Subido por Antonio Mas Gonzalez

CAPITULO 4: MODELOS DE EDIFICIOS

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CAPITULO 4: MODELOS DE EDIFICIOS
Los arquitectos del siglo XV y XVI trabajaron para definir modelos que se convirtieran en
ideales o universales y se pudieran repetir. El arquitecto es un intelectual teórico, que
explica y conoce las leyes que determinan la realidad arquitectónica, tanto los órdenes como
las estructuras, es capaz de medir modelos y tipos y de contrastarlos. La Antigüedad se
mostró como una cultura histórica concreta, que permite analizar y clasificar los objetos
reales.
Existe una persistencia en los tipos, un intento de invariabilidad formal, pero se ve sometido
a la necesidad de resolución de problemas concretos. La adaptación de la planta central en
el templete de San Pietro in Montorio y en la iglesia de San Pedro del Vaticano,
introduciendo la variación de escalas y la sucesiva definición de tipos.
O como esta estructura centralizada se manifiesta en los tratos de la ciudad ideal y se ven
reflejados en la Palmanoa de Scamozzi. Esa idea de arquitectura, será el origen de la “utopía
renacentista” por excelencia: la ciudad ideal. Francesco di Girogio Martini en su trattato di
Architettura modelos de la ciudad en el libro III y las diferentes necesidades edificatorio en el
libro II muestre modelos de casas y palacios para la ciudad estará confiando una nueva
arquitectura para un nuevo individuo urbano. En la ciudad de Versalles se van a plantear
grupos de edificios que parecen muy artificiales y parecen forzar los hábitos de sus
habitantes; la arquitectura impone la forma de vida, la preocupación por la clasificación se
hace más dogmática, a cada grupo social le corresponde su tipo separado y diferenciado del
otro. La clasificación tipológica de los prototipos permite ordenar los grupos sociales y la
sociedad misma.
Palladio y Serlio son los que desarrollan una amplia investigación tipológica, sus modelos
asuman un valor reconocido y real: Serlio en su clasificación de los órdenes arquitectónicos y
Palladio en su desarrollo tipológico de las villas. Palladio realiza una recopilación dibujados a
la misma escala y clasificados por temas, desarrolla una teoría y llega a “proponer”
soluciones validad durante más de dos siglos y permite hablar de palladinismo en
arquitectura. Vignola brinda recursos normativos y estrictos (nuevo orden contrarreformista)
serán difundidos y pasaran a escuelas y talleres permiten que la teoría se convierta en una
serie de reglas asimilables.
La historia de la arquitectura explicada una conexión entre arquitectura y política, entre
arquitectura y Poder, más eficiente que entre arquitectura y estética o estilo. El Clasicismo
es un lenguaje del Poder, su forma de expresión y de control.
1. El Palacio
Desde el siglo XV y XVI la vivienda de la alta aristocracia se transformó. Se abandonó los
castillos y se codificaron tres tipos de residencia: el palacio urbano, la villa y la villa
suburbana. Sirven a la misma élite social y pese a su diferencia tipológica y simbólica
representan la misma forma de vida. En el Tratado de Alberti se presentan os diferentes
tipos y se establece el significado de cada uno. Serlio repite las tipologías y presenta una
serie de proyectos diferenciados para el palacio y la villa. Presenta veinticuatro proyectos de
villas y solo uno de palacio, se considera un tipo fijo con menos posibilidades de variación.
Palladio en su segundo libro habla de “casa dentro y fuera de la ciudad”.
1.1. El modelo italiano y su difusión en la arquitectura española.
El palacio urbano era la residencia familiar y representaba la casa en el doble sentido de la
palabra. Definía la posición social y critica de la familia. El carácter del palacio era “espacio
privado”: mundo cerrado, cubico, escondía su estructura interna y su vida. La
transformación en la vida doméstica demandaba estas nuevas tipologías. La vida familiar
adquiere cada vez un carácter más privado, se fueron retirando a los patios, a las salas
interiores y a sus jardines.
