El mercado y su estructura Introducción La economía de mercado es un sistema económico inspirado en el liberalismo de Adam Smith, que defiende la libertad de actuación de compradores y vendedores, con la mínima intervención del estado, donde la única ley reguladora es la ley de la oferta y la demanda. La oferta y la demanda son las fuerzas que hacen posible el funcionamiento de la economía de mercado, determinando la cantidad que se produce de cada bien y el precio al que se venden. Son los agentes económicos privados, familias y empresas, los que toman decisiones respecto a la asignación de recursos, ya que el Estado no interviene. El funcionamiento del sistema de precios es muy simple: si muchas personas demandan un mismo producto, aumentará sus ventas y su precio, y las empresas aprovecharán esta situación incrementando su producción. Al contrario, si baja la demanda de un bien, bajará sus ventas, y con ella su precio, desanimando a las empresas a su fabricación (ver "Cómo funciona la economía de mercado"). Éstas son las fuerzas que rigen este sistema económico y que a largo plazo equilibran la producción y el consumo y, por lo tanto, equilibran el mercado. 1. El mercado En los sistemas económicos capitalistas, el mercado es la institución fundamental a través de la cual se realizan los intercambios. De ahí que en las últimas décadas haya pasado a denominarse sistema de "economía de mercado" Se llama mercado al encuentro entre compradores y vendedores, entre demandantes y oferentes, consumidores y empresas. Hoy día la existencia de un mercado no implica un lugar físico, como ha ocurrido durante la mayor parte de la historia. También hay mercados por internet, o por teléfono... Y existen mercados para bienes y servicios y también para el intercambio de factores productivos, como el capital financiero o el trabajo. Y un mercado para el dinero... En la actualidad la mayoría de los mercados son globales, los bienes se producen en una punta del mundo y se transportan para venderlos por todo el globo. En realidad existen tantos mercados como bienes, servicios y factores tenemos, de manera que se habla del mercado del trigo, del inmobiliario, del transporte, de la electricidad, del trabajo, etc. La condición para la existencia de un mercado es que haya alguien que esté dispuesto a comprar un bien y alguien que quiera vender ese mismo bien. Si ambas partes se ponen de acuerdo sobre el precio, se realiza el intercambio. Hay, por tanto, tres elementos fundamentales en cualquier mercado de un bien o servicio. La base del mercado es el intercambio En efecto, los seres humanos desde la antigüedad advirtieron la necesidad de intercambiar, porque el intercambio mejoraba sus condiciones de vida. 1. Intercambio por trueque Del mismo modo, los mercados surgieron antes de que apareciera el dinero, puesto que las personas se reunían en ciertos lugares de sus comunidades llevando parte de lo que producían y lo intercambiaban por lo que no podían producir. En realidad, los primeros intercambios se hicieron por medio de trueque, es decir cambiaban un bien por otro; o por intercambio directo. 2. Intercambio con dinero Por supuesto, cuando apareció el dinero, los intercambios se facilitaron, puesto que el intercambio fue indirecto y esto proporcionó la posibilidad de ampliar los intercambios tanto en tiempo como en espacio. Por otra parte, el intercambio indirecto permitió la evolución y el perfeccionamiento de los mercados, haciéndolos más eficientes. 2. Tipos de mercados Los mercados se pueden clasificar de distintas maneras en función de una serie de elementos. Las distintas clases de mercado son: Según el volumen: Mercados mayoristas: con un elevado volumen de ventas. Mercados minoristas: bajo volumen de ventas. Según el número de ofertantes: Competencia perfecta: La competencia perfecta es una representación idealizada de los mercados de bienes y de servicios en la que la interacción recíproca de la oferta y la demanda determina el precio. Un mercado de competencia perfecta es aquel en el que existen muchos compradores y muchos vendedores, de forma que ningún comprador o vendedor individual ejerce influencia decisiva sobre el precio. Para que esto ocurra, debe cumplirse estos siete elementos: 1. Existencia de un elevado número de oferentes y demandantes. La decisión individual de cada uno de ellos ejercerá escasa influencia sobre el mercado global. 2. Homogeneidad del producto. No existen diferencias entre los productos que venden los oferentes. 3. Transparencia del mercado. Todos los participantes tienen pleno conocimiento de las condiciones generales en que opera el mercado. 4. Libertad de entrada y salida de empresas. Todas las empresas, cuando lo deseen, podrán entrar y salir del mercado. 5. Libre acceso a la información. 6. Libre acceso a recursos. 