Subido por Denilson Ruiz Hernandez

ACTIVIDADES U2 DESARROLLO SUSTENTABLE

TECNOLÓGICO
NACIONAL DE
MÉXICO
SEMESTRE
FEB – JUN 2022
INSTITUTO TECNOLÓGICO DEL ESTADO DE
OAXACA
INGENIERÍA CIVIL
DESARROLLO SUSTENTABLE ACD0908
ACTIVIDADES UNIDAD 2
ARQ. ISABEL QUINTANA RUIZ
ALUMNO: RUIZ HERNÁNDEZ DENILSON AGUSTÍN
2.1
ECOSISTEMAS
El concepto de ecosistema es especialmente interesante para comprender el
funcionamiento de la naturaleza y multitud de cuestiones ambientales que se
tratarán con detalle en próximos capítulos.
Hay que insistir en que la vida humana se desarrolla en estrecha relación con la
naturaleza y que su funcionamiento nos afecta totalmente. Es un error considerar
que nuestros avances tecnológicos: coches, grandes casas, industria, etc. nos
permiten vivir al margen del resto de la biosfera y el estudio de los ecosistemas,
de su estructura y de su funcionamiento, nos demuestra la profundidad de estas
relaciones.
Definición de Ecosistema
Los ecosistemas son sistemas complejos como el bosque, el río o el
lago, formados por un conjunto de elementos fisicoquímicos (el biotopo) y
biológicos (la biocenosis o comunidad de organismos), y por las interacciones de
los organismos entre sí y con el medio físico.
El ecosistema es el nivel de organización de la naturaleza que interesa a la
ecología. En la naturaleza los átomos están organizados en moléculas y estas en
células. Las células forman tejidos y estos órganos que se reúnen en sistemas,
como el digestivo o el circulatorio. Un organismo vivo está formado por varios
sistemas anatómico-fisiológicos íntimamente unidos entre sí.
ORGANIZACIÓN BIOLÓGICA
La organización de la naturaleza en niveles superiores al de los organismos es la
que interesa a la ecología. Los organismos viven en poblaciones que se
estructuran en comunidades. El concepto de ecosistema aún es más amplio que el
de comunidad porque un ecosistema incluye, además de la comunidad, el
ambiente no vivo, con todas las características de clima, temperatura, sustancias
químicas presentes, condiciones geológicas, etc. El ecosistema estudia las
relaciones que mantienen entre sí los seres vivos que componen la comunidad,
pero también las relaciones con los factores no vivos.
Unidad de estudio de la Ecología
El ecosistema es la unidad de trabajo, estudio e investigación de la Ecología. Es
un sistema complejo en el que interactúan los seres vivos entre sí y con el
conjunto de factores no vivos que forman el ambiente: temperatura, sustancias
químicas presentes, clima, características geológicas, etc.
La ecología estudia a la naturaleza como un gran conjunto en el que las
condiciones físicas y los seres vivos interactúan entre sí en un complejo
entramado de relaciones.
En ocasiones el estudio ecológico se centra en un campo de trabajo muy local y
específico, pero en otros casos se interesa por cuestiones muy generales. Un
ecólogo puede estar estudiando cómo afectan las condiciones de luz y
temperatura a las encinas, mientras otro estudia como fluye la energía en la selva
tropical; pero lo específico de la ecología es que siempre estudia las relaciones
entre los organismos y de estos con el medio no vivo, es decir, el ecosistema.
Ejemplos de ecosistemas
La ecósfera (Biósfera) en su conjunto es el ecosistema mayor. Abarca todo el
planeta y reúne a todos los seres vivos en sus relaciones con el ambiente no vivo
de toda la Tierra. Pero dentro de este gran sistema hay subsistemas que son
ecosistemas más delimitados. Así, por ejemplo, el océano, un lago, un bosque, o
incluso, un árbol, o una manzana que se esté pudriendo son ecosistemas que
poseen patrones de funcionamiento en los que podemos encontrar paralelismos
fundamentales que nos permiten agruparlos en el concepto de ecosistema.
Estudio del ecosistema
Al estudiar los ecosistemas interesa más el conocimiento de las relaciones entre
los elementos, que el cómo son estos elementos. Los seres vivos concretos le
interesan al ecólogo por la función que cumplen en el ecosistema, no en sí
mismos como le pueden interesar al zoólogo o al botánico. Para el estudio del
ecosistema es indiferente, en cierta forma, que el depredador sea un león o un
tiburón. La función que cumplen en el flujo de energía y en el ciclo de los
materiales son similares y es lo que interesa en ecología.
Como sistema complejo que es, cualquier variación en un componente del sistema
repercutirá en todos los demás componentes. Por eso son tan importantes las
relaciones que se establecen.
Los ecosistemas se estudian analizando las relaciones alimentarias, los ciclos de
la materia y los flujos de energía
Relaciones Alimentarias
La vida necesita un aporte continuo de energía que llega a la Tierra desde el Sol y
pasa de unos organismos a otros a través de la cadena trófica (mostrada a
continuación).
Las redes de alimentación (reunión de todas las cadenas tróficas) comienzan en
las plantas (productores) que captan la energía luminosa con su actividad
fotosintética y la convierten en energía química almacenada en moléculas
orgánicas. Las plantas son devoradas por otros seres vivos que forman el nivel
trófico de los consumidores primarios (herbívoros).
La cadena alimentaria más corta estaría formada por los dos eslabones citados
(ej.: elefantes alimentándose de la vegetación). Pero los herbívoros suelen ser
presa, generalmente, de los carnívoros (depredadores) que son consumidores
secundarios en el ecosistema. Ejemplos de cadenas alimentarias de tres
eslabones serían:
Las cadenas alimentarias suelen tener, como mucho, cuatro o cinco eslabones seis constituyen ya un caso excepcional-. Ej. de cadena larga sería:
Pero las cadenas alimentarias no acaban en el depredador cumbre, sino que
como todo ser vivo muere, existen necrófagos, como algunos hongos o bacterias
que se alimentan de los residuos muertos y detritos en general (organismos
descomponedores o detritívoros). De esta forma se soluciona en la naturaleza el
problema de los residuos.
Los detritos (restos orgánicos de seres vivos) constituyen en muchas ocasiones el
inicio de nuevas cadenas tróficas. Por ej., los animales de los fondos abisales se
nutren de los detritos que van descendiendo de la superficie.
Las diferentes cadenas alimentarias no están aisladas en el ecosistema, sino que
forman un entramado entre sí y se suele hablar de red trófica.
Una representación muy útil para estudiar todo este entramado trófico son las
pirámides de biomasa, energía o nº de individuos. En ellas se ponen varios pisos
con su anchura o su superficie proporcional a la magnitud representada. En el piso
bajo se sitúan los productores; por encima los consumidores de primer orden
(herbívoros), después los de segundo orden (carnívoros) y así sucesivamente.
Ciclos de la materia
Los seres vivos están formados fundamentalmente por oxígeno, hidrógeno,
carbono y nitrógeno que, en conjunto, componen más del 95% de su peso.
Estos elementos también se encuentran en la naturaleza no viva, como la
atmósfera (O2, N2 y CO2), suelo (H2O, nitratos, fosfatos y otras sales) y rocas
(fosfatos, carbonatos, etc.).
Son captados por los vegetales (autótrofos) de la tierra y el aire y transformados
en moléculas orgánicas como carbohidratos, lípidos, aminoácidos, etc., base de la
alimentación para herbívoros (heterótrofos) de donde obtienen energía.
Los ciclos de la materia o también conocidos como ciclos biogeoquímicos, son
activados directa o indirectamente por la energía que proviene del Sol.
Una sustancia química puede ser parte de un organismo en un momento y parte
del ambiente del organismo en otro. Gracias a estos ciclos es posible que los
elementos se encuentren disponibles para ser usados una y otra vez por otros
organismos; sin estos la vida se extinguiría.
Hay tres tipos los cuales están interconectados:
•
•
•
Ciclos gaseosos, los nutrientes circulan principalmente entre el agua y los
organismos vivos y los elementos son reciclados rápidamente (horas o
días). Los principales ciclos gaseosos son los del carbono, oxígeno y
nitrógeno.
Ciclos sedimentarios, los nutrientes circulan principalmente en la corteza
terrestre (suelo y sedimentos) la hidrosfera y los organismos vivos. Los
elementos son reciclados más lentamente que los ciclos anteriores,
retenidos en las rocas sedimentarias. El fósforo y el azufre son dos de los
36 elementos reciclados de esta manera.
Ciclo hidrológico; el agua circula entre el océano, el aire, la tierra y los
organismos vivos. Este ciclo también distribuye el calor solar sobre la
superficie del planeta. Las superficies cubiertas por bosques ejercen un
efecto regulador sobre el micro-clima local, ya que son áreas boscosas que
regulan el agua que cae en el invierno y permite en época estival
constituirse en refugio de distintas especies de fauna y permite la
germinación de especies nativas.
Funcionamiento del Ecosistema (Flujo Energético)
El funcionamiento de todos los ecosistemas es parecido. Todos necesitan una
fuente de energía que, fluyendo a través de los distintos componentes del
ecosistema, mantiene la vida y moviliza el agua, los minerales y otros
componentes físicos del ecosistema. La fuente primera y principal de energía es el
sol.
