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DOC-20211217-WA0023.

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CEREMONIAL - COMUNIDAD ROVER CAMELOT
CEREMONIA DE PASE
De qué se trata: Es el momento formal en el cual el caminante deja la Comunidad
Caminante para integrarse a la Comunidad Rover. Es la culminación de su vida en la Cruz
del Sur y el inicio de una nueva etapa en el Camelot.
Quiénes participan: El caminante que pasa, la Comunidad Caminante y la Comunidad
Rover en su totalidad.
Lugar: En caso de llevarse a cabo durante un campamento, deberá realizarse en un lugar
tranquilo alejado del resto del grupo. En caso de ser un sábado durante la actividad, se
llevará a cabo en el kraal.
Materiales: Elementos de mística. Una copia del Manual del Rover del Camelot por cada
caminante que pasa. Música ambiental.
Preparación: Es preparada entre todos, organizada por los escuderos y supervisada por
los enrolados. Esta ceremonia se realiza sin túnicas. Antes de comenzar, los rovers
presentes deben dividirse los elementos de mística para su nombramiento y posterior
explicación de su significado, y establecer quien se encargará de la lectura.
Desarrollo:
Música ambiental para el ingreso de los futuros rovers
(“La misión: On Earth As It Is In Heaven (Soundtrack 1)”).
El enrolado más viejo se sitúa cerca del lugar donde los caminantes hacen la ceremonia de
despedida. El Jefe de Rama Caminante lleva a los futuros rovers hacia donde se encuentra
el enrolado, quien les da la bienvenida y les comparte que en la rama rover cada uno
pasará a ser responsable de sus propias acciones, y que comenzará a ser tratado como un
adulto. Les recuerda también que como miembros de la Comunidad contarán con el apoyo
de los escuderos y enrolados que los acompañarán en su proceso de crecimiento personal.
Acto seguido, el enrolado los lleva hacia donde los esperan los escuderos, quienes les
vendan los ojos y los llevan en silencio al lugar de la ceremonia.
Se arrodilla a los caminantes frente a los elementos de mística, con los ojos aún vendados.
Un miembro de la comunidad (previamente designado) lee de la Sagrada Escritura 1 COR
12, 12 – 26:
"Así como el cuerpo tiene muchos miembros, y sin embargo, es uno, y estos miembros, a
pesar de ser muchos, no forman sino un solo cuerpo, así también sucede con Cristo.
Porque todos hemos sido bautizados en un solo Espíritu para formar un solo Cuerpo -judíos
y griegos, esclavos y hombres libres- y todos hemos bebido de un mismo Espíritu. El
cuerpo no se compone de un solo miembro sino de muchos. Si el pie dijera: «Como no soy
mano, no formo parte del cuerpo», ¿acaso por eso no seguiría siendo parte de él? Y si el
oído dijera: «Ya que no soy ojo, no formo parte del cuerpo», ¿acaso dejaría de ser parte de
él? Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿dónde estaría el oído? Y si todo fuera oído, ¿dónde estaría
el olfato? Pero Dios ha dispuesto a cada uno de los miembros en el cuerpo, según un plan
establecido. Porque si todos fueran un solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo? De hecho,
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hay muchos miembros, pero el cuerpo es uno solo. El ojo no puede decir a la mano: «No te
necesito», ni la cabeza, a los pies: «No tengo necesidad de ustedes». Más aún, los
miembros del cuerpo que consideramos más débiles también son necesarios, y los que
consideramos menos decorosos son los que tratamos más decorosamente. Así nuestros
miembros menos dignos son tratados con mayor respeto, ya que los otros no necesitan ser
tratados de esa manera. Pero Dios dispuso el cuerpo, dando mayor honor a los miembros
que más lo necesitan, a fin de que no haya divisiones en el cuerpo, sino que todos los
miembros sean mutuamente solidarios. ¿Un miembro sufre? Todos los demás sufren con él.
¿Un miembro es enaltecido? Todos los demás participan de su alegría."
Al finalizar, el Jefe de Comunidad dice unas palabras en relación al ingreso a la comunidad
y acerca del significado de la lectura, mientras se les desvendan los ojos.
