Subido por Eliana Duron

Memoria final version 2

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ÁREA DE SALUD
TÍTULO DEL PROYECTO FINAL
ESTUDIO DE LA FRECUENCA DE LOS TRANSTORNOS DE LA
CONDUCTA ALIMENTARIA EN ESTUDIANTES DE LA CIUDAD
UNIVERSITARIA JOSE TRINIDAD REYES. Tegucigalpa Honduras
Tesis para optar al grado de:
Master Internacional en Nutrición y Dietética
Presentado por:
Eliana Mariel Duron Moncada
HNSNMND1246388
Director:
Mercedes Briones Urbano
TEGUCIGALPA, HONDURAS
29 NOVIEMBRE 2016
COMPROMISO DE AUTOR
Yo, Eliana Mariel Duron Moncada con célula de identidad 0801198716519
y alumno del programa académico Master Internacional en Nutrición y
Dietética, declaro que:
El contenido del presente documento es un reflejo de mi trabajo personal
y manifiesto que ante cualquier notificación de plagio, copia o falta a la
fuente original, soy responsable directo legal, económico y administrativo
sin afectar al Director del trabajo, a la Universidad y a cuantas
instituciones hayan colaborado en dicho trabajo, asumiendo las
consecuencias derivadas de tales prácticas.
Firma: ___________________________
i
ÍNDICE GENERAL
Pág.
RESUMEN
6-7
INTRODUCCIÓN
8-11
MARCO TEÓRICO
12
CAPÍTULO 1
Trastornos de la conducta alimentaria
13
1.1.
Generalidades
13
1.2.
Definición
13-14
1.3.
Clasificación de los trastornos de la conducta 14
alimentaria.
1.4.
Epidemiología
14-15
1.5
Etiología
15
1.5.1
Factores predisponentes
15
1.5.2
Factores precipitantes
16
1.5.3
Factores de mantenimiento
16
CAPÍTULO 2
ANOREXIA NERVIOSA
16
2.1.
Definición
16
2.1.1
2.2.
Manifestaciones clínicas
Anorexia Nerviosa
Diagnóstico
2.2.1
Clasificación
de
los
específicas
cuadros
de
la 17
17
de
Anorexia 18
nerviosa
CAPÍTULO 3
BULIMIA NERVIOSA
18
3.1.
Definición
18
3.1.1
Manifestaciones clínicas específicas de la Bulimia 19
nerviosa
3.1.1.1
Otros mecanismos utilizados para compensar el 19
consumo de las calorías ingeridas
3.2.
Diagnóstico
19
3.2.1
Clasificación de los cuadros de Bulimia nerviosa
19
CAPÍTULO 4
TRASTORNO DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA 20
NO ESPECIFICADO
4.1.
Definición
20
4.2.
Diagnóstico
20
CAPITULO 5
Tratamiento de los Trastornos de la conducta 20
alimentaria
5.1
Tratamiento de la Bulimia nerviosa
20
5.1.1
A nivel nutricional
21
5.1.2
A nivel farmacológico
22
5.1.3
A nivel psicológico
22
5.2
Tratamiento de la Anorexia nerviosa
23
5.2.1
Tratamiento nutricional
23-27
CAPITULO 6
Prevención de los Trastornos de la conducta 27-28
alimentaria
6.1
Visión integrada de las intervenciones
29
6.2
Aspectos importantes sobre la prevención
29
6.3
Actuaciones de prevención del personal de 30
atención primaria en salud. Prevención primaria
6.4
Prevención secundaria
CAPITULO 7
Detección de los trastornos de la conducta 31
alimentaria
7.1
Instrumentos para cribar e identificar trastornos 32
de la conducta alimentaria
7.1.1
Cuestionario SCOFF
32
7.1.2
Figura corporal de Gardner
32
CAPITULO 8
Señales
comunes
y
2
31
diferenciadoras
entre 32-33
anorexia nerviosa y bulimia nerviosa
MARCO EMPÍRICO
CAPÍTULO 9
9.1.
9.2.
9.3.
9.4.
9.5.
9.6.
9.7.
CAPITULO 10
CAPÍTULO 11
DISEÑO METODOLÓGICO
34
35
Introducción
35-37
Variables
38
Muestra
38
Cálculo de la muestra
Criterios de selección de la muestra
Instrumentos de Medición y Técnicas
39
39-40
41-42
Procedimientos
43
DISCUSIÓN
DISCUSIÓN
43
CONCLUSIONES
GENERALES
Y 43
RECOMENDACIONES
BIBLIOGRAFÍA
43
GLOSARIO
43
ANEXOS
43
3
RESUMEN
En el estudio de la frecuencia de los trastornos de la conducta alimentaria en
estudiantes de la Ciudad Universitaria José Trinidad Reyes. Tegucigalpa
Honduras, el objetivo general es valorar la frecuencia de los trastornos de la
conducta alimentaria en los estudiantes de la carrera de Química y Farmacia
de la Ciudad Universitaria José Trinidad Reyes (UNAH) a través de la
aplicación del cuestionario SCOFF para verificar la existencia de este tipo de
desórdenes y buscar alternativas para su temprano diagnóstico, tratamiento y
prevención como ser campañas de promoción de estilos de vida saludables.
Los trastornos de la conducta alimentaria, identificados en la comunidad
medico científica por las siglas TCA, son considerados patologías mentales,
que engloban tres enfermedades. Estas son: Anorexia nerviosa, Bulimia
nerviosa, trastorno de la conducta alimentaria no especificado, conocido
también como atracón.
En la valoración de frecuencia de los TCA es necesario conocer el IMC la
distorsión y satisfacción de la imagen corporal ya que significativos por la
estrecha relación existente entre la presencia de TCA y percepciones de la
imagen corporal distorsionadas, y el IMC es útil para valorar el estado
nutricional.
Este estudio
transversal exploratorio de 187 alumnos voluntarios, con 155
mujeres (82.89%) y 32 hombres (17.11%), se valoró IMC, índice de
insatisfacción de imagen corporal, índice de distorsión de la imagen corporal y
riesgo de trastorno de la conducta alimentaria empleándose un equipo de
antropometría , un instrumento para percepción de la imagen corporal
(Figura corporal de Gardner), y un cuestionario para identificar trastornos de la
conducta alimentaria (Cuestionario SCOFF).El 64.17% de alumnos tienen
normopeso, en base al IMC. El 40% de mujeres y 34.38% de hombres tiene
riesgo de padecer un trastorno de la conducta alimentaria de acuerdo al
cuestionario SCOOF, los hombres presentan menos riesgo que las mujeres
cumpliéndose la tendencia del sexo femenino a presentar mayor riesgo a los
trastornos de la conducta alimentaria. El 13.55% de mujeres y 31.25% de
hombres presentan una percepción dela imagen corporal normal, no obstante
las mujeres presentaron porcentaje más bajo que los hombres en cuanto
a la percepción de la imagen corporal.
4
Las variables antropométricas fueron analizadas por medio de estadística
descriptiva, al igual que la conducta alimentaria y la percepción de la imagen
corporal.
Palabras clave

Trastornos de la conducta alimentaria

Anorexia

Bulimia

Percepción de la imagen corporal

Índice de masa corporal

Población universitaria.
5
ABSTRACT
In the study of the frequency of disorders of eating behavior in students of the
City University José Trinidad Reyes. Tegucigalpa Honduras, the overall
objective is to assess the frequency of disorders of eating behavior in the
students of chemistry and pharmacy of the City University José Trinidad Reyes
(UNAH) through the application of the SCOFF questionnaire to verify the
existence of these types of disorders and seek alternatives to their early
diagnosis, treatment and prevention as being promotional campaigns for
healthy lifestyles.
Eating disorders, identified in the community medical scientist by the initials
TCA, are considered mental illnesses, which include three diseases. These are:
Anorexia Nervosa, Bulimia nervosa, the eating disorder not specified, also
known as binge eating.
In the assessment of frequency of acts it is necessary to know the IMC
distortion and body image satisfaction and that significant by the close
relationship between the presence of TCA and distorted perceptions of body
image and BMI is useful for assessing nutritional status.
This cross-sectional study exploratory 187 voluntary students, with 155 women
(82.89%) and 32 men (17.11%), was assessed BMI, rate of dissatisfaction of
index, body image distortion of body image and eating disorder risk using a
team of Anthropometry, an instrument for the perception of body image (figure
body of Gardner), and a questionnaire to identify disorders of eating behavior
(SCOFF questionnaire). The 64.17% of students have normal weight, based on
the BMI. 40% of women and 34.38% of men have a risk of developing a
disorder of eating according to the questionnaire SCOOF, men have less risk
that women fulfilling is the tendency of the female sex to have increased risk of
eating disorders. The 13.55% of women and 31.25% of men have a perception
Dela normal body image, however women presented percentage lower than
men in terms of the perception of body image.
Anthropometric variables were analyzed through descriptive statistics, as well
as the eating behavior and body image perception.
6
Keywords

