Universidad Rafael Landívar Facultad de Ingeniería Ingeniería Química Sistemas de Vapor Ing. José Ángel Ruano IMPORTANCIA DE LA CORRECTA SELECCIÓN, DISEÑO, MONTAJE Y OPERACIÓN DE SISTEMAS DE VAPOR COMO INGENIERO QUÍMICO Javier Alejandro Figueroa Soria 1195219 Guatemala, 14 de octubre del 20222 I. RESUMEN La ingeniería química es la profesión en la que el conocimiento de las matemáticas, la química y otras ciencias naturales adquirido por el estudio, la experiencia y la práctica, se aplica con adecuado criterio para desarrollar métodos económicos para el aprovechamiento de materiales y energía. Esta profesión, conoce sobre propiedades básicas, fisicoquímicas, termodinámicas y bioquímicas del agua; haciendo un margen completo de la capacidad que este material posee para la generación de energía es su fase liquida o gaseosa. Primordialmente, conocer el comportamiento que el vapor de agua posee y los beneficios que este puede otorgar si es utilizado de manera correcta, es una de las áreas de mayor aplicación para aun ingeniero químico. No solo el conocimiento de las propiedades es lo que hace a un ingeniero químico el perfecto candidato para el manejo de un sistema de vapor; sino también el hecho de que gracias a ese conocimiento es capaz de diseñar, seleccionar, operar y darle mantenimiento continuo a un sistema de vapor. Este consta de 4 fases generales, el tratamiento del agua, la selección de la caldera, la generación de vapor y el circuito o retorno de condensado. Un correcto manejo de cada fase permitirá que el sistema de vapor funcione de manera eficaz, con calidad y ahorrativa tanto enérgicamente como económicamente. Palabras Clave: Ingeniero Químico, Caldera, Vapor, Condensado, Mantenimiento, Diseño y Selección. II. ABSTRACT Chemical engineering is the profession in which the knowledge of mathematics, chemistry and other natural sciences acquired by study, experience and practice, is applied with adequate criteria to develop economic methods for the use of materials and energy. This profession knows about basic, physicochemical, thermodynamic and biochemical properties of water; Making a complete margin of the capacity that this material possesses for the generation of energy is its liquid or gaseous phase. Primarily, knowing the behavior that water vapor has and the benefits that it can provide if used correctly, is one of the areas of greatest application for a chemical engineer. Not only the knowledge of the properties is what makes a chemical engineer the perfect candidate for the management of a steam system; but also the fact that thanks to that knowledge he is able to design, select, operate and give continuous maintenance to a steam system. This consists of 4 general phases, water treatment, boiler selection, steam generation and the condensate circuit or return. A correct management of each phase will allow the steam system to work efficiently, with quality and saving both energetically and economically. Keywords: Chemical Engineer, Boiler, Steam, Condensate, Maintenance, Design and Selection. III. INTRODUCCIÓN Un Ingeniero Químico es aquel que utiliza las principales ciencias básicas en aplicaciones industriales, con el fin de transformar materias primas diversas en productos y/o servicios útiles y de valor comercial para la sociedad. Los Ingenieros Químicos de hoy enfrentan retos similares a los que se enfrentan otras profesiones, y les hacen frente aplicando los conocimientos y el entrenamiento propios de la ingeniería química, utilizando habilidades de comunicación y trabajo en equipo, así como el uso de las tecnologías y técnicas más avanzadas disponibles, además de mucho esfuerzo, trabajo y dedicación. Uno de los retos más importantes que enfrentan los químicos, pero que a su vez saben manejar a la perfección, es el uso del vapor como fuente de energía primaria para diversos procesos industriales; sin embargo, el manejo del vapor posee altos cuidados y especificaciones en el diseño y selección de equipos y sistemas que generan, controlan y suministran el vapor. El vapor