T1/ LENGUAJE Y COMUNICACIÓN. COMPETENCIA LINGÜÍSTICA Y COMPETENCIA COMUNICATIVA ÍNDICE INTRODUCCIÓN EL LENGUAJE Definición del lenguaje Las funciones del lenguaje Definición de comunicación Teoría de la comunicación. Elementos de la comunicación. LOS SIGNOS Semiología y semiótica. El signo semiológico Tipología del signo El signo lingüístico Propiedades del signo lingüístico COMPETENCIA LINGÜÍSTICA Y COMPETENCIA COMUNICATIVA La competencia lingüística La competencia comunicativa Los actos de habla LA COMUNICACIÓN A TRAVÉS DE INTERNET CONCLUSIONES BIBLIOGRAFÍA INTRODUCCION Afirma Irene Vallejo que “ahora mismo hay mucha comunicación lingüística, verbal y escrita, ya que nos alivia mucho poder expresarnos”. Y es este tema, lenguaje y comunicación, la competencia comunicativa y lingüística, el que se encuentra en el centro del proceso comunicativo y por tanto, en el de la reforma educativa, que persigue el desarrollo de la competencia comunicativa, tanto lingüística, como digital. Tradicionalmente, se ha estudiado la lengua desde un enfoque gramatical muy distinto del de la LOMLOE, que busca la adquisición de esta competencia a través de las diez específicas de Lengua y Literatura, así como con los descriptores del resto de las competencias con los que se alcanza el perfil de salida. En este tema, nos centraremos en el concepto de lenguaje y comunicación, en sus características y las funciones del lenguaje, así como en el de competencia y su relación con la pragmática, siendo todos ellos temas fundamentales a la hora de comprender la revolución comunicativa en la que nos encontramos inmersos. A pesar de la explosiva bibliografía (que presentamos de manera resumida tras la exposición del tema, siguiendo las normas APA), no hemos podido profundizar en cada apartado debido a la limitación temporal por lo que podemos decir, parafraseando al personaje del Quijote, Cide Hamete Benengeli, que nuestro principal mérito radica en habernos atenido a lo esencial, pudiendo abarcar el universo entero. 1. EL LENGUAJE T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística El lenguaje fue definido por Sapir como "un método exclusivamente humano, y no instintivo, de comunicar ideas, emociones y deseos por medio de un sistema de símbolos producidos de manera deliberada". El lenguaje realiza una función configuradora del pensamiento, lo que plantea el problema de la relación entre ambos. Ya en Platón se encuentra la idea de que el pensamiento es el diálogo del alma consigo misma, identificando lenguaje y pensamiento, idea que recogen los conductistas en el siglo XX. En este tema nos centraremos en el lenguaje como sistema de signos, dentro del proceso comunicativo que tanto ha cambiado en nuestros días y no en el lenguaje como facultad o capacidad humana para la comunicación, objeto de estudio de la sociolingüística. 1.1 Definición de lenguaje Hay una inmensidad de definiciones sobre qué es el lenguaje humano, dependiendo de cada autor en cada época y en cada circunstancia. Chomsky lo definió como “un conjunto finito o infinito de oraciones, cada una de las cuales posee una extensión finita y construida a partir de un conjunto finito de elementos” (1957); A.R. Luria como “un sistema de códigos con cuya ayuda se designan los objetos del mundo exterior, sus acciones, cualidades y relaciones entre los mismos” (1977). El DLE en su última edición lo define como ‘conjunto de sonidos articulados con que el hombre manifiesta lo que piensa o siente’ y ‘uso del habla o facultad de hablar’ entre otras. El lenguaje humano se apoya en la capacidad de comunicarse por medio de signos lingüísticos (secuencias sonoras, signos gráficos, gestos o señas). La obra del lingüista suizo, Ferdinand de Saussure, Curso de lingüística general (1916), constituyó el punto de arranque de la lingüística moderna y resultó decisiva para el desarrollo de la lingüística en el siglo XX sobre todo por su definición de signo como entidad psíquica formada por un significante y un significado, los cuales serían inseparables. Defiende Saussure que el estudio del lenguaje comporta dos partes: por un lado, la lengua, que es social e independiente del individuo; por otro, el habla, la parte individual del lenguaje. Según Saussure, para entender la lengua hay que situarla en el centro de los hechos del lenguaje; lenguaje y lengua son dos conceptos indisolubles: la lengua aunque esencial, no es más que una determinada parte del lenguaje. 