Disorders of the conduct food

Anorexia

Bulimia

Perception of the image body

Index of mass body

Population University
7
INTRODUCCIÓN
Rosa Behar Médico Psiquiatra afirma que en las últimas décadas del siglo XX y
los inicios de siglo XXI se la ha dado un culto total al cuerpo, debido a ello es que
han surgido varias patologías conocidas como trastornos de la conducta
alimentaria, entre las de mayor prevalencia tenemos la bulimia nerviosa y la
anorexia nerviosa, consideradas síndromes ligados a la occidentalidad. En
Europa y Estados Unidos constituyen un problema de salud pública (1)
Los países de américa latina, debido a la globalización a la influencia de los
medios de comunicación y la publicidad que sobrevaloran el ideal de la delgadez,
no han permanecido alejados de este tipo de enfermedades. (1)
Lo que motiva a estudiar este tipo de trastornos, y a formular la siguiente pregunta
de investigación:
¿Cuál es la frecuencia de los trastornos de la conducta alimentaria en los
estudiantes de la carrera de Química y Farmacia de la Ciudad Universitaria José
Trinidad Reyes (UNAH); aplicando el cuestionario SCOFF (por sus siglas Sick,
control, one, fat, food ?
En Honduras particularmente este tipo de trastornos no se han contemplado
como un problema de salud pública aún, ya que no se ha desarrollado ningún
estudio que refleje la realidad de los TCA en la población hondureña.
Según el informe de la OPS (Organización para la salud) titulado Honduras-Salud
en las Américas las enfermedades nutricionales prevalentes son tres, siendo la de
mayor atención la desnutrición, seguida de la anemia y finalmente la obesidad. (5)
Cifras de desnutrición
De acuerdo con los estándares de desnutrición formulados por la OMS en
Honduras se estima un 30,1% de desnutrición crónica, 1,4% de desnutrición
aguda y 8,7% de desnutrición global en los niños y niñas menores de 5 años, con
lo cual ya se habría alcanzado la meta fijada en el primero de los Objetivos de
Desarrollo del Milenio (10,7%). La baja talla para la edad es más del doble en el
área rural (38,5%) que en la urbana (17,8%); el departamento de Lempira notificó
la talla más baja (54,9%), seguido por Intibucá (53,8%) y La Paz (50,6%). (6)
Cifras de anemia:
Se estima que 40,2% de los niños y niñas de 12 a 59 meses de edad tendrían
anemia. Aunque el problema es nacional, es mayor en la zona rural que en la
urbana, y en la población infantil perteneciente al quintil inferior de riqueza con
respecto al superior. (6)
Cifras de Obesidad:
De acuerdo con los nuevos estándares de crecimiento formulados por la OMS, el
sobrepeso en los menores de 5 años habría aumentado de 3,1% en 2001 a 5,9%
8
en 2006. Tienen sobrepeso 8,1% de los niños menores de 5 años de edad del
área urbana, a diferencia de los que residen en el área rural (4,4%). El sobrepeso
afecta aproximadamente a 60% de las mujeres y constituye un problema
importante de salud pública. (5)
Todo lo anteriormente expuesto confirma el poco interés que se le ha otorgado a
los trastornos de la conducta alimentaria. Este estudio pretende valorar en tercer
periodo académico del año dos mil quince con qué frecuencia se presenta en la
población estudiantil de la carrera de Química y Farmacia este tipo de desórdenes
alimenticios, para en evaluar la forma de cómo se debería abordar, prevenir y
subsanar este tipo de enfermedades.
Considerando que los TCA en Tegucigalpa, Honduras son un terreno
prácticamente inexplorado, por considerarse estas enfermedades como
occidentalistas según (Behar, 2010). El estudio puede servir para tener un
panorama sobre estos padecimientos y tomar decisiones a nivel educativo, y en el
sector salud para promocionar la prevención y evitar la propagación de estas
condiciones. Los TCA no son un tema nuevo se conoce de su existencia desde la
época antes de Cristo, cuando las personas realizaban largos ayunos o se
abstenían de ingerir alguna alimento, sin embargo para la sociedad hondureña
sería un estudio novedoso ya que no existe estudio alguno que nos revele los
TCA que padecen los Hondureños. (4)
El estudio presenta una gran importancia no solo a nivel social, sino también a
sanitario.
Importancia a nivel social; ya que los TCA son condiciones de salud de causa
multifactorial y uno de los factores que condiciona su aparición son los
socioculturales, se ha observado que en a medida que la sociedad sobrevalora la
imagen de la delgadez como característica de belleza la presencia de estas
condiciones de salud aumenta, por lo que es necesario que la sociedad
hondureña conozca los factores de riesgo de estas enfermedades , como
prevenirlas y tratarlas, ya que son condiciones que tienden a ser crónicas y
muchas veces silenciosas, es necesario que los padres de familia, los maestros, y
demás personas encargadas de los adolescentes en riesgo se informen acerca
del tema.
A nivel sanitario, sabemos que la visión de país le está dando un giro significativo
a la atención primaria en salud y que ahora el concepto de una persona sana no
tiene solamente connotaciones fisiológicas, sino también psicológicas y mentales,
por lo que se procura que los pacientes sean atendidos integralmente por el
equipo de salud, esto convierte a el estudio importante a nivel sanitario ya que
revela la realidad de las adolescentes en cuanto al riesgo de padecer un TCA, y
del sistema sanitario puede tomar medidas a una vez obtenidos los resultados.
9
Objetivo General:
Valorar la frecuencia de los trastornos de la conducta alimentaria en los
estudiantes de la carrera de Química y Farmacia de la Ciudad Universitaria José
Trinidad Reyes (UNAH) a través de la aplicación del cuestionario SCOFF para
verificar la existencia de este tipo de desórdenes y buscar alternativas para su
temprano diagnóstico, tratamiento y prevención como ser campañas de
promoción de estilos de vida saludables
Objetivos Específicos:
Describir las características que presentan los alumnos en riesgo de padecer un
TCA según la escala de SCOFF.
Evaluar el estado nutricional de los alumnos en riesgo de padecer un TCA,
midiendo el IMC según tablas de la OMS.
Valorar la frecuencia de la distorsión de la imagen corporal aplicando el Test de la
Figura corporal de Gardner.
10
MARCO TEÓRICO
11
CAPÍTULO 1 TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA
El capítulo
a continuación desarrolla temas esenciales sobre que son los
trastornos de la conducta alimentaria, la prevalencia que tienen hoy día y los
riesgos que conllevan este tipo de enfermedades.
1.1 Generalidades
Para la organización mundial de la salud la nutrición se define como el consumo
de alimentos en función de los requerimientos dietéticos del organismo. Por lo que
una nutrición equilibrada y una actividad física periódica constituyen elementos
fundamentales para tener una buena salud. Una mala nutrición puede
desencadenar enfermedades al reducir la inmunidad, modificar el desarrollo físico
y mental, y disminuir la productividad. (6)
Para tener una buena nutrición que se traduzca en una buena salud es
indispensable tomar en cuenta
que existen seis nutrientes esenciales,
carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas, minerales y agua. Si la ingesta de
estos nutrientes no es equilibrada existe un riesgo aumentado de presentar
problemas de salud por deficiencia de nutrientes. (7)
Este tipo de disturbio o desequilibrios en los hábitos alimenticios, aunados a un
control excesivo del peso constituyen hoy en día lo que conocemos como
trastornos de la conducta alimentaria, cuyas consecuencias son el deterioro de la
salud física y del funcionamiento psicosocial. (8)
1.2 Definición
Los trastornos de la conducta alimentaria, identificados
en la comunidad
medico científica por las siglas TCA, son considerados patologías mentales,
que engloban tres enfermedades. Estas son: Anorexia nerviosa, Bulimia
12
nerviosa, trastorno de la conducta alimentaria no especificado, conocido
también como atracón. (8)
Estas enfermedades tienen en común que se caracterizan por una
preocupación excesiva por lo que se come , una tendencia marcada por el
control del peso y una sobreestimación a la imagen corporal. (9)
Según (8)la definición de TCA es:
Los TCA constituyen un grupo de trastornos mentales, caracterizados por una
conducta
alterada
ante
la
ingesta
alimentaria
y/o
aparición
de
comportamientos encaminados a controlar el peso. Esta alteración ocasiona
problemas
físicos
y
del
funcionamiento
psicosocial.
Los
TCA
son
enfermedades que tienen como características principales un comportamiento
distorsionado de la alimentación y una extrema preocupación por la
autoimagen y el peso corporal los principales representantes de este grupo
son la anorexia nerviosa (AN) , la bulimia nerviosa (BN) y el TCA
no
especificado, donde se incluye el trastorno por atracón.
1.3 Clasificación
Dentro de este grupo de trastornos encontramos la anorexia nerviosa, bulimia
nerviosa y trastorno de la conducta alimentaria no especificado, que se
conoce también como trastorno por atracón. (8)
1.4 Epidemiología
Según el género, la distribución de trastornos de conducta alimentaria,
presenta mayor prevalencia en las mujeres, sobre todo adolescentes y adultas
jóvenes. Según la edad la mayor prevalencia se observa entre los 15-25 años.
Algunos factores determinantes relacionados con los TCA son, el sexo, la
edad, como se acaba de mencionar, ser hijo único, familia monoparental,
muerte de algún progenitor, antecedentes de abuso sexual, maltrato,
depresión, obesidad, ser familiar de alguien que experimentó algún TCA. Los
atletas, modelos y deportistas por las responsabilidades que demandan sus
oficios, muestran un riesgo aumentado de padecer un TCA. (8)
En España las cifras de frecuencia de anorexia nerviosa son de 0.3% en
población, afectando principalmente a las mujeres, con una relación hombre
13
mujer de 1/10. Entre los 12 -25 años es más frecuente su aparición. Y las
edades entre 14.18 años presentan un riesgo aumentado. (10)