es uno de los medios más efectivos para transferir calor. El agua se encuentra en cualquier parte y requiere relativamente pequeñas modificaciones de su estado natural para utilizarla en equipos y realizar algún proceso. El vapor es fácil de transportar y no se necesitan enormes cantidades de él para mover grandes cantidades de calor. Como conductor de energía térmica se aplica en procesos donde se requiere calentamiento de productos específicos, esto se logra haciendo pasar una cantidad determinada de vapor a las condiciones deseadas a través de intercambiadores de calor, el vapor transfiere entonces parte de su energía térmica al fluido que pasa del otro lado de las paredes del intercambiador de calor, el cual dependerá del proceso y del producto que se esté manejando. Una vez que el vapor ha cedido su energía en este proceso, parte de él se condensara, volviendo al estado líquido. (Gemsla, 2020) Este es considerado como la fuente primordial de energía ya que posee características como disponibilidad alta y bajo costo en su obtención, capacidad de adaptarse a sistemas varios de distribución, reducción de otros costos como bombeo del fluido debido a un diferencial de presiones; y la capacidad que este tiene para almacenar energía y trasferencia de calor en estados de saturación y sobrecalentamiento. (Gemsla, 2020) Los primeros sistemas de vapor en la industria fueron sobre dimensionados, sin embargo, su costo de energía necesaria para llevar a cabo la elaboración del vapor se encuentra aumentando continuamente siendo necesario mejorar la eficiencia de los sistemas de vapor para reducir al máximo el mismo. Debido al aumento de los costos, el ingeniero mecánico se ha visto en la necesidad de buscar alternativas para obtener un ahorro de energía en los sistemas y evitar al máximo las pérdidas de vapor vivo. (Varela, 2019) IV. MARCO TEÓRICO 1. Conceptos Básicos 1.1.Vapor El vapor se genera cuando se le añade energía al agua. Se necesita añadir suficiente energía para que se eleve la temperatura del agua hasta su punto de ebullición. Después de ello, cualquier energía adicional transforma el agua en vapor, sin un incremento en la temperatura. El vapor puede presentarse en diversas formas, como el vapor saturado el cual se define como el vapor que se encuentra en equilibrio con la fase líquida; el vapor sobrecalentado es el que se encuentra a una temperatura mayor de la de saturación, pero a una presión determinada, el vapor flash que se forma cuando se tiene condensado caliente o agua hirviendo, presurizados, y se libera a una presión más baja, parte de esos líquidos se vuelven a evaporar. (Perry, 2001) 1.2.Calderas Una caldera es una máquina cuya función principal es generar grandes cantidades de vapor de agua. Una caldera es un intercambiador de calor que aprovecha el calor que se produce al quemar un combustible, ya se sólido, líquido e incluso gaseoso, donde el calor procedente de cualquier fuente de energía se transforma en energía utilizable, a través de un medio de transporte en fase líquida o vapor de un fluido (principalmente agua), esto se logra mediante la acción del calor a una temperatura superior a la del ambiente y presión mayor que la atmosférica. A través de un quemador, se alimenta el carburante al hogar de la caldera, en donde se produce la combustión del carburante, con la participación de un comburente (generalmente es aire). Aquí se da la transferencia del calor cedido por el carburante, a través de una superficie de intercambio, al agua líquida, hasta vaporizarla o llevarlo a las condiciones requeridas. (Fenercom, 2019) 1.3.Tipos de Calderas El sistema de trasferencia de calor de las calderas de combustión está compuesto por una red de tubos, los cuales actúan como fronteras, así como medio de transferencia de calor entre los gases de combustión y el agua. Por lo que, dependiendo de la configuración de este sistema, las calderas se dividen en dos grandes grupos (Fenercom, 2019). Calderas acuo-tubulares: Las calderas acuo-tubulares consisten en un paquete de tubos por