1.2 Las funciones del lenguaje Desde la Antigüedad clásica, la filosofía y otras ciencias afines se preocuparon por reflexionar en torno a las funciones que cumplían las lenguas utilizadas por los hombres (Aristóteles señalaría la representativa y la expresiva). El sociólogo alemán Bühler, en Teoría del lenguaje (1934), distingue tres funciones basándose en una explicación genética del lenguaje (apelativa, expresiva y 2 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística representativa) a las que Jakobson añadiría otras tres (poética, metalingüística y fática), además de relacionar todas ellas con los elementos de la comunicación, lo cual intentamos condensar en el siguiente esquema: Funciones del lenguaje Apelativa: actúa sobre el oyente para dirigir o atraer su atención. Es la función del tú. A través de esta primera función puede observarse la identificación signo-señal. Elem. comunicación El receptor Expresiva. A través de ella el sujeto emisor manifiesta su estado de ánimo. Puede también tener lugar entre los animales y es frecuente en el lenguaje infantil. Es la función del estado afectivo, de la manifestación del yo. El emisor. Representativa. Por medio de esta función el hablante puede transmitir un contenido a través de un sistema de signos que representan una realidad externa. Es la función propia del hombre, la función del ello. La falta de inherencia entre el signo y la cosa significada es la esencia de la función representativa. Contexto Metalingüística: Se utiliza para hablar del propio lenguaje; aclara el mensaje. Se manifiesta en declaraciones y definiciones. Código Poética: su objetivo es llamar la atención por el uso especial del código, las figuras estilísticas. Mensaje Fática: se centra en el canal de la comunicación, ya que se utiliza para establecer, prolongar o interrumpir una conversación. Ej.: ¿Me escuchas bien? Canal Todas estas funciones concurren simultáneamente, mezcladas en diversas proporciones y con preponderancia de unas u otras según el tipo de comunicación. 1.3 Definición de comunicación La comunicación es un acto mediante al cual un individuo establece con otro (u otros) un contacto que le permite transmitir una determinada información; por tanto, puede definirse como la transmisión de señales mediante un código que ha de ser común al emisor y al receptor. Podemos destacar los siguientes tipos de comunicación: -Comunicación Interpersonal (bidimensional): se interactúa con otros individuos, es decir, se establece un diálogo. Es la forma de comunicación más primaria, directa y personal. -Comunicación Intrapersonal (unidimensional): es íntima y limitada y se establece a través del monólogo, por lo que se expresa en primera persona. Se emplea también en las obras dramáticas y narrativas para revelar estados de conciencia, conjuntamente con sus respectivos procesos psíquicos. -Comunicación Masiva: se realiza a través de los medios de comunicación. La comunicación implica la transmisión de una determinada información, y casi todas las definiciones de lenguaje aluden a la comunicación. No obstante, no contamos con una definición comúnmente aceptada de comunicación y, de hecho, este término se emplea indistintamente en alternancia con el de información, lo que puede inducir a error. 3 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística 1.4 Teoría de la comunicación La Teoría de la comunicación es aquella que se centra en investigar y estudiar la capacidad que tienen ciertos seres vivos de establecer relaciones con otros mediante el intercambio de información. Esta teoría parte de la ingeniería de las comunicaciones. Shannon y Weaver (The mathematical theory of communication, 1949) se preocupan de aspecto técnicos de la transmisión de información. Según ellos, una fuente de información produce mensajes que deben transmitirse a un receptor. El transmisor desarrolla el mensaje a fin de producir una señal susceptible de ser transmitida por un canal. La señal recibida se descifra entonces por el receptor, para restituir el mensaje que finalmente alcanza su destino. Se produce la codificación y descodificación a través del código. Para el éxito de la comunicación, emisor y receptor deben usar canales compatibles. La trasmisión puede verse entorpecida por ruidos con lo que se daña la exacta