El palacio (palazzo) italiano se estructura en un cubo, planta cuadrada, en torno a un patio.
Se hace realidad la idea de centralización del espacio, el patio delimitado de forma uniforme
y continua, por una doble galería (cortile) cuyo lenguaje se articula con la superposición de
los órdenes, organismo centralizados que ordena y estructura el movimiento interior. Se
toma de la arquitectura religiosa, funciona como el elemento baja destinada a los servicios,
planta noble y tercera planta de habitaciones.
Una escalera principal adquiere relevancia arquitectónica y simbólica, innovación de la
arquitectura española, se sitúa a la derecha o izquierda de la entrada al patio. Las galerías
circundantes permiten la circulación interior y la transición funcional y espacial, acentuando
el carácter centrípeto. Las fachas forman una envoltura continua y cerrada que consta de
tres tipos diferenciados por molduras. El almohadillado o aparejo rustico acentúa el carácter
macizo y sólido, se convierte en un elemento presente y al mismo tiempo cambiante.
Brunelleschi desarrolla este modelo con el palacio Pitti, aunque la primera concreción se
debe a Michelozzo di Bartolomeo con el palacio Medici-Ricardi (1444 – 1464), proporciona el
tipo a los palacios renacentistas: modelo florentino indiscutible y repetido, su influencia se
extiende como el palacio del Diamante de Ferrara de Biaggio Rosseti, el almohadillado
adopta la forma de punta de diamante. Se repite en España en los palacios construidos por
la familia Mendoza.
Alberti, en el palacio Rucellai, introduce una leve variación. Lo aplana, lo debilita, disminuye
el carácter de fortaleza, basamento en el opus reticulatum romano que deja visto como en
las ruinas. El Palacio Piccolomini de Rossellino en Pienza, característica original es el
tratamiento de la fachada al jardín o la relación establece entre ambos la apertura de una
triple galería, determinara el futuro de la tipología palaciega. El tratamiento de los patios
interiores se constata el desarrollo de la arquería, su superposición, para componer un
mundo cerrado como para establecer una transición.
Michelozzo en el palacio Medici, plantea
doblar en cuatro el pórtico de los Inocentes,
sin tratamiento al piso superior. Luciano
Laureana, en el palacio de Urbino ofrece un
tratamiento singular para el piso superior,
estableciendo un orden de pilastras con
entablamento entre cuyos intercolumnios se
sitúan los huecos de las ventanas. El palacio
Venecia se toma el diseño básico del Coliseo
y se adapta al cubo: arquerías superpuestas
de arcos de medio punto enmarcados entre
columnas y entablamento siguiendo la superposición de los órdenes. Este modelo florentino
tiene un larguísimo recorrido, y las variaciones van a ser lentas, trascurrirá mucho tiempo
antes de abandonarse: cubo cerrado en torno a un patio, fachada con almohadillado y
pórticos con órdenes clásicos en el patio.
En Castilla se van a dar pasos en la definición de la vivienda de la alta aristocracia. Menos
pegada a la Antigüedad, no impidió que se desarrollara un experimento practico, sobre la
estructura, las tipologías y los tipos formales que adoptan el modelo florentino.
En los palacios mendocinos aparece por primera vez la estrecha relación del palacio con la
ciudad, plaza-palacio se convierten en una estructura aristocrática. Se desarrollan las
galerías relacionadas con jardines palaciegos.
Innovaciones dentro de la tipología de palacio es la forma y el valor que se da a la escalera.
