Franciscanum. Revista de las ciencias del espíritu ISSN: 0120-1468 [email protected] Universidad de San Buenaventura Colombia TURRIAGO ROJAS, Daniel El proceso histórico del Vaticano II Franciscanum. Revista de las ciencias del espíritu, núm. 143, 2006, pp. 15-24 Universidad de San Buenaventura Bogotá, Colombia Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=343529894002 Cómo citar el artículo Número completo Más información del artículo Página de la revista en redalyc.org Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto El pmF~~p h,i~lº,!,,¡co del Vaticano 11 Daniel TURRIAGO ROjAS* Hace 44 años un 11 de octubre se daba apertura al Concilio Vaticano II. Desde enero de 1959, Juan XXIII, un papa de transición, elegido para superar el largo y dramático pontificado de Pío XII, leyendo los signos de los tiempos, la nueva teología, la acción católica y el movimiento ecuménico, proponía la convocatoria de un concilio universal que permitiera a la Iglesia el aggiomamiento de las estructuras eclesiales, la renovación del mensaje cristiano y la búsqueda de la unidad cristiana. El papa Roncalli ante la Curia Romana, decía, "Pronuncio ante vosotros, ciertamente temblando un poco de emoción, pero al mismo tiempo con humilde resolución en cuanto al objetivo, el nombre y la propuesta de una doble celebración: un sínodo diocesano para la Urbe y un concilio general para la Iglesia universal"l Siguiendo la organización de la asamblea se envían cartas circulares a 2.594 prelados, 156 superiores de institutos religiosos, 62 universidades para que hagan propuestas sobre doctrina, clero, pueblo cristiano y problemas de actualidad. * Docente de la Facultad de Teología en la Universidad de San Buenaventura, Especialización en Sistemas de Información y Gerencia de Documentos - Universidad de La Salle, Bogotá. Estudios en Filosofía e Historiador - Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. ALBERIGO, Giuseppe. Breve historia del concilio Vaticano II (1959-1965). Salamanca Sígueme, 2005. p. 19 Con las respuestas recibidas se elabora un documento de 15 volúmenes que permite crear la comisión preparatoria encargada de supervisar y coordinar los trabajos del concilio. Se idearon 10 comisiones; teológica, obispos, religiosos, sacramentos, liturgia, seminarios, Iglesias orientales, misiones, apostolado de los laicos, clero y pueblo cristiano, y 3 secretariados, prensa, administración económica y técnica y unidad de los cristianos. El 2 de febrero de 1962, Juan XXIII fija la fecha de inauguración para el jueves 11 de octubre de 1962. 419 expertos en teología, derecho canónico e historia, como consejeros de los padres conciliares, entre ellos, Danielou, Jedin, Rahner, Kung, Ratzinger, De Lubac, Haring, Chenu, Cangar, Schillebeeckx. Durante el desarrollo del concilio, habrá en Roma, 835 obispos europeos, 407 sudamericanos, entre ellos, 43 colombianos y 34 peruanos, 325 norteamericanos, 58 centroamericanos, 290 asiáticos, 273 africanos y 63 de Oceanía. No participaron obispos de Albania, China Popular, Bulgaria, Vietnam del Norte y Corea del norte. 101 observadores representando a las Iglesias cristianas surgidas de la reforma, a los inicios del concilio la Iglesia cristiana ortodoxa no quiso asistir. En la primera sesión no hubo presencia de laicos, laicas y religiosas, pero al final de la asamblea se encontraban auditores laicos, 10 religiosas y 13 laicas. Inauguración El Vaticano II se desarrolló entre 1962-1965 en 4 sesiones con 3 intervalos o recesos. Se inicia con una solemne liturgia de más de 3 horas. en la situación actual de la sociedad, algunos no ven más que ruinas y calamidades; acostumbran a decir que nuestra época es la peor de los últimos siglos, Juan XXIII en su alocución Gaudet mater Ecclesia, afirma, se comportan como si la historia, que es ama y señora de la vida, EL PROCESO HISTÓRICO DEL VATICANO no pudiera ya enseñarles nada, como sí en los tiempos de los concilios de antaño todo hubiera sido perfecto, tanto en lo que concierne a la doctrina cristiana como a las costumbres y a la justa libertad de la Iglesia. Es necesario que proclamemos bien alto nuestro rotundo desacuerdo con estos profetas de la desgracia 2 Para la marcha del concilio se organiun consejo presidencial y un secretageneral. A los 2 días de iniciado el concilio los asü;terltes notan el control curialista de las cOInisiorles, negándose a votar las