En todos los ecosistemas existe, además, un movimiento continuo de los
materiales. Los diferentes elementos químicos pasan del suelo, el agua o el aire a
los organismos y de unos seres vivos a otros, hasta que vuelven, cerrándose el
ciclo, al suelo o al agua o al aire.
En el ecosistema la materia se recicla (en un ciclo cerrado) y la energía pasa
(fluye) generando organización en el sistema.
CONCLUSIÓN
En conclusión podemos decir que un ecosistema es una colección de
comunidades biológicas específicas, como plantas, animales y microorganismos
(biomas), y espacios específicos, que interactúan como una unidad funcional.
Como resultado de estas interacciones que se dan entre el medio ambiente y las
especies y entre especies, se establecen equilibrios biológicos y ecológicos.
El ser humano, como todos los seres vivos, se encuentra formando parte de los
ecosistemas. Los ecosistemas son el soporte principal para que la vida del ser
humano sea posible, de ellos adquiere, no solo alimento (vegetales, hongos y
animales), sino todos aquellos recursos que se encuentran en su medio físico
(agua, madera, combustibles fósiles, rocas, etc.) usados para satisfacer las
necesidades del mismo.
Los ecosistemas son fundamentales para la existencia de cualquier tipo de vida,
ya que estos brindan una gran cantidad de bienes y servicios.
Asegurar el equilibrio natural de todos los tipos de ecosistemas es muy importante
para que la naturaleza pueda continuar con su curso, pero ya desde hace años
estos se están viendo gravemente afectados por la intervención del ser humano.
Proteger los ecosistemas puede evitar el aceleramiento del cambio climático y el
auge de conflictos sociales por la escasez de bienes, como pueden ser el
agua por la desaparición de acuíferos, o los alimentos por la pérdida de fertilidad
del suelo. Además, su protección ayuda a la mejora de la salud de las personas y
evita la proliferación de nuevas enfermedades. Además, se asegura un ambiente
favorable para las generaciones futuras.
2.2
LOS CICLOS BIOGEOQUIMICOS
La materia circula desde los seres vivos hacia el ambiente abiótico, y viceversa.
Esa circulación constituye los ciclos biogeoquímicos, que son los movimientos de
agua, de carbono, oxígeno, nitrógeno, fósforo, azufre y otros elementos que en
forma permanente se conectan con los componentes bióticos y abióticos de la
Tierra. Las sustancias utilizadas por los seres vivos no se "pierden" aunque
pueden llegar a sitios donde resultan inaccesibles para los organismos por un
largo período. Sin embargo, casi siempre la materia se reutiliza y a menudo circula
varias veces, tanto dentro de los ecosistemas como fuera de ellos.
Nuestro planeta actúa como un sistema cerrado donde la cantidad de materia
existente permanece constante, pero sufre permanentes cambios en su estado
químico dando lugar a la producción de compuestos simples y complejos. Es por
ello que los ciclos de los elementos químicos gobiernan la vida sobre la Tierra,
partiendo desde un estado elemental para formar componentes inorgánicos, luego
orgánicos y regresar a su estado elemental. En las cadenas alimentarias, los
productores utilizan la materia inorgánica y la convierten en orgánica, que será la
fuente alimenticia para todos los consumidores. La importancia de los
descomponedores radica en la conversión que hacen de la materia orgánica en
inorgánica, actuando sobre los restos depositados en la tierra y las aguas. Esos
compuestos inorgánicos quedan a disposición de los distintos productores que
inician nuevamente el ciclo.
Los ciclos biogeoquímicos más importantes corresponden al agua, oxígeno,
carbono y nitrógeno. Gracias a estos ciclos es posible que los elementos
principales (carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, fósforo y azufre) estén
disponibles para ser usados una y otra vez por otros organismos.
Los ciclos biogeoquímicos pueden ser gaseosos, sedimentarios y mixtos.
Ciclos gaseosos
•
Los elementos casi siempre se distribuyen tanto en la atmósfera como en el
agua y de ahí a los organismos, y así sucesivamente.
•
Los elementos que cumplen ciclos gaseosos son el carbono, el oxígeno y el
nitrógeno.
•
La transformación de elementos de un estado a otro es relativamente
rápida.
Ciclos sedimentarios
•
Son aquellos donde los elementos permanecen formando parte de la tierra,
ya sea en las rocas o en el fondo marino, y de ahí a los organismos. En
estos, la transformación y recuperación de estos elementos es mucho más
lenta. Ejemplos de ciclos sedimentarios son el del fósforo y el del azufre.
Ciclos mixtos
•
El ciclo del agua es una combinación de los ciclos gaseoso y sedimentario,
ya que esa sustancia permanece tanto en la atmósfera como en la corteza
terrestre.
Los ciclos biogeoquímicos más importantes corresponden al agua, oxígeno,
carbono y nitrógeno.
EL AGUA
Toda el agua de la Tierra forma la hidrosfera, que se distribuye en tres reservorios
principales: los océanos, los continentes y la atmósfera. Entre estos reservorios
existe una circulación continua. Alrededor del 70% de la superficie del planeta está
cubierta por las aguas de los océanos, lagos, ríos, arroyos, manantiales y
glaciares. Al perforar el subsuelo, por lo general se puede encontrar agua a
profundidades diversas (agua subterránea o mantos freáticos). La luz solar es la
fuente de energía térmica necesaria para el paso del agua desde las fases líquida
y sólida a la fase de vapor, y también es el origen de las circulaciones
atmosféricas que transportan el vapor de agua y mueven las nubes.
Ciclo del agua
Los rayos solares calientan las aguas. El vapor sube a la troposfera en forma de
gotitas. El agua se evapora y se concentra en las nubes. El viento traslada las
nubes desde los océanos hacia los continentes.
Diagrama del ciclo del agua
A medida que se asciende bajan las temperaturas, por lo que el vapor se
condensa. Es así que se desencadenan precipitaciones en forma de lluvia y
nieve.
El agua caída forma los ríos y circula por ellos. Además, el agua se infiltra en la
tierra y se incorpora a las aguas subterráneas (mantos freáticos). Por último, el
agua de los ríos y del subsuelo desemboca en los mares.
EL CARBONO
Es uno de los elementos más importantes de la naturaleza. Combinado con
oxígeno forma dióxido de carbono (CO2) y monóxido de carbono (CO).
La atmósfera contiene alrededor de 0.03 % de dióxido de carbono. Es el elemento
básico de los compuestos orgánicos (hidratos de carbono, lípidos, proteínas y
ácidos nucleicos). El carbono también forma parte de sales llamadas carbonatos,
como el carbonato de sodio (Na2CO3) y el carbonato de calcio (CaCO3), entre
otras.
Ciclo del carbono
El carbono, como dióxido de carbono, inicia su ciclo de la siguiente manera:
Durante la fotosíntesis, los organismos productores (vegetales terrestres y
acuáticos) absorben el dióxido de carbono, ya sea disuelto en el aire o en el agua,
para transformarlo en compuestos orgánicos. Los consumidores primarios se
alimentan de esos productores utilizando y degradando los elementos de carbono
presentes en la materia orgánica. Gran parte de ese carbono es liberado en forma
de CO2 por la respiración, mientras que otra parte se almacena en los tejidos
animales y pasa a los carnívoros (consumidores secundarios), que se alimentan
de los herbívoros. Es así como el carbono pasa a los animales colaborando en la
formación de materia orgánica.
Los organismos de respiración aeróbica (los que utilizan oxígeno) aprovechan la
glucosa durante ese proceso y al degradarla, es decir, cuando es utilizada en su
metabolismo, el carbono que la forma se libera para convertirse nuevamente en
dióxido de carbono que regresa a la atmósfera o al agua.
Los desechos de las plantas, de los animales y de restos de organismos se
descomponen por la acción de hongos y bacterias. Durante este proceso de
putrefacción por parte de los descomponedores, se desprende CO2.
Diagrama del ciclo del carbono
En niveles profundos del planeta, el carbono contribuye a la formación de
combustibles fósiles, como el petróleo. Este importante compuesto se ha originado
de los restos de organismos que vivieron hace miles de años. Durante las
erupciones volcánicas se libera parte del carbono constituyente de las rocas de la
corteza terrestre.
Una parte del dióxido de carbono disuelto en las aguas marinas ayuda a
determinados organismos a formar estructuras como los caparazones de los
caracoles de mar. Al morir, los restos de sus estructuras se depositan en el fondo
del mar. Con el paso del tiempo, el carbono se disuelve en el agua y es utilizado
nuevamente durante su ciclo.
Los océanos contienen alrededor del 71% del carbono del planeta en forma de
carbonato y bicarbonato. Un 3% adicional se encuentra en la materia orgánica
muerta y el fitoplancton. El carbón fósil representa un 22%. Los ecosistemas
terrestres, donde los bosques constituyen la principal reserva, contienen alrededor
del 3-4% del carbono total, mientras que un pequeño porcentaje se encuentra en
la atmósfera circulante y es utilizado en la fotosíntesis.
EL OXÍGENO
La atmósfera posee un 21% de oxígeno, y es la reserva fundamental utilizable por
los organismos vivos. Además, forma parte del agua y de todo tipo de moléculas
orgánicas.