Se va a definir la tipología de tres tramos. Aparece en los dibujos de Francesco di Giorgio, se
plasmó en la iglesia de San Juan de los Reyes de Toledo (1504) de Juan Guas y en el Hospital
de la Santa Cruz, en Toledo y obra de Enrique Egas; en el castillo de la Calahorra de Michele
Carlone. Diego de Siloe erigió la magnífica Escalera Dorada de la catedral de Burgos,
desarrollada sobre un plano en forma de T. Bramante en el palacio Caprini, aporta una
variación significativa en la fachada: los pisos que se separaban por cornisas, ahora se van a
distinguir por el tratamiento del muro. La planta inferior a comercios con potente
almohadillado a la rustica mientras la planta noble superior se articula mediante pilastras.
Separa los elementos que combinados determinan el carácter de los palacios: el
almohadillado a la parte no noble, los órdenes clásicos diferencian la parte residencial.
El almohadillado permanece como seña de identidad de la vivienda urbana, con un nuevo
carácter utilitario no hace alusión a las antiguas casas, incluirá la variante de dos pisos
nobles. Introducen variaciones en la articulación de la fachada, son la serie de palacio que
construye Rafael: el palacio Branconio dell’Aquila o el florentino Pandolfi; con todos los
elementos clásicos pero cuya ordenación no corresponde ya esa norma, poniendo en
marcha las alternativas manieristas. Otra opción es el palacio Farnesio por Antonio da
Sangallo el Joven, la imagen de un poder absoluto se establece al abandonar los códigos
aristocráticos; fachada lisa y monumental en tres pisos por ininterrumpidas molduras y
series largas de ventanas. Terminado por
Miguel Ángel quien rompe con el modelo
florentino, marca un claro eje longitudinal,
una puerta monumental en la planta
inferior y un balcón de fiestas en el piso
noble, la gran cornisa que remata el
conjunto y estructura el patio con el juego
de los órdenes conjugados de forma
antinormativa. Crea dos elementos
fundamentales en la evolución del palacio
barroco: un eje longitudinal que relaciona
el palacio con el entorno urbano, acentúa el centro de la fachada y proyecta abrir la pared
posterior del patio con una logia transparente. Los palacios romanos de Domenico Fontana,
Vaticano, Laterano y Quirinal son
variantes simples del palacio Farnese. Venecia constituye un caso aparte, el palacio
veneciano es de tres pisos, el primero no se habita se destina a almacen, no existe patio
central, las habitaciones se iluminan una gran sala situada en el centro con ventanales
delante y detrás. Sansovino en el palacio Corner transforma la tipología de palacio
escenográfico, en una monumental clasicista. Sigue el modelo romano de Bramante, cuerpo
inferior almohadillado y uno superior articulado por columnas pareadas; servirá de modelo a
las residencias venecianas hasta el siglo XVIII. La ruptura decisiva la desarrolla Andrea
Palladio, compone sus series tipológicas partiendo de un principio radicalmente distinto.
Pretende crear una secuencia de espacios simétricamente ordenados, distribución interior
de las estancias en planta, organizadas en una cuidadosa cadena simétrica y proporcional
presenta en los edificios romanos antiguos. Palladio hará de sus órdenes el factor dominante,
son los que establecen las reglas y su arquitectura queda sometida a sus medidas clásicas.
Palacio Thiene distribuido a partir de un salón con cuatro columnas sigue una estancia
cuadrada que precede a otra de igual longitud, pero la mitad de anchura; continua la
sucesión con una habitación circular cuyo diámetro es igual al lado de la cuadrada. Estas
medidas derivan de las reglas de proporcionalidad de los órdenes. En el Barroco, dos
elementos adquieren protagonismo: la distribución interior y la organización sistemática; y
la interacción con el entorno urbano se consigue acentuando el centro de la fachada. Desde
el siglo XV había codificado dos tipos fundamentales de arquitectura civil, el palacio y la villa.
Los palacios con jardín como el palacio Barberini y el Palais du Luxembourg, serán los
modelos de los palacios barrocos.