7. Beneficio igual a cero en el largo plazo. La esencia de la competencia perfecta no está referida tanto a la rivalidad como a la dispersión de la capacidad de control que los agentes económicos pueden ejercer sobre la marca del mercado. Cuando se viola o no se cumple con alguno de los requisitos para la competencia perfecta se produce un fallo de mercado. Competencia Imperfecta Monopolio: solo existe un único ofertante de un servicio o producto que se encuentra muy demandado por el mercado. Al controlar en exclusividad podrá establecer las condiciones y precios de venta. Duopolio: solo existen dos ofertantes de un servicio o producto que se encuentra muy demandado por el mercado. Al controlar en exclusividad podrá establecer las condiciones y precios de venta. Oligopolio: hay unos pocos ofertantes de un producto, por lo que se ponen de acuerdo en establecer condiciones precios. De esa manera no habrá competencia entre ellos. Monopsonio: solo existe un único demandante de un bien o servicio que se encuentra muy ofrecido por el mercado. Al controlar en exclusividad podrá establecer las condiciones y precios de compra. Según las transacciones sobre servicios o bienes: Mercado de bienes: se adquieren y se comercializan mercancías y artículos o productos Mercado de servicios: hace referencia a las contrataciones, para la prestación de diferentes clases de servicios Mercado de factores de producción: se intercambian los factores productivos como las materias primas, el capital, el trabajo, la Habilidad Empresarial y la tecnología. Luego, estos factores son combinados por las empresas para poder efectuar sus labores productivas. Claro que en este caso los oferentes son los individuos y las familias que venden estos factores de producción y cobran un precio por ellos. Mientras que las empresas funcionan como los demandantes, puesto que están dispuestos a pagar un precio, para poder obtener los factores de producción. Según su naturaleza Mercados financieros Es un mecanismo que permite a los agentes económicos el intercambio de activos financieros. En general, cualquier mercado de materias primas podría ser considerado como un mercado financiero si el propósito del comprador no es el consumo inmediato del producto, sino el retraso del consumo en el tiempo a debida correspondencia. o Mercado de bonos Es un mercado financiero donde los participantes compran y venden títulos de deuda, usualmente en la forma de bonos o Mercado de capitales Son un tipo de mercado financiero en los que se ofrecen y demandan fondos o medios de financiación a mediano y largo plazos. Frente a ellos, los mercados monetarios son los que ofrecen y demandan fondos (liquidez) a corto plazo. o Mercado de valores Son un tipo de mercado de capitales en el que se negocia la renta variable y la renta fija de una forma estructurada, a través de la compraventa de valores negociables. Permite la canalización de capital a medio y largo plazo de los inversores a los usuarios. o Mercado primario: El mercado primario o mercado de emisión es aquel mercado financiero en el que se emiten valores negociables y en el que por tanto se transmiten los títulos por primera vez. Los mercados de valores se dividen en mercados primarios y secundarios, separando la fase de emisión de valores y la de su negociación posterior. o Mercado secundario Es una parte del mercado financiero de capitales dedicado a la compraventa de valores que ya han sido emitidos en una primera oferta pública o privada, en el denominado mercado primario. Mercado bilateral Es un mercado en el que un grupo de usuarios genera un externalidad sobre otro distinto, existiendo una plataforma que los pone en contacto. Ejemplos de mercados bilaterales son: Las tarjetas de crédito, Las consolas de videojuegos, Las agencias de citas. Los sitios web de subastas. Mercado cautivo: Se denomina mercado cautivo a aquel en el cual existen una serie de barreras de entrada que impiden la competencia, y convierten al mercado en un monopolio u oligopolio. Es el contrario al libre mercado. Mercado gris: Es un término proveniente del idioma inglés que se refiere al flujo de mercancías que se realiza a través de los canales de distribución diferentes a los autorizados por el fabricante o el productor. A diferencia del mercado negro, las mercancías 'grises' no son ilegales Mercado libre: Sistema en el que el precio de los bienes o servicios es acordado por el consentimiento entre los vendedores y los consumidores, mediante las leyes de la oferta y la demanda. Requiere para su implementación de la existencia de la libre competencia, lo que a su vez requiere que entre los participantes de una transacción comercial no haya coerción, ni fraude, etc, o, más en general, que todas las transacciones sean voluntarias. Mercado negro: Término utilizado para describir la venta clandestina e ilegal de bienes, productos o servicios, violando la fijación de precios o el racionamiento impuesto por el gobierno o las empresas. Mercado laboral o Mercado de trabajo: mercado en donde confluyen la demanda y la oferta de trabajo. El mercado de trabajo tiene particularidades que lo diferencian de otro tipo de mercados (financiero, inmobiliario, de materias primas, etc.) ya que se relaciona con la libertad de los trabajadores y la necesidad de garantizar la misma. En ese sentido, el mercado de trabajo suele estar influido y regulado por el Estado a través del derecho laboral y por una modalidad especial de contratos, los convenios colectivos de trabajo. Según la regulación: Mercados regulados: las autoridades se ocupan de controlar las condiciones de venta y los precios. Mercados desregulados: es el propio mercado el responsable de fijar los precios según la oferta y la demanda, sin que exista participación por parte del estado. Según los agentes que intervienen: Mercado de consumidores: que se abastece por minoristas. Mercado de minoristas: que se abastece por semimayoristas. Mercado de semimayoristas: que es abastece por mayoristas. Mercado de mayoristas: que se abastece por productores o fabricantes. 