Subido por Valeria Gómez

El Autor, el Lector y Saki Turkish Twilights And Reckless Nights

Anuncio
25/4/2019
El Autor, el Lector y Saki | Turkish Twilights And Reckless Nights
2nd August 2013
El Autor, el Lector y Saki
Uno de los cuentos que más me ha parecido que apela al Lector e increpa a su credulidad en el Autor es el de
“The Open Window” o "La ventana abierta [http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/ing/saki/ventana.htm] " de Hector
Hugh Munro, Saki.
La anécdota es trivial una vez que uno termina la lectura pero mientras transcurre es un hecho universal: la
narración, el acto de contar, en este caso, el secreto íntimo relatado como una revelación secreta. A la par, Saki
hace una crítica a las costumbres de presentación a través de cartas, las cuales, aunque útiles, no representan de
modo alguno ni la realidad ni la esencia de las personas.
[http://1.bp.blogspot.com/-5xC6QHV_AQ/UfrbVy71yYI/AAAAAAAABjI/JfWJ3Jm_HLc/s1600/5072463-vintage-portrait-of-a-victorian-lady-standing-by-acastle-window-shot-in-the-antique-castle-den-bran.jpg]
Saki suele escribir de forma reaccionaria ante la sociedad victoriana en la que creció y la represión colonial en la
que nació en Birmania, colonia británica. La severidad, rigidez y terquedad de la época son combatidas con su
agudeza mental, su humor irónico y su conocimiento del mundo oriental, el cual obtuvo en su estadía en Birmania
como policía.
En el cuento, cuyos protagonistas son Vera Sappleton y Framton Nuttel, el escritor combate, por un lado, las reglas
de etiqueta y las fórmulas rutinarias por las cuales se rige la vida de finales del siglo XIX; y por otro lado, con toda
naturalidad nos arrastra, así como ocurre con el incauto Nuttel, por la cotidianidad y normalidad de la conversación
que la joven de 15 años es capaz de proporcionarnos.
La relación que Vera y Nuttel establecen, es la misma que existe entre Autor y Lector.
La niña de la casa Sappleton es poseedora de una mesura y prudencia tal que no es posible dudar de lo que diga.
Su respeto por la etiqueta victoriana y su buen comportamiento le brindan veracidad. Del mismo modo actúa el
Autor de un texto literario, una vez que compramos el libro o nos sentamos a leer nos comprometemos a creerle
debido a unas reglas básicas: el Autor no puede modificar nada de lo ya escrito y por tanto, no puede contar más
de lo que ya hay.
En cambio, Nuttel es introspectivo y se resiste a realizar la consabida visita a los vecinos para presentarse como
https://turkishtwilightsandrecklessnights.blogspot.com/2013/08/el-autor-el-lector-y-saki.html
1/5
25/4/2019
El Autor, el Lector y Saki | Turkish Twilights And Reckless Nights
indican las buenas costumbres. Antepone a su depresión y enfermedad nerviosa, la recomendación de su
hermana de conocer a la gente con la que ella interactuó en el campo, a donde él va para sanar gracias a sus
buenos aires. Es el caso del Lector pues nosostros vemos que estamos en la misma circunstancia que ese
enfermizo hombre puesto que, sin importar nuestro estado físico o mental, decidimos entablar una relación con el
Autor (por algo escogimos entrar a esa casa y no a otra, a ese texto y no a otro) y, con ello, aceptamos las reglas
del trato, leerle, dejarlo hablar primero.
Por tanto, mientras Vera tiene destreza en la convivencia victoriana, Nuttel es inexperto en establecer relaciones
personales de la nada, por ello, emplea las cartas de presentación que le ha hecho su hermana para visitar a la
familia Sappleton. Saki emplea las cartas de presentación tal como ocurre con los textos literarios y su suporte. La
portada, contraportada, imágenes y el título son nuestro primer indicio de lo que ocurrirá en la obra.