listas prepor ellos, situación que es zanjada elaborarse un nuevo listado comisial sin injerencia de los organismos romanos. Se inicia bajo el secreto conciliar yendo 11 de octubre al 8 de diciembre de 1962. Se discuten los esquemas sobre liturrevelación, Iglesia, medios de comunic:acilón social y ecumenismo. II Los oradores que desean tomar la palabra en las discusiones deben inscribirse con anticipación. El latín es la lengua utilizada durante el concilio, exceptuando el caso del patriarca melquita de Antioquía Máximo IV, quién habla en francés, con el fin de clarificar que la Iglesia católica no es idéntica a la latina y defender las características de las iglesias orientales frente al uniformismo romano. Los medios de comunicación están pendientes del acontecer conciliar y mantienen informado a todo el planeta por medio de la prensa, la radio y la televisión. La asamblea utiliza las técnicas modernas como la cinta magnetofónica y las máquinas electrónicas para el conteo de votos. Bajo la premisa que la unidad eclesial está personificada en el tomismo, el código de derecho canónico y el latín, se enfrentan 2 tendencias teológicas y eclesiológicas. Una integrista, conservadora y curialista, representada en los cardenales METZ, René. Historia de los concilios. Barcelona: Oikos-tau, 1971. P. 89. POR DANIEL TURRIAGO ROJAS Ottaviani (Santo Oficio), Siri (Génova) y Ruffini (Palermo), apoyada inicialmente por los obispos italianos, españoles, latinoamericanos y obispos de países bajo el control socialista. A medida que se desarrolla la asamblea esta tendencia se convierte en la minoritaria. El ala progresista del concilio simbolizada en los cardenales Bea (Curialista), Suenens (Bruselas), Lercaro (Bolonia), Meyer (Chicago), Montini (Milán), Landázuri (Lima)y Silva Henriquez (Santiago de Chile), Máximo IV (Antioquía), Bukoba (Tanzania), Gracias (Bombay), Doi (Tokio), proponen una renovación de la Iglesia en sí misma y en su relación con el mundo teniendo en cuenta los derechos humanos, la libertad y la democracia. Lercaro llega a afirmar que el "misterio de Cristo en la Iglesia debía considerarse como el misterio de Cristo en los pobres"3 En esta sesión temas de gran discusión, polémica y controversia, son las fuentes de la Revelación (Escritura-Tradición).La autoridad suprema del romano Pontífice (infalibilidad) y la centralización de la Iglesia (romanización). 3 Algunos obispos llegan a afirmar que Roma, no debe seguir considerando a la Iglesia como una inmensa diócesis con un solo obispo, el Papa, reduciendo a los demás obispos a la categoría de sacristanes de lujo. El análisis de esta situación redescubrirá el papel individual y colegial del episcopado. Se considera a la Iglesia como pueblo de Dios, ciudad abierta disponible a las necesidades de los hombres. Primera pausa Entre el 9 de diciembre de 1962 y el 28 de septiembre de 1963 se da el primer receso conciliar. Aconteciendo la muerte de Juan XXIII, un 3 de junio de 1963, y la consiguiente incertidumbre de la continuación del concilio, ya que sus contradictores, especialmente en los círculos romanos afirmaban que nadie podía obligar al nuevo Papa a continuarlo si no lo quería. Es elevado al pontificado, después de un corto cónclave, el cardenal Juan Bau- LABOA, Juan María. Historia de la Iglesia. IV. Epoca contemporánea. Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos, 2002. p. 339. EL PROCESO HISTÓRICO DEL VATICANO Montini, un 21 de junio de 1963 al día siguiente Pablo VI proclama la continuadel Vaticano Il, afIrmando, "la parte más importante del pontifIcado será ocu- II pada por la continuación del Concilio Ecuménico Vaticano Il, hacia el que tienen vueltos sus ojos todos los hombres de buena voluntad"4 se~~~.~l~.~:..ss¡~esión Entre el 29 de septiembre y el 4 de diciembre de 1963. Se aprueba el decreto sobre los medios de comunicación social (Inter mirifica) con 1.960 votos a favor y 164 en contra. El papa Montini instituye un consejo de moderadores que se encargue de agilizar la coordinación de los trabajos de la asamblea. En esta segunda sesión ocurren varios hechos históricos internacionales, como, el asesinato del presidente norteamericano J. F. Kennedy, la salida de las tropas francesas de Argelia y el agravamiento de la guerra del Vietnam. Desde esta sesión se elimina el secreto conciliar informando sobre lo que sucede en la sala conciliar a la prensa y el