Ciclo del oxígeno
El ciclo del oxígeno está estrechamente vinculado al del carbono, ya que el
proceso por el cual el carbono es asimilado por las plantas (fotosíntesis) da lugar a
la devolución del oxígeno a la atmósfera, mientras que en el proceso de
respiración ocurre el efecto contrario.
Otra parte del ciclo natural del oxígeno con notable interés indirecto para
los organismos vivos es su conversión en ozono (O3). Las moléculas de O2,
activadas por las radiaciones muy energéticas de onda corta, se rompen en
átomos libres de oxígeno (O) que reaccionan con otras moléculas de O2,
formando ozono. Esta reacción se produce en la estratosfera y es reversible, de
forma que el ozono vuelve a convertirse en oxígeno absorbiendo radiaciones
ultravioletas.
EL NITRÓGENO
La reserva fundamental es la atmósfera, que está compuesta por un 78% de
nitrógeno. No obstante, la mayoría de los seres vivos no lo puede utilizar en forma
directa, con lo cual dependen de los minerales presentes en el suelo para su
utilización. En los organismos productores el nitrógeno ingresa en forma de
nitratos, y en los consumidores en forma de grupos amino. Existen algunas
bacterias especiales que pueden utilizar directamente el nitrógeno atmosférico.
Esas bacterias juegan un papel muy importante en el ciclo al hacer la fijación del
nitrógeno. De esta forma convierten el nitrógeno en otras formas químicas como
amonio y nitratos, para que puedan ser aprovechadas por las plantas.
Ciclo del nitrógeno
Está compuesto por las siguientes etapas.
1- Fijación: se produce cuando el nitrógeno atmosférico (N2) es transformado en
amoníaco (NH3) por bacterias presentes en los suelos y en las aguas. Las
bacterias del género Rhizobium sp. viven en simbiosis dentro de los nódulos que
hay en las raíces de plantas leguminosas. En ambientes acuáticos, las
cianobacterias son importantes fijadoras de nitrógeno.
2- Amonificación: es la transformación de compuestos nitrogenados orgánicos en
amoníaco. En los animales, el metabolismo de los compuestos nitrogenados da
lugar a la formación de amoníaco, siendo eliminado por la orina como urea
(humanos y otros mamíferos), ácido úrico (aves e insectos) o directamente en
amoníaco (algunos peces y organismos acuáticos). Estas sustancias son
transformadas en amoníaco o en amonio por los descomponedores presentes en
los suelos y aguas. Ese amoníaco queda a disposición de otro tipo de bacterias en
las siguientes etapas.
3- Nitrificación: es la transformación del amoníaco o amonio (NH4+) en nitritos
(NO2–) por un grupo de bacterias del género Nitrosomas para luego esos nitritos
convertirse en nitratos (NO3–) mediante otras bacterias del género Nitrobacter.
4- Asimilación: las plantas toman el amonio (NH4+) y el nitrato (NO3–) por las
raíces para poder utilizarlos en su metabolismo. Usan esos átomos de nitrógeno
para la síntesis de clorofila, de proteínas y de ácidos nucleicos (ADN y ARN). Los
consumidores obtienen el nitrógeno al alimentarse de plantas y de otros animales.
5- Desnitrificación: proceso llevado a cabo por bacterias desnitrificantes que
necesitan utilizar el oxígeno para su respiración en suelos poco aireados y mal
drenados. Para ello, degradan los nitratos y liberan el nitrógeno no utilizado a la
atmósfera.
Diagrama del ciclo del nitrógeno
NITRIFICACIÓN: transformación bacteriana de amoníaco en nitritos y luego en
nitratos.
DESNITRIFICACIÓN: transformación bacteriana de nitratos no utilizados en
nitrógeno atmosférico.
AMONIFICACIÓN: transformación de los desechos orgánicos en amoníaco.
ASIMILACIÓN: absorción de nitratos y amonio por las raíces de las plantas.
FIJACIÓN: transformación bacteriana del nitrógeno atmosférico en compuestos
nitrogenados.
EL FÓSFORO
La proporción de fósforo en la materia viva es bastante pequeña, pero el papel
que desempeña es vital. Es componente de los ácidos nucleicos como el ADN. Se
encuentra presente en los huesos y piezas dentarias.
En la fotosíntesis y en la respiración celular, muchas sustancias intermedias están
combinadas con el fósforo, tal el caso del trifosfato de adenosina (ATP) que
almacena energía.
El fósforo es el principal factor limitante del crecimiento para los ecosistemas,
porque su ciclo está muy relacionado con su movimiento entre los continentes y
los océanos.
La mayor reserva de fósforo está en la corteza terrestre y en los depósitos de
rocas marinas. El fósforo se encuentra en forma de fosfatos (sales) de calcio,
hierro, aluminio y manganeso.
Ciclo del fósforo
La lluvia disuelve los fosfatos presentes en los suelos y los pone a disposición de
los vegetales. El lavado de los suelos y el arrastre de los organismos vivos
fertilizan los océanos y mares. Parte del fósforo incorporado a los peces es
extraído por aves acuáticas que lo llevan a la tierra por medio de la defecación
(guano). Otra parte del fósforo contenido en organismos acuáticos va al fondo de
las rocas marinas cuando éstos mueren. Las bacterias fosfatizantes que están en
los suelos transforman el fósforo presente en cadáveres y excrementos en
fosfatos disueltos, que son absorbidos por las raíces de los vegetales.
Diagrama del ciclo del fósforo
EL AZUFRE
El azufre está presente dentro de todos los organismos en pequeñas cantidades,
principalmente en los aminoácidos (sustancias que dan lugar a la formación de
proteínas). Es esencial para que tanto vegetales como animales puedan realizar
diversas funciones. Las mayores reservas de azufre están en el agua del mar y en
rocas sedimentarias. Desde el mar pasa a la atmósfera por los vientos y el oleaje.
Ciclo del azufre
Gran parte del azufre que llega a la atmósfera proviene de las erupciones
volcánicas, de las industrias, vehículos, etc. Una vez en la atmósfera, llega a la
tierra con las lluvias en forma de sulfatos y sulfitos. Cuando el azufre llega al
suelo, los vegetales lo incorporan a través de las raíces en forma de sulfatos
solubles. Parte del azufre presente en los organismos vivos queda en los suelos
cuando éstos mueren. La descomposición de la materia orgánica produce ácido
sulfhídrico, de mal olor, devolviendo azufre a la atmósfera.
Ciclo del azufre
Flujo de energía
El ecosistema se mantiene en funcionamiento gracias al flujo de energía que va
pasando de un nivel al siguiente. La energía fluye a través de la cadena
alimentaria sólo en una dirección: va siempre desde el sol, a través de los
productores a los descomponedores. La energía entra en el ecosistema en forma
de energía luminosa y sale en forma de energía calorífica que ya no puede
reutilizarse para mantener otro ecosistema en funcionamiento. Por esto no es
posible un ciclo de la energía similar al de los elementos químicos.
Papel de los Organismos
Los organismos puede ser productores o consumidores en cuanto al flujo de energía
a través de un ecosistema. Los productores convierten la energía ambiental en
enlaces de carbono, como los encontrados en el azúcar glucosa. Los ejemplos más
destacados de productores son las plantas; ellas usan, por medio de la fotosíntesis,
la energía de la luz solar para convertir el dióxido de carbono en glucosa (u otro
azúcar). Las algas y las cianobacterias también son productores fotosintetizadores,
como las plantas. Otros productores son las bacterias que viven en algunas
profundidades oceánicas. Estas bacterias toman la energía de productos químicos
provenientes del interior de la Tierra y con ella producen azúcares. Otras bacterias
que viven bajo tierra también pueden producir azúcares usando la energía de
sustancias inorgánicas. Otro término para productores es autótrofos.
Los consumidores obtienen su energía de los enlaces de carbono originados por los
productores. Otro término para un consumidor es heterótrofo. Es posible distinguir
4 tipos de heterótrofos en base a lo que comen:
Consumidor
Nivel trófico
Fuente alimenticia
1. Herbívoros
primario
plantas
2. Carnívoros
secundario o superior
animales
3. Omnívoros
todos los niveles
plantas y animales
4. Detritívoros
---------------
detrito
El nivel trófico se refiere a la posición de los organismos en la cadena alimenticia,
estando los autótrofos en la base. Un organismo que se alimente de autótrofos es
llamado herbívoro o consumidor primario; uno que coma herbívoros es un carnívoro
o consumidor secundario. Un carnívoro que coma carnívoros que se alimentan de
herbívoros es un consumidor terciario, y así sucesivamente.
Es importante observar que muchos animales no tienen dietas especializadas. Los
omnívoros (como los humanos) comen tanto animales como plantas. Igualmente,
los carnívoros (excepto algunos muy especializados) no limitan su dieta sólo a
organismos de un nivel trófico. Las ranas y sapos, por ejemplo, no discriminan entre
insectos herbívoros y carnívoros; si es del tamaño adecuado y se encuentra a una
distancia apropiada, la rana lo capturará para comérselo sin que importe el nivel
trófico.
