Masajes y energía en Equinos

Masajes y energía en Equinos
Puede llegar a ser frecuente pensar que los masajes surgieron en la época
moderna, o que su creación es reciente, la realidad es que desde que empezó la
evolución del hombre sobre la tierra, los masajes, también estaban dentro del
paquete que traía el avance de la civilización, en principio, se generaron en la
época de las cavernas, para las magulladuras y los golpes que recibían en la caza
y migraciones; el hombre primitivo, también observaba que a su vez, los animales,
y entre estos, se presionaban, frotaban o lamian, para aliviar el dolor o curar las
heridas.
Ahora bien, si miramos el origen de la palabra masaje, no deriva de una sola raíz,
se encuentran massein o manso significan: tocar, asir, estrujar, o amasar y que
viene del griego, también se tiene la raíz sánscrita makeh se traducen como
«apretar con suavidad».
Los primeros registros que se tienen de técnicas de masajes, aparecen en la
antigüedad, en China, 2.700 a.c. en el libro del emperador amarillo, aunque antes
de este escrito, por tradición oral, a los primeros individuos a los que se les realizó
la práctica de la acupuntura, fueron a los caballos y se tiene el concepto que esto
pudo haber ocurrido 4.000 a.c. luego, se encuentran reportes en la cultura egipcia,
2.500 a.c. donde se conoce la técnica de la reflexología con puntos
específicamente en los pies, que reflejan todo el cuerpo, en India, 1.500 a.c. surge
la ayurveda, cuyo fundamento es el equilibrio entre la mente y el cuerpo, ya en el
en el siglo V a.c, Hipócrates, prescribió tratamientos para lesiones, que incluían la
fricción como una forma de curación. “Medicina Holística” y muchas de sus
prácticas las realizaba en animales donde también incluía a los caballos.
En roma 125 – 50 a.c. se ponen en auge los termales y piscinas al acceso de toda
la población y el gran aporte además, es la aromaterapia. Los masajes a lo largo
de la historia de la humanidad, también tuvieron un descenso en la época del
oscurantismo, donde era pecado el cuerpo, la alegría, las sensaciones y fue en el
renacimiento y más en el siglo XIX, que verdaderamente se empiezan a generar
técnicas y a incluir tanto en la vida diaria de las personas, como en la de los
animales de compañía y en especial en el área del deporte.
Si nos remontamos específicamente al momento en el que se tiene conocimiento
de cuando se comenzó o se realizaron por primera vez masajes en equinos,
debemos destacar al Hitita Kikuli, 1.345 a.c. aunque en sus escritos de
entrenamiento de caballos, no describe específicamente un proceso de masajes,
si muestra y resalta los períodos de descanso a lo largo del entrenamiento de los
ejemplares, estos no salían al combate, hasta que no estuvieran física y
mentalmente preparados, todos los equinos, debían mostrar una condición y
mansedumbre y a partir de ahí, ya les permitía cargar peso, se destaca
especialmente el manejo en positivo y consideraciones, que le daba a los caballos
heridos o enfermos, que tenían las aptitudes para poder ir luego a batalla.
El Primer Principio del
Método Kikuli 1.345
a.c. es el monitorizar
constantemente
el
estado físico y mental
del caballo y tratarlo
siempre con respeto y
cariño, ya que se trata
de un ser vivo que
pone
la
integridad
física y por ende su
vida a nuestro servicio.
Pasamos a Jenofonte, 360 a.c. en su libro Hipárquico o la Equitación, donde al
igual que Kikuli, no escribe específicamente del masaje en caballos, aunque sí
resalta los principios de estos. En el libro de Jenofonte se lee:
- Todo aquello que es forzado y malentendido, no puede ser bello.
- Los caballos jóvenes, deben ser educados de forma que no solo quieran al
hombre, más aún, que lo busquen.
- No acercarse jamás a un caballo encolerizado, pues ahí en la cólera hay
algo de irreflexión, por lo que se hacen cosas de las cuales frecuentemente
se tiende a arrepentirse.
En mi práctica profesional, especialmente en el ámbito del comportamiento,
educando, reeducando y/o rehabilitando ejemplares, luego de poder acceder a
estos con el contacto a través de mis manos, lo siguiente que suelo realizar es un
masaje general en todo el cuerpo, además de relajarlos, los hace estar más
dispuestos al recibir las siguientes sesiones y lo que observo es su colaboración y
gusto al encontrarnos de nuevo.