3. Elementos del Mercado Los principales elementos del mercado son a. b. c. d. e. f. g. La Oferta, El Vendedor La Demanda El comprador El precio El punto de equilibrio La mercancía: La Oferta Expresa el comportamiento de los vendedores. Es la cantidad de bienes y servicios que diversas organizaciones, instituciones, personas o empresas están dispuestas a llevar al mercado para la venta, a un precio dado, en un período determinado. ¿Qué pasa si los precios son muy bajos? Si los precios son muy bajos, nosotros los demandantes estaremos encantados. Sin embargo, los productores no lo estarán tanto. Esto se debe a que producir cuesta dinero. Si los precios son muy bajos los productores no podrán recuperar los costos que han tenido. Por tanto, si los precios son bajos habrá muy poquitos productores dispuestos a vender, porque no ganarán mucho. ¿Y si los precios son altos? Como norma general, el agricultor cultivará aquellos bienes que más beneficio den. Si los precios son altos es que los consumidores los están pagando lo que hará que se quiera cultivar más (y ganar más dinero). Esto nos lleva a la ley de la oferta. 1. La ley de la oferta Se cumple con casi todos los productos, “LA LEY DE LA OFERTA” establece que: A mayor precio mayor cantidad ofrecida A menor precio menor cantidad ofrecida Es decir, en la Oferta, las variables Precio y Cantidad, son directamente proporcionales La Oferta se puede expresar de tres formas: Mediante una tabla, una curva o gráfico y una expresión matemática o función de Oferta. La tabla de oferta nos va a mostrar cuánta cantidad van a ofrecer los productores a cada precio. Fíjate que la tabla nos muestra que, si el precio 1 euro, la cantidad que ofrecen (quieren vender) son 4 Pero si el precio sube a 4 ahora querrán vender más (van a ganar más dinero) y la cantidad demandada será 10 unidades. De la misma manera si el precio baja a 3 euros querrán producir menos, porque ahora van a ganar menos dinero y ofrecerán sólo 8 unidades. La curva de oferta es la representación gráfica de las diferentes cantidades ofrecidas por los productores para cada precio distinto. La función de oferta es la ecuación que representa la cantidad fabricada de un bien en función a su precio y/o otras variables relevantes. En la función de oferta se pueden incluir factores como la tecnología, los precios de los insumos, el estado de la economía(recesión o expansión), entre otros. Mediante la misma, se intenta explicar cómo los competidores de una industria deciden cuánto producir. Dado la anterior, la función de oferta puede plasmarse, por ejemplo, de la siguiente forma: Qx = f(Px, C,T,e); Donde: Qx = Cantidad del bien x Px= Precio del bien x C = Costos de producción del bien x T= Tecnología e= Espectativas 2. Características de la función de oferta Las características de la curva de oferta son las siguientes: La ecuación debe reflejar una relación positiva entre la cantidad ofertada y el precio del producto. Esto, debido a que los vendedores estarán dispuestos a llevar más stock al mercado si les pagarán más por su bien o servicio, y viceversa. A esto se le conoce como ley de oferta. La función refleja la disposición a vender de la empresa, más no la cantidad final que se terminará transando en el equilibrio de mercado. Un incremento de los costos de producción implica que la curva de oferta se desplaza hacia la izquierda. Lo anterior quiere decir que está aumentando el precio mínimo aceptado por la empresa a cambio de su producto(p1>p2), como observamos en la siguiente imagen: Lo avances tecnológicos tienen el efecto de reducir los costes de producción. Así, sucede lo contrario al punto anterior y la curva de oferta se desplaza hacia la derecha. Esto significa que, para obtener el mismo beneficio, la firma ahora podría aceptar un precio menor por su mercancía(p2<p1) como vemos en el gráfico: Otra variable que juega un rol importante son las expectativas. Cuanto más optimista se encuentre el empresario respecto a factores como el crecimiento económico del país, más stock llevará al mercado. Igualmente, influyen las perspectivas que se tengan sobre los precios de los insumos. Si se espera un alza, el oferente disminuirá su producción. 3. Cambios en la cantidad ofrecida (cambios en el precio del bien) Antes de comenzar es muy importante señalar que no se debe confundir "cambios en la cantidad ofertada" con "cambios en la oferta". Un cambio en el precio, céteris paribus, que es el caso que vamos a analizar ahora, provoca un cambio en la cantidad ofertada y, por consiguiente, un movimiento a lo largo de su curva. Un cambio en cualquier otro factor (costes de producción y expectativas empresariales), provocará un cambio en la oferta que se traduce, como veremos más adelante, en un desplazamiento de la curva de oferta. A continuación, mediante un ejemplo, analizaremos los cambios que puede sufrir la cantidad ofertada ante variaciones en el precio del bien: 3.1 Aumento del precio del bien Partimos de una situación en la que el precio de mercado es de 2 €. A ese precio el mercado oferta 6 unidades (punto A). A continuación, por cualquier motivo, aumenta el precio a 4 €, provocando que la cantidad ofertada ascienda hasta 10 unidades (punto B). Observemos que se ha producido un movimiento a lo largo de la curva de oferta (de A a B). Un incremento en el precio (de P1 a P2), causa un aumento en la cantidad ofertada (de Q1 a Q2) Al subir el precio, aumenta la cantidad ofertada 3.2 Disminución del precio del bien El mismo efecto, pero en sentido contrario, se produce ante una disminución del precio. Si partimos de un precio inicial de 4 €, con una cantidad ofertada de 10 unidades (punto B), una disminución del precio hasta 2 € haría descender la cantidad ofertada hasta 6 unidades (punto A). Se ha producido un movimiento a lo largo de la curva de oferta, pero en sentido contrario (de B a A). Una disminución en el precio (de P1 a P2), causa una reducción en la cantidad ofertada (de Q1 a Q2). Al bajar el precio, disminuye la cantidad ofertada “Un cambio en el precio del bien provoca un cambio en la cantidad ofrecida y, por lo tanto, un movimiento a lo largo de la curva de la oferta.” 