reproducción del mensaje. Para luchar contra el ruido se recurre a la redundancia. Para ambos autores el problema fundamental de la comunicación consistía en reproducir, exacta o aproximadamente, un mensaje de tomado de otro punto. Las posteriores teorías obre problema relativos a la comunicación se inspiran en el esquema de Shannon y Weaver. Se mantiene la transmisión de mensajes, por señales, de un emisor a un receptor siguiendo un canal. La teoría de la comunicación no menciona la palabra signo, habla de símbolo, como unidad que establece el mensaje y de señal, como la transformación del símbolo para la comunicación. Este planteamiento no tiene en cuenta el significado que transportan las unidades, interesándose tan solo por el mecanismo de transmisión propiamente dicho. 1.5. Elementos de la comunicación Aunque tradicionalmente se aceptan como generales los elementos comunicativos establecidos por Jakobson (emisor, receptor, mensaje, canal, código y contexto) ampliaremos aquí la nómina con otros conceptos utilizados por otros autores en sus teorías´y que también forman parte del proceso comunicativo (intención, transmisor, señal, destinatario, ruido, redundancia). 1. FUENTE O EMISOR. Es el origen del acto de comunicación, y puede ser cualquier realidad natural o artificial dentro de los amplios procesos de comunicación. En la comunicación lingüística la fuente o emisor se restringe a las personas. M. Victoria Escandell explica que “con el nombre de emisor se designa a la persona que produce intencionalmente una expresión lingüística en un momento dado, ya sea oralmente o por escrito”. 4 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística 2. INTENCIÓN: Es una de las características que distingue a la señal (intencional) del indicio (no intencional). Es un concepto clave tanto en la teoría de Saussure como en la de Shannon y Weawer o en la de Lyons. Sperber y Wilson distinguen entre intención informativa (en la que sólo se pretende informar al oyente de algo) e intención comunicativa (busca informar al oyente de nuestra intención informativa). También M. Victoria Escandell hace referencia al concepto de intención tanto en el emisor como en el destinatario, señalando que es una nota distintiva que permite diferenciar al emisor del hablante y al destinatario del oyente. 3. TRANSMISOR: La fonación, que aparecía en el esquema comunicativo de Saussure, puede identificarse con la actividad del transmisor que produce las señales. El transmisor es el elemento que transforma el mensaje originado en el emisor en señal, la cual es enviada a través de un canal. 4. MENSAJE: Es el elemento trasmitido del receptor al destinatario. En la comunicación humana la mayoría de los mensajes son lingüísticos, si bien pueden ir acompañados de mensajes no verbales (gestos, mirada, posición corporal…). Estos últimos se denominan enunciados cuando se emiten en una situación comunicativa concreta. Lyons señala que ciertos tipos de mensajes pueden depender del canal en el sentido de que únicamente pueden señalizarse a través de un determinado canal de comunicación, si bien la mayoría de los mensajes pueden transmitirse por medio de uno entre varios canales alternativos, simultáneamente o en partes por uno y otro canal. 5. SEÑAL: La señal sirve para codificar el mensaje enviado por el emisor, la cual, a través del transmisor, llega hasta el receptor, si bien puede llegar alterada debido a las interferencias del proceso comunicativo o al ruido, por lo que debe distinguirse entre la señal emitida y la señal recibida. El término señal es muy utilizado en los planteamientos de Shannon y Weawer, y esta señal está formada por una sustancia física unida a la energía. También Lyons utiliza este concepto en su elaboración del esquema del proceso de comunicación. 6. CANAL. El canal pone en contacto al emisor con el receptor y a través de él se puede transmitir un mensaje determinado. Este canal puede ser un medio físico natural (el aire, el agua) o artificial (el papel, un disquete, un cable). Es evidente que la elección de un canal o de otro condicionará la forma del mensaje, ya que, por ejemplo, la transmisión de un determinado mensaje escrita está sometida a unas condiciones diversas. También observamos que el canal audiovisual se ha convertido en el más utilizado en la actualidad. 