Flujo de Energía a través del Ecosistema
El diagrama anterior muestra como la energía (flechas oscuras) y los nutrientes
inorgánicos (flechas claras) fluyen a través del ecosistema. Debemos,
primeramente, aclarar algunos conceptos. La energía "fluye" a través del
ecosistema como enlaces carbono-carbono. Cuando ocurre respiración, los enlaces
carbono-carbono se rompen y el carbono se combina con el oxígeno para formar
dióxido de carbono (CO2). Este proceso libera energía, la que es usada por el
organismo (para mover sus músculos, digerir alimento, excretar desechos, pensar,
etc.) o perdida en forma de calor. Las flechas oscuras en el diagrama representan
el movimiento de esta energía. Observe que toda la energía proviene del sol, y que
el destino final de toda la energía es perderse en forma de calor. ¡La energía no se
recicla en los ecosistemas!
Los nutrientes inorgánicos son el otro componente mostrado en el diagrama.
Ellos son inorgánicos debido a que no contienen uniones carbono-carbono. Algunos
de estos nutrientes inorgánicos son el fósforo en sus dientes, huesos y membranas
celulares; el nitrógeno en sus aminoácidos (las piezas básicas de las proteínas); y
el hierro en su sangre (para nombrar solamente unos pocos nutrientes inorgánicos).
El flujo de los nutrientes se representa con flechas claras. Observe que los
autótrofos obtienen estos nutrientes inorgánicos del 'almacén' de nutrientes
inorgánicos (usualmente el suelo o el agua que rodea la planta). Estos nutrientes
inorgánicos son pasados de organismo a organismo cuando uno es consumido por
otro. Al final, todos los organismos mueren y se convierten en detrito, alimento para
los descomponedores. En esta etapa, la energía restante es extraída (y perdida
como calor) y los nutrientes inorgánicos son regresados al suelo o agua para ser
utilizados de nuevo. Los nutrientes inorgánicos son reciclados, la energía no.
Para resumir: En el flujo de energía y de nutrientes inorgánicos, es posible hacer
algunas generalizaciones:
1. La fuente primaria (en la mayoría de los ecosistemas) de energía es el
sol.
2. El destino final de la energía en los ecosistemas es perderse como calor.
3. La energía y los nutrientes pasan de un organismo a otro a través de la
cadena alimenticia a medida que un organismo se come a otro.
4. Los descomponedores extraen la energía que permanece en los restos
de los organismos.
5. Los nutrientes inorgánicos son reciclados pero la energía no.
Cadenas y Redes Alimenticias
Una cadena alimenticia es la ruta del alimento desde un consumidor final dado
hasta el productor. Por ejemplo, una cadena alimenticia típica en un ecosistema de
campo pudiera ser:
Aun cuando se dijo que la cadena alimenticia es del consumidor final al productor,
se acostumbra representar al productor a la izquierda (o abajo) y al consumidor final
a la derecha (o arriba). Ud. debe ser capaz de analizar la anterior cadena alimenticia
e identificar los autótrofos y los heterótrofos, y clasificarlos como herbívoro,
carnívoro, etc. Igualmente, debe reconocer que el halcón es un consumidor
cuaternario.
Desde luego, el mundo real es mucho más complicado que una simple cadena
alimenticia. Aun cuando muchos organismos tienen dietas muy especializadas
(como es el caso de los osos hormigueros), en la mayoría no sucede así. Los
halcones no limitan sus dietas a culebras, las culebras comen otras cosas aparte de
ratones, los ratones comen yerbas además de saltamontes, etc. Una representación
más realista de quien come a quien se llama red alimenticia, como se muestra a
continuación:
Solamente cuando vemos una representación de una red alimenticia como la
anterior, es que la definición dada arriba de cadena alimenticia tiene sentido.
Podemos ver que una red alimenticia consiste de cadenas alimenticias
interrelacionadas, y la única manera de desenredar las cadenas es de seguir el
curso de una cadena hacia atrás hasta llegar a la fuente.
La red alimenticia anterior consiste de cadenas alimenticias de pastoreo ya que en
la base se encuentran productores que son consumidos por herbívoros. Aun cuando
este tipo de cadenas es importante, en la naturaleza son más comunes las cadenas
alimenticias con base en los detritos en las cuales se encuentran descomponedores
en la base.
Pirámides
Un concepto muy importante es el de biomasa. Un principio general es que,
mientras más alejado esté un nivel trófico de su fuente (detrito o productor), menos
biomasa contendrá (aquí entendemos por biomasa al peso combinado de todos los
organismos en el nivel trófico). Esta reducción en la biomasa se debe a varias
razones:
1. no todos los organismos en los niveles inferiores son comidos
2. no todo lo que es comido es digerido
3. siempre se pierde energía en forma de calor
Es importante recordar que es más fácil detectar la disminución en el número si lo
vemos en términos de biomasa. No es confiable el número de organismos en este
caso debido a la gran variación en la biomasa de organismos individuales. Por
ejemplo, algunos animales pequeños se alimentan de los frutos de árboles. En
términos de peso combinado, los árboles de un bosque superan a los animales,
pero, de hecho, hay más individuos de los animales que de los árboles; ahora bien,
un árbol individual puede ser muy grande, con un peso de cientos de kilos, mientras
que un animal individual (en el caso que estamos analizando) puede pesar, quizás,
un kilo.
Hay unas pocas excepciones al esquema de pirámide de biomasa. Una de ellas se
encuentra en sistemas acuáticos donde las algas pueden ser superadas, en número
y en masa, por los organismos que se alimentan de las algas. Las algas pueden
soportar la mayor biomasa del siguiente nivel trófico solamente porque ellas pueden
reproducirse tan rápidamente como son comidas. De esta manera, ellas nunca son
completamente consumidas. Es interesante notar que esta excepción a la regla de
la pirámide de biomasa también es una excepción parcial a por lo menos 2 de las 3
razones para la pirámide de biomasa dadas arriba. Aunque no todas las algas son
consumidas, sí lo son la mayoría de ellas, y aunque no son totalmente digeribles,
las algas son, en términos generales, mucho más nutritivas que las plantas leñosas
(la mayoría de los organismos no pueden digerir la madera y extraer energía de
ella).
Magnificación Biológica
La magnificación biológica es la tendencia de los contaminantes a concentrarse en
niveles tróficos sucesivos. Con mucha frecuencia, esto va en detrimento de los
organismos en los cuales se concentran estos materiales ya que casi siempre las
sustancias contaminantes son tóxicas.
La biomagnificación sucede cuando los organismos en la base de la cadena
alimenticia concentran el material por encima de su concentración en el suelo o
agua que los rodea. Como vimos antes, los productores toman los nutrientes
inorgánicos de su ambiente. Ya que una deficiencia de estos nutrientes puede limitar
el crecimiento del productor, los productores harán el mayor esfuerzo para obtener
los nutrientes; con frecuencia, gastan considerable energía para incorporarlos en
sus cuerpos y, aún incorporar más de lo necesario en el momento y lo almacenan.
El problema se presenta cuando un producto contaminante, como el DDT o
mercurio, se presenta en el ambiente. Estos contaminantes se asemejan,
químicamente, a nutrientes inorgánicos esenciales por lo que son incorporados y
almacenados "por error". Este es el primer paso en la biomagnificación; el
contaminante se encuentra a una concentración mayor dentro del productor que en
el ambiente.
La segunda etapa de la biomagnificación sucede cuando es comido el productor.
En nuestra discusión sobre la pirámide de biomasa vimos que relativamente poca
energía pasa de un nivel trófico al siguiente. Esto significa que un consumidor (de
cualquier nivel) tiene que consumir mucha biomasa del nivel trófico inferior. Si esa
biomasa contiene el contaminante, éste será consumido en grandes cantidades por
el consumidor. Los contaminantes que se biomagnifican tienen otra característica:
no solamente son adquiridos por los productores, sino que, también son absorbidos
y almacenados en los cuerpos de los consumidores. Esto sucede con frecuencia
con contaminantes solubles en grasas como el DDT o los PCB. Estos materiales
son adquiridos a través de los productores y se mueven a la grasa de los
consumidores. Si el consumidor es capturado y comido, su grasa es digerida y el
contaminante se traslada a la grasa del nuevo consumidor. De esta manera,
aumenta la concentración del contaminante en los tejidos grasos de los
consumidores. Usualmente los contaminantes solubles en agua no pueden
biomagnificarse de esta manera debido a que se disuelven en los fluidos corporales
del consumidor. Ya que todos los organismos pierden agua al ambiente, los
contaminantes se pierden junto con el agua. Pero, la grasa no se pierde.
El "mejor" ejemplo de biomagnificación es la del DDT. Este pesticida (insecticida)
de larga duración permitió mejorías en la salud humana en muchos países por
eliminación de insectos como los mosquitos que transmiten enfermedades. El DDT
es efectivo debido a que no se descompone en el ambiente; es tomado por los
organismos del ambiente e incorporado en su grasa. En muchos organismos
(incluyendo humanos), no hace un daño real, pero, sin embargo, en otros el DDT
es letal o puede tener efectos a largo plazo más insidiosos. Por ejemplo, en las aves
el DDT interfiere con el depósito de calcio en las cáscaras de los huevos. Los huevos
puestos son muy suaves y se rompen fácilmente; las aves afectadas de esta manera
no son capaces de reproducirse y esto causa una reducción en el número de ellas.