4. Cambios en la oferta (cambios en los otros factores determinantes) Hasta ahora, hemos analizado las variaciones que sufre la función de la oferta ante una variación del precio del bien considerado, pero ¿qué ocurrirá si lo que varía es uno de los otros factores? En este apartado vamos a ver que una variación de uno de los factores distinto al precio del bien no producirá un movimiento entre dos puntos de la curva de oferta, sino que será la curva entera la que se desplace. Esto se debe a que la cantidad ofertada aumentará o disminuirá para los mismos niveles de precio. Efectivamente, si por ejemplo, disminuye los costes de producción, aumentará la oferta del bien, pero no solamente aumentará para uno solo de los precios, sino que lo hará para cada precio, lo que provocará una nueva Tabla de Oferta, cuyos datos, trasladados a su representación gráfica, nos mostrará un desplazamiento de toda la curva de oferta: hacia la derecha, si el efecto es positivo sobre la oferta, es decir, si aumenta, o hacia la izquierda, si el efecto es negativo sobre la oferta, es decir, si disminuye. Veámoslo detalladamente mediante un ejemplo. Supongamos que disminuye los costes de fabricación. Significa que la producción del bien resultará más rentable, por lo que las empresas desearán vender más cantidades al mismo precio que antes. Es decir, posiblemente, para un precio de 4 euros, en vez de ofertar 10 unidades como antes, oferten ahora 12 unidades. Pero también aumentaría la oferta para el precio de 2 euros, que podría pasar de las 6 unidades estimadas inicialmente a 8 unidades. Nos encontraríamos, pues, con una nueva Tabla de oferta y, por lo tanto, una nueva curva de oferta (O2). Si observamos bien, esta nueva curva responde a un desplazamiento de la curva de oferta inicial (O1), antes de la disminución de los costos de producción. Analicemos a continuación cómo reacciona la oferta ante la variación de cada uno de sus determinantes: 1. El precio de los demás bienes (Po) 2. Los costes de los factores de producción (C) 3. Las expectativas empresariales (E) Comprobaremos que una variación de uno de estos factores producirá un desplazamiento de la curva de oferta, hacia la derecha o hacia la izquierda, dependiendo de la dirección del factor que varíe. a. Variaciones en el precio de los demás bienes Generalmente, un incremento del precio de los demás bienes provocará que la producción del bien cuyo precio no ha aumentado sea relativamente menos atractiva que antes. Por lo tanto, podemos concluir que la oferta de un bien descenderá si aumentan los precios de los demás bienes, céteris paribus. Este hecho se observa más claramente cuando se trata de bienes sustitutivos. Un descenso, por ejemplo, en el precio de las naranjas puede hacer bajar su oferta y aumentar la de manzanas. Es decir, el descenso del precio de un bien hace que aumente la oferta de otro bien sustitutivo, desplazando su curva de oferta hacia la derecha. Evidentemente, sucederá todo lo contrario si el precio de un bien sustitutivo aumenta: aumentará su oferta y disminuirá la del bien cuyo precio ha bajado, es decir, disminuirá la oferta del bien, desplazándose su curva de oferta hacia la izquierda. b. Variaciones en los costes de los factores de producción Un incremento de los costes de producción supone un menor beneficio por unidad vendida. Ante esta situación, las empresas podrían optar por reducir su oferta para gastar menos; ofrecerán una menor cantidad de ese producto para cada precio. Es decir, se reducirá la cantidad ofertada, desplazándose la cura de oferta hacia la izquierda. En cambio, si se reducen los costos de producción, el beneficio aumentaría y, por consiguiente, también lo haría la oferta, ya que las empresas estarán dispuestas a vender más unidades a los mismos precios (les resulta ahora más barato producir que antes), desplazándose la curva de oferta hacia la derecha, Un aumento de los costos de producción provoca una disminución en la cantidad ofertada del bien desplazando su curva de oferta hacia la izquierda Una reducción de los costos de producción provoca un aumento en la cantidad ofertada del bien desplazando su curva de oferta hacia la derecha La tecnología es la aplicación de los conocimientos científicos a los procesos productivos. Las empresas buscarán constantemente la tecnología más eficiente, ya que de esta forma obtendrán mayores beneficios, incentivando así el incremento de su oferta. Pues bien, el efecto que tendrá un avance tecnológico sobre la oferta será idéntico al de una reducción del coste de los factores: aumento de la oferta y, por lo tanto, desplazamiento de la curva hacia la derecha. c. Variaciones en las expectativas empresariales Los objetivos de las empresas, las previsiones de ventas y las expectativas del mercado influyen considerablemente en la oferta. El ritmo de la producción será distinto para mercados con distintas expectativas; a