad, como ya hemos señalado, el mecanismo iba dirigidos principalmente contra sus propios ciudadanos. Afortunadamente, el fatídico muro (donde murieron miles de alemanes tratando de escapar después de 1961) fue destruido luego de la implosión del comunismo en los países de influencia soviética auspiciada por Mijaíl Gorbachov, en noviembre de 1989. La pregunta fundamental es: si el socialismo es tan bueno, si 90 resuelve todos los problemas de la humanidad, la pobreza, etc. ¿por qué quienes habitan dentro de estos países tienen que vivir como detenidos?. Están secuestrados dentro de su propia nación. En ninguno de los países liberales del mundo se aplica la restricción de viajar al extranjero que se impone en los llamados países socialistas. Corea del Norte El otro caso parecido al de Alemania es el de Corea, dividido también en dos partes luego de la Segunda Guerra mundial. Fue escenario de una confrontación bélica entre Estados Unidos y los países socialistas (China y la URSS), entre 1951 y 1953. Muchos años después de la desaparición del socialismo en la Unión Soviética y de sus países satélites, Corea del Norte continúa siendo un quebradero de cabezas, debido a las continuas amenazas contra la libertad, el impulso de programas nucleares, la alianza con países terroristas y de corte autoritario. Organizaciones de Derechos humanos refieren que entre 150 mil y 300 mil norcoreanos han escapado del hambre y la represión del régimen comunista en la última década. Un caso específico de desertores norcoreanos que han denunciado las humillaciones, violaciones de los derechos humanos y lograron escapar con vida, es el del periodista Kang Chol Hwan, quien a través de un libro autobiográfico denuncia los maltratos de que fue víctima por el régimen de Kim y de su sucesor e hijo, Kim Jung Il. Hwan, autor del libro “Las peceras de Pyongyang”, relata su experiencia en uno de los campos de concentración aludidos en un informe de la ONU, y del que pudo escapar para luego refugiarse en Corea del Sur. Recientemente, la Asamblea Nacional de Corea del Sur (Parlamento) escuchó a desertores de Corea del Norte denunciar la grave situación que confrontan los habitantes del lado socialista, donde incontables seres humanos mueren anualmente en ejecuciones públicas por “quítame esta paja”. Park Kwang Il, uno de los desertores de Corea del Norte, señaló que aún recuerda las imágenes de prisioneros condenados a muerte a quienes llenaban sus bocas de piedras para que cesaran sus gritos contra el régimen, así como el estallido de tres 91 disparos que pusieron fin a sus vidas. Park estuvo a punto de ser ejecutado en 1998. “Muchos eran inocentes, y fueron asesinados por crímenes que ni siquiera pueden ser considerados como tales”. La situación de los Derechos Humanos en ese país subyugado volvió a ser noticia de primera plana cuando un canal de televisión japonés difundió secuencias de dos ejecuciones múltiples llevadas a cabo los días primero y dos de marzo de este año 2007.Fue la primera vez que vídeos de presuntas ejecuciones públicas en Corea del Norte fueron publicados al mundo. Park Kwang Il, nacido en 1974, fue condenado a muerte por mirar una telenovela surcoreana en su población natal de Hamhung, en la costa oriental de Corea del Norte, y huyó a China. El sobreviviente dijo que las ejecuciones públicas, llevadas a cabo delante de todos los pobladores de una aldea, eran comunes en Corea del Norte, donde el régimen socialista se aferra al poder manteniendo a su pueblo sufriendo terror de forma permanente. El desertor destacó que a un prisionero condenado por cualquier causa, por minúscula que parezca, tras ser salvajemente golpeado, se le pone una venda en los ojos, y se lo ata a un poste. En su boca se ponen piedras para impedirle que denuncie al régimen de Kim Jong Il. El pelotón de fusilamiento generalmente dispara tres balas, una en el cuello, la otra en la cintura, y la tercera en el tobillo. El cadáver del ejecutado es entonces envuelto en un trozo de tela antes de ser transportado a la fosa. Cuba: ¿mar de la felicidad? Los llamados “balseros cubanos” representan una de las mayores tragedias de nuestro continente. Son personas que sólo están buscando un bienestar que ven imposible de encontrar en su tierra natal. Sin importar el sexo, la edad y hasta llevando bebés en sus brazos, se hacen al mar en embarcaciones precarias (pedazos de tabla, cauchos viejos, troncos, carros o camiones con flotadores, etc.) que generalmente no aguantan el fuerte oleaje del Mar Caribe. Algunos muy afortunados, llegan a tierra, otros naufragan pero tienen la suerte de que alguien los rescate y les ofrezca un mejor destino, pero la mayoría han terminado ahogados, o lo que es peor, devorados 92 por los tiburones. Se calculan en cientos de miles los que han huido del oprobioso régimen socialista de Fidel Castro ¿Se acuerdan de Elián González, el niño cubano de 6 años, hijo de balseros que huyeron de la isla y murieron en el mar plagado de tiburones, y que fue devuelto desde Estados Unidos a la isla? John Mihai Pacepa, quien fuera Jefe del Servicio de Espionaje y Secretario de Estado en el Ministerio del Interior en Rumania, analiza el tratamiento dado a este caso como un común denominador de lo que hacen los regímenes comunistas con los desertores. El afirma en un trabajo publicado en el diario “Los Angeles Times”, el 29 de Marzo del año 2000, lo siguiente: “Durante los años que estuve en la Inteligencia en la comunidad del Pacto de Varsovia, aprendí que, aunque había unas pocas reglas para efectuar las operaciones de propaganda contra tales desertores, estas se cumplían estrictamente. La primera era que tan pronto una deserción política se hacia pública, el desertor se describía como una victima del “imperialismo”. Días después que el niño fue encontrado flotando y llevado a un hospital de La Florida, Fidel Castro reunió a 300 mil cubanos en las calles de La Habana para protestar el “secuestro hecho por los Estados Unidos”. La siguiente regla de los comunistas en tratar con un desertor político es tratar de hacerle cambiar de opinión, usualmente haciendo presión con familiares cercanos y amigos que quedaron atrás. El viaje de las dos abuelas del pequeño a Estados Unidos siguieron los dictados de esta regla al pie de la letra. Les dieron álbumes con fotos de sus familiares, compañeros de escuela, de la casa, del perrito, de una cotorra y del pupitre vacío “esperando por tu regreso”. Las abuelas fueron proveídas con ropas nuevas y dinero para los gastos del viaje. Ellas fueron acompañadas por personal del G-2 cubano quienes dirigieron cada movimiento que hicieron dentro del territorio estadounidense. Estos métodos estipulan que si la persona no puede ser regresada, él o ella, tiene que ser desacreditada públicamente. Debido a que Elián era demasiado joven para que esta táctica pudiera ser usada con efectividad, la inteligencia cubana desacreditó a su madre, Elisabeth Breton, y a su compañero, Lazaro Munero, los cuales fallecieron ahogados en el intento de entrar en Estados Unidos a bordo de un pequeño bote que naufragó. Pocas semanas después que el niño fue rescatado, su padre declaró a un oficial del Departamento de Inmigración de Estados Unidos, que Munero era un “buen hombre que a menudo acompañaba a Elisabeth en visita a nuestra casa en 93 invitaciones para comer y otras festividades” y que a él, Juan Miguel, “le agradaba también personalmente porque nunca maltrató a mi hijo, a quien quería mucho". Tres semanas más tarde, no obstante, el padre de Elián (obedeciendo a los dictámenes del sátrapa) le dijo a oficiales de Estados Unidos que su ex-esposa y Munero tenían unas “relaciones tormentosas” y que Munero “la maltrataba” y que él “había amenazado con matar al niño, a menos que escaparan de Cuba en el bote con ellos”. (¡Y como muerto no se defiende!, agregado nuestro) ¿Es esto lo que quieres? Son miles, millones, las historias que podemos compartir de igual número de personas que han arriesgaron sus vidas para intentar liberarse del yugo impuesto por el socialismo. Mientras se experimenta un viraje hacia el liberalismo por parte de países como China y Vietnam (que siguieron el modelo inicial propuesto por Carlos Marx, Federico Engels y sus seguidores), Venezuela, una nación con una democracia probada y revindicada por sus éxitos (que son muy superiores a sus fallas) durante cerca de 40 años, es llevada de la mano de la ignorancia, el resentimiento y el fanatismo de unos pocos, a uno de los peores modelos de organización que sociedad humana alguna haya experimentado. El socialismo se sustenta en las tumbas de más de 100 millones de seres humanos. Si el modelo es tan ventajoso para el ser humano, ¿por qué muchos de sus ciudadanos prefieren morir intentando salir, que permanecer dentro? 94 Capítulo XXI: Che Guevara: asesino desalmado Ernesto Guevara de la Serna nace el 14 de junio de 1928 en la localidad de Rosario, Provincia de Santa Fe, Argentina. Ingresa en 1947 en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires. Termina sus estudios en 1953. Luego de eso, realiza un periplo en moto por varios países de América Latina. En julio de 1955 conoce a Fidel Castro y en 1956 se enlista como médico en la expedición del yate Granma, que desembarcará en Cuba el 2 de diciembre de ese año. Allí comienza a asumir su barranco (por aquello de que hay camino o aquello), de la mano de la barbarie, un “liderazgo” impuesto por el crimen y la muerte. Muchos de los que participaron en la llamada “revolución cubana” recuerdan su lado más oscuro. Una de sus primeras características es haber sido un gran jalabolas (modismo venezolano que implica un superlativo de adulador) de Fidel Castro. Lázaro Guerra, ex- miembro del movimiento “26 de Julio” que lideró el hoy decrépito sátrapa cubano, en un testimonio sobre Guevara asegura: “Era un lleva y trae de Fidel. Era un tipo repugnante que andaba detrás de Castro, a quien le gusta que lo adulen”. Otro de los aspectos que lo caracterizaron es el de todo argentino que emigra: la prepotencia. Orlando de Cárdenas, amigo de Castro en los inicios, fue testigo del desprecio que el sureño sentía por los cubanos, los mejicanos (a quienes llamaba ´indiada analfabeta´) y, sobre todo, los negros: “Al principio le decíamos Ernesto Guevara o doctor Guevara, pero como se burlaba de nuestra forma de hablar, comenzamos a llamarlo ´Che´ como forma de enfrentar sus comentarios despectivos”. Miguel Sánchez, un veterano de la guerra de Corea que entrenó a los barbudos de la isla en los primeros años de lucha contra Batista, recordaba que también le llamaban el “Chancho” (cerdo) porque no le 95 gustaba bañarse y, como era de esperarse estando en la montaña, los olores que despedía no eran muy agradables. Incluso lo acusaron en una oportunidad en que fueron puestos presos por la policía mejicana, en junio de 1956, cuando se encontraban en ese país, de haber sido informante de las autoridades. Al respecto uno de sus compañeros detenidos en esa ocasión, Juan Almeida Bosques, aseguró que se había convertido en colaborador de sus captores e, incluso, ofreció información sobre dónde tenían las armas que utilizarían luego en el desembarco en Cuba. Hombre cruel Quizás una de las características fundamentales que emergen durante su participación en la guerra de guerrillas en la isla y luego en el gobierno comunista, es su crueldad. En una carta enviada a su entonces esposa Hilda Gadea, en 1957, escribe: “Querida vieja: estoy en la manigua cubana, vivo y sediento de sangre”. Jaime Costa, militante que participó en el asalto al Cuartel Moncada y en el desembarco del Granma, cuenta que un hombre a quien apodaban el “guajiro” y que había sido acusado de ser informante infiltrado, se le abrió un juicio militar, y como no había pruebas que lo inculparan, Guevara dijo: “si ustedes no le quitan la vida, lo hago yo”. Sacó su pistola y lo mató. Luego indicó el argentino: “la duda no hace nada, hay que fusilar”. Luego asesina a Eutimio Guerra, un campesino que se había unido al ejército rebelde. También sin fórmula de juicio. En su diario escribió sobre este hecho: “Terminé el problema con una pistola calibre .32, en el lado derecho de su cerebro (...) sus pertenencias eran ahora mías”. Luego fusila personalmente a una docena de combatientes cubanos, atendiendo sólo a chismes y sin ningún tipo de pruebas en su contra. Su crueldad es premiada por Castro, convirtiéndolo en jefe de una de las columnas guerrilleras. Muchos de sus ex –compañeros aseguran que no estaba preparado militarmente para asumir esa responsabilidad, pero lo logra debido a su actitud adulante combinada con su conducta despótica. Esta incapacidad fue demostrada posteriormente en el Congo y Bolivia, donde perdió todas 96 las batallas. Uno de los comandantes del Segundo Frente del grupo rebelde, Jesús Carreras, fue fusilado por la espalda por Guevara sin ningún tipo de justificación. Se había convertido en el perro de presa de su amo, Fidel, quien ya apuntaba hacia su absoluta hegemonía y no permitiría que le disputaran su liderazgo. En la ciudad de Santa Clara, Guevara que coordina las acciones, asalta un tren e impulsa una serie de ejecuciones indiscriminadas. Luego del triunfo de la revolución, el ex –médico argentino realiza personalmente la ejecución de decenas de militares del ejército regular simplemente por haber luchado en el bando opuesto. En 1959, el abogado José Vilasuso, que participó en la llamada “Comisión Depuradora” que presidía el sanguinario “Che”, fue testigo de cómo cientos de personas fueron fusiladas tras juicios sumarísimos, sin que se respetara el derecho a la defensa de los acusados y sin promover pruebas suficientes que los inculparan. Ser sospechosos y culpables era lo mismo. Esta conducta paranoica se extendió pronto por toda la isla. Cuando la Crisis de los Misiles en 1962, el mundo estuvo a escasos minutos del holocausto nuclear, evento que Guevara aprovechó para proponer a Castro –en un arranque de adulancia inusitada- apoderarse de los misiles rusos para lanzarlos sobre puntos neurálgicos de los Estados Unidos. Patria: socialismo es muerte Ernesto Guevara no sólo fusila de forma indiscriminada y criminal, sino que, insólitamente, lo reconoce ante el mundo. En la Asamblea General de las Naciones Unidas, el 11 de diciembre de 1964, exclama: “Fusilamientos, sí, hemos fusilado. Fusilamos y seguiremos fusilando, mientras sea necesario. Nuestra lucha es una lucha a muerte”. Incluso llegó a decir: “El odio es un factor de lucha. El odio intransigente al enemigo (que es todo aquel que no piense como ellos, comentario nuestro) que impulsa más allá de todas las limitaciones naturales del ser humano y lo convierte en una efectiva, selectiva, violenta y fría máquina de matar” Estas palabras podrían ser pronunciada por cualquiera de los criminales de guerra nazis de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, son de Ernesto Guevara. El 97 mismo del “hombre nuevo”. De Cuba fue al Congo, donde el luchó junto con Kinshasa en su revolución. Allí llevo una fuerza de 120 cubanos. Luego de muchas batallas, fueron derrotados y en otoño de 1965 le pidió a Fidel retirar la ayuda. Luego comenzó a planificar su viaje a Bolivia. Estando allá en las montañas, inició lo que sería la recta final de su camino de barbarie asumida. Es capturado por el ejército boliviano y muerto el 8 de octubre de 1967 en Higuera. Una vida que pudo haber sido camino de civilización y de servicio a través de la medicina, que se tradujo en destrucción y muerte de la mano del socialismo marxista. Ernesto Guevara pasa a la historia como un criminal, como todos los protagonistas del marxismo; un hombre despiadado, cruel y adulador. Álvaro Vargas Llosa, en un artículo señala lo siguiente: “¿Cuántas personas fueron asesinadas en La Cabaña (prisión que dirigió y donde funcionó la llamada Comisión Depuradora)? Pedro Corzo ofrece una cifra de alrededor de doscientas, similar a la dada por Armando Lago, (...) que ha recolectado una lista de 179 nombres como parte de una investigación de ocho años sobre las ejecuciones en Cuba. Vilasuso me dijo que cuatrocientas personas fueron ejecutadas entre enero y finales de junio de 1959 (momento en el cual el Ché dejó de estar a cargo de La Cabaña) (...) Félix Rodríguez, un agente de la CIA que formaba parte de equipo encargado de cazar al Ché en Bolivia, me dijo que él confrontó al Ché después de su captura con las alrededor de dos mil ejecuciones de las que había sido responsable a lo largo de su vida(…). Las cifras más elevadas pueden incluir ejecuciones que se llevaron a cabo meses después que el Ché había cesado de ser el jefe de la prisión”. Hay una frase escrita por Guevara que dibuja toda su conducta patológica: “Hay que llevar la guerra hasta donde el enemigo la lleve: a sus casas, a sus lugares de diversión; hacerla total. Hay que impedirle que tenga un minuto de tranquilidad, un minuto de sosiego…atacarlo donde quiera que se encuentre; hacerle sentir una fiera acosada por cada lugar que transite”. Ernesto Guevara es una de las muchas mentiras que repiten hasta la saciedad los socialistas. Su supuesta heroicidad es parte del mito eficazmente construido. El 98 recordar los 40 años de su muerte es una bofetada a la memoria de quienes sufrieron por su desbocada crueldad. Su conducta criminal y despótica debe servir de alerta para lo que podría suceder en nuestra Venezuela mermada de libertad y justicia, como nunca antes. Debemos escoger entre camino de progreso y civilización, o abismo. De nosotros depende. 99 Capítulo XXII: Narcoguerrilla colombiana Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Ejército Popular( por sus siglas Farc-EP) es un grupo marxista-leninista (socialista, pues) que tiene en sus filas entre 12 mil y 18 mil combatientes, en su mayoría jóvenes reclutados de manera compulsiva ( muchos de ellos niños que no sobrepasan los 12 años de edad) en las diversas incursiones que realizan en los poblados que están bajo se área de influencia. Esta incluye principalmente los Departamentos de Putumayo, Huila, Nariño, Cauca y Valle del Cauca, aunque también han extendido sus áreas de influencia en otras zonas, principalmente en la frontera con Venezuela, Panamá y Ecuador. También tienen presencia urbana en varias ciudades colombianas, particularmente en zonas pobres, aunque sus acciones han disminuido debido a las exitosas acciones del Ejército de ese país que los ha ido reduciendo de forma paulatina en los últimos años. En sus operaciones utilizan medios y armas que están prohibidas por la Convención de Ginebra y las Naciones Unidas. Su modo de financiamiento es a través de secuestros, atracos y en los últimos años, con la producción y tráfico de drogas, luego de los golpes dados a los carteles de la droga colombiana y la pacificación de numerosos grupos de paramilitares, organizaciones que se dedicaban también a estas actividades ilícitas. Fuentes de inteligencia militar colombiana aseguran que, desde hace ocho años, el gobierno venezolano también estaría apoyando con armas y otros insumos a esta narcoguerrilla, respaldo que es gratificado con expresiones públicas de adhesión y solidaridad hacia el proceso revolucionario bolivariano por parte de los altos representantes de esta facción socialista. Estas sospechas quedaron confirmadas luego de que el Presidente Hugo Chávez Frías declarara, públicamente, que Venezuela limitaba con las FARC y no con Colombia .Su máximo representante o líder fue, durante muchos años, Pedro Antonio Marín, conocido como Manuel Marulanda o "Tirofijo”, 100 recientemente fallecido. Luego del ataque de las autoridades colombianas al campamento del Comandante Raúl Reyes, quien operaba desde territorio ecuatoriano y el hallazgo de computadoras con información vital que muestra el apoyo del gobierno de Chávez a la narcoguerrilla colombiana, las dudas se han disipado de forma definitiva. Incluso el caso fue pasado a la Interpol para que instruya el expediente respectivo. Las FARC-EP afirman que su objetivo es acabar con la intervención militar y de capitales provinentes del llamado “imperialismo norteamericano”, mediante el establecimiento de un Estado marxista-leninista y bolivariano (¿les parece conocido el discurso?). Funcionan desde 1953, cuando sus fundadores se negaron a aceptar una oferta de pacificación hecha por el entonces mandatario de Colombia, Gustavo Rojas Pinilla, militar que ascendió al poder a través de un golpe de estado. Sin embargo, es el 5 de mayo de 1966, al realizarse la Segunda Conferencia del Bloque Sur, cuando se oficializa la conformación de las FARC-EP. En 1984, tras una reunión de los líderes de los 27 frentes diseminados en las diversas zonas controladas, y del estado mayor, se establece un alto el fuego, como parte de los acuerdos firmados con el gobierno del entonces Presidente Belisario Betancourt, los cuales fueron violados constantemente por el grupo irregular. La violencia impuesta por este grupo socialista cobró las vidas de importantes políticos, tanto del establecimiento legal tradicional opuesto al narcotráfico, entre ellos el ministro de Justicia Rodrigo Lara Bonilla (asesinado por los carteles de la droga con la complacencia de la narcoguerrilla), ocurrido el 30 de abril de 1984, como de numerosos miembros de la izquierda legal, en particular del entonces recientemente fundado partido legal, escindido de las FARC-EP: la Unión Patriótica (UP). La UP insistió en seguir con la vía política civilizada y democrática, hasta prácticamente su exterminio, debido al asesinato sistemático de más de 4 mil militantes masacrados o desaparecidos. En 1998, mediante acuerdos con el gobierno del recién elegido presidente Andrés Pastrana Arango, se creó la denominada “zona de distensión”, región desmilitarizada de 40 mil kilómetros cuadrados, aproximadamente. Esta aparente pacificación fue violada unilateralmente por las FARC-EP que continuó con sus atracos, secuestros y desmanes afectando, sobre todo, a la población civil inerme. En 2002, por ejemplo, con vigencia de estos acuerdos, fue secuestrado un diputado colombiano, en franca violación a los acuerdos y mostrando la hipocresía de los líderes de la 101 narcoguerrilla socialista. Cuando Álvaro Uribe Vélez llega a la Presidencia, ese mismo año, cambia totalmente la estrategia y opta por la búsqueda de la derrota militar de las FARC-EP, estrategia que cuenta con el apoyo de los Estados Unidos debido al cuantioso tráfico de drogas que hay hacia su territorio. También en Colombia existe el socialista Ejército Nacional de Liberación, que tiene poco menos de 5 mil milicianos y sigue las mismas estrategias de “guerra asimétrica” y de ataque despiadado de civiles. Financia sus actividades, al igual que las FARC-EP, con numerosos delitos incluyendo el narcotráfico. El 14 de agosto de 2006, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia condenó el "homicidio selectivo, el reclutamiento de niños y niñas, el reclutamiento forzado de adultos y el desplazamiento forzado del que están siendo víctimas centenares de personas en Arauca" cometidos por las FARC y el ELN”. Aunque el gobierno colombiano ha asestado duros golpes a la narcoguerrilla de las FARC aún estamos lejos de su derrota definitiva. 