Estos casos eran tan claros en 1960 que llevaron a la científica Rachel Carson a
postular una "primavera silenciosa" sin el canto de las aves. Su libro "Silent Spring"
condujo a la prohibición del DDT, la búsqueda de pesticidas que no biomagnifiquen,
y el nacimiento del movimiento ambiental "moderno". Luego de esta prohibición,
algunas aves como el águila calva de Estados Unidos, ha podido recuperarse.
Irónicamente, muchos de los pesticidas que reemplazaron al DDT son más
peligrosos para los humanos.
En resumen:
Para que haya biomagnificación de un contaminante, deben darse las siguientes
condiciones:
1. El contaminante debe tener una larga vida.
2. El contaminante debe ser concentrado por los productores.
3. El contaminante debe ser soluble en grasa.
Cadenas Alimenticias Humanas vs. Naturales
La civilización humana depende de la agricultura. Solamente con la agricultura
podrían unas pocas personas alimentar al resto de la población; el resto de la
población que no tiene que producir alimentos puede entonces dedicarse a hacer
todas las cosas que asociamos con "civilización". Agricultura significa manipular el
ambiente para favorecer las especies de plantas que comemos. En esencia, los
humanos manipulamos la competencia, permitiendo que prosperen las especies
favorecidas (cultivos) y reprimiendo aquellas especies que podrían competir con
ellas (malezas). Es decir, con la agricultura estamos creando un ecosistema muy
simple; como mucho, solamente tiene tres niveles - productores (cultivos),
consumidores primarios (ganado, humanos) y consumidores secundarios
(humanos). Con esto, poca energía se pierde antes de llegar a los humanos ya que
hay muy pocos niveles tróficos.
Esto es bueno para los humanos, pero, ¿qué tipo de "ecosistema" hemos creado?
Los ecosistemas agrícolas tienen varios problemas. En primer lugar, creamos
monocultivos (campos con un solo cultivo); esto hace más fácil sembrar, desyerbar,
y cosechar, pero también coloca muchas plantas similares en un área pequeña,
creando una situación ideal para las enfermedades y las plagas de insectos. En los
ecosistemas naturales, las plantas de una especie están, con frecuencia,
esparcidas. Los insectos, que comúnmente se especializan en alimentarse de una
especie vegetal en particular, tienen problemas en encontrar las plantas esparcidas.
Sin alimento, las poblaciones de insectos se mantienen a raya. Ahora bien, en un
campo de maíz, aún el insecto más inepto puede encontrar una nueva planta con
un simple salto. Igualmente, las enfermedades se diseminan más fácilmente si las
plantas están próximas. Es necesario usar muchos productos químicos (pesticidas)
para mantener el monocultivo.
Otro problema con la agricultura humana es que dependemos de relativamente
pocas especies vegetales alimenticias. Si en un año fallan, a nivel mundial, los
cultivos de maíz y arroz, nos veríamos en apuros para alimentar a todo el mundo
(aunque hay que reconocer que tampoco estamos haciendo un buen trabajo ahora).
Los ecosistemas naturales usualmente tienen fuentes alternativas de alimento en
caso de que una fuente falte.
Finalmente, un problema asociado con los agroecosistemas es el problema del
reciclaje de los nutrientes inorgánicos. En un ecosistema natural, cuando una planta
muere cae al suelo y se descompone, y sus nutrientes inorgánicos son regresados
al suelo del que fueron tomados. En agricultura, sin embargo, cosechamos el cultivo,
llevamos lejos la cosecha y, al final, los eliminamos por los sistemas sanitarios
siendo arrastrados por los ríos hacia el océano. Aparte del problema de
contaminación del agua que esto crea, es obvio que los nutrientes no son
regresados a los campos. Ellos tienen que ser repuestos por medio de fertilizantes
químicos, lo que significa minería, transportación, electricidad, etc., sin olvidar que
los fertilizantes químicos tienden a disolverse y contaminar, aún más, las aguas.
Se dispone de algunas soluciones a estos problemas, pero, al mismo tiempo, ellas
crean nuevos problemas. La agricultura de labranza cero usa herbicidas para
eliminar las malezas; entonces se siembra el cultivo a través de las plantas muertas
sin labrar el suelo. Esto reduce la erosión del suelo, pero los mismos herbicidas
puede dañar los ecosistemas. En muchas áreas se ha usado las aguas servidas de
ciudades para que sirvan de fertilizantes. Esto reduce las necesidades de
fertilizantes químicos, pero requiere de demasiado energía para transportar el
material. Además, si no se tiene cuidados, productos como químicos para el hogar
y metales pesados pueden contaminar esos productos que se biomagnificarían en
los cultivos que luego nos comeríamos.
CONCLUSIÓN
Después de leer, analizar, sintetizar, comprender y relacionar estos ciclos
biogeoquímicos con nuestra vida cotidiana, una de mis conclusiones es que todos
los seres vivos estamos constituidos por átomos, dos o más de ellos forman
moléculas, estas a su vez forman órganos y tejidos. A las moléculas que
constituyen organismos vivos se les conoce como biomoléculas estas
biomoléculas están formadas por átomos que son necesarias para todo ser vivo, a
los cuales se les llama bioelementos.
Los bioelementos son utilizados por los organismos para organizar sus propias
biomoléculas y realizar distintas funciones, los obtienen de la materia que hay en
nuestro medio ambiente. Esta materia circula por todo el medio ambiente y viaja por
los ecosistemas de manera cíclica, es así como estos recorridos de la materia se
les conoce como ciclos biogeoquímicos.
En mi conclusión general los ciclos biogeoquímicos son de vital importancia, ya que
permiten que los bioelementos se encuentren disponibles para utilizarse una y otra
vez, transformándolos y recirculándolos en la atmosfera, la hidrosfera, la litosfera y
la biosfera, es decir cada uno de estos ciclos es de suma importancia en la vida de
todo nuestro planeta.
2.3
BIODIVERSIDAD
La biodiversidad o diversidad biológica es la variedad de la vida. Este reciente
concepto incluye varios niveles de la organización biológica. Abarca a la
diversidad de especies de plantas y animales que viven en un sitio, a su
variabilidad genética, a los ecosistemas de los cuales forman parte estas especies
y a los paisajes o regiones en donde se ubican los ecosistemas. También incluye
los procesos ecológicos y evolutivos que se dan a nivel de genes, especies,
ecosistemas y paisajes.
El concepto fue acuñado en 1985, en el Foro Nacional sobre la Diversidad
Biológica de Estados Unidos. Edward O. Wilson (1929 - ), entomólogo de la
Universidad de Harvard y prolífico escritor sobre el tema de conservación, quien
tituló la publicación de los resultados del foro en 1988 como “Biodiversidad”.
VARIABILIDAD GENÉTICA
La variabilidad genética es una
medida de la tendencia de los
genotipos de una población a
diferenciarse. Los individuos de una
misma especie no son idénticos. Si
bien, son reconocibles como
pertenecientes a la misma especie,
existen muchas diferencias en su
forma, función y comportamiento. En
cada una de las características que
podamos nombrar de un organismo
existirán variaciones dentro de la
especie.
Los casos más evidentes de variabilidad genética de las especies son las
especies domesticadas, en donde los seres humanos utilizamos la variabilidad
para crear razas y variedades de maíces, frijoles, manzanas, calabazas,
caballos, vacas, borregos, perros y gatos, entre otros.
Gran parte de la variación en los individuos proviene de los genes, es decir, es
variabilidad genética. La variabilidad genética se origina por mutaciones,
recombinaciones y alteraciones en el cariotipo (el número, forma, tamaño y
ordenación interna de los cromosomas). Los procesos que dirigen o eliminan
variabilidad genética son la selección natural y la deriva genética.
La variabilidad genética permite la evolución de las especies, ya que en cada
generación solamente una fracción de la población sobrevive y se reproduce
transmitiendo características particulares a su progenie.
Diversidad de Especies
Por diversidad de especies se entiende la variedad de especies existentes en una
región. Esa diversidad puede medirse de muchas maneras, y los científicos no se
han puesto de acuerdo sobre cuál es el mejor método. El número de especies de
una región -su "riqueza" en especies- es una medida que a menudo se utiliza,
pero una medida más precisa, la "diversidad taxonómica" tiene en cuenta la
estrecha relación existente entre unas especies y otras.
Por ejemplo: una isla en la que habitan dos especies de pájaros y una especie de
lagartos tiene mayor diversidad taxonómica que una isla en que hay tres especies
de pájaros, pero ninguna de lagartos. Por lo tanto, aun cuando haya más especies
de escarabajos terrestres que de todas las otras especies combinadas, ellos no
influyen sobre la diversidad de las especies, porque están relacionados muy
estrechamente. Análogamente, es mucho mayor el número de las especies que
viven en tierra que las que viven en el mar, pero las especies terrestres están más
estrechamente vinculadas entre sí que las especies oceánicas, por lo cual la
diversidad es mayor en los ecosistemas marítimos que lo que sugeriría una cuenta
estricta de las especies.
La diversidad de especies se refiere esencialmente al número de diferentes
especies presentes en un área determinada (ecosistema, país, región, continente,
etc.) y se conoce también como "riqueza de especies".
La distribución global de la diversidad de especies depende de varias condiciones:
•
Los gradientes latitudinales: a menor latitud, o sea, con la cercanía hacia la
línea ecuatorial, el número de especies aumenta, mientras que hacia los
polos (mayor latitud) disminuye.
