INSTITUTO BIBLICO TEMA: 1 Y 2 DE CRONICAS GABRIEL DE JESUS PETERNIAN RAVELO INTRODUCCIÓN ALOS LIBROS DE 1 Y 2 CRÓNICAS ¿Por qué debemos estudiar estos libros? Una crónica es un relato de acontecimientos históricos presentados en el mismo orden en que ocurrieron. El estudio de 1 y 2 Crónicas ayudará a los alumnos a entender la historia global del antiguo pueblo de Dios desde Adán hasta la época del rey Ciro de Persia. Aunque 1 y 2 Crónicas presentan en gran medida la misma historia que 1 y 2 Reyes, hay detalles adicionales en Crónicas que arrojan luz en cuanto a los tratos de Jehová con Su pueblo, especialmente durante el gobierno de los reyes. ¿Quién escribió estos libros? Aunque no se sabe con exactitud quién escribió o compiló los datos históricos de 1 y 2 Crónicas, “los libros contienen varias referencias a las fuentes de las cuales provenía la información; por ejemplo, ‘en los libros del profeta Natán, y en la profecía de Ahías, el silonita, y en las profecías del vidente Iddo’ (2 Crónicas 9:29; 12:15; 13:22; 20:34; 26:22; 32:32; 33:18). Esos pasajes aclaran que, desde los primeros tiempos del reino, escritores (por lo general de orden profético) que vivieron de cerca los acontecimientos descritos registraron la historia de su propio tiempo. Esos registros, junto con [los libros de] Samuel y Reyes, conforman el material a partir del cual se compilaron los libros de Crónicas, eligiendo los recopiladores aquellas porciones que mejor se ajustaban al propósito de su composición” (Bible Dictionary, “Chronicles”). ¿Cuándo y dónde se escribieron? Se desconoce cuándo y dónde se escribieron los libros de 1 y 2 Crónicas; sin embargo, 2 Crónicas habla del decreto por el cual el rey Ciro de Persia permitió a los judíos regresar a Jerusalén (véase 2 Crónicas 36:22–23). Eso indica que los libros de Crónicas, o por lo menos una parte de ellos, se compilaron en algún momento después del año 537 a. de J.C., cuando el rey Ciro dictó ese decreto. En su origen, 1 y 2 Crónicas eran un solo libro (véase Bible Dictionary, “Chronicles”). ¿Cuáles son algunas de las características distintivas de estos libros? Aunque los libros de Reyes y Crónicas abarcan gran parte del mismo periodo de la historia israelita, los libros de Crónicas se centran en el Reino del Sur, o Judá, y en general sólo mencionan el Reino del Norte, o Israel, cuando describen la manera en que éste se relacionaba con Judá. Varios detalles que no se encuentran en los libros de Samuel y Reyes se incluyen en Crónicas, tales como la profecía de Elías el Profeta concerniente al inicuo rey Joram (véase 2 Crónicas 21:12–15). “Aunque los acontecimientos seculares no se excluyen [de los libros de 1 y 2 Crónicas], los autores se deleitan mayormente en los aspectos eclesiásticos y religiosos de la historia y en el progreso de la adoración en el templo de Jerusalén” (Bible Dictionary, “Chronicles”). Bosquejo 1 Crónicas 1–9 Se hace una relación de la genealogía de los patriarcas y de los hijos de Jacob. 1 Crónicas 10–22 Después de morir Saúl, David gobierna como rey sobre todas las tribus de Israel. Lleva el arca del convenio a Jerusalén, que se convierte en la capital del reino. Jehová manda a David que no construya una casa de Jehová, y le promete que su hijo lo hará. El rey David derrota a otras naciones en la batalla y reina en Israel con justicia. 1 Crónicas 23–29 David prepara a su hijo Salomón y a los levitas para que construyan el templo. David muere y Salomón reina. 2 Crónicas 1–9 Jehová bendice al rey Salomón con enorme sabiduría y riqueza. Él construye y dedica el templo de Jerusalén. Jehová se aparece a Salomón y promete bendecir a los israelitas conforme a su obediencia. Tras cuarenta años de reinado, Salomón muere y su hijo Roboam reina. 2 Crónicas 10–35 Diez tribus de Israel se rebelan contra Roboam, y el reino se divide. Las tribus de Judá y Benjamín permanecen en Judá. Muchos reyes gobiernan en el Reino del Sur, o Judá. 2 Crónicas 36 El rey Nabucodonosor de Babilonia captura el Reino del Sur y nombra a Sedequías rey de Jerusalén. Sedequías se rebela y Babilonia destruye Jerusalén y el templo, llevando cautivos a los habitantes que quedan. Después de que el Imperio Persa invade Babilonia, se permite a los judíos regresar y reconstruir el templo. Descendientes de Adán Los hijos de Israel (Gn. 5.1-32) (Gn. 35.22-26) 1 Adán, Set, Enós, Descendientes de Judá 2 Cainán, Mahalaleel, Jared, Los hijos de David 3 Enoc, Matusalén, Lamec, (2 S. 3.2-5; 5.13-16; 1 Cr. 14.3-7) 4 Noé, Sem, Cam y Jafet. Descendientes de los hijos de Noé Descendientes de Salomón (Gn. 10.1-32) Descendientes de Simeón Descendientes de Sem Descendientes de Rubén (Gn. 11.10-26) Descendientes de Gad Descendientes de Ismael y de Cetura Descendientes de Leví (Gn. 25.1-6,12-18) Descendientes de Isacar Descendientes de Esaú Descendientes de Benjamín (Gn. 36.1-43) Descendientes de Neftalí Descendientes de Judá Descendientes de Aarón. Descendientes de Manasés Descendientes de Efraín Descendientes de Aser Genealogía de Saúl Muerte del rey Saúl Ahora bien, los filisteos atacaron a Israel, y los hombres de Israel huyeron ante ellos. Mataron a muchos en las laderas del monte Gilboa.2 Los filisteos cercaron a Saúl y a sus hijos, y mataron a tres de ellos: Jonatán, Abinadab y Malquisúa. 