El desarrollo de la tipología de palacio corre paralelo al de la villa, ambos están ligados a la
villa suburbana. Siglo XVI las diferentes tipologías de vivienda aristocrática interactúan y
están vinculadas y presentan los mismos problemas o las mismas soluciones. Siglo XVII la
síntesis se hace efectiva, los palacios urbanos añaden un jardín, adquiriendo el carácter de
villa suburbana y convirtiéndose en modelo de las residencias europeas.
1.2. El Hôtel francés reflejo de un nuevo gusto.
En Francia la tradición era distinta y el clima más riguroso requería viviendas más cómodas.
El hotel deriva de prototipos medievales que constan de varias unidades distribuidas en
torno a un espacioso patio. El jardín se estaba convirtiendo en un elemento de prestigio del
que no se podía prescindir. Desde principios del siglo XVII el palacio francés se abrió hacia el
exterior y el hotel francés adquirió su característica planta en forma de herradura.
El palacio francés se caracteriza por una gran preocupación por el uso y comodidad
presentes en toda la arquitectura francesa del siglo XVII. Tanto en el château como en el
hotel, el deseo de comodidad, distribución practica y funcional de cada habitación con usos
específicos, determina el desarrollo de la planta. Château y hotel urbano desarrollan el
mismo tipo fundamenta, pero el hotel acabara constreñido en la trama urbana, construido
entre otros edificios, no en espacio abierto como el château. El hotel francés del siglo XVII es
lo opuesto al cubico y cerrado palacio italiano; con planta en forma de U, un patio anterior y
eje longitudinal definido por la puerta de entrada, gran vestíbulo y salida al jardín, se
expande y se dilate en el entorno urbano y el jardín. La geometrización de todos los
elementos refuerzan la disposición longitudinal y su expansión. El empleo de los órdenes
clásicos determina la articulación, la diferenciación o la unificación formal de los espacios,
establecen proporciones y el carácter clásico. Serlio viaja a Francia en 1541 y erige el Gran
Ferrara prototipo del hotel francés. En el siglo XVII el modelo del hotel es codificado, no
impide que su necesidad de adaptarse al espacio y haga flexible su estructura. Hôtel
Liancourt de Brosse y Lemercier lleva a la existencia de dos patios contiguos y el eje principal
de cour d’honneur no se corresponda con el del jardín; en el hotel Sully de Cerceau lleva al
desarrollo de una planta axial; en el hotel Bretonviliers lleva al desplazamiento del eje
principal y adaptar la distribución. Mansart en su hotel de la Vrillière, en el Hôtel du Jars,
aporta una variación, el appartement doublé, permite una mejor ubicación de la escalera;
seguido en los proyectos de Le Vau, hotel Tambonneau y hotel Lambert.
El modelo de hotel se retoma con gran fuerza en el Rococó reflejo del nuevo gusto de una
aristocracia y una alta burguesía, frívola y caprichosa, se aleja de los valores barrocos de
Versalles. Abandonan la corta para trasladarse a Paris en busca de formas menos
protocolarias y más confortables. Se va a traducir en hoteles y pequeños palacetes sencillos.
La nueva vivienda se rige por la idea de comodidad, la distribución de los interiores refleja la
diversidad de las estancias, especificas funciones y necesidades de cada una. Se articula
atendiendo a una concordancia con las proporciones humanas, se abandona la escala
monumental. La arquitectura se somete a dos principios: el principio de racionalidad y de
funcionalidad, presentes en el Hôtel Soubise con salón oval, típico ambiente rococó; o el
Hôtel de Matignon; entre los responsables de definir y proponer estos nuevos modelos esta
Gilles-Marie Oppenord y a G. Boffrand. Se inicia un pensamiento sobre “la casa” que llevara
a la constitución del inmueble de alquiler en el siglo XVIII.
2. La Villa. Arquitectura y naturaleza
Villa es la tipología donde se conjugan arquitectura y naturaleza, contenedor del ocio y del
placer; se pretende emular la vida de los antiguos romanos del modo más riguroso posible.