102 Capítulo XXIII: Allende, el estúpido Definitivamente, Salvador Allende fue un gigantesco estúpido. Su enorme ignorancia, acompañada con ingenuidad, lo llevó al fracaso. No sólo el suyo, sino el de un país que vio atónito cómo se destruían más de 40 años de vida democrática en Chile. Su ensayo irresponsable costó la destrucción del aparato productivo y la reacción de grupos militares, enemigos del modelo que intentaba imponer, que luego impulsaron la más brutal represión contra sus seguidores y un oprobioso régimen autoritario y militarista. Allende fue favorecido por una muerte temprana. Las heridas que causó aún continúan abiertas. En las elecciones de 1970, la Unidad Popular (UP), representado por el Socialista Salvador Allende Gossens, ganó la presidencia por un tercio del voto popular (36%). La UP estaba integrada por los Partidos Socialista, Comunista, Radical, Izquierda Cristiana, y el Movimiento de Acción Popular Unida (MAPU). Como no logró la mayoría absoluta de los sufragios, debía ser ratificado por el Congreso, tal como lo establecía la Constitución. Para esto ocurriera, el partido con mayoría, la Democracia Cristiana, le exigió que firmara el "Estatuto de Garantías Democráticas". Se trataba de que se comprometiera a no dar al traste con las libertades democráticas conquistadas hasta ese momento. El 26 de octubre de 1970, luego de haber cumplido con el requisito, es ratificado como Presidente electo por el Parlamento Pleno. Sin embargo, una vez asume el cargo, declara que firmó el documento para poder llegar al poder, y que eso era “una mera táctica política". De esta forma comienza a impulsar las medidas de su 103 “proceso revolucionario” Se nacionalizan las minas de cobre, por “razones estratégicas”, según asegura. De igual forma, se suscribe el acuerdo la Unidad Popular con la Central Única de Trabajadores (en manos de partidos marxistas) que establece la "participación de los trabajadores" en todas las esferas de la sociedad. Comienza a aplicarse un plan económico redistributivo y se prepara la creación del Área de Propiedad Social, muy parecido al proceso que actualmente se intenta imponer en Venezuela con las llamadas Empresas de Producción Social (EPS) y el tal “desarrollo endógeno”. Paralelamente, comienza una persecución contra la libertad de expresión y se ordena cerrar diarios que critican al gobierno (entre ellos "La Tercera" y "El Mercurio"). Allende y su gobierno califican a cualquiera que se opone a su régimen como "fascista". Dentro de las medidas económicas que impuso, se destacan la expropiación de buena parte del aparato industrial local e internacional, además de nacionalizar 11 entidades financieras. El 8 de junio de 1971 es asesinado el ex ministro demócrata-cristiano Edmundo Pérez Zújovic por un grupo terrorista de izquierda, afecto a la gobernante Unidad Popular. Aunque el régimen rápidamente investiga y da con los culpables, el hecho enrarece mucho más el clima político en el país. En agosto de 1972, se forma una alianza de los partidos de oposición, con miras a las elecciones legislativas de marzo del 73. Durante este mes y el siguiente, suceden la huelga de comerciantes minoristas y empresarios del transporte, que se conjugan con acusaciones en el Parlamento contra el régimen. Allende dice que, si es necesario, usará la fuerza para defender la revolución chilena. “Esta es una revolución pacífica, pero armada”, dice. Pronto se verán los efectos nocivos de las medidas económicas. Para, artificialmente, tratar de impedir un incremento de precios causado por la escasez y la baja productividad, fija precios, lo que lleva a la creación de un vasto mercado negro. La inflación sube al 1000 %, la más alta alcanzada en Chile en toda su historia. Comienzan a escasear los artículos de primera necesidad. De igual forma, se comienza a depender de Cuba para el abastecimiento y consumo de azúcar. Las Fuerzas Armadas también estaban bajo 104 tremenda presión. El régimen les ordena comprar armamento a la Unión Soviética. En abril de 1973, se inicia la huelga de los mineros de El Teniente, que durará 70 días, y se producen enfrentamientos por el proyecto de Educación Nacional Unificada que promovía la educación “laica y socialista”. En agosto se reanuda la huelga de camioneros y también se declaran en paro los médicos. El 22 de agosto de 1973, la Cámara de Diputados acuerda que la Unidad Popular, guiada por el Dr. Salvador Allende, ha quebrantado el orden constitucional por lo que debe entregar el cargo. Este acuerdo trató, sin éxito, de brindar una salida pacífica y democrática a la crisis. El 23 de ese mismo mes, el general Carlos Prats renuncia a la comandancia en jefe de las Fuerzas Armadas y es reemplazado por Augusto Pinochet. El 28, Allende infructuosamente forma un nuevo Gabinete que denomina “de Salvación Nacional”. El 11 de Septiembre los militares le dan un ultimátum: se entrega, o sufrirá las consecuencias. Él y un puñado de amigos enfrentan la artillería y la aviación. Previamente, el Ejercito le manda a avisar que un avión está dispuesto para él y su familia. Se rehúsa, y la Fuerza Aérea bombardea el gubernamental Palacio de la Moneda. Un ex –agente de inteligencia cubana que desertó de la isla , Jorge Masetti, dice en una entrevista sobre la percepción que los revolucionarios cubanos tienen sobre Allende: “.En la dirigencia del Estado (cubano), el razonamiento político no llegaba más allá de que los chilenos eran unos pendejos, que en Cuba quiere decir cobardes, miedosos. Y también se decía que Allende era un incompetente, porque no había sabido seguir los consejos del comandante Fidel Castro. Los cubanos a Allende no lo respetan en lo más mínimo.” Cría cuervos… 105 Capítulo XXIV: El Sandinismo nicaragüense La Revolución Sandinista fue el proceso iniciado tras la lucha armada que en 1978 comenzó en Nicaragua. Fue protagonizado por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), llamado así en memoria de Augusto César Sandino, líder antiimperialista nicaragüense asesinado a principios del siglo XX, quien fue asumido como paradigma emblemático para quienes abrazaron esta lucha. El FSLN sirvió de amalgama para disímiles corrientes ideológicas de las cuales, la mayoritaria, era la socialista. La cruenta guerra impulsada puso fin a la dictadura de la familia Somoza, derrotando a Anastasio Somoza Debayle, quien se había caracterizado por ser un gobernante corrupto y cruel. Con un amplio respaldo popular, el Frente Sandinista entró en Managua el 19 de julio de 1979, lo que dio comienzo a un período de gobiernos marxistas. Su máximo líder fue Daniel Ortega, quien acompañado por un grupo de “comandantes” de la lucha armada, asumieron el control del Estado y del gobierno. Pese a las intenciones de permanecer en el poder de forma indefinida, las presiones internas y externas obligaron a una apertura democrática que dio al traste con el experimento de “democracia socialista” (ambos conceptos son excluyentes). El reparto de las tierras en un país principalmente agrícola y afectado por el latifundio, fue una de las prioridades de la revolución, lo que se trató de impulsar a través de la llamada “reforma agraria”. El “proceso” comenzó con una junta de facto que gobernó hasta 1984, cuando hubo por primera vez comicios en Nicaragua. Estos, por cierto, fuertemente criticados por los sectores de oposición. Allí Daniel Ortega, máximo líder del sandinismo y amigo personal de Fidel Castro, ganó por amplio margen de votos. Las primeras acciones contra los derechos humanos fundamentales se 106 asumieron después de las elecciones. De esta forma, se proclamó el estado de excepción para hacer frente a la actuación de la llamada “contra”, grupos armados que combatían al gobierno. En tal sentido, se suprimieron derechos civiles y se limitó la libertad de expresión. También fue impuesto el servicio militar obligatorio, denominado Servicio Militar Patriótico. Entre los abusos denunciados de este período, se señaló el reclutamiento compulsivo de menores (muchos de ellos entre 11 y 14 años) quienes fueron obligados a combatir en contra de los grupos irregulares que luchaban por derrocar al régimen sandinista, que sufría de una clara tendencia autocrática. Actualmente, buena parte de estos menores, quienes no disfrutaron su infancia (los que lograron sobrevivir, claro está) deambulan por calles y avenidas de las principales calles de ese país centroamericano, mutilados por la acción de bombas, granadas, disparos o minas. La mayor parte realizan actividades vinculadas a la llamada “economía informal”. En las elecciones presidenciales de febrero de 1990, el FSLN entregó el poder a Violeta Barrios de Chamorro, viuda del editor Pedro Joaquín Chamorro, asesinado por el dictador Anastasio Somoza. En noviembre del año 2006, Daniel Ortega ascendió al poder, por segunda vez, tras lograr amplio margen en los comicios registrados en esa nación centroamericana. El 8 de junio, cinco meses antes, el presidente de la Comisión Permanente de Derechos Humanos, Marcos Carmona, denunció a ex -dirigentes sandinistas (incluyendo a Ortega), ante la Fiscalía General de la República de Puerto Cabezas. Las acusaciones son por delitos de "genocidio y crímenes de lesa humanidad" contra indígenas miskitos, una etnia ubicada en la costa atlántica del país. Los hechos presuntamente ocurrieron entre 1981 y 1982. La denuncia se refiere a la denominada “Navidad Roja”, operación militar realizada por el Ejército Sandinista, destinada a sacar compulsivamente a unos 8 mil 500 indígenas de sus comunidades ubicadas a orillas del río Coco (en la frontera con Honduras) y reubicarlos en cinco campamentos. El argumento dado por el régimen fue el de evitar que sirvieran de apoyo logístico a los grupos armados alzados en su contra. Las comunidades indígenas de Asang y San Carlos, por ejemplo, el día 23 de diciembre de 1982, fueron bombardeadas por la Fuerza Aérea Sandinista con helicópteros y aviones “Push and Pull”.Allí se masacraron a 60 personas. En San Carlos, ya en labores hechas en tierra, las reubicaciones fueron impuestas por 150 efectivos, entre los que se encontraban milicianos cubanos.En otras 107 localidades cercanas, 64 personas fueron asesinadas, 13 torturadas y 15 desaparecidas. A partir del día 11 de enero de 1982, los militares sandinistas quemaron viviendas, templos y escuelas de las comunidades de Irpitingni, Pransa, El Carmen, Lakun Tara, Bulsirpi, San Jerónimo, Wirapahni, entre otras. Un éxodo masivo se produjo entonces, durante el cual alrededor de 10.000 indígenas mismitos, y muchos pastores moravos, huyeron hacia Honduras. Recientemente del ex -Alcalde de Managua (capital del país), Herty Lewites, renunció a su militancia en el FSLN luego de denunciar la actitud dictatorial de Daniel Ortega. Junto a él, abandonaron el partido relevantes figuras como el cantante de música de protesta Carlos Mejía Godoy, quien compuso el himno de la organización. De hecho, al triunfo electoral de noviembre de 2006, sólo quedaban en el seno de este movimiento socialista tres de los nueve comandantes que constituyeron la dirección en tiempos de la revolución. Por otra parte, Ortega fue acusado por su hijastra, Zoilamérica Narváez, en marzo de 1998, de haberla violado cuando tenía 11 años, y recientemente demandó al Estado nicaragüense ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por “denegación de justicia’’, luego que los tribunales nicaragüenses declararon que el caso había prescrito. ¿Será que socialismo, crueldad y estupro van de la mano? 108 Capítulo XXV: ¿Sendero Luminoso o camino a la oscuridad? Un grupo de socialistas peruanos se organizaron para impulsar la revolución en ese país. Para ponerle nombre a su movimiento, citaron al viejo dirigente marxista José Carlos Mariátegui, quien aseveró en una ocasión que “el marxismo-leninismo abrirá el sendero luminoso hacia la revolución”. De esta forma, nace Sendero Luminoso fundado a finales de la década de los 60 por el entonces Profesor de Filosofía de la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga, Abimael Guzmán, quien fungió de ideólogo de la organización de corte maoísta. Surgió como apéndice del ya suficientemente dividido movimiento izquierdista de ese país, cuya raíz es el Partido Comunista del Perú-Bandera Roja, que a su vez se separó del Partido Comunista Peruano que derivó del Partido Socialista Peruano, fundado por Mariátegui en 1928. Así que Guzmán ubicó como principal centro de operaciones y de reclutamiento, la casa de estudios superiores donde laboraba. Entre el 73 y el 75, Sendero Luminoso logró controlar los centros de estudiantes de las universidades del Centro en Huancayo y La Cantuta. También desarrolló presencia importante en las Universidades Nacionales de Ingeniería y Mayor de San Marcos, ambas en Lima. Algún tiempo después, perdió el control de varias organizaciones estudiantiles, incluyendo la de San Cristóbal de Huamanga, y Guzmán decidió abandonar las universidades para reorganizar el partido. A inicios de 1980, formó un "Directorio Revolucionario" que tenía naturaleza política -militar, y ordenó a los 109 militantes a trasladarse a áreas rurales en las provincias para iniciar la "lucha armada". El grupo también tuvo su "Primera Escuela Militar" donde los militantes fueron instruidos en tácticas de guerrilleras conocidas también como de “guerra asimétrica” con apoyo de Cuba. Terrorismo “luminoso” El 17 de mayo de 1980, en la víspera de las elecciones presidenciales, el grupo socialista quemó las urnas y las cédulas de votación en el pueblo ayacuchano de Chuschi. Este fue su primer acto de guerra contra “la oligarquía y el imperialismo”. Sin embargo, los delincuentes fueron capturados rápidamente por las autoridades. Nuevo material electoral fue llevado a Chuschi y los comicios se llevaron a cabo sin mayores complicaciones. Durante la década de los 80, Sendero Luminoso creció en el territorio que controlaba, principalmente en la Sierra Central. Tuvo algún apoyo por parte de los campesinos que obtuvo mediante la tortura y el asesinato de figuras de gran desaprobación como ladrones de ganado y capataces de haciendas que eran acusados de maltratar a los peones que estaban a su cargo. Durante un buen tiempo, el gobierno simplemente ignoró al movimiento socialista al creer que se trataba de un grupo relativamente inocuo. No veían el monstruo que estaba creciendo en nombre del “socialismo” y la “justicia social”. La estupidez enceguece hasta que ya es demasiado tarde. En ese momento, el entonces Presidente del Perú, Fernando Belaúnde Terry, era reticente a ceder autoridad en las Fuerzas Armadas, debido, entre otras cosas, a que su primer gobierno terminó por un golpe militar. En abril de 1982, un grupo de senderistas tomaron por asalto la cárcel de la ciudad de Ayacucho, y asesinaron a algunos efectivos policiales. Lo hicieron para liberar a varios de sus compañeros detenidos. Este hecho hizo evidente que Sendero Luminoso representaba una amenaza real para el Estado Peruano. De esta forma, el gobierno declaró en “Estado de Emergencia” todo el departamento de Ayacucho y ordenó la suspensión de garantías constitucionales, lo que auspició el control de la zona por parte de las Fuerzas Armadas. Posteriormente, los 110 senderistas, asumiendo prácticas claramente terroristas, continuaron su “guerra asimétrica” desde las zonas rurales e iniciaron una labor de aniquilamiento de autoridades para tratar de hacer desaparecer todo vestigio de institucionalidad democrática en esa región. Asimismo, asesinaron humildes pobladores de localidades campesinas, a quienes se acusó de enviar noticias a los militares del movimiento de la organización. La crueldad como método Tal es el caso del pueblo ayacuchano de Lucanamarca, donde los senderistas asesinaron a toda una comunidad, incluyendo ancianos, mujeres y niños. La confusión era tal, que en la localidad de Uchuraccay campesinos asesinaron a seis periodistas provenientes de Lima, a quienes confundieron con senderistas. A partir de 1983, los ataques de Sendero Luminoso fueron dirigidos hacia las ciudades de Huancayo, Huancavelica, Cerro de Pasco, Huánuco, Andahuaylas, Abancay, Ayacucho y Lima. De esta manera, comenzaron acciones de sabotaje a líneas de alta tensión, dejando a ciudades enteras sin energía eléctrica. Las estrategias del grupo socialista incluían la colocación de coches-bomba frente al los Palacios de Gobierno y de Justicia. Asimismo, en diversas localidades del interior del país, llevaron a cabo paros armados, durante los cuales tomaban la ciudad y suspendían todas las actividades productivas. El 24 de abril de 1985, en vísperas de las elecciones presidenciales de ese año, el movimiento atacó a Domingo García Rada, quien era Presidente del Jurado Nacional de Elecciones del Perú. En 1992 asesinaron a María Elena Moyano, una dirigente de programas sociales conocida por su prédica en contra del grupo terrorista. El 12 de setiembre de 1992, Abimael Guzmán Reynoso, principal cabecilla de Sendero Luminoso, fue capturado en la ciudad de Lima. El grupo quedó acéfalo y ha tratado de reorganizarse con apoyo económico desde el extranjero 111 para reimpulsar venezolanos. su acción terrorista ¿Será con petrodólares Hora Nona Dicen que segundas partes nunca fueron buenas. Depende. De lo que se trate y de qué o quiénes estén involucrados. Quedó mucho en el cartucho, porque el tintero, sin duda, está en desuso, aunque el socialismo quisiera traerlo nuevamente a nuestras vidas. Porque no hay anacronismo más feroz que este que se ofrece en nombre del cielo igualitario, que ni siquiera existe en el subsuelo, donde yacen los cadáveres de los que partieron antes, sea de la mano del azar concurrente o de los hombres. Pero hay un extraño encantamiento con vivir en lo pasado. Películas de hombres a caballo. Mujeres con largos trajes y con velo. Edificios vetustos que esconden situaciones olvidadas y que vienen con la magia del cine que trajo el modernismo. Es la única magia verdadera. La que flota gracias a las aguas en las que navegamos todos los seres inteligentes del planeta, que buscamos el futuro y no el prurito que produce el moho de libros amarillentos llenos de polvo que degluten insectos que parecen larvas. Estamos en encrucijada vital: escoger camino o farallón. Ascender hacia el espacio infinito que da la libertad o hundirnos en lo oscuro donde monstruos tímidos apenas iluminan. Es como aquel sueño recurrente en que caemos y caemos y nunca llegamos a parar en la caída; sólo el vértigo producido por la sensación de no tocar fondo, nos despierta sudando temblorosos, dando gracias por salir del sitio extraño donde todo lo domina el dios Morfeo. Pasado o futuro, 112 evolución o todo lo contrario. Pues no es cierto que inexorablemente el hombre avanza. No. Retrocede según sus decisiones. Porque el hombre es él y el la ruta que transita como acto volitivo. Si, además, está hundido en mare mágnum de ideas vagas, hambre atávica, ignorancia genéticamente respaldada, con carnet de identidad incorporado con nombre de “misiones”, es muy poco lo que podemos lograr contra esa vorágine de emociones encontradas, donde las ideas nunca han existido. El cerebro está lleno de cizaña que no deja nacer buena