los que circula el agua y/o el vapor, estos tubos son generalmente de acero. Mientras que por su parte exterior están en contacto directo con el fuego y los gases de combustión a alta temperatura. Debido a esto, el agua o vapor es calentado en los tubos con el fin de trabajar con mayores presiones y potencias que con las calderas piro-tubulares. Por lo que, este tipo de calderas de combustión se usa casi exclusivamente cuando se desea generar vapor de agua. Por lo tanto, las calderas acuo-tubulares son sensibles a las fluctuaciones de carga y de presión, pero son capaces de vaporizar el agua en un tiempo corto. (Anthony Kohan, 2017). Calderas Piro-Tubulares: En este tipo de calderas, los tubos de acero se encuentran sumergidos en un tanque cilíndrico que actúa como cámara de agua y de vapor, mientras que, por el interior, los gases de combustión circulan a alta temperatura. Por lo que, este tipo de calderas se utilizan hasta presiones entre 25-30 bar y temperaturas máximas de aproximadamente 300°C con la incorporación de sobre calentadores de vapor. Debido a esto, tienen como ventaja la estabilidad en la producción de vapor, puesto que incorporan en el mismo cuerpo a presión la cámara de vapor lo que permite asumir fácilmente picos en la demanda de vapor. (Anthony Kohan, 2017). 2. Selección de Equipo Para la selección del sistema de vapor, se deben de tomar en cuenta 4 áreas muy importantes: El tratamiento de agua, La caldera, El sistema de distribución; y La recirculación de condensado. En todas estas etapas se deberá de seleccionar equipos especializados y con especificaciones para las condiciones a las que se trabaja. - Tratamiento de agua: Llevar a cabo un tratamiento de agua para calderas es una tarea fundamental para asegurar la vida útil de la maquinaria. Sin problemas operacionales, necesidad de reparaciones inesperadas o probabilidades de accidentes. Para asegurar esta calidad, también es prioritario cumplir con la normativa vigente que fija los límites recomendados para los parámetros involucrados en el tratamiento del agua en función del tipo de caldera y la presión de trabajo. Un descuido en el tratamiento de aguas para calderas puede ocasionar costosas reparaciones, labores de mantenimiento continuas o un importante gasto en combustible. Además de un desgaste completo en los equipos. (Fonseca, 2011) - Distribución del Vapor: El sistema de distribución de vapor es un enlace importante entre la fuente generadora del vapor y la aplicación. La fuente generadora del vapor puede ser una caldera, esta debe proporcionar vapor de buena calidad en las condiciones de caudal y presión requerida para las aplicaciones, y debe realizarlo con las mínimas perdidas y atenciones de mantenimiento. Una red de distribución de vapor, en principio está compuesta, al igual que cualquier red de distribución de un fluido, por tuberías y accesorios de tubería. Sin embargo, los cambios de fase en los que se basa el empleo de este tipo de redes, hacen necesario el empleo de determinados elementos en la red que son muy específicos de este tipo de sistemas. Debido a la variabilidad de las condiciones del vapor, los elementos constitutivos de la red tendrán que presentar unas características específicas en relación con el comportamiento frente a la temperatura y la presión que han de soportar. Además, deben presentar determinadas características frente a la abrasión debido, a las altas velocidades que se manejan en este tipo de redes. (Fonseca, 2011) - Sistema de Condensados: El condensado es el vapor de agua llevado a un punto en que pasa a su fase líquida, pues la presión es disminuida al igual que la temperatura. Este condensado es inevitable dentro de la distribución y los sistemas de vapor, pues las condiciendo generalmente no llegan a ser iguales en todo el recorrido; incluso dentro de la maquinaria. Es por ello que se debe de recuperar este condensado. Recuperar el condensado puede llevar a considerables ahorros de energía y agua en cualquier planta industrial que utiliza vapor, además de mejorar las