Coaching Transpersonal El coaching profesional es un proceso de acompañamiento reflexivo y creativo que inspira al cliente a maximizar su potencial personal y profesional. El Coach basa su consulta en una conversación integradora que despierta soluciones en el cliente. La visión transpersonal tiene en cuenta al ser humano más allá de la persona en su versión física, mental y espiritual. La psicología transpersonal es una rama de la psicología que integra los aspectos espirituales y trascendentes de la experiencia humana con el marco de trabajo e investigación de la psicología moderna. El término transpersonal significa “más allá” o “a través” de lo personal, y se refiere a las experiencias, procesos y eventos que transcienden la habitual sensación de identidad, permitiendo experimentar una realidad mayor y más significativa. Sus investigadores estudian lo que consideran los potenciales más elevados de la humanidad y del reconocimiento, comprensión y actualización de los estados modificados de consciencia, unitivos, espirituales y trascendentes. Lo transpersonal significó la reconciliación de la Psicología con las creencias orientales y en general con todo tipo de creencias espirituales y de crear estados ampliados de conciencia para tratar al paciente. La psicología transpersonal considera temas como: las experiencias cumbre que decía Maslow, experiencias místicas, trances sistémicos, y experiencias transcendentes y metafísicas de la vida, expansión de la consciencia individual, conocimiento interior profundo, encuentro del sentido de vida personal y último, identificación colectiva con las demás personas y el entorno, estados amplificados de amor, compasión y fraternidad universal. El psicólogo estadounidense Ken Wilber (1949-) distingue tres niveles en el desarrollo de esta conciencia: • El nivel prepersonal: es el momento del desarrollo en que los seres humanos aún no tienen su propia mente (bebés que todavía no tienen una teoría de la mente ni han forjado su personalidad) • El nivel personal: que se alcanza cuando el individuo toma conciencia de que es una persona que piensa diferente a otras. • El nivel transpersonal: el nivel que se alcanza, promedio, del desarrollo espiritual, y que consiste en transcender la identificación con el cuerpo y la mente, para alcanzar un nivel de consciencia social, ecológica y espiritual, mayor. El movimiento transpersonal trabaja sobre el estudio científico de los estados no ordinarios de conciencia, continúa con el descubrimiento por parte de la psicología de las religiones y el estudio místico comparado. Sus orígenes se encuentran en los psicólogos influenciados por Oriente (Jung, Assagioli, Desoille, Maslow). Este estudio ha recibido la confirmación de muchos científicos, que afirman encontrar en sus trabajos la presencia de una Conciencia-Energía. Propone un nuevo paradigma científico, desarrollando la unidad subyacente entre el hombre y el universo en una visión holística. El estudio de estos estados alterados de conciencia indican que existe con seguridad una mayor capacidad humana que la definida en la corriente principal de las disciplinas occidentales que se ocupan de la conducta y de la salud mental. De nada nos sirven ya los antiguos enfoques de la psicología en donde las experiencias místicas, los estados de éxtasis o de iluminación eran considerados neuróticos o alucinatorios. El modelo Transpersonal no trata de remplazar ni poner en tela de juicio la validez de los anteriores modelos, sino ampliar el marco de nuestra concepción de la naturaleza humana, integrando como saludables las experiencias de conciencia expandida que hasta ahora eran consideradas patológicas, atendiendo a la necesidad espiritual del hombre, y además, explicar las modernas teorías de la Relatividad y física cuántica desde una visión psicológica, lo cual deja indudablemente a la Psicología Transpersonal como el modelo más correcto y completo existente dentro del marco de la ciencia. La Psicología Transpersonal se interesa por la expansión del campo de la investigación psicológica hasta incluir el estudio de los estados de salud y bienestar psicológicos de nivel óptimo. Reconoce la posibilidad de experimentar una amplia gama de estados de conciencia, en algunos de los cuales la identidad puede ir más allá de los límites habituales del EGO y de la personalidad, algo similar al