CARCEL COLOMBIANA, LA MANSION DEL INFIERNO A muchas personas del común, de ese colombiano promedio que habita a diario por las calles colombianas les interesa poco o nada la situación que se vive en las cárceles colombianas o centros penales, ya que para la gente son simples criminales que están pagando por lo que hace, pero no se detienen a pensar y a indagarse sobre lo que ocurre en estos centros reclusorios tanto para los presos como administrativamente. La situación que se vive en la mayoría de cárceles colombianas es de un ambiente donde el rico sigue prevaleciendo ante los demás, ya que el que tenía plata en un pasado pero por cuestiones laborales o porque esa traficante de armas o narcóticos va a parar “encanado” allí, ese sigue “mandando ya que por fuera muchas personas siguen controlando su dinero y de una u otra forma enviándoselo para darles lujos, prioridades y gustos dentro de la cárcel, muchas veces siendo estas acciones no permitidas dentro de estos centros. Estos hombres en la mayoría de los casos tienen ciertos privilegios en las cárceles como una buena comida, una buena alimentación, seguridad, televisión, periódicos, agua caliente y otros cuantos lujos. Mientras en otro patio u otro sector de la cárcel se vive con resentimiento y culpa en cada uno de los presos llenos de pecado y arrepentimiento pensando que algún día van a salir o peor aún ¿qué van a hacer cuando salgan? ya que son personas manchadas ante la sociedad, son personas en las que ya n o se puede confiar por diferentes motivos, ya sea por homicidas, ladrones, secuestradores, violadores o simplemente están allí porque los acusaron por algo que no hicieron. Pero es muy difícil adentrarnos y hablar de algo en lo cual nadie espera estar “metido” nunca, no podemos juzgar a nadie ya que todo problema comienza desde la injusticia social vivida en Colombia, en nuestro país. Actualmente se gasta aproximadamente 400 mil millones de en el sistema de reclusión de Colombia, un gasto que para muchos no debería existir ya que va dirigidos a personas inescrupulosas que no deberían vivir ni siquiera, pero son cosas que como civiles no nos deben importar e incumbir ya que no podemos cambiar nada de los recursos de este país. Pero dejo esta interrogante: ¿cuánta plata se va en las cárceles y cuánta plata va dirigida hacia la educación y la investigación? Gracias RAUL RICARDO REINA MESA UNIVERSIDAD PEDAGOGICA Y TECNOLOGICA DE COLOMBIA 201311619 Tunja 2013