mundo. Al terminar esta segunda deliberación, el Vaticano Il, se consolida como un con,cilio nuevo y de renovación, dejando a uh lado lo que algunos sectores querían, u,n concilio breve y anodino. Para tranquilizar al ala minoritaria y conservadora, Pablo VI utiliza la unanimidad, aclarando, matizando y corrigiendo los textos que habían sido aprobados por la mayoría ante las controversias, debates y disputas surgidas acerca del diaconado y el alcance sacramental de la consagración episcopal. Segunda pausa Entre el 5 de diciembre de 1963 y el 13 de septiembre de 1964. Se vota la constitución sobre la liturgia (Sacrosanctum concilium) con 2.147 votos a favor y 4 en contra. 4 Sectores curialesproponen terminar el concilio y de esa manera volver a la normalidad. ALBERIGO. Dp. Cit. p. 69. 19 POR DANIEL TURRIAGO ROJAS Pablo VI, en enero de 1964, viaja a Tierra Santa para encontrarse con el patriarca ecuménico de Constantinopla, Atenágoras 1. Este hecho traerá como consecuencia el levantamiento de la mutua excomunión entre Roma y Constantinopla. Tercera sesión Entre el 14 de septiembre y el 21 de noviembre de 1964. Se inicia con una concelebración eucarística según lo propuesto por la constitución sobre la liturgia. Arriban al concilio observadores del patriarcado de Constantinopla, de las iglesias ortodoxas y nestorianas. Se continúan trabajando los esquemas sobre la Iglesia, el ecumenismo, el episcopado, la revelación, el apostolado de los laicos y la Iglesia en el mundo contemporáneo. Este período se caracteriza por ser el más tumultuoso y dramático del concilio al debatirse los temas cruciales sobre el episcopado, la colegialidad, el primado Romano, el ecumenismo y la libertad religiosa, situación que desencadena en los padres conciliares una disposición de preocupación y abatimiento en lugar de optimismo y esperanza. 5 ALBERIGO. Op. Cit. p. 124 Esta desolación fue denominada la crisis de noviembre o semana negra, descrita de la siguiente manera por el obispo argentino Zaspe, "En el aula se propagó un descontento general... Se extendió un clima general de fastidio. Se recogieron firmas para protestar ante le Papa"5 . Se logró salir del abatimiento siguiendo la directriz papal de la unanimidad y las notas aclaratorias a los esquemas definitivos. Se vota la constitución sobre la Iglesia (Lumen gentium) con 2.157 votos a favor y 5 en contra. Los decretos sobre las Iglesias orientales (Orientalium Ecclesiarum) con 2.110 votos a favor y 39 en contra y sobre el ecumenismo (Unitatis redintegratio) con 2.137 votos a favor y 11 en contra. La proclamación de los diferentes documentos conciliares fue creando un clima de malestar en las diferentes congregaciones romanas, EL PROCESO HISTÓRICO DEL VATICANO se tenía la impresión de una resis- JI ficación de Juan XXIII por aclamación conciliar, Pablo VI y los curialistas no están de acuerdo. tencia institucional de los organismos de la curia a aceptar que el empeño de la sede romana a favor En diciembre de 1964, Pablo VI, va a Bombay para asistir al 38 Congreso Eucarístico Internacional. de la fidelidad a las decisiones del concilio fuese encomendado a órganos diferentes de los que ya existían antes del Vaticano lI G• En marzo de 1965, se pone en marcha la celebración de las misas según el rito renovado, en lenguas vernáculas y los altares orientados de cara al pueblo. Al finalizar la tercera sesión el papa Montini proclama a Maria, Madre de la Iglesia. pausa Entre el 22 de noviembre de 1964 y el 13 de septiembre de 1965. El cardenal Lercaro propone la santi Se crea el secretariado pontificio para los no creyentes, fomentando la distensión entre el catolicismo y los países comunistas (Ostpolitik). Se desarrolla entre el 14 de septiemy el 8 de diciembre de 1965. supeditados a la orientación pontificia de la unanimidad. En el inicio de esta sesión en San PePablo VI, anuncia la creación del síde obispos y el deseo de ir a Nueva a visitar las Naciones Unidas. Son promulgados los siguientes esquemas: La carga pastoral de los obispos (Cristhus Dominus) con 2.319 votos a favor y 2 en contra. Se continúa la discusión de los diferentes esquemas bajo la orientación de sectores eclesiales progresistas, pero 6 Sobre la vidareligiosa (Peifecta caritatis), con 2.321 votos a favor y 4 en contra. ALBERIGO. Op. Cit. p. 143 21 POR DAN/EL TURRJAGO ROJAS Sobre la formación de los sacerdotes (Optatam totius