Según (11) se ha observado un aumento de la prevalencia de los trastornos
de la conducta alimentaria desde 1950. Estos mismos autores afirman que la
prevalencia de anorexia nerviosa varía entre 0.5 y 1%, la bulimia nerviosa
entre 1-2 y 4%, el trastorno de la conducta alimentaria no especificado es el
de prevalencia más alto con un 14%.
En Chile la prevalencia encontrada en un estudio entre los años 2007-2009 en
jóvenes entre 12 y 18 años fue de 0.4%. una cifra tan baja puede ser debido a
que solo se consideraron Anorexia nerviosa
y
Bulimia nerviosa y no se
consideró el trastorno de la conducta alimentaria no especificado, que suele
ser el que presenta mayor prevalencia. (11)
En Honduras no se ha publicado ningún estudio que indique la prevalencia de
los trastornos de la conducta alimentaria. Se ha orientado la investigación a
temas de desnutrición.
1.5 Etiología
Los Trastornos de la conducta alimentaria son enfermedades que aparecen
por varias causas, diversas investigaciones han buscado el origen de este tipo
de trastornos, pero no se han encontrado resultados precisos, a diferencia se
observan una serie de factores que inciden en el desarrollo de la enfermedad.
(7)
1.5.1 Factores predisponentes según (7)
a) Factores genéticos
b) Edad entre 13- 20 años
c) Trastorno afectivo
d) Introversión
e) Obesidad
f) Nivel socia medio/alto
g) Familiares con trastorno afectivo
h) Familiares con adicciones
i) Familiares con trastornos de la ingesta
j) Obesidad materna
14
k) Valores estéticos dominantes
1.5.2 Factores precipitantes según (7)
a) Cambios corporales adolescentes
b) Separaciones y perdidas
c) Rupturas conyugales
d) Contactos sexuales
e) Incremento rápido de peso
f) Críticas respecto al cuerpo
g) Enfermedad adelgazante
h) Traumatismo desfigurador
i) Incremento de la actividad física
j) Acontecimientos vitales
1.5.3 Factores de mantenimiento Según (7)
a) Consecuencias de la inanición
b) Interacción familiar
c) Aislamiento social
d) Cogniciones anoréxicas
e) Actividad física excesiva y yatrogénica.
CAPÍTULO 2
ANOREXIA NERVIOSA
En este capítulo se discute la anorexia nerviosa, sus manifestaciones,
características principales, así como también los criterios de diagnóstico y la
clasificación con la que puede cursar un cuadro de anorexia nerviosa.
2.1. Definición
La anorexia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria caracterizado por
un anhelo por la extrema delgadez, ligado a este deseo, el paciente con anorexia
15
nerviosa realiza practicas insanas para lograrlo como ser: purgas, inducción del
vómito y dieta restrictiva. (12)
A pesar de su delgadez las personas con anorexia nerviosa manifiestan un
marcado temor a tener sobrepeso, o ser obesas. Acompañado a ese temor
presentan también una distorsión de la imagen corporal. (10)
2.1.1 Manifestaciones Clínicas específicas de la anorexia nerviosa, según (8)
 Percepción distorsionada de la imagen corporal, el paciente con anorexia
nerviosa se percibe con más peso del que tiene
 El paciente con AN impulsado por su deseo de delgadez se priva de ingerir
alimentos.
 Fobia por el aumento del peso e incluso por el normopeso
 Deseo marcado por la delgadez
 Amenorrea producto de la disminución de la ingesta calórica y la pérdida
de peso.
 Hiperactividad física con el objeto de gastar
el máximo de calorías
posibles.
2.2.
Diagnóstico
El diagnostico está Basado en las manifestaciones clínicas específicas que
presentan los pacientes con anorexia nerviosa, que surgen como producto del
estudio observación de las características de la enfermedad. La cuarta edición
del manual de diagnóstico de trastornos mentales (DSM-IV) facilita los criterios
que deben ser considerados en el diagnóstico de la afección.
Criterios Diagnósticos de Anorexia Nerviosa según el (Manual de Diagnóstico de
trastornos mentales) DSM-V
Criterios de diagnóstico de anorexia nerviosa (DSM-V)
16
1. Disminución auto inducida de la ingesta energética de acuerdo con las
necesidades, que conllevan a un peso corporal significativamente bajo de
acuerdo con la edad, el sexo, el curso del desarrollo y la salud física. Peso
corporal significativamente bajo se define como un peso que es inferior al
valor mínimo normal o, en niños y adolescentes, inferior al valor mínimo
esperado.
2. Temor intenso a engordar o subir de peso, o comportamiento alimentario
anómalo persistente que interfiere en el aumento de peso, incluso con un
peso significativamente bajo.
3. Distorsión en la forma en que es percibe su propio peso o figura, influencia
inadecuada del peso o la contextura corporal en la autoevaluación, o
ausencia persistente de reconocimiento de la gravedad del peso corporal
bajo actual.
2.2.1 Clasificación de los cuadros de Anorexia Nerviosa
En la anorexia nerviosa se pueden observar dos tipos de cuadros:
Tipo restrictivo: en este tipo de cuadro la pérdida de peso se consigue
mediante la dieta, el ayuno o la actividad física excesiva. Los episodios de
conductas alimentarias impropias como: provocación del vómito, purgas,
atracones son eventuales en los últimos tres meses del curso del cuadro. (10)
Tipo purgativa: en este tipo de cuadro la pérdida de peso se consigue mediante
conductas alimentarias impropias. El paciente presenta en los últimos tres meses
del curso de la enfermedad episodios periódicos de atracones o purgas. (10)
CAPÍTULO 3
BULIMIA NERVIOSA
En este capítulo se discute la bulimia nerviosa, sus manifestaciones,
características principales, así como también los criterios de diagnóstico y la
clasificación con la que puede cursar un cuadro de bulimia nerviosa.
3.1.
Definición
Según (8)
17
La BN fue descrita como una variante de la AN en 1979 por Rusell. La BN
es un TCA que se caracteriza por episodios de atracones (ingesta voraz e
incontrolada), en los cuales se ingiere una gran cantidad de alimento en poco
espacio de tiempo y generalmente en secreto. Las personas afectadas intentan
compensar los efectos de la sobre ingesta mediante vómitos auto inducidos y/o
otras maniobras de purga (abuso de laxantes, uso de diuréticos, etc.) e
hiperactividad física. Muestran preocupación enfermiza por el peso y figura.
3.1.1 Manifestaciones clínicas específicas de la Bulimia Nerviosa según (8)
 Ingesta desmedida de alimentos, en episodios reiterados y cortos
 La mayor parte de episodios de atracones se caracterizan por la ingestión
de alimentos ricos en calorías (dulces, pasteles, helados)
 Conducta de pérdida del control, seguida por sentimientos de culpa
 El paciente presenta mecanismos que compensan el consumo de tantas
calorías, según Vargas del
80 al 90% de los pacientes con BN se
provocan el vómito.
 Los pacientes con BN no presentan necesariamente alteraciones en el
peso. Pueden
ser pacientes con bajo peso, normo peso, e incluso
sobrepeso.
3.1.1.1 Otros mecanismos utilizados para compensar el consumo de las
calorías ingerida
 Uso de fármacos como diuréticos, laxantes, anorexígenos
 Hiperactividad, y ejercicio en exceso.
3.2.
Diagnóstico
Criterios para diagnosticar la BN según el DSM-IV
Eventos recurrentes de voracidad, que se caracterizan por comer grandes
volúmenes de alimentos en periodos cortos de tiempo y también por una
acentuada falta de control sobre la alimentación durante el evento.
18
Manifestación de una media de por lo menos 2 eventos de voracidad por semana
durante 3 meses.
Percepción incorrecta de la imagen y peso corporales.
Comportamiento compensatorio de dos tipos
Conducta purgativa: provocación del vómito, uso de laxantes o diuréticos.
Conducta no purgativa: privación de alimentos, actividad física excesiva.
3.2.1 Clasificación de los cuadros bulímicos
.
CAPÍTULO 4
TRASTORNO DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA NO
ESPECIFICADO
En este capítulo se discute el trastorno de la conducta alimentaria no
especificado, sus manifestaciones, características principales, así como también
los criterios de diagnóstico y la clasificación con la que puede cursar un cuadro de
TCA.
4.1.
Definición
El trastorno de la conducta alimentaria no especificado o conocido también como
trastorno por atracón, se caracteriza por no estar bien delimitado, suele presentar
algunos síntomas de bulimia nerviosa o anorexia nerviosa pero no se presenta un
cuadro completo. Esto no lo convierte en menos importante ni menos peligroso.
En el trastorno por atracón el paciente consume recurrentemente
grandes
cantidades de alimento, sin búsqueda de un mecanismo compensatorio, que lo
haga perder la energía consumido, por lo que tarde o temprano el paciente
desarrollara obesidad o sobrepeso. (7)
En este tipo de pacientes se pueden observar algunas conductas compensatorias
lo que lo convierte en una categoría de trastorno distinta a las anteriores, con
criterios de diagnóstico propios. (7)
19
4.2.
Diagnóstico
Los criterios para diagnosticar el trastorno de la conducta alimentaria no
especificado según el DSM-IV son los siguientes
Capítulo 5. Tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria
En este capítulo se aborda el tratamiento de los trastornos de la conducta
alimentaria. En el tratamiento de este tipo de desórdenes intervienen varios
actores del equipo de salud, entre ellos sicólogos, médicos, nutricionistas,
odontólogos. (12)
5.1 Tratamiento de la Bulimia nerviosa
Por ser un trastorno mental debe ser tratado en varios niveles de atención
5.1.1 A nivel nutricional:
Muchos de estos pacientes presentan normopeso, aunque algunos desarrollando
anorexia nerviosa pueden presentarse emaciados. (7)
El tratamiento nutricional Según (7) gira alrededor de tres ejes
1) Con el objetivo de identificar qué factores son los que producen la conducta
bulímica, el tipo de alimentos ingiere el paciente durante los periodos de
atracones, existencia de lapsos de ayunos, su transcurso y constancia. Se debe
iniciar realizando una historia dietética meticulosa con el fin de reconocer los
aspectos antes mencionados y cualquier otro factor de importancia para la
enfermedad.
20
