Pastoral de Espiritualidad LECTURA ORANTE DE LA PALABRA EVANGELIO DE JUAN 11, 1-45 Domingo 6 de Abril de 2014 5º de Cuaresma Preparación. Comienza este tiempo de encuentro con el Señor, dejando a un lado otros intereses, trabajos y preocupaciones. Toma tu Biblia, abre tus oídos y tu corazón a la Palabra de Dios para interiorizarla y dejar que el Señor transforme y renueve tu vida. INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO. ¡Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de Tus fieles y enciende en ellos el fuego de Tu Amor! ¡Envía, Señor, Tu Espíritu y todas las cosas serán creadas! ¡Y renovarás la faz de la tierra! LECTURA. ¿Qué dice el texto de Juan 11, 1-45? a) Introducción. ¿Por qué la muerte hace tambalear nuestra fe?... A veces pensamos cómo Dios, que nos ama infinitamente, permite un dolor tan grande como es la muerte de un ser querido, familiar o amigo. Como Marta, hermana de Lázaro y María, tal vez tenemos una idea errada de la resurrección y de la vida. Anhelamos una vida terrenal tranquila, feliz y perdurable… Pero la realidad dice otras cosas: enfermedad, vejez, accidentes, muerte. Y pocas veces pensamos cuál es la vida verdadera para la cual Dios nos creó y nos cuida con infinito Amor. Necesitamos que Jesús venga a casa y nos diga que Él no sólo puede darnos salud, curación, sanación, sino que Él mismo es la resurrección y la vida. ¿Le creemos a Jesús?... ¿Qué sentido adquiere nuestra vida cuando creemos en Él, cuando estamos unidos a Él por la fe y el bautismo?... ¿Cómo cambia nuestra visión de la vida y de la muerte cuando creemos en Jesús Resucitado?... El texto de Jn 11,1-45 nos presenta interrogantes muy humanas y respuestas divinas; quizás nos deje también esperanza y certezas... b) Lectura del texto de Juan 11, 1-45.- Lee el texto en voz alta. Ponte en el lugar de las personas que aparecen; trata de comprender sus sentimientos y sus maneras de pensar y actuar. Escucha a Jesús con la mente y el corazón; el mensaje central está en Sus palabras. Relee el texto atentamente una o más veces. c) Palabras que pueden requerir explicación. + Resucitar. En el texto leído, Marta entiende “resucitar” (11,23) en el sentido que los judíos le daban a partir de Daniel 12,2: que, a su muerte, el hombre bajaba al sheol (Núm 16,33) y permanecía allí como una sombra privada totalmente de vida, a la espera del último día. Jesús rectifica esa idea. El sentido de las “cosas últimas” del ser humano (escatología) ya está realizado en Jesús, porque Él mismo es “la resurrección y la vida” (11,25); por eso, “todo el que vive y cree en Mí no morirá jamás” (11,26). El evangelio de Juan lo afirma varias veces: “Si alguno guarda Mi palabra, no verá la muerte jamás” (8,51), “ha pasado ya de la muerte a la vida” (5,24). Esta visión cristiana de la resurrección supone, por lo tanto, una distinción entre el alma, que no muere, y el cuerpo, “polvo de estrellas” podemos decir, que se corrompe en la tierra. + La confesión de fe de Marta. En Juan 11, 27, dice Marta: • “Tú eres el Cristo”, mediante el cual Dios cumple Su obra de salvación por la humanidad. • “Tú eres el Hijo de Dios”, el que vive en una comunión sin comienzo sin fin con Dios; el que está al mismo nivel de Dios. • “Tú eres el que iba a venir al mundo”, o sea, “Tú eres el enviado del Padre”. Dios Padre está respaldando toda la obra de Jesús. d) Preguntas para repasar el texto. No necesitas responderlas todas. ¿Cómo era la relación entre Jesús y la familia de Lázaro? ¿Qué recado enviaron a Jesús? ¿Qué dijo Jesús al saber de Lázaro? ¿Por qué no se inquietó ni se apresuró en ir a Betania? ¿Qué peligro corría Jesús en Jerusalén? ¿Por qué insiste en ir? ¿Cómo reacciona Tomás? ¿Por qué Jesús les dice abiertamente a sus discípulos que Lázaro ha muerto? ¿Cuál es la creencia de Marta acerca de la resurrección de los muertos? ¿Qué verdad, de máxima importancia, proclama Jesús acerca de Si mismo? ¿Cómo responde Marta? Por la fe, ¿con qué títulos reconoce ahora a su amigo Jesús? ¿Cómo reaccionó María al saber