Queridos profesores, familiares, amigos y compañeros de clase. Hoy es un día lleno de emociones encontradas. Nos encontramos aquí, en esta ceremonia de graduación, para celebrar el final de una etapa y el comienzo de un nuevo capítulo en nuestras vidas. Es un honor y un privilegio dirigirme a todos ustedes en este momento tan significativo. En primer lugar, quiero expresar mi profundo agradecimiento a nuestros queridos profesores. Han sido nuestros guías y mentores a lo largo de este camino educativo. Han compartido con nosotros su conocimiento, han despertado en nosotros la curiosidad y nos han inspirado a ser mejores cada día. Gracias por su dedicación, paciencia y por creer en nosotros incluso cuando dudábamos de nosotros mismos. También quiero agradecer a nuestras familias, quienes nos han brindado su amor, apoyo y sacrificio incondicional. Han sido nuestro pilar en los momentos difíciles y nuestro soporte en los logros. Su constante aliento y confianza en nosotros nos han impulsado a seguir adelante, incluso cuando las cosas se ponían difíciles. Agradecemos por su amor incondicional y por estar a nuestro lado en cada paso del camino. A nuestros amigos y compañeros de clase, ustedes han sido más que eso. Han sido nuestra segunda familia, nuestros cómplices en travesuras que nadie sabe, de salidas que dijimos que eran trabajos y nuestros mejores apoyos. Juntos hemos compartido risas, lágrimas, alegrías y desafíos. Hemos aprendido a trabajar en equipo, a apoyarnos mutuamente y a celebrar los éxitos de cada uno. Nuestros recuerdos juntos perdurarán para siempre en nuestros corazones. Hoy, mientras nos despedimos de las aulas que nos han visto crecer, reflexiono sobre las lecciones que hemos aprendido durante nuestra educación. No solo hemos adquirido conocimientos académicos, sino también habilidades para la vida. Hemos aprendido el valor del esfuerzo, la importancia de la perseverancia y la capacidad de superar los obstáculos. Pero más allá de los conocimientos técnicos, hemos adquirido una visión más amplia del mundo. Hemos aprendido a apreciar la diversidad, a ser respetuosos con las diferencias y a ser agentes de cambio en nuestra comunidad. Ahora es nuestro momento de aplicar todo lo que hemos aprendido y marcar la diferencia en el mundo que nos rodea. Mientras miramos hacia el futuro, sé que todos tenemos nuestros sueños y metas individuales. Algunos de nosotros buscaremos una educación superior, otros ingresarán al mundo laboral y otros seguirán diferentes caminos. Pero independientemente de nuestros destinos, tenemos en común el deseo de ser exitosos y felices en lo que hagamos. Recuerden siempre que el éxito no se mide solo por los títulos o logros materiales, sino por la felicidad y la satisfacción personal. Sigan sus pasiones, sigan aprendiendo y nunca dejen de buscar el crecimiento personal. No tengan miedo de enfrentar desafíos, porque en ellos encontrarán oportunidades para crecer y aprender. En este momento de despedida, me gustaría compartir una última reflexión. Para los graduados: Queridos graduados, hoy culmina una etapa importante en nuestras vidas, pero también marca el comienzo de un nuevo camino lleno de posibilidades. Durante la educación, hemos adquirido conocimientos, habilidades y experiencias que servirán como base para enfrentar los desafíos futuros. Recuerden siempre llevar consigo el valor del esfuerzo, la perseverancia y la pasión por lo que hacen. La vida puede presentar obstáculos y momentos difíciles, pero confíen en su capacidad para superarlos y seguir adelante. No tengan miedo de perseguir sus sueños y abrazar las oportunidades que se presenten en su camino. Mantengan viva la curiosidad y el deseo de aprender. La educación no se detiene aquí, sino que es un proceso continuo a lo largo de la vida. Siempre habrá algo nuevo por descubrir, habilidades por desarrollar y conocimientos por adquirir. Siguiendo esta mentalidad, podrán enfrentar los cambios y adaptarse a un mundo en constante evolución. Aprovechen sus logros para inspirar y ayudar a otros. Ustedes han demostrado su capacidad de éxito y han dejado una huella en sus familias, amigos y comunidad. Compartan su sabiduría y experiencias, apoyen a quienes los rodean y sean agentes de cambio positivo en el mundo. Por último, nunca olviden el valor de la gratitud. Agradezcan a aquellos que los han apoyado a lo largo de su camino: padres, maestros, amigos y seres queridos. Reconozcan la importancia de su apoyo y exprésenles su agradecimiento. La gratitud es una fuerza poderosa que nutre nuestras relaciones y nos conecta con los demás de una manera significativa. Para la siguiente generación: Querida siguiente generación, se encuentran en el umbral de una nueva aventura educativa y personal. A medida que ingresan a este nuevo capítulo, les insto a