Luego, todos los miembros de la Comunidad, habiendo dividido previamente los elementos
de mística, nombran y explican cada uno de ellos; haciendo referencia a su importancia y al
rol que cumplen en la vida del Camelot.
Finalizado esto, el enrolado más viejo les lee el extracto, al que deberán adherir con su
firma y respondiendo “Servir”.
El Jefe de Comunidad los presenta ante la rama como prenovicios del Camelot, y les
comunica que podrán descoser los parches de la Rama Caminante cuando se sientan
listos para ello. Se les explica también que deberán elaborar un parche de camada que los
represente, que llevarán en la parte superior del brazo izquierdo del uniforme, utilizando
símbolos rovers con los cuales se sientan identificados. El mismo deberá ser presentado en
Asamblea.
A continuación, el resto de los rovers les da la bienvenida a la Comunidad. Después de esto
se los invita a pararse de frente a la Comunidad (recién ahora, ya que antes no pertenecían
a la misma).
Luego un enrolado (en caso de no haber, puede hacerlo un escudero) le entrega a cada uno
de los nuevos rovers una copia del Manual del Rover del Camelot.
Para finalizar la ceremonia, se sitúa toda la comunidad en orden de progresión y antigüedad
alrededor de la espada apoyando sobre ella su mano izquierda para hacer el grito de
comunidad. En éste, el Jefe de Comunidad grita la primer parte (“Comunidad Rover”), y el
enrolado más viejo la segunda (“Siempre Listos Para”).
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CEREMONIAL - COMUNIDAD ROVER CAMELOT
PRESENTACIÓN DE ELEMENTOS DE MÍSTICA
La ceremonia queda a cargo de los escuderos en su totalidad y es supervisada por los
enrolados.
Puede realizarse cuando es necesario asignar nuevos guardianes de los elementos o luego
de una modificación o actualización de los mismos. Cada elemento deberá tener siempre
un custodio o guardián, quien será el encargado de velar por el bienestar y el cumplimiento
o uso del mismo (o de su significado, según sea el caso).
En esta ceremonia los rovers pueden estar sentados, ya que no es una de las ceremonias
fundamentales de la progresión rover. Es ideal distriburise de manera que la Comunidad
forme un semicírculo frente a los elementos de mística.
En caso de que los elementos cuenten con guardianes, serán éstos quienes presenten los
que les correspondan, explicando su significado e importancia. Si los elementos no
cuentan con guardianes asignados, la explicación correrá por cuenta de los escuderos y
enrolados.
Finalizada la explicación de cada elemento, se abre un debate para la asignación de
guardianes. Los criterios para la misma serán la identificación que sienta la persona con el
simbolismo de dicho elemento, sus cualidades y lo que destaque su aporte al trabajo de la
rama. Es ideal que sean los mismos rovers los que propongan quien creen que debería ser
el guardián de cada elemento, según las particularidades de cada uno.
Una vez identificado el guardián de cada elemento, esto debe dejarse necesariamente por
escrito como referencia a futuro.
Elementos de Mística de la Comunidad Rover Camelot
Ley Scout
Lema Rover: Siempre Listos Para Servir
Cruz
Insignia de Pertenencia
Águila Calva
Bandera de Comunidad
Santos Patronos
Farol
Velón
Cayado de Comunidad
Carta de Comunidad (y Extracto)
Espada
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VELA DE ARMAS
La vela de armas de la rama Rovers mantendrá la misma lógica y esquema de cualquier
vela de armas, pero, al arrodillarse los próximos promesados, y aún con los ojos vendados,
se les leerá el siguiente fragmento de “El Príncipe Feliz”, de Oscar Wilde:
“Por encima de la ciudad entera, encima de un pedestal, se alzaba la estatua del Príncipe
Feliz. Estaba hecha de finísimas hojas de oro, tenía por ojos dos deslumbrantes zafiros y un
rubí rojo en el puño de su espada. Tal era la belleza del Príncipe Feliz que todo el mundo lo
admiraba.
Una noche llegó a la ciudad una golondrina que iba camino de Egipto. Al ver la estatua del
Príncipe Feliz pensó que era un buen lugar para posarse y pasar la noche. Cuando ya tenía
la cabeza bajo el ala y estaba a punto de dormirse una gran gota de agua cayó sobre ella.