condiciones de trabajo de los procesos. (Fonseca, 2011) Un sistema efectivo de retorno de condensados es necesario para transportar el condensado desde los equipos que utilizan el vapor hasta la caldera. El condesado inicia su recuperación con equipos como las trampas de vapor, que son instaladas regularmente en las tuberías de salida de las máquinas. Estas tienen el objetivo de la evacuación óptima del condensado de cambiadores de calor con alimentación por vapor. El condesado que se recupera con las trampas es transportado luego a una línea principal de condensado, aprovechando la presión del vapor flash que es generado debido al brusco cambio de presiones. (Estrucplan, 2011) La línea principal, gracias a un cierto declive, transporta el condensado a un tanque de captación, donde posteriormente el condensado en rebombeado a la caldera; esto con el fin de ahorrar mucha más energía ya que el condesado está a una temperatura más elevada, por lo cual no se debe de utilizar la misma energía que para agua fría. (Fonseca, 2011) 3. Operación del equipo La operación de un sistema de vapor combina el trabajo automatizado con el trabajo manual. Esto con el fin de poder lograr una eficiencia máxima tanto en el ahorro y buena utilización de los recursos, como en el control y monitoreo del sistema. Todo sistema de vapor debe iniciar con un tratamiento de agua ya sea interno o externo, pues la calidad del agua debe ser optima y para ello es necesario un tratamiento adecuado con un monitoreo constante de los principales parámetros que influyen directamente en la eficiencia de los generadores de vapor; así también para sostener un buen rendimiento sobre los equipos que participan en el tratamiento del agua como suavizadores, inhibidores y tratadores, estableciendo condiciones seguras para el cuidado del medio ambiente. (Anthony Kohan, 2017). Posteriormente, empieza la sección de la generación del vapor dentro de la caldera. Para ello, es de vital importancia el equipo que genera el calor, es decir, el quemador. El quemador tiene la función principal de mezclar el comburente y combustible en las proporciones adecuadas, para que se genere la llama que inicia la combustión. Permite la regulación de la cantidad de aire de gas, mantiene la estabilidad de la llama. Proporciona las dimensiones correspondientes para la llama y otorga un poder de radiación suficiente a la llama según la cantidad de calor o carga térmica. Para lograr una llama efectiva, se debe de considerar que la mezcla de aire y combustible debe de ser equilibrada y adecuada para las temperaturas a als que se desea llegar. La llama debe de ser de un color adecuado, de un largo adecuado y no se debe de separar de la boquilla del quemador; esto proporcionará el calor necesario para poder elevar la temperatura del agua de manera rápida. (Anthony Kohan, 2017). Dentro de este paso se deben de controlar varias variables como la presión dentro de la caldera para regular el quemador, temperaturas máximas y mínimas, composiciones de gases en la chimenea, caudal y presión de salida, etc. Si estos parámetros no son vigilados o controlados, la caldera puede llegar a estar en peligro por un mal manejo de la misma; poniendo en peligro no solo la producción si no los trabajadores relacionados. Finalmente, es la parte de la distribución del vapor donde se debe de dimensionar de maera correcta todo el recorrido del vapor, para evitar fugas, roturas, paros inesperados y demás. Sin embargo, el dimensionamiento de las tuberías no debe de excederse ni debe de faltarle; pues ambas opciones traen consigo consecuencia en la producción a nivel operativo y a nivel económico. (Fonseca, 2011) V. DISCUSIÓN DE RESULTADOS Como ingeniero químico, tener los conceptos básicos claros de manera teórica permitirá que se apliquen de manera correcta ya en la práctica. Y el conocimiento de todos estos conceptos de generación y distribución de vapor no solo deben de utilizarse la selección y el diseño de la maquinaria, sino también para su control y mantenimiento; pues como ingenieros