Budismo. La Psicología Transpersonal tiene un enfoque Integral, siendo éste un modo de mirar toda la realidad y no sólo los aspectos psicológicos. Abarca distintas disciplinas: Psicología, Psiquiatría, Antropología, Sociología, Arte, Educación, Medicina, Física Cuántica, Ciencias de la Comunicación, etc.). El eje central es el considerar como fundamento de esa mirada la Unidad Trascendente de todo lo que existe, el Sentido de lo Sagrado que sostiene toda la realidad visible e invisible. La Psicología Transpersonal fue naciendo como una continuación natural de la Humanista, adscribiendo a esa denominación en virtud de abarcar aquellos aspectos del universo interno que no habían sido tenidos en cuenta por Occidente: lo que está más allá del Ego, lo Trascendente. Esta Psicología fue formalmente instaurada por Abraham Maslow y Anthony Sutich en 1969 con la publicación del Journal of Transpersonal Psychology, seguida de la fundación de la Association for Transpersonal Psychology en California (EEUU) en 1972. Posteriormente, destacados terapeutas e investigadores fueron desarrollando sus principales conceptos. Entre ellos cabría destacar a Ken Wilber, Stanislav Grof, Frances Vaughan, Roger Walsh, Charles Tart, John Welwood, y otros. Hoy en día, el enfoque Transpersonal se ha expandido por los cinco continentes, irradiándose a través de Asociaciones y Centros de Estudios en distintos países del mundo. Así, se ha vuelto el marco de trabajo de profesionales y científicos de las más variadas áreas, a tal punto que los congresos y convenciones que reúnen a quienes adscriben a este paradigma, convocan a terapeutas, científicos, filósofos, educadores y hasta a líderes religiosos de los más variados sectores, en consonante búsqueda de lograr un enfoque integral del conocimiento humano. Uno de los autores que ha desarrollado con mayor profundidad los estudios de conciencia, ha sido Ken Wilber, el cual propone un modelo espectral de la conciencia, formado por distintos niveles, que se caracterizan por poseer una sensación de identidad individual propia y fácilmente reconocible, que, partiendo de la identidad suprema de la conciencia cósmica va estrechándose progresivamente a través de una serie de gradaciones o bandas diferentes hasta terminar circunscrita a la sensación de identidad radicalmente limitada propia de la conciencia egoica. Estos niveles son: Nivel de la Mente: En este nivel nos identificamos con el universo, con la totalidad, es decir, somos el todo. Este nivel no es un estado anormal, ni tampoco un estado alterado de la conciencia sino más bien el único estado de conciencia real. Existen bandas transpersonales que van más allá de experiencias del ego donde la persona no es consciente de su identidad con la totalidad y en donde se producen las experiencias transpersonales, como por ejemplo experiencias de muerte y renacimiento, identificación con la consciencia de otras personas, grupos de individuos o toda la humanidad, e inclusive puede extenderse más allá de las fronteras humanas. Nivel existencial: Es en este nivel donde queda trazada la línea divisoria entre el self y el otro, entre el organismo y el medio, el nivel en que se manifiesta el pensamiento racional y la voluntad personal, en donde el individuo se identifica exclusivamente con la totalidad del organismo psicofísico existente en el tiempo y en el espacio. En este nivel se encuentran las bandas biosociales (internalización de condicionamientos culturales, convencionalidades sociales, relaciones familiares, etc.), las cuales constituyen los límites superiores del nivel existencia que tiñen y moldean en profundidad la sensación básica de la existencia del organismo. Nivel de ego: Para esta concepción, el "ego" es lo que en psicología se entiende como "estructura de personalidad" - o disfraz adaptativo a la realidad física de este mundo-, la construcción personal que nos sume en la ilusión de la separación, esencia del sufrimiento humano. El "ego" incluye tanto la experiencia de vida o condicionamiento, la transmisión genética de patrones actitudinales y conductuales de progenitores y ancestros y, según la teoría de la reencarnación, también los patrones correspondientes a existencias anteriores, en otros cuerpos y contextos (Celis, 1998). En este nivel, la persona no se halla identificada con el organismo psicosomático, sino que se identifica