¿Por qué el sistema financiero internacional debería cambiar? JAIDER ALBERTO MORALES CARDENAS Docente NELSON ENRIQUE SAJONA Fundación de estudios superiores universitaria FESU Administrativa y Finanzas Apartadó 02/03/2023 El sistema financiero internacional es un componente fundamental de la economía global, pero ha sido criticado por perpetuar la desigualdad económica, ser vulnerable a crisis económicas, carecer de transparencia y contribuir a problemas medioambientales globales. Por estas y otras razones, se podría argumentar que es necesario cambiar el sistema financiero internacional para abordar estos problemas y mejorar la economía mundial. Uno de los principales problemas del sistema financiero internacional es la desigualdad económica. Las instituciones financieras internacionales, como el FMI y el Banco Mundial, a menudo imponen políticas económicas que benefician a los países más ricos y poderosos, mientras que dejan a los países más pobres en desventaja. Esto ha llevado a una brecha cada vez mayor entre los ricos y los pobres en todo el mundo, lo que a su vez ha llevado a problemas sociales y políticos. Otro problema del sistema financiero internacional es su vulnerabilidad a las crisis económicas. La crisis financiera mundial de 2008 es un ejemplo de esto. Las instituciones financieras internacionales y los bancos asumieron un riesgo excesivo que resultó en una crisis económica global que afectó a millones de personas en todo el mundo. Este tipo de crisis pueden tener un impacto significativo en la economía global, y es necesario abordar las causas subyacentes para evitar que vuelvan a ocurrir en el futuro En general, se podría argumentar que se necesita un cambio en el sistema financiero internacional para abordar estos y otros problemas importantes que enfrenta la economía mundial. Esto podría incluir cambios en las políticas y prácticas de las instituciones financieras internacionales existentes, así como la creación de nuevas instituciones que estén más alineadas con los objetivos de equidad y sostenibilidad a nivel mundial El sistema financiero internacional ha sido objeto de críticas por su complejidad, falta de transparencia, desigualdades en el acceso y distribución de recursos, y su impacto en la economía global y en los países en desarrollo. En este ensayo, argumentaré que el cambio del sistema financiero internacional es necesario para abordar estas cuestiones y promover el desarrollo sostenible y equitativo a nivel mundial. El sistema financiero internacional se compone de instituciones financieras globales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio (OMC), que desempeñan un papel crucial en la regulación y gestión del sistema monetario y financiero global. Sin embargo, estas instituciones son criticadas por su falta de representatividad y transparencia en la toma de decisiones, lo que afecta a su legitimidad y eficacia. En primer lugar, el sistema financiero internacional es altamente complejo, lo que dificulta su comprensión por parte de los ciudadanos comunes y limita su participación en la toma de decisiones. Además, la complejidad del sistema financiero internacional permite a las instituciones financieras globales mantener un cierto grado de opacidad, lo que dificulta la rendición de cuentas y la supervisión efectiva de su actividad. En segundo lugar, el acceso y la distribución de recursos financieros a nivel mundial son desiguales. Los países en desarrollo tienen un acceso limitado a los mercados financieros globales y a menudo dependen de los préstamos y la asistencia financiera del FMI y del Banco Mundial. Sin embargo, estas instituciones han sido criticadas por imponer políticas económicas que han tenido un impacto negativo en el desarrollo de estos países, como la liberalización económica y la privatización de los servicios públicos. En tercer lugar, el sistema financiero internacional tiene un impacto significativo en la economía global y en la sostenibilidad ambiental. Las instituciones financieras globales a menudo promueven políticas que priorizan el crecimiento económico a corto plazo en detrimento de la sostenibilidad ambiental y social a largo plazo. Esto se debe en parte a la presión ejercida por los países desarrollados y las grandes empresas para maximizar sus beneficios. En consecuencia, es necesario un cambio en el sistema financiero internacional para abordar estas cuestiones. Primero, es necesario mejorar la transparencia y la rendición de cuentas de las instituciones financieras globales. Esto puede lograrse mediante la creación de mecanismos efectivos de supervisión y evaluación de la actividad de estas instituciones y la promoción de una mayor participación ciudadana en la toma de decisiones. En segundo lugar, es necesario abordar la desigualdad en el acceso y la distribución de recursos financieros a nivel mundial. Esto puede lograrse mediante la promoción de políticas que fomenten el desarrollo sostenible y equitativo en los países en desarrollo, como el fortalecimiento de las políticas fiscales y la promoción de la inversión en infraestructuras básicas.