Se sorprendió al ver que, a pesar de que no llovía, cayeron sobre ella una segunda gota y
una tercera. Levantó la vista hacia arriba y cuál fue su sorpresa cuando vio que no era agua
lo que caía sino lágrimas del Príncipe Feliz.
El Príncipe le contó cuando estaba vivo, vivía en el Palacio de la Despreocupación y allí no
existía el dolor. Había un gran muro alrededor del castillo y por eso nunca vio lo que había
detrás. Pero ahora desde el pedestal puede ver la fealdad y la miseria de la ciudad y por
eso su corazón de plomo sólo podía llorar.
El Príncipe le contó que en la casa de la esquina vivía un pobre niño enfermo, por lo que le
pidió a la golondrina que le llevará el rubí del puño de su espada. Luego compartió con ésta
que al final de la calle vivía un joven escritor que no podría terminar su obra del frío y el
hambre que tenía, por lo que le pidió a la golondrina que le llevara uno de sus ojos de
zafiro. Cuando la golondrina, habiendo cumplido ambas misiones, volvió al pedestal del
príncipe, éste le hizo un tercer pedido: que cortara su último ojo de zafiro y se lo llevara a la
joven vendedora de cerillas cuya mercadería había caído al suelo y ya no servía, que lloraba
abrazando sus pies descalzos en el medio del camino. La golondrina, advirtiéndole que si
hacía lo pedido el Príncipe quedaría ciego, cumplió con lo encomendado. Decidió a partir
de ese momento quedarse con el Príncipe para contarle lo que veía desde el pedestal, y
frente a cada señal de miseria y por pedido de la estatua, fue arrancando sus hojas de oro y
llevándolas a los más pobres. El Príncipe Feliz fue quedando de a poco, opaco y gris.
Al día siguiente el alcalde y los concejales pasaron junto a la estatua y la observaron con
asombro.
- ¡Qué andrajoso está el Príncipe Feliz! ¡Parece un pordiosero! - dijo el alcalde.
De modo que quitaron la estatua y decidieron fundirla para hacer una estatua del alcalde.
Pero estando en la fundición, alguien reparó que toda la estatua iba desapareciendo,
excepto el corazón de plomo del príncipe, que se resistía a fundirse.”
Luego de la lectura, el Jefe de Comunidad invitará a reflexionar sobre la lección de
humildad que nos deja el cuento. Finalizadas sus palabras, se procederá con la ceremonia
usual de vela de armas, nombrando y reflexionando sobre cada uno de los artículos de la
Ley Scout.
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NOVICIADO
De qué se trata: Es el momento en el cual el rover comienza su Etapa de Encuentro o
Noviciado, ingresando formalmente a la comunidad.
Quiénes participan: Los rovers que reciben el noviciado. Novicios, escuderos, enrolados y
dirigentes de la Comunidad.
Lugar: En caso de llevarse a cabo durante un campamento, deberá realizarse en un lugar
tranquilo alejado del resto del grupo. En caso de ser un sábado durante la actividad, se
llevará a cabo en el kraal.
Materiales: Elementos de mística. Túnicas del Camelot (una por cada miembro de la
Comunidad presente, y una para cada prenovicio) con los cordones correspondientes. Un
parche de progresión con fondo blanco y un parche del escudo de la Comunidad por cada
prenovicio que recibirá el noviciado.
Preparación: Es preparada por los escuderos y supervisada por los enrolados. Esta
ceremonia se realiza con túnicas. Los novicios las llevarán con cordón blanco (se deberá
tener cordones suficientes para quienes comenzarán dicha etapa), los escuderos con
cordón verde y los enrolados con cordón rojo. Estos últimos portarán las túnicas que llevan
la Cruz de Jerusalén.
Desarrollo:
Música ambiental para el ingreso de los futuros novicios
(“La misión: The Mission (Soundtrack 11)”).
Los prenovicios son llevados al lugar de ceremonia por los escuderos con los ojos
vendados.
