Subido por Jorge Nain

luna de pluton

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CONSEJOS PARA LOGRAR UN BUEN LIDERAZGO
EN LA IGLESIA.
JESSICA VALERIA MOSCOSO NATARÉN
Taller de Liderazgo
LIDERAZGO EN
LA IGLESIA
INDICE
CAPÍTULO I LA IGLESIA ………………………………………………………………….
CAPÍTULO II EL LIDER……………………………………………………………………
CAPÍTULO III FUNCIÓN DEL LIDER…………………………………………………….
CAPÍTULO IV ORGANIZACIÓN DE DEPARTAMENTOS EN LA
IGLESIA……………………………………………………………………………………...
CAPÍTULO V ESTRATEGIAS PARA TENER UNA BUENA DIRECCIÓN……………
CAPÍTULO VI PROBLEMAS QUE ENFRENTA UN LIDER……………………………
1
INTRODUCCIÓN
El liderazgo es algo fundamental en nuestras vidas, en cualquier área que nos
encontremos se necesita de alguien que esté al frente y determine las funciones
que se deben llevar a acabo y quiénes deben llevarlas a acabo. En este libro
presento al líder en la iglesia, sí, en la iglesia. Es fácil llegar y esperar a que todo
salga bien, pero, debemos conocer de las funciones que nuestro líder tiene en la
iglesia ya que en la mayoría de las actividades que se realizan él está al frente.
Es muy importante conocer sobre nuestro líder, su función en la iglesia, los
problemas que él llega a enfrentar, las soluciones que se les da y cómo nosotros
siendo el cuerpo de la iglesia podemos aportarle.
La organización es fundamental si queremos lograr los objetivos trazados, si no se
tiene una buena organización difícilmente se podrán lograr los objetivos que nos
hemos trazado cómo iglesia, es por eso que presento este libro que trae puntos que
considero importante para ser un buen líder en una iglesia y sino somos el líder
poder aportar a este. Ya que, de nada sirve tener un excelente líder si la iglesia no
va a colaborar en nada.
2
CAPITULO I LA IGLESIA
La iglesia juega un papel muy importante en la vida de la mayoría de las personas,
el creer en algo nos ayuda de cierta forma a mantenernos motivados y con la
esperanza de que alguien nos ve, escucha y comprende.
Iglesia quiere decir "comunidad convocada".
En este caso, convocada por Cristo.
Es necesario que colaboremos en esta
unidad, que estemos unidos entre nosotros,
unidos entre los grupos sin que haya
divisiones. La Iglesia es llamada, también,
Cuerpo de Cristo, en donde Jesús es la
cabeza y nosotros todo el cuerpo y está viva
como el cuerpo de cualquiera de nosotros lo está; y siente dolor cuando una parte
se enferma; y alegría cuando una parte se mejora. Cada uno de nosotros forma la
Iglesia de Cristo.
La iglesia es el lugar donde los creyentes pueden amarse unos a otros (1 Juan 4:12),
exhortarse unos a otros (Hebreos 3:13), considerándonos unos a otros para
“estimularnos” al amor y a las buenas obras (Hebreos 10:24), servirse unos a otros
(Gálatas 5:13), instruirse unos a otros (Romanos 15:14), honrarse unos a otros
(Romanos 12:10), ser bondadosos y misericordiosos unos con otros (Efesios 4:32).
Por estas y otras razones, la asistencia a la iglesia, la participación y el
compañerismo, deben ser actividades regulares en la vida de todo creyente. No es
obligatoria la asistencia semanal de los creyentes a la iglesia, pero alguien que ha
confiado en Cristo debería tener el deseo de adorar a Dios, ser instruido en Su
Palabra, y tener compañerismo con otros creyentes.
3
A continuación presento algunas razones que comúnmente nos motivan a asistir a
la iglesia:
1. Asisto a la iglesia para servir a los demás. Hay un gozo mucho mayor en servir
que en buscar ser servido. Tengo muchas oportunidades para servir cuando la
iglesia está reunida. Esas oportunidades son mis regalos de parte de Dios.
2. Asisto a la iglesia para animar a otros. Vivimos en un mundo de comunicación
digital increíble, pero hay algo que no se puede sustituir en la reunión.
Cuando me encuentro con alguien en persona en la iglesia, también tengo la
oportunidad de animarlo.
3. Asisto a la iglesia para animar a mi líder. Dudo que muchos de nosotros
sepamos cuánto nos sirven y nos aman nuestros líderes los siete días de la semana.
Lo menos que puedo hacer por mi líder es estar allí en persona cuando nos
reunimos como iglesia. Sé que hacerlo alienta a mi líder y quiero que nuestros
líderes tengan el regalo de sentirse animados cada semana.
Pero, para lograr todo esto como en todo, se necesita de una buena organización
para que todo funcione de una manera adecuada, es ahí donde entra la función del
líder. Se requiere de alguien al frente que sepa organizar a la congregación para
que todo funcione bien. Porque si no hubiese alguien al frente entonces no habría
orden y las actividades no se llevarían a cabo adecuadamente porque todos harían
lo que quisieran y las cosas así no funcionan.
Considero que la función del líder aquí es muy importante ya que la iglesia debe
mantenerse unida. Estar unidos requiere de un trabajo en equipo, pero, si no
hubiese un líder, ¿quién organizaría los grupos de trabajo?
4
CAPITULO II EL LIDER.
Cuando hablamos de ser líder, decimos que es
una persona que se encarga de orientar y
conducir a un grupo de personas determinado.
En este capitulo hablaremos sobre el líder
cristiano. Todo líder cristiano debe tener sus
propósitos claros en el Señor, para que así
pueda ayudar de manera correcta a las personas que tiene a cargo. El líder debe
ser el primero en dar ejemplo en todas las labores que su grupo emprenda, porque
es el ejemplo y el alma de su grupo.
Un verdadero líder:

Siempre motiva a su grupo.

La gente le cree y confía en él.

Tiene la virtud y la capacidad de cambiarle de estado de ánimo a su grupo.

Debe tener empatía con la gente.

Debe tener credibilidad.

Construye relaciones sólidas y duraderas.
El líder no debe perder de vista su meta. Se debe esforzar en la tarea de preparar
y forjar obreros capaces para el ministerio con habilidades y el carácter para cumplir
el llamamiento divino en su Vida, para glorificar a Dios e impulsar el desarrollo de la
iglesia.
El líder cristiano
El líder ideal es aquel que, en primer lugar, es considerado por sus liderados como
el mayor de los siervos. Los seguidores, les conceden a esos líderes la autoridad
para liderarlos porque ven en el alguien altruista y preocupado por los demás.
5
“Los jóvenes necesitan algo más que una atención casual, más que una palabra de
aliento ocasional. Necesitan labor esmerada, cuidadosa, acompañada de oración.
Únicamente aquel cuyo corazón está lleno de amor y simpatía podrá alcanzar a
aquellos jóvenes que son aparentemente descuidados e indiferentes” (Obreros
Evangélicos, p. 220).
La influencia es un atributo esencial del líder, y sus resultados se verán, no solo
ahora, sino por toda la eternidad. Influenciar es más que dar orientaciones. Es vivir
para ayudar a otros a tener una comprensión y un conocimiento mejor de Cristo.
Desarrollo de Liderazgo en la Organización se centra en:
1. Resultados y estrategias en la organización, a través del liderazgo conjunto
y de vinculación.
2. Comprensión de los reglamentos de la organización.
3. Desarrollo de reglamentos, declaraciones y directrices de la organización.
4. Implementación de reglamentos nuevos y ya existentes en la organización.
5. Cómo fortalecer la eficacia en la organización a través de la estructura
existente.
6. Ayudar a cada organización para que tenga éxito en atender a todas las
áreas prioritarias de la misma.
7. Desarrollar equipos efectivos de liderazgo para la organización.
8. Liderazgo y toma de decisiones en la organización sobre temas culturas.
Desde mi punto de vista los líderes que la iglesia requiere necesitan ser, hacer,
conocer y modelar lo siguiente:
En cuanto al ser .Ser creyentes en el Señor nacidos de nuevo, bautizados e
integrados a la membresía de la iglesia , ser siervos y siervas de Dios por convicción
sometidos al señorío de Cristo dispuestos a cumplir su vocación, ser cristianos que
amen a su iglesia y estén dispuestos a esforzarse para alcanzar las metas.
En cuanto al hacer: Hacer lo necesario para motivar a otros e impulsar el
crecimiento en la iglesia, ejercer sus dones para la edificación de la iglesia,
desarrollar su ministerio en tiempo y forma dentro de la iglesia.
6
En cuanto al conocer: Manifestar conocimiento general de la doctrina, mostrar
amplio conocimiento del reglamento local de la iglesia, manifestar conocimiento
pleno del proyecto a desarrollar en su iglesia.
En cuanto a modelar: Modelar una Vida piadosa con una actitud digna de ser
ejemplo para los creyentes, mostrar actitudes que manifiesten el fruto del Espíritu
de tal manera que los miembros de la congregación se motiven a servir, manifestar
una Vida devocional saludable de tal manera que otros puedan imitarlos.
ALGUNAS
CARACTERÍSTICAS
QUE
LOS
LIDERES
DE
LA
IGLESIA
REQUIEREN
1. Puntualidad.
La gente observa la puntualidad, el compromiso y la responsabilidad
en
quienes
ocupan
una
posición
de
autoridad.
El lider que falta comúnmente pierde presencia e influencia, la
congregación no lo ve como un modelo a seguir. Los faltistas o
desobligados desconocen los acuerdos de las juntas e ignoran la
situación de la iglesia.
2. En cuanto a sus obligaciones financieras el lider debe ser:
El reglamento de la iglesia establece que los miembros de la iglesia