semilla. Un hombre (si es que se puede llamar tal) que sale todas las mañanas a buscar el sustento con trabajo nunca conseguido y regresa a casa con las manos vacías, y una promesa renovada, de encontrar lo que ve en nosotros, sin nunca tomar camino cierto que le pueda llevar al desarrollo. Él, por el contrario, se sienta a esperar un diluvio prometido de logros, conquistas y grandes crecimientos, pero sólo hay nubes de mentiras que producen remolinos que destruyen. Sin embargo, totalmente extraviado en su dilema, sale nuevamente al otro día y llega con esperanzas renovadas por un cartel que vio con la cara del caudillo, o algún comentario que escuchó de lo que el canalla dijo el último domingo. Mientras el hombriforme se sumerge en el fango de su hambre, el malandro le roba su futuro ofreciendo sueños imposibles edificados con paredes de azufre y de fuego inextinguible; además, el malvado se sigue dando la gran vida, como la de aquel Epulón que dijo Cristo, que comía mientras Lázaro, con ropajes harapientos, deglutía sus migajas que caían de la mesa inalcanzable. Ese minúsculo ser es el que vota y nos conduce a la horrible pesadilla, de caer y caer hacia la nada. Y de esta pesadilla nunca podremos despertar a tiempo. Lo dice la historia que, como escribí antes, es la maestra de los vivos. Otra tez de la barbarie A este pobre ser que cree que es hombre, y heredero de la tierra prometida de los flojos e ignorantes, se le suman los tontos que buscan la autopista de lo fácil, del salir de esto cuanto antes, lo más rápido posible. Son los que piden con enorme gritería que sólo la 113 guerra es la salida y que si matamos a los estúpidos que votan a favor de los gorilas, podremos evitar que todo se destruya. No se dan cuenta, que el que mata, puede morir en el intento y llevar a su familia, al país, a la desgracia. No perciben que la muerte es el ropaje que viste la barbarie y que inevitablemente también podrá devorarnos tras haber destapado la caja de Pandora, así creamos que con razón asimos la bandera de la lucha, que somos más y que nos asiste la historia, para demostrar que socialismo y vejestorio con hambre, muerte, dolor y desdicha son lo mismo. Sin embargo, en su razonamiento hueco y carente de sentido, estos entusiasmados con la noche eterna no ven el peligro que se acerca, que luchamos contra un enemigo poderoso que ha triunfado muchas veces en sus anteriores intentos. Y que en aquellos lugares en que fue detenido, izando las banderas de la muerte, queda una estela de dolor y llanto, heridas que nunca cicatrizan, y llegan incluso a la ultratumba. Odios que no desaparecen y que matan antes de que la hoz y lo negro aborden el camino. La salida, para ser tal, debe ser sólo conducida por la luz de la razón y el poder que da el convencimiento. Así creamos que andamos en empinada subida que persiste en negarnos conquistar la cumbre de lo bueno. No es posible escoger el camino de lo noble, “tragando flecha” y manejando aprisa. Viajando en sentido contrario, haciendo peligrar nuestra existencia cósmica y bendita del Dios que sólo escucha a los corazones generosos. “¡Hay que abstenerse!”, gritan los idiotas, sin saber que cierran la única rendija de salida pacífica que queda. Estamos en la vía que puede conducir hacia la vida o, en dirección contraria, dirigirnos con mucho dolor hacia la nada. Tomamos el norte de la paz que sólo da la ruta inteligente (paz que sólo podrá violar el desalmado), o el sur de la muerte y la guerra interminables, con olor a sangre, a cadáveres, a estiércol, con moscas verdes incluidas. Enfrentar con bríos de exegeta al mal que se acerca agazapado, o rendirnos y sucumbir a las imposiciones del perverso. La inteligencia nos dice qué tomar en consecuencia. Todo lo demás lo darán las decisiones. Y lo que viene después es claramente predecible. 114 Barbarie y guerra son lo mismo Imbéciles que invocan a Marte, el dios de la guerra que siempre inspiró a los romanos y luego los condujo a gobiernos de tiranos como Nerón y Calígula. En conquistas y abusos los llevó asidos. Pueblos enteros sometidos por hordas infernales. Que acababan con todo y esclavizaban pueblos. Caían al escuchar los cantos de sirenas que llamaban a al poder y a la codicia. Celebraban liturgias emulando epopeyas del pasado, a héroes ya desaparecidos que ocultan los dolores transitados y las heridas que dejaron para siempre. Los que optan por la prisa quieren “salidas” prontas (en lo pronto no hay salida) y gobiernos nuevos instantáneos. De cajas de cartón, sobres plateados, polvo y agua. Que se disuelven en segundos y saben a flan acaramelado. Persiguen quimeras y salidas imposibles. Porque la civilización no tiene puerta de emergencia. Mucho menos si el incendio es provocado como una alternativa, porque fuego y destrucción avanzan siempre juntos. Invocan al peor de los demonios. Es odio, sangre, violación y muerte. Que nunca toca fondo cuando de atrocidades se trata. Como si fuera normal matar al semejante. Verlo agonizar, exponiendo vísceras, sangre y excrementos. La civilización, al contrario, es larga escalera que se asciende, sin descansos, con esfuerzo y paciencias infinitas. Que soporta la ofensa procurada y perdona a los idiotas, aquellos que votan por gorilas porque es lo inteligente. Porque ellos, además, son pueblo esperanzado. El perdón que Jesucristo propugnó a sus seguidores, es la apuesta eterna a la paz y a la decencia, por encima del horror que producen los demonios disfrazados de promesa. La otra mejilla es la que se tiende al que frente a ti tiene un fusil empuñado y espera la orden de dispararte pronto, sin sufrir, además, remordimiento alguno. El comandante ordena y él simplemente obedece; vestido verde oliva y con un letrero que lo convierte en “reserva”, el nuevo componente. Porque floreció la semilla del odio en su corazón roto por el resentimiento. De hijo abandonado, herido a carajazos y patadas; de mujer preñada por cuanto hombre le abordó con mentiras y patrañas, 115 y que luego la dejó sola y usada. Marxismo, destrucción, dolor y muerte son sinónimos, palabras huecas hediondas a tumba abierta, semilla del mal que progresa por el odio del que nunca mira a sus espaldas lo que deja. Si en lugar de mejilla ofrecida y dispuesta a ser golpeada, tuviéramos nosotros armas tronadoras, pronto surgirían ríos de sangre que inundarían todo de dolor y llanto. Fetidez posesiva y poseedora. No escaparíamos nosotros del tornado del aniquilamiento. Es la certeza que da la razón la apuesta inteligente, que no es resignarnos a soportar la opresión que nos asecha. Convencidos que es lo correcto, que somos más y que tenemos la única salida hacia la vida, buscamos convencer y no sólo vencer al oponente. Electoral es la única salida. Por eso llamar a la abstención, a no votar, a ir marchando, acompañados de tambores y trompetas, es azuzar la barbarie que en tropel avanza y que parece fiera dispuesta a consumir a tirios y troyanos. La verdad es aquella que no se contradice. Y sólo ella podrá devolvernos al camino de libertad y democracia casi aniquiladas. Apostemos al camino que nos queda, al único, a la ruta cierta que sólo da inteligencia: la de la civilización que no renuncia a los derechos. Si rezar no sirve para nada y llorar menos, sólo nos queda hacer razonar a quienes dicen ser los compañeros del camino cierto mientras encienden hogueras medievales para quemar brujas y herejes, por un lado, mientras que tratamos de llevar la luz a aquellos ciegos que siguen al encantador de flauta dulce y que promete Villas y Castillas, edificados con el estiércol de la muerte. 116 Capítulo XXVI: El pensamiento único Un contratista ideológico de Hugo Chávez, llamado Ignacio Ramonet, acuñó en el año 95 del pasado siglo XX ,en el semanario francés Le Monde Diplomatique, la feliz frase “Pensamiento único” para intentar descalificar al llamado “neoliberalismo” sobre la falsa premisa (y como demostró hace muchos siglos Aristóteles con su Lógica, una falsa premisa lleva a una conclusión ídem en el razonamiento) de que desaparecía el pluralismo ideológico porque había una única receta para todas las sociedades y se expresaba en las medidas de saneamiento económico que impulsaban organismos multilaterales como son el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Estas medidas incluían, entre otras (señalado por el propio Ramonet), hegemonía de la economía sobre el resto de los dominios sociales, la mano invisible del mercado capaz de corregir cualquier tipo de disfunción ; subordinada a la anterior, la importancia de la competitividad como elemento clave para la obtención de calidad y bajos precios, la Globalización como realidad intrínseca de la modernidad, eliminación paulatina de los proteccionismos arancelarios (lo que va de la mano con el elemento anterior), la privatización de las empresas que son ajenas a las actividades intrínsecas del Estado en el marco de la propuesta “menos Estado, más mercado”. Eso es lo que este francés acaudalado, ahora con grandes ingresos en dólares que le da la mal llamada “revolución bolivariana”, define como “Pensamiento único”. Pero, ¿es realmente así? Lo primero que hay que aclarar es que el liberalismo es un diseño de sociedad que se sustenta en pilares, en bases, no sólo ideológicas, sino pragmáticas. 117 Un edificio que, si se trastoca su diseño, colapsa. Como toda invención científica exitosa (que todas llegaron de la mano del liberalismo), propende a su perfeccionamiento. Cuando surgió como forma ideológica con los burgos europeos (pequeñas concentraciones humanas de artesanos y comerciantes al margen del modelo feudal) y se fortaleció luego con las revoluciones Inglesa y Francesa, sufría de grande imperfecciones: jornada laboral excesiva para los trabajadores; tecnología, aunque adelantada para su época, muy rudimentaria. Sin embargo, fue poco a poco evolucionando y mejorando su diseño hasta lo que tenemos hoy. Debemos recordar a nuestros lectores, que todos los adelantos científicos y tecnológicos que hoy disfrutamos llegaron y se desarrollaron con el liberalismo. En 150 mil años de presencia del hombre sobre este planeta, los últimos 300 o 400 años han sido saltos gigantescos, gracias a este exitoso diseño de sociedad. De la misma forma, debemos recordar en cuáles presupuestos se sustenta: igualdad de oportunidades a través del acceso a la educación en sus tres niveles fundamentales, respeto a la propiedad privada, elección universal, directa y secreta de sus autoridades, alternabilidad del poder ( lo que implica que nadie puede ejercer el poder de forma indefinida o continuada), independencia de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, sujeción de las Fuerzas Armadas al poder civil, descentralización y desconcentración del poder político. Además, se parte del presupuesto de la entronización del individuo como actor fundamental, generador de riqueza (o pobreza, según sea el caso) y dueño de su propio destino; en pocas palabras, es la célula fundamental de la sociedad (Prof. Marrón dixit). Por eso se habla de individualismo, no en la acepción religiosa o vulgar de egoísmo, sino como diseño individuocéntrico; es sobre él, en él y en su rededor que gira todo este exitoso andamiaje social, económico y político. Entonces, ¿qué es el llamado “neoliberalismo”? La búsqueda del perfeccionamiento de ese exitoso modelo de sociedad. Para ponerle un ejemplo cercano: ¿usted se acuerda de los primeros teléfonos celulares? Eran aparatos gigantescos, pesados y con diseños rústicos, por decir lo menos. En 15 años, ¡cómo han evolucionado! Lo mismo ha ocurrió con automóviles, aviones, medicinas. De igual forma, ocurre con la democracia liberal, se va optimizando, busca su perfeccionamiento. De ahí, por ejemplo, la propuesta hecha por el Profesor Rafael Marrón González sobre “Liberalismo del Siglo XXI” que no es otra cosa que introyectar al diseño de la sociedad moderna 118 la racionalidad social, el saber que existen (por ese individualismo al que nos referimos arriba) otros seres humanos menos afortunados a quienes debemos atender sin que eso signifique olvidar que quien tiene motores para volar lo hagan. Entonces, ¿cuál “pensamiento único”? Ignacio Ramonet pretende ocultar que es precisamente el liberalismo el que auspicia el pluralismo ideológico. Con él nacen los partidos políticos y podemos diferenciar las distintas escuelas o doctrinas políticas que, a grandes rasgos, incluyen a la Socialdemocracia (revisores de Carlos Marx en el diseño democrático liberal; aquí se destacan los llamados “socialistas europeos” como los alemanes y franceses), el Socialcristianismo ( que es la propuesta política de la Iglesia Católica y su denominada “doctrina social”) y el llamado socialismo democrático ( que implica una mayor preponderancia del Estado en la conducción de la sociedad, sobre todo como distribuidor de la riqueza, sin dejar de respetar el diseño democrático liberal al que ya nos referimos), por sólo mencionar los más connotados. Cuando los defensores de la corriente “neoliberal” hacen las propuestas antes señaladas, buscan, desde su óptica (que se sustenta, sin duda en presupuestos liberales auténticos), auspiciar una libertad de comercio plena a nivel global y reubicar al Estado moderno, sobre la base cierta de que debe ser redefinido su papel. Vilipendiar la propuesta neoliberal de forma prejuiciada (sin certezas fácticas, científicas), sería como pretender decir hoy que el diseño de la democracia representativa liberal (que es la única exitosa), por ser la mayormente aceptada en el mundo, fuera anatematizada como “pensamiento único”; o, igualmente, la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Los señalamientos de Ramonet (con su musical apellido y todo), son una gigantesca estupidez, demostración de que pretende manipular la ignorancia de las mayorías de los países del llamado Tercer mundo ( y sacarle sus reales dictando conferencias y vendiendo libros al respecto), o simplemente de que sufre de una ignorancia supina. En cualquiera de los casos, se trata de argumentos 119 vacíos que chocan contra la realidad de una sociedad exitosa, que generó el mayor desarrollo que ha disfrutado la humanidad ¡en 150 mil años! y que, debido a su aplicación o no del diseño original y a la calidad de individuos que tiene cada país, ha dividido el planeta en países desarrollados y subdesarrollados. El marxismo: el auténtico “Pensamiento único” Lo que pretende ocultar la tesis de Ignacio Ramonet, es que es que el verdadero pensamiento único es el marxismo. Los psicólogos llaman a esto, mecanismo de defensa de proyección: ves en el otro tus propias carencias y limitaciones. Y los venezolanos tenemos ya formas de demostrarlo: como expresión del llamado “pensamiento único socialista”, tenemos ya el partido único en el que escogerán sólo a los revolucionarios “´puros” (es decir, los más jalabolas y rastreros), socialismo impuesto a todos ( con la eliminación de la propiedad privada, según la nueva propuesta constitucional), concentración de poderes, parlamento unicolor, lista de firmantes para diferencias a los ciudadanos “revolucionarios” de los que no lo somos, un sólo discurso al que todos debemos decir “amén”. ¿Quiénes son los que propugnan el tal “pensamiento único”: nosotros los liberales que defendemos el pluralismo ideológico la democracia multipartidista, o los marxistas como Chávez, Fidel, Stalin, Pol Pot, Mao, Ho Chi Minh, Tito, etc.? Y ahí está la historia (que hemos contado a través de estos trabajos) sobre el fracaso socialista en el mundo. Lo más grave es que el pensamiento único marxista se impone a sangre y fuego. Sobre cien millones de cadáveres se sustenta el fracaso socialista en el último siglo. Y la cifra continúa subiendo gracias a sujetos codiciosos de poder y riqueza como Hugo Chávez, además de los abyectos que le siguen, bailando al son de esa flauta mágica que el milico compró con los petrodólares que puntualmente paga “el imperio mesmo”. Porque quienes hemos disfrutado las mieles de la libertad que nos ha dado el liberalismo (y perdonen la cacofonía necesaria), nos negamos a bajar la cabeza, a dejarnos someter, por ignorancia o codicia, a tamaño anacronismo; el regreso innecesario e imbécil al medioevo, donde sólo 120 reyes, príncipes y cortesanos eran gente. Y el resto, siervos de la gleba, hundidos en el mas grande abandono. Lo que cambian son los nombres de las “nuevas” realidades y las situaciones, pero en esencia es lo mismo. ¡No al pensamiento único! Y es aquí donde, quienes hoy disfrutamos, por ejemplo, de teléfonos celulares más pequeños y económicos (gracias a la libre competencia y a la productividad masiva), de carros más livianos y veloces, de computadoras personalísimas y portátiles, nos negamos a regresar a los pesados “ladrillos” que nos comunicaban, o carros lentos y de alto consumo de combustible, sin aire acondicionado, o a computadoras que parecían escaparates; es decir, rechazamos la regresión, volver al pasado superado por los avances de la humanidad inteligente ( aunque suene redundante). No queremos que nos metan en el congelador del tiempo de la mano de la infamia. Mucho menos, si es impuesta desde las alturas del poder, paradójicamente, financiado con petrodólares que vienen de los países más liberales del planeta. Por eso frenamos “en seco”, cuando se pretende imponernos este modelo único y unívoco (cacofónicum sum), empobrecedor, igualitario por debajo (hay un 55 por ciento de venezolanos que no lo desea). De lo que se trata es de no volver al oscurantismo medieval que quiere imponernos Hugo Chávez, porque, para él, es un modelo exitoso para eternizar en el poder a l caudillo, con los ropajes ideológicos convenientemente ofrecidos por Carlos Marx y Federico Engels (los primeros ideólogos del marxismo), pero en nosotros implica la negación al progreso, a la ciencia, a la tecnología, a los avances; es decir, a la modernidad humana o a la humanidad moderna ( que ya no existe otra que esta), como prefieran. Por eso, insistimos en preguntar: ¿es eso lo que quieres? ¿La imposición del pensamiento único? ¿La uniformidad de toda la sociedad venezolana? ¿Qué tus hijos y nietos vivan sólo de la manera que el régimen les permita? ¿Que el caudillo omnipotente decida tu destino y el de los tuyos? ¿En serio? 121 Capítulo XXVII: Vendedores de sueños Lo que llaman los expertos en mercadeo “labor de venta” es lo que hacen los promotores de este modelo perverso, demoledor de las instituciones democráticas y criminal que el socialismo. Nos decía un profesor de publicidad que tuvimos en nuestros tiempos de universidad, que la peor o la mejor propaganda de un producto, es el producto mismo. Me explico. Si usted promociona un champú anticaspa, que no la quita, la campaña publicitaria y de venta puede ser muy eficaz, pero, en lo que lo use unos días, tirará el frasco al cesto de la basura. Y le echará el cuento a todo el que pueda para que no caiga en la misma trampa. Es lo que se conoce como “publicidad engañosa”. Y eso es lo que hace el socialismo. Vende sueños. Anhelos. Igualdad, redención de los más pobres, trabajo para todos, pulcritud administrativa, justicia social. Resulta que en lo que llega a instaurarse, lo que trae es desempleo, inseguridad, militarismo, dictadura, ineficiencia, corrupción como nunca antes, desabastecimiento, hambre. Nosotros ya somos testigo de eso, al comienzo de este proceso. El champú anticaspa que, en lugar de quitarla, no lo hace y, para colmo, tumba el pelo. Sin embargo, para que ese proyecto se consolide debe acabar toda oposición. Y la primera víctima, es sin duda, la libertad de expresión. Porque los medios de comunicación mostramos las costuras del régimen. La gente comienza a ver, por ejemplo, la falta de servicio de agua 122 potable, los apagones, la delincuencia alzada que mata sin misericordia, el derroche de recursos en estadios para tres jueguitos de fútbol, mientras los hospitales que atienden a los pobres se caen a pedazos. El pueblo se entera por los medios que el gobierno construye decenas de plantas eléctricas en Nicaragua, y en nuestro país los aparatos de aire acondicionado, televisores y neveras se dañan por el pésimo servicio que presta la Corporación Eléctrica de Venezuela. De igual forma, que se asfaltan calles y avenidas de La Habana, o de Uruguay, y los huecos en principales avenidas y carreteras del país, causan accidentes fatales. Ni hablar de los barrios de nuestras principales ciudades. Eso incomoda a quienes detentan el poder. Por eso mandan a sus esbirros, reclutados del hampa, a atacar a periodistas, poner bombas en medios de comunicación, disparar a fotógrafos, y cuando notan que, pese a todo esto, no nos callamos, entonces ordenan la “suspensión de concesión”, como el caso de del canal de televisión RCTV. Y los jalabolas escriben en las paredes “RCTVAS”. Esos mismos que ayer la buscaron para contar sus problemas. El régimen no nos tolera a los periodistas, les arrecha, que echemos el cuento, que digamos que son unos ladrones, que se están enriqueciendo con el dinero del erario público, que son peores a los que antes enfrentaron con su discurso. Que resultó más nefasto el remedio que la enfermedad. Y nosotros, enarbolamos la bandera de la decencia. Los que ejercemos el periodismo, claro. No los palangristas, claro está. Les recordamos que siempre dijimos lo que había pasado antes, así como lo hacemos ahora. Hay toneladas de periódicos en los archivos de los diarios que lo demuestran . Siempre señalamos lo que estaba pasando. Lo escribimos. Lo decimos Ahí está. La lucha contra el poder nunca fue fácil. Y ahora menos, cuando en el proyecto busca consolidarse y el objetivo final es acabar con la libertad de expresión para poder actuar a sus anchas. Sin libertad de expresión en el socialismo 123 El modelo a seguir, según el Presidente Hugo Chávez, es el socialismo cubano, la revolución que impulsó Fidel Castro y que nuestro mandatario llama “ mar de la felicidad”. Según la Constitución vigente en la nación caribeña (cuyo dictador tiene casi 50 años gobernando con un régimen de partido único), dice lo siguiente: “Artículo 53- Se reconoce a los ciudadanos libertad de palabra y prensa conforme a los fines de la sociedad socialista. Las condiciones materiales para su ejercicio están dadas por el hecho de que la prensa, la radio, la televisión, el cine y otros medios de difusión masiva son de propiedad estatal o social y no pueden ser objeto, en ningún caso, de propiedad privada, lo que asegura su uso al servicio exclusivo del pueblo trabajador y del interés de la sociedad. La ley regula el ejercicio de estas libertades. “Es decir, no se puede decir o escribir nada en contra del régimen. Más delante, la carta magna que rige a ese pobre pueblo señala: “Artículo 62- Ninguna de las libertades reconocidas a los ciudadanos puede ser ejercida contra lo establecido en la Constitución y las leyes, ni contra la existencia y fines del Estado socialista, ni contra la decisión del pueblo cubano de construir el socialismo y el comunismo. La infracción de este principio es punible.” Es lo que precisamente busca imponer Hugo Chávez en Venezuela ¿Es eso lo que tú, pueblo esperanzado, quieres para tu país? ¿ Que no podamos los periodistas nunca más denunciar los excesos, atropellos, el despilfarro, robo de los recursos del país, la traición a la patria obedeciendo más a los intereses extranjeros que a los propios? Periodistas presos Aunque, ciertamente, los países socialistas no son los únicos que persiguen a los periodistas, sin embargo tienen el triste record de ser los primeros en el mundo con más profesionales de comunicación social encarcelados por defender el derecho a la libertad de expresión. Los primeros países con este average, ¡en el mundo!, son China y 124 Cuba. Ambos, como saben, abrazaron el modelo socialista hace muchos años. Así lo refiere un informe presentado por la organización internacional “Reporteros Sin Fronteras”. 