Equipo: Emiliano Orozco, Massimo Salvatore, Daana Karime, Fany celeste, Selene Sanchez LA HEGEMONÍA NEOIMPERIALISTA Y LA DESCOLONIZACIÓN PARA EL SIGLO XXI. la hegemonía y el dominio por ellos desplegados no fueron resultado de la posesión o de la apropiación de los recursos naturales (como el colonialismo clásico hacía) de naciones más débiles, sino del uso y el despliegue de la ciencia y sus aplicaciones tecnológicas. la hegemonía imperialista buscó el control de la economía capitalista mundial y sus trasnacionales, el control público de los estados, la imposición de sus leyes por encima al ordenamiento jurídico internacional De acuerdo con esta estrategia las prioridades del Imperialismo están desplazadas hacia el Asia y el Oriente Medio. En la línea de atajar el desarrollo de China como la nueva súper potencia del siglo XXI controlar el desarrollo de las transnacionales europeas y evitar que la UE se convierta en otra potencia que le haga competencia. El mercado mundial es insuficiente para continuar con su crecimiento descomunal las transnacionales de bandera gringa, quienes se han ido apropiando del mercado gracias al avance tecnológico, son los más favorecidos por la acumulación de capital logrado en la expropiación y sobre todo por la imposición imperial aprovechando la condición de súper potencia única. Los grandes monopolios de alcance transnacional y base nacional, resultado de la elevada concentración de la propiedad y del capital, junto a los gobiernos de los países metropolitanos o potencias imperialistas. Las instituciones financieras internacionales que integran una arquitectura mundial. El término descolonización hace referencia al proceso mediante el cual los territorios sometidos a los poderes coloniales logran poner fin a su estatus de colonia. Este proceso, que supone la eliminación de la práctica colonial, es uno de los fenómenos recientes más importantes a nivel mundial, pues ha llevado a la liberación de territorios que durante siglos habían estado bajo el control de potencias coloniales En 1945 el mundo mostraba un aspecto bien distinto al que se puede observar en la actualidad. Por aquel momento – recién finalizada la Segunda Guerra Mundial – existían aún un buen número de territorios dependientes de una metrópoli. También, desde dicho órgano, se declararon sucesivamente tres Decenios Internacionales para la Eliminación del Colonialismo – el primero entre 1990 y 2000, el segundo entre 2001 y 2010 y el tercero entre 2011 y 2020 – que tenían como finalidad aprobar un plan de acción para conseguir un mundo libre de colonialismo. Tal como se ha señalado, la ONU estableció una serie de reglas generales en materia de descolonización que sirvieron de guía para los territorios dependientes en su camino a la emancipación.