Los escuderos los ubican de rodillas frente a los elementos de mística, y luego se procede
a leer de la Sagrada Escritura Mt 25, 14 – 30:
“Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y
les entregó sus bienes. A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno
conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. Y el que había recibido cinco talentos fue y
negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó
también otros dos. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el
dinero de su señor. Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló
cuentas con ellos. Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco
talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco
talentos sobre ellos. Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel,
sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Llegando también el que había
recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros
dos talentos sobre ellos. Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel,
sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Pero llegando también el que había
recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no
sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento
en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo. Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y
negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. Por tanto,
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CEREMONIAL - COMUNIDAD ROVER CAMELOT
debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío
con los intereses. Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. Porque al
que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.
Finalizada la lectura, el Jefe de Comunidad dice unas palabras en referencia a la progresión
que han recibido, anunciando que a partir de esta ceremonia pasarán a integrar
formalmente la Comunidad. Es por ello que comenzarán a portar el Escudo de Comunidad,
que reemplazará al parche de camada en el uniforme.
Luego los invita a elegir un miembro de la comunidad que será su acompañante para la
etapa que está iniciando. Cabe destacar que dicho rover deberá estar transitando o ya
haber transitado la etapa del noviciado.
Dicho miembro, si se encuentra presente (en caso de no estar, lo hace el enrolado más
viejo) le entrega al futuro novicio la túnica del Camelot con el cordón blanco como símbolo
de que comienza a integrar plenamente la Comunidad. Una vez que se haya colocado la
misma, el rover acompañante le entrega el parche de progresión correspondiente junto al
fondo blanco y el escudo del Camelot para que puedan coser en su uniforme.
Para finalizar la ceremonia, se sitúa toda la comunidad en orden de progresión y antigüedad
alrededor de la espada apoyando sobre ella su mano izquierda para hacer el grito de
comunidad. En éste, el Jefe de Comunidad grita la primer parte, y el enrolado más viejo la
segunda.
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ESCUDERATO
De qué se trata: Es el momento formal en el cual el rover comienza su Etapa de
Compromiso o Escuderato.
Quiénes participan: Los rovers que reciben el Escuderato. Escuderos, enrolados y la
Jefatura de la Comunidad.
Lugar: En caso de llevarse a cabo durante un campamento, deberá realizarse en un lugar
tranquilo alejado del resto del grupo. En caso de ser un sábado durante la actividad, se
llevará a cabo en el kraal.
Materiales: Elementos de mística. Túnicas del Camelot con los cordones correspondientes.
Espadas de madera (una por rover presente, incluyendo a quienes recibirán el escuderato).
Un parche de progresión con fondo verde por cada novicio que recibirá el escuderato.
Preparación: Es preparada por los escuderos con colaboración de los enrolados. Esta
ceremonia se realiza con túnicas. Los escuderos las llevarán con cordón verde y los
enrolados con cordón rojo. Estos últimos portarán las túnicas que llevan la Cruz de
Jerusalén.
Desarrollo:
Música ambiental para el ingreso de los futuros escuderos
(“1492 Vangelis”).
Los escuderos (en caso de no haber, lo hacen los enrolados) vendan los ojos de los
novicios y les colocan las túnicas con el cordón blanco. A medida de que los escuderos los
llevan hacia la ceremonia, va disminuyendo el volumen de la música y el resto de la
Comunidad (cada uno con una espada de madera en mano) golpea la mesa, el piso o el
elemento que tenga cerca, en caso de ser en la naturaleza, repetidas veces siguiendo el
ritmo de la música. Al llegar, los disponen de espaldas a la comunidad y frente a los
elementos de mística. Una vez arrodillados, la comunidad deja de golpear las espadas.
Se procede a la lectura de la Sagrada Escritura, Mt 25, 1-13, con los novicios de rodillas y
aún vendados.
“Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus
lámparas, salieron a recibir al esposo. Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas.
Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite; mas las prudentes
tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. Y tardándose el esposo,
cabecearon todas y se durmieron. Y a la medianoche se oyó un clamor: “¡Aquí viene el
esposo; salid a recibirle!”. Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus
lámparas. Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque
nuestras lámparas se apagan. Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos
falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras
mismas. Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas
entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta. Después vinieron también las otras
vírgenes, diciendo: “¡Señor, señor, ábrenos!” Mas él, respondiendo, dijo: “De cierto os digo,
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que no os conozco. Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del
Hombre ha de venir.”