31 periodistas están presos en China, mientras que 27 están privados de su libertad en la isla caribeña. El presidente de “Reporteros sin Fronteras”, Fernando Castelló, explicó que en el caso de Cuba, los informadores que se encuentran entre rejas sufren penas de hasta 27 años de cárcel. En Cuba, además, a un periodista que no trabaje en los medios de comunicación oficiales se le considera un “enemigo del Estado”, o un “mercenario”. A estos países les siguen Irán, del hermano del alma de Chávez, Mahmud Ahmadineyad (15 informadores encarcelados), Eritrea (14), Nepal (12), Argelia (4) y Turquía (3). Así mismo, en estos países está prohibido el libre acceso a Internet. Según la misma organización defensora de la libertad de expresión, en este momento hay 60 personas encarceladas por colgar textos críticos en la Red. De estas 60 personas, 50 están presas en China, que representa la mayor amenaza para los ciberdisidentes. Son conocidos, además, los casos como los de Cuba y en la misma China, en los que hay instalados microprogramas espías que detectan lo que los gobiernos califican como “información subversiva”. Las palabras claves activan el rastreo. En el caso de la isla caribeña, sólo algunos funcionarios del Estado socialista tienen acceso a Internet, pero son seriamente vigilados. Los otros 10 casos de cibernautas disidentes detenidos se reparten entre Vietnam (otro país socialista), Siria, Túnez, Libia e Irán. Los últimos mencionados son naciones islámicas (donde los derechos humanos están seriamente restringidos), a los que Chávez se ha acercado en sus múltiples viajes al medio oriente. Son también “hermanos del alma” de esta revolución mal llamada bolivariana El código del silencio Al imponer el silencio, todo se hace más fácil para consolidar el totalitarismo que Chávez quiere. El Partido Único Socialista (PUS) está siendo impulsado en esta etapa del proceso, aunque, - 125 afortunadamente- con muy poco éxito. Hay serias resistencias en los factores chavistas distintos al MVR que están asqueados por la corrupción y el militarismo que no se calan, sobre todo los militantes de base del resto de los factores políticos que los acompañan (PCV, Podemos, PPT, entre otros). Después que se consolidó el cierre de RCTV, han seguido con algunas emisoras de radio del país que no se han plegado al régimen. También televisoras regionales. Finalmente, irán por los diarios impresos, vía Seniat que buscará quebrarlos económicamente con multas imposibles de pagar o al menos presionarlos para que no digan lo que sucede en Venezuela. La libertad de expresión es un derecho fundamental del hombre que llegó de la mano del liberalismo. Nosotros, como ciudadanos del Siglo XXI e hijos de la democracia y la modernidad, tenemos el deber de defenderla, no sólo por nosotros, sino por las futuras generaciones de venezolanos. Para puedan disfrutar de este derecho. De ahí la importancia de la lucha que estamos librando en este sentido. En palabras de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en su Declaración de Principios: “La libertad de expresión, en todas sus formas y manifestaciones, es un derecho fundamental e inalienable, inherente a todas las personas. Es, además, un requisito indispensable para la existencia misma de una sociedad democrática. Toda persona tiene el derecho a buscar, recibir y difundir información y opiniones libremente en los términos que estipula el artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Todas las personas deben contar con igualdad de oportunidades para recibir, buscar e impartir información por cualquier medio de comunicación sin discriminación, por ningún motivo, inclusive los de raza, color, religión, sexo, idioma, opiniones políticas o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social. El acceso a la información en poder del Estado es un derecho fundamental de los individuos. Los Estados están obligados a garantizar el ejercicio de este derecho. Este principio sólo admite limitaciones excepcionales que deben estar establecidas previamente 126 por la ley para el caso que exista un peligro real e inminente que amenace la seguridad nacional en sociedades democráticas. La censura previa, interferencia o presión directa o indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida a través de cualquier medio de comunicación oral, escrito, artístico, visual o electrónico, debe estar prohibida por la ley. Las restricciones en la circulación libre de ideas y opiniones, como así también la imposición arbitraria de información y la creación de obstáculos al libre flujo informativo, violan el derecho a la libertad de expresión” No le faltó razón al editor norteamericano Joseph Pulitzer cuando afirmó “Las naciones prosperan o decaen simultáneamente con su prensa”. Estos neocomunistas, ayer adecos y copeyanos, no lo saben por su enorme ignorancia. 127 Capítulo XXVIII: Objetivo, desmontar la democracia Las revoluciones marxistas van de la mano del hampa. Lo utilizan como herramienta. Reclutan un ejército de delincuentes que sirve de punta de lanza para atemorizar, arremeter, doblegar a la oposición democrática. Por eso no sólo no la combate, sino que la auspicia y protege. Los círculos bolivarianos, por ejemplo, fueron integrados por miembros del hampa común para enfrentar las marchas opositoras en todo el país. Recordamos la muerte, por ejemplo, de la señora Ron en la Plaza Altamira de Caracas. También del fotógrafo del periódico Últimas Noticias, Jorge Aguirre. Los motorizados que los días 11, 12 y 13 de abril de 2002 aterrorizaron a quienes laboran en diferentes medios de comunicación social están integrados por hampones. Quienes destruyeron las instalaciones de TV-Guayana acá en Puerto Ordaz también. Sobran los ejemplos De esta forma, el Estado evade las investigaciones que en materia de derechos humanos impulsan organizaciones internacionales y nacionales. No hay manera de acusar a las Fuerzas Armadas regulares o a los organismos policiales de estos desmanes. Todo esto se sustenta en una estrategia perversa que se basa en que todo adversario es un enemigo y , por lo tanto, debe ser destruido. Y todo aliado es amigo, así sea un asesino, y hay que protegerlo. Según la estrategia marxista-leninista, hay que desmontar lo que ellos denominan “democracia burguesa”; es decir, eso que nosotros llamamos democracia, tal y como la hemos conocido hasta ahora. Se sustenta –la nuestra, la de la civilización moderna- en la libertad del individuo, elección por voto universal, directo y secreto (que impediría una aberración como la impuesta a través de la llamada Lista Tascón), separación de poderes, alternabilidad el poder (es decir que nadie puede detentarlo de manera permanente), respeto a las minorías, a la propiedad privada, libertad de expresión, igualdad 128 ante la ley, como valores sustantivos de este modelo de organización humana. Para asaltar el poder, pues, y consolidar un proyecto totalitario, es necesaria una degradación constante y progresiva del tejido institucional, de la salud democrática. Es la destrucción paulatina y progresiva de los órganos vitales de nuestro sistema de libertades. El objetivo es convertir una sociedad sana, libre, fuerte e inexpugnable, en un cuerpo enfermo, cansado y sin ánimos de resistir. Clara está pues la tarea a realizar. Erosionar nuestra sociedad, tal como la conocemos, por cualquier medio posible. Aquí la delincuencia le hace un enorme servicio a la revolución. Para el revolucionario socialista, el fin justifica los medios. La diferencia ética la trazó el Reverendo Martín Luther King, defensor de los derechos civiles de la minoría negra norteamericana, cuando dijo que “Fines inmorales no pueden generar fines morales porque los medios preceden a los fines”. El uso de la delincuencia, para socialistascomo Hugo Chávez y sus seguidores – hombres y mujeres sin valores ni escrúpulos – es un medio legítimo para lograr el objetivo a cumplir que es la demolición, desde sus bases, de la sociedad democrática. Y no les importa el costo que eso tenga. Están dispuestos a llegar al genocidio si es posible. Y el uso del hampa es un primer paso para iniciar este macabro proceso. El Estado protector del hampa Así que al nuevo Estado Socialista, que se monta sobre las ruinas de la democracia, le caen “de perla” los cambios auspiciados a través del Código Orgánico Procesal Penal (Copp) que transformó el rol del Ministerio Público, de ser garante de la legalidad, a ser el factor fundamental, el pivote sobre el cual descansa el proceso de investigación policial, organismo que da el impulso vital a los juicios. Para apuntalar este nuevo rol que será utilizado con fines prepolíticos, incluyen en la Constitución de 1999 el principio de que toda persona debe ser juzgada en libertad. Así que, sobre la base de la inadecuación tecnológica y el congestionamiento de las Fiscalías, los delincuentes roban, violan, asesinan y si los capturan, son puestos en libertad casi de inmediato. Humanamente hablando, ninguno de estos funcionarios puede estar al día con sus causas pues llevan entre dos y 129 tres mil causas ¡cada uno! Mientras, los Defensores Públicos de Presos ( quienes vigilan , cobrando sueldos por el Estado, los derechos de los delincuentes) quintuplican, por decir lo menos, el número de Fiscales. No hay comunicación, a través de redes informáticas entre tribunales que llevan causas distintas a un mismo delincuente por delitos similares, y un mismo hampón puede ser juzgado por varios delitos de forma simultánea sin que ninguno de los jueces involucrados se dé por enterado. De esta forma, puede recibir de todos el beneficio de libertad y presentación periódica en cada uno, ¡y continuar delinquiendo! Además, si la cosa se complica, Fiscales, Jueces y hasta directivos del CICPC (organismo de investigación criminal) gritan al unísono “Patria, socialismo o muerte”. Por eso, los antisociales, viendo que son privilegiados con este nuevo diseño de la justicia, siguen cometiendo delitos de manera incontinente.. La guinda de la torta Para terminar de completar este macabro diseño del llamado “proceso de cambios”, es creada la figura del Fiscal del Ministerio Público de “Derechos Fundamentales”. Es el ojo implacable del materialismo histórico que está por encima de las cabezas de los funcionarios policiales. Basta que en un enfrentamiento resulte herido o muerto un delincuente, para que – de facto y con una celeridad inusitada- este funcionario, pagado por el Estado venezolano, inicie de inmediato – quisieran los familiares de los 120 mil muertos que causó el hampa en estos diez años en Venezuela, tanta rapidez- de un proceso de investigación penal contra los efectivos involucrados. Tenemos en Guayana, donde habito, por ejemplo, el caso del Comando AntiExtorsión y Secuestro de la Policía estadal, que, al liberar a la comerciante Marcela Prado, ultimó a dos de sus plagiarios. De inmediato fueron puestos presos y hace poco fueron sentenciados a ¡12 años de prisión! ¡Los policías que liberaron a una persona secuestrada! Esta conducta, protegida y auspiciada por las estructuras del naciente “Socialismo del Siglo XXI”, inhibe a los funcionarios de los cuerpos de seguridad quienes se sienten impotentes o atemorizados frente a una delincuencia mejor armada, liberada constantemente por jueces o fiscales y que, para colmo, cuenta con aliados que, desde la estructura jurídica del país que procesa y sentencia con prisión a sus enemigos naturales: los agentes del orden público. Todo esto conspira 130 a favor de la inseguridad y contra de la tranquilidad de los ciudadanos. Y en esta guerra auspiciada desde la cúpula del poder político, caen revolucionarios y escuálidos, chavistas y opositores, venezolanos todos. Para el régimen hasta los suyos son simple peones de un juego que busca la eternidad del caudillo y sus adláteres en el poder, sustentada en la igualdad por debajo, el hambre y miseria de millones de venezolanos. También aquí sobran los ejemplos. La inseguridad en cifras En Venezuela, el número de homicidios o muertes violentas pasó de un promedio de 4 mil 500 a finales de los años noventa (precisamente, cuando entra Chávez al poder), a más de 16 mil en el 2006. Un aumento de 350% (más del triple) en apenas 8 años, mientras que en este período de "gobierno bolivariano", 1999-2007, el incremento de la población venezolana se ubica en menos del 20%: de 23 millones a 27 millones y medio. Para el Presidente de la delegación venezolana de la organización internacional de derechos humanos, Amnistía Internacional (AI), Marcos Gómez, “en estos momentos el país tiene los peores índices de la región en violencia interpersonal, por encima incluso de Colombia, país en guerra. En Venezuela se producen más de 13 mil asesinatos al año y la mayoría de las víctimas son jóvenes de 12 a 24 años.” Se está abriendo, pues, un hueco generacional en nombre del socialismo. Según Gómez, muchos crímenes políticos podrían estar ocultos dentro de estas cifras. Otro de los problemas que acusa el país, según AI, es la gran cantidad de armas ligeras que escapan del control gubernamental. “De los seis millones de armas que hay en Venezuela, según el registro de importaciones, sólo hay conocimiento de los propietarios de un millón y medio de armas. El resto de armas pequeñas y ligeras se encuentran dentro de la ilegalidad y la impunidad”. Este es el cuadro dantesco que explica el por qué del auge del delito y pregunto : ¿ estás dispuesto, tú, chavista , a arriesgar tu vida y la de los tuyos en manos del hampa desatada que no discrimina, en nombre de esta revolución?. ¿Quieres que la última parte del eslogan “Patria, socialismo o muerte” se haga realidad en tu existencia? 131 Capítulo XXIX: La presunción venezolana En un trabajo escrito por Don Mario Briceño Iragorry titulado “Pequeño Tratado de la Presunción”, este intelectual venezolano diagnosticó una de las grandes falencias que afecta a buena parte del pueblo venezolano. El define la “presunción” como el “estar antes”, utilizar las “picas” o “trochas” en la vida que facilitan que se asuman cargos y posiciones, sin merecerlos, sin tener la calificación intelectual o técnica para estar allí. Según este denso ensayista, presumir, de acuerdo a su origen latino, significa “invasión, usurpación”; y es precisamente en este sentido en que él utiliza este término. A tal efecto, señala Don Mario: “la presunción constituye una actitud de tomar con antelación, de invadir derechos ajenos, de usurpar lo que a otros corresponde”. De esta forma, continúa, los venezolanos somos un “Pueblo de presuntuosos (que) hemos buscado el fácil camino de tomar por anticipado los sitios que reclaman la sistemática del esfuerzo, lento y mejor orientado(…) La vía del asalto y de la carrera para llegar más presto a sitios que reclamaban una idoneidad responsable”. En tal sentido, la mayoría de los venezolanos padecemos “Un deseo de llegar antes de tiempo, un empeño de tomar los frutos ingrávidos, un tropicalismo desbocado que nos impele a la ruptura de los frenos que pudieran guiar el impulso hacia la racional conquista. Llegar por donde sea y como sea. Torcido o recto el camino, da lo mismo, siempre que conduzca al deseado fin (…) Llegar a la casa por la puerta principal o por la puerta ancilar, es cosa secundaria. Sólo importa llegar, a la luz del día, como llegan los señores, o al amparo de las sombras protectoras del escalamiento” .Y como Hugo Chavez conoce esta dramática realidad del pueblo venezolano ( que lo vive en su propia familia y entorno), entonces lo utiliza a su favor para pretender consolidar un proyecto estalinista o castro-comunista hegemónico que 132 le permita permanecer en el poder para siempre; o al menos, para “su” siempre. En esa prisa, la mediocridad apurada busca el camino fácil, sin esfuerzos, que se traduce, por ejemplo, en “médicos” graduados con sólo 18 meses”de estudio”, donde se privilegia lo ideológico sobre lo técnico, o “periodistas” que apenas un semestre en La Habana ( capital de Cuba, para quienes no lo sepan) y que luego son incorporados en las filas de VTV, Vive TV o TVES, el nuevo canal de la dictadura. Por esta tendencia cultural hacia lo fácil – que también se expresa en la tan reconocida “viveza criolla” venezolana- ahora no hace falta estudiar para pasar todas las materias de educación básica y bachillerato. Por decreto presidencial, todos los alumnos “pasan”, incluso aunque no asistan a clases (legado del trinomio ChávezIstúriz). El régimen estimula la mediocridad para presentar cifras “exitosas” en materia educativa. Así que, por primera vez, lo que antes sólo era una actitud defectuosa que arrastrábamos culturalmente como pueblo y que diagnosticó acertadamente Don Mario Briceño Iragorry, se ha convertido en “política de Estado”: el ascenso de los mediocres por la decisión de los meritocidas del actual régimen. Lo peor es que lo hacen en nombre de Simón Bolívar cuando fue precisamente nuestro Libertador quien dijo en Angostura “La educación popular debe ser el cuidado primogénito del amor paternal del Congreso. Moral y luces son los polos de una república; moral y luces son nuestras primeras necesidades” ; y más adelante: “Constituyamos este areópago para que vele sobre la educación de los niños, sobre la instrucción nacional; para que purifique lo que se haya corrompido en la República; que acuse la ingratitud, el egoísmo, la frialdad del amor a la patria, el ocio, la negligencia de los ciudadanos; que juzgue de los principios de corrupción, de los ejemplos perniciosos; debiendo corregir las costumbres con penas morales, como las leyes castigan los delitos con penas aflictivas, y no solamente lo que choca contra ellas, sino lo que las burla; no solamente lo que las ataca, sino lo que las debilita; no solamente lo 133 que viola la Constitución, sino lo que viola el respeto público. La jurisdicción de este tribunal verdaderamente santo, deberá ser efectiva con respecto a la educación y a la instrucción, y de opinión solamente en las penas y castigos. Pero sus anales, o registros donde se consignan sus actas y deliberaciones; los principios morales y las acciones de los ciudadanos, serán los libros de la virtud y del vicio. Libros que consultará el pueblo para sus elecciones, los magistrados para sus resoluciones, y los jueces para sus juicios”; es decir, que se beneficie el esfuerzo ascencional del hombre por sus esfuerzos y sacrificios que deben ser éticos e intelectuales y que, a su vez, se sancione la conducta que tome el camino contrario. Juventud