Resumen Lectura #8: Los jóvenes frente a la violencia Gonzalo Porto carrero El autoritarismo se trata de una noción teorizada por judíos alemanes marxistas – Escuela de Frankfurt (los miembros del Instituto de Investigación Social de Frankfurt emigraron de la Alemania nazi a EE.UU, donde trataron de explorar las causas de la tragedia alemana) En La personalidad autoritaria consideran que el fascismo no apela al interés personal racional sino a las necesidades emocionales (muchas veces a deseos y temores primitivos e irracionales) Las raíces del autoritarismo están en la infancia, relaciones padre – hijo, el castigo y la distancia emocional. La socialización autoritaria engendra en el hijo una actitud de dependencia, explotación y deseo de dominio y culmina con un desesperado aferrarse a todo aquello que aparentemente representa la fuerza, y rechazo a todo lo relegado a posiciones inferiores. El autoritarismo tiene la capacidad de enlazar aspectos aparentemente no vinculados entre sí. Se intuye que tiende a haber una correspondencia entre el estilo de las relaciones familiares, el tipo de personalidad dominante y el modelo de régimen político. La sociedad autoritaria exalta como valores de disciplina la obediencia y el respeto a los mayores. Familia autoritaria se convierte en la imagen microscópica Estado totalitario. Similitudes: Requieren ciudadanos sumisos. El padre lo es todo El niño pierde toda significación Sobresale la jerarquía, la distancia entre padres e hijos Se impone la certeza de que el castigo es el método pedagógico por excelencia La violencia sobre los hijos satisface una necesidad de agresión, contagiosa y hereditaria, que la misma sociedad autoriza Intento de justificar el castigo = frustrado intento de racionalizar el sadismo. El maltrato internaliza en el niño el temor forma de razonamiento compulsivo La Escuela Frankfurt, su crítica del autoritarismo prepara el terreno para la renovación pedagógica surgimiento de modelos permisivos sustentado en la premisa del niño como un interlocutor que posee elemental madurez que es necesario afianzar y desarrollar. La personalidad autoritaria explica la necesidad de agredir y dominar; la hostilidad nacida de las frustraciones y regresiones tiene necesidad de un objeto sustituto. Alice Miller la necesidad de agredir, el sadismo y la crueldad surgen tempranamente en el niño como consecuencia del abuso a que es sometido. Los menores injustamente tratados no pueden manifestar su rabia. La necesidad de expresar la frustración y ansiedad generara impulsos destructores contra objetos sustitutos (totalmente disociados de las causas que le dieron origen). Esta necesidad de agredir también puede encontrar su objeto fundamental en el propio sujeto (drogadicción y alcoholismo) ¿Qué tiene que ver Alemania de principios del siglo con el Perú de fines de los 80? El Perú es una sociedad autoritaria, pero de manera muy diferente de lo que fue en Alemania. Diferencias: 1. La escasa “validez” (Weber grado en que un orden social engendra un sentimiento de deber) de los ordenes sociales hoy en el Perú: Las reglas que pautan las relaciones en un grupo suelen tener poco arraigo. El orden no es un conjunto impersonal de reglas que compromete a dominantes y dominados, sino la resultante de la voluntad del dominante y la capacidad de resistencia del dominado cuando esta capacidad sea poco a nula y la voluntad de dominio mucha el orden tendera a ser variable y arbitrario (Weber sultanismo, orden donde la palabra del que impera es ley) Situación en Alemania hubo también concentración en el poder y desigualdad de derechos, pero las nomas comprometían a dominantes y dominados y no podían ser alteradas o resistidas. El cuartel prusiano (Emil Ludwig) marco en profundidad la mentalidad alemana; para la juventud significo un agente socializador donde el recluta aprendía a glorificar la sumisión y el sentido del deber. Wilhelm Reich el fascismo alemán nació de la rigidez y mutilación biológicas de la generación anterior. El militarismo prusiano es la manifestación extrema de esta rigidez biológica. La libertad social y el autogobierno son inconcebibles en pueblos rígidos. Alemania autoritarismo tenia como correlato un orden valido y efectivo. Perú autoritarismo coexiste con el caos. 2. Posibilidades de rebeldía: En Alemania improbable y totalmente imposible. El sujeto ha internalizado tanto el valor de la obediencia que difícilmente genera comportamientos autónomos. Perú la poca validez mina el prestigio del orden y alienta la resistencia a la autoridad (si el jefe no sigue las reglas, difícilmente el subordinado se sentirá en la obligación de seguir las reglas le parecerá natural romperlas y resistir al dominante) Semejanzas: El poder está concentrado sin contrapesas en el grupo dominante, las normas se imponen y no se razonan, la violencia es el instrumento pedagógico favorito. La sociedad favorece el desarrollo de una personalidad marcada por la necesidad de agredir y recrear en los otros la tragedia de la que fue víctima. La compulsión de agresividad se expresa en: 1. Los objetos subjetivos: algún tipo de compensación como equivalente funcional de la agresión. 2. De manera positiva puede canalizarse hacia la conquista de logros que compensan el amor propio cuestionado: socialmente aceptable, pero en el Perú las oportunidades son reducidas y difícilmente el joven podrá abrirse camino y su frustración reactualizara su sufrimiento y emergerá. 3. Autodestrucción: drogadicción o delincuencia, en algunos casos suicidio. El joven vive atormentado por reproches que son de alguna manera el eco en su conciencia de lo que fue la relación con sus padres; y activar estos reproches los hace sentir como condenados. No hay visión del futuro y todo el afán es evitar la culpa y los reproches; como el éxito es pasajero, es inevitable el reencuentro y el nuevo intento de huida. (Autodestruirse es una forma de sacrificio manera de evitar destruir a los demás) 4. Devolver al mundo el sufrimiento que nos impuso: el maltrato a los demás se convierte en la forma rutinaria de desfogar nuestra protesta contra el mundo. El sufrimiento puede ideologizarse y convertirse en odio. La necesidad de agredir se racionaliza y justifica gracias a una ideología que señala a los “verdaderos culpables” del sufrimiento. (Marxismo y Maoísmo permiten fácil ideologización del sufrimiento) La sensación agobiante de ser víctima es la raíz del maniqueísmo moral y del dogmatismo. El sentimiento de orfandad de haber sido defraudado por el padre genera rabia que se proyecta hacia los objetos sustitos (jefes, directores, presidentes, etc.), a ellos se responsabiliza de nuestro dolor y de todas las frustraciones. En los últimos años ha surgidos en el Perú un discurso nuevo que representa la fusión entre el marxismo y la sensibilidad popular: Para el joven representa una oferta ideológica muy persuasiva y sugerente Discurso que se agota en la crítica, tiene muy poco que plantear respecto del futuro y resulta plausible en sus versiones más simplistas. La ideologización del sufrimiento suele generar odio para que el odio se torna en agresivo es necesario que se haya generado una actitud permisiva ante el empleo de la violencia. En conclusión: Para explicar el violentismo y la crueldad, no como hechos individuales sino como tendencias sociales debemos tener en cuenta: 1. La socialización autoritaria crea un lastre de sufrimiento y amargura que el niño primero, y más tarde joven, tiene que manejar 2. La ideologización puede transformar el sufrimiento en odio 3. La conversión del odio en furia y agresión exige que se haya roto toda inhibición moral en torno al uso de la violencia