mayores expectativas, mayor será la oferta. Asimismo, una previsión de subida de los costes de producción alertará sobre la necesidad de bajar la oferta, mientras que una estimación de subida de los precios del bien, incentivará su incremento. RESUMIENDO Un cambio en el precio del bien provoca un cambio en la cantidad ofertada, produciendo un movimiento sobre la curva de oferta. Un cambio de cualquier factor diferente del precio del bien provocará un cambio en la oferta, produciendo un desplazamiento de toda la curva de oferta. Es muy importante tener clara la distinción entre oferta y cantidad ofrecida si no queremos caer en descuidos habituales que se suelen dar entre estudiantes e incluso profesionales. En más de una ocasión habremos leído que "la bajada del precio de un producto ha provocado una disminución de su oferta". Ya hemos visto que cualquier variación en el precio de un bien lo que provoca es una variación en la cantidad ofrecida de dicho bien (un movimiento a lo largo de su curva). Por lo tanto, una bajada del precio de un bien no hará disminuir su oferta, lo que realmente disminuirá será la cantidad ofrecida de ese bien. Por consiguiente, lo correcto sería decir que "la bajada del precio de un producto ha provocado una disminución de su cantidad ofrecida". Así, cuando hablemos de "una disminución de la oferta" nos estaremos refiriendo a un desplazamiento de la curva de oferta a la izquierda, que estará provocado no por una disminución del precio del bien, sino por una variación de cualquier otro de los factores distintos al precio del bien (el precio de otros bienes relacionados, el coste de los factores de producción o las expectativas empresariales). Hasta aquí, hemos analizado las variaciones que sufren las cantidades ofrecidas y la oferta de un bien ante los cambios producidos en los factores de los que éstas dependen. Sin embargo, no hemos llegado a cuantificar esta relación. Es decir, hemos realizado un estudio desde un punto de vista cualitativo, pero no cuantitativo. Para ello, para conocer la relación cuantitativa entre la cantidad ofrecida de un bien y su precio, y la oferta y los factores de los que dependen, debemos recurrir al concepto económico de elasticidad de la oferta, que es la medida del grado de respuesta de las cantidades ofrecidas de un bien ante las variaciones de los factores de los que éstas dependen. La Demanda Demanda de un bien es la Cantidad de bienes y servicios que compradores o consumidores están dispuestos a adquirir efectivamente, a un precio dado en un período determinado. céteris paribus (considerando constante, el resto de factores) El funcionamiento del sistema de precios nos indica que si el precio de un bien sube, los consumidores comprarán menos de ese bien. Al contrario, si el precio baja, es probable que compren más. Pero veamos por qué ocurre esto. Cuando un bien se encarece, se provoca un doble efecto: Efecto renta: Al aumentar el precio de un bien, la renta real de los consumidores disminuye (reduciendo su capacidad adquisitiva) y, por consiguiente, comprarán menos cantidad de todos los bienes, entre los que se encuentra ese bien cuyo precio ha aumentado. Efecto sustitución: Si aumenta el precio de un bien, los consumidores que solían adquirirlo dejarán de hacerlo y lo sustituirán por otro más barato y que los satisfaga de la misma manera. Pues bien, a esta relación que existe entre el precio y la cantidad demandada de un bien se le conoce como la ley de la demanda. A mayor precio menor cantidad demandada A menor precio mayor cantidad demandada Efectivamente, la cantidad que se demanda de un bien dependerá fundamentalmente del precio de dicho bien. Cuanto menor sea su precio, mayor será la cantidad demandada. Pero el precio del bien no es el único factor que determina la cantidad demandada. Determinantes de la Demanda Existen una serie de factores determinantes de las cantidades que los consumidores desean adquirir de cada bien por unidad de tiempo, siendo los más importantes: El precio del bien (P) El Ingreso de los consumidores (y) Las preferencias o gustos de los consumidores (G) El precio de los bienes sustitutos (Ps) El precio de los bienes complementarios (Pc) La variación de cada uno de estos factores ejercerá una variación en la demanda, aumentándola o disminuyéndola. A esta relación que existe entre cada una de estas variables y la cantidad demandada de un bien se le denomina Función de la demanda. 1. Función de la demanda Relación existente entre la cantidad demandada de un bien y cualquier otra variable de la que depende dicha demanda (precio del bien, precio otros bienes, preferencias y nivel de renta de los consumidores) La Demanda se puede expresar de tres formas Mediante, una Tabla, mediante un gráfico o curva y mediante una función matemática: Relación entre el precio y la cantidad demandada Vamos a hacer variar el precio, dejando constantes al resto de factores (precio otros bienes, preferencias y rentas de los consumidores) para observar cómo varía la cantidad demandada. Para ello, construimos una tabla (Tabla de demanda) en la que detallaremos el número de artículos que se venderían a cada precio. Observamos que cuanto mayor es el precio del bien, menor es la cantidad que de ese bien está dispuesto a comprar el consumidor, y que cuanto más bajo es su precio, más unidades se demandan. Es decir, existe una relación inversa. Pues bien, a esa relación inversa que existe entre el precio un bien y la cantidad demandada, se le denomina ley de la demanda. 