vs. “vejetud” Y precisamente, en este marco de ideas, es que queremos hacer el análisis de estas dos vertientes que han aparecido en el escenario nacional desde las universidades: los meritorios muchachos y muchachas que por el estudio, el esfuerzo y la responsabilidad, han asumido el camino largo, la ruta angosta, de crecer y desarrollarse. Son ellos, precisamente, quienes están en la calle luchando en defensa de los Derechos Humanos fundamentales que pretenden ser conculcados de forma progresiva (de ahí que los chavistas se autodenominen “progresistas”) por este régimen que sigue las directrices del titiritero de La Habana. Pese a sus pocos años, han entendido que es mucho lo que está en riesgo. En su mayoría, son hijos de trabajadores o de profesionales universitarios, quienes, a su vez, surgieron de humildes familias venezolanas, que lograron crecer gracias a la movilidad económica o intelectual que auspició la democracia venezolana durante 40 años. Creen tanto en los principios de participación generados por la democracia liberal, que ejercen el derecho a la protesta con la convicción de que ha llegado la hora de defender su futuro que está siendo amenazado por un proyecto totalitario anacrónico y traído por los cabellos hasta nuestra realidad. Una especie de “Jurassic Park” político e ideológico que trastoca 134 todos los valores que, hasta ahora, hemos compartido como pueblo que busca la salida pacífica, pluralista y civilizada a todos sus problemas. Ante esa juventud que ha descubierto que tiene que cumplir un papel histórico en estos aciagos momentos, está la “vejetud”, precisamente la que con ropajes de juventud pero ancianizada por la conducta presuntuosa en el marco de la definición de Iragorry; o sea, la que asume el camino fácil de las prebendas y sueldos inflados de forma exagerada para luego salir a defender lo indefendible. Los demagogos y burócratas que siempre han existido, pero que, en esta ocasión, son vejestorios, llenos en su interior de moho y telarañas, y que defienden un modelo criminal que representa un frustrante pasado para muchas naciones que hoy luchan por emerger y alcanzar el futuro negado a fuerza tanques, cañones, fusiles y bayonetas. Estos decrépitos éticos son acompañados por otra modalidad de “vejetud” , quienes también escogieron la ruta fácil de apropiarse de lo que no les pertenece. La delincuencia que afecta a buena parte de nuestros jóvenes y no tan jóvenes, que con crueldad roba y asesina. Esta es la otra cara de la misma moneda con la que esta falsa “revolución” pretende acallarnos. Fueron niños cuando ascendió Hugo Chávez al poder y hoy son adolescentes o jóvenes (aunque su conducta demuestre lo contrario) quienes, pistola en mano, violan, atracan o asesinan. Se trata de otra versión de los presuntuosos de los que nos habla Don Mario y que son privilegiados del régimen oprobioso importado desde la Cuba de Fidel Castro. Son ellos quienes nutren el ejército paralelo que sirve de instrumento represivo no convencional para atemorizar o aniquilar a los demócratas que decidimos no calarnos este proyecto destructivo y tiránico. Tanto unos como otros, sustentan sus conductas en el oportunismo, en la apropiación indebida, en el ejercicio despótico del poder. No hay patria. Sólo, socialismo y muerte. Son agentes de un pasado suficientemente experimentado y con secuelas genocidas, cuyas heridas aún permanecen abiertas en el este de Europa, Asia, África y el Caribe americano. En el cono sur latinoamericano, la reacción a tamañas pretensiones derivó en una feroz dictadura “de 135 derecha”, cuyas lesiones aún hoy supuran y producen dolor. Frente a estos representantes de ese pasado siniestro que se presentan, repito, con ropajes de juventud (pero que son expresión colectiva y contemporánea del “Retrato de Dorian Grey”), aparecen nuestros jóvenes que salen a protestar con sus manos blancas, haciendo llamados a la paz. Son quienes representan el mañana, la auténtica inserción de Venezuela en el Siglo XXI. En palabras del Papa Juan Pablo II: “Ahora más que nunca es urgente que seáis los `Centinelas del Mañana´, los vigías que anuncian la luz del alba y la nueva primavera del Evangelio, de la que ya se ven los brotes. La humanidad tiene necesidad imperiosa del testimonio de jóvenes libres y valientes, que se atrevan a caminar contra corriente y a proclamar con fuerza y entusiasmo la propia fe en Dios, Señor y Salvador" Esos son estos jóvenes verdaderos: centinelas de un mañana que hay que construir, más venezolano, más justo, más humano y en libertad. Acompañémoslos a iniciar la edificación de las bases para sus sueños que huelen a fresca mañana. 136 Capítulo XXX: Operador político Mijail Gorbachov ingresó al Partido Comunista de la Unión Soviética a los 21 años, en 1952. Luego de una meteórica carrera en el partido único de la URSS, asume la Secretaría General el 11 de marzo de 1985 , tras el fallecimiento de su predecesor Konstantín Chernenko (allá funcionaba eficazmente la reelección indefinida). Una vez en el poder, Gorbachov lanza de forma audaz su propuesta económica denominada “Perestroika”. Se convirtió en el operador político que, desde el centro del poder político soviético, auspicia la apertura hacia la democracia. Además, a través de la llamada doctrina del “Nuevo Pensamiento”, inició un proceso de acercamiento Este-Oeste, para disminuir los gastos militares y utilizar esos recursos para atender las urgentes necesidades del pueblo ruso. De manera sorpresiva para los Estados Unidos lanzó propuso el desarme que contrastaba con el Programa de Defensa de Ronald Reagan conocido coloquialmente como “Guerra de las Galaxias”. Pese a que la oferta fue vista con desconfianza, el líder soviético lanzó una propuesta de normalizar las relaciones con Washington. El 28 de noviembre de 1987, a dos años apenas de haber ascendido al poder, firmó con el Presidente estadounidense el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio. A través de él, se acordó la destrucción de todos los misiles de alcance intermedio desplegados en Europa. Finalmente, con George Bush padre, firmó el tratado START, que implicaría la reducción de entre un 25% y un 30% de las armas nucleares estratégicas. En el resto del mundo, Gorbachov dirigió su acción a acabar con los conflictos generados por la llamada “Guerra Fría”. El 14 de abril de 1988, decidió la retirada soviética de Afganistán, que se concretó al año siguiente. Hizo que los vietnamitas se retiraran de Camboya. Eso permitió la normalización de relaciones con China. En África se desligó de la suerte de la dictadura etíope de Mengistu y 137 aceptó la retirada de las tropas cubanas de Angola en 1988. Al no lograr convencer a Fidel Castro de las bondades de la “Perestroika”, retira la ayuda económica que había servido sólo para enriquecer a Castro y sus conmilitones. De esta forma, retira la presencia militar soviética en la isla. También contribuyó al fin de las guerras civiles en Nicaragua, lo que llevó a la derrota en las urnas de los Sandinistas, y luego a la pacificación de la guerrilla de El Salvador. Su negativa a intervenir para apuntalar las dictaduras totalitarias del resto de Europa, fue clave para que se produjeran las revoluciones de 1989 que propiciaron el derrumbe del comunismo en la región. De esta forma, Gorbachov no hizo nada para detener la descomposición del régimen Alemania Oriental, acelerado tras la caída del Muro de Berlín, el 9 de noviembre de 1989. Luego de una entrevista con el canciller Helmut Kohl en julio de 1990, el líder soviético aceptó el carácter inevitable de la reunificación de Alemania y de su permanencia en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). El derrumbe de las dictaduras comunistas llevó a la disolución del COMECON (tratado económico de los fracasados países que estaban detrás de la con acierto llamada “Cortina de Hierro”) en junio de 1991 y del Pacto de Varsovia (tratado de apoyo militar de los países comunistas) el 1º de julio de ese mismo año. El proceso culminó con la firma, el 19 de noviembre de 1990, en París, del Tratado para la reducción de fuerzas convencionales en Europa, que estableció la paridad militar entre las fuerzas de la OTAN y las del Pacto de Varsovia. Necesitamos un operador político Haciendo un ejercicio mental sustentado en hipótesis (que es un paso fundamental del Método Científico, nos preguntamos: ¿sería posible que, desde dentro, algunos de los que apoyan a Hugo Chávez Frías, ubicados en el centro del poder actualmente en Venezuela, y que están conscientes de la destrucción sistemática y acelerada del país, pudieran auspiciar la salida pacífica a la crisis política, económica y social que hoy vivimos? ¿No hay dentro de los sectores llamados revolucionarios nadie con suficiente poder que lo pueda propiciar? Esa 138 es una primera pregunta que dejo en el aire. Sin embargo, hay que tener en cuenta que todo ese complejo proceso que facilitó las decisiones de Gorvachov en Europa, tuvo como catalizador principal la actuación de esos pueblos sometidos que, decididamente, salieron a las calles. En Polonia, por ejemplo, el proceso que en la década de los 80 hizo caer una a una, como fichas de dominó a todos los gobiernos comunistas de Europa tiene nombre de mujer: Anna Walentynowicz. El despido de esta operadora de grúa en los astilleros Lenin de Gdansk desencadenó, el 14 de agosto de 1980, un movimiento de protesta que sacudió los cimientos del régimen comunista polaco. Tras una compleja situación de enfrentamientos con el gobierno totalitario, que tuvo como principal protagonista al sindicato independiente “Solidaridad” que estuvo apoyado, además, por el Papa de origen polaco Juan Pablo Segundo, lograron desestabilizar las bases del modelo opresor. Diez años más tarde llegó a la Presidencia del país, Lech Walesa, el carismático dirigente del sindicato Solidaridad. ¿Dónde está, pues, el sindicato nuestro, autónomo, de las empresas básicas de Guayana que cumplirá con ese papel en la actual coyuntura venezolana?. En Hungría, en junio de 1989 el Partido Socialista Obrero de ese país (el PUS de allá), poco antes de su autodisolución, decidió abrir los ojos a la Historia y el Parlamento aprobó la rehabilitación del líder del intento de apertura liderado treinta y un años antes, Imre Nagy, que después fue aplastada y culminó con su fusilamiento. De la misma manera, calificó de “error” la participación de sus tropas en la invasión de Checoslovaquia, para aplastar la Primavera de Praga. A finales de octubre del 89, diez días antes de la caída del Muro de Berlín, cortaron las alambradas electrificadas que separaban su territorio de Austria. El 25 de marzo de 1990, Hungría celebraba sus primeras elecciones libres en 47 años, que arrebataron el poder a los comunistas. En Checoslovaquia, los hechos comenzaron a finales de 1987, con la progresiva retirada de los cargos que poseía Gustav Husak, quien, desde 1968, era el secretario general del Partido Comunista Checoslovaco (PCCH), y la paulatina asunción de Milos Jakes. 139 Ladislav Adamec al frente del Gobierno, en diciembre de 1988, no logra contener a la oposición. Esta, encabezada por el movimiento de intelectuales Carta 77, uno de cuyos dirigentes es el escritor Vaclav Havel, comienza a presionar al Gobierno con marchas de protesta. El carácter meramente económico de las reformas no contenta a los checoslovacos, mucho menos cuando en otros países vecinos la democracia comienza a abrirse paso. Esto aterroriza a la cúpula comunista, que intenta frenar el ritmo de los cambios. Entretanto, las marchas de protesta convocadas por la oposición congregan a medio millón de manifestantes a finales de febrero del 89. El Gobierno se ve obligado a claudicar. En diciembre Adamec es sustituido por Marian Calfa, que acepta a once independientes y miembros de la oposición entre sus 21 ministros. El primer gobierno no enteramente comunista en 41 años. Es el fin. El 29 de diciembre Havel es nombrado presidente del país. El 9 de junio los checoslovacos acuden a votar en las primeras elecciones libres en 44 años y dan el triunfo al Foro Cívico, que obtiene el 46% de los votos y mayoría absoluta en el Parlamento. De esso es de lo que hablamos: un pueblo en la calle no lo para nadie. El caso búlgaro es peculiar. Lo que acercó al régimen de Todor Yivkov al campo de las reformas fue la deuda exterior: 10 mil millones de dólares, una enormidad para un país con nueve millones de habitantes. Yivkov intentó limitar la Perestroika al campo de la economía y, para ello, no dudó en purgar a los miembros del partido que pretendían llevar la reforma al campo político. Sin embargo, el efecto dominó se impuso. Yivkov fue depuesto el 10 de octubre de 1989 y juzgado por «enriquecimiento ilícito» cinco meses más tarde. En junio de 1990, bajo la dirección de Alexander Lilov, el país celebró sus primeras elecciones libres en 46 años, que ganaron los comunistas reformados. La salida: ¿pacífica o cruenta? De todos estos casos, el que rompió la regla de la salida pacífica fue Rumania. Las imágenes de la ejecución sumarísima del matrimonio Ceaucescu, el 25 de diciembre de 1989, son, junto con las de la caída 140 del Muro, las que más impactaron a la opinión pública mundial. El supuesto pacifismo de Nicolae Ceaucescu, su alejamiento de la órbita soviética, el acercamiento a China y las buenas relaciones con Israel, le valieron a Rumania sustanciosas ayudas económicas de Estados Unidos. Estas ayudaron a aplazar el hundimiento de la ineficiente economía rumana. Todo ello no evitó que, en diciembre de 1989, un engaño (típico de los militares y demagogos), una inexistente matanza de miles de civiles inocentes en la localidad de Timisoara, provocara un levantamiento popular (¡el pueblo a la calle!), aprovechando una de las manifestaciones de adhesión convocadas por el régimen. La lucha se extendió a las calles de Bucarest y esta vez los muertos fueron reales, provocados por el régimen opresor y totalitario. Los Ceaucescu, entre ellos. ¿Por cuál de las salidas optaremos los venezolanos? ¿Por la pacífica, auspiciada por algún operador político, que nos devuelva el modelo de libertad en el que habíamos incursionado por 40 años? ¿Quizás por la violencia como la que eliminó de forma traumática miles de vidas y al mandatario rumano y su esposa, que ya narramos? Necesitamos en nuestro país –hipótesis de trabajo científico social- un visionario como Mijail Gorbachov que auspicie esa salida y que les permitirá, además, mantener una importante cuota de poder en los cambios reales a los que todos aspiramos ¿Existe ese personaje dentro del gobierno de Chávez? No sabemos. De lo que sí estamos seguros es que este pueblo, tras el desenmascaramiento totalitario y comunista de Hugo Chávez, ha decidido un viraje que llegará. Más temprano que tarde. Ya lo verán. 141 Capítulo XXXI: Imagen y semejanza de Cuba La libertad de expresión no existe en los países socialistas, ya que se sustentan en un modelo totalitario, de partido único, donde el Estado lo controla todo. El líder en el modelo socialista lo es todo, todo lo ordena, es quien manda. Se puede llamar Secretario General, como en la Unión Soviética, o Comandante como en Cuba y Venezuela. Se sustenta en el culto a la personalidad de un caudillo que es quien manda y toda la sociedad le obedece. No hay espacio para la disidencia ni para el pluralismo ideológico. Por eso el periodismo libre, tal como lo conocemos quienes hemos vivido en democracia, es el primer proscrito a la hora de comenzar a consolidar el modelo. Hugo Chávez va acorralando al pueblo venezolano en múltiples y simultáneas: cierra un medio de comunicación y prepara un cóctel de nuevas leyes que darán al traste con nuestra debilitada democracia. Ya decidió no impulsar la reforma constitucional. No le hace falta. Simplemente, viola la Carta Magna vigente (como lo demuestra el cierre de RCTV), sancionará nuevas leyes, por la vía de la habilitante, que vulnerarán la propiedad, la autonomía sindical, el derecho a educar a nuestros hijos como nos parezca, continuará progresivamente con medidas económicas que conduzcan al quiebre de la empresa privada ( a través del Seniat y el control de precios), principal empleadora del país, profundizará el proceso de comunistización de las Fuerzas Armadas, de las policías regionales y municipales, del Poder Judicial, de toda la estructura administrativa del Estado (ministerios gobernaciones y alcaldías) que incluye, además, Petróleos de Venezuela (PDVSA) y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG). El régimen de partido único ha comenzado a implantarse con la imposición del PUS (Partido Único Socialista) y quienes osen no aceptarlo, como Ismael García, Ramón 142 Martínez o Didalco Bolívar, han quedado fuera del proyecto, proscritos por un régimen que quiere someterlo todo, todos de rodillas ante el único e indiscutible líder de la “revolución socialista” venezolana. Nuestro país se parece cada día más a la Cuba de los inicios de la revolución fidelista: empresarios acorralados, inseguridad personal desbordada, desabastecimiento, destrucción de todo el aparato productivo. El socialismo es un eficaz método de destrucción. Implica la demolición progresiva (¿será por eso que se autodenominan “progresistas”?) de toda la estructura organizacional de la sociedad democrática. Se vulneran los principios fundamentales del proyecto Roussoniano que implica imperio de la ley, autonomía de poderes, propiedad privada, libertad de expresión, alternabilidad en el poder, elecciones libres organizadas por un árbitro imparcial, sujeción de los hombres de armas al poder civil, respeto a las minorías. El modelo fascista-socialista significa todo lo contrario. De ahí que es imposible, para quienes propugnamos la libertad, no oponernos. No somos “de oposición” en el sentido democrático del término, porque eso implicaría el libre juego político sobre la base de reglas de participación claras en el marco de una auténtica democracia liberal. No. Somos opositores al totalitarismo. Es decir, somos demócratas. Ya aquí nos deslastramos del calificativo que nos intenta endosar el régimen (“oposición golpista”) porque son precisamente ellos quienes han dado un golpe mortal a la institucionalidad, a la constitución democrática, al imperio de la ley. Lo demás es simple propaganda política de frases hechas que repiten como “loros, loritos” los ignorantes, los estúpidos y los codiciosos. Todos serán destruidos en su momento, cuando ya la “revolución” no los necesite. Hay suficientes ejemplos de casos en las anteriores “revoluciones socialistas” del planeta. Esa es una película repetida. Ignorancia histórica. Lo más grave –y que hemos intentado combatir con estos trabajos- es precisamente la absoluta ignorancia de la historia de quienes siguen a ciegas al esta nueva ( sólo en el orden cronológico) versión del 143 flautista de Hamelin. Son quienes no saben que se trata de un exterminador de roedores y los ratones de turno no lo saben. En otras latitudes y en tiempos anteriores, sucedió lo mismo. Y produjo el mismo resultado. Basta ver las historias de Rusia (la primera de las revoluciones socialistas) China, Alemania Oriental, Hungría, Polonia, Yugoslavia, Checoslovaquia, Albania, Vietnam, Camboya, Cuba. Gobernantes que permanecen en el poder hasta su muerte, quienes son sucedidos por los herederos que ellos designen. Todo sobre el andamiaje de una seudoideología denominada “materialismo histórico” escrita en los albores del capitalismo por sujetos de otros tiempos, otras realidades. Carlos Marx, Federico Engels, Vladimir Ilich Lenin. Son películas viejas, en blanco y negro, con rayas, que pasan por un proyector de tubos de tugsteno, en un cine igual de vetusto, con sillas de maderas y sin techo. Ya pasó antes y se repetirá ahora. Los únicos beneficiados serán el caudillo y sus colaboradores inmediatos, quienes serán desechables y cambiarán según los caprichos del déspota. Un régimen así ha sido sólo posible sobre una montaña de cien millones de cadáveres. Venezuela, si se consolida el proyecto “socialista bolivariano”, aportará su cuota para la historia. Ya llevamos más de cien mil decesos auspiciados por la impunidad que permite el régimen para nutrir, con el lumpen proletariado, su estructura paramilitar represiva. Patria, socialismo y muerte. Sobre todo esto último. Los derechos no se negocian Y eso parece ser lo que han entendido quienes recibieron el testigo en esta larga carrera de obstáculos que impulsamos en defensa de las libertades democráticas en Venezuela. Nuestros jóvenes, con edades comprendidas entre los 16 y los 25 años, son hijos de la democracia. Disfrutan de la modernidad y la tecnología que esta les proporciona. Y están conscientes (o al menos lo intuyen) que estos pasos agigantados de la humanidad han sido sólo posibles luego de la aparición del liberalismo en la historia humana. Ciencia, tecnología y libertad van de la mano. Cualquier paso que vaya en sentido contrario, hacia la reinstauración de los absolutismos medievales (con sus 144 nuevos ropajes ideológicos), implicaría congelar el progreso. Por eso se distancian de los fracasados modelos de lucha e impulsan una paciente ola de protestas en la búsqueda de que se detenga este proceso devastador iniciado por los “progresistas” venezolanos. Y en este proceso, el caudillo que tiene la receta dada por Fidel castro en la mano, no hay variables para este tsunami que se acerca, que crece, que se alimenta de sueños, esperanzas, de ciencia, de historia, de conocimientos. Va acompañada de poesía, música, artes plásticas. Se sustenta en sueños, anhelos y esperanzas. Para los jóvenes todo es futuro y la historia es la gran maestra para no cometer los errores del pasado. Y en ese campo estos anacrónicos tienen la guerra perdida. La única estrategia que les queda es la aniquilación total, pero eso implicaría la desaparición absoluta de una generación de jóvenes con la que debe contar cualquier proyecto de país que se asuma seriamente como tal. Pero como este no es auténticamente un proyecto, no sería extraño que se jugaran esa carta. Pero hay otras variables a considerar. En esta red de afectos que implica el pueblo venezolano, esos muchachos son hijos de militares, o sobrinos de funcionarios públicos, o hermanos de policías. Familias de jueces, de contratistas del Estado, primos de Fiscales del Ministerio Público. Y pese a las advertencias que les han hecho esos burócratas, ellos no están dispuestos a entregar su primogenitura por un plato de lentejas. De ahí la enorme esperanza que todos tenemos en esta juventud venezolana que está cumpliendo con su papel de ser la levadura de la masa. Y allí el régimen oprobioso que tratan de imponernos, tiene el juego trancado. Además tiene todos los “seis”, “cinco “”cuatros”, hablando en términos de dominó. Por eso estamos muy esperanzados y confiados en que –a menos que haya un criminal exterminio de los demócratas, jóvenes incluidos- no será posible la consolidación del régimen. Aún no sabemos el final de esta versión de la película, pero no les será fácil la consolidación del proyecto criminal y destructor de todas las libertades. Y tanto el sátrapa como sus conmilitones podrían llevar la peor parte. Vamos a esperar los hechos y, mie3ntras tanto, seguiremos advirtiendo sobre las graves consecuencias que implica 145 esta gigantesca involución, este salto atrás de más un siglo, que implica la consolidación de una sociedad socialista en Venezuela. 