•
Los gradientes de altitud: en los ecosistemas terrestres la diversidad de
especies generalmente disminuye con la altura. En los Andes este
fenómeno es patente desde la Amazonía hacia las alturas andinas, donde
cerca de la línea de nieves perpetuas el número de especies es más bajo.
•
Los gradientes de precipitación: las zonas desérticas y áridas tienen menos
diversidad de especies que las zonas más lluviosas. Esto en nuestro país
se hace evidente comparando la diversidad de especies entre el desierto
costero, las lomas y las vertientes andinas. El desierto costero tiene muy
baja diversidad, que va en aumento en proporción directa con la
precipitación.
Los estudios sobre la diversidad de especies a nivel local y global son aún
incipientes, y se necesitan mayores datos. Se conoce una mínima parte de los
seres vivos existentes y sólo para ciertos grupos (mamíferos, aves, reptiles, peces
y plantas con flores) los conocimientos son bastante completos.
En base a la distribución de las especies a nivel local y mundial, y con fines de
ubicar las áreas más importantes para conservación se determinan varios
aspectos, con prioridad en:
•
Centros de diversidad de especies: especialmente referidos a la diversidad
de todas las especies; la presencia de especies endémicas, y la presencia
de especies en situación crítica.
•
Extinción de especies y áreas críticas: desde el siglo XVII es posible tener
datos sobre extinción de especies y en los últimos decenios se ha recogido
información más detallada al respecto. Se sabe que desde el siglo XVI se
han extinguido unas 484 especies de especies conocidas. Del Perú se
conoce la extinción de la chinchilla silvestre.
DIVERSIDAD DE ECOSISTEMAS
Los ecosistemas son las comunidades de organismos que interactúan y el medio
ambiente en que viven.
El ecosistema se define, también como el conjunto formado por una biocenosis
(biótica) -parte animada de un ecosistema- y un biotopo (abiótica) -parte
inanimada de un ecosistema-. La biocenosis –a su turno- se define como la
comunidad de organismos, plantas y animales, que ocupan determinado hábitat.
Todos los animales, vegetales y microorganismos que viven en un
determinado hábitat forman un biosistema.
Sus relaciones de dependencia, alimentación y desarrollo forman
comunidades que llevan el nombre de biocenosis.
Una biocenosis es, pues, todos los seres vivos que coexisten en un
hábitat y las relaciones que se establecen entre ellos.
En la biocenosis se dan diferentes grados de sociabilidad, dependiendo de la
densidad de especies de un mismo tipo en un lugar. Cada comunidad biocenótica
tiene una estructura horizontal, la sociabilidad, y una estructura vertical, o
estratificación.
No se trata simplemente de ensamblajes de especies, sino de sistemas
combinados de materia orgánica e inorgánica y fuerzas naturales que interactúan
y cambian.
Los ecosistemas se hallan entretejidos de forma intrincada por la cadena
alimentaria y los ciclos de nutrientes.
Son sumas vivientes más grandes que las partes que los integran.
Su complejidad y dinamismo contribuyen a su productividad, pero hacen de su
manejo todo un desafío.
Entre las especies se establecen diferentes tipos de relaciones de
interdependencia, que pueden ser: de competencia, por el espacio, el alimento, la
luz o el agua, o de dependencia.
Los ecosistemas tienden al equilibrio entre las comunidades biocenóticas y el
clima y el suelo. Así, a las relaciones que establecen estas comunidades con el
medio, el clima, la litología, el agua, el suelo y el topoclima, se le llama
ecosistema.
Dentro de cada biocenosis existe, como norma general, una especie vegetal que
destaca sobre las demás por su presencia y abundancia. Esta especie se
desarrolla casi independientemente de su cortejo. El cortejo lo forman todas las
especies que comparten las mismas condiciones generales de vida
Las Grandes Biocenosis Terrestres
Región polar y
subpolar
Estas son las regiones frías de la Tierra. Aquí nos encontramos con dos tipos de
biocenosis: la tundra y la taiga.
Hábitat
templado
El hábitat de los climas templados propiamente dichos es donde progresan: el
bosque caducifolio, típico de Europa, y el bosque mixto de planifolias y coníferas.
La fauna de los bosques templados está sometida al ritmo de las cuatro
estaciones. Los fenómenos más característicos son la hibernación y la migración.
Hábitat
templado
cálido
Éste es también una zona de clima templado, pero ya en la zona de transición con
los climas tropicales. En él podemos diferenciar dos biocenosis fundamentales: el
bosque mediterráneo y el subtropical húmedo.
Hábitat
continental: la
estepa
El clima continental genera formaciones de estepa, en la que dominan las
gramíneas y escasean los árboles.
Hábitat árido
El hábitat árido contiene varias características limitantes para el desarrollo de la
vegetación, los suelos y la fauna: falta el agua, las temperaturas extremas y los
vientos fuertes y violentos.
Hábitat tropical Se caracteriza por tener dos estaciones, una seca y otra húmeda, pero, además,
las temperaturas son altas durante todo el año. Distinguiremos la estepa con
espinosos, el matorral espinoso tropical y el bosque tropical seco y monzónico.
Hábitat
ecuatorial
El clima ecuatorial se caracteriza por las altas temperaturas y las frecuentes
precipitaciones, pero, además, por su estabilidad. Los suelos más comunes son
los ferralíticos, a menudo con caparazón, muy lixiviados, con poco humus y
ácidos. Se ha de distinguir: los bosques ombrófilos y semiombrófilos, el manglar y
la sabana.
A lo largo de la historia el hombre ha sabido utilizar diferentes especies de la
naturaleza como recurso para procurarse alimento, vivienda, vestido, medicinas y
confort. Las primeras modificaciones antrópicas de la biocenosis vienen de la
mano de la agricultura y la ganadería.
Este proceso supuso la selección de determinadas especies, que llevó a la
introducción de especies alóctonas en hábitats donde no existían los frutos
considerados como recurso. De todos modos, es en el siglo XIX cuando parece el
modo de producción capitalista industrial. Esto implica una nueva selección de
especies cultivadas, menos variada.
Cuando se habla de ecosistemas, la escala y el tamaño son esenciales.
Se presume frecuentemente que las áreas con ecosistemas culminantes abrigan
mayor diversidad que las áreas más jóvenes. Sin embargo, un área con un
mosaico de sistemas en diferentes etapas es probablemente más diversa que la
misma región en su punto culminante con tal que cada sistema ocupe un área
grande.
En muchos ejemplos, las actividades humanas mantienen artificialmente
ecosistemas en etapas más jóvenes; así, en regiones que han estado bajo la
influencia humana por períodos largos, especialmente en las regiones templadas,
el mantenimiento de niveles existentes de diversidad puede involucrar el
mantenimiento de por lo menos los paisajes y ecosistemas parcialmente
atribuibles al hombre, juntos con áreas de tamaño adecuado de ecosistemas
naturales en su punto culminante.
Clasificación de ecosistemas del World Resources Institute
Ecosistema de
praderas
Las praderas
albergan por lo
menos a 1.000
millones de seres
humanos y
exhiben algunos
de los fenómenos
naturales más
asombrosos de
mundo: enormes
desplazamientos
migratorios de
grandes manadas
de ñus en África,
caribúes en
América del Norte
y antílopes
tibetanos en Asia.
Ecosistemas de
agua dulce
Por lo menos 1.500
millones de
personas
dependen del agua
subterránea como
su única fuente de
agua de beber.
Ecosistemas
forestales
Agroecosistemas
Ecosistemas
costeros
La agricultura
enfrenta un
Hoy en día,
El 40% de la
desafío enorme
muchos países en
población del
pues debe
desarrollo
mundo vive en un satisfacer las
dependen de la
radio de 100 km de necesidades de
extracción de
la línea costera, un 1.700 millones de
madera para
área que
personas más en
obtener divisas. Al
escasamente
los próximos 20
mismo tiempo,
representa el 20% años
millones de
de la masa
personas en los
terrestre.
países tropicales
todavía se valen de
los bosques para
satisfacer todas
sus necesidades.
CONCLUSIÓN
Podemos concluir diciendo la pérdida de la biodiversidad equivale a la pérdida de
la calidad de nuestra vida como especie y, en caso extremo, nuestra propia
extinción.
Ya que el valor esencial de la biodiversidad reside en que es resultado de un
proceso histórico natural de gran antigüedad. Por esta razón, la diversidad
biológica tiene el inalienable derecho de continuar su existencia. El hombre y su
cultura, como producto y parte de esta diversidad, debe velar por protegerla y
respetarla.
Su perdida es el más importante e irreversible, efecto directo o indirecto de las
actividades humanas.
Por mucho tiempo hemos disfrutado gratis de los productos de la naturaleza,
ahora conocidos como "servicios ambientales", como el oxígeno, el agua limpia, el
suelo fértil, la polinización de flores que resulta en la producción de frutos, entre
otros muchos. Sin embargo, no les hemos dado el valor necesario, hasta ahora
que empiezan a ser escasos.
2.4
HIDROSFERA
La hidrosfera engloba la totalidad de las aguas del planeta, incluidos los océanos,
mares, lagos, ríos y las aguas subterráneas.
Este elemento juega un papel fundamental al posibilitar la existencia de vida sobre
la Tierra, pero su cada vez mayor nivel de alteración puede convertir el agua de un
medio necesario para la vida en un mecanismo de destrucción de la vida animal y
vegetal.