2) Una de las características de la bulimia nerviosa es la existencia de los
“alimentos temidos” que no son más que comidas a las que el paciente presenta
un rechazo fóbico por su contenido calórico o su asociación con el aumento del
peso. En el tratamiento de la BN se deben identificar este tipo de alimentos, con el
propósito que en la planificación de la dieta puedan incorporarse gradualmente.
3) La dieta planificada para el paciente debe ser adecuada a sus necesidades es
decir de cierto modo normocalorica, con el propósito de que el paciente no sienta
temor al aumento de peso, y evitar que después de las comidas no se sienta
totalmente satisfecho y recaiga en episodios de atracones
El internamiento hospitalario es una opción poco frecuente en los pacientes que
padecen BN debido a que su estado nutricional no suele estar tan
comprometido, sin embargo no se debe descartar la posibilidad de hospitalización
bajo ciertas condiciones. (7)
Si el paciente está bajo de peso, se debe procurar que consiga el normopeso, ese
debe ser el objetivo primordial de todo paciente con TCA. Trabajar en realimentar
al paciente, evitando en lo posible la inanición, la inducción del vómito y todos
aquellos comportamientos insanos adquiridos y practicados a lo largo de la
patología para perder peso. Las multivitaminas y/o suplementos vía oral están
recomendadas en la etapa de recuperación de peso corporal. (7)
5.1.2 A nivel farmacológico
Se han utilizado fármacos anticomiciales, antidepresivos y anoréxicos, resultando
ser los antidepresivos los que han evidenciado mayor efectividad en el
tratamiento. (7)
Los efectos beneficiosos observados en pacientes tratados con antidepresivos
son; disminuyen el impulso a los atracones y la necesidad de inducir el vómito,
pero son usuales las recaídas. Queda claro que a pesar de ser utilizados al
comienzo del tratamiento solo representan parte de él, no su totalidad. Los
antidepresivos son útiles sobre todo cuando el paciente presenta alteraciones
como depresión ansiedad, impulsividad… En cuanto a la dosis la evidencia indica
que para obtener los beneficios mencionados debe ser mayor a la dosis prescrita
21
para la depresión. Observando mejorías tempranas, por lo general en las
primeras dos semanas. (7)
Los medicamentos que han probado tener más eficacia sobre TCA son los
antidepresivos
tipo IRSS (inhibidores de la receptación de serotonina).
Controlando y disminuyendo significativamente el comportamiento alimentario
característico de la bulimia nerviosa. (7)
5.1.3 A nivel psicológico:
Debido a que los trastornos de la conducta alimentaria son enfermedades
mentales, se debe trabajar en los síntomas presentados a este nivel, como por
ejemplo: depresión, pensamientos suicidas, ansiedad, inestabilidad emocional,
etc.,. Las dos terapias psicológicas que han demostrado mejor respuesta son: el
tratamiento cognitivo conductual y la terapias interpersonal. (7)
Según (8) estos factores también deben ser considerados en el tratamiento
“En algunos casos se debe usar medicación para la prevención de recaídas.
Los antidepresivos son los más utilizados, siendo la Fluoxetina la que tiene
mayor evidencia dentro del
tratamiento
de
los
TCA.
Se puede
utilizar
ansiolíticos de la familia de las benzodiacepinas, para tratar síntomas de
ansiedad o como hipnótico. Así como también se pueden emplear estabilizadores
del ánimo por su efecto ansiolítico y su eficacia en la impulsividad. Dentro del
tratamiento se incluye la psicoterapia que puede ser individual y/o grupal”
5.2 Tratamiento de la anorexia nerviosa
El tratamiento según (7) de la AN está fundado bajo tres ejes: tratamiento
farmacológico, tratamiento nutricional y tratamiento psicológico. De forma general
se conoce que el eje más importante en el tratamiento de la AN es el psicológico,
según la evidencia la terapia cognitivo. Conductual es la que ha logrado mejores
resultados a diferencia de la terapia psicoanalítica que no presenta beneficios en
etapas graves, pero puede ser útil en la maduración del paciente.
5.2.1 Tratamiento nutricional
22
Antes de iniciar el tratamiento nutricional y con el fin de obtener los mejores
resultados se debe tener en cuenta lo siguiente: (7)
El
tratamiento
actual
de
la
anorexia
nerviosa
incluye
rehabilitación
y
recomendaciones nutricionales, terapia psicológica individual y familiar-grupal.
(11)
Los factores dietético-nutricionales del tratamiento abarcan recuperación ponderal
del peso, programa dietético individualizado, rectificación de la infra-ingesta de
alimentos y reestructuración de la percepción de los pacientes sobre lo que es
una alimentación sana, siendo importante para ello el dictamen precoz y la
participación nutricional desde el comienzo. (11)
Conocer específicamente las necesidades particulares de cada paciente,
mediante cálculos dietéticos. Educar al paciente en temas de necesidades
nutricionales,
las características de los distintos grupos de alimentos y lo
importante de llevar dietas completas y variadas. Asimismo concientizarlo en las
consecuencias que pueden tener las malas conductas alimentarias.
El tratamiento nutricional del paciente con anorexia nerviosa según (7)debe seguir
el siguiente orden
Historia dietética Esta se debe realizar tanto al paciente como a su familia. El
propósito que se persigue al realizarla se detalla a continuación:
-
Enterarse de los patrones alimentarios del paciente antes y durante el
curso de su enfermedad
-
Obtener un estimado de la ingesta calórica y proteica
-
Conocer alimentos temidos y preferidos por el paciente
-
Identificar lapsos de ayuno, etapas de atracones y otras conductas
alimentarias inadecuadas.
-
Seleccionar el tipo de alimentación más adecuada a establecer.
-
El contenido que debe contener la historia dietética para lograr los objetivos
antes mencionados, debe abarcar:
-
Conocimiento
de
patrones
alimenticios,
e
identificación
de
comportamientos alimentarios inadecuados, utilizando herramientas como
23
el cuestionario de consumo de 24 horas o el cuestionario de frecuencia de
consumo.
-
Suma de peso perdido, el lapso de tiempo en que lo ha perdido y el método
utilizado para perderlo.
-
Existencia comorbilidades como trastorno gastrointestinales.
-
Consumo de fármacos anorexígenos, o con propiedades laxantes, alcohol
o drogas.
-
Cantidad de comidas diarias y su periodicidad.
-
Conocimiento de posibles alergias alimentarias.
La contribución de los pacientes en la elección de sus alimentos es polémica,
pues la necesidad de la ganancia de peso y de corrección de hábitos obliga a
determinadas imposiciones, ya que cuando los pacientes con AN eligen sus
alimentos, en la etapa inicial del tratamiento, se decantan más a modelos
inapropiados según los objetivos terapéuticos. (11)
Según (7) Una vez conocidos todos las características importantes a nivel
nutricional, del paciente con anorexia nerviosa el siguiente paso es trabajar en la
realimentación .Esta a su vez está estrechamente relacionada con las
necesidades del paciente cuyo propósito primordial es frenar la pérdida de peso
seguido de la normalización de la ingesta oral. Según la condición del paciente
estos se pueden intervenir con varios tipos de pautas nutricionales:
a) Alimentación oral
b) Alimentación oral más suplementos de nutrición enteral
c) Alimentación enteral.
Alimentación Oral según (7)
Pacientes ambulatorios
El proceso de la alimentación oral contempla: que los grupos de alimentos
escogidos por el especialista no son negociables, se debe contar con la
presencia de algún integrante del equipo médico durante la ingesta y un tiempo
definido para el consumo de los alimentos. El integrante del equipo que vigila
la comida motiva a su correcto consumo en ese tiempo e intenta incluir elementos
de distracción, eludiendo hablar de calorías, regímenes dietéticos, comentarios
24
sobre la comida, etc. La supervisión debe prolongarse un tiempo después de
finalizada la ingesta, así el supervisor puede estar seguro que el paciente no
vomitó los alimentos después de comer. (11)
Objetivo primordial: instaurar una dieta con composición y contenido adecuado a
las necesidades del paciente por lo que se debe tener en cuenta los siguientes
criterios:
Menú: debe ser particular al paciente y acoplado a sus preferencias de consumo,
esto para evitar el rechazo y el miedo a la sobrealimentación, para evitar esto el
paciente puede pesar sus alimentos y así garantizar en lo posible la correcta
alimentación del paciente en relación a sus necesidades, hasta lograr la total la
normalización de la dieta. (7)
Pueden incluirse alimentos de cada grupo, de forma que, por ejemplo, siempre
que se consuma una cantidad correcta de proteínas animales, el paciente puede
elegir hacerlo a base de carne, pescado o huevos, con la visto bueno del
dietista, quien definirá los criterios de normalidad en cuanto a alimentos y tamaño
de las porciones de los mismos, al mismo tiempo que manejará los pensamientos
equivocados de los pacientes acerca de la comida, planificación de menús,
compra de víveres y tipos de preparaciones culinarias. En todo este proceso, la
escogencia de los alimentos siempre estará supervisada por el dietista para que
el paciente no se acerque a costumbres incorrectas en el proceso de
rehabilitación. (11)
Recuento de calorías inicialmente se debe calcular las necesidades del paciente
según el metabolismo basal, y compararlas con las calorías ingeridas en la
historia dietética, de acuerdo a este recuento se establece el contenido calórico
de la dieta. La dieta debe tener un nivel calórico más alto que el que regularmente
tenía en paciente. De modo que permita un aumento de peso 0.5 a 1Kg por
semana. Pero si se intenta dar un contenido calórico muy elevado el paciente se
puede sentir ansioso y rechazar el tratamiento. Por lo que el aumento en las
calorías debe hacerse de forma progresiva aumentando entre 200-400 kcal en
25
cada visita al médico, esto es posible siempre y cuando el tratamiento psicológico