químicos se tiene la capacidad de poder no solo mantener bajo control un sistema de vapor si no también mantenerlo en una mejora continua. El mantenimiento proactivo de la caldera de vapor es crucial. Si incluso una pequeña pieza desgastada empieza a fallar, puede causar un efecto en cascada que puede pasar desapercibido hasta que el propio sistema falle. Muchos de estos sistemas sufren averías con regularidad, lo que se traduce en elevados costes de mantenimiento y muchas horas de tiempo de inactividad no productiva. Uno de los aspectos más importantes de contar con un sistema de monitoreo y control, es que nos permitirá controlar, valga la redundancia, la calidad del agua en un sistema de calderas de vapor y aumentar su eficacia. Ayuda a evitar la sobredosificación innecesaria de productos químicos al cambiar la producción de vapor, lo que no sólo ahorra productos químicos, sino también agua y energía. También, mantener los parámetros controlados de combustión permiten un menor consumo de combustible con menos emisiones de CO2. Esto reduce significativamente la energía y los costes de funcionamiento de la caldera. (Estrucplan, 2011) Descuidar la conservación de la caldera puede generar problemas que deriven en averías que aumenten aún más nuestra factura. En este artículo expondremos los defectos de seguridad más frecuentes por la falta de mantenimiento de estos sistemas, como por ejemplo, la falta de mantenimiento en las calderas de tiro natural puede generar suciedad en las toberas de quemadores, provocando un efecto de mala combustión que implica un peligro de intoxicación por el exceso de partículas en la cámara y en el ambiente. O inclusive los insectos son uno de los problemas que pueden aparecer en las unidades exteriores de las calderas, provocando fallas sistémicas en los circuitos, u obstrucciones en tuberías. (Estrucplan, 2011) Sin embargo, existen factores o dispositivos vitales para un correcto funcionamiento de un sistema de vapor y uno de ellos es la válvula de control. Todas las válvulas de control de vapor deben tener una vida operativa relativamente alta debido a la tecnología disponible y a los estándares actuales de los materiales, y una instalación adecuada prolongará en gran medida la vida de la válvula. Por ende, saber el estado en que se encuentra este dispositivo es clave para evitar daños o poder anticiparse y realizar un mantenimiento preventivo. Sin embargo, un ingeniero químico no solo reparará o controlará dispositivos vitales como las válvulas, si no también presentará nuevas alternativas y mejoras al sistema de vapor para que constantemente la eficacia y la calidad estén aumentando. (Gemsla, 2020) Otro factor importante, es la diseño o dimensionamiento de la red de distribución del vapor. Para poder dimensionar las tuberías se deben de tomar en cuenta 3 principales condiciones del vapor: temperatura, presión, caudal o velocidad. Con estas condiciones es posible determinar el tipo de tubería a utilizar y la longitud del diámetro interno necesario para poder soportar el vapor. Sin embargo, el dimensionamiento de las tuberías corre el riesgo de ser sub dimensionadas o sobre dimensionadas. Si las tuberías son sobre dimensionadas, no solo se estaría gastando más dinero en su elaboración si no también existirán mayores pérdidas de calor generando mayor volumen de condensado. Además, es probable que la calidad del vapor no se la adecuada y no suministre la cantidad de calor que debería de suministrar. Y en general los costos por sobre dimensionar se elevarían considerablemente. Y si se sub dimensiona la tubería, la velocidad del vapor al igual que la caída de presión aumentarían, llegada pobre de presión para su utilización, insuficiente volumen de vapor, por lo que se deberá de generar más gastando en más energía; y existirán una cantidad mayor de riesgos y posibles golpes de ariete, erosiones, ruidos fuertes e incluso rotura y fugas. (Estrucplan, 2011) Para evitar todo esto, el ingeniero químico logrará tomar en cuenta todas estas causas y consecuencias de lo que