7. RECEPTOR: Dentro del esquema de Saussure, la audición sería la actividad del receptor que recibe las señales. El receptor puede recibir informaciones simultáneas por todos los canales sensoriales. El transmisor codifica el mensaje en señal que descodifica el receptor. Para que haya comunicación, ambos deben compartir el mismo código. 8. DESTINATARIO: M. Victoria Escandell señala que “con el nombre de destinatario se designa a la persona (o personas) a la(s) que el emisor dirige su enunciado y con la(s) que normalmente suele intercambiar su papel en la 5 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística comunicación de tipo dialogante. (...) Frente a receptor, destinatario sólo se refiere a sujetos, y no a simples mecanismos de descodificación”. El destinatario es siempre el receptor elegido por el emisor. Pero no sólo eso: además, el mensaje está construido específicamente para él. 9. RUIDO: Por ruido hay que entender todo lo que puede interponerse en la transmisión de un mensaje y dañar su exacta reproducción, es decir, la recepción de lo que se ha tomado en la fuente. No sólo es una perturbación acústica, sino todo elemento que dificulte o impida la comunicación. 10. REDUNDANCIA: La teoría de la información postula que cierto grado de redundancia es indispensable, ya que sirve para contrarrestar el ruido. Es una especie de seguro de que el mensaje llegará correctamente a su destino. 11. CÓDIGO: Dentro de la teoría de la información, el código es el sistema de señales, por medio de las cuales se transmiten las informaciones concretas. La lengua es uno de tales sistemas y contiene unas características determinadas que la convierten en un código diferenciable del resto de códigos existentes. La comunicación se consigue codificando un mensaje, que no puede viajar, en forma de una señal, que sí puede hacerlo, y descodificando dicha señal en el terminal de recepción. Evidentemente, para que la comunicación se produzca, el código debe ser igual en ambos terminales. 3.11.1. CLASIFICACIÓN DE LOS CÓDIGOS. Existen muy diversos tipos de códigos que han sido clasificados desde puntos de vista también distintos: a) Códigos naturales o artificiales. Serán códigos naturales o espontáneos aquellos no creados: los gritos, los síntomas de una enfermedad. Serán códigos artificiales aquellos creados o elaborados: la lengua, el código Morse. b) Dependencia o independencia del contexto: un código será dependiente del contexto si la aparición de un elemento del mismo está condicionada por los elementos aparecidos anteriormente (el código del semáforo). Un código será independiente del contexto si la aparición de uno de sus elementos no está condicionada por ninguno de los aparecidos previamente (el código de un dado). Los códigos artificiales deben ser operativos y económicos, siguiendo las leyes de probabilidad de aparición que sustentan la teoría de la información y que nos ayudan a comprender conceptos como la redundancia. c) Según su morfología interna: Códigos simples o sin articulación: aquellos que no se pueden descomponer (el código del semáforo). Códigos de primera articulación: las unidades que componen cada signo del código tienen un significado (señales de tráfico). 6 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística Códigos de segunda articulación: las unidades que componen cada signo del código no tienen un significado (números digitales) Códigos de doble articulación: las unidades que componen cada signo del código tienen un significado y, a su vez, están compuestas por unidades sin significado (las lenguas naturales). 2. LOS SIGNOS 2.1 Semiología y semiótica. El signo semiológico. El campo de estudio de la semiótica ha tenido a lo largo de la historia, y fundamentalmente en el siglo pasado, dos vertientes principales. Por un lado, aparece con el nombre de semiología y por el otro, con el de semiótica. El primero surge a partir de los trabajos del lingüista Ferdinand de Saussure, que la define como "la ciencia general de todos los sistemas de signos gracias a los cuales los hombres se comunican entre ellos", lo que hace de la semiología una ciencia social y presupone que los signos se constituyen en sistemas (sobre el modelo de la lengua). El segundo está representado por el filósofo norteamericano Charles Sanders Peirce, quien la define como "la doctrina de los signos". Mientras Saussure resalta el carácter humano y social de la doctrina, Peirce destaca su carácter lógico y formal. Oficialmente no existe diferencia entre semiótica y semiología, aunque el uso vincule más semiología con la tradición europea y semiótica con la tradición anglosajona. 