2. Ley de la demanda Es la relación inversa existente entre el precio de un bien y la cantidad demandada Cuando se reduce el precio, aumenta la cantidad demandada. Cuando aumenta el precio, disminuye la cantidad demandada. Esta relación inversa podemos visualizarla mediante su representación gráfica, obteniéndose lo que se denomina la Curva de la Demanda. Para ello, trasladamos los datos obtenidos de la Tabla de Demanda a los ejes de coordenadas; el precio (P) va en el eje de ordenadas y la cantidad demandada (Q) en el de abscisas. Tomamos dos puntos cualesquiera de la tabla, por ejemplo: (6,4) y (10,2) Uniendo dichos puntos obtenemos una línea recta que muestra claramente una pendiente negativa (es una función decreciente). Curva de la demanda: Es una curva que muestra las cantidades de un bien que un consumidor está dispuesto a comprar para diferentes niveles de precios. La Función Matemática de la Demanda se expresa así: D= f(Px, y, g, Ps, Pc) 3. Cambios en la cantidad demandada (cambios en el precio del bien) Antes de comenzar es muy importante señalar que no se debe confundir "cambios en la cantidad demandada" con "cambios en la demanda". Un cambio en el precio, céteris paribus, que es el caso que vamos a analizar ahora, provoca un cambio en la cantidad demandada y, por consiguiente, un movimiento a lo largo de su curva. Un cambio en cualquier otro factor (precio otros bienes relacionados, preferencia y renta de los consumidores), provocará un cambio en la demanda que se traduce, como veremos más adelante, en un desplazamiento de la curva de demanda. A continuación, mediante un ejemplo, analizaremos los cambios que puede sufrir la cantidad demandada ante variaciones en el precio del bien: Aumento del precio del bien Partimos de una situación en la que el precio de mercado es de 2 € (P1). A esa precio, el mercado demanda 10 unidades (Q1). Nos encontramos en el punto A de la curva de demanda. A continuación, por cualquier motivo, aumenta el precio a 4 € (P2), provocando que la cantidad demandada descienda hasta 6 unidades (Q2), trasladándonos al punto B. Observemos que se ha producido un movimiento a lo largo de la curva de demanda, desde A hasta B. Un incremento en el precio (de P1 a P2), causa una disminución en la cantidad demandada (de Q1 a Q2). Al subir el precio, disminuye la cantidad demandada Disminución del precio del bien El mismo efecto, pero en sentido contrario, se produce ante una disminución del precio. Si partimos de un precio inicial de 4 €, con una cantidad demandada de 6 unidades (punto B), una disminución del precio hasta 2 € haría aumentar la cantidad demandada hasta 10 unidades (punto A). Se ha producido un movimiento a lo largo de la curva de demanda, pero en sentido contrario: desde B hasta A. Una disminución en el precio (de P1 a P2), causa un aumento en la cantidad demandada (de Q1 a Q2). Al bajar el precio, aumenta la cantidad demandada Un cambio en el precio del bien provoca un cambio en la cantidad demandada y, por lo tanto, un movimiento a lo largo de la curva de la demanda. 4. Cambios en la demanda (cambios en los otros factores determinantes) Hasta ahora, hemos analizado las variaciones que sufre la función de la demanda ante una variación del precio del bien considerado, pero ¿qué ocurrirá si lo que varía es uno de los otros factores? En este apartado vamos a ver que una variación de uno de los factores distinto al precio del bien no producirá un movimiento entre dos puntos de la curva de demanda, sino que será la curva entera la que se desplace. Esto se debe a que la cantidad demandada aumentará, o disminuirá para los mismos niveles de precio. Efectivamente, si, por ejemplo, aumenta la renta de los consumidores, aumentará la demanda del bien, pero no solamente aumentará para uno solo de los precios, sino que lo hará para cada precio, lo que provocará una nueva Tabla de Demanda, cuyos datos, trasladados a su representación gráfica, nos mostrará un desplazamiento de toda la curva de demanda: hacia la derecha, si el efecto es positivo sobre la demanda, es decir, si aumenta, o hacia la izquierda, si el efecto es negativo sobre la demanda, es decir, si disminuye. Veámoslo detalladamente mediante un ejemplo. Supongamos que aumenta la renta de los consumidores. Dispondrán ahora de mayor poder adquisitivo y, probablemente, estén dispuestos a comprar más cantidades al mismo precio que antes. Es decir, posiblemente, para un precio de 4 euros, en vez de demandar 6 unidades como antes, demanden ahora 8 unidades. Pero también aumentaría la demanda para el precio de 2 euros, que podría pasar de las 10 unidades estimadas inicialmente a 12 unidades. Nos encontraríamos, pues, con una nueva Tabla de demanda y, por lo tanto, una nueva curva de demanda (D2). Si observamos bien, esta nueva curva responde a un desplazamiento de la curva de demanda inicial (D1), antes del aumento de la renta de los consumidores. Analicemos ahora cómo reacciona la demanda ante la variación de cada uno de sus determinantes más importantes: 1. El precio de otros bienes relacionados (Po) 2. Las preferencias o gustos de los consumidores (G) 3. La renta de los consumidores (R) 4.1. Variaciones en el precio de otros bienes relacionados Cuando hablamos de bienes relacionados, nos estamos refiriendo a aquellos bienes que en su comportamiento guardan cierta relación con los bienes considerados. Podemos encontrarnos: 1.a Bienes que satisfacen la misma necesidad. Podemos elegir entre diferentes frutas u optar por diferentes medios de transportes para viajar (coche, avión o tren). Ante la ausencia de uno de ellos, tenemos la opción de sustituirlo por otro. Son los llamados bienes sustitutos. 