tienen el deber y privilegio de aportar de sus ingresos para el
sostenimiento de la obra de Dios en general siguiendo el plan bíblico
de diezmos y ofrendas. (l Crónicas 29:14; Mateo 3:8—11; Mateo
23:23; Lucas 6:38; Hechos 20:35; 1 Corintios 16:12; 2 Corintios 8:20,
21; Ga’latas 6:6;Hebreos 7:8.
3 En su disposición de servir
El lider debe participar activamente en los programas y no permitir
que los obstáculos le impidan llegar a las posiciones que el Señor les
tiene preparadas. Tiene que superar el temor, la pereza y la
inseguridad a fin de lograr los objetivos que se ha trazado.
7
Fuente: Extracto del Manual de liderazgo.
Los líderes de iglesia son un pilar fundamental en nuestra iglesia para que nosotros
como cuerpo de esta podamos convivir de una manera sana y acorde a lo que los
reglamentos demandan. Es importante la función del líder en nuestra iglesia, pero,
también nosotros debemos tener la disposición de ayudar y aportar lo necesario
para que todos juntos crezcamos y se lleven a cabo aquellos planes que se
propongan.
8
CAPITULO III FUNCIÓN EL LIDER
La
tarea
del
líder
debe
ser
emocionante. No debería existir una
obra más grande ya que el señor Jesús
prometió venir cuando su obra sea
terminada. Es por eso que el líder tiene
una importante misión. Claro, la tarea no
es fácil, el líder necesita el apoyo de la iglesia.
La iglesia necesita líderes. Y no precisamente para dirigir los cultos, encomendar
los “ejercicios bíblicos” o recordar los eventos del Ministerio de la Mujer. La iglesia
necesita guías, modelos, ejemplos; personas que muestren el camino y que, como
dijo Pablo, sean irreprensibles, de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y
sabios.
Aunque en nuestras iglesias hayan hombres y mujeres que den muestras de
grandes dotes para sacar adelante los programas que conforman las liturgias y
eventos eclesiásticos, en la mayoría de los casos sigue haciendo falta ese toque de
espiritualidad que tanto bien haría a la iglesia hoy. Seguimos sin ver a ese Moisés
que, aunque no pueda echarse a un pueblo entero sobre su espalda, se eche, al
menos, a la iglesia local. Tampoco tenemos a un David que nos inspire a cantar y
que en vez de entretenernos con videos musicales prepare nuestro corazón con
esos himnos que compusieron aquellos hombres de gran fe y que podrían hacer
que nuestra experiencia fuera más rica, sólida y genuina. Y qué decir de los Pablos,
hay muchos que conocen la doctrina, pero se han quedado en sus intentos de
cumplirla.
Aunque pareciera que mientras la iglesia mantenga su actividad principal, que son
los cultos y las actividades para la predicación del evangelio, no hay por qué
preocuparse, es inquietante ver que carecemos de alguien que inspire, que motive,
que con su vida dé muestras de piedad verdadera y que sea capaz de llamar al
9
pecado por el nombre que le corresponde. Nos hace falta quien reprenda haciendo
a un lado la justificación barata de “es que todos somos pecadores”, porque si bien
es cierto que lo somos, eso no justifica la vida falsa, retocada y vacía que caracteriza
a algunos fríos y apáticos feligreses.
Y bueno ¿cuál es el motivo de esta falta de liderazgo espiritual? Pues precisamente
eso, no concebir al liderazgo como un asunto de espiritualidad. Hemos creado
cursos, talleres y seminarios que enseñan cómo dirigir o encabezar programas y
eventos, olvidando enfatizar que un verdadero líder ora, medita, reflexiona, estudia
y practica los principios cristianos. No es posible cambiar las formas de pensar y de
actuar cuando quien promueve esto tiene una vida desordenada, vana y superficial.
No se puede dar lo que no se tiene. El líder que miente, que esconde, que no es
sincero, tarde o temprano cae. La Biblia dice que el que practica el engaño no
morará en la casa de Dios y el que habla mentira no permanecerá en su presencia