Finalizada la lectura, el Jefe de Comunidad dice unas palabras en referencia a la ceremonia
en cuestión, tomando como puntapié la lectura. Para continuar, otro miembro de la
Comunidad lee la Lectura Mr. 4.1-9.
“Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar. Y se le juntó mucha gente; y
entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa. Y les habló muchas
cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar. Y mientras
sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Parte
cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía
profundidad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. Y parte
cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron. Pero parte cayó en buena tierra,
y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. El que tiene oídos para oír,
oiga.”
Seguidamente el Jefe de Comunidad comparte unas palabras sobre el nuevo rol que van a
cumplir como escuderos dentro de la rama. Ellos pasarán a ser los motores del Camelot, y
según en donde decidan sembrar sus semillas, la Comunidad avanzará junto a ellos o se
estancará.
Para continuar, los novicios se desvendan los ojos y proceden, bajo las indicaciones del
Jefe de Comunidad, a descoser el parche de progresión de la camisa, procediendo a
quemar en el fuego el fondo blanco (en caso de que la ceremonia sea en campamento, se
utiliza el fuego; si se realiza en el kraal, se utiliza la llama del velón). Éste va a ser
reemplazado a partir de la ceremonia por un fondo verde.
Luego se ponen de pie y giran, para ponerse a frente a sus hermanos. El Jefe de
Comunidad invita al enrolado más viejo a que le acerque la espada de comunidad. Este
quita la espada de su funda (ayudado por el enrolado) y se la entrega para que este se
coloque detrás de los novicios.
Los próximos escuderos se acercan al Jefe de Comunidad, y arrodillan entre este y el
enrolado más viejo (que posee ya la espada en sus manos). El Jefe de Comunidad les
pregunta si están dispuestos a formar parte de la Asamblea de la Ruta. Luego de que
contesten SERVIR, el Jefe de Comunidad apoya la espada sobre la cabeza de cada uno de
ellos, mientras recita “(Nombre), con este acto pasarás a formar parte de la Asamblea de la
Ruta de la Comunidad Rover Camelot”.
Al terminar, todos eligen a un rover escudero o enrolado que será su acompañante durante
la nueva etapa que comienzan. Éstos pasan a entregarles el fondo verde y el parche de
progresión correspondiente a la Etapa de Compromiso.
Éstos mismos les toman los cordones blancos de las túnicas y los reemplazan por
cordones verdes. De la misma manera le acercan una espada de madera a cada uno, y se
colocan todos en círculo, como señal de que son oficialmente miembros de la Asamblea de
la Ruta.
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Para finalizar la ceremonia, se sitúa toda la comunidad en orden de progresión y antigüedad
alrededor de la espada apoyando sobre ella su mano izquierda para hacer el grito de
comunidad. En éste, el Jefe de Comunidad grita la primer parte, y el enrolado más viejo la
segunda.
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CEREMONIAL - COMUNIDAD ROVER CAMELOT
CAMPAMENTO EN SOLEDAD
La actividad del escudero debe ser solitaria en su totalidad, evitando servicios o
actividades con el resto de la rama.
Aparte de la lectura y trabajo a realizar con la carpeta que se les entregue, deben
confeccionar una antorcha cada uno, y encenderla en la puerta de su carpa al anochecer.
A media noche aproximadamente, el Consejo de Comunidad en su totalidad, y los demás
Caballeros que sean invitados a participar, se juntan con los escuderos en un fogón a
contarles qué es realmente ser un enrolado del Camelot, un Caballero de Arturo, y a charlar
con ellos acerca de sus dudas, miedos e inquietudes al respecto.
Finalizada la charla, los escuderos vuelven a sus carpas a terminar lo que aún tengan
pendiente de su trabajo, dejando al Consejo reunido en fogón (este puede retirarse
posteriormente, incluso no es necesario que todos estén durante el fogón en su totalidad.
Lo importante a remarcar es que siempre habrá un caballero despierto y atento a toda
circunstancia).
El Consejo debe definir ahora si el escudero está o no preparado para convertirse en
Caballero del Camelot. De ser así, antes del amanecer, el Consejo se ubica frente a la carpa
del escudero y procede a llamarlo. Sino, simplemente se dejará que este finalice sus
actividades y se retomará al día siguiente sin ceremonia ni final de campamento.