A) El agua salada: océanos y mares
El agua salada ocupa el 71% de la superficie de la Tierra y se distribuye en los
siguientes océanos:
El océano Pacífico, el de mayor extensión, representa la tercera parte de la
superficie de todo el planeta. Se sitúa entre el continente americano y Asia y
Oceanía.
El océano Atlántico ocupa el segundo lugar en extensión. Se sitúa entre América y
los continentes europeo y africano.
El océano Índico es el de menor extensión. Queda delimitado por Asia al Norte,
África al Oeste y Oceanía al Este.
El océano Glacial Ártico se halla situado alrededor del Polo Norte y está cubierto
por un inmenso casquete de hielo permanente.
El océano Glacial Antártico rodea la Antártida y se sitúa al Sur de los océanos
Pacífico, Atlántico e Índico.
Los márgenes de los océanos cercanos a las costas, más o menos aislados por la
existencia de islas o por penetrar hacia el interior de los continentes, suelen recibir
el nombre de mares.
B) El agua dulce
El agua dulce, que representa solamente el 3% del agua total del planeta, se
localiza en los continentes y en los Polos. En forma líquida en ríos, lagos y
acuíferos subterráneos y en forma de nieve y hielo en los glaciares de las cimas
más altas de la Tierra y en las enormes masas de hielo acumuladas entorno al
Polo Norte y sobre la Antártida.
C) El ciclo del agua
En la Tierra el agua se encuentra en permanente circulación, realiza un círculo
continuo llamado ciclo del agua.
El agua de los océanos, lagos y ríos y la humedad de las zonas con abundante
vegetación se evapora debido al calor. Cuando este vapor de agua se eleva
comienza a enfriarse y a condensarse en forma de nubes, hasta que finalmente
precipita en forma de lluvia, nieve o granizo.
El ciclo se cierra con el retorno del agua de las precipitaciones al mar, la
escorrentía, a través de las corrientes superficiales, los ríos, y de los flujos
subterráneos del agua infiltrada en el subsuelo, los acuíferos.
LITOSFERA
La litosfera es la capa externa de la Tierra y está formada por materiales sólidos,
engloba la corteza continental, de entre 20 y 70 Km. de espesor, y la corteza
oceánica o parte superficial del manto consolidado, de unos 10 Km. de espesor.
Se presenta dividida en placas tectónicas que se desplazan lentamente sobre la
astenosfera, capa de material fluido que se encuentra sobre el manto superior.
Las tierras emergidas son las que se hallan situadas sobre el nivel del mar y
ocupan el 29% de la superficie del planeta. Su distribución es muy irregular,
concentrándose principalmente en el hemisferio norte o continental, dominando los
océanos en el hemisferio sur o marítimo.
Las tierras emergidas se hallan repartidas en seis continentes:
Asia: Es el continente de más superficie, se extiende de Este a Oeste en el
hemisferio norte, aunque su parte meridional se interna en la zona tropical.
Europa: En realidad es una gran península situada al Oeste del continente asiático
o euroasiático. La separación entre Asia y Europa se ha fijado de forma
convencional en los montes Urales, el río Ural y la cordillera del Cáucaso.
África: Situado al Suroeste de Asia y Sur de Europa, predominantemente en la
zona intertropical, pero es mucho más ancho en el hemisferio norte que en el
hemisferio sur.
América: Este continente se organiza en sentido de los meridianos y se distribuye
tanto en el hemisferio norte como en el hemisferio sur. Debido a esta distinta
situación de sus partes y a sus formas diferenciadas, suele hablarse de dos
subcontinentes o incluso de dos continentes, América del Norte y América del Sur.
La Antártida: Es el único continente cubierto permanentemente por una gran masa
de hielo, ya que se sitúa en su totalidad en el Polo Sur.
Oceanía: No es un conjunto continuo de tierras emergidas como el resto de los
continentes, está formado por un número muy elevado de islas de tamaños y
formas muy distintas, situadas al Sureste de Asia y en el océano Pacífico.
ATMOSFERA
La Tierra está rodeada por una envoltura gaseosa llamada atmósfera, que es
imprescindible para la existencia de vida, pero su contaminación por la actividad
humana puede provocar cambios que repercutan en ella de forma definitiva.
La atmósfera tiene un grosor aproximado de 1.000 km. y se divide en capas de
grosor y características distintas:
La troposfera es la capa inferior que se
halla en contacto con la superficie de la
Tierra y alcanza un grosor de unos 10
km. Hace posible la existencia de
plantas y animales, ya que en su
composición se encuentran la mayor
parte de los gases que estos seres
necesitan para vivir. Además, aquí
ocurren todos los fenómenos
meteorológicos y actúa de regulador de
la temperatura del planeta, ya que el
denominado efecto invernadero hace
que la temperatura no llegue a valores
extremos ni aumente o disminuya
bruscamente, al ser absorbido el calor
por las partículas de vapor de agua de
las nubes.
La estratosfera es la capa intermedia,
situada entre los 10 y los 80 km. En la
estratosfera la temperatura aumenta y el
aire se enrarece hasta tal punto que los
seres vivos no podrían sobrevivir en
ella. Sin embargo, es fundamental por
tener la función de filtro de las
radiaciones solares ultravioleta, gracias
a la existencia en ella de la denominada
capa de ozono.
La ionosfera es la capa superior y la de
mayores dimensiones, en ella el aire se
enrarece cada vez más y la temperatura
aumenta considerablemente.
CONCLUSIÓN
Las capas de la tierra nos proveen de muchos recursos naturales que son
indispensables para nuestra supervivencia en este planeta, cada una de las capas
de nuestro planeta nos provee una diferente cosa igual de importante que la otra.
Entre todas las capas pasadas mencionadas se encuentra la capa formada por los
seres vivos que se encuentran en la litosfera, atmósfera e hidrosfera que es
llamada biosfera.
La Litosfera, hidrosfera y atmosfera, todas estas capas forman parte de los
recursos naturales que son de gran importancia para el ser humano y aunque son
de gran importancia para el ser humano este sigue contaminándolas y no tomando
conciencia del daño que se les hace creando un gran deterioro ambiental.
Los recursos naturales son algo que necesitamos arduamente para poder
sobrevivir en este planeta, pero el ser humano no se mide y va deteriorando de
manera increíble el planeta, el creciente aumento poblacional también forma parte
de esto, tal vez si tuviéramos una adecuada educación ambiental desde pequeños
se nos haría algo habitual y aunque la población creciera siento responsables del
cuidado de medioambiente reduciríamos la contaminación.
2.5
SERVICIOS AMBIENTALES
Los Servicios Ambientales del Bosque (SAB) son los beneficios que la gente
recibe de los diferentes ecosistemas forestales, ya sea de manera natural o por
medio de su manejo sustentable, ya sea a nivel local, regional o global.
Los servicios ambientales influyen directamente en el mantenimiento de la vida,
generando beneficios y bienestar para las personas y las comunidades.
Son ejemplos de servicios ambientales del bosque:
Captación y filtración de agua;
Mitigación de los efectos del cambio climático;
Generación de oxígeno y asimilación de diversos contaminantes;
Protección de la biodiversidad;
Retención de suelo;
Refugio de fauna silvestre;
Belleza escénica, entre otros.
Regularmente, los servicios ambientales son gratuitos para la gente que disfruta
de ellos, mientas que los dueños y poseedores de terrenos forestales que los
proveen no son compensados en forma alguna por ello.
Los servicios ambientales se dice que son beneficios intangibles (aquellos que
sabemos existen, pero cuya cuantificación y valoración resultan complicadas) ya
que, a diferencia de los bienes o productos ambientales, como es el caso de la
madera, los frutos y las plantas medicinales de los cuales nos beneficiamos
directamente, los servicios ambientales no se “utilizan” o “aprovechan” de manera
directa, sin embargo nos otorgan beneficios, como tener un buen clima, aire
limpio, o simplemente un paisaje bello.
Si bien el concepto servicios ambientales es relativamente reciente y permite
tener un enfoque más integral para interactuar con el entorno, en realidad las
sociedades se han beneficiado de dichos servicios desde sus orígenes, la
mayoría de las veces sin tomar conciencia de ello.
¿POR QUÉ SON IMPORTANTES LOS SERVICIOS AMBIENTALES DEL
BOSQUE?
La subsistencia y el desarrollo de toda sociedad dependen del aprovechamiento
sustentable de sus recursos naturales. Sin embargo, el ser humano en su carrera
por conquistar y poseer ha provocado la extinción de muchas especies animales
y vegetales y ha deteriorado su entorno natural; en muchos casos; de manera
irreversible.
Por ello, cada vez es mayor la importancia de
fomentar la conciencia sobre la relación que
existe entre los recursos naturales, la salud
planetaria y la especie humana. Hoy, la
naturaleza y su conservación son pilares del
desarrollo sustentable y revisten importancia
vital para ciudadanos, pueblos y gobiernos.
Por esta razón, es imprescindible una
valoración justa de los ecosistemas y los servicios ambientales que éstos
prestan, porque esta valoración puede permitir que las mujeres y los hombres
que habitan las comunidades indígenas y rurales mejoren su calidad de vida y
conserven su riqueza natural, y que las poblaciones urbanas comprendan que
tanto su calidad de vida como sus actividades económicas están relacionadas
con el estado que guardan los recursos naturales.