El desconocimiento arqueológico determina que se apoyen en las descripciones literarias
como Birgilio o Plinio: recomienda su
ubicación en la ladera de una colina,
donde haya sol y agua en abundancia y
que la naturaleza penetre visualmente
gracias aloggias y escalinatas que se
integran en ella. Alberti en De
reAedificatoria, retoma muchas de sus
ideas de Plinio, lo relativo al placer de
la “vita in villa”.
El máximo exponente es la villa que
Giuliano da Sangallo para Lorenzo el
Magnífico en Poggio a Caiano; rechaza
el experimentalismo y funcionalismo de las villas mediceas que Michelozzo; recibe el
encargo de remodelar; las villas se habían derivado de prototipos locales. La codificación de
la villa preciso de una evolución hacia la distribución simétrica de la planta y el empleo de las
formas clásicas para la articulación de la fachada. Sangallo inicia esta evolución en Poggio a
Caiano, que influye en todas las villas posteriores. Es el primer intento de reproducir una
villa suburbana clásica basándose en los textos de Plinio y de Vitruvio.
La villa del Belvedere para Inocencio VIII en Roma, atribuida a Pollaiuolo y la villa de Poggio
Reale proyecta Giuliano da Maiano para Alfonso de Aragón. El Belvedere de Bramante
resuelve una serie de problemas convirtiéndose en un modelo referencial. La primera villa
suburbana del Cinquecento es de Baldasare Peruzzi, encargo de Agostino Chigi son los
primeros ejemplos de planta en forma de U. Rafael, villa del cardenal Giulio de Médici
llamada villa Madama; la diáfana arquitectura se funde con la naturaleza a modo de jardín
aterrazado con rampas y escalinatas se distribuyen estatuas clásicas y fuentes, se asemeja
Bramante para los jardines del Belvedere. Julio III encarga a Vignola la Villa Giulia,
estructurado con pisos en desnivel y volúmenes abiertos al exterior. La naturaleza queda
controlada mediante fuentes que se unen por pabellones semitransparentes realizados a
base de columnas y arcos. La unión del jardín con el edificio se realiza mediante una gran
exedra circular que utiliza un lenguaje clásico.
Pirro Ligorio renueva la idea de villa en base a los modelos de la Antigüedad como la Villa
Adriana en Tivoli por el carácter
teatral, la innovación centrara la
atención de los arquitectos en el
Barroco. Vignola logra conjugar idea
de villa o palacio-jardín con la de
palacio-fortaleza, en el Palacio Farnese
en Caprarola iniciada por Peruzzi y por
Antonio da Sangallo.
Giulio Romano en el Palacio de Té,
proyecta un cuerpo rectangular en
torno a un patio, unido a un complejo
jardín con un patio semicircular; la
inspiración la toma de la Villa Madama de Rafael, propone cuatro alzados distintos, cada
fachada será diferente, una en forma de logia, otra en pórtico, etc.
Bajo el patronazgo de Cosme de Médici trabaja Bartolomeo Ammanati en la transformación
del Palacio Pitti en una villa, levanta un patio en tres órdenes con almohadillado y los
jardines de Bóboli, proyecta el puente de Santa Trinidad. La sillería de la fachada se emplea
en el patio donde actúa como orden.
2.1. Las villas de Palladio.
En Venecia nunca se abandona el Aristotelismo se funde con el Neoplatonismo; se mantiene
ajeno a las crisis del Clasicismo, la región es una burguesía ennoblecida. Se hace necesario
un nuevo tipo de vivienda en el campo distinto del palacio urbano, la inspiración se
encuentra en modelos literarios latinos. La villa veneciana es el mejor ejemplo de las
renovaciones tipológicas; Palladio da forma a esta nueva tipología de villa de carácter
práctico y simbólico. En el Veneto
integra villa rustica y villa suburbana,
las dotaron de una dignidad y
prototipos de influencia por la
aristocracia inglesa y la América
colonial. Palladio construye las
primeras villas la década de 1540.