146 Capítulo XXXII: Las seudociencias Quizás abordar el siguiente tema resulte difícil para algunos de los lectores de esta serie. Sin embargo, en el marco de que debemos dar argumentos a la juventud universitaria que lucha por defender y preservar los valores democráticos, es que he pensado en desarrollarlo por lo que, espero, lo haya expuesto de una forma comprensible. En los albores de la modernidad comenzaron a aparecer tímidas manifestaciones que apuntaban a lo que luego serían las ciencias, tal como las conocemos hoy en día. Hay que resaltar que el conocimiento científico es otro de los “milagros” del liberalismo. El más reciente diseño organizacional y cultural logrado por el hombre que se sustenta en el individualismo y la libertad, impulsaría el más acelerado crecimiento en cuanto a conocimientos científicos y tecnológicos. De los 150 mil años que tiene el hombre (Homo Sapiens) sobre la tierra, sólo en los últimos 300 años ha conquistado y dominado la naturaleza como nunca antes lo hizo, extendiendo sus sentidos hasta donde nunca antes había llegado. Esto se logró con una rapidez inusitada gracias al liberalismo. Con su llegada, como forma de organización sustentada en la libertad y la individualidad, una explosión multifacética de inventores e inventos, produjeron los más asombrosos avances tecnológicos de los cuales muchos aún hoy disfrutamos, aunque con grandes innovaciones. Antes de ese portentoso acontecimiento, la búsqueda del conocimientos se cimentó en la filosofía y, luego, en las proto-ciencias o seudociencias, tímidos esfuerzos de avance intelectual que servirían, luego, de base para las verdaderas ciencias, que vinieron –como ya señalamos- de la mano del liberalismo. Las llamadas seudociencias significaron, sin duda, la expresión de la búsqueda de respuestas ante las infinitas preguntas que la humanidad se ha hecho desde que apareció el hombre en el 147 escenario del planeta. Así es, por ejemplo, el caso de la alquimia. Dicen los entendidos que en el año 140 de nuestra era (o después de Cristo, como prefieran) apareció en China el primer tratado alquímico y las ideas que contiene aparecen estrechamente relacionadas con el Taoísmo. Sin embargo, fueron los árabes los que impulsaron su divulgación en Europa. En el estudio de la alquimia destacan figuras como las de San Alberto Magno (1193-1280), el mallorquín Ramón Llull (1232-1315), Roger Bacon (1213-1294), Arnaldo de Vilanova (1250-1311), Paracelso (1493-1541) e incluso Newton, el primer gran científico moderno que, aunque no se dedicó por completo a la alquimia, la citó con frecuencia en sus obras. Fueron famosos los intentos de algunos alquimistas en transformar en oro otros metales. Infructuosamente, claro está, porque se trataba de deseos y como reza el refranero, ellos no preñan. ¿Era la alquimia una ciencia?. Por supuesto que no. Para que lo hubiera sido tendría que haberse basado en el método científico, tal como fue diseñado en el marco del liberalismo. Sin embargo, tal curiosidad impulsó el nacimiento de la química, muchos siglos después, en el marco del modelo que propugna la libertad del individuo en el marco de la organización que auspicia tales saltos gigantescos de la humanidad: la democracia. Ciencias duras y blandas Es así que la ciencia, tal como la conocemos hoy en día, es producto del liberalismo. Algunos teóricos de la Epistemología y de la Filosofía de la Ciencia, aseguran que estas se dividen en dos grandes grupos: las ciencias exactas o duras (física, matemática, biología, química, etc.) que aceptan la experimentación basada en la aislamiento de variables y ciencias humanas o blandas (psicología, sociología, economía, derecho, etc.), que son aquellas que, al no aceptar la experimentación y el aislamiento de variables ( porque es el ser humano individual o en sociedad su objeto de estudio), sufre ciertas limitaciones que permiten una aproximación a la verdad ( que es la ausencia de contradicciones y es científica). Estas ciencias se expresan en “escuelas” o “corrientes” que permiten un acercamiento a 148 la verdad científica, sin que sus certezas o afirmaciones sean aceptadas, en un primer momento, de forma definitiva. Así en la psicología, por ejemplo, está el Psicoanálisis, Gestalt, Análisis Transaccional, entre otras, como “escuelas”. En la medida en que sus aproximaciones científicas sean comprobables fácticamente, podrán ser aceptadas como conocimiento científico. Esta diferenciación es fundamental metodológicamente para aclarar las dudas que puedan surgir al tratar de responder la siguiente pregunta ( y que es el tema que intentamos desarrollar): ¿es el Materialismo Histórico ( o Científico, como lo llaman los socialistas) de verdad una ciencia? ¿O será acaso una seudociencia como la alquimia, nacida y divulgada durante el medioevo? Ciencia y liberalismo van de la mano La primera aseveración que debemos hacer es que no puede haber ciencia sino en el marco de la democracia liberal. Esta se sustenta, como saben en la libertad y en la estimulación del individuo como ser único e irrepetible. Así mismo, se desarrolla en el marco del modelo político de libertades que se soporta en las columnas de la propiedad privada, el voto universal, directo y secreto de la población apta para sufragar ; la división y autonomía de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial; la alternabilidad del Poder, que implica que nadie puede detentarlo de forma continua o indefinida (como trata de imponerlo hoy Hugo Chávez a los venezolanos) ; la igualdad de oportunidades ( que es la única posible en libertad), el respeto a los Derechos Humanos garantizados en la Carta Universal que los agrupa. En el momento en que Carlos Marx y Federico Engels proponen su tal Materialismo “Científico”, ambos vivían en países capitalistas. Pudieron considerar sus propuestas como una protociencia, vinculada a la Economía o a la Sociología. Sólo había que esperar su demostración fáctica para determinar si sus aseveraciones eran acertadas. La historia (como lo demuestran las experiencias del mal llamado “socialismo real”) demostró todo lo contrario. Para colmo, buscaron diseñar un modelo de sociedad distinto al liberal que no fue otro que regresar a los 149 absolutismos medievales disfrazados con ropajes ideológicos de justicia social, proletariadismo; en fin, esa estúpida e imposible búsqueda de la sociedad sin clases, propia de una propuesta religiosa más que de una oferta estrictamente científica (inclusive, si la inscribimos en las llamadas “ciencias blandas o humanas”, según la diferenciación hecha arriba). Ciertamente, Marx y Engels hicieron aportes (como efectivamente los hizo la fenecida Alquimia) a la Economía del Trabajo. El concepto de Plusvalía (como causa de la generación de riqueza) fue, sin duda, uno de esos aportes. Sin embargo, cuando nace el movimiento obrero organizado y se discute el primer contrato colectivo de trabajo, su aporte quedó suficientemente satisfecho. Su gran error fue el proponer un nuevo modelo de organización humana que intentara superar al liberal. Fue algo así como la ya referida búsqueda de los alquimistas de convertir en oro a los otros metales. Y ahí está la historia Y es allí, en la certeza de la imposible igualdad que propugnan los socialistas en que se cae todo el tinglado de adecuaciones falsas, irreales y comprobables en la historia reciente, lo que ha significado el mal llamado “socialismo científico”. Cien millones de muertos, la desaparición de generaciones enteras de seres humanos subyugados, el sometimiento compulsivo de sectores medios y populares de los países hundidos este modelo despótico, la destrucción total del aparato productivo, la colectivización contranatura de la sociedad, el control absoluto de todos los sectores de la sociedad por una nueva nobleza feudal representada por el partido único, la aparición del monarca medieval encarnado en el Secretario General del Partido Socialista, Comandante en Jefe o cualquier otro título que le pongan, enmascarados en un populismo manipulador y eminentemente propagandístico, amén del más rancio militarismo. ¿Puede surgir en el ámbito de control de este neomedioevo disimulado con ropajes ideológicos alguna ciencia posible? Recuerdo el caso de un amigo, ya desaparecido, de origen alemán, el Dr. Jürgen Stock. Era astrofísico y 150 profesor titular de la Universidad de Los Andes. Me contó muchas veces de sus viajes a los países socialistas. Lo que más le llamaba la atención era el atraso tecnológico que experimentaban esos países (incluso Alemania Oriental, donde geográficamente había nacido). Y lo peor, cómo los pueblos de estos países vivían oprimidos y empobrecidos. Pretensiones científicas del socialismo Es muy importante aclarar a nuestros muchachos y muchachas, estudiantes universitarios, que las pretensiones científicas del marxismo son sólo eso: aspiraciones; y allí se quedan. El tan cacareado “Materialismo Histórico”, también llamado “Materialismo `Científico”, no soporta un análisis filosófico, epistemológico, gnoseológico serio. Es tan vigente como la discusión bizantina de cuántos ángeles podrían caber en la cabeza de un alfiler. No sólo nació por el camino equivocado (emulando a los Sofistas griegos, derrotados racionalmente por Aristóteles), sino que se tragó la flecha de la autopista de la historia, dirigiendo a la sección de la humanidad que logró engañar hacia un modelo monárquico de nuevo cuño. En esa estructura opresora, aniquiladora de la libertad humana, no puede nacer ni crecer ciencia alguna. No sólo no es científico, sino que nunca logrará serlo. Por eso, sobre la base de las certezas fácticas comprobables que nos ofrece la historia de sus experiencias en numerosos países del mundo, es que estamos seguros de su fracaso, aunque este modelo monárquico pretenda ser reinventado, como ya lo hicieron muchos otros en Cuba, Camboya, Yugoslavia, Chile, Nicaragua sandinista, etc. No sirve. No es científico. No es igualitario. Además, es el menos igualitario porque el liberalismo auspicia la libertad de oportunidades, como ya señalamos. Quienes asuman este camino, no sólo van inexorablemente a la derrota de sus aspiraciones individuales y colectivas, sino, incluso, a la opresión y la muerte. 151 Capítulo XXXIII: El marxismo, el nuevo oscurantismo El oscurantismo fue una realidad que se experimentó en el largo período medieval. Fueron casi mil años de atraso, entre los siglos V y XIV de nuestra era. La humanidad metida en el congelador de la ignorancia, la superstición y la superchería. Se caracterizó, entre otros aspectos, por el imperio del fanatismo religioso y la persecución implacable contra quienes no se plegaban a la particular visión de aquellos que, bajo la dominación ideológica y política teocrática, imponían la tiranía de reyes y nobles en nombre de un Dios bastante lejano al Jesús de Nazaret de los evangelios. En nombre su nombre se persiguió implacablemente a todos aquellos que se atrevieron a disentir, a buscar un camino distinto a acceder a Dios del que seguían quienes detentaban el poder político, económico y religioso que, en suma, era el mismo. Estos eran llamados herejes, brujas o seguidores de Satanás. Eran quemados en la hoguera y el juicio que imponía la denominada “Santa Inquisición” se basaba en chismes y sospechas; fueron muchos los casos en los que terminaron sentenciados a muerte, con estas acusaciones, rivales indeseados o rebeldes que se oponían al despotismo y la barbarie. Los juicios distaban a los que trajo consigo el liberalismo, muchos siglos después. El acusado era considerado culpable previamente, simplemente por ser sospechoso. Entonces, debía reconocer su falta. Si lo hacía, le perdonaban la vida y se le condenaba a prisión perpetua en las mazmorras de algún castillo. Si no, era cruelmente asesinado en la hoguera. Fueron famosos los casos, por ejemplo, de la persecución y condena de la Orden de los Caballeros Templarios, que conformaron un ejército muy poderoso de monjes que abrazaban la carrera de las armas para defender a los peregrinos que visitaban 152 la llamada Tierra Santa o los Santos Lugares, la tierra que pisó Jesucristo durante sus 33 años de vida entre nosotros. En esa época, esos territorios estaban en disputa con las naciones islámicas que, en nombre de su dios Alá, luchaban contra los cristianos a quienes (al igual que hoy lo hacen los fundamentalistas musulmanes) llamaban infieles. Esas luchas fueron denominadas “Guerras Santas” y los ejércitos cristianos lucharon denodadamente para conquistar y preservar su dominio en estos territorios. Los llamados Templarios eran monjes que abrazaban la vida religiosa y hacían votos de pobreza, castidad y obediencia. Igualmente, asumían el celibato. Sin embargo, en los años sucesivos a sus constantes batallas, fueron adueñándose de territorios y construyendo castillos. Muchos vasallos de territorios europeos se supeditaron a su protección. El exitoso manejo que hicieron, para entonces, de la realidad económica, los convirtió en una orden religiosa muy poderosa que pronto despertaría la envidia de reyes, príncipes; de muchos cardenales y obispos que veían en ellos una peligrosa competencia. No tardó en aparecer la “Santa Inquisición” que inició procesos contra sus cabecillas. Como estos no reconocieron falta alguna (porque no la habían cometido), fueron quemados en la hoguera, sus propiedades confiscadas y sus riquezas repartidas. Durante esa época se registró la proliferación y comercio de las llamadas “reliquias religiosas”. Desde el pelo de San Lázaro, el dedo meñique de San Lorenzo, un trozo de tela de Santa Eulalia e, incluso, pedazos de madera supuestamente sacados de la cruz de Cristo o supuestos fierros tomados de los clavos que mancillaron su santísimo cuerpo. Esta práctica fue iniciada por Elena, la esposa del emperador romano Constantino El Grande, quien sustituyó el politeísmo por el cristianismo en los albores del medioevo. Nació un lucrativo comercio que explotó las creencias de las gentes de entonces que incluía, además, el cobro de diezmos y la venta de indulgencias. 153 Renacimiento: el protoliberalismo Precisamente, para intentar despojarse del cepo de la servidumbre impuesto por el oscurantismo supersticioso que metió en el congelador de la historia a la humanidad, aparece en escena el Renacimiento. Según la enciclopedia Encarta, “El renacimiento comenzó en Italia en el siglo XIV y se difundió por el resto de Europa durante los siglos XV y XVI. En este periodo, la fragmentaria sociedad feudal de la edad media, caracterizada por una economía básicamente agrícola y una vida cultural e intelectual dominada por la Iglesia, se transformó en una sociedad dominada progresivamente por instituciones políticas centralizadas, con una economía urbana y mercantil, en la que se desarrolló el mecenazgo de la educación, de las artes y de la música”. Es así que aparecen, de la mano de esta reacción al autoritarismo supersticioso y referido principalmente a las bellas artes, grandes individualidades como Leonardo Da Vinci, Miguel Angel Buonnarroti,; en lo religioso insurgen, paralelamente, Martín Lutero y Juan Calvino. Así mismo, el polaco Nicolás Copérnico funda las bases de la astronomía moderna, iniciativa que fue seguida por Galileo Galilei. Sólo mencionamos algunos nombres de lo que fue una etapa histórica significativa que fundó las bases de luego sería conocido como el pensamiento liberal. Sin embargo, el oscurantismo medieval, frente a estos primeros intentos de libertad e individualidad, reacciona. Aparece la Contrarreforma. La iglesia católica persigue a los promotores del individualismo, base de sustentación de ese portento histórico que será el liberalismo. Galileo Galilei (1564-1642), de quien ya nos referimos someramente arriba, desarrolla la propuesta de la teoría heliocéntrica de Nicolás Copérnico (1473-1543) que eliminaba la creencia que defendía de que todos los astros (el sol, los planetas, la luna y las estrellas) giraban en torno a la tierra, que era el centro del universo creado por Dios para los hombres. En plena Contrarreforma (la reacción de catolicismo contra el protestantismo) aparece este intelectual a desafiar, con certezas logradas por los razonamientos de 154 su antecesor y los propios, y confirmadas con rudimentarios telescopios inventados por él, de que era la tierra la que giraba alrededor del sol. Eso originó que el “Santo Oficio” (los tribunales de persecución del modelo de sociedad preexistente) le abrieran un proceso judicial que lo condenó a prisión perpetua –luego de retractarse- , pena suavizada al permitírsele que la cumpliera en su villa de Arcetri. En esa época, el acusado era culpable, No había que demostrar su inocencia. La presunción de inocencia es otro concepto que llegó de la mano del liberalismo. En la localidad de Arcetri transcurrieron los últimos años de la vida de Galilei, ensombrecidos por la muerte de su hija Virginia, por la ceguera y por una salud cada vez más precaria. Su hazaña fue reivindicada, en primer lugar, con la llegada del individualismo que rescató las certezas obtenidas por ellos a través de la observación y el razonamiento. Luego reimpulsada por la astrofísica moderna que, recientemente, ha presentado los rudimentos de una Teoría Total del Universo. Finalmente la Iglesia católica, en voz del Papa Juan Pablo Segundo, reconoció su error al haber perseguido de esta forma implacable y estúpida al conocimiento, al pensamiento de Galileo y de muchos otros pensadores. Marxismo: el nuevo oscurantismo En continuidad con el análisis iniciado con nuestro trabajo anterior, el llamado “materialismo histórico” no sólo no es científico, sino que es contra-científico. La ciencia nació, se desarrolló y se difundió en estos poco más de 300 años de la historia de la humanidad (¡de 150 mil que tiene el hombre en la tierra!) que representa el liberalismo. Se sustenta, como señalamos en nuestra entrega anterior, en el respeto a la propiedad privada, el voto universal, directo y secreto de los aptos para ejercer este derecho; también en la organización política de la democracia liberal, tal como la conocimos los venezolanos hasta la llegada de Hugo Chávez al poder que implicó, además, la presencia de un árbitro electoral imparcial, autonomía de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial; alternabilidad del poder, que significa que ningún 155 gobernante puede resultar reelecto de forma indefinida o continuada, la sujeción de las Fuerzas Armadas al poder civil, la descentralización y la desconcentración del poder político. La experiencia del marxismo demuestra que es el regreso al oscurantismo medieval con los ropajes del denominado materialismo histórico. Es sustentar la organización de la sociedad a la superstición autoritaria disfrazada de ropajes ideológicos de justicia social e igualdad, ambos conceptos inadecuados y e irreales, por decir lo menos. De ahí los fracasos en ciencia y tecnología que han experimentado los países del llamado “socialismo real”. Todos ellos fueron metidos en un congelador en materia de medicina, telecomunicaciones, informática, automovilismo, navegación aérea y náutica, maquinaria pesada, tecnología de alimentos. Lo que lograron en armamentismo lo hicieron a través del espionaje, robándose los secretos militares del único mundo auténticamente desarrollado: el liberal. Por eso, por ejemplo, ir a La Habana, Cuba, es como retroceder en el tiempo 50 años. Los cubanos tienen la tecnología de ese entonces, cuando Fidel ascendió al poder. Las innovaciones han sido adquiridas del mundo moderno, el nuestro, el democrático, donde no sólo ser rico no es malo, sino que es necesario para potenciar el desarrollo del ser humano en sociedad. Basta con que usted lo constate yendo a ese esperpento con pretensiones de país. 156 Capítulo XXXIV: Marxismo es superstición En el marco de dar continuidad a la propuesta que hemos hecho, en el sentido de que el llamado “materialismo histórico” implica una regresión hacia el oscurantismo medieval, es que planteamos que, sin duda, el exponente más conspicuo de esta realidad es precisamente Fidel Castro. Su régimen oprobioso de 50 años de existencia se sustenta en los pilares de ignorancia, miedo, corrupción y superstición. Este último aspecto es el que buscamos desarrollar en esta entrega de la serie “Socialismo…¿con qué se come eso?”