exclusivamente con una representación mental mas o menos aproximada del organismo global, es decir, en este nivel el individuo se identifica con el ego, con una imagen de si mismo y el organismo queda dividido en una psique y un cuerpo. Nivel de la sombra (o de la persona): Nivel en que la persona se identifica con una imagen empobrecida e inexacta de uno mismo, ya que reduce más su identidad a solo parte del ego, relegando al mismo tiempo a la sombra, aquellas otras tendencias psíquicas que resultan dolorosas e indeseables. Este modelo es una descripción muy abreviada del espectro de la conciencia y como tal no constituye sino un reflejo parcial del flujo y la interacción existente entre las diversas bandas que lo componen. La conciencia transpersonal según S. Grof es infinita y trasciende los límites del tiempo y el espacio, límites universales que en realidad son límites de nuestra mente. La conciencia sería transpersonal porque sería independiente de nosotros, siendo una propiedad del universo trascendería el cerebro y nuestros sentidos físicos, pero sí mediatizado por estos en la experiencia cotidiana. Por lo tanto, la conciencia de uno esta conectada a la de los demás. Stanislav Grof dijo: "Si queremos comprender el reino de lo transpersonal debemos concebir la conciencia de una manera completamente nueva. Sólo entonces podremos atisbar más allá de la creencia de que la conciencia es un producto del cerebro humano, que se halla confinada en el interior de la estructura ósea de nuestro cráneo y que, en consecuencia, es el fruto de nuestra vida individual. En la medida en que aceptemos la noción de lo transpersonal podremos empezar a considerar que la conciencia también existe fuera, que es independiente de nosotros y que no se halla intrínsecamente ligada a la materia. Contrariamente a lo que parece mostrarnos la experiencia cotidiana, la conciencia es independiente de nuestros sentidos físicos, aunque se halle, no obstante, mediatizada por ellos en nuestra percepción cotidiana de la vida." "Por más que lo intentemos somos incapaces de liberarnos de los prejuicios impuestos por la cultura y por lo que suponemos que es el sentido común. No obstante, para sostener estas ilusiones debemos seguir ignorando el amplio cuerpo de observaciones y datos que nos proporciona la moderna investigación sobre la conciencia y otras disciplinas científicas que parecen confirmar la evidencia de que el universo y el psiquismo humano carecen de límites. Cada uno de nosotros está conectado y, al mismo tiempo, es una expresión de la totalidad de la existencia." "No hace más de veinte años que la conciencia transpersonal se ha convertido en objeto de la investigación científica rigurosa. Antes de esa fecha las experiencias transpersonales sólo tenían sentido dentro del marco de lo espiritual, lo místico, lo religioso, lo mágico y lo paranormal, un dominio, por tanto, privativo de los sacerdotes y los místicos y carente de todo interés para los científicos". En la actualidad, la física moderna ha ayudado a comprender mejor a las filosofías milenarias y dándole un mayor prestigio a la psicología transpersonal. Por eso, se puede decir “paradigma transpersonal”, porque la comunidad científica poco a poco comienza a identificarse con lo transpersonal. Lo transpersonal implica una ampliación de la conciencia que trasciende las fronteras corporales y mentales, englobando todo el espectro de la existencia. Esto se debe a que es una ilusión mental la diferencia entre nosotros y el universo. Y como he dicho anteriormente, la física moderna (ej. Einstein) parece estar de acuerdo en este sentido con las culturas orientales. Por lo tanto, la expansión de la conciencia desdibujaría la ilusión de la separabilidad entre los humanos y el medio, y nos conectaría con la unidad o la totalidad. En este sentido, podríamos afirmar que la psicología transpersonal es una disciplina que se adecua perfectamente a los modernos descubrimientos científicos. Por lo tanto, como dijo Rupert Sheldrake, el cerebro no sería el productor de conciencia como siempre se dijo, sino un receptor de conciencia. Coach Transpersonal es una carrera con un criterio equilibrado entre el arte de preguntar y la modificación de conductas. Es un camino para llegar a ser un individuo, es decir alguien que no está dividido. Una persona íntegra en estado de completitud.