2.2 Tipología de los signos Aunque nadie duda de la existencia del signo, no hay un acuerdo en su definición ni en su alcance, por lo que algunos semiólogos y lingüistas prefieren estudiar la significación antes que el signo mismo. Siguiendo los trabajos de Adam Schaff y la crítica que de ellos hace Reznikov, recogidos por Otaola (2004), se establece una tipología que relaciona y diferencia los diversos sistemas de signos en: - Naturales o índices: No creados por el hombre, pero sí interpretados por este: así, la fiebre es índice de enfermedad y el humo, del fuego - Artificiales: Creados por el ser humano. Pueden subdividirse en lingüísticos, los propios de la comunicación verbal humana y no lingüísticos, objetos o entidades que comunican algo, pero que no están mediados ni por el lenguaje hablado ni por el escrito. Charles Sanders Pierce desarrolló su propia teoría de los signos a la que denominó semiótica. Basa sus estudios en la teoría de los sistemas, por eso concibe la realidad como una triada, a diferencia de Saussure que usa conceptos dicotómicos. Clasifica los signos en: 7 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística Iconos: mantienen una relación de semejanza con lo representado. La relación con el signo es no arbitraria, sino motivada entre signo y la realidad representada (retrato o mapa). Índices: relación causal entre dos fenómenos (humo como indicio del fuego). Son signos sin intención comunicativa, son de carácter natural. Símbolos: frente al icono la relación entre el signo y lo representando es de naturaleza arbitraria. Existe una convencionalidad de los signos, ya que es una convención social la que transmite la asociación entre signos y representación. Aquí se localizan los signos lingüísticos. 2.3 El signo lingüístico Ferdinand de Saussure postula que la estructura del signo lingüístico consta de una parte material o significante, constituido por la sucesión inmutable de sonidos (fonemas) que lo constituyen (o de letras en la escritura) y de otra inmaterial o significado, lo que el significante evoca en nuestra mente (el concepto) cuando lo oímos o leemos. El signo lingüístico es la unidad mínima de la comunicación verbal, que parte de un sistema social y psíquico de comunicación entre los seres humanos, que conocemos como lenguaje. Este mecanismo actúa sustituyendo a las cosas de la realidad por signos que las representan que podemos recibir a través de los sentidos y luego decodificar e interpretar para recuperar un mensaje original. Así, la palabra manzana, sería la representación gráfica o signo lingüístico de la fruta que vemos en la realidad. 2.4. Propiedades del signo lingüístico. Desde la creación de la lingüística, esta ciencia ha investigado las características que definen al lenguaje humano frente al resto de lenguajes. Las propiedades que lo caracterizan al signo lingüístico como tal son: Saussure establece los principios de arbitrariedad (relación entre significado y realidad que no mantienen un vínculo natural) y el carácter lineal (el significante representa una acción y se extiende en elementos unos tras otros) Más tarde, Chomsky habla de productividad que consiste en la propiedad de los seres humanos de construir e interpretar señales que antes no se habían producido. André Martinet propuso los conceptos de doble articulación (unidades con significado (monemas) y sin significado (fonemas)) y capacidad metalingüística (el lenguaje puede hablar de sus propios signos y los de los demás sistemas). Moreno Cabrera clasifica las ideas de Hockett en tres principios: economía, creatividad y simbolismo. o La ECONOMÍA está ligada a las limitaciones físicas y psíquicas del ser humano. Este principio determina tres propiedades fundamentales: Intercambiabilidad (hablante puede ser emisor y receptor) y la eficiencia (elementos que cambian su denotación según el uso, deícticos). 