ÍNDICE ÍNDICE ......................................................................................................................... 1 INTRODUCCIÓN .......................................................................................................... 2 RESUMEN.................................................................................................................... 3 MARCO TÉORICO ....................................................................................................... 4 JUSTIFICACIÓN .......................................................................................................... 6 MÉTODO DE INVESTIGACIÓN ................................................................................... 7 PERFIL DE LA VICTIMA Y EL AGRESOR ................................................................... 7 TRATANDO CON LA VIOLENCIA DE GÉNERO .......................................................... 9 RESULTADOS ........................................................................................................... 11 CONCLUSIONES ....................................................................................................... 11 - Página 1 - REFERENCIAS .......................................................................................................... 11 VIOLENCIA DE GÉNERO Introducción En la actualidad, nuestra sociedad globalizada nos permite el contacto más o menos frecuente con personas con diferentes opiniones, creencias y formas de ver el mundo. Si bien esto pudiera generar mayor entendimiento y tolerancia entre las relaciones interpersonales, parece que esas diferencias son las principales causas de violencia. La Organización Mundial de la Salud define la violencia como uso intencional de la fuerza o el poder físico de hecho o como amenazas contra una misma u otra persona o un grupo o comunidad que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, daños psicológicos, trastorno del desarrollo, privaciones o incluso la muerte. Se sabe que existe una gran variedad de tipos de violencia, sin embargo, este documento se basará al análisis de las causas y consecuencias de la violencia de genero ubicando los ámbitos en los que se ejerce. Además, con esta información se permitirá conocer cómo es que de manera conceptual se tiene una corta idea de lo que es violencia de género; por lo que será importante recalcar aquellos casos en los que se está produciendo este tipo - Página 2 - de violencia. Resumen La violencia ejercida contra las mujeres debido a su desvalorización social y cultural es un tema preocupante en nuestro país y a nivel internacional. Es necesario hacer un cambio cultural de fondo, dejar atrás la ideología patriarcal de nuestra sociedad, especialmente la latina, debido a que la mayoría de los países con índices más altos de feminicidios se encuentran precisamente en América Latina. La ideología heredada de una superioridad masculina es la base para que se cometan actos violentos de género en contra de las mujeres. Si esta ideología es cuestionada y, sobretodo, modificada, cada hombre y mujer podrá hacer valer sus derechos y libertades para decidir sobre sí misma, además de rodear a las - Página 3 - mujeres de una sociedad que las proteja y respete. Marco teórico Se conoce como violencia de genero al maltrato que ejerce un sexo hacia el otro que puede ser de hombre hacia la mujer o viceversa. No obstante, las mujeres han sido las más afectadas por este tipo de violencia, ya que son discriminadas históricamente por el hecho mismo por ser mujeres pues se les ha dado un tratamiento desigual discriminatorio en virtud de un conjunto de normas de conducta, de estereotipos de valores, de significaciones distintas y desventajosas otorgadas por la sociedad al hecho de ser mujer. La violencia de género en México ha existido desde tiempos inmemoriales y responde a la cultura conocida como machista con la que comulga gran parte de la sociedad. Aunque las mujeres aparecen a menudo como las víctimas, no señala la disposición biológica o de interacción; factores que hablaron por si solos, ni las mujeres nacen víctimas ni los varones están predeterminados para actuar como agresores, la cultura ha legitimado la creencia de la posición superior del varón, lo cual ha facilitado que las mujeres se sientan inferiores. Se ha comprobado que el agresor actúa de forma coherente con su propio objetivo de sumisión y control, por lo que no existe un único perfil de un maltratador. Además, al tratarse de maniobras habituales, no parecen dañinas. Las victimas deben reconocer el maltrato y rechazarlo. La inferioridad femenina es una