(Salmos 101:7). La falta de compromiso y de ganas por servir a la iglesia tarde o
temprano se manifiesta y trae vergüenza y oprobio a la causa de Dios. Por eso,
necesitamos concebir al liderazgo como una responsabilidad más profunda, como
una labor que requiere disciplina y entrega y que tiene el poder para transformar a
la iglesia y ¿por qué no? al mundo.
Si tenemos el deseo de servir genuinamente, comencemos por meditar primero en
qué es lo que tenemos para ofrecer, pidiendo a Dios sabiduría y fuerza para sacar
adelante lo que él nos pida. El liderazgo es discipulado y como tal, debe estar
basado en hechos, debe notarse por la cantidad de amigos y conocidos que somos
capaces de llevar a la iglesia; por el reavivamiento que provoquen nuestros grupos
pequeños; por nuestra disposición a participar, a orar, a enseñar.
Si vemos en nuestras iglesias a dos o tres valientes que ya dan muestra de un
liderazgo comprometido y ferviente, si ya existen discípulos, oremos por ellos y
démosle ánimos. Serán ellos los Nehemias que edifiquen la casa de Dios, y
nosotros esa parte del pueblo que vigila desde la aurora hasta la aparición de las
estrellas
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Algo que puede facilitarle la tarea, es comprender y orientar a los miembros de
manera que entiendan y respondan a lo que se les demande. Esto los ayudará a
estar motivados y los capacitará para que puedan testificar. Es una obra meramente
espiritual y los feligreses necesitan ser guiados en forma personal y colaborativa
para descubrir y comprender lo que Dios demanda.
Todo líder debería tener como ejemplo y poner en práctica el método de Cristo el
cual nos dice: Hacer amigos, suplir sus necesidades y finalmente decirles: sígueme.
Las funciones más importantes que debe tener en cuenta el líder a mi parecer son
las siguientes:
1. Como punto principal el líder debe tener a Cristo.
Un líder que únicamente hace sus tareas por obligación pero no sirve de
corazón, no está funcionando de manera correcta.
2. Debe tener como su principal meta la evangelización. Quizá una vez al mes
se debe reunir con la feligresia para trazar planes para la evangelización.
Debe escuchar las propuestas de sus hermanos.
3. Debe elegir sus grupos de trabajo y motivar a cada uno de los departamentos
de la iglesia para que trabajen en la obra.
4. Debe ser el ejemplo, que su testimonio hable por él ya que la manera que
más impacta a los demás es la manera en la que vivimos, en todo momento
debe tratar de hacer lo que es debido.
5. Debe atender las necesidades de sus hermanos, preocuparse por ellos tanto
espirituales, sociales o personales.
6. Debe dirigir los momentos de oración.
7. Debe ser hospitalario.
8. Debe ser humilde y ha de mostrar una pasión por ganar a los perdidos para
Jesús. La razón número uno de nuestra iglesia debe ser conectar a las
personas con Jesús.
9. Debe tener el deseo de ensalzar y glorificar a Dios.
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10. Debe ser un modelo continuo de amor, confianza y aceptación como
conductas normales que se esperan en los cristianos.
11. Debe de actúar como facilitador e involucrar a todos.
12. Debe ser un hombre de oración.
13. Debe ser un cristiano y estudiante de la Biblia. Debería comprender,
experimentar y estar comprometido con la Palabra de Dios. El líder ha de
disfrutar el estudiar y aprender de las escrituras de manera diaria, ya que un
líder no puede coordinar el estudio de las Escrituras si él no se dedica a
estudiarlas. El líder también es un modelo de lo que está enseñando si
predica con el ejemplo.
Desarrollo de Liderazgo Individual su enfoque es en:
El desarrollo de un proyecto de líderes exitosos en todos los niveles de la
organización, el cual incluye:
1. Liderazgo propio




