El autor ofreció la primera definición antropológica de cultura, que fue crucial en el desarrollo de la idea de la antropología como ciencia. También es conocido por su análisis de las culturas primitivas, el desarrollo de teorías relativas a las creencias animistas primitivas y su noción de supervivencias, que utilizó para mostrar cómo las prácticas culturales del presente se deben a menudo a supersticiones primitivas desechadas hace tiempo. Para Tylor, el concepto de animismo era una respuesta a la pregunta: "¿Cuál es la forma más rudimentaria de religión que todavía puede llevar ese nombre?" Había aprendido a dudar de los informes dispersos sobre pueblos "tan bajos en cultura como para no tener ninguna concepción religiosa". Pensaba que la religión estaba presente en todas las culturas, debidamente observadas, y que podría llegar a estarlo en todas partes. Sin embargo, lejos de suponer que algún tipo de religión es la piedra angular de toda cultura, sostenía la idea de una etapa pre religiosa en la evolución de las culturas y creía que podría encontrarse una tribu en esa etapa. Para proceder a un estudio sistemático del problema, necesitaba una "definición mínima de religión" y la encontró en "la creencia en seres espirituales". Si se podía demostrar que ningún pueblo carecía de esa creencia mínima, entonces se sabría que toda la humanidad había pasado ya el umbral hacia "el estado religioso de la cultura". Para Tylor, la antropología era una "ciencia de la cultura", un sistema para analizar los elementos existentes de la civilización humana creados socialmente y no heredados biológicamente. En su opinión, cultura es sinónimo de civilización, y no algo particular de sociedades únicas, por lo que su definición se refiere a "Cultura o civilización". Tylor pensaba en la cultura en términos radicalmente distintos a los actuales. Aceptó la premisa de que todas las sociedades se desarrollan de la misma manera e insistió en la progresión universal de la civilización humana de salvaje a bárbara a civilizada. Lewis. Es una teoría sobre la evolución cultural basada en la transición a través de tres etapas: salvajismo, barbarie y civilización. La presencia de ciertas instituciones y técnicas define cada etapa; así, con la escritura aparece la civilización, y la cerámica marca el paso del salvajismo a la barbarie. A su vez, cada etapa puede subdividirse en tres periodos: antiguo, medio y moderno. Para Morgan, las tribus griegas y latinas de los períodos de Homero y Hesíodo ofrecían el más alto ejemplo del estadio superior de la barbarie. Morgan establece las bases del evolucionismo en el aspecto social con su teoría sobre los estadios de la humanidad en su historia, esto abrirá posteriormente teorías antievolucionistas positivas como los inicios del estructuralismo y las teorías de Franz Boas, los estadios expuestos son 3: En primer lugar el estadio del salvajismo que Morgan dividía en tres subestadios: Inferior o El período inferior del salvajismo, es aquél que comienza con la infancia del hombre y culmina con la adquisición de una subsistencia a base del pescado y del conociminento del uso del fuego. El hombre comía frutas y nueces, y comenzaba a hacer uso de la palabra articulada. Medio o Se inicia al final de inferior, y termina con la invención del arco y de la flecha. El hombre comienza a migrar a distintos territorios en pos de la caza y de asentarse en nuevos territorios. Superior o Aparece donde había finalizado el anterior, es decir, con el arco y la flecha, y en él, se crea y desarrolla la alfarería En segundo lugar el estadio de la barbarie, también dividido en: Inferior o La divide ―Morgan―, segun sea, para el hemisferio oriental, donde se traduce en la domesticación de animales; mientras que en el occidental, se caracteriza por el cultivo del maíz y el riego de las Plantas. Medio o Culmina con la fundición del hierro. Aquí podrían estar otros minerales, lo que importa en todo caso, es la fundición de los mismos. Superior. o Lo identifica Morgan con el alfabético fonético y el uso de la escritura en la composición literaria. Por último, Morgan habla de la civilización, estadio del que Morgan no hace ninguna división. o La divide en antigua y moderna, observαndose dentro de ella, que la disciplina que nos compete, y especialmente, la Filosofía del Derecho y del estado.