idea tan arraigada en nuestra cultura y sociedad que se requerirán muchos años de educación familiar y académica para modificar esa idea equivocada sobre las mujeres, a una postura más justa para todos (Vázquez Pérez, 2008). protegen a las mujeres. La sociedad que las rodea, por lo general, no cree en - que se trata de países más tradicionalistas y donde las leyes difícilmente Página 4 - La violencia de género afecta a toda la sociedad, especialmente a la latina, ya ellas. Y si nuestras mujeres son violentadas, nuestra sociedad también lo es, nuestra cultura y país. Estos patrones culturales pueden ser modificados ya que, la discriminación hacia - Página 5 - las mujeres no es natural y puede cambiarse. Justificación En este documento se referirán aquellas fuentes donde se demuestra que nuestro país es uno de los más afectados por este tipo de violencia debida a su cultura, además se podrá ver que las víctimas y los agresores son también - Página 6 - aquellos que causan la violencia de género por su forma machista de pensar. Método de Investigación Como se había comentado en México, en particular, hombres y mujeres permiten y fomentan la violencia hacia las mujeres, al seguir los patrones de la educación cultural que los ha rodeado y formado. En la década de los noventa, en México, se comenzaron a recabar datos e información sobre la violencia a las mujeres. Consultando algunos datos que el INEGI que reportó en 2019 un porcentaje de 66.1% de mujeres mayores de 15 años (30.7 millones) que fueron violentadas de alguna manera (siendo el más alto índice, de 43.9%, ejercida por su esposo o pareja actual). En 2018 se registraron 3,752 defunciones por homicidio de mujeres, el más alto registrado en los últimos 29 años (1990-2018), lo que en promedio significa que fallecieron 10 mujeres diariamente por agresiones intencionales (INEGI, 2019). Diez años atrás, en 2009, tan sólo en el territorio de lo que entonces era el Distrito Federal, se registraron 128 feminicidios, que representan una tasa (por cada 100,000 mujeres) del 2.23. Y diez años más atrás, en 1999, 127 feminicidios, con una tasa del 2.85 (ONU Mujeres, INMujeres México y lX Legislatura Cámara de Diputados, 2011). Ante la gravedad de las estadísticas de violencia es muy útil conocer algunos de los síntomas de han presentado diferentes estudios, acerca de la violencia en mujeres y sus comportamientos. PERFIL DE LA VICTIMA Y EL AGRESOR La cultura ha legitimado la creencia de la posición superior del varón, reforzada a su vez a través de la socialización. Todo ello ha facilitado que las mujeres se sientan inferiores y necesiten la aprobación de los hombres para sentirse bien - Página 7 - consigo mismas y con l papel en la vida para la que han sido educadas. La asimetría de poder de un género sobre otro, ampara las diferencias y configura el diseño apropiado de proceder en las relaciones: los varones ofrecen la protección a las mujeres a cambio de la obediencia y sometimiento. Ellos ocupan así una posición de control y dominio. El carácter sutil y encubierto de dicho tipo de sexismo (“sexismo benévolo”) dificulta las reacciones d rechazo por parte de las afectadas. No es posible establecer un perfil único de maltratador; cada cual representa el papel de forma distinta y se comporta de manera diferente. Pese a la dificultad para determinar un perfil concreto, existen una serie de rasgos comunes de comportamiento n todos los hombres que maltratan a su pareja o expareja. Responsabilizan a la mujer de la situación. Ellos con las víctimas, arguyen. De hecho, con frecuencia se escuchan en los grupos de tratamiento con hombres maltratadores comentarios como: “ella saca lo peor de mi”, “lo hace para provocarme”. O se aferra a ideales masculinos tradicionales. La violencia resulta para ellos una conducta aprendida y legítima, así como una forma de simbolizar su poder. Muchos afirman que “es la única manera de calmarla y ponerla en su lugar”. Consultando el artículo VIOLENCIA DE GÉNERO (MENTE Y CEREBRO 48, 2011) se puede observar algunos de los rasgos de los agresores influyendo mayormente aquellos causados por una infancia violentada provocando, un - Página 8 - estado psicológico que los lleva a actuar de esa manera. Mientras que por el lado de las mujeres ellas son las que educan a sus hijos y adoptan un rol machista en su familia, con la ideología práctica de que las mujeres están para servir, para ocuparse de las labores de la casa, de los hijos. Ellas son restringidas de las oportunidades de estudiar, de superarse y de ejercer un trabajo fuera de casa. Sus voces, opiniones y esfuerzos. TRATANDO CON LA VIOLENCIA DE