Prepararse para la administración o rol de liderazgo
Construir un lenguaje común para el liderazgo en la organización
Aumentar la eficacia y el rendimiento personal
Responsabilidades personales de los líderes (espirituales, físicas, sociales,
mentales y familiares)
2. Líderes que dirigen





Integrar perspectivas de decisión con enfoque multifuncional
Manejar la complejidad
Tratar los problemas políticos
Difundir las iniciativas e ideas a los demás líderes
Seleccionar y dirigir a los líderes de alto rendimiento
3. Dirigiendo a otros
12




Transición de ser un actor individual a estar a cargo de un equipo
Relacionarse bien para realizar su trabajo
Hacer frente eficazmente a los conflictos
Resolver los problemas con éxito
4. La función de dirigir




Plantear el objetivo y construir hacia el futuro
Balance de ventajas y desventajas entre el corto y el largo plazo
Adaptarse a la implementación de las estrategias de la organización
Capacitar a los miembros de las juntas y las comisiones para que
desempeñen sus funciones eficazmente.
En definición los lideres deben ser fieles a Cristo, deben estar disponibles para
satisfacer las necesidades de los miembros de iglesia, y deben estar dispuestos a
enseñar y aprender.
Como podemos ver, la función del líder en la iglesia no es nada fácil, pero sí es muy
importante. Por lo tanto, debemos apoyarlo y alentarlo para que siga adelante.
La organización es fundamental en cualquier área ya que en base a esto se nos
facilitan hacer ciertas tareas, es importante tener a alguien que nos instruya y
capacite para poder lograr los objetivos deseados. La función de nuestro líder es
muy importante. Sin nadie al frente no se lograría nada bueno.
13
CAPITULO IV ORGANIZACIÓN DE DEPARTAMENTOS EN LA IGLESIA
La organización de grupos nos ayuda a
facilitar el hacer ciertas tareas. Pero para
poder organizarnos en grupos debemos
conocer las habilidades y aptitudes de cada
uno de nuestros hermanos para así poder
acomodarlos en el grupo adecuado.
En una iglesia se encuentran diferentes departamentos, algunos de ellos son los
siguientes:
1.-Líder de iglesia.
2.-Director de diáconos y diaconisas.
3.-Secretario de iglesia.
4.-Tesorero de iglesia.
5.-Directiva de ministerios personales.
6.-Director de hogar y familia.
7.-Directora de dorcas
DEPARTAMENTOS EN LA IGLESIA
Los Ancianos de la Iglesia
Sus responsabilidades son las siguientes:

Dirección de juntas en ausencia del pastor.

Promover la obra misionera predicando y el envío a tiempo de los informes
a la misión o campo local.

Dirigir la ceremonia de la Cena del Señor y el Rito de Humildad.

Ungir a los enfermos que lo pidan o cuyas familias los soliciten.
14

Acompañar actividades como consejero y líder (concilios, campamentos,
retiros de iglesia, paseos).
EL DIRECTOR DE DIÁCONOS
El director de diáconos coordina el trabajo de los diáconos. Los privilegios del
diaconado son:

Tener una sonrisa para cada miembro de iglesia y visita y responsables de
la bienvenida.