Debo resaltar que en principio, hace ya casi dos décadas, solo me preparaba para
aportarle el bienestar de los masajes en el ámbito físico, progresivamente fui
encontrando, que debía centrarme mental y energéticamente, entonces comencé
antes entrar a trabajar con cualquier tipo de ejemplar, a realizar respiraciones
profundas, meditar (no más de 10 minutos), en un estado de relajación,
ralentizando mi ritmo cardiaco y la intensidad de mis reacciones, ya en el corral y
con el equino en el, le solicitaba y le solicito permiso para acceder a este y
aportarle el bienestar requerido o programado, con lo cual observo cambios más
rápidos y eficientes, que antes de que lo hiciera o lo incluyera en mi rutina de
trabajo. Posteriormente surgen los estudios de la coherencia cardiaca y la
sincronización de los latidos cardiacos de los equinos con el humano.
Años después, integro a mi práctica
profesional la quiropráctica, que significa
práctica manual o hecho manualmente, es el
arte a través de las manos, de realizar ajustes
a la estructura de un individuo, en este caso
los equinos, para liberar la tensión nerviosa.
He venido observado, que si además realizo
mi preparación energética, antes de realizar el
procedimiento mecánico, el ejemplar libera
más tensión, requiere de menos sesiones y la
recuperación de la estructura o regeneración
de tejidos en este es más rápida (no por
velocidad, sino por sanación y mejora).
Con la implementación de la
Acupuntura, que es punturar con
agujas filiformes esterilizadas,
una parte del cuerpo o lo que en
el diagnóstico se determine de
acuerdo
al
meridiano
(s)
afectado, al conectarme con el
ejemplar,
sentir
su
campo
energético,
comprender
la
emoción de donde surge la lesión
o los puntos a tratar, hay mayor
disposición para el procedimiento,
es importante aclarar, que no
todos los ejemplares permiten la inserción de agujas, aunque sí en la mayoría de
los casos lo he podido realizar, al sincronizarme con ellos, eso sí, una vez sienten
que sanaron, ya no lo aceptan.
Aunque las disciplinas como la
quiropráctica y la acupuntura son
herramientas indispensables en el
mejoramiento musculoesquelético de los
ejemplares y en algunos casos
metabólicos, he tenido magníficas
experiencias, cuando tengo que realizar
curaciones o manejar lesiones, pues no
me dirijo a la porción afectada, sino
comienzo a masajear las zona alrededor
de la herida o molestia, esto tiene que
ver con el sistema de fascias, antes
ignorado y que hoy en día sale a la luz, brevemente, la fascia es una capa de
tejido conjuntivo, que conecta músculos, huesos, vasos sanguíneos y órganos del
cuerpo entre otros, al entender este concepto, le ayudo al ejemplar a liberar
dopaminas y sustancia de relajación a través del masaje, por lo que una vez, se
ha tranquilizado y los receptores de dolor ya no están tan activos, se dejan realizar
curaciones y procedimientos sin protestar o presentar malos comportamientos o al
contrario, ejemplares que han atravesado por curaciones y tratamientos y han sido
sometidos a condiciones de estrés, una vez entran al proceso de masajes y de
relajación, dejan de presentar los comportamiento no deseados, tranquilizándose y
aceptando que se haga el evento de forma eficiente y en la mayoría de los casos
sin elementos de sujeción o manipulación; por supuesto, lo que estoy describiendo
debe realizarlo una persona capacitada o que haya recibido entrenamiento, pues
es importante saber que, cuando y como tocar, así mismo la persona que
interviene, debe tener una preparación física, mental y energética.
A través de los masajes, también
se genera un alto bienestar a los
equinos
que
está
en
entrenamiento o competencia,
pues la homeostasis del cuerpo
retorna eficientemente y están
más dispuestos a la siguiente
actividad, debo resaltar, que los
masajes no solo son contacto con
movimientos de las manos en los
diversos
grupos
musculares,
también cabe dentro de esta
definición, los ejercicios de
estiramiento, coretraining, agility y
equilibrio.
Por
encima
de
pretender o tratar de lograr un movimiento o acción, a través de la práctica de los
masajes en equinos he observado proceso profundos de relajación, entornan los
ojos, bajan sus cabezas sin ningún esfuerzo o pedido, suspiran, sus músculos se
distensionan y muestran su deseo de acompañarte o en algunos casos quieren
más o se quedan dormidos, los procesos de regeneración de tejidos es más
eficiente y el fortalecimiento de los músculos es más alto, se recomienda sesiones
de masajes o de quiropráctica antes y después del entrenamiento, a su vez
combinar algunos días a la semana con Agility y coretraining.
Autor:
Sandra Liliana Morales Ospina
Zootecnista ULS – Quiropráctica
Acupunturista – Biomagnetoterapeuta
Maestra en Reiki – Comunicadora Animal
Coach