GÉNERO En la actualidad se ha dado demasiada publicidad para combatir este gran problema, se le ve como real y ha salido del ámbito privado, o sea, de competer únicamente a la familia y no “pasar de la puerta”, a pasar a ser público. Así, se ha convertido en un tema que debe regularse legalmente y que figura en las principales preocupaciones a nivel mundial. Es verdad que la violencia de género sigue presente en la sociedad mexicana, en los anuncios publicitarios donde se cosifica a la mujer, en los encabezados de desapariciones y muertes de mujeres, en la diferencia de sueldos por género. Pero, ha cambiado la manera en que la percibimos y ahora se trata como un tema reprobable, cuando antes se consideraba como algo “normal”. En la actualidad es un delito aparte, hay protestas públicas por abusos o muertes de mujeres o niñas, se despliegan marchas o campañas para fomentar la denuncia y fortalecer la seguridad de las mujer, se ha vuelto notoria en redes sociales y otros medios de comunicación masiva con la información casi en tiempo real de secuestros o feminicidios. Lo - es decir, la exclusión o restricción a sus derechos por el simple hecho de ser Página 9 - mujeres por parte del gobierno y la sociedad. La discriminación hacia la mujer, que aún no se ha logrado es cambiar la mentalidad ni afianzar los valores que promuevan el respeto por igual hacia todos los miembros que conforman la sociedad. Gracias a organizaciones internacionales, como la OMS o la UNEE_CEPE pertenecientes a la ONU, la violencia de género comenzó a considerarse un problema de salud pública. Al tratarla de esta manera, se empezaron a crear programas de toma de conciencia, establecer los lineamientos para detectarla, atenderla y buscar soluciones para erradicarla, por lo que ahora existen leyes internacionales que protegen a las mujeres y se ha dimensionado lo grave del asunto. Por ejemplo, está la Plataforma de Acción de Beijing, que busca “garantizar que las mujeres tengan el mismo derecho que los hombres a ser jueces, abogados, funcionarios de otro tipo en los tribunales, así como funcionarios policiales y funcionarios penitenciarios, entre otras cosas” (ONU Mujeres, 2011). La violencia hacia las mujeres se da en todos los ámbitos: en su integridad física, mental, moral; sucede dentro de su propia familia, en su vida laboral, económica y política; se ejerce a través de la explotación sexual o la prostitución forzada. Según ONU Mujeres hay tres distintos tipos de violencia ejercidos contra las mujeres: física, sexual y psicológica. Desafortunadamente, la violencia contra la mujer no sólo sigue sin resolverse, sino que continúan creciendo los números de feminicidios, trata de personas con fines de explotación sexual y/o laboral, discriminación de distintos tipos, etcétera. A pesar de que la teoría, la investigación y las legislaciones se han desarrollado para erradicar la violencia contra las mujeres, a veces parecen imposibles de llevar a la práctica y son algo muy lejano a nuestra realidad. Ejemplo de ello son los casos de feminicidios que han tenido una denuncia previa de la víctima hacia el agresor, quien, posteriormente, asesina a la víctima. Entre esa denuncia y la muerte de la víctima, no hay ninguna acción por parte de las autoridades, sólo un papeleo y un antecedente legal de los hechos. Es decir, no hay lineamientos para evitar el excesivamente preocupante. En estos países se concentran las tasas más altas de muerte por violencia de género. Latinoamérica tiene el mayor número de - En Latinoamérica y, por ende, en México, representa un problema gravísimo y Página 10 - feminicidio o se archiva la denuncia porque no se continúa con el proceso. casos de violencia sexual por parte de alguien que no es su pareja y un considerable número de casos de violencia ejercida por parejas. Resultados La violencia de género no sólo surge de quién la práctica, sino que es resultado de un conjunto de elementos culturales y sociales en la que se maneja nuestra sociedad. No podemos hablar sobre rasgos particulares de los agresores ni de las victimas pues su entorno y experiencias de vida son las que definen las formas en los que la violencia se presenta. Conclusiones Es posible alcanzar una equidad de género real, que permita a todos vivir libres de violencia. Cambiar gran parte de la México y los demás países latinos, es la gran tarea que tienen las organizaciones gubernamentales, las asociaciones y la sociedad civil. REFERENCIAS 1. www.revistaunam.mx/ volumen 21 Núm. 4 julio agosto 2021 LA VIOLENCIA DE GENERO EN MÉXICO. 2. VIOLNCIA DE GNERO /FRANCISCA EXPOSITIO/MENTE YSEREBRO - Página 11 - 48/2011