Cuida de los enseres y mobiliario de la iglesia, cooperando con la limpieza
de estas para los cultos que se celebren mantenimiento y vigilantes, etc.

Ayuda al trabajo de visitación realizado por los ancianos y apoyo a los
pobres y necesitados.

Preparan las toallas para los bautizados del sexo masculino, las togas
debautismoy la cena del Señor.
LA DIRECTORA DE DIACONISAS
Es una persona de oración. La directora coordina a las diaconisas cuyas labores
son:

Ayudar en las ceremonias bautismales, preparando las toallas para las
bautizadas.

Ayudar en el servicio de comunión (la Cena del Señor) preparando el vino y
el pan sin levadura.

Cooperan con el aseo y la limpieza de la iglesia cuando la iglesia no tienen
cómo pagar a una persona.

Junto con los diáconos, cooperan en el cuidado de los enfermos y visita los
enfermos
EL SECRETARIO O SECRETARIA DE IGLESIA
Es una persona de oración. Es la persona clave en las juntas de iglesia:
15

Lleva un registro minucioso de todas las actas de las juntas de la iglesia y
de las juntas administrativas.

Registrar el nombre del recién bautizado en el libro de feligresía de la iglesia.

Cuando un miembro se traslada de lugar, este pide su traslado de feligresía
al secretario de iglesia.

Debe enviar el informe de feligresía de miembros añadidos, despedidos o
en paradero desconocido.
EL TESORERO DE LA IGLESIA
Sus deberes:

Enviar la remesa mensual a la misión. Con el pastor y los ancianos elaborar el
presupuesto de iglesia.
NO DEBE

usar fondos de iglesia que no estén aprobado.

autoprestarse dineros de la iglesia.
LA DIRECTIVA DE MINISTERIOS PERSONALES DEBE:

Organizar programas de evangelización en conjunto con el pastor
(repartición de literatura, programas de dos en dos, niños predicadores,
campañas por departamentos de iglesia, etc.).

El director de obra misionera coordinan y ejecutan el trabajo de visitación.
DIRECTOR DE HOGAR Y FAMILIA
Sus deberes: Es el encargado de realizar la semana del hogar cristiano presentado
seminarios para casados, solteros, padres e hijos, yernos y suegros, tratando de
fomentarlas buenas relaciones interpersonales en estos círculos familiares.
Fortalece y estimula la organización y el crecimiento de familias saludables.
Incentiva la reconciliación y resolución de conflictos de pareja o promueve la
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realización del curso prematrimonial. Puede ayudar en el manejo del duelo en el
caso de los viudos o viudas, huérfanos.
DIRECTORA DE DORCAS
Dorcas o Tabitha y en su nombre
original en hebreo Tzebiyah fue una judía
de la sinagoga de Yafah o Joppa que
«abundaba en buenos hechos y en
dádivas de misericordia», entre los
cuales estaba el hacer prendas de vestir
interiores y exteriores para las viudas
necesitadas.
Sus privilegios son:

Reunir y preparar ropa y alimentos para las personas necesitadas de dentro
y fuera de la iglesia adventistas y Promoviendo a realizar por lo menos una
brigada de ayuda a los necesitados.