De estar el escudero preparado para su próximo paso, el Consejo y demás Caballeros se
ubican en frente de su carpa y proceden a llamarlo por su nombre. Si el escudero está
dispuesto a convertirse en miembro del Consejo, procederá a salir de su carpa, tomar su
antorcha encendida, y seguir en silencio hasta la ceremonia a los Caballeros que hayan ido
a buscarlo. Si no desea continuar con la ceremonia, simplemente deberá salir de su carpa,
apagar su antorcha y acostarla en el piso, para luego volver a su carpa. En este caso, el
Consejo se marcha en silencio hacia la ceremonia, a esperar al resto de los próximos
enrolados.
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ENROLATURA
De qué se trata: Es el momento formal en el cual el rover comienza su Etapa de Proyección
o Enrolatura, luego de su Campamento en Soledad.
Quiénes participan: El rover que recibe la Enrolatura. Los enrolados y la Jefatura de la
Comunidad. Caballeros del Camelot invitados.
Lugar: Deberá realizarse en un lugar tranquilo de la naturaleza, alejado del resto del grupo.
Materiales: Elementos de mística. Túnicas del Camelot con los cordones correspondientes.
Diez velas. Recipiente con agua. Un parche de progresión con fondo rojo por cada
escudero que recibirá la enrolatura. Banderas (Nacional y de Scouts de Argentina).
Preparación: Es preparada por los enrolados y la Jefatura de Comunidad, con ayuda y
participación de los Caballeros invitados. Esta ceremonia se realiza con túnicas. Los
enrolados portarán las túnicas que llevan la Cruz de Jerusalén con cordón rojo.
Desarrollo:
Música ambiental para el ingreso de los futuros enrolados
(“La Misión: Brothers (Soundtrack 4)”)
Los enrolados o Caballeros encargados de buscar a los escuderos los llevan a la ceremonia
en silencio, y los hacen arrodillar frente a los elementos de mística y las diez velas, dejando
sus antorchas en manos del Jefe de Comunidad (quien luego se las entregará a otro
enrolado o Caballero para que las sostenga o clave en la tierra).
Se les lee a los escuderos de la Sagrada Escritura Rom 12, 1 a 8:
“Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada
uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y
agradable a Dios. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la
renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena,
agradable y perfecta. Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes: Nadie
tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien piense de sí mismo
con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado. Pues, así como cada uno
de nosotros tiene un solo cuerpo con muchos miembros, y no todos estos miembros
desempeñan la misma función, también nosotros, siendo muchos, formamos un solo
cuerpo en Cristo, y cada miembro está unido a todos los demás. Tenemos dones
diferentes, según la gracia que se nos ha dado. Si el don de alguien es el de profecía, que
lo use en proporción con su fe; si es el de prestar un servicio, que lo preste; si es el de
enseñar, que enseñe; si es el de animar a otros, que los anime; si es el de socorrer a los
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necesitados, que dé con generosidad; si es el de dirigir, que dirija con esmero; si es el de
mostrar compasión, que lo haga con alegría.”
Luego, el Jefe de Comunidad dice unas palabras en relación a la ceremonia y al
compromiso que van a generar los escuderos al convertirse una vez y para siempre en
Caballeros del Camelot.
La ceremonia de la Ley, en la cual las velas serán encendidas por los escuderos, de a una y
por turnos, debe tomar su fuego del velón de comunidad, y deberá ser dinámica y concisa.
Cada escudero dice su reflexión acerca de un artículo (en orden) seguido por la reflexión de
algún o algunos Caballeros (previamente establecidos).
Las lecturas Jn 1, 19 – 28 y Mt 3, 13 - 17 inspiran (más no es necesario leerlas) el momento
de la purificación del cuerpo y el alma. El Jefe de Comunidad les explica que deben lavarse
los ojos con el agua que se encuentra a su derecha, como símbolo de purificación,
volviendo al momento en que realizaron la misma acción en su vela de armas.