Por ello, es un acto de justicia que los usuarios (beneficiarios) de estos servicios
ambientales contribuyamos a revertir los procesos de deterioro que los propios
seres humanos hemos provocado, entre ellos el aceleramiento del cambio
climático.
Servicios ambientales.
INTRODUCCION.
Los procesos ecológicos de los ecosistemas naturales suministran a la humanidad
una gran e importante gama de servicios gratuitos de los que dependemos. Estos
incluyen: mantenimiento de la calidad gaseosa de la atmósfera (la cual ayuda a
regular el clima); mejoramiento de la calidad del agua; control de los ciclos
hidrológicos, incluyendo la reducción de la probabilidad de serias inundaciones y
sequías; protección de las zonas costeras por la generación y conservación de los
sistemas de arrecifes de coral y dunas de arena; generación y conservación de
suelos fértiles; control de parásitos de cultivos y de vectores de enfermedades;
polinización de muchos cultivos; disposición directa de alimentos provenientes de
medios ambientes acuáticos y terrestres; así como el mantenimiento de una vasta
“librería genética” de la cual el hombre ha extraído las bases de la civilización en la
forma de cosechas, animales domesticados, medicinas y productos industriales.
Por cientos de años la humanidad no le dio importancia a la generación de estos
servicios ya que se consideraban inagotables. Actualmente, es claro que es
necesario conservar a los ecosistemas en el mejor estado para que sigan
proporcionándonos estos servicios.
DESARROLLO
Los servicios ambientales influyen directamente en el mantenimiento de la
vida, generando beneficios y bienestar para las personas.
Los servicios ambientales son los beneficios que la gente recibe de los diferentes
ecosistemas como selvas, humedales, bosques, desiertos, entre otros hábitats, ya
sea de manera natural o por medio de su manejo sustentable, ya sea en el ámbito
local, regional o global. Los servicios ambientales influyen directamente en el
mantenimiento de la vida, generando beneficios y bienestar para las personas y
las comunidades. Son ejemplos de servicios ambientales la captación y filtración
de agua; mitigación de los efectos del cambio climático; generación de oxígeno y
asimilación de diversos contaminantes; protección de la biodiversidad; retención
de suelo; refugio de fauna silvestre; belleza escénica, entre otros. Los servicios
ambientales son gratuitos para la gente que disfruta de ellos, mientras que los
dueños y poseedores de terrenos forestales que los proveen no son compensados
en forma alguna por ello.
Los servicios ambientales se dice que son beneficios intangibles (aquellos que
sabemos existen, pero cuya cuantificación y valoración resultan complicadas) ya
que, a diferencia de los bienes o productos ambientales, como es el caso de la
madera, los frutos y las plantas medicinales de los cuales nos beneficiamos
directamente, los servicios ambientales no se “utilizan” o “aprovechan” de manera
directa, sin embargo nos otorgan beneficios, como tener un buen clima, aire
limpio, o simplemente un paisaje bello. Si bien el concepto servicios ambientales
es relativamente reciente y permite tener un enfoque más integral para interactuar
con el entorno, en realidad las sociedades se han beneficiado de dichos servicios
desde sus orígenes, la mayoría de las veces sin tomar conciencia de ello.
¿Por qué son importantes los servicios ambientales?
La subsistencia y el desarrollo de toda sociedad dependen del aprovechamiento
sustentable de sus recursos naturales. Sin embargo, el ser humano en su carrera
por conquistar y poseer ha provocado la extinción de muchas especies animales y
vegetales y ha deteriorado su entorno natural; en muchos casos, de manera
irreversible. Cada vez es mayor la importancia de fomentar la conciencia sobre la
relación que existe entre los recursos naturales, la salud planetaria y la especie
humana. Hoy, la naturaleza y su conservación son pilares del desarrollo
sustentable y revisten importancia vital para ciudadanos, pueblos y gobiernos. Por
esta razón, es imprescindible una valoración justa de los ecosistemas y los
servicios ambientales que éstos prestan, porque esta valoración puede permitir
que las mujeres y los hombres que habitan las comunidades indígenas y rurales
mejoren su calidad de vida y conserven su riqueza natural, y que las poblaciones
urbanas comprendan que tanto su calidad de vida como sus actividades
económicas están relacionadas con el estado que guardan los recursos naturales.
Por ello, es un acto de justicia que los usuarios (beneficiarios) de estos servicios
ambientales contribuyamos a revertir los procesos de deterioro que los propios
seres humanos hemos provocado, entre ellos el aceleramiento del cambio
climático.
Qué es la vulnerabilidad ambiental.
Seguro que alguna vez has escuchado que hay personas más vulnerables a un
virus o a otro tipo de enfermedad, es decir, que son aquellas que tienen menor
capacidad de resistencia al virus, o al patógeno del que se trate el caso, al
contagiarse, por lo que son más débiles o vulnerables frente a este. La
vulnerabilidad se puede aplicar en diferentes campos: a la educación, a la cultura,
a la economía, a la sociedad, al medio ambiente, entre otros. En este artículo de
Ecología Verde se hablará de qué es la vulnerabilidad ambiental, dando su
definición y algunos ejemplos de ella. Además, se explicará la diferencia entre
riesgo y vulnerabilidad ambiental.
La vulnerabilidad ambiental se refiere al grado de resistencia de un sistema,
subsistema o componente de un sistema ante los dos grandes problemas
medioambientales que se están dando en todo el planeta: el calentamiento global
y la pérdida de biodiversidad. Ambos causados directa o indirectamente por
actividades antrópicas. Aunque también con vulnerabilidad ambiental se hace
referencia al grado de resistencia del ambiente ante fenómenos naturales, como
por ejemplo un terremoto. La vulnerabilidad ambiental depende de dos factores:
• Exposición: es el nivel en el que la naturaleza se encuentra expuesta a los
problemas medioambientales. Por ejemplo, un ave que vive en un entorno natural
donde la caza es ilegal es menos vulnerable que aquella que vive en un lugar
donde la caza no tiene ningún tipo de control.
• Capacidad adaptativa: es la habilidad que tiene la naturaleza para ajustar su
propio funcionamiento para adaptarlo a los cambios que se producen con el fin de
reducir los daños potenciales. Por ejemplo, algunas especies se adaptan
fisiológicamente a los cambios de temperatura provocados por el calentamiento
global, a través de un proceso de aclimatación.
La naturaleza es muy amplia y es por eso que no todas las zonas presentan el
mismo grado de vulnerabilidad. Aquellas más vulnerables cuentan con menor
capacidad para dar una respuesta a los cambios, además de encontrarse más
expuestas, ampliando así la cantidad de daños y un mayor tiempo de
recuperación. Sin embargo, aquellas zonas menos vulnerables tienen mayor
capacidad para dar una respuesta y se encuentran menos expuestas, recibiendo
así menor daño y teniendo una recuperación en el tiempo menor. A continuación,
expondremos varios ejemplos de ecosistemas o especies muy vulnerables y poco
vulnerables.
Ejemplos de vulnerabilidad ambiental.
Estos son algunos ejemplos de vulnerabilidad ambiental, enfocándonos en
ecosistemas o especies con una vulnerabilidad ambiental elevada, es decir, que
se encuentran en peligro de extinción o en la categoría de Endangered:
• Los organismos bentónicos (como las estrellas de mar, los pepinos de mar, las
ofiuras, las almejas, las ostras...) que habitan los ecosistemas marinos del
antártico son especialmente vulnerables, debido a que la tasa de crecimiento de
estos es muy lenta si la comparamos con los organismos de otras áreas más
templadas. En esta zona se practica la pesca que tendrá unos efectos más
dañinos sobre estos ecosistemas, ya que al tener una tasa de crecimiento más
lenta necesitaran más tiempo para poder recuperarse.
• El Amazonas, de gran interés ecológico por su biodiversidad, se encuentra en un
alto grado de vulnerabilidad, así como la mayoría de las especies que lo habitan,
ya que está siendo explotado por diferentes actividades antrópicas, como son la
ganadería, agricultura, la deforestación, la minería, la construcción de
hidroeléctricas y de carreteras. Aquí te explicamos más sobre la Deforestación del
Amazonas, sus causas y consecuencias.
• Los arrecifes de coral son ecosistemas que como cualquier ecosistema se
enfrenta al calentamiento global, y estos tiene que ajustarse para resistir estos
cambios ambientales. Aunque si a esta problemática ambiental le sumamos las
amenazas que sufren los arrecifes por acciones como la pesca y la contaminación
de las escorrentías. Nos encontramos con un ecosistema más vulnerable teniendo
así menos capacidad para resistir al calentamiento global.
CONCLUSION.
En general, los servicios ambientales generados por el bosque tienen un alto valor
económico y significan una parte importante del valor económico total del
ecosistema. La evaluación económica de los servicios ambientales generados por
el bosque es una herramienta útil que provee elementos para la toma de
decisiones.
BIBLIOGRAFIA.
• Miguel Esparza y Marco A. Díaz. Vulnerabilidad ambiental y región: algunos
elementos para la reflexión. VOLUMEN II, NÚMERO 6 OBSERVATORIO DEL
DESARROLLO, 2019, pp. 26-28