Prestar asistencia social (cuidado de enfermos, aconsejamiento, ayuda en
tareas domésticas.
17
CAPITULO V ESTRATEGIAS PARA TENER UNA BUENA DIRECCIÓN
El elemento básico en la construcción de
la comunidad cristiana son los grupos
pequeños, si juntamos los dos conceptos,
familia y comunidad cristiana tenemos el
resultado maravilloso de una iglesia en la
casa de algún miembro de la iglesia.
Considero que el principio más básico en la comunicación del evangelio es el uso
de los grupos pequeños. El Poder que tienen los grupos pequeños en la Iglesia se
deja ver en la Biblia, en cuyas páginas encontramos infinidad de ejemplos relativos
a la eficacia de los grupos pequeños. Jesús organizó enteramente su misión en
torno a un grupo reducido de 12 hombres, los cuales instruyó y capacitó y unió en
la interdependencia de una comunidad y con ellos demostró que todos los
elementos de la comunión con Dios en el cuerpo de Cristo se experimentan del
mejor modo posible en la confraternidad de la comodidad de los grupos pequeños
en casa de los creyentes.
Las iglesias que más crecen hoy en día, sin importar su composición étnica, son las
que están organizadas en grupos pequeños. Colocan sus ministerios sobre la base
de esta unidad básica de organización, si queremos ser grandes tenemos que ser
pequeños, en otras palabras si soñamos con grandes números, tenemos que
aprender a organizar a los pequeños números.
Formar parte de un grupo pequeño, es como entrar a ser parte de una familia más
extensa, los miembros del grupo se convierten en nuestra familia espiritual, con ellos
podemos confraternizar, orar, leer la Biblia y testificar juntos y experimentar las
bendiciones de la predicación del evangelio en una verdadera comunidad de
creyentes. Hagamos realidad el sueño del Nuevo testamento de una Iglesia en la
casa de los creyentes, libre de formalismos y estructuras rígidas que atrapan el
crecimiento. Necesitamos una iglesia que se multiplique, no solo que sume, sino
que sepa multiplicarse, expandirse como algo natural que vive, que se reproduce
saludablemente.
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Es mi deseo que aprendas principios fundamentales y prácticos de cómo organizar
a tu Iglesia en Grupos pequeños, no es mi tarea “venderte” un modelo determinado
o poner en tu cabeza el modelo específico de una iglesia determinada para que lo
apliques sin razonamiento alguno en tu iglesia, no, ese no es el objetivo, lo que
quiero es compartir contigo los “secretos prácticos que ayudaron a cientos de líderes
a organizar y confiar en los grupos pequeños que transforman vidas y contribuyen
en el crecimiento de sus iglesias.
Las personas exitosas tienen ciertas características en común que vale la pena
estudiar aquí con el fin de estimular al líder de jóvenes en su jornada de trabajo en
favor de los jóvenes.
1. Comunicación clara y convincente. Expresan sus pensamientos e
instrucciones de forma clara y objetiva sin permitir malentendidos. Son breves,
definidos y dicen exactamente lo que quieren decir.
2. Cooperación. Cooperan con el equipo y hacen un trabajo rápido y bien hecho.
3. Pensamiento funcional. Se toman tiempo para pensar las cosas detenidamente.
Cuanto más importante son las decisiones, más tiempo necesitan para deliberar y
pensar sobre ellas.
4. Buenos modales. Son corteses, cuidadosos y tienen consideración por los
demás. No solo ayudan sino que también estimulan y animan a los que están a su
alrededor.
5. Conciencia del retorno. Saben que le deben al mundo lo mejor de aquello que
son capaces de realizar. Tienen conciencia de que el mundo los recompensará de
acuerdo con su esfuerzo.
6. Desapego. No vigilan constantemente el reloj, pero están en un grupo más
exclusivo: el de los que dan más de sí. Su actuación se caracteriza por “hacer más
de lo necesario”.
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7. Persistencia. Son entusiastas y poseen una energía incansable para producir
entusiasmo en otros.
8. Responsabilidad. Ningún trabajo es demasiado grande como para que no estén
dispuestos a ayudar. Se planifican y atacan al problema ni bien este aparece.
9. Base en la experiencia. Pocas personas alcanzan el éxito gracias a la suerte.
La persona exitosa se basa en la experiencia, no en la suerte.
10. Valoración del otro. La persona exitosa sabe cómo agradar al prójimo con
sinceridad, sin falsedades ni adulación.
11. Atención. Paran, miran y escuchan. Observan todo lo que está a su alrededor
y, basadas en hechos, intentan actuar de la manera más coherente posible.
12. Deseo de aprender. Pueden cometer errores. Eso forma parte del aprendizaje.