que Jesús llegaba a Betania? ¿Cómo reaccionó Jesús ante el dolor de María?, ¿y ante los comentarios de algunos judíos? ¿Qué le asegura Jesús a Marta ante al sepulcro? ¿Qué hace Jesús antes de resucitar a Lázaro? ¿Qué orden le da a Su amigo? ¿Qué sucedió? ¿Qué efectos produjo este milagro entre los judíos amigos de María? MEDITACIÓN. ¿Qué me dice este texto de Juan 11, 1-45? Vuelve a leer el texto completo. Con la ayuda de algunas preguntas, aplica el mensaje a tu vida concreta de hoy. ¡No necesitas responderlas todas! Elige sólo las que tocan tu corazón… En mi familia, ¿somos amigos de Jesús? ¿Qué nos falta para tener una relación íntima y personal con Él? ¿Qué siento al comprender que Jesús es la Resurrección y que, si vivo y creo en Él, aunque muera viviré? ¿Cómo cambia esto mi actitud ante mi muerte y la de otros? ¿Cómo incide en mi actitud ante mi vida y la de otros? ¿Qué relación descubro entre el creer (tener fe) y el vivir en profunda relación (comunión) con Jesús? ¿Cómo espero vivir mi muerte? ¿Cómo puedo abrirme progresivamente, desde ya, a la experiencia de la resurrección? ¿Cómo estoy viviendo mi fe bautismal? ¿Qué siento al darme cuenta de que toda vida humana alcanza pleno sentido en Jesús Resucitado? ¿A qué me invita esto? ¿De qué manera este evangelio me prepara para la gran celebración de la fe pascual en la noche en que proclamaremos la gloriosa resurrección de Jesús? ORACIÓN. ¿Qué le digo al Señor luego del regalo de Su Palabra? La lectura y meditación del texto han suscitado en ti algunos sentimientos. Exprésalos con tus propias palabras, como oración de gratitud, de alabanza, petición de perdón, intercesión por ti mismo(a) y por otros, ofrecimiento, entrega, adoración… ¿Quieres orar con las palabras del Padre Esteban Gumucio, sscc? Algo le ha pasado a mi muerte futura con la Resurrección de Jesucristo... Cuando venga la muerte, se quedará con un cadáver; no conmigo... … La muerte no puede arrebatarme: estoy en las manos de la Vida, para siempre, en la misma Fuente de la Vida. Ése que llevan al cementerio ya no soy yo: que se quede la muerte diluyendo bajo tierra lo que es tierra. No puede tocar a mi persona. No puede mi amor ser consumido por los gusanos. “Oh muerte, ¿dónde está tu victoria?”… Estoy aprendiendo a mirarte de frente, a reconocerte vencida en la Cruz. Afirmado en mi Señor Resucitado te miro, como mira un niño la jaula de los leones desde los fuertes brazos de su padre… Voy con Cristo, me basta ahora Su camino de pobre; voy transfigurado, nuevo y yo mismo, gratuitamente vencedor y vencido. Cristo me arrebató, me tomó para Si: ya no soy tuyo, muerte. Así, humildemente vencida, te has hecho hermana: “hermana Muerte”, pequeña, gris, servidora de nuestra Pascua. Amén. CONTEMPLACIÓN. Dejo que el Señor me ame y me ame En silencio, contempla a Jesús el Señor Resucitado, el que adelantó la visión de Su gloriosa Pascua en la experiencia de la Transfiguración. ¿Qué te dice Jesús ante tus temores, dudas, esperanzas y necesidades de una vida plena y feliz?... En silencio, déjate amar y abrazar por Él... Permítele acompañarte en tus dolores y que Él te sane con Su Amor… Únete íntimamente a Jesús, a Su Vida, a Su cruz y a Su resurrección... Nada tienes que temer… Si vives y crees en Él, ya has resucitado… Deja que Jesús te transforme y te renueve por dentro, que Él ponga luz donde había encierro y oscuridad; que Él ponga Su Amor, perdón y vida nueva donde había muerte, pecado, temor... ACCIÓN. Y ahora ¿Cómo hago vida esta Palabra? ¿Qué haré en esta semana de Cuaresma, para crecer en la fe en Cristo Jesús? ¿A qué personas voy a anunciar la Buena Noticia de Jesús, Resurrección y Vida para el mundo? ¿Cómo voy a llevar esta Buena Noticia a los más necesitados de la Luz de la fe? ¿Qué voy a hacer concretamente por mis familiares y amigos que no conocen a Jesús? ORACIÓN DE ENVÍO. – Concluimos nuestro encuentro orando este canto . ¡Tú has venido, Tú volverás, Te esperamos, oh Jesús! ¡Estabas muerto y vivo estás! ¡Sé nuestra vida, oh Jesús! * * * * * * *