Presentan un aspecto acastillado con
torreones en las esquinas, para desarrollar su especifica tipología: un eje central, sobre el
que se dispone una sala cruciforme determina el centro del edificio; una planta que se alarga
formando una estructura en T, una secuencia de espacios ordenados, con proporciones
exactas. El principio de centralización y la absoluta simetría en la disposición caracteriza las
villas de Palladio. Transfiere elementos religiosa de los templos clásicos y enriquecen la
arquitectura de las villas.
La Villa Rotonda es el manifiesto de esa nueva concepción ideal, en favor de una proyección
del edificio funcional y empírica. No entiende el Clasicismo como norma, no busca
soluciones sino establece principios a combinar según la necesidad exigida, esa versatilidad
ha hecho que se siguieran sus modelos se ha venido a denominar palladianismo.
2.2. Los Château y la distribución francesa.
En Francia el impacto de las ideas italianas tiene una primera repercusión; los antiguos
castillos fortificados se transformaron en Château. Francisco I trato de atraer a su corte a
artistas, entre ellos a Leonardo da Vinci hizo un proyecto para el Château Romorantin, no se
construyó, pero fue decisiva su influencia en la distribución y en la complicada escalera
helicoidal. Tambien estuvieron Rosso Fiorentino, Primaticcio y Serlio; pero los arquitectos
franceses desplazan a los italianos.
Château de Chambord de Domenico de Cortona consigue la transformación de la idea de
castillo medieval por un palacio aristocrático y se definen características fundamentales: la
planta dominada por una simetría, cuerpo central rectangular o corps de logis y alas
laterales, marcando un eje longitudinal que dominara luego el jardín; en el centro se sitúa la
escalera doble y helicoidal, introduce un eje vertical que permite efectos de perspectiva
visual. Château de Fontainebleau es la obra más ambiciosa y donde se desarrollan estos
planteamientos; pero el lenguaje clásico de los órdenes es una estructura decorativa que
evoca el Clasicismo.
En el siglo XVII, la sistematización va a
permitir el desarrollo del palacio real
barroco, la lleva a cabo Salomon Brosse,
edificio tres grandes palacios: château
de Coulommiers, el château de
Blérancourt y el palais de Luxembourg
en Paris. El primero de planta en U, los
otros tienden a estructurar el cors de
logis en un volumen unitario con
pabellones angulares, se definen
apartamentos
completos
e
independientes que aportan un nuevo
concepto que permite la construcción
de espacios simétricos y construidos
por estos modelos de apartamentos.
Sus extensos jardines y la expansión hacia el paisaje, constituyéndose como una unidad
ordenada e infinita. François Mansart continua estas experiencias en el château de Maison y
en el de Blois con tres ejes. El Château de Vaux-le-Vicomte, fija la imagen del château
francés precedente directo de Versalles y los palacios reales del barroco. Mandado por
Nicolas Fouquet al arquitecto Luis Le Vau y al paisajista André Le Nôtre, desarrollaran un
conjunto palacio (palacio y jardines) se derribó el pueblo original de Vaux, se talaron
bosques y se desvió el curso de un río para suministrar el agua, proyecto un
palacio con un patio flanqueado por edificios destinados a actividades administrativas; eje
longitudinal marca el vestíbulo y el salón oval; gran parque proyectado por Le Nôtre como
continuidad y unidad entre naturaleza y arquitectura; perfecta separación entre las alas
administrativas y las privadas a través del apartamento doble acentuando la separación
entre vida pública y privada. Dispone una planta simétrica, bloque central largado y dos
pequeñas alas queda divido por un eje central en dos appartements. Eje formado por dos
salones, el primero era un vestíbulo de planta cuadrada rodeado de columnas de aspecto de
cierre tras el patio de entrada; tras él un salón oval sobresalía hacia los jardines colocado en
sentido transversal al eje del edificio, cubierto con una cúpula. Del vestíbulo al pasar a este
salón se abría un amplio espacio hacia los lados y al frente unos grandes ventanales
introducían el edificio en los jardines. El palacio de Vaux-le-Vicomte el primer ejemplo de
mansión proyectada en intima unión y armonía con la naturaleza.