La persona exitosa busca aprender lo máximo sobre el asunto en cuestión, antes
de continuar con el proyecto.
13. Influencia. Se esfuerzan por dar lo mejor de sí con sus habilidades y
entusiasmo. Esto influencia a todos los compañeros de trabajo.
Cómo ejercer una buena influencia
“Nuestro carácter y experiencia determinan nuestra influencia en los demás. Para
convencer a otros del poder de la gracia de Cristo, tenemos que conocer ese poder
en nuestro corazón y nuestra vida. El Evangelio que presentamos para la salvación
de las almas debe ser el Evangelio que salva nuestra propia alma. Sólo mediante
una fe viva en Cristo como Salvador personal nos resulta posible hacer sentir
nuestra influencia en un mundo escéptico. Si queremos sacar pecadores de la
corriente impetuosa, nuestros pies deben estar afirmados en la Roca: Cristo Jesús”
(El ministerio de curación, p. 372).
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14. Realismo. Acepta el hecho de que la posibilidad de éxito se encuentra
exactamente donde ellos están, no en el patio del vecino.
15. Mente abierta. Saben qué ideas nuevas son semillas de progreso. Las personas
exitosas crecen porque aceptan nuevas ideas, y las agregan a su conocimiento.
16. Humildad. Las personas exitosas nunca toman los errores de manera liviana.
Creen que el error las lleva a aprender y a mejorar. Encuentran, así, una forma de
no repetirlos.
Estilos de liderazgo
Algunos estudios indican tres estilos básicos de liderazgo: el autocrático, el apático
y el democrático.
Perfil del líder autocrático.
a. Tiene una gran necesidad de control, a veces hasta el punto de la obsesión, lo
que se manifiesta en su comportamiento.
b. Evita contacto fuera del contexto estructurado.
c. Es prolijo, y tiene la intención de mostrar sus conocimientos.
d. A la hora de hacer preguntas, intenta colocar a otros en apuros.
e. No le gusta perder el tiempo y vive interrumpiendo a las personas.
f. Es manipulador. Enmascara las declaraciones hechas por otros para que entren
en armonía con sus intenciones.
2. Perfil del líder apático.
a. No se preocupa por el control, dirección, realización de trabajos o relaciones
interpersonales.
b. Solo se preocupa en ocupar una posición.
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c. Permite que su grupo haga lo que quiere.
d. No establece reglas ni normas.
e. No intenta ejercer influencia.
3. Perfil del líder democrático
a) Intenta encontrar un equilibrio entre los dos estilos mencionados
anteriormente.
b) Provee directivas sociales y para las tareas.
c) Intenta no dominar al grupo con puntos de vista personales.
d) Sabe diferenciar entre liderados en el trabajo y amigos en la recreación.
Algunas investigaciones sobre dichos estilos de liderazgo probaron que:
1. la calidad de la contribución del grupo es mejor bajo el estilo democrático.
2. La satisfacción de los miembros del grupo es mayor bajo el estilo democrático
(menos hostilidad).
3. El estilo de liderazgo democrático produce menos ausencia de los miembros.
4. El estilo democrático promueve más independencia.
Sin embargo, no siempre es posible ejercer un liderazgo sin alguna forma de control,
principalmente en situaciones extremas.
En el estilo democrático lleva más tiempo desempeñar una tarea, mientras que la
calidad y durabilidad del resultado son mayores que en el estilo autocrático.
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CONCLUSION
El liderazgo es una función esencial que depende fuertemente de la comunicación
y de la motivación. El liderazgo, la comunicación y la motivación, utilizados de
manera efectiva, permiten a un lider obtener una participación activa y consciente
en la consecución de los objetivos de la iglesia.
La responsabilidad del lider de una iglesia es crear a través de la comunicación, de
la motivación y del liderazgo, un ambiente propicio tal que otros lo encuentren
satisfactorio y atractivo para desarrollarse. El liderazgo, la comunicación y la
motivación son también esenciales para ayudar a que los demás acepten los
cambios necesarios en la organización y, así mismo, para crear una atmósfera de
paz.
Como conclusion respecto del liderazgo en la iglesia encontramos que los líderes
están dispuestos a aprender algo nuevo cada día, se consideran responsables de
su auto-aprendizaje, sin embargo, la mayoría no cuenta con un método de
planeación de tiempo. Algunas de estas prácticas se desarrollan empíricamente, lo
que termina siendo un largo proceso acierto/error, de aquí que resulta conveniente
identificarlas y contar con una guía que aborde paso a paso el desarrollo de estas
prácticas.
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