Ecclesia). con 2.318 votos a favor y 3 en contra. Sobrela educacióncristiana (Gravissinum educationis), con 2.290 votos a favor y 35 en contra. Las relaciones de la Iglesia con los no cristianos y judíos (Nostra atate), con 2.221 votos a favor y 88 en contra. La constitución sobre la Revelación (Dei Verbum), con 2.305 votos a favor y 2 en contra. La actividad misionera de la Iglesia (Ad gentes), con 2394 votos a favor y 5 en contra. La vida y el ministerio de los sacerdotes (Presbyterorum ordinis), con 2.390 votos a favor y 4 en contra. Sobre la libertad religiosa (Dignitatis humana), con 2.308 votos a favor y 70 en contra. En la elaboración de este documento se destaca la participación de los obispos que sufrieron en carne propia el yugo de los nazis y el régimen comunista, como Wyszynsky (Polonia), Beran (Checoslovaquia). Reivindicando los derechos de la Iglesia, pero confesando los errores de la misma cuando utiliza el fanatismo y la agresividad para la defensa de la fe. Se proclama la constitución sobre la Iglesia en el mundo (Gaudium et spes), con 2.309 votos a favor y 5 en contra, en vísperas de concluir el concilio. El mismo 7 de diciembre se promulga una declaración conjunta entre la Iglesia Romana y la Iglesia de Constantinopla en donde se levanta el anatema de 1054. Finalización El 8 de diciembre de 1965, en la plaza de San Pedro, se clausura el concilio. Se han publicado 16 documentos donde se tocan todos los ámbitos de la vida e interés eclesial. Pablo VI envía comunicaciones a los gobiernos, a los hombres de ciencia, a los trabajadores, a los artistas, a las mujeres, a los jóvenes, a los pobres y enfermos, reafirmando, 7 ALBERIGO. Op. Cit. p. 175 el concilio, antes de separarse, quiere cumplir esta función profética y traducir en breves mensajes y en una lengua más accesible a todos la 'buena nueva' que tiene para el mundo 7 • Estos mensajes fueron leídos por varios cardenales y presentados al mundo en las manos del filósofo Maritain. EL PROCESO HISTÓRICO DEL VATICANO JI manera de conclusión El Concilio Vaticano n presenta al Un concilio que por autoridad expresa mundo no una Iglesia inquisitorial y con- del papa Montini se vetaron los temas relacionados con la refonna de la curia, la ley denatoria de la modernidad, sino, una Iglesia distinta, realista, juvenil, esperanzadora, del celibato y la regulación de la natalidad. abierta y cercana a los problemas contemporáneos. Una Iglesia con rostro humano dis- Un concilio donde reflexionaron y se enfrentaron dos posiciones eclesiológicas, la de una Iglesia que gira en tomo a la co- puesta a escuchar y aprender. munión y la ca-responsabilidad de todos sus miembros y la Iglesia que parte pri- Los obispos habían cambiado; para muchos la participación en el concilio fue mariamente de la obediencia y la subordinación jerárquica. una verdadera renovación espiritual. Un concilio como obra maravillosa en En América Latina el Vaticano n, se concretiza en la segunda conferencia general del Episcopado en Medellín (1968), en donde bajo un clima utópico, reivindicativo y libertario surge la Teología de la liberación. la cual está todo por hacer, según las palabras del teólogo Cangar. "Todavía queda mucho trecho por recorrer", dirá Juan Pablo n en su carta apostólica Novo millenio ineunte (2000), indicando que está pendiente la plena re- El Vaticano n no es un concilio doc- cepción del Vaticano n. trinal y disciplinar como lo quería la Un concilio de carácter teológico-pas- El misal romano. La liturgia de las horas. Los rituales de sacramentos. El Código de Derecho Canónico y el Catecismo de toral donde la Palabra de Dios interpela la Iglesia Católica, son cuatro elementos los signos de los tiempos. eclesiales de la recepción del Vaticano n. minoría. POR DANIEL TURRIAGO ROJAS El Vaticano II es el hecho religioso y precisar y distinguir entre aque- teológico más importante del siglo XX que se proyecta en la Iglesia del siglo XXI. llo que es principio sagrado y Un concilio que ha llevado a una crisis eclesial que repercute en el anuncio del evangelio en el mundo de hoy, por ello es es necesario hacer nuestra la re- necesario como decía, Juan XXIII, evangelio eterno y aquello que es mudable según los tiempos... comendación de Jesús de saber distinguir los "signos de los tiempOS8 . .. .. . .. .. .. .. .. . .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . 8 ALBERIGO. Op. Cit. p. 21