Ya que Vera y Nuttel esperan que la tía lo reciba como es debido, ambos entablan una charla que se inicia con el
típico silencio incómodo, luego, ella pregunta un par de cosas. La joven no interroga porque desee saber sobre él
sino para conocer qué tanto sabe de ellos. Sin indicio alguno de lo que ocurre no sólo en la población sino en esa
casa por parte del visitante, ella puede dar rienda suelta a su especialidad.
[http://3.bp.blogspot.com/-2sp5264KByo/UfrcLJzSxpI/AAAAAAAABjY/ovG68GPrn1w/s1600/sakimunro6.png]
En la relación Autor y Lector también se comienza con esa comunicación silenciosa: el Autor habla y el Lector
escucha. El primero está consciente de que el segundo posee conocimientos previos del mundo y de su texto así
que el Autor en lugar de preguntarle cosas, supone lo que sabe el Lector.
Una vez pasado esto, nosotros los Lectores comenzamos a interactuar con el Autor. Primero, eligiendo si nos
quedamos a continuar el texto o no, luego, optamos si creemos o no en lo que nos dice, y después, hacemos algo
que espera el Autor: tapamos hoyos, completamos los vacíos de información del texto.
Volviendo al cuento de Saki, la señorita Sappleton le confiesa al visitante el más oscuro y penoso secreto de la
casa. Con gravedad en su voz y pesar en su comportamiento, relata que su tía es viuda y que además ha perdido
a sus dos hermanos. La negación de la pérdida ha hecho que los espere con la ventana abierta pues es por donde
ellos entraban a la casa junto con el perro.
La adolescente cuenta la historia, el visitante se queda a pesar de la misma y cree en lo dicho por la joven y en la
joven misma. Además, aunque ella no lo ha dicho, cree que la tía de la chica está loca. La historia es tan triste que
https://turkishtwilightsandrecklessnights.blogspot.com/2013/08/el-autor-el-lector-y-saki.html
2/5
25/4/2019
El Autor, el Lector y Saki | Turkish Twilights And Reckless Nights
la pesadumbre y el dolor embargan la voz de la chica, sin embargo, no sólo termina la historia sino que da detalles
nimios del impermeable blanco del tío o la tonada irritante del hermano.
Con propensión a que se le alteren los nervios, Nuttel obviamente se predispone a enfrentarse con una mujer loca
que cree en el regreso de sus muertos. Por su parte, la muchacha ha cumplido con amenizar el tiempo del visitante
por lo que no dice a la tía la charla que ha tenido con él.
Es cierto, así como la tía lo ha pedido, Vera ha sabido entretener y cumple con su función. Del mismo modo, el
Autor suele darnos diversión pese a que suframos con los personajes, los odiemos o nos provoquen lástima, sin
embargo, lo que ocurra entre ese Autor y ese Lector no es posible decirlo a otros lectores ya que cada uno tiene su
propia experiencia en esa relación.
[http://3.bp.blogspot.com/-NuscOw8Np0/UfrcUaFXQII/AAAAAAAABjg/HPxgFhtntY4/s1600/dandy.jpg]
El visitante, con la prudencia victoriana que se le exige, omite lo que se le ha revelado, en especial, porque este
día es el aniversario de las muertes. Por su parte, la tía Sappleton, con toda cordialidad, confiesa que espera a los
tres cazadores y Nuttel evidentemente la cree chiflada.
Él no esperaba que la tía de inmediato demostrara su demencia que, además, se acompaña con un parloteo y con
vistazos a la ventana. Por eso, el visitante considera horrible la situación tanto por la locura de la anfitriona como
por no saber cómo salirse por la tangente de la charla.
La tía actúa como aliciente de la imaginación y de la realidad del Lector, es decir, si lo que el Autor nos ha dicho en
su respectivo texto literario no parece lo suficientemente real, no hay más que echar un vistazo a la realidad misma
para que ésta avale en lo posible al texto literario. Esta verdad de la vida puesta en un texto literario puede que nos
parezca incómoda, horrible o estupenda, sin embargo, es lo que nos da el Autor y es lo que le aceptamos creer.
