CENTRO UNIVERSITARIO DE TIJUANA BAJA CALIFORNIA Tijuana, Baja California, a 31 de enero del 2013. Alumno: Juan Rojas Rodríguez. Maestro: Dr. Vicente Fernández Fernández. Curso: Maestría en Derecho Procesal, Civil, Mercantil, Familiar. Tema: Sistema de Justicia local y federal. Reflexiones. Son muchos los aspectos que pueden marcar diferencias entre el sistema de justicia local y federal, pero si me lo permite Usted, deseo compartir alguna de las experiencias que esta impresionante carrera me ha ofrecido en el trabajo de todos los días y que orgullosamente comparto con todos ustedes, haciendo la siguiente reflexión en algunos casos: Puedo señalar por ejemplo un caso: Los efectos que provocan los juicios cuya cuantía sea menor a la señalada en la ley, sobre todo en aquellos casos cuando la sentencia de primera instancia no es favorable y solo permite el amparo directo y no el recurso de apelación. En algunos juzgados del fuero común en Baja California, en nuestros días, no aplican este criterio, y lo sorprendente es lo que sucede: Cuando una sentencia es condenatoria, el sentido de la resolución afecta a varias partes, y al impugnarla lo hacen en forma distinta: Es decir, uno interpone el recurso de apelación y la autoridad lo admite en ambos sentidos y le da vista a la parte contraria, ésta no contesta los agravios y la autoridad lo declara rebelde y ordena turnar los autos a la Sala. El término para interponer el amparo es de quince días, sin embargo, la otra parte también afectada decide irse por la vía de amparo, ya teniendo conocimiento de que los autos principales sean turnados al Tribunal Superior de Justicia del Estado (Salas) Para su substanciación, logra interponer el amparo directo ante la autoridad responsable y aquí viene lo sorprendente: se admite, rinde su informe justificado, se emplaza al tercero perjudicado y ordena su radicación a los tribunales colegiados. Y qué pasa después? La autoridad responsable no hace nada al respecto, deja “olvidado la admisión del recurso de apelación y por otra parte le da tramite a la demanda de garantías, su excusa: “”…tenemos que darle prioridad…”. Otro caso, los exhortos, se trata diligenciar alguno en el interior de la república y resulta que lo devuelven sin diligenciar “…por no estar ajustado a derecho”, lo sorprendente es que hay algunas autoridades que regresan así el exhorto sin hacer la aclaración correspondiente sobre qué quiso decir con no estar ajustado a derecho. En el sistema de justicia federal es sorprendente la aplicación del ordenamiento legal y la responsabilidad que ello implica, nos sorprende todo lo que tenga que ver en el ámbito federal: sus instalaciones, la solemnidad de todo aquello que se tramite en cada juzgado de distrito o tribunal colegiado, y sobre todo como se desenvuelven los juicios. Es muy notable al grado que al acudir a sus instalaciones, sea cual fuere el circuito, nos sorprende por su “perfección” o al menos, es muy marcada la diferencia con los juzgados del fuero común. Imagínese por un momento en que tiene que diligenciar un exhorto al municipio de Martínez de la Torre en Veracruz, y resulta que le tocó el Juzgado 4 Civil del Partido Judicial de dicho Municipio, sale Usted de la Terminal de autobuses y se encuentra una Casa de tres niveles. La primera impresión resulta de que se trata de una vivienda pero no, al ingresar se da cuenta que en la azotea se encuentra dicho juzgado, todavía sin remover los lavaderos primitivos; o bien, acude a una audiencia constitucional en el segundo juzgado de distrito en Xalapa Veracruz, y uno se pregunta: Porqué el gobierno federal no junto la plaza comercial “Las Américas” y las instalaciones de los Juzgados y Tribunales Federales, uno se confunde, (perdón por la exageración) solo Falta que se instalen alguna de las cadenas de cines en su interior. Lo cierto es que no se logra comprender tanta diferencia en nuestros días en ambos sistemas, y eso que quienes acudimos a los juzgados en repetidas ocasiones vemos como se hace público las visitas programadas, aquellas donde se supone que se realizan para inspeccionarlos, y aun así no vemos que los problemas disminuyan, y que las diferencias sean muchas, cuando después de todo, en ambos casos hay algo en común y que debemos cuidar: IMPARTIR JUSTICIA. Gracias.