8 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística o El bloque de CREATIVIDAD (emitir y comprender expresiones nuevas; combinar elementos finitos para obtener infinitos mensajes) abarca dos propiedades: Composicionalidad: las expresiones complejas están determinadas por las expresiones más simples que la componen. Recurrencia: uso de los mismos patrones de organización en los distintos niveles de la lengua: p no está marcada por sonoridad, o Juan no está marcado para agente). o El bloque SIMBOLISMO (los signos son las expresiones del lenguaje humano) se desprenden seis rasgos: especialización (las expresiones lingüísticas poseen repercusión inconexa con el acto físico que suponen), semanticidad (las expresiones lingüísticas están conectadas simbólicamente con elementos de la realidad), arbitrariedad (dos realidades distintas puede ser denotadas por expresiones en las que se repiten elementos: estrella fugaz, estrella de mar), desplazamiento (los mensajes se refieren a cosas remotas en el tiempo y espacio), prevaricación (los mensajes lingüísticos pueden ser falsos), reflexividad (los signos lingüísticos pueden referirse a si mismos). Por supuesto, la cuestión sobre estas propiedades genera polémicas, pues algunas de estas propiedades no son exclusivas del lenguaje verbal (la linealidad en la música). 3. COMPETENCIA COMUNICATIVA LINGÜÍSTICA Y COMPETENCIA El lenguaje constituye una actividad humana compleja que asegura dos funciones básicas: la de comunicación y la de representación. Mediante estas funciones, no excluyentes entre sí, regulamos la conducta propia y la ajena. Por lo tanto, se debe analizar y estudiar el lenguaje desde una doble perspectiva: como medio de comunicación y como instrumento para representarnos el mundo. 3.1. Competencia lingüística Este concepto se enmarca dentro de la gramática generativa-transformativa de Chomsky (1957), según la cual, la competencia (competence) es el sistema de reglas lingüísticas, interiorizadas por los hablantes, que conforman sus conocimientos verbales y que les permiten entender un número infinito de enunciados. Este conocimiento engloba los componentes fonológico, morfológico, sintáctico, semántico y léxico. Para Chomsky el conocimiento de la lengua es intuitivo y consiste en reglas "gramaticales" (no solo morfosintácticas) para la correcta formación de oraciones. Como contenido del saber lingüístico en general, Coseriu distingue tres grados: 9 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística - Saber elocucional: Todo hablante espera de los otros emisores un sentido y a la vez que los otros lo interpreten de una forma tolerante. - Saber idiomático: Incluye tanto lo dado, es decir, signos dotados de forma y contenido, como procedimientos para que a partir de lo dado, tenga lugar la actividad lingüística. - Saber expresivo: Consiste en procedimientos con normas inherentes. Estas se manifiestan porque el hablante asigna a los textos el juicio de lo apropiado según el contexto o la situación. Con respecto a la semanticidad de estos tres saberes, al elocucional corresponde la designación, al idiomático el significado y al expresivo el sentido, entendiendo que el texto se configura sobre lo idiomático, lo toma como materia, como significante y elabora un significado de orden superior que es el sentido. Competencia se opone a actuación (performance), que consiste en la utilización de sistemas de reglas de transformación de las estructuras profundas (representación, formulación lógica del significado) en estructuras superficiales (lo que oímos y vemos escrito); es decir, la ejecución efectiva de la competencia. A esto debemos añadir la competencia pragmática, que incluye en la actuación lingüística una finalidad consciente (propósito de alcanzar ciertos fines), así como las condiciones y el modo apropiado del uso del lenguaje. Por otra parte, el ejercicio de las habilidades lingüísticas (hablar, escuchar, escribir y leer) se concreta en el desarrollo de las destrezas de comprender y producir discursos orales y escritos, las cuales exigen escuchar, hablar, leer y escribir. 