sería un mal diseño y selección de las tuberías; y decidirá acerca de la mejor y más eficaz opción gracias a su capacidad de análisis y conocimientos. Además, el ingeniero químico es capaz de analizar y realizar balances tanto térmicos como másicos, y de esta forma calcular o estimar de manera más concreta la eficacia de un equipo de sistema de vapor; y determinar que diseño o que equipo es el más adecuado para realizar el trabajo. (Perry, 2001) (Fonseca, 2011). Finalmente, un ingeniero químico es de vital importancia en el sistema de vapor pues el tratamiento interno que se le da al agua de alimentación de la caldera es con químicos especializados para poder eliminar las impurezas que no se lograron eliminar en un previo tratamiento externo del agua. El saber qué químicos utilizar, en que cantidad y cuál es la compatibilidad química con el material de la caldera; solo un ingeniero químico lograría determinar ese análisis gracias al conocimiento del comportamiento molecular y químico de ciertas sustancias. Es así, como al combinar conocimiento del comportamiento del agua, el conocimiento de propiedades básicas como la temperatura, la presión y la velocidad de un fluido y como estas se relacionan entre sí; el cómo se comportan ciertas sustancias químicas con otras sustancias, la variabilidad existente en todo proceso; y la constante noción de leyes como la conservación de la energía y materia hacen del ingeniero químico el perfecto individuo para el diseño, selección, monitoreo y operación de un sistema de vapor. VI. CONCLUSIONES 1. Gracias a la capacidad de relacionar y aplicar parámetros de temperatura, presión y velocidad a fluidos en movimiento, el ingeniero químico es capaz de seleccionar y diseñar o dimensionar correctamente una red de distribución de vapor. 2. El ingeniero químico se convierte en un especialista del vapor al conocer las propiedades termodinámicas, fisicoquímicas, bioquímicas y básicas del agua en sus distintos estados de agregación. 3. Las reacciones químicas, al ser estudiadas y aplicadas por ingenieros químicos, la reacción de combustión de carburantes para la generación de vapor es ideal para que un ingeniero químico monitoree y mantenga condiciones que permitan una combustión eficiente. 4. La utilización de químicos para el tratamiento interno y externo del agua de alimentación corresponderá a un ingeniero químico, ya que conoce las sustancias químicas a utilizar, su compatibilidad con el material y su función dentro del tratamiento. 5. El análisis de la eficiencia de una caldera engloba una eficiencia tanto energética como de operación, pues el ingeniero químico logra relacionar la energía utilizada para el calentamiento del agua con la energía que es entregada a la maquinaria. VII. REFERENCIAS Estrucplan. (Octubre de 2011). Guía De Mantenimiento Básico De Un Generador De Vapor. Obtenido de https://estrucplan.com.ar/guia-demantenimiento-basico-de-un-generador-devapor/#:~:text=Comprobar%20que%20no%20hay%20fugas,agua%20al% 20tanque%20de%20condensados. Fonseca, P. (2011). DISEÑO DE LA RED DE DISTRIBUCIÓN DE VAPOR PARA UNA. Guatemala: USAC. Gemsla. (2020). Gemlsa. Obtenido de Los sistemas de vapor, una alternativa económica y eficiente para las industrias: https://www.gemlsa.com/lossistemas-de-vapor-una-alternativa-economica-y-eficiente-para-las-industrias Perry, R. (2001). Manual del Ingeniero Químico. Madrid: McGraw-Hill. Varela, J. (Agosto de 2019). Departamento de Ingeniería Química. Obtenido de Introducción a la Ingeniería Química. Fenercom. (2019). Tipología de calderas. Obtenido de https://www.fenercom.com/wp-content/uploads/2019/10/2017-06-21Tipologia-de-calderas-VIESSMANN-fenercom.pdf Anthony Kohan. (2017). Manual de calderas. Obtenido de http://recursosbiblio.url.edu.gt/publicjlg/biblio_sin_paredes/fac_ing/Manu_c ald/I/cap/03.pdf Bonilla, J. Et al. (2009). Termodinámica de equipos industriales: Eficiencia energética de una caldera. Obtenido de https://www.yumpu.com/es/document/read/14257774/termodinamica-deequipos-industriales-universidad-rafael-landivar