aprovechar cada oportunidad que se les presente. Nunca subestimen el valor de la educación y el poder de sus propias capacidades. Sean valientes para explorar nuevos horizontes y desafiar los límites establecidos. Tengan confianza en su capacidad para aprender, crecer y alcanzar sus metas. No teman cometer errores, ya que son lecciones valiosas que les ayudarán a crecer y mejorar. Mantengan siempre viva la pasión por el conocimiento y el deseo de aprender. La educación es una puerta hacia infinitas posibilidades. Aprovechen al máximo las oportunidades que se les presenten y nunca dejen de cuestionar, investigar y buscar respuestas a sus preguntas. Recuerden también la importancia de la resiliencia y la perseverancia. El camino puede ser desafiante en ocasiones, pero nunca se rindan ante las dificultades. Sean persistentes en la búsqueda de sus sueños y crean en su capacidad para superar cualquier obstáculo que encuentren en el camino. Finalmente, recuerden que cada uno de ustedes tiene el poder de hacer una diferencia en el mundo. Sus acciones, elecciones y valores pueden influir positivamente en su entorno y en la vida de los demás. Busquen oportunidades para servir a su comunidad y hacer del mundo un lugar mejor. Enfrenten el futuro con confianza, coraje y determinación. Ustedes tienen el potencial de lograr grandes cosas y dejar un impacto duradero en el mundo. ¡Aprovechen esta maravillosa oportunidad y hagan de su viaje educativo una experiencia inolvidable! Queridos compañeros de clase, hoy nos graduamos, pero nuestro aprendizaje nunca termina. Sigamos buscando el conocimiento, sigamos desafiándonos a nosotros mismos y sigamos persiguiendo nuestros sueños con pasión y determinación. En nombre de todos los graduados, quiero agradecer a cada uno de ustedes que ha sido parte de nuestro camino. Gracias por su apoyo, su amor y por ser testigos de nuestro crecimiento. Nos llevamos con nosotros los recuerdos y las lecciones que hemos compartido. Hoy, nos despedimos de esta etapa de nuestras vidas, pero abrazamos el futuro con entusiasmo y optimismo. Miremos hacia adelante con valentía y confianza, porque somos la generación que tiene el poder de cambiar el mundo. ¡Felicitaciones a todos nosotros, graduados de la secundaria prfr. Alfonso Arroyo Flores! ¡Que nuestras pasiones nos guíen y nuestros sueños se hagan realidad! Gracias El modelo de Lewis, desarrollado por el químico estadounidense Gilbert N. Lewis en 1916, es una representación gráfica utilizada para describir la estructura de los átomos y las moléculas en términos de enlaces químicos. Según el modelo de Lewis, los átomos están compuestos por núcleos cargados positivamente y electrones cargados negativamente que orbitan alrededor del núcleo en diferentes capas o niveles de energía. Los electrones en la capa más externa, llamada capa de valencia, son los responsables de la formación de enlaces químicos. En la representación de Lewis, los electrones de valencia se simbolizan mediante puntos o cruces alrededor del símbolo químico del átomo. Se colocan uno o dos electrones en cada uno de los cuatro lados de la "caja" imaginaria que rodea al símbolo del átomo. Los electrones no emparejados se representan como puntos individuales, mientras que los pares de electrones compartidos en un enlace químico se representan mediante una línea entre los símbolos de los átomos conectados. El modelo de Lewis es particularmente útil para entender la formación de enlaces covalentes, en los cuales los átomos comparten pares de electrones para completar sus capas de valencia y lograr una configuración electrónica estable. También se puede utilizar para representar enlaces iónicos, en los cuales los átomos transfieren electrones para formar iones cargados positiva y negativamente que se atraen mutuamente. Además de la representación de enlaces químicos, el modelo de Lewis también permite determinar la geometría molecular, prediciendo la forma tridimensional de una molécula en función de los pares de electrones enlazantes y no enlazantes alrededor de un átomo central. Aunque el modelo de Lewis es una herramienta útil para la comprensión básica de la estructura molecular, tiene algunas limitaciones. No tiene en cuenta la naturaleza cuántica de los electrones y no describe adecuadamente la repulsión electrónica entre los pares de electrones. Para una descripción más precisa de la estructura molecular, se utilizan enfoques más avanzados, como la teoría de orbitales moleculares y la teoría de enlace de valencia. En resumen, el modelo de Lewis es una representación gráfica simple pero útil para entender la estructura de los átomos y las moléculas, así como la formación de enlaces químicos. Sin embargo, es importante tener en cuenta sus limitaciones y recurrir a enfoques más sofisticados cuando sea necesario.