lo permita, y el paciente esté listo para dar ese paso. (7)
Frecuencia y asignación de las comidas: pueden ser entre cuatro y seis comidas
diarias. Donde tres de estas pueden ser principales y dos pueden ser colaciones.
Dicha distribución presenta una ventaja evidente ya que evita que el paciente se
sienta demasiado lleno, los alimentos fríos o a temperatura ambiente presentan
esa ventaja. Una vez logrado el objetivo principal que es llegar a parámetros de
peso normales, la frecuencia y asignación de comidas debe ser la misma que la
de un paciente con habitual. (7)
Tipo de alimentos en la dieta del paciente tratado por anorexia nerviosa se deben
incluir todos los alimentos, la dieta debe
de ser lo más variada posible. Se
recomienda incluir alimentos con alto valor energético y de poca densidad, para
evitar la sensación de llenura. En este nivel también se pueden utilizar bebidas de
alta densidad calórica. Se debe dejar claro al paciente que puede consumir si así
lo desea más cantidad de alimentos, debido a que la dieta se diseñó con los
requerimientos calóricos mínimos. De esta forma el paciente alcanzara los valores
de una dieta normocalorica que va de 2500-3500 kcal. (7)
Los criterios que se deben tomar en cuenta al momento de elaborar la dieta
según (7) son:
a) Estado nutricional
b) Existencia de alguna comorbilidad
c) Nivel de cooperación del paciente
d) Nivel calórico de la dieta antes del tratamiento
e) Alimentos aceptados y temidos en la dieta
f) Tipo de actividad física
g) Costumbres familiares
Paciente hospitalizado:
26
El proceso que se sigue con los pacientes hospitalizados es el mismo que
se sigue con pacientes ambulatorios. La diferencia es que estos pacientes
reciben el tratamiento en el hospital por los que se debe tomar en cuenta
que el menú planificada para él debe de ser compatible con el menú que
ofrece el hospital. Otra diferencia es que la ganancia de peso que deben
reflejar estos pacientes es de 1 a 2 kg semanales. Es muy importante
entrenar al personal encargado de alimentar a estos pacientes en las
características del comportamiento que presentan a la hora de comer. (7)
Entre estas podemos mencionar:
 Lanzar y ocultar alimentos
 Provocarse el vomito
 Automedicarce laxantes
 Realizar actividades físicas intensas
 Ingerir grandes cantidades de agua antes del control del peso, con
el objetivo justificar numéricamente el peso. Para evitar este tipo de
conductas se debe realizar el control de eso sin previo aviso, y llevar
un control de parámetros bioquímicos e inmunológicos que
constaten el progreso del paciente.
Un modelos de dieta a nivel hospitalario para este tipo de pacientes puede ser (7)
Iniciar con una dieta hipocalórica de 1500 kcal frecuente en la mayoría de las
dietas de hospital , que abarca las necesidades de la mayor parte de pacientes y
que suelen ser preparaciones sencillas bajas en grasa.
Incrementar el nivel calórico en 500 kcal incorporando alimentos más elaborados
como pastas y postres.
Terminar con una dieta normocalorica de 2500 kcal presente en la mayoría de los
hospitales, por lo general con alimentos y preparaciones culinarias variadas.
Alimentación Oral más suplementos de alimentación enteral
Se prescriben suplementos de alimentación oral cuando la dieta planificada no
proporciona la ganancia de peso requerida. Esto ayuda a alcanzar un aporte
calórico adecuado entre tanto el paciente se acopla a la alimentación oral. (7)
27
Sin embargo un estudio mexicano llevado a cabo en 298 jóvenes revela que el
4% de los hombres que fueron parte del estudio presentan un riesgo de padecer
un trastornos de la conducta alimentaria, en contraste con las mujeres el riesgo es
tres veces mayo (12%). Al igual la preocupación por la imagen corporal es mayor
en las mujeres pero también se presenta en hombres. (12)
Los suplementos no aportan grandes
beneficios,
pudiendo
fortalecer
el
comportamiento de rechazo a alimentos normales. Sin embargo, dado que en la
anorexia nerviosa se han descrito muchas deficiencias nutricionales, en dicha
situación podrían prescribirse. Por ejemplo ocurre con el calcio ante el resistencia
al consumo de los lácteos, con el hierro en pacientes vegetarianos y/o que
realizan excesiva actividad física, con el zinc si hay escasa ingesta de carne y/o
excesiva actividad física, la tiamina y el ácido fólico si existe abuso de alcohol y la
vitamina D si hay rechazo de lácteos y/o baja exposición solar. Con respecto a
otros micronutrientes hay resultados dispares, que no permiten establecer pautas
generales. (11)
Alimentación enteral (Nutrición artificial)
La
elección
de
usar
separación psicosocial de
nutrición
la
enteral
es complicada, suponiendo un
alimentación
normal. La alimentación enteral
debería ser la última opción, pues la alimentación oral provee destrezas,
costumbres y experiencias psicosociales que no se consiguen con la nutrición
artificial. Existen pocos estudios sobre su eficacia en anorexia nerviosa, pero
ninguno de ellos a largo plazo. Un estudio reciente, de un año de
acompañamiento tras alimentación enteral cíclica durante dos meses, deduce que
la nutrición artificial es útil para la restauración ponderal, no influye con el
tratamiento de conducta alimentaria y no produce recidivas prematuras. La
28
aplicación de este tratamiento, disminuye la estadía hospitalaria y no influye en la
relación terapeuta-paciente ni en el nivel de satisfacción de los pacientes. (11)
Sin embargo un estudio mexicano llevado a cabo en 298 jóvenes revela que el
4% de los hombres que fueron parte del estudio presentan un riesgo de padecer
un trastorno de la conducta alimentaria, en contraste con las mujeres el riesgo es
tres veces mayo (12%). Al igual la preocupación por la imagen corporal es mayor
en las mujeres pero también se presenta en hombres. (12)
De acuerdo a un estudio Colombiano el riesgo de sufrir un TCA según la escala
de tamizaje CHEAT es de 8,3%, cifra que es inferior a la mayoría de las
prevalencias publicadas en nuestro medio, pero que se encuentra dentro del
rango de lo reportado en la literatura de países más desarrollados El 17,4% de los
adolescentes en riesgo tienen una distorsión de su propia
imagen, pero se
encontró una pobre concordancia entre el estado nutricional y la figura corporal de
Gardner al comparar las poblaciones con riesgo y sin riesgo de tener un TCA. (4)
5.3 Enfoque básico del tratamiento del Trastorno de la conducta alimentaria
no especificado
El tratamiento terapéutico de los TCA debe ser abordado por un grupo
multidisciplinar que suele requerir la asistencia de distintos especialistas. (11)
La evaluación preliminar del paciente determinará el tipo de terapia que
necesitará: hospitalización, tratamiento ambulatorio. (11)
A nivel médico
En el tratamiento ambulatorio se establece el siguiente plan terapéutico: re
estructuración de la alimentación a través de una dieta particular para cada
paciente y específica para cada momento de la evolución del TCA;
acompañamiento en las diferentes fases de la recuperación (rehidratación,
aumento del depósito glucógeno del tejido graso y de proteínas); instrucción
nutricional; y prescripción de fármacos para subsanar problemas asociados con
los TCA. (11)
29
A nivel psicológico
El tratamiento debe ir dirigido a disminuir o mejorar los síntomas que con mayor
frecuencia presentan estos pacientes entre estos pueden ser: ansiedad,
obsesiones, depresión, distorsiones cognitivas, baja autoestima y falta de
autocontrol. (11)
Los objetivos en el área psicológica son: orientación psicológica, corrección del
comportamiento, modificación del pensamiento, adquisición de destrezas y de
habilidades de afrontamiento, y prevención de recidivas. (11)
Entre las opciones de tratamiento terapéuticos existentes, el que ha
demostrado ser más eficaz es la terapia cognitivo-conductual (TCC), sobre todo
para la bulimia nerviosa. En el caso de la anorexia nerviosa el tratamiento que
se ha mostrado mayor eficacia es la restauración nutricional, pero esta suele
conjuntarse con la terapia cognitiva conductual, sobre todo una vez que el
paciente ha recuperado peso y se encuentra en la disposición de beneficiarse
en mayor medida del tratamiento psicoterapéutico. Otros tipos de tratamiento
que son usados y continúan siendo estudiados para probar su eficacia son las
terapias interpersonales, psicoeducativa, psicodinámica, familiar o de pareja,
que muestran particular eficacia probada para los casos de BN. (11)
Aunque se han descrito programas específicos para la AN y la BN basados en
el tratamiento cognitivo-conductual, lo cierto es que las técnicas utilizadas para
estos trastornos, junto a los TCANE, son similares. A pesar de las mejorías
observadas con la TCC, sigue habiendo un número considerable de pacientes
que no responden bien en parte o totalmente de estas intervenciones, por lo
que algunos especialistas enfatizan la necesidad de incorporar en los
tratamientos otros aspectos, como son la autoestima, los vínculos
interpersonales, los sentimientos o la percepción de la imagen corporal. (11)
En cuanto al tratamiento psicológico, éste puede ejecutarse de forma individual,
familiar o grupal. Aunque en la mayoría de los estudios se observa la
sobresaliente efectividad del tratamiento individual, sobre todo en casos de
anorexia nerviosa, también se pueden observar buenos resultados con las
intervenciones familiares y grupales, porque permiten trabajar de cerca los
aspectos más relevantes. En el caso de la terapia grupal, el vínculo con
personas que padecen de la misma patología, permite abordar aspectos como
las relaciones interpersonales y las emociones, que pueden ser vitales para la
obtención de buenos resultados. (11)
CAPÍTULO 6. PREVENCIÓN DE LOS TCA
En este capítulo se examina la prevención de los trastornos de la conducta
alimentaria los factores que se deben considerar para que los programas de
prevención se aborden desde un punto de vista integrado.
Se debe dar énfasis a la prevención de los trastornos de la conducta alimentaria