. En primer lugar, debemos definir la religiosidad, desde el punto de vista filosóficoontológico, inicialmente, como apertura a la trascendencia. Debemos señalar, además, que la actitud religiosa es inherente al ser humano. Responde a la necesidad de dar explicación a su origen y fin, a las leyes que rigen el universo, a la convicción de que existe una realidad espiritual intangible. Afecta, además, su conducta (moral) y se expresa de forma individual o colectiva (liturgia). En primer lugar debemos subrayar que una de las incongruencias fundamentales del llamado “materialismo histórico” es el ateísmo que ha arrastrado desde su nacimiento, con las tesis iniciales de Carlos Marx y Federico Engels. Ateísmo que, por cierto, esta revolución pretende disimular con las constantes manipulaciones que hace Hugo Chávez de textos sacados de contexto de la Biblia. Por otra parte, lo importante que hay que aclarar con respecto a este aspecto fundamental es que una religiosidad auténticamente humana, no debe ir contra el pensamiento; es decir, debe ser insertada en un contexto general que incluye, en primer lugar, la filosofía (entendiéndola como “visión razonada del objetivo real”) y, en segundo término (y no por ello menos importante), la ciencia. Si ignora estos dos referentes fundamentales, deja de ser religiosidad humana, en el sentido de que 157 debe estar insertado en la denominada conciencia inteligente. De tal forma que, por perder estos soportes gnoseológicos, se convierte en superstición. Eso fue precisamente lo que afectó a la humanidad durante los casi mil años del oscurantismo medieval. Y es lo que hay que evitar: que por la perversión de hombres codiciosos de poder como Fidel Castro, Stalin, Mao, Pol Pot, Kim Il Sung y Hugo Chávez, por sólo mencionar los más emblemáticos, regresemos a etapas superadas de la historia tras la aparición del liberalismo; éste último ha significado el salto más grande que la humanidad ha dado en sus 150 mil años de existencia. Santería cubana y el oscurantismo marxista En este orden de ideas es que presentamos el caso emblemático de Fidel Castro, el déspota de Cuba. Este sátrapa ha sustentado su dominación en cuatro pilares : la ignorancia del pueblo llano (ya que las clases medias y altas huyeron de la isla una vez iniciada la revolución), el terror ( impuesto por su ejército y los Comité de Defensa de la Revolución, similares a los consejos comunales nuestros), la corrupción ( que permite someter a los débiles éticos como el General Arnaldo Ochoa, involucrado por el régimen en delitos de narcotráfico y posteriormente fusilado) y la superstición. Y es aquí donde aparece la santería, que explota esa religiosidad del ser humano, pero que, a la vez, va en contraposición a la filosofía y a la ciencia. Y ese tipo de superstición es la que necesita el totalitarismo marxista. Ni el catolicismo moderno ni el protestantismo que llegó junto al liberalismo son convenientes, porque no van en contradicción con el pensamiento; al contrario, se nutren de él. Solamente ese tipo de “religiones” (al igual que el fundamentalismo islámico) son las que pueden ayudar a sostener un régimen de corte autoritario, “remake” (para utilizar un término de mercadeo que implica renovación o presentación nueva de algo viejo, sin tocar su esencia) de los absolutismos medievales. Pero, ¿qué es la santería?. Citamos: “La Santería es una religión que tiene sus orígenes con la tribu Yoruba del África. Los Yorubas vivían en lo que se conoce hoy como Nigeria, a lo largo del Río Níger. La Santería adora una fuerza central y creativa llamada Olodumare. De él procede todo lo que existe, y todo regresa a él. Olodumare se expresa a sí mismo en el mundo creado a través de 158 Ashe. Este es la sangre de la vida cósmica, el poder de Olodumare hacia la vida, la fuerza y la justicia. Es una corriente divina que encuentra muchos canales de mayor o menor receptividad. Ashe es la base absoluta de la realidad. Creen que la vida de cada persona viene ya determinada antes del nacimiento en Ile-Olofi, la casa de Dios en el cielo. Aquellos que no lo cumplen serán castigados por los orishas y deben reencarnar hasta satisfacer el castigo. Antes de la iniciación la persona debe recibir una "limpieza" para purificarse. La primera iniciación es la de los collares, conocidos como "elekes". Se entregan cinco collares que pertenecen a Eleggua, Obatalá, Shangó, Yemayá y Oshún y protegen del mal (que nunca, por cierto, es representado por el marxismo-leninismo y el materialismo histórico socialista, comentario nuestro). No todos los practicantes de la Santería son santeros. Este nombre suele reservarse a los sacerdotes (omo-orishas) de la Santería a quienes acuden los creyentes para consultas y sacrificios. La ceremonia en la que una persona se hace santo se llama "asiento". Se forma un vínculo entre el santero y un orisha. Después de haber recibido el "asiento" la persona puede ascender en la jerarquía de la Santería. Pasan entonces por el rito del cuchillo que les permite hacer sacrificios de animales. Los sacerdotes de mayor jerarquía se llaman "babalaos". Hacen de adivinos de modo que si hay un caso muy difícil para el santero este acude al "babalao".Las adivinaciones son para conocer el futuro o para descubrir alguna maldición o si a la persona se le ha pegado un espíritu maligno o bueno. En caso de espíritu maligno, el santero procede a hacer "limpieza". Si el espíritu es bueno, hay que “reesforzarlo”. Para la adivinación los santeros utilizan diferentes formas de interpretar un oráculo. A los orishas hay que ofrecerles sacrificios o "ebbo" lo cual necesitan para vivir ya que no son inmortales. El orisha consume el ashe invisible liberado de los sacrificios a través de una consagración (palabras sagradas de dedicación).El "ebbo" consiste de hierbas especiales y la sangre de los animales sacrificados. Cada orisha tiene unas hierbas y animales que le gusta consumir y solo estas cosas que disfruta el orisha son las que se deben sacrificar. La sangre y las hierbas se vierten sobre piedras rituales que representan a cada orisha y que contienen la esencia espiritual de los orishas. Por eso la Santería requiere de tiendas llamadas "botánicas" donde se venden las hierbas y otros objetos de la religión” (todos estos datos han sido tomados del trabajo publicado en 159 Internet “Santería” del Sacerdote católico Jordi Rivero). Ahora, si la creencia propugnada por el socialismo cubano es la santería y esta asegura (como resaltamos en bastardillas) que todo está predeterminado, que todo procede de un designio preestablecido, ¿cómo pueden entonces los cubanos que siguen a esta, la “religión” oficial del socialismo fidelista enfrentarse al despotismo totalitario impuesto hace ya 50 años? ¿Cómo salir del marasmo, del congelador del tiempo en el que se ha inserto la isla de manos del imposible igualitarismo marxista? La superstición alimenta el mito y atornilla al déspota De otra página en Internet que tiene la superchería (que contradictorio ¿ verdad?) tomamos lo siguiente: “Para los cubanos no constituye un secreto la vinculación de Fidel con las religiones afrocubanas. Desde Yorubas hasta Espiritistas le han, en múltiples ocasiones, sonado los caracoles, tirado los cocos o leído las cartas a Fidel porque si algo preocupa al mayimbe principal es su futuro. Tampoco son desconocidos los sacrificios de animales, algunos traídos de la tierra de los esclavos que poblaron el caimán verde, y se les vio desembarcar tras compartir el vuelo con los soldados cubanos que regresaban de Angola. Exóticos tigres y leones que nunca vieron el zoológico, hacían la travesía junto a los guerreros que el comandante "sacudía" en el continente Africano. Se le vio vestido de blanco por única vez en una foto tomada en un viaje a Guinea, donde se comentaba abiertamente que se había hecho Santo Allí fue su Elbó y allí le leyeron su Itá. Hay quienes dicen que sus extraños poderes provienen de pacto con el innombrable, quien exige sacrificios con sangre humana. El número 13 parece ser la fecha escogida, fue un 13 de julio de 1963 que fueron fusilados 21 oficiales, de los cuales la única prueba consistía en los dictámenes de les caracoles. Fue un 13 de julio que se derramaría la sangre de un legítimo hijo de Changó, Arnaldo Ochoa y también de Amado Padrón y Jorge Martínez. No escaparía, contrario a los consejos de los Agoreros Mayores, Antonio de la Guardia; se cometía con su asesinato el imperdonable crimen en la Santería de separar jimaguas. Fue un 13 de julio que Fidel Castro 160 ordenó hundir el remolcador “13 de Marzo” derramando la sangre de niños en el malecón habanero. Un 13 de agosto, día de su cumpleaños en 1963, ofrendaba sangre humana. Cinco fusilados en la Ceiba y cinco en Manacas eran la ofrenda a sus Orishas. Su camal Celia Sánchez y su inseparable Dr. Vallejo estaban a cargo de las ofrendas aunque no se percataron que la letra claramente indicaba que muchos de los presentes no tardarían en desaparecer. Celia y Vallejo también serian devorados por los dioses que se prestaban a alimentar. Y así el hombre que le da la bienvenida al Papa y resuelve con evangélicos y protestantes rige los destinos de un pueblo, no mediante su capacidad de raciocinio, sino de acuerdo con la forma en que caigan los caracoles o lo que interprete el Awo al tirar los cocos” (tomado de http://qbanrum.tripod.com/carta.html). Al igual que los creyentes del medioevo estaban convencidos de que la tierra era plana y de que era el centro del universo, además de que quemaban a herejes y brujas, así los “revolucionarios” cubanos desvían su religiosidad –inherente a la condición humana como ya señalamos arriba- hacia la superchería y la superstición. Muy conveniente para el déspota que alimenta, como hemos visto en el último texto citado, el mito del semi-dios, de casi deidad que está por encima del bien y del mal, que decide sobre la vida y la muerte, hasta que el pueblo cubano se arreche (si le queda algún recodo de dignidad) y salga a quitarse de encima ese fardo sustentado en la ignorancia absoluta. Hacia ese océano de estupidez es que nos dirige a los venezolanos Hugo Chávez Frías. 161 Capítulo XXXV: Persecución implacable al cristianismo El socialismo ha sido permanentes enemigo histórico del cristianismo. Lo ha perseguido de manera implacable, feroz, cruel. Son muchos los sacerdotes, obispos, pastores protestantes, fieles, encarcelados, torturados y asesinados brutalmente por los seguidores de Carlos Marx y Federico Engels. Por eso son coherentes con esta práctica las declaraciones dadas de forma reiterada por el Presidente Hugo Chávez y sus seguidores contra los voceros de iglesias cristianas en nuestro país. Buscan aprovecharse de la enorme ignorancia que tiene parte del pueblo venezolano en esta materia. La persecución de los cristianos no tardará en imponerse en Venezuela, de aprobarse la mal llamada “reforma constitucional”. Hemos traído unos ejemplos tomados del portal http://persecucion.iglesia.net/ que ustedes pueden constatar directamente. Ocurren en los países o movimientos con los que se está aliado el actual régimen venezolano, algunos socialistas, otros islámicos o de diverso signo autoritario. Tienen en común que son enemigos de la libertad, la democracia y persiguen implacablemente a los cristianos, católicos o protestantes. Todos estos son casos ocurridos este año 2007: FARC persigue a cristianos en Colombia “A la intolerancia de las Farc, el Consejo evangélico de Colombia (CEDECOL), señaló el brutal asesinato de los pastores Joel Cruz Garcia y Humberto Méndez residente este último en la ciudad de Ibagué (Tolima), en la noche del pasado cinco de Julio en la vereda La Legiosa, de Colombia Departamento del Huila, informó el pastor Fernando Ruíz Fernández, Director nacional y Representante Legal de 162 la Iglesia Cristo Centro de Colombia. Cedecol, dijo que las muertes de los mencionados líderes eclesiales, "por parte del frente 17 de las Farc, son una reacción a la participación de la Iglesia Cristiana en las marchas de protesta en todo el país en contra del secuestro y del terrorismo reinantes", indicó el pastor Jorge Arturo Giraldo. Joel Cruz García y Humberto Méndez, ejercían su ministerio pastoral en la Iglesia Cristo Centro de Colombia en el Huila, denominación evangélica con reconocimiento oficial mediante Personería Jurídica Especial 2157 de Octubre 23 de 1997 del Ministerio del Interior y de Justicia. El pastor Cruz García, deja a su esposa Yuvy Andrea Oyola y a su pequeña hija de meses de nacida, "para quienes pedimos oración y todo el apoyo que se les pueda brindar", indicó el pastor Giraldo, señalando además que la opinión pública y al Gobierno Nacional sepan sobre la persecución de la cual como iglesia estamos siendo víctimas, principalmente las organizaciones que trabajamos en las zonas rurales de la geografía nacional".Igualmente, el pastor Fernando Ruíz Fernández, Director Nacional de la Iglesia y Representante Legal de la Iglesia Cristo Centro de Colombia, envió su mensaje de consuelo y sus condolecías a las familias de los ministros asesinados, pidiendo además a la iglesia cristiana en Colombia elevar plegarias por la pronta instauración de la paz en el país” China “El estado comunista chino viene llevando desde hace tiempo una campaña contra la libertad religiosa y de culto, centrada fundamentalmente en las religiones cristianas protestante y católica. La extensión del cristianismo les preocupa verdaderamente, por lo que se ha convertido en un objetivo, según declaraciones de Kang Xiaoguang de la Academia de Ciencias China. El gobierno se refiere a lo que denomina "cultos" (en el sentido de "sectas") que son descritos como religiones libres que no dependen ni están controladas por las instituciones de gobierno chinas. En la práctica, el término se aplica a cualquier grupo que no disponga de un permiso oficial. Aparte de la continua persecución a todos los grupos cristianos que no 163 se someten al control oficial, el gobierno está especialmente preocupado por los grupos evangélicos y protestantes que se han expandido rápidamente. El World Net Daily ha señalado que la gran mayoría de los cristianos chinos -unos 15 millones- forman parte de las iglesias llamadas clandestinas. El Gobierno comunista exige que toda la actividad eclesial esté bajo el control “patriótico” de carácter oficial, restringiendo actividades como la evangelización y la enseñanza de la religión. Las detenciones y torturas de cristianos, tanto católicos como protestantes, en China son una práctica constante. A comienzos de este verano, Monseñor Julius Jia Zhiguo, obispo católico de Zhengding (en el norte de China), fue detenido por sexta vez en 18 meses después de haber pasado ya 20 años en prisión, según denunció la Fundación Cardenal Kung, que proporciona apoyo a los católicos chinos, sometidos a clandestinidad por el régimen comunista. Esto constituye sólo una muestra de lo que está siendo una práctica habitual que se viene repitiendo de mil formas distintas: detenciones, deportaciones, interrogatorios, confiscación de bienes personales y un sin fin de atentados contra la libertad de la persona por el solo hecho de profesar la religión cristiana. 29 de julio de 2007. El Papa firmó el pasado 30 de junio una Carta para aclarar todas las dudas sobre la situación de la Iglesia Católica en China, donde el gobierno comunista promueve desde los años 50 una Iglesia Patriótica cismática. Pero poco efecto parece haber tenido en las autoridades de Pekín esas detalladas explicaciones de Benedicto XVI. Y de hecho, cuatro sacerdotes de la Iglesia Católica habrían sido detenidos por la Policía en las últimas fechas, según datos de la Fundación Cardenal Kung, con sede en Estados Unidos. Esta fundación, que tiene como objeto ayudar a la Iglesia perseguida en dicho país, lleva el nombre del cardenal Ignacio Kung (1901-2000), detenido en 1955 cuando era arzobispo de Shanghai, condenado a cadena perpetua, y que sólo tras pasar treinta años en la cárcel fue 164 liberado en 1985 para pasar otros diez en arresto domiciliario; años después pudo exiliarse a Estados Unidos para atender los graves problemas de salud derivados de su cautiverio. Tres de los sacerdotes citados habrían sido detenidos el pasado martes en la región de Mongolia Interior después de huir de sus localidades de origen por miedo a represalias por su rechazo a adherirse a la Iglesia oficial estatal. Un cuarto sacerdote fue detenido a principios de julio en la provincia de Hebei. Según la Fundación Cardenal Kung, hay cinco obispos y quince sacerdotes encarcelados en China y otros muchos permanecen bajo arresto domiciliario o vigilancia policial” Bielorrusia “Amnistía Internacional ha escrito al ministro del Interior y al procurador general bielorrusos para protestar por la decisión de expulsar a Jaroslaw Lukasik, pastor protestante y miembro de la Unión de Cristianos de la Fe Evangélica. El 30 de mayo de 2007 fue declarado culpable de participar en "actividades religiosas ilegales", tras lo cual se dictó una orden de expulsión contra él, en virtud de la cual tenía ocho días para abandonar el país. También se le impuso una multa de valor equivalente a un mes de sueldo. Jaroslaw Lukasik es ciudadano polaco y reside en Bielorrusia desde 1999. Su esposa y sus tres hijos tienen nacionalidad bielorrusa. Jaroslaw Lukasik fue detenido el 27 de mayo, cuando la policía irrumpió en casa del pastor Antoni Bokun, de la Iglesia Pentecostal de Juan el Bautista, en medio de un servicio religioso. Se presentaron cargos contra él por celebrar una reunión no aprobada. La organización recuerda asimismo al gobierno las obligaciones que debe cumplir Bielorrusia como Estado Parte en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP), cuyos artículos garantizan el derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión, así como la libertad de expresión, asociación y reunión. La expulsión de Jaroslaw Lukasik forma parte de una campaña general de represión de las comunidades religiosas de Bielorrusa. En Bielorrusia hace falta permiso oficial para celebrar servicios religiosos 165 en edificios que no son de carácter religioso, pero a las comunidades que no tienen locales propios les resulta cada vez más difícil alquilarlos. Esta situación afecta en particular a grupos religiosos como los protestantes, que no tienen patrimonio religioso histórico” Corea del Norte “Gary Bishop, del Centro Mundial de Traducción Bíblica, recibió noticias terribles de su obra en ese país. "Se trata de un hombre conocido como evangelista. Probablemente no evangelizó a nadie más que a su familia pero fue aprehendido en posesión de dos de nuestros Nuevos Testamentos en coreano y fue ejecutado por ello". Bishop dice que no hay muestras de que la persecución esté disminuyendo; no obstante, Dios sigue obrando. En respuesta a este gobierno tan opresor y a las injusticias humanas, la gente busca respuesta en otra fuente que no sea el gobierno. Creo que esto está despertando la capacidad de los creyentes en Corea del Norte de decir: 'nosotros tenemos otra respuesta. Hay algo más en que creer' ". Irán “Una hija del pastor protestante iraní Mehdi Dibaj, asesinado en 1994, y su pareja, ambos iraníes cristianos, han sido detenidos en el país y se desconoce su paradero, según denunció una asociación francesa de defensa de los cristianos en el mundo. Fereshth Dibaj, de 28 años, y su marido, Reza Montazami, de 35, convertido al cristianismo hace quince, fueron detenidos por agentes de la policía secreta iraní en su domicilio de Machad, al noreste del país. Desde entonces, nada se sabe sobre su paradero ni pesa acusación alguna sobre ellos. La pareja, que dirige una iglesia protestante en Machad, debía haberse presentado el pasado 28 de septiembre ante un Tribunal Revolucionario, como esperaban el juez y la familia de Montazami. Convertido del islam al protestantismo, el pastor Mehdi Dibaj (padre de 166 Fereshth Dibaj) fue asesinado en 1994, poco después de que la presión internacional le salvara de una condena a la horca impuesta por las autoridades iraníes tras haber pasado ocho años en prisión. La 'Sharia' (ley islámica), vigente en Irán desde la Revolución de 1979, castiga con pena de muerte a los que abandonen esta religión. 