COLOMBIA Y NICARAGUA EN UNA ISLA El Tratado Esguerra-Bárcenas, también conocido como Tratado Bárcenas Meneses-Esguerra o Tratado de 1928, es un acto oficial bilateral realizado entre Colombia y Nicaragua sobre cuestiones territoriales entre los dos países, específicamente sobre la soberanía de la costa de Mosquitos y las islas del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. En el tratado, quedaron excluidos los cayos Quitasueño, Roncador y Serrana por estar en esa época en litigio entre Colombia y Estados Unidos. La firma del tratado fue realizada el 24 de marzo de 1928 en la ciudad de Managua, firmando como representante de Nicaragua José Bárcenas Meneses, subsecretario de relaciones exteriores, y como representante de Colombia Manuel Esguerra, enviado extraordinario y ministro plenipotenciario para el caso. El tratado fue ratificado por ambas repúblicas, en la misma ciudad, mediante el ”Protocolo de 1930”. Intereses de los países Nicaragua debía ratificar la soberanía sobre la Costa de Mosquitos, la cual había sido cedida en la Cédula Real de 1803 al Virreinato de la Nueva Granada y por ende era reclamada por Colombia como sucesora independiente de esa colonia. Por otro lado, debía asegurar su posesión marítima en el mar Caribe. Por su parte, Colombia debía defender la legitimidad de su posesión soberana sobre el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, cedidas en la misma Cédula de 1803 y confirmada con la adhesión de los cantones de San Andrés y Providencia a la Constitución de Cúcuta de 1822. Contenido del Tratado El Tratado de 1928 tiene dos artículos: Primer artículo: En el cual Colombia reconoce la soberanía de Nicaragua sobre la Costa de Mosquitos que va desde el cabo Gracias a Dios al río San Juan. Además la soberanía de las islas Mangle Grande y Mangle Chico. Por su parte, Nicaragua reconoce la soberanía de Colombia sobre el archipiélago de San Andrés con todo lo que éste comprende. El artículo determina expresamente: "No se consideran incluidos en este tratado los cayos Roncador, Quitasueño y Serrana; el dominio de los cuales está en litigio entre Colombia y los Estados Unidos de América." Segundo artículo: En el cual se dice que la validez del Tratado sería puesta a consideración de los Congresos de ambos países. La comprobación histórica de que los dos Congresos aprobaron el Tratado se da por la celebración del Protocolo de 1930 en Managua.