debido a la prevalencia y a la tendencia de aumento de casos. Una de las formas
30
en las que los profesionales de la salud pueden intuir el un TCA y así prevenirlo a
tiempo es conociendo que tipo de características presentan estos pacientes. se
debe prestar especial atención cuando el paciente esta: haciendo dieta , muestra
una insatisfacción con su cuerpo, o manifiesta en sus conversaciones especial
atención acerca del peso y la figura. (13)
Por lo general el paciente hace dietas de tipo restrictivas, estas se caracterizan
porque se disminuye el consumo de la cantidad de alimentos y se evita ingerir
algunos alimentos los cuales de conocen en este tipo de trastorno como
“alimentos temidos”, esta conducta se observa en mujeres sobre todo. La decisión
de hacer este tipo de dietas por parte del paciente es personal sin la supervisión
de un especialista, lo que supone un riesgo de desarrollar un TCA ya que no se
recomienda que los adolescentes hagan dieta. (13)
Al contrario del objetivo perseguido con estas dietas la probabilidad de tener
sobrepeso aumenta una vez el paciente regresa al consumo normal. Esto puede
ser debido a varios mecanismos, uno de ellos puede ser la adaptación del
metabolismo a menos calorías. por lo que un aumento de calorías en la dieta
conlleva a un aumento de peso. Otro mecanismo es el aumento de episodios de
atracones como producto de las restricción de alimentos. (13)
La inconformidad con sus cuerpos es otra de las características que se pueden
observan en estos pacientes, esto explica la exagerada preocupación por el peso
y la figura corporal, idealizada por los medios de comunicación masiva. Esta
inconformidad es preocupante ya que se presenta desde la preadolescencia
incluso desde la niñez. Existe evidencia que indica que el 71.4% de adolescentes
sin distinción de sexo, se encuentran inconformes con su cuerpo. (13)
Según (13) Algunos factores que influyen en el desarrollo de esta conducta son:
Factores
personales:
baja
estima,
ansiedad,
depresión
perfeccionismo,
acontecimientos traumáticos.
Factores familiares: bromas sobre el cuerpo, críticas sobre el cuerpo, charlas
sobre el peso
Factores socioculturales: la influencia de los medios de comunicación en la
divulgación de <<ser bella es igual a ser delgada>> sobre todo para las mujeres,
31
la clase social extendiéndose de forma descendente se las clases más altas a las
más bajas. (1)
Las burlas sobre el peso son un fenómeno que se mantiene relativamente
estable. Según (13) se encontró evidencia de que entre el 20 al 50% de los
jóvenes experimenta algún tipo debido a su peso, este tipo de comentarios
dañinos. Los pacientes que sufren burlas sobre su peso, sobre todo si tienen
sobre peso u obesidad están propensos a sufrir no solo un TCA, sino también
baja estima, depresión, inconformidad con su imagen corporal, entre otros.
6.1 Visión integrada de las intervenciones
Según lo recomendado por (13)las intervenciones para la prevención de los TCA
se deben trabajar junto con obesidad. Es decir no se debe divorciar lo uno de lo
otro. Debido a que tratamientos para la obesidad pueden desembocar en anorexia
o bulimia sino se presta la atención pertinente al paciente.
6.2 Aspectos importantes sobre la prevención
Los programas de prevención de deben diseñar alrededor de los tres indicadores
comunes del comportamiento alimentario insano sobre todo en adolescentes.
Estos son: hacer dieta, inconformidad con la figura corporal, y las famosas charlas
sobre el peso. Los adolescentes no deberían someterse a regímenes alimenticios
extremos, sino más bien procurar una dieta balanceada, y ejercicio físico
moderado. (13)
En cuanto a la inconformidad con la figura corporal según (1) en un mundo donde
se le da un alto valor a lo corpóreo se desvirtúa el verdadero valor de un cuerpo
sano. Los medios de comunicación juegan un papel sumamente importante en la
definición del concepto de belleza, lo que usualmente han promovido son
estereotipos de belleza equivocados haciendo de la extrema delgadez sinónimo
de belleza. Pero al mismo tiempo los medios de comunicación pueden convertirse
en la herramienta adecuada
para desarrollar programas preventivos, que
redefinan la concepción de belleza y ayuden a menguar la inconformidad de la
imagen corporal.
32
Con relación a las charlas sobre el peso, estas se deben minimizar en lo posible,
evitar al cien por ciento burlas sobre el peso. Desarrollar sanciones claras en los
centros educativos respecto a las
burlas sobre el aspecto físico y el peso.
Asimismo desarrollar iniciativas que eduquen a la población juvenil de centros
educativos en la disminución agresión verbal, y que procuren un ambiente
saludable. (13)
6.3 Actuaciones de prevención del personal de atención primaria en salud:
Prevención primaria
Según Dianne Neumark-Sztainer con (13)algunas sugerencias que debe tomar en
cuenta el profesional de salud bajo el enfoque de prevención integral de obesidad
y TCA son:
a. Minimizar la promoción de regímenes dietéticos y comportamientos
alimentario inapropiados, manifestando al paciente las efectos adversos de
las dietas, los beneficios del estilo de vida saludable que giran en torno a
una dieta balanceada y ejercicio físico periódico.
b. Fortalecer la estima de la imagen corporal. Incentivar el cuidado del cuerpo
mediante una buena nutrición, actividad física y comentarios positivos
sobre sí mismos.
c. Brindar al paciente un tiempo para expresar su experiencia con respecto a
las burlas sobre el peso. Proporcione algunos consejos para minimizar y
actuar en este tipo de conflictos.
d. Realizar un trabajo conjunto con el paciente y su familia en la disminución
de las charlas sobre el peso. Procurar mejorar el ambiente en el hogar
comiendo en familia, utilizando un leguaje adecuado, dejando claro que las
charlas sobre el peso traen consecuencias
negativas a la salud del
paciente. Evitar en lo posible palabras como “problema de peso”, “peso no
saludable” y “sobrepeso” que resultan en sentimientos asociados a bajar de
peso.
“Gordo”,
“obeso”
y
“extremadamente
obeso”
son
las
que
desencadenan en sentimientos de culpa y reducen el deseo de bajar de
peso.
6.4 Prevención secundaria
33
Para el profesional de salud es posible prevenir los trastornos de la conducta
alimentaria desde su lugar de trabajo, identificando las pacientes en riesgo y
realizándoles la monitorización del peso ,talla, IMC y brindando especial atención
a los signos y síntomas característicos de una TCA (11)
En el artículo Trastornos de la conducta alimentaria en adolescente y jóvenes (11)
se consideran los aspectos que toma en cuenta la academia de trastornos de la
conducta alimentaria de Estados Unidos para la identificación temprana de los
TCA estos son:
Grandes pérdidas o ganancias de peso
Carencia de incremento peso/talla en pacientes el etapa de crecimiento.
Variaciones de peso
Fluctuaciones electrolíticas
Ritmo cardiaco más lento que el normal
Falta de menstruación o periodos menstruales irregulares
Actividad física extrema
Comportamientos alimentarios inapropiados para bajar de peso
Uso de conductas compensatorias para controlar la ingesta o sobre ingesta, tales
como vómitos, negación a comer, exceso de actividad física, etc…
CAPITULO 7. DETECCIÓN
En este capítulo se estudian los instrumentos que se pueden utilizar para
identificar los trastornos de la conducta alimentaria. El cuestiona SCOFF y el
34
EAT-26 son útiles para la identificación. La figura corporal de Gardner evalúa la
distorsión de la imagen corporal, y la insatisfacción de la imagen corporal.
Los instrumentos de cribado desarrollados para TCA son útiles porque identifican
o descartan el curso de este tipo de desórdenes, sin embargo no son útiles para
diagnosticarlos. Los pacientes que arrojan resultados sospechosos con este tipo
de herramientas son nuevamente evaluados con criterios de diagnóstico
confiables. (12)
7.1 Instrumentos identificados para cribar e identificar TCA
Existen numerosos instrumentos desarrollados para cribar TCA. Particularmente
en esta tesis se utilizaron dos: El cuestionario SCOFF (Sick, control, one , fat,
food) y la Figura corporal de Gardner para la percepción de la imagen corporal.
(12)
7.1.1Cuestionario SCOFF
El cuestionario SCOFF es un instrumento autoadministrado utilizado para
identificar pacientes con TCA. Está compuesto por cinco preguntas sobre hábitos
alimenticios de respuesta cerrada (si/no). Cada respuesta afirmativa suma un
punto, la puntuación máxima obtenida es de 5, a partir de 2 puntos el paciente
presenta riesgo de TCA. Este cuestionario tiene una sensibilidad de 100% para
anorexia y bulimia nerviosa y una especificidad de 85% para AN y 80% BN. La
cantidad de falsos positivos es de 7.3% para AN y 8% para BN. Por todas estas
razones y por su brevedad representa un excelente instrumento para detectar
TCA. (14)
7.1.2Figura corporal de Gardner
35
Es un instrumento utilizado para detectar la insatisfacción corporal del paciente,
tomando en cuenta que esta suele ser una característica dominante de las
personas que sufren un TCA es importante conocer cómo se percibe el paciente
en estos casos. Con este instrumento se puede conocer el Índice de
insatisfacción corporal y el índice de distorsión de la imagen corporal. Consiste en
una imagen con 11 siluetas, donde el paciente señala con una “D” la silueta que
desearía tener y como un “P” la silueta que percibe tener. A continuación el
especialista señala con una “R” la silueta que realmente el paciente posee. (15)
CAPÍTULO
8.
SEÑALES
COMUNES
Y
DIFERENCIADORAS
ENTRE
ANOREXIA NERVIOSA Y BULIMIA NERVIOSA
Existen algunos factores que se consideran un común denominador entre la
anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa, los de mayor prevalencia son: son
enfermedades que de prevalencia femenina, los pacientes presentan una
percepción distorsionada de la imagen corporal, inhibición social, ansiedad
