Subido por psanchez

03 - Biología i antropología

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UD4- La filosofía de Aristóteles
3. Biología i antropología
3.1. Las sustancias vivas i el alma
“El alma es aquello por lo que, primaria y radicalmente, vivimos, sentimos y
razonamos”
Aristóteles, Del Alma, II, 1
“Apliquemos lo que veníamos diciendo a las partes de un cuerpo vivo. Si el ojo, en
efecto, fuera un animal, la vista sería su alma, porque ella es la sustancia y razón
del ojo, y el ojo es la materia de la vista. Y si a ese ojo le faltase la vista, ya no habría
ojo, sino sólo la palabra que podría aplicarse a un ojo de piedra o a un ojo pintado”
Aristóteles, Del Alma, II, 412b
«En consecuencia, todo cuerpo natural dotado de vida será sustancia, y lo será
precisamente en el sentido de sustancia compuesta. Pero ya que se trata
precisamente de un cuerpo de una determinada especie, esto es que tiene vida, el alma
no es el cuerpo, ya que el cuerpo no es una de las determinaciones de un sujeto, sino
más bien el cuerpo es sujeto y materia. Necesariamente pues, el alma es sustancia,
en el sentido que es forma de un cuerpo natural que tiene la vida en potencia. Ahora,
tal sustancia es acto, y por tanto el alma es acto del cuerpo que se ha dicho […] el
alma es el acto primero de un cuerpo natural que tiene la vida en potencia»
Aristóteles, Del alma, II, 1, 412 a 15-28.
3.2. Características y funciones del alma
3.2.1. Función vegetativa (reproducción, nutricio i crecimiento)
3.2.2. Función sensitiva y motriz (sensaciones, pasiones i movimiento)
3.2.3.L’ànima racional
3.2.4. Zoon logikos i zoon politikos
3.2.5. La felicidad y la contemplación
(…) Tal vida, sin embargo, sería superior a la de un hombre, pues el hombre viviría
de esta manera no en cuanto hombre, sino en cuanto que hay algo divino en él; y la
actividad de esta parte divina del alma es tan superior al compuesto humano como
lo es su actividad respecto de la actividad de las otras virtudes. Si, pues, la mente es
divina respecto del hombre, también la vida según ella será divina respecto de la vida
humana. Pero no hemos de seguir los consejos de algunos que dicen que, siendo
hombres, debemos pensar solo humanamente y, siendo mortales, ocuparnos sólo de
las cosas mortales, sino que debemos, en la medida de lo posible, inmortalizarnos y
hacer todo esfuerzo para vivir de acuerdo con lo más excelente que hay en nosotros;
pues, aun cuando esta parte sea pequeña en volumen, sobrepasa a todas las otras en
poder y dignidad. Y parecería también, que todo hombre es esta parte, si, en verdad,
ésta es la parte dominante y la mejor; por consiguiente, sería absurdo que un hombre
no eligiera su propia vida, sino la de otro. Y lo que dijimos antes es apropiado también
ahora: lo que es propio de cada uno por naturaleza es lo mejor y lo más agradable
Història de la Filosofia
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UD4- La filosofía de Aristóteles
para cada uno. Así, para el hombre, lo será la vida conforme a la mente, si, en verdad,
un hombre es primariamente su mente. Y esta vida será también la más feliz.
Ética a Nicómaco, X, 7, 1177 b 27-1178 a 2
3.2.6. El proceso de abstracción
3.2.7. Propter episteme o ciencia primera
«Hay una ciencia que considera el ente en cuanto ente (τὸ ὂν ᾗ ὂν) y las propiedades
que le competen en cuanto tal. Y esta ciencia no se identifica con ninguna de las
que llamamos particulares, pues ninguna de las otras ciencias considera el ente en
cuanto ente, en universal, sino que, después de haber delimitado alguna parte de él,
cada una estudia las características de esa parte»
Metafísica, IV, 1, 1003 a 21-25.
«Es evidente que el estudio de estos axiomas entra en el ámbito de aquella única
ciencia, esto es la ciencia del filósofo. En efecto, ellos valen para todos los entes, y no
son propiedades peculiares de algún género particular de entes con exclusión de los
demás. Y todos se sirven de estos axiomas, porque son propios del ente en cuanto
ente, y todo género de realidad es ente»
Metafísica, IV, 3, 1005 a 20-25.
3.2.8. Lógica i les categorías
«Es imposible, en efecto, que el mismo atributo, a un tiempo, pertenezca y no
pertenezca a una misma cosa, según el mismo sentido (con todas las demás
puntualizaciones que se podrían añadir con miras a las dificultades lógicas). Éste
es, pues, el más firme de todos los principios […]. Es imposible, en efecto, que alguien
crea que una misma cosa es y no es, según en opinión de algunos dice Heráclito
[…]. Por eso todas las demostraciones se remontan a esta última noción, porque ella,
por su naturaleza, constituye el principio de todos los demás axiomas»
3.2.9. Clasificación de los diferentes saberes
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