2.3. Los palacios reales del barroco.
En el Louvre se trabajaba para transformarlo en residencia real, un edificio de cuatro alas
con aspecto de fortaleza, se le fueron realizando múltiples reformas. Con Luis XIV y
Colbert,este proyecto adquiere un carácter prioritario se pretende formular una
arquitectura paradigma de la Francia absolutista. Colbert desecho los proyectos iniciales de
cerramiento de la zona este. La fachada fue construida por Louis Le Vau, Claude Perrault y
Charles Lebrun. La Columnata fue el primer ejemplo del estilo Luis XIV. Posee aspectos
barrocos (escala, profundidad), rasgos clásicos (volumen, horizontalidad, entablamentos) y
la presencia italiana en el empleo de una cornisa horizontal y un orden continuo sobre
estilóbato. Se configura como el prototipo de arquitectura barroca en Francia, refleja el
poder distante del absolutismo con un lenguaje plástico claro y una lectura clásica.
Versalles representa el punto culminante de la arquitectura palacial europea por su perfecta
escenificación del poder absoluto. Un todo unitario, palacio, espacio urbano y jardines, en el
que cada una de las partes se complementa con el resto. El palacio se convierte en el núcleo
central, elemento difusor y receptor. Todos los elementos presentan una estructura
geométrica. Se sitúa el Patio de Honor, se abre a la ciudad y a las vías de comunicación. Se
sitúa el palacio y en su parte posterior se abren los jardines y el bosque se extienden hasta
perderse en el horizonte.
El palacio se articula con una planta en forma de U en el centro se abre el patio central y se
disponen las principales dependencias. Del cuerpo central salen dos alas laterales, donde las
estancias se organizan en torno a patios centrales. Construye el eje central en forma de U,
integrando el viejo castillo de Luis XIII rodeado de nuevas edificaciones como un bloque
cuadrado con dos alas como un gran patio delante de la entrada principal.
Jardines de Versalles fueron diseñados
por André Le Nôtre; el terreno de planas
terrazas se llena de surtidores, parterres
geométricos y zonas boscosas, se incluyen
pequeñas arquitecturas y grupos
escultóricos, de esquemas racional y
científico; se crea un modelo de jardín
que se extiende. La ciudad se empieza a
construir en 1670, pensada para
residencia de los nobles que vivían de los
favores del rey y servían a la corte.
Entramado regular de calles según las
normas marcadas por el rey, establece modelos tipológicos de residencias dependiendo de
los moradores. El acceso se estructura en un tridente en una plaza de armas cuyo
precedente es la Plaza del Popolo de Roma.
El eje de los jardines continuaba la línea de avenida central del tridente; el espacio se ordena
a partir de ese eje longitudinal.
2.4. El jardín y su desarrollo.
La mirada hacia la Antigüedad determina una nueva estructura y un nuevo significado, un
mayor protagonismo es en el jardín con las ideas sobre el espacio y su construcción van ir
afianzándose. Para los arquitectos el jardín es arquitectura, se rige por los principios y las
teorías de la propia arquitectura. Alberti establece cómo casa y jardín deben formar una
unidad artística y con las mismas formas geométricas.