después de las comidas, comportamientos aberrados frente a los alimentos. (7)
Las señales propias de la anorexia nerviosa son las siguientes: en relación a la
edad tiene una iniciación temprana, el paciente presenta bajo peso al inicio de la
enfermedad, los pacientes se caracterizan por ser muy hiperactivos, y presentar
trastornos de la personalidad menos acentuados que la bulimia nerviosa. (7)
La bulimia nerviosa particularmente presenta una iniciación más tardía en relación
a la anorexia nerviosa, en cuanto al peso estos pacientes presentan un IMC
normal o probable antecedente de sobrepeso (obesidad). Solo el 50% de los
casos las pacientes presentan amenorrea, las demás tienen periodos menstruales
normales. Son pacientes con menor hiperactividad que los de anorexia nerviosa,
pero hay más impulsividad, sensitivismo , inestabilidad emocional y menor
autoestima. (16)
36
37
MARCO EMPIRICO
38
CAPÍTULO 9
9.1.
DISEÑO METODOLÓGICO
Introducción
Hoy en día la conducta alimentaria se ha visto modificada por diversos factores,
sobre todo en las poblaciones jóvenes, entre ellos dejar de desayunar, saltarse
las meriendas y comidas, consumir comidas rápidas o aun peor vomitar
después de comer o simplemente deja de comer, esto naturalmente incide en
su estado nutricional, lo que ha llevado en algunos casos al sobrepeso, aumento
de grasa corporal, o desarrollo de enfermedades conocidas como trastornos de la
conducta alimentaria. En
esta
investigación
se evaluó
el índice de masa
corporal, la percepción de la imagen corporal y la conducta alimentaria de los
alumnos de la Ciudad universitaria José Trinidad Reyes de la Facultad de
Química y Farmacia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Los objetivos específicos fueron:
1. Describir las características que presentan los alumnos en riesgo de padecer
un TCA según la escala de SCOFF.
2. Evaluar el estado nutricional de los alumnos en riesgo de padecer un TCA,
midiendo el IMC según tablas de la OMS.
3. Valorar la frecuencia de la distorsión de la imagen corporal aplicando el Test de
la Figura corporal de Gardner.
Este estudio de investigación fue exploratorio y transversal, donde participaron
187 estudiantes voluntarios de la carrera de Química y Farmacia durante el primer
período académico 2016. A cada alumno se le explicó la naturaleza, el propósito,
los beneficios del estudio y se les proporcionó una carta de invitación,
obteniéndose el consentimiento informado. (Ver anexo 1)Se
determinó
las
medidas antropométricas peso, talla. Se calculó el Índice de masa corporal
(IMC) y se clasificó el estado nutricional en 8 categorías: Peso Insuficiente
(< 18,5), normopeso (18,5-24,9), sobrepeso grado I (25-26,9), sobrepeso grado II
(27-29,9), obesidad tipo I (30-34,9), obesidad tipo II (35-39,9), obesidad tipo III
(mórbida) (40-49,9), obesidad tipo IV (extrema) (> 50).
39
Se valoró la conducta alimentaria utilizándose el cuestionario SCOFF que los
alumnos contestaron instruidos previamente.
Se valoró la percepción de la imagen corporal utilizando la Figura corporal de
Gardner, la cual fue contestada por los alumnos y posteriormente completada por
el aplicador.
Los datos se tabularon en Excel y se analizaron con el paquete estadístico SPSS,
y se reportaron en términos de la estadística básica.
9.2.
Variables
Para lograr obtener buenos resultados es preciso definir claramente las variables
que formaran parte del estudio, en este caso para el cumplimiento de los objetivos
se debe conocer la edad que se caracteriza por ser una variable cuantitativa y de
naturaleza discreta. También es necesario conocer el sexo el cual es una variable
cualitativa de naturaleza dicotómica. Las variables anteriormente descritas
resultan ser independientes.
Otra variable independiente que se precisa observar en el estudio es el IMC
(Índice de Masa Corporal) este es un parámetro antropométrico comúnmente
utilizado para conocer el estado nutricional de las personas.
La conducta alimentaria y la percepción de la imagen corporal forman parte de las
variables dependientes del estudio. La conducta alimentaria es una variable
dependiente de naturaleza psicológica, que sirve para conocer cuál es la actitud
de los participantes ante los alimentos.
La percepción de la imagen corporal es también una variable dependiente de
naturaleza psicológica, que sirve para conocer cuál
es la apreciación de los
participantes acerca de sus propios cuerpos.
A continuación la Tabla 9.1 Operacionaliza cada variable de acuerdo al objetivo
general de la investigación.
40
41
Operacionalización de las variables
OBJETIVO GENERAL
VARIABLES
Conocer
la Estado
frecuencia de los nutricional
trastornos de la
conducta
alimentaria en
las estudiantes
mujeres de la
Ciudad
Universitaria
José
Trinidad
Reyes a través
de la aplicación
del cuestionario
SCOFF
Conducta
alimentaria
DIMENSIONES
Antropométr
ica
INDICADORES
ITEMS
Índice de masa corporal,
-Peso (kg)
IMC
-Talla (m)
Peso insuficiente <18,5
Normopeso 18,5-24,9
Sobrepeso grado I 25-26,9
Sobrepeso grado II 27-29,9
Obesidad tipo I 30-34,9
Obesidad tipo II 35-39,9
Obesidad tipo III 40-49,9
Obesidad tipo IV >50
UNIDADES DE ANÁLISIS
-
INSTRUMENTO A
UTILIZAR
Índice de masa
corporal
IMC
= peso(kg)
talla2(m)
Registro de datos
antropométricos
Varón ICC > 1
Mujer ICC > 0,90
Psicológica
2 o más respuestas
positivas del cuestionario
SCOFF, representan un
riesgo de padecer una TCA
¿Tiene la sensación de Resultados
estar enferma porque cuestionario SCOFF
siente el estómago tan
lleno que le resulta
incómodo?
¿Está preocupada porque
siente que tiene que
controlar cuanto come?
de Cuestionario SCOFF
Percepción Psicológica
de
la
imagen
corporal
¿Ha perdido recientemente
más de 6 kg en un periodo
de 3 meses?
¿Cree que esta gorda
aunque otros digan que
está demasiado delgada?
¿Diría que la comida
domina su vida?
Escala de Evaluación de la Índice de insatisfacción Resultados de la Figura Figura
corporal
Imagen
corporal
de corporal e índice de Corporal según Gardner según Gardner
Gardner
distorsión corporal
2
9.3 Muestra
La población universitaria muestreada para llevar a cabo el
estudio, está constituida por un grupo de estudiantes de la
carrera de Química y Farmacia con edades entre 17-33 años,
alumnos de la clase de Química Analítica I, del primer periodo
académico del año 2106, el total de alumnos matriculados en
la facultad fue de 2200 de los cuales 187 participaron
voluntariamente en el estudio. Siendo 155 las mujeres
participantes y 32 los varones.
El tipo de muestreo
seleccionado fue no probabilístico, a
conveniencia, debido a que la participación de los alumnos fue
voluntaria.
9.4 Cálculo de la muestra
Para calcular la muestra se utilizó la siguiente fórmula:
Dónde:
• N = Total de la población
• Zα= 1.96 al cuadrado (si la seguridad es del 95%)
• p = proporción esperada (en este caso 5% = 0.05)
• q = 1 – p (en este caso 1-0.05 = 0.95)
• d = precisión (en su investigación use un 5%).
n=
(0.0009)
(2200) (3.8416)
(0.05) (0.95)
(2200-1)
(3.8416)
+
(0.05) (0.95)
n=
29.5611
0.32738
n=
187
9.5 Criterios de selección de la muestra
Inclusión:
Todos los alumnos seleccionados deben estar matriculados
en la Carrera de Química y farmacia, y ser estudiantes de la
Ciudad Universitaria José Trinidad Reyes.
Los alumnos seleccionados deben firmar un acuerdo de
consentimiento de participación.
Exclusión:
No pueden participar en el estudio, ningún estudiante con una
enfermedad crónica.
No pueden participar en el estudio, ninguna estudiante
embarazada.
9.6 Instrumentos de Medición y Técnicas
Valoración antropométrica
Se tomaron las medidas de peso, talla que se realizaron por triplicado el mismo
día, obteniéndose la media.
•
El peso (P) se midió con una balanza digital de pared con tallímetro,
marca Seca Modelo 769132211994 capacidad máxima 200Kg/450Lb/32sts
desviación de 0.1Kg/0.2 Lb.
•
El Índice de masa corporal (IMC=Peso (kg)/T2 (m2)) se calculó a partir
de los datos antropométricos, bajo los criterios de la SEEDO.
2
Técnica de medición: Se utilizó ropa delgada para garantizar un procedimiento
adecuado. El alumno estaba de pie, con los talones juntos y el abdomen
relajado, los brazos a los lados y el peso repartido en forma equitativa entre
ambos pies; se utilizó para la talla el plano de Franckfurt
Encuesta para el cribado de los Trastornos de la conducta alimentaria, Test
SCOFF
Se determinó la conducta alimentaria de los estudiantes de la clase de Química
Analítica I utilizando el test SCOFF un cuestionario validado, conformado por 5
preguntas, las cuales son:
1. ¿Tiene la sensación de estar enferma porque siente el estómago tan
lleno que le resulta incómodo?
2. ¿Está preocupada porque siente que tiene que controlar cuanto come?
3. ¿Ha perdido recientemente más de 6 kg en un periodo de 3 meses?
4. ¿Cree que esta gorda aunque otros digan que está demasiado delgada?
5. ¿Diría que la comida domina su vida?.
Dos o más respuestas positivas del cuestionario SCOFF representan un
riesgo positivo de padecer un TCA.
El cuestionario fue contestado individualmente, con los materiales
adecuados.
Figura Corporal de Gardner
Para saber la percepción dela imagen corporal que tenía cada participante de
sí mismo se utilizó la Figura corporal de Gardner un instrumento desarrollado
adaptado por Rodríguez Campayo MA que consiste en trece figuras corporales,
donde la figura central tiene un valor de 0, las figuras de la izquierda un valor
de -1 a -6, y las de la derecha de 1 a 6. El participante indica con una P la
figura corporal que considera que tiene, y con una D la que desearían tener, y
luego el especialista selecciona con una R la figura corporal que el participante
realimente tiene. La distancia entre la imagen corporal percibida y la imagen
corporal deseada constituyen el índice de insatisfacción corporal. La distancia
entre la imagen corporal percibida y la imagen corporal real constituyen el
índice de distorsión corporal.
3
Figura 9.1 Figura corporal de Gardner
Tratamiento estadístico
9.7 Procedimientos
Obtención de la muestra