3.2 Competencia comunicativa La competencia comunicativa, concepto acuñado por el etnógrafo Dell Hymes en 1967, consiste en la capacidad para utilizar el lenguaje de manera apropiada en las diversas situaciones sociales en las que puede encontrase un hablante. Por lo tanto, la competencia comunicativa es una suma de los distintos tipos de competencia: - Gramatical: supone el dominio del código lingüístico, con sus correspondientes subsistemas fonético-fonológico, morforsintáctico y léxico-semántico. - Sociolingüística o capacidad de producir enunciados acordes a la situación de comunicación tanto en forma como en significado. - Discursiva: capacidad de utilizar los diferentes tipos de discurso y organizarlos en función de los parámetros de la situación de comunicación en la que son producidos e interpretados. Otro aspecto característico de la competencia comunicativa es la capacidad de los interlocutores para definir y matizar progresivamente los significados que transmiten, utilizando todos los recursos lingüísticos y extralingüísticos disponibles para evitar que se rompa la comunicación. Se trata de la competencia estratégica. 3.3. Los actos de habla 10 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística Se entiende por acto de habla la unidad básica de la comunicación lingüística, propia del ámbito de la pragmática, con la que se realiza una acción (orden, petición, aserción, promesa...).Esta forma de concebir el lenguaje parte del filósofo británico John Langshaw Austin. El término fue acuñado posteriormente por su discípulo, el filósofo John Searle, quien perfeccionó y consolidó dicha teoría. Según Austin, al producir un acto de habla, se activan simultáneamente tres dimensiones: ● Un acto locutivo: se produce cuando se dice algo, lo que a su vez comporta: o acto fónico: el acto de emitir ciertos sonidos. o acto fático: el acto de emitir palabras en una secuencia gramatical estructurada. o acto rético: el acto de emitir las secuencias gramaticales con un sentido determinado. ● Un acto ilocutivo es la intención o la finalidad por la que se dice la frase ● Un acto perlocutivo es el efecto que provoca el enunciado en el interlocutor. De este modo, al emitir un enunciado como “te prometo que lo haré” estamos, por un lado, diciendo algo (acto locutivo); con la intención de prometer (acto ilocutivo) y provocando un efecto (convencer de la promesa al interlocutor). Searle advertirá que en muchas ocasiones existe una discrepancia entre la forma lingüística y la fuerza ilocutiva: con una pregunta puede estar haciéndose una sugerencia o dando un mandato. Esto le lleva a establecer el concepto de acto de habla indirecto para referirse a los casos en los que el significado literal no coincide con la fuerza ilocutiva o intención, como ocurre ante un enunciado del tipo [¿puedes cerrar la ventana?]. Así propondrá una tipología de dichas condiciones: actos de habla asertivos: dicen algo acerca de la realidad: El teatro estaba lleno. los directivos pretenden influir en la conducta del interlocutor: No te olvides de cerrar con llave. los compromisivos condicionan la ulterior conducta del hablante: Si tengo tiempo pasaré a saludarte; en los expresivos el hablante manifiesta sus sentimientos o sus actitudes: Lo siento mucho, no quería molestarle. los declarativos modifican la realidad; Queda rescindido este contrato. En la didáctica de las lenguas la teoría de los actos de habla ha servido de base para las propuestas de enseñanza comunicativa. Los programas nociofuncionales elaborados con esta metodología se construyen sobre las nociones y las funciones, conceptos que se inspiran en los actos de habla. 4.4 Habilidades lingüísticas de la comunicación o capacidades comunicativas 11 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística El uso de la lengua solo se puede realizar de cuatro formas diferentes, según el individuo sea emisor o receptor y según el mensaje sea oral o escrito. Hablar, escuchar, escribir y leer son las cuatro habilidades que el usuario de una lengua debe dominar para poder comunicarse con eficacia en todas las situaciones posibles. A estas cuatro habilidades también se las denomina como macro habilidades lingüísticas, ya que se refieren a un buen «saber hacer» e integran contenidos conceptuales como el «saber», procedimentales como el «hacer» y actitudinales como el «ser». Estas 4 habilidades ofrecen a los alumnos la oportunidad de crear contextos en los que utilizar el idioma para el intercambio de información real, pruebas de su propia capacidad (prueba de aprendizaje) y lo que es más importante, confianza. Escuchar y leer son habilidades receptivas porque los estudiantes no necesitan producir lenguaje, lo reciben y lo entienden. Los planteamientos didácticos más modernos se basan en el concepto de competencia comunicativa. Los métodos o planteamientos didácticos centrados en la comunicación se denominan enfoques (didácticos) comunicativos. Surgieron en la didáctica de lenguas extranjeras y el más utilizado es el socio-funcional. Estos métodos fijan su objetivo en la comunicación y en el correcto uso de la lengua. La LOMLOE señala diez competencias comunicativas en las que incluye la competencia digital, pues es fundamental en la sociedad actual, como desarrollamos en el siguiente apartado. 