Subido por Adolfo Cuellar

LA BUENA VIDA DE LA MUERTE

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LA BUENA VIDA DE LA MUERTE
Intro:
La muerte se encuentra sentada en su sillón veraniego y en su temporada veraniega,
disfrutando de sus vacaciones, expresando su huesudo descanso, comenta de manera
jocosa sobre lo vital que es para ella el no tener ocupaciones, no estar encargándose de
homicidios, suicidios, enfermedades mortales, pacientes terminales, accidentes de
muerte, en fin, etc. También en su alocución, comenta que para logarlo tuvo que
desconectarse de redes, de celular, y otros medios, que tuvo que hacerse la de la oreja
mocha, para no acudir a velorios, funerales, cremaciones, lloriqueos, flores, iglesias y
cementerios. Y con ellos habla que realmente valora la vida, la vida que por unos días ha
considerado buena, plácida, relajada, meritoria para ella. Luego de este introductorio
diálogo que lo dirige hacia su público, ella prosigue mostrando algunas situaciones:
1 Escena (sobre el suicidio)
Muerte: Quien entiende a los seres humanos¡ hoy quieren vivir y mañana quieren morir¡.
La vida les cambia y me buscan como si fuera su inmediata solución. Recuerdo uno de
esos casos, observen:
(Cambia de personaje y representa una situación entre un padre y una hija)
Padre: Te dije que no te vieras más con ese muchacho, que no te convenía…si estuviera
viva tu madre también te lo habría dicho.
Hija: Ella está viva ¡… pero nos abandono
Padre: Para mí desde ese día murió. Y a ti no sé qué te sucede, no quieres hablar, no
comes, vas mal en el colegio,…ese muchacho te tiene mal
Hija: (Hace un distanciamiento y se dirige al público, mientras el padre vuelve al
personaje de muerte)
Sabía que mi padre tenía razón, pero yo no quería escucharlo, estaba resentida, con él,
con mi madre, con aquel muchacho que jugo con mis sentimientos y también me había
traicionado) Dirigiéndose a su padre: Si ¡estoy resentida con la vida¡ y a ti no te importa,
que te importa de mí, solo tienes tiempo para tu oficio, para tus preocupaciones
Padre: No me faltes al respeto, soy tu padre! (queriendo abofetearla y congela la acción
unos segundos la hija mientras la muerte reaparece.
Muerte: Y ese fue mi momento de intervenir. (Dirigiéndose a la hija mientras va
descongelando la acción y ella recibe una botella y un frasquito pequeño para mezclar
entre si)
-Bien has dicho¡, para que vivir de ese modo, toma bebe, ahoga tus penas y acaba de
una vez con tu tormento¡
(Acciones mudas, ella mezcla el contenido de los envases, algo asustada, llora, y
dudando, bebe de ella, la muerte se acerca, la consuela, la acuna en sus brazos y ella
muere)
-Fue tan fácil para mí, pero difícil para ella, cuando su padre se enteró ya no había nada
que hacer. Y si¡,la engañe, desde que uds no se acuerden y crean que mientras vivan
tienen esperanza, todo va bien para mí.
2 Escena: (Sobre la autoestima) Vuelve la muerte a su espíritu veraniego de vacaciones.
Muerte: (Barajando naipes en su mano y sorbeteando un refresco) Puedo decirles que
esto de morir no es un juego. Y por si no lo saben, soy experta en ayudarles a
desvalorizar eso que llaman principios, eso que tanto les insisten en las instituciones, eso
de lo que hoy en día se han olvidado los padres de enseñarles. Principios¡ que vanalidad,
perderá de tiempo cuando pueden hacer todo lo que se les dé la gana¡…Claro
efectivamente yo estoy detrás de todo eso. Me conviene, porque mientras lo hagan, saco
provecho de mi oficio, que sencillamente es matar. Observen esto:
(Aparece una anciana jocosa, jovial, haciendo ejercicio matutino al compás de una música
y se encuentra a un joven pensativo, ambos en escena)
Anciana: Joven, te ocurre algo?
Joven: (silencioso)
Anciana: Si te puedo ayudar en algo, puedes comentarme…
Joven: (silencioso)
Anciana: Si te animas podemos hacer ejercicio juntos…lo hago desde hace años y mira
como me conservo, tengo ya mis años pero saco provecho de ellos
Joven: No tengo ánimos, cada vez que intento algo todo me sale mal, la verdad, no sirvo
para nada!
Anciana: Como puedes decir eso, si apenas comienzas a vivir, ya quisiera tener tus años
Joven: Le he perdido interés a las cosas, a mi estudio, de hecho no quisiera volver más.
No soy bueno para el deporte, no soy bueno para artes, no soy bueno para literatura, no
soy bueno para nada!
Anciana: El concepto de ti mismo no depende de las circunstancias, sino de quien
realmente eres, un ser especial, un ser único. Cuida tu saluda, arréglate, supérate y deja
ya de escuchar esas voces que te dicen que no eres capaz. Valórate¡
Joven: (hace algunas piruetas con su cuerpo) Y ese dia fue como una voz en el espejo,
me di cuenta que podía hacer otras cosas, que podía decidir por ser feliz! Y entendí que
no soy perfecto
Muerte: (Desde su sillón veraniego) Ese joven no se dejó engatusar con mis malos
pensamientos, como que descubrió la razón de amarse a sí mismo, cosa con la que
tampoco estoy de acuerdo.
3 Escena: (la contradicción). Se escucha el sonido de unas campanas, la muerte se
percata que su tiempo de vacaciones ha terminado.
Muerte: Hayyyyyy pero no todo en la vida es color de rosa, ni siquiera para mí que soy la
muerte. (Mientras se va cambiando de su traje de muerte cadavérica). Cada vez que te
ves a ti mismo positivamente, me dejas sin espacios, cada vez que por encima de los
sufrimientos te sobrepones, me dejas débil, cada vez que eliges vivir esos valores que
tanto te recalcan, me rechazas, porque yo soy la muerte, y vivo de tus desganos, de tus
infortunios, de tus malas actitudes, me alimento de tus errores si es que no aprendes de
ellos, en sí, mi oportunidad de robarte la vida y acabar con ella, la preparas tú. Ya es hora
de volver a mi oficio, Ojala uds me dieran una buena vida, relajada y veraniega olviden
eso del suicidio no es la mejor opción y déjenme en paz….FIN
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