Luego de esto, los escuderos se ponen de pie, eligen padrinos y proceden a renovar su
promesa scout. Posteriormente, se colocan de rodillas frente al resto de los Caballeros. El
Jefe de Comunidad le pide al enrolado más viejo que le acerque la espada de la
comunidad, y que lo ayude a desenvainarla. El Jefe de Comunidad, ubicado de frente al
escudero, pone la espada sobre el hombro derecho del mismo, con las siguientes palabras:
“(Nombre), con este acto pasarás a formar parte de la Consejo de Comunidad de la
Comunidad Rover Camelot”. Mientras recita las palabras, debe mover la espada del
hombro derecho al izquierdo, pasando por encima de la cabeza del futuro enrolado.
Luego de nombrar caballero a cada escudero, estando estos aún de rodillas, todos se
ponen de pie, y sus padrinos les quitan el cordón verde reemplazándolo por uno rojo,
mientras les entregan el parche de progresión con el fondo rojo.
Los nuevos enrolados pasan a formar parte del semicírculo en el resto de los Caballeros, y
se realiza el grito de comunidad en círculo jerárquico. En esta ceremonia, y debido a su
importancia, todos los que hayan sido enrolados de la Comunidad Camelot, y siempre y
cuando el Jefe de Comunidad lo apruebe, podrán ser invitados a formar parte del grito,
ubicándose entre el último caballero formado y los nuevos enrolados.
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PARTIDA ROVER
De qué se trata: Simboliza el alejamiento del joven de la Comunidad Rover como
beneficiario y su entrada al mundo adulto.
Quiénes participan: El rover que realizará su partida. La Comunidad en su totalidad. El
Grupo Scout San Martín de Tours. Invitados.
Lugar: En el patio del grupo, en el kraal, en la naturaleza, un sitio tranquilo lejos de ruidos o
actividades que puedan perturbar la ceremonia.
Materiales: Elementos de mística. Algún recuerdo / regalo de despedida. Colihues.
Desarrollo:
La ceremonia de Partida consta de dos partes. La primera es una instancia interna informal
en la cual los rovers se despiden de quien parte de la forma en que deseen. Este momento
es planificado, por una parte, por la Comunidad que define qué quiere transmitirle al rover
que parte, y por el otro, por dicho rover, que piensa qué es lo que desea dejarle a sus
compañeros.
Se puede realizar un relato breve de su paso por el movimiento; que puede hacerse con la
presencia de cada uno de los dirigentes que compartieron sus diferentes etapas con él, por
algún compañero que haya transitado con él ese mismo camino, o por el propio dirigente
de su Comunidad. El rover puede expresar su compromiso, el sentido que va a dar a su
partida y su voluntad de convertirse o no en dirigente del Grupo. En esta instancia los
rovers pueden intercambiar palabras de despedida y algún regalo de partida.
Para finalizar esta instancia, el Jefe de Comunidad leerá el último mensaje de Baden Powell:
“Si alguna vez han visto la obra de “Peter Pan”, recordarán cómo el jefe de los piratas
estaba siempre haciendo su último discurso de despedida por temor de que, posiblemente,
cuando llegara la hora en que habría de morir, no fuera a tener tiempo para darlo a conocer.
Así me sucede a mí, y aun cuando no me estoy muriendo en este momento, ésto tendrá
que suceder uno de estos días, y deseo decirles una palabra de despedida. Recuerden:
esta es la última que oiréis de mí, por lo tanto, medítenla.
He tenido una vida muy dichosa, y deseo que todos ustedes tengan también vidas muy
dichosas.
Estoy convencido de que Dios nos ha puesto en este mundo maravilloso para que seamos
felices y gocemos de la vida.
Pero la felicidad no proviene simplemente de la riqueza, ni de tener éxito en la carrera, ni
dándose uno gusto a sí mismo. Un paso hacia la felicidad es hacerse uno sano y fuerte
cuando niño, para poder ser útil y así poder gozar de la vida cuando se es hombre.
El estudio de la naturaleza les enseñará cómo Dios ha llenado de cosas bellas y
maravillosas este mundo para que lo puedan gozar.
Estén satisfechos con lo que les haya tocado y saquen de ello el mejor partido que puedan.
Vean siempre el lado bueno de las cosas y no el malo.