El enfermizo Nuttel no puede retirarse debido a las reglas de la visitación así que no ve otra opción más que
recurrir a la “ilusión bastante difundida” de que la gente desconocida esté deseosa de conocer sobre su salud, es
decir, acude al refugio de las buenas costumbres: habla sobre el motivo que lo trajo al campo.
Por horrible o maravillosa que sea la realidad que nos muestra ese Autor específico, nosotros, los Lectores
tampoco podemos irnos. El enfermizo y pobre hombre del cuento de Saki ni el Lector del texto literario estamos
https://turkishtwilightsandrecklessnights.blogspot.com/2013/08/el-autor-el-lector-y-saki.html
3/5
25/4/2019
El Autor, el Lector y Saki | Turkish Twilights And Reckless Nights
presos, somos libres pero nos ata el deseo de conocer, de saber, en nuestro caso, el desenlace de la historia para
hacer mejor nuestra realidad, además ya hemos aceptado lo que el Autor nos ha dicho.
El recurso no le funciona a Nuttel y vuelve el rostro, en busca de auxilio o comprensión, hacia la que sabe manejar
la etiqueta victoriana pero ella mira con terror la ventana: tres figuras humanas y una canina llegan por la ventana;
la tía naturalmente los espera con entusiasmo. Él ya ha conocido el secreto de la casa Sappleton por lo que sabe
que los muertos retornan, entonces, el terror se apodera del visitante y hace que huya despavorido.
Vera Sappleton, pese a oír que el pobre Nuttel no puede sufrir sobresaltos, continúa con la charada y no sólo echa
mano de su facilidad para hilar una narración creíble sino también de la modulación de voz y la teatralidad como
hacía en épocas remotas el contador de cuentos: “la niña tenía puesta la mirada en la ventana abierta y sus ojos
brillaban de horror. Presa de un terror desconocido que helaba sus venas, Framton se volvió en su asiento y miró
en la misma dirección”.
[http://4.bp.blogspot.com/zCaAfpn_wi0/UfrciZB5cZI/AAAAAAAABjo/xA9XVhFD2ME/s1600/escena+victoriana.jpg]
Así el Autor de un texto literario imita a esta joven embaucadora; no para engañar a la gente, sino para mostrar
una historia que al comienzo pueda parecer inverosímil pero que, con el paso del tiempo y gracias a la complicidad
misma del Lector (aún sin que él lo sepa), se convierta en algo real, tan real que asuste al Lector que vive en la
realidad pues tiene la posibilidad de aprender de ella siempre para mejorar su realidad.
Finalmente, el esposo de la tía habla y pregunta por el visitante que ha huido y la tía le responde con toda
naturalidad. A todos les parece extraño que Framton Nuttel huyera como si hubiera visto un fantasma; a todos,
menos a la prudente Vera. Ella revela que durante su charla él le ha confesado un secreto: los perros, como el
spaniel de la familia, le producen terror desde que una jauría lo acorraló en una tumba abierta.
¿Cómo una joven tan prudente, seria y circunspecta como Vera Sappleton puede mentir? De la misma forma que
un Autor hace al escribir textos literarios, no puede evitar hacer presentes todas las historias fantásticas que luchan
por salir de él.
Publicado hace 2nd August 2013 por Eimy Arriaga
Etiquetas: cuento, Literatura
https://turkishtwilightsandrecklessnights.blogspot.com/2013/08/el-autor-el-lector-y-saki.html
4/5
25/4/2019
El Autor, el Lector y Saki | Turkish Twilights And Reckless Nights
2
Ver comentarios
HEN 29 de diciembre de 2015, 10:31
Buen comentario
Responder
HEN 29 de diciembre de 2015, 10:31
Buen comentario
Responder
Escribe un comentario...
Comentar como:
Publicar
valgr20@gmail
Vista previa
https://turkishtwilightsandrecklessnights.blogspot.com/2013/08/el-autor-el-lector-y-saki.html
Cerrar sesión
Notificarme
5/5
Descargar