A PROBLEMAS URGENTES ... SOLUCIONES DURADERAS Martha García de Valdés Con alta frecuencia los empresarios y gerencias se enfrentan a problemas dentro de sus organizaciones, entre ellos encontramos los financieros, la competencia del mercado, la disminución de las ventas, la exigencia cada vez mayor de sus clientes y la brecha entre lo que ellos quieren lograr en sus empresas y el nivel de compromiso con el que sus empleados lo hacen . A menudo el hecho de estar dentro de la operación diaria de la empresa y convivir rutinariamente con sus dificultades hace que su capacidad de percepción y reacción ante varios problemas se disminuya, podríamos decir que el umbral para percibirlas se va ampliando y de esa forma se vuelve ( nos volvemos ) “ mas tolerantes “ para muchas cosas; Para justificar la mala atención a un cliente porque es muy “latoso” , Los defectos de fabricación porque hay muchos pedidos, La falta de personal capacitado porque traer a gente más capaz cuesta más dinero y no se tiene... El desperdicio de materia prima porque urge entregar el pedido y ni modo... cómpralo al precio que sea y dónde sea... Las organizaciones enferman igual que un organismo vivo... de hecho lo son. Las carencias de estas empresas sean en sus procesos, en su ambiente psicológico o en sus estructuras, son susceptibles de enfermar. Hay empresas que tienen “resfriados”, otras padecen “pulmonías” y hay algunas que mueren de severas neumonías. ¿ Y sabe usted quiénes son aquellos que detectar éstos síntomas desde que hacen sus primeras apariciones? El personal de línea... aquellas personas que trabajan directamente en ello. En cada una de las áreas el personal sabe cuáles son los problemas específicos y es más los han evidenciado muchas veces, inclusive algunas ocasiones los han gritado, han propuesto soluciones. Después de varias veces de haberlo hecho y no haber sido escuchados de repente se vuelven mudos. El propietario o la gerencia se ven agobiados por esas y muchas cosas más, responden que luego lo arreglarán, que no urge, que tiene mucho en que pensar y problemas que resolver. Así se empieza a gestar la enfermedad, comienza con algo simple pero uniendo las simplezas de cada área aunque sean pocas resulta que puede empezar a visualizarse una empresa achacosa y a la larga enferma. El tiempo pasa y se encarga de generar el espacio para que estos síntomas se vuelvan grandes problemas. ¿ Qué se está omitiendo? La visión para ver el conjunto y no solo las partes aisladamente, esta visión además ha de ser de observación precautoria y profiláctica; preventiva más que correctiva. Desafortunadamente estamos acostumbrados a “dar bomberazos”, a corregir sobre la marcha y no a planear. Nos hacen falta propietarios y gerencias que puedan adelantarse un paso y retroceder analíticamente la vista para detectar las áreas de oportunidad que pueden convertirse en áreas de enfermedad. Necesitamos una visión de “ Médico organizacional” no solo para que cure sino para que prevenga. Esta visión puede ser entrenada, complementada con el uso de herramientas y técnicas y sobre todo con un pensamiento sistémico y estratégico.No tiene por qué ser caro, usted lo puede generar capacitando, puede ser externo o interno , su nombre: CONSULTOR El CONSULTOR tiene una mente inquisidora, busca nuevas alternativas, analiza el todo y no solo las partes , tiene puesta la mirada en TODO el proceso, visualiza las interrelaciones , propone nuevas alternativas ,se integra e integra equipos de trabajo . Con el consultor se pueden comentar las ideas nuevas, los problemas. Ayuda como caja de resonancia a analizar y evaluar diferentes alternativas, tiene en mente el pasado de la organización para aprender de el, mejora el presente eficientando los procesos y a futuro proyecta los cambios que pueden dar un crecimiento y consolidación a la efectividad de la empresa . Un consultor puede ser su médico de cabecera organizacional .