3 La batalla se intensificó cerca de Saúl, y los arqueros filisteos lo alcanzaron y lo hirieron. 4 Con gemidos, Saúl le dijo a su escudero: «Toma tu espada y mátame antes de que estos filisteos paganos lleguen para burlarse de mí y torturarme». Pero su escudero tenía miedo y no quiso hacerlo. Entonces Saúl tomó su propia espada y se echó sobre ella. 5 Cuando su escudero vio que Saúl estaba muerto, se echó sobre su propia espada y murió. 6 Así que Saúl y sus tres hijos murieron allí juntos, y su dinastía llegó a su fin. 7 Cuando los israelitas que estaban en el valle de Jezreel vieron que su ejército había huido y que Saúl y sus hijos estaban muertos, abandonaron sus ciudades y huyeron. Entonces los filisteos entraron y ocuparon sus ciudades. 8 Al día siguiente, cuando los filisteos salieron a despojar a los muertos, encontraron los cuerpos de Saúl y de sus hijos en el monte Gilboa. 9 Entonces le quitaron la armadura a Saúl y le cortaron la cabeza. Luego proclamaron las buenas noticias de la muerte de Saúl ante sus ídolos y a la gente en toda la tierra de Filistea. 10 Pusieron su armadura en el templo de sus dioses y colgaron su cabeza en el templo de Dagón. 11 Cuando el pueblo de Jabes de Galaad se enteró de todo lo que los filisteos le habían hecho a Saúl, 12 todos los valientes guerreros llevaron los cuerpos de Saúl y sus hijos de regreso a Jabes. Luego enterraron sus huesos debajo del gran árbol en Jabes y ayunaron por siete días. 13 De manera que Saúl murió porque fue infiel al Señor. No obedeció el mandato del Señor e incluso consultó a una médium 14 en lugar de buscar la dirección del Señor. Así que el Señor le quitó la vida y le entregó el reino a David, hijo de Isaí. David es proclamado rey de Israel Entonces todo Israel se juntó a David en Hebrón, diciendo: He aquí nosotros somos tu hueso y tu carne. 2 También antes de ahora, mientras Saúl reinaba, tú eras quien sacaba a la guerra a Israel, y lo volvía a traer. También Jehová tu Dios te ha dicho: Tú apacentarás a mi pueblo Israel, y tú serás príncipe sobre Israel mi pueblo. 3 Y vinieron todos los ancianos de Israel al rey en Hebrón, y David hizo con ellos pacto delante de Jehová; y ungieron a David por rey sobre Israel, conforme a la palabra de Jehová por medio de Samuel. David propone trasladar el arca a Jerusalén 13 Entonces David tomó consejo con los capitanes de millares y de centenas, y con todos los jefes. 2 Y dijo David a toda la asamblea de Israel: Si os parece bien y si es la voluntad de Jehová nuestro Dios, enviaremos a todas partes por nuestros hermanos que han quedado en todas las tierras de Israel, y por los sacerdotes y levitas que están con ellos en sus ciudades y ejidos, para que se reúnan con nosotros; 3 y traigamos el arca de nuestro Dios a nosotros, porque desde el tiempo de Saúl no hemos hecho caso de ella. 4 Y dijo toda la asamblea que se hiciese así, porque la cosa parecía bien a todo el pueblo. David propone trasladar el arca a Jerusalén Entonces David tomó consejo con los capitanes de millares y de centenas, y con todos los jefes. 2 Y dijo David a toda la asamblea de Israel: Si os parece bien y si es la voluntad de Jehová nuestro Dios, enviaremos a todas partes por nuestros hermanos que han quedado en todas las tierras de Israel, y por los sacerdotes y levitas que están con ellos en sus ciudades y ejidos, para que se reúnan con nosotros; 3 y traigamos el arca de nuestro Dios a nosotros, porque desde el tiempo de Saúl no hemos hecho caso de ella. 4 Y dijo toda la asamblea que se hiciese así, porque la cosa parecía bien a todo el pueblo. David intenta trae Pacto de Dios con David Natán, al principio, aprueba que David construya una casa para Jehová, pero después se lo prohíbe — Un hijo de David construirá el templo — Se predice el triunfo de Israel — David agradece a Jehová Su bondad para con Israel. David somete a todos los adversarios de Israel y reina con justicia sobre el pueblo. Salomón reina. David prepara a su hijo Salomón y a los levitas para que construyan el templo. David muere y Salomón reina. Salomón pide sabiduría Jehová bendice al rey Salomón con enorme sabiduría y riqueza. Él construye y dedica el templo de Jerusalén. Jehová se aparece a Salomón y promete bendecir a los israelitas conforme a su obediencia. Reino dividido Diez tribus de Israel se rebelan contra Roboam, y el reino se divide. Las tribus de Judá y Benjamín permanecen en Judá. Muchos reyes gobiernan en el Reino del Sur, o Judá .