1.b Bienes que se consumen conjuntamente, ya que el consumo de uno requiere necesariamente el uso del otro. Por ejemplo, el coche y la gasolina. Son conocidos como bienes complementarios. Veamos el comportamiento de la curva de demanda ante las variaciones del precio de cada uno de estos bienes. 1.a Variaciones en el precio de los bienes sustitutos Un incremento en el precio del billete de avión puede hacer bajar su demanda y aumentar la del billete de tren. Es decir, el aumento del precio de un bien hace que aumente la demanda de otro bien sustitutivo, desplazando su curva de demanda hacia la derecha. Evidentemente, sucederá todo lo contrario si el precio de un bien sustitutivo disminuye: disminuirá la compra del bien considerado y aumentará la del bien cuyo precio ha bajado, es decir, disminuirá la demanda del bien, desplazándose su curva de demanda hacia la izquierda. Si dos bienes son sustitutivos y el precio de uno aumenta, la demanda del otro también aumenta. 1.b Variaciones en el precio de bienes complementarios En cambio, si se incrementa el precio de la gasolina, no solo hará disminuir el consumo de gasolina, sino que también bajará la demanda de coches, desplazándose su curva de demanda hacia la izquierda (una menor cantidad demandada para cada precio). Todo lo contrario, sucederá ante una bajada del precio de la gasolina, ya que facilitará el aumento de la demanda de coches, desplazando su curva hacia la derecha. Si dos bienes son complementarios y el precio de uno aumenta, la demanda del otro disminuye. 4.2 Variaciones en las preferencias de los consumidores Si aumentan las preferencias de los consumidores por un bien (se pone de moda ciertas prendas), céteris paribus, lógicamente la demanda de este bien aumentará (Variaciones en la Demanda) y, por lo tanto, su curva de demanda se desplazará hacia la derecha. Al contrario, si disminuyen las preferencias por un bien (deja de estar de moda), céteris paribus, su demanda caerá y su curva de demanda se desplazará hacia la izquierda. 4.3. Variaciones en la renta o Ingreso de los consumidores La Ley de la Demanda sostiene que al aumentar la renta de una persona el consumo de bienes aumenta. Por lo tanto, Un aumento de la renta de los consumidores provoca un aumento en la cantidad demandada del bien normal desplazando su curva de demanda hacia la derecha Sin embargo, existen unos bienes, los bienes inferiores (1) que incumplen esta ley, ya que al aumentar los ingresos del consumidor su demanda disminuye. Un aumento de la renta de los consumidores provoca un descenso en la cantidad demandada del bien inferior desplazando su curva de demanda hacia la izquierda (1) Los consumidores, al disponer de más renta, prefieren productos de mejor calidad. Ejemplos de bienes inferiores son: comida rápida, coches de segunda mano, etc. En general, bienes o servicios de baja calidad que pueden ser cambiados ante un aumento en los ingresos del consumidor. RESUMIENDO Un cambio en el precio del bien provoca un cambio en la cantidad demandada, produciendo un movimiento sobre la curva de demanda. Un cambio de cualquier factor diferente del precio del bien provocará un cambio en la demanda, produciendo un desplazamiento de toda la curva de demanda. Es muy importante tener clara la distinción entre demanda y cantidad demandada si no queremos caer en descuidos habituales que se suelen dar entre estudiantes e incluso profesionales. En más de una ocasión habremos leído que "la bajada del precio de un producto ha provocado un aumento de su demanda". Ya hemos visto que cualquier variación en el precio de un bien lo que provoca es una variación en la cantidad demandada de dicho bien (un movimiento a lo largo de su curva). Por lo tanto, una bajada del precio de un bien no hará aumentar su demanda, lo que realmente aumentará será la cantidad demandada de ese bien. Por consiguiente, lo correcto sería decir que "la bajada del precio de un producto ha provocado un aumento de su cantidad demandada". Así, cuando hablemos de "un aumento de la demanda" nos estaremos refiriendo a un desplazamiento de la curva de demanda a la derecha, que estará provocado no por una disminución del precio del bien, sino por una variación de cualquier otro de los factores distintos al precio del bien (el precio de otros bienes relacionados, las preferencias de los consumidores o la renta de los consumidores). Hasta aquí, hemos analizado las variaciones que sufren las cantidades demandadas y la demanda de un bien ante los cambios producidos en los factores de los que éstas dependen. Sin embargo, no hemos llegado a cuantificar esta relación. Es decir, hemos realizado un estudio desde un punto de vista cualitativo, pero no cuantitativo. Para ello, para conocer la relación cuantitativa entre la cantidad demandada de un bien y su precio, y la demanda y los factores de los que dependen, debemos recurrir al concepto económico de elasticidad de la demanda: Qué es el precio El precio, a nivel conceptual, expresa el valor del producto o servicio en términos monetarios. Las materias primas, el tiempo de producción, la inversión tecnológica y la competencia en el mercado son algunos de los factores que inciden en la formación del precio. Equilibrio de mercado La oferta y la demanda son dos fuerzas que hacen