Pero la verdadera manera de obtener la felicidad es haciendo felices a los demás. Traten de
dejar este mundo en mejores condiciones de cómo lo encontraron; de ésta manera, cuando
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les llegue la hora de morir, podrán hacerlo felices porque, por lo menos, no perdieron el
tiempo e hicieron cuanto les fue posible por hacer el bien.
“Estén Listos” en ésta forma, para gozar de una vida dichosa y morir dichosos: aférrense a
su Promesa Scout siempre, aun cuando hayan dejado de ser muchachos. Que Dios los
ayude a hacerlo así.
Su amigo,
Baden Powell”
Al finalizar la instancia íntima, se realiza un último grito de Comunidad en honor al rover que
parte. Se sitúa toda la Comunidad en orden de progresión y antigüedad alrededor de la
espada apoyando sobre ella su mano izquierda para hacer el grito de Comunidad. En éste,
el Jefe de Comunidad grita la primer parte, y el enrolado más viejo la segunda.
La segunda instancia es de carácter formal, y se realiza frente al Grupo Scout en su
totalidad. En el patio de Grupo, se arma un cayado en el piso utilizando troncos o colihues.
El rover que parte debe elegir entre el “camino de la dirigencia” o el “camino de la vida”. Al
final del primero, lo esperan los dirigentes que lo acompañarán en la nueva etapa.
La segunda instancia es de carácter formal, y se realiza frente al Grupo Scout en su
totalidad. En el patio de Grupo, se arma un cayado en el piso utilizando troncos o colihues.
El rover que parte debe elegir entre el “camino de la dirigencia” o el “camino de la vida”. Al
final del primero, lo esperan los dirigentes que lo acompañarán en la nueva etapa.
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CEREMONIAL - COMUNIDAD ROVER CAMELOT
Cambio de jefatura
De qué se trata: Es la ceremonia que se lleva a cabo al cambiar el Jefe de Rama del
Camelot. Se despide al Jefe saliente y se da la bienvenida al Jefe entrante.
Quiénes participan: La Jefatura de la Rama, la Comunidad Rover en su totalidad y el Jefe
de Rama entrante.
Lugar: En el kraal.
Desarrollo:
La ceremonia se realiza en el kraal, con la mesa baja. Alrededor de ella se sitúan todos los
rovers. La ceremonia comienza con la presentación del nuevo Jefe de Rama. El Jefe de
Rama Saliente la da la bienvenida a los presentes y presenta al nuevo jefe como quien
guiará a partir de ese momento los destinos del Camelot. Solicita así que los rovers, al igual
que le han sido leales a él y la Comunidad, confíen en el nuevo Jefe de Rama como
hermano mayor que los acompañará. Pasa a preguntar a los rovers: “¿Se comprometen a
acompañar a (nombre) con lealtad en su nuevo rol como Jefe de Comunidad?”; a lo cual
deben responder al unísono “Sí, me comprometo”.
Quien preside la ceremonia pasará a tomar la espada y recordar las características de la
misma como elemento de mística del Camelot. A continuación, el nuevo Jefe de Rama se
pone de rodillas, y el Jefe Saliente le entrega la espada con las palabras “Hermano en la
Comunidad y en la Ruta de la Vida, te entrego esta espada, como símbolo del Camelot. Ella
será portada por el Jefe de Comunidad, quien guiará sus destinos, y podrán llevarla
también aquellos que en soledad hayan meditado a la luz de la carta de Comunidad.
(Nombre), hoy esta espada pasa a vos, pórtala cono honor y guía con ella los pasos del
Camelot”. El Jefe Entrante toma al espada, y el enrolado más viejo pasa a leer el extracto de
la carta de Comunidad. El Jefe se compromete frente al Camelot a cumplirlo y hacerlo
cumplir, y lo firma. Antes de finalizar la ceremonia, el nuevo Jefe dirige unas palabras a la
Comunidad respecto a su nuevo compromiso, y los rovers le comparten mensajes de
bienvenida.
Para finalizar la ceremonia, se sitúa toda la comunidad en orden de progresión y antigüedad
alrededor de la espada apoyando sobre ella su mano izquierda para hacer el grito de
comunidad. En éste, el nuevo Jefe de Comunidad grita la primer parte, y el enrolado más
viejo la segunda.
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