'Portes Ouvertes' (Puertas Abiertas) denuncia un recrudecimiento en los últimos meses de los arrestos, interrogatorios, amenazas y malos tratos a los cristianos de Irán, tercer país del mundo en el que más se persigue a quienes profesan esta creencia, según la asociación. En Irán comenzó una nueva oleada de persecución anti-cristiana tras la elección del ala dura conservadora del presidente Mahmud Ahmadineyad”. 167 Capítulo XXXVI: La socialdemocracia ¿En verdad existe el tal “socialismo democrático”? Luego de las invasiones ordenadas por la oligarquía marxista soviética a Hungría (1956) y Checoslovaquia (1968), y luego de los testimonios dados por muchos jóvenes seguidores de esta infamia de sus experiencias en los países comunistas, comenzó un proceso de revisión de las propuestas iniciales dadas, en primer lugar por Carlos Marx y Federico Engels, como fundadores de esta corriente idológica (sic), y luego por Vladimir Ilich Lenin y Mao Dze Dong. Lo que se concretaba era una perversa dictadura enmascarada en el imposible igualitarismo que se apropiaba de todo e imponía un férreo modelo de organización de la sociedad basado en el terror y la muerte. Además, lograba, con mucho éxito, esa igualdad por debajo que uniformaba la vida en monotonía, hambre y trabajo por la subsistencia. Ese proceso de revisión de las propuestas iniciales del marxismo se desarrolló en todo el mundo, pero fue en Venezuela donde se produce la primera gran ruptura de los jóvenes socialistas al crear, en enero de 1971 (apenas dos años de la última masacre impuesta en nombre del “internacionalismo proletario”), el Movimiento al Socialismo, MAS. Este hecho sin precedentes generó un efecto dominó que desencadenó un proceso similar en todo el mundo. En Europa, por ejemplo, surge el llamado Eurocomunismo. Pocos años después de este fenómeno registrado en Venezuela de la mano de Teodoro Petkoff ( que publicaría el libro “Proceso a la Izquierda” para argumentar sus críticas al sovietismo), Argelia Laya, Pompeyo Márquez, Freddy Muñoz, por mencionar algunos de los más connotados líderes de esta agrupación, los partidos comunistas Italiano y Francés se colocan a la cabeza de este 168 movimiento que busca insertar sus propuestas socialistas dentro del exitoso modelo de la democracia liberal que se sustenta, como hemos escrito en entregas anteriores, en la propiedad privada, el voto universal, directo y secreto (que impide la aplicación, por ejemplo, de la lista Tascón), la presencia de un árbitro electoral autónomo, la separación de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial; la alternabilidad del poder (que impide la reelección indefinida o continuada), la sujeción de los militares a las autoridades civiles legítimamente electas, la descentralización y desconcentración del poder. Es así que estos socialistas (los del MAS venezolanos y los eurocomunistas) inician el proceso de regreso hacia el modelo de la democracia liberal, luego de constatar las aberraciones del modelo propuesto por los creadores y propulsores del marxismo. A la par surgen ideólogos revisionistas de estas tesis entre los que se destacan, además de Petkoff en Venezuela, los franceses Roger Garaudy y Louis Althusser, el griego Nicos Poulantzas, el austriaco Ernst Fischer, y el italianoAntonio Gramsci que, desde el punto de vista teórico, hicieron propuestas que coliden con las escuelas sociológicas funcionalistas y estructuralistas (ambas ligadas teóricamente al “capitalismo salvaje”). Algunos trataron de desarrollar tesis ubicadas en la llamada “tercera vía” (ni capitalismo salvaje ni colectivismo marxista), ubicándose en un punto intermedio entre el capitalismo y el llamado “socialismo real” (que en todo caso, es el único socialismo existente, ya que los demás “socialismos” hasta ahora han significado simples teorías sin concreciones históricas). Lo más importante que hay que destacar en cuanto al llamado “socialismo democrático” es que ha significado la presentación de propuestas que conservan algunos rasgos del marxismo original (muy pocos por cierto), pero desnaturalizados en el marco de la democracia liberal. El camino más corto Aunque el término “socialdemócrata” fue acuñado, inicialmente, por Vladimir Ilich Lenin, el término fue adoptado pro las corrientes 169 revisionistas iniciales del marxismo que adoptaron, por la ruta corta, el modelo de la democracia liberal, al adoptar algunas de las propuestas marxistas, como aquellas que propenden hacia una legislación que fortalezca a los sectores tradicionalmente deprimidos (económica, cultural y socialmente) de la población. Es así que el gran ideólogo de quienes asumieron este camino corto (antes de comprobar las graves y crueles consecuencias resultantes de las experiencias marxistas de Europa oriental, China, Corea, Camboya, Cuba, por mencionar las más emblemáticas) fue el alemán Eduard Bernstein (1850-1932). Este intelectual escribe en 1899 su obra “Las premisas del socialismo y las tareas de la socialdemocracia”. Allí afirma, con asombrosa prospectiva (tal como también lo hizo el Papa católico León XIII) que las predicciones del marxismo son erróneas. Que se sustentan en falsas premisas y, por ende, las conclusiones de sus razonamientos son erróneas Diagnostica que ya los trabajadores viven mejor en el capitalismo (¡y hablamos de 1899!) ya que se abre paso una legislación laboral que busca atender los desequilibrios sociales y económicos; de igual forma, se atiende las demandas hechas por las organizaciones sindicales. Destaca Bernstein que la burguesía de su momento no es la que Marx y Engels criticaron. Defiende el sufragio universal como la gran arma del proletariado. Así que descarta de plano el camino de la revolución y asume la democracia liberal como el camino civilizado, inteligente, acorde para lograr las conquistas de los sectores depauperados de la población. Así mismo, defiende, además, al sector privado, al empresariado. Asegura en su obra que “una buena ley industrial puede ser mejor que cien nacionalizaciones” (deberían regalarle este libro que tiene más de un siglo y aún sigue vigente a Hugo Chávez y sus conmilitones). De igual forma, al asumir la lucha política dentro del modelo pluralista, rechaza la propuesta marxista de la dictadura del proletariado que originalmente hicieron Marx y Engels. A partir de la reconstrucción de la Internacional Socialista (Fráncfort, 1951) y la apuesta por la democracia pluralista y la libertad dentro de un sistema de mercado, el socialismo y la socialdemocracia se fueron acercando ideológicamente. De modo 170 especial se llevó a cabo esta aproximación cuando los partidos alcanzaron labores de gobierno y tuvieron que adaptar sus presupuestos ideológicos a las exigencias de las labores gubernamentales. Con el paso de casi todos los partidos socialdemócratas y socialistas europeos por el ejercicio del poder en democracia liberal, y sobre todo luego de la caída del sistema soviético y la desaparición de la mayoría de los totalitarismos del denominado "socialismo real" (que es el mismo modelo que busca imponernos Hugo Chávez con la reforma de la actual Constitución Nacional), el llamado “socialismo democrático “ (que como explicamos arriba parte de una revisión sobre los hechos de la propuesta marxista original) ha sufrido una profunda transformación que identifica plenamente con la llamada socialdemocracia. La internacional Socialista La Internacional Socialista(IS) tiene sus orígenes en la llamada “Segunda Internacional” que agrupó inicialmente a todos aquellos grupos llamados socialistas que no compartían la propuestas revolucionarias de Lenín y de los soviéticos, quienes fueron los que realizaron el primer ensayo de ese modelo cruel, empobrecedor y terrorista que resultó ser el asumido por los países del llamado “socialismo real” (que es el único que ha existido). Refundada en 1923 como “Internacional Obrera y Socialista” desaparece, luego de las dos guerras mundiales, hasta reagruparse en 1951, después de varios encuentros intermitentes, con el actual esquema. La IS es una organización de partidos “socialistas”, laboristas y socialdemócratas. Actualmente agrupa a 159 partidos políticos y organizaciones de todos los continentes. Entre sus miembros están el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la Unión Cívica Radical (UCR) de Argentina, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) de Méjico ; la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA o Partido Aprista Peruano), el Partido Socialista de Chile, Partido por la Democracia (PPD), el Partido Laborista del Reino Unido, el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), el Partido Liberal Colombiano, el venezolano Acción Democrática (AD) y el Partido Independentista Puertorriqueño. El 171 también venezolano Movimiento al Socialismo (MAS) figura como partido consultivo de esta instancia mundial. Como organización no gubernamental, la Internacional Socialista cuenta con status consultivo (Categoría I) en las Naciones Unidas y trabaja en el ámbito internacional con un gran número de otras organizaciones. ¿Socialistas? ¡No, socialdemócratas! Es así que los autodenominados “socialistas demócratas” (que implica una contradicción de términos) se niegan a aceptar que, inicialmente, escogieron el camino errado y que cien millones de muertos sobre los que se sustenta la experiencia marxista en el mundo, así lo demuestran. Se niegan a aceptar que, en realidad, son socialdemócratas y que, por ejemplo, partidos como el Movimiento al Socialismo, la Causa R incluso algunos sectores que hoy acompañan a Hugo Chávez (como Podemos y el PPT) están más cerca, histórica e ideológicamente, de los adecos (seguidores del partido Acción Democrática venezolano) que de Fidel Castro y Hugo Chávez. Que sus orígenes, como organizaciones políticas, se desvincularon hace casi 40 años de este modelo marxista que tratan de imponernos (con los petrodólares que puntualmente paga el imperio y que sirve para armar hasta los dientes a estos genocidas engatillados), con la combinación de codicia e ignorancia, nuestro actual Presidente, electo por el pueblo venezolano con los mecanismos aportados por el modelo democrático liberal. Que por eso abandonaron la lucha armada en la década de los sesenta (y no sólo porque fueron derrotados militarmente). Que están regresando sobre sus pasos, en una especie de Alzheimer político, Es una regresión a la estupidez infantil, característica de esas enfermedades, sea por carencias orgánicas, físicas o éticas. Por eso, en un llamado a la cordura, cuando estamos a pasos de que se consolide el modelo marxista original, terrorista y genocida, es que invocamos la lucidez para que todos hagamos causa común en esta lucha que apenas se inicia en defensa de la libertad y la democracia liberal. 172 Completas “¡Esta calle es de Fidel!”. Así gritaban energúmenos chavistas en La Habana a un grupo de valientes civilizados de la isla, sumergida en estiércol por diez lustros, quienes con criterio, y quitándose las costras de la mierda reseca por los años, habían citado a representantes de la prensa (la de afuera, que es la verdadera) para denunciar las violaciones a los Derechos Humanos por el régimen del cadáver insepulto de Castro y sus acólitos. “¡Esta calle es de Fidel ¡” decían los mojones (en el sentido castizo del término, que según DRAE, significa “Porción compacta de excremento que se expele de una vez”) sonadores o ruidosos, como reconocimiento de lo que nos espera a los venezolanos si permitimos que se nos imponga esta deformación humana, este alzheimer político que es el socialismo, porque no es otra cosa que la legalización del genocidio y la barbarie. “¡Esta calle es de Fidel!” revela la amenaza de la expropiación del más mínimo espacio y la sustitución, a punta de cañón y bayonetas, de la propiedad privada por la privación de todo, obviando el derecho fundamental del ser humano que quiere crecer social, económica y espiritualmente. Si se aprueba esa aberración escrita, que es la tal “reforma” que quiere imponernos el gorila de uniforme, hoz y martillo, aquí en gritarán los descerebrados “¡Esta calle es de Chávez!” y nunca más será la nuestra, la de Juan Carlos, Luis, Pedro, Manuel o de Ramona. Donde antes nuestros hijos podían jugar al fútbol, amenazados por los carros pero no por la “reserva”. Lo hacían allí por carencia de cancha deportivas que sí son construidas en La Habana, Managua o La Asunción (Paraguay, no en Margarita), porque hasta allí llegan los verdes billetes provenientes del “imperio”, que deberían 173 resolver los problemas de los venezolanos, pero que, en su afán expansionista, son entregados por esos mercaderes de la infamia. Eso ocurre mientras nosotros y los nuestros nos morimos “a mengua”. Y no sólo serán las calles las de Chávez, sino la habitación vacía de la vivienda, que era utilizada para meter corotos y planchar ropa, porque el consejo comunal, estudiantil o laboral decidió ubicar allí a la familia del camarada tal, que no tiene vivienda desde hace mucho por meterse unos “peones” todos los fines de semana y gastar el poco dinero que le dan en las misiones, en putas y parrandas. Pequeños autómatas vacíos Y la escuela también será de Chávez, porque hay que formar al “hombre nuevo”, todo estupidito él, eunuco de valor y de cerebro, que repitan como loros consignas huecas, violentas y aberrantes; que, además, acepten la sustitución del papel “tualé” y el “modess”, por toallitas hechas con material reciclado tomado de basureros nacidos en esquinas convertidas en “rellenos sanitarios”, gracias a la revolución de los traidores. Inmundicias que son constantemente registradas por enjambres de seres con cráneos convertidos en charangos (instrumento hecho con cascarones de armadillos) que producen ecos al entrar sonidos de la calle, hediondos a mortecina, que en su vida de autómatas andantes, deambulan con franelas rojas deshilachadas para buscar mendrugos verdes y babosos, luego de no conseguir, una vez más, el trabajo negado por las huestes infernales que gobiernan. Esos niños y jóvenes usarán pañoletas rojo sangre, y dirán caletres inyectados a la fuerza de las gestas inventadas por los “héroes” de la revolución del excremento. Así que en la escuela, los liceos, nuestros niños y jóvenes, se incorporarán a la lista del nuevo dueño de todo que se apoderará en segundos de lo que la novel “Carta Magna” le entregará sin resistencia, si optamos por quedarnos en las casas haciendo parrilla, tomando cerveza “Regional” o “Ice”, o güisqui escocés de 12 o 18 años, productos estos que no tardarán en ser sustituidos por chicha masticada por indígenas, con humores 174 mefíticos y nauseabundos, gracias a la defensa de lo autóctono que hace la ignorancia que pretende obviar lo bueno de los otros. La “fe” del socialismo Y será de Chávez también la iglesia de la esquina, sea católica, evangélica, mormona o de cualquier otra creencia, porque ese “hombre” a producir por el socialismo de marras, imbécil en extremo, no puede darse el lujo de cerrar los ojos y buscar la imagen del Dios que nos creó del cual somos espejo que lo muestra, y que, como toda imagen proyectada, lo hace de revés a la versión original. Así que para entender a Dios hay que poner un espejo a lo que somos, para intentar ordenar en derecho, lo que aparece en nosotros de contrario. Quizás por eso algunos pueblos semíticos escriben de la izquierda a la derecha, en la búsqueda de ordenar lo que ya viene en sentido diferente ¿O será que su dios es contrario al nuestro y por eso aquellos de turbantes hacen tantas cosas aberrantes y carentes de sentido? También Chávez podrá disponer nuestro destino, incluyendo los sueños y anhelos que tengamos, porque , de triunfar el “sí” que los simios intentan imponernos, será todo de su absoluta propiedad, lo que implica que salir en la mañana a buscar nuestro sustento dependerá de los tentáculos llenos de ojos que el sátrapa tendrá en cada esquina, calle o portón de empresa para decidir si existimos o no, si deben gotear hacia nosotros las migajas que caigan de la mesa abundante para él y los jalabolas que se arrastran a sus pies. La tabla opulenta llena de manjares que serán para nosotros imposibles desde ahora y para siempre. Ya no existirá el voto, nunca más. Desaparecerá por disposición de esa divinidad enaltecida por ignaros sin cabeza que negaron al Dios de la bondad que respeta el acto volitivo, para optar por el multiplicador de la miseria que será adulado por largos trenes de letras agrupadas con violencia y sin sentido para construir palabrejas, vacías de ideas y ausentes absolutas de todo pensamiento, ya que, esto último, sólo es posible en los hombres y mujeres de verdad, y no en orangutanes de boina, de franela y fusil ruso incorporado. Así que el derecho a sufragar será una pieza de 175 museo, para que los niños (que serán cuerpecitos ambulantes despojados de alma y de cerebro) lo vean y pregunten cómo fue posible que todo aquello existiera, con la misma admiración que uno ve huesos jurásicos de seres gigantescos que poblaron el planeta. “¡Esta calle es de Fidel!” es el mayor insulto que pueden darnos los gorilas de uniforme, gomina y medallas de latón lustradas con carnú, que estarán acompañados de ratas erguidas, paradas en dos patas, pretendiendo ser humanos, balbuceando sonidos inconexos y arrebatándote todo lo que has logrado con esfuerzo y sacrificio. Es ofensa gigantesca que pueda recibir persona alguna, peor que una mentada y no precisamente de menta, o decirte marica, pajudo o cualquier cosa que pretenda imprecarse a aquel que no anda mendigando o adulando al que detenta el poder y manda a los demás, por el simple hecho de cagar en poceta y no en letrina pútrida con nubes de moscas inclusive, como se nos irá imponiéndonos a todos. “¡Esta calle es de Fidel!”, es el grito de barbarie que será impuesto a todos los que no salieron a votar y a defender su vida en ese voto, porque si perdemos nosotros esta lucha, los que sufragamos, tendremos el honor de morir luego de dar el paso extremo de seguir apostando por la paz y no la guerra, que destruye y acaba con todo lo que es bello. Como dijo la madre Teresa de Calcuta, “Amar (que es lo mismo que Dar) hasta que duela”. Digo “NO!” Por eso digo “No”. Esta calle, mi calle, la del frente, no es de Fidel, de Chávez ni de nadie que no la haya trabajado con denuedo como hemos hecho nosotros, poco a poco y sufriendo la vida que se apaga mientras crece. Será la sombra que cobija a los que vienen detrás de nuestros pasos. Tampoco la escuela de mis hijos y mis nietos, que pertenece a sus sueños que vuelan montados en dragones, hadas o a lo que a ellos les parezca. Ni la comida que quiero seguir comprando con el valor de mi esfuerzo y de mis méritos, en hipermercados gigantescos con aire acondicionado inventado por Carrier, que no es carupanero ni indio de Amazonas, y no ir bodegas llenas de escasez, 176 de calor y olores fétidos, gracias a esa monarquía que llaman socialismo. Digo “No” a los orangutanes que brincan de alegría mientras viajan en correas transportadoras jaladas por esclavos, para ser convertidos en alimento concentrado que será exportado a países aliados del planeta, por aquello del encuentro que agrupa a los perversos. Digo “No” a la manipulación de la ignorancia que iguala mi voto con el aquel que entrega el hacha a quien no dudará en cortarle la cabeza y también las extremidades, para embalarlas cuidadosamente y venderlas al mejor postor, para ser luego ensambladas nuevamente como partes inconexas, haciendo movimientos semejantes a calambres, vestidos de médico, entrenador o cualquier forma que decida el “sagrado interés de la nación y el pueblo todo”, que no es otra cosa que la voluntad del dictador dueño de ti y de lo tuyo, de ahora y para siempre. Por eso mandar al carajo a Fidel, al Che y a Chávez es un imperativo, de la decencia que reposa en masacres anteriores contadas por la historia. Que no es nuestra culpa que ignorantes apuesten a la nada y no lo sepan. Por eso gritarle con esfuerzo que deje la voz ronca “¡No!” a los malvados es el onceavo mandamiento escrito por el Padre en las tablas entregadas a Moisés en Monte Horeb, cuando Israel era sólo un proyecto de pueblo, cruzaba el desierto y adoraba estatuas de oro.¡ A salir todos a votar¡, y si es preciso, dejar la vida como hicieron Sucre, Bolívar y Sedeño, nuestros padres que soñaron con una Venezuela para todos, que no excluyera a ninguno de sus hijos. Ese es el reto y en eso debemos poner hasta el último aliento que nos quede. No sólo por nosotros, sino por los retoños de gente que aún crecen y deben tener derecho a ser personas, no sólo piedras o guijarros, que serán utilizados para construir muros grises y mudos que serán sus celdas para siempre, si no los detenemos. 177