posible el que un mercado se encuentre en equilibrio. A través de dichas fuerzas se determina la cantidad que se produce de cada bien, así como el precio al que se venden. Por otro lado, los agentes económicos (familias y empresas) toman las decisiones respecto a la asignación de recursos. En muchas ocasiones sin necesidad del Estado, ya que, en este tipo de sistema económico, no interviene. El punto de equilibrio La cantidad y el precio que se fija queda determinado a través de las curvas de oferta y demanda de ese bien o servicio. Si el precio es muy alto, los productores u oferentes estarán ofreciendo más de lo que se demanda. Cuando esto ocurre, existirán cantidades que no pueden venderse, por lo que se reducirán sus precios y, por tanto, su producción. Representando el mercado en equilibrio, punto en el que se encuentran la oferta y demanda, se deduce que para ese punto de equilibrio existe un41brio (P*) y una cantidad de equilibrio (Q*). El equilibrio de mercado, al que se igualan los precios y las cantidades, no significa que sea justo desde el punto de vista social. Esto se debe a que habrá consumidores que no puedan pagar el precio de equilibrio. Hablamos de un elemento muy importante, dado que ese bien o servicio puede ser de primera necesidad, quedando excluido del mercado. ¿Cómo se comporta el punto de equilibrio? En realidad, lo cierto es que el equilibrio de mercado, si se alcanza, no se mantiene durante el tiempo. Esto se debe a que cambian las condiciones de mercado por factores de oferta y demanda. Cambios como, por ejemplo, variaciones en los precios de los factores, cambios en las modas, avances tecnológicos, etc. No obstante, hay otro componente a tener en cuenta. Un componente basado en el poder que tienen algunas empresas para establecer el precio. Esto lo hacen a través de una reducción de la producción, de tal forma que disminuye la oferta y se elevan los precios. Como consecuencia de esto, la empresa espera obtener importantes beneficios. LAS MERCANCIAS O BIENES Definición.- Son todos aquellos elementos físicos que por sus características tienen la capacidad de satisfacer necesidades humanas de manera directa o indirecta. CLASIFICACIÓN DE LOS BIENES Los bienes se clasifican: Por su grado de escasez, funcionalidad, grado de transformación, facilidad de acceso y según la renta Bienes según su grado de escasez Si tenemos en cuenta su grado de escasez, podemos hablar de bienes libres y bienes económicos: Bienes libres: Son ilimitados, de ahí su nombre. Esto significa que su acceso es libre y todo el mundo puede acceder a él. Un ejemplo de bien libre es el oxígeno, el aire, etc. Bienes económicos: son bienes a los que no todo el mundo puede acceder, dadas sus características. Por ejemplo, el petróleo, etc. Bienes según funcionalidad Si atendemos a la funcionalidad de los bienes, podemos distinguir entre bienes de consumo, bienes intermedios y bienes de inversión: Los bienes de consumo hacen referencia a los bienes que utilizamos día a día. Por ejemplo, pasta dental, alimentos, teléfono, etc. Los bienes de inversión. También conocidos como bienes de capital, bienes de equipo o bienes de producción. Son aquellos que sirven para obtener un beneficio posterior de ellos. Por ejemplo, si nos compramos un ordenador porque es necesario para nuestro trabajo, o unos fondos a plazo fijo en el banco, etc. Bienes según su grado de transformación Según su grado de transformación, podemos distinguir entre bienes intermedios o bienes finales: Los bienes intermedios o materias primas, son bienes que se utilizan para producir otro tipo de bienes. Es decir, su vida no está acabada en el ciclo productivo. Por ejemplo, la harina, ya que después nos servirá para producir pan. Los bienes finales sí están ya preparados para ser consumidos. Por ejemplo, el pan. Bienes según su facilidad de acceso También podemos distinguir los bienes según la facilidad para acceder a ellos. Podemos diferenciar entre bienes públicos, privados y de propiedad privada: Los bienes públicos son los más accesibles porque pertenecen a la sociedad en general. Por ejemplo, un colegio. Los bienes privados son los menos accesibles porque solo pueden ser utilizados por sus dueños. Por ejemplo, una casa. Y los bienes de propiedad privada, que son bienes de dueños particulares pero destinados a ser utilizados por el público en general. Ejemplo, un hotel. Bienes según la renta Finalmente, una de las distinciones más importantes son los bienes según la renta. Es decir, la demanda de bienes según la renta disponible. Podemos diferenciar en este apartado, entre bienes normales y bienes inferiores. En los bienes normales, su demanda aumenta porque aumenta la renta o ingreso de las personas. Se da en la mayoría de los bienes. Por ejemplo, zapatos, ropa, etc. Dentro de los bienes normales debemos distinguir otros dos tipos: Los bienes de lujo o superiores: Su demanda aumenta de manera más rápida que lo que lo hace la renta de los consumidores. Se da sobre todo en los servicios de ocio. Los bienes de primera necesidad: Su demanda crece a un ritmo menor al que lo hace la renta de los consumidores. Por ejemplo, Un apartamento, un carro, un computador, un celular, etc.. Por otro lado, los bienes inferiores: son aquellos cuya demanda disminuye mientras que la renta de los consumidores aumenta. Esto se da porque al tener más renta los consumidores prefieren productos de mayor calidad. Por ejemplo, la comida rápida, los carros de segunda mano, etc.