5. COMUNICACIÓN EN INTERNET No podemos terminar este tema sin mencionar la gran importancia que ha adquirido Internet en las últimas décadas y que ha revolucionado las comunicaciones. El lenguaje humano, nuestro vehículo de comunicación, ha ido evolucionando a lo largo de la historia y en la actualidad ha dado nombre a nuestra era: la era digital (Castels, 2006). Su extraordinario desarrollo ha originado nuevas maneras de comunicarse desde las redes como Facebook, Instagram o Whatsapp, que hacen que vivamos permanentemente conectados al espacio social telemático. Es difícil comprender el mundo del adolescente sin considerar el gran impacto que las redes tienen en su vida. Estas compiten con las familias, los amigos, los colegios y las comunidades en su capacidad para moldear sus intereses, actitudes y valores. Para favorecer este proceso que se empieza a desarrollar desde los entornos educativos informales (familia, ocio, etc.) los institutos deben integrar también la nueva cultura. Por ello es importante la presencia de las TIC en las aulas, para aprovechar los avances de las nuevas tecnologías como fuente de motivación de los estudiantes. Touriñán (2001) señala la necesidad de que los docentes actúen de guías a través de la Red planteando de manera diferente las nuevas formas de estructurar la información e incluso el tiempo y los ritmos del aprendizaje del alumno. Tal y como señala Lozano 12 T1/ Lenguaje y comunicación. Competencia comunicativa y competencia lingüística (2012), se nos abre una gran ventana desde donde podemos vislumbrar enormes posibilidades creativas que tienen nuestros jóvenes a su alcance. CONCLUSIONES El lenguaje humano es nuestro vehículo de comunicación y en su extraordinario desarrollo ha originado nuevos códigos y experimentado un cambio radical. Debido a la pandemia, se ha puesto en marcha un plan de resilencia cuyo objetivo es fomentar que el alumno desarrolle las competencias necesarias para desenvolverse en esta nueva sociedad destacando entre ellas además de la comunicativa, la digital. Conociendo las características del lenguaje humano y el proceso de comunicación, los alumnos dispondrán de las herramientas necesarias para desenvolverse en la sociedad y afrontar los retos y desafíos del siglo XXI. Desde un enfoque pragmático se plantearán situaciones de aprendizaje en las que practicar las diferentes funciones del lenguaje según los escenarios, crearán infografías, analizarán de manera crítica usos concretos de la lengua con la intención de desterrar usos discriminatorios y manipuladores, trabajando la competencia específica 10 de la mano de la literatura. Competencia digital y lingüística van de la mano en este tema en el que los criterios valoran la capacidad de relacionarse en este mundo tan cambiante en el que vivimos. Las actividades, unas tradicionales y otras innovadoras, son un reflejo de cómo tradición e innovación, hoy más que nunca, van de la mano, en este gran salto al vacío que nos ha tocado vivir y que nos ha llevado a combinar literatura y tecnología. BIBLIOGRAFÍA DE LOS ASPECTOS LINGÜÍSTICOS Alarcos Llorach, E. (1994). Gramática Estructural. Madrid: Espasa Calpe. Castells, M. (2006). La era de la información: economía, sociedad y cultura. Vol.3, Fin de milenio (4a ed.). Madrid: Alianza Editorial. Coseriu, E. (1967). Teoría del Lenguaje y Lingüística General. Madrid: Gredos. Echevarría, J. (2000). Educación y tecnologías telemáticas. Revista Iberoamericana de Educación (24), 17-36. Lledó, E. (2018) Sobre la educación. Taurus. Otaola, C. (2004). Lexicología y semántica léxica; teoría y aplicación a la lengua española. Ediciones Académicas. Peirce, J.R. (1962). Semiótica y Símbolos, Señales y Ruidos. La Ciencia de la Comunicación. Madrid: Rev Occidente. Reyes, G. (2002). El abecé de la pragmática. Madrid: Arco Libros. Touriñán (2001). Tecnología digital y sistema educativo: el reto de la globalización. Revista de Educación. Monográfico Globalización y Educación, Nº extraordinario, 217-230. 13