Belvedere de Bramante o en la villa Madama de Rafael, el jardín se construye sobre una
colina a base de terrazas y juegos de escaleras, creando un espacio en perspectiva, una
abstracción geométrica tridimensional bajo las leyes de la perspectiva que tiene como
referencia y punto focal el palacio. Mismo planteamiento siguen los jardines Tívoli de villa
d’Este de Pirro Ligorio, el palacio se alza sobre una colina y el jardín escenográfico se ordena
en terrazas descendentes unidas entre sí por escaleras, rampas y camino. El gusto manierista
acentúa los elementos acuáticos, los bosquecillos disciplinados o las grutas que pretenden
efectos de sorpresa. En los jardines de villa Borghese en Roma, el punto focal se pierde la
naturaleza se ordena por sí misma.
En el siglo XVII las formas onduladas de la arquitectura barroca aparecen en los jardines,
acentúan su carácter más escenográfico con numerosas fuentes y cascadas. En Francia los
jardines geométricos cuyos ejemplos
como el valle del Loira y de influencia
italiana como palais de Luxembourg en
Paris. Francia va tomando el relevo
como centro del paisajismo europeo y
los jardines de Vaux-le-Vicomte, las
Tullerías o Versalles son un elemento
más para reflejar el poderío político y económico de Luis XIV.
En los jardines del palacio Versalles, André Le Nôtre parte una estricta geometría
simétricamente desde un eje longitudinal, se distribuyen parterres, arboledas, lechos de
flores, estanques, fuentes, etc.; con un metódico trazado hasta fundirse con el paisaje
natural. Estos jardines y la arquitectura se han convertido en símbolo del poder monárquico.
Versalles plantea una ambición por integrar los diferentes espacios en un todo unitario que
determina un ambiente paisajístico con una intención de infinito.
3. Otros modelos.
3.1. Biblioteca, hospital, teatro.
La biblioteca, el hospital y el teatro no se logrará definir estructuras de edificios codificados a
sus necesidades funcionales y simbólicas.
La primera biblioteca renacentista de Michelozzo que construyó para Cosme de Médici en el
convento de San Marcos de Florencia, planteo una gran sala largada dividida en tres naves
por columnas e iluminada con ventanales en ambas paredes laterales. Se mantiene la idea
de nave rectangular y cerrada dispuesta con un expresivo orden jónico. Mismo modelo se
utiliza en la biblioteca en el monasterio de San Francisco de Cesena por Domenico Malatesta;
los libros se encontraban sobre los pupitres y con dos filas de columnas. Un segundo modelo
es el que propuso Miguel Ángel en la
Biblioteca Laurenziana con una gran
sala
de
planta
longitudinal,
desaparecen las columnas, ofrece
continuidad
espacial
y
una
perspectiva clásica dominada por un
punto de fuga. Se accede a través de
un pequeño vestíbulo donde diseña
su escalera. Dispone un orden
monumental de pilastras adosadas a
las paredes, al exterior se
corresponden con contrafuertes; los
intercolumnios se alternan grandes
vanos de iluminación y ventanales ciegos. Los pupitres se disponen a ambos lados donde se
colocan los libros. Modelo que utiliza Jacopo Sansovino en la Biblioteca de San Marcos,
diseña una logia continua y trasparente, abovedada y ornamentada. Los pupitres se
disponen a ambos lados y mantienen los libros encadenados; la gran sala abovedada se
derrumbó y fue terminada por Vicenzo Scamozzi en 1583.
El tercer modelo propuesto por Juan de Herrera en la Biblioteca de El Escorial, con una gran
sala rectangular cubierta con bóveda e iluminada por ventanales abiertos en las paredes
laterales; la novedad reside en las paredes que se encuentran revestidas por estanterías
que albergan los libros, están al alcance de quien los necesite y se ordenan por temas.
Modelo adoptado por Domenico
Fontana al construir la Biblioteca
Vaticana del patio del Belvedere,
sistema que se difundió rápidamente y
aporta la severidad del Clasicismo en su
fachada externas, estilo en el que
construyeron en los siglos XVIII y XIX Los
hospitales o los teatros tendrán un
tratamiento singular e intentaran ir
definiendo un modelo que tardara en
poderse considerar como una tipología
codificada.
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