Se convocó a los estudiantes de la clase de Química Analítica I de la
Ciudad Universitaria José Trinidad Reyes a ser parte de la
investigación de la tesis de master

Los alumnos que voluntariamente decidieron participar firmaron una
carta de consentimiento, explicando la naturaleza las características
y los objetivos del estudio.

Se concretó la fecha de llenado de los instrumentos de medición
toma de peso y talla.

Se atendió a los alumnos del 23 de febrero al 23 de abril para tomar
de lunes a viernes en un horario de 10-11 am
Toma de peso: los criterios que se siguieron para tomar el peso fueron

Verificar el estado de la balanza.

Indicar al participante que se reitre el calzado y el uso de ropa ligera.

Indicar al paciente que se ubique en el centro de la balanza, erguido y
con la mirada hacia el frente y los brazos a los lados, las manos
descansando sobre los muslos. Y los talones separados y la punta de
los pies que formen una V.

Registrar el peso en libras en el instrumento de medición.
4
Toma de la Talla: el procedimiento que se siguió para tomar la talla fue el
siguiente:

Indicar al paciente que se ubique en el centro del tallimetro, derecho con
la vista hacia el frente.

El participante deberá tener las pantorrillas y
glúteos pegados al
tallimetro

Confirmar que el tallimetro forme líneas perpendiculares con la cabeza
del participante (plano de Frankfurt)

Si el antropometrista presenta menor talla que el participante se
recomienda usar una escalera de dos peldaños



El antropomentrista debe colocar la palma abierta de su mano izquierda
sobre el mentón del alumno después ir cerrándola de manera suave y
progresiva sin tapar la boca, para asegurar la posición correcta de la
cabeza en el tallímetro
El antropometrista debe deslizar con la mano derecha el tope móvil del
tallímetro hasta hacer contacto con la superficie superior de la cabeza
(vertex craneal), prensando ligeramente el cabello; luego deslizar el tope
móvil hacia arriba. Esta medición se debe realizar tres veces de manera
sucesiva, acercando y alejando el tope móvil.
Registrar la talla en centímetros en el instrumento de medición.
Comportamiento alimentario
 Entregar a cada alumno el cuestionario SCOFF sobre comportamiento
alimentario en un entorno con las condiciones adecuadas
 Cada alumno responde el cuestionario y lo devuelve al aplicador
 catalogar el riesgo de trastorno de la conducta alimentaria de los
alumnos de Química Analítica I de la carrera de Química y Farmacia en
alumnos con riesgo de padecer un trastorno de la conducta alimentaria
y alumnos que no presentan riesgo de la conducta alimentaria.
 Se registran los datos del Test de SCOFF en el instrumento de medida.
Percepción de la imagen corporal



Entregar a cada participante el Test de la figura corporal de
Gardner en un entorno con las condiciones adecuadas
Cada alumno responde el Test y lo devuelve al aplicador
El aplicador termina de llenar el test de Gardner según los
criterios elegidos
5


Evaluar el Índice de insatisfacción corporal
distorsión corporal.
Registrar los datos en el instrumento de medida
y el índice de
9.8 Evaluación Estadística de los datos
En este estudio se presenta un análisis descriptivo y correlacional en el que se
recogen los datos obtenidos en Escala de evaluación de la imagen corporal de
Gardner, SCOOF, obtenidos de una muestra cuya composición de la variable
sexo es de 83% y 17% de mujeres y hombres estudiantes de la facultad de
Quimica y Farmacia de la UNAH con edades medias de 21 y 22 años de edad
respectivamente.
Los indicadores asociados a cada grupo de la muestra recogen el IMC, El
índice de insatisfacción y de distorsión de la imagen corporal se obtiene de la
escala de Gardner.
Tras efectuar una depuración y filtrado de los datos introducidos haciendo uso
del SPSS versión 24, se efectuaron básicamente análisis descriptivos
conducentes a la comparación de los grupos por sexo, a la asociación entre
variables y resultados de pruebas y a la explicación de las variables
dependientes como ser distorsión e insatisfacción, índices que derivan de la
silueta real asignada por el observador, misma que ha sido llevada a un
proceso de ajuste estadístico según la categorización del IMC por la OMS,
pues el registro de la figura real correctamente registrada debe ir en función de
la talla para determinada edad y sexo.
Antes de aplicar pruebas paramétricas se comprobó la normalidad de los datos,
para asociar la congruencia entre los resultados positivos o negativos de las
tres pruebas (Escala Gardner, SCOOF)
6
9.9 Hipótesis de trabajo
A menor IMC (Índice de masa Corporal)
los estudiantes de Química y
Farmacia de UNAH en el primer periodo 2016, presenta mayor riesgo de
Trastornos de Conducta Alimentaria.
A mejor percepción de la imagen corporal los estudiantes de
Química y
Farmacia de UNAH en el primer periodo 2016, presenta menor riesgo de
Trastornos de Conducta Alimentaria.
CAPÍTULO 10: RESULTADOS
El presente estudio de investigación proporciono los siguientes resultados:
A. Datos generales de la muestra
1. Edad de los alumnos
Grafico 10.1 Frecuencia de edad de los alumnos (mujeres)
7
La mayor parte de estudiantes muestreados son mujeres debido a que
en la Facultad de Química y Farmacia predominan las estudiantes
mujeres.
8
Grafico 10.2 Frecuencia de edad de los alumnos (hombres)
La edad promedio de los alumnos varones es de 22 años
6 meses.
2. Sexo de los alumnos
9
Grafico 10.3 Frecuencia
El 82.89% de estudiantes participantes en el estudio fueron mujeres, y solo el
17.11% de alumnos estudiados fueron hombres.
B. Valoración antropométrica
1. Peso de los alumnos por sexo
10
Grafico 10.4 Gráfico del peso en libra de las alumnas
El peso promedio de las 155 estudiantes es de 129.07 libras con una
desviación estándar de 26.702 ( Grafico 10.4)
Grafico 10.5 Peso en libra de los alumnos
11
El peso promedio de los 32 estudiantes es de 165.27 libras con una
desviación estándar de 29.339 (Grafico 10.5)
2. Talla en centímetros de las y los alumnos
Grafico 10.6 Estatura de las alumnas
12
La talla promedio de las 155 estudiantes es de 159.73 cm con una desviación
estándar de 5.561 (Grafico 10.6)
Grafico 10.7 Estatura de los alumnos
13
La talla promedio de los estudiantes es de 173.02 cm con una desviación
estándar de 6.304 (Grafico 10.7)
3. Índice de masa corporal de las y los alumnos
Tabla 10.1 Frecuencia del índice de masa corporal de las y los
alumnos
Interpretación IMC según OMS
Frecuencia
Sexo
Mujeres
Válidos
Porcentaje
acumulado
1
.6
.6
.6
Delgadez moderada
3
1.9
1.9
2.6
Normal
Preobeso
11
7.1
7.1
9.7
105
67.7
67.7
77.4
24
15.5
15.5
92.9
Obeso tipo I
8
5.2
5.2
98.1
Obeso tipo II
2
1.3
1.3
99.4
Obeso tipo III
1
.6
.6
100.0
155
100.0
100.0
2
6.3
6.3
6.3
Normal
15
46.9
46.9
53.1
Preobeso
10
31.3
31.3
84.4
5
15.6
15.6
100.0
32
100.0
100.0
Total
Válidos
Porcentaje
válido
Delgadez severa
Delgadez no muy pronunciada
Hombres
Porcentaje
Delgadez no muy pronunciada
Obeso tipo I
Total
Grafico 10.8 Interpretación del IMC según la OMS en todos los participantes
14
El 6.95% de los alumnos participantes en el estudio presentan delgadez no
muy pronunciada, el 64.17% normopeso, el 18.18% son preobesos y el 6.85%
presentan obesidad tipo I.
Grafico 10.9 Interpretación del IMS según la OMS (mujeres)
15
El 0.6% de las alumnas presenta una delgadez severa (1 alumna), el 1.9% (3
alumnas) delgadez moderada, 7.1% (11 alumnas)delgadez no muy
pronunciada, 67.7% ( 105 alumnas) normopeso,
15.5% (24 alumnas)
preobeso, 5.2% (8 alumnos) obesidad tipo I, 1.3% (2 alumnas) obesidad tipo II,
0.6% (1 alumna) Obesidad tipo III.
Grafico 10.10 Interpretación del IMC según la OMS (hombres)
16
El 6.25% de los alumnos presenta una delgadez no muy pronunciada (2
alumnos), el 46.88% (15 alumnos) normopeso, 31.25% (10 alumnos)
son preobesos y el 15.63% (5 alumnos) obesidad tipo I.
3. Valoración de la percepción de la imagen corporal
1. Índice de distorsión de la imagen corporal
Grafico 10.11 Diferencia entre la imagen corporal real y la imagen
corporal percibida en mujeres
17
Según la figura corporal de Gardner el 3.87% de las mujeres (6 alumnas) se
perciben 5 tallas por debajo de su talla real, 7.10% ( 11 alumnas) perciben 4
tallas menos de la real, 16.77% (26 alumnas) perciben 3 tallas menos de la
real, 11.61% (18 alumnas) perciben 2 tallas menos de la real, 21.29% (33
alumnas) perciben 1 talla menos de la real. El 13.55% (21 alumnas) perciben la
misma talla que tienen.
El 9.03% (14 alumnas) perciben 1 talla más de la que realmente tienen, el
9.03% (14 alumnas) 2 tallas más, el 7.10% (11 alumnas) 3 tallas más y
finalmente solo el 0.65% (1 alumnas) de las alumnas se percibe 4 tallas más de
las que tiene.
Grafico 10.12 Diferencia entre la imagen corporal real y la imagen corporal
percibida (hombres)
18
Según la figura corporal de Gardner el 6.25% (2 alumnos) se perciben 6
tallas menos de la que realmente tiene, 6.25% (2 alumnos) perciben 4
tallas menos, 12.50% (4 alumnos) perciben 3 tallas menos, 6.25%
(alumnos) perciben 2 tallas menos, el 12.50% (alumnos) percibe unas
talla menos. El 31.25% (alumnos) perciben la misma talla que tienen.
El 9.38% (alumnos) de los alumnos perciben 1 tallas más de la que
realmente tienen, el 9.38 % (alumnos) dos tallas más, el 3.13%
(alumnos) percibe 3 tallas más y el 3.13%(alumnos) perciben 4 tallas
más.
2. Índice de insatisfacción de la imagen corporal
Grafico 10.13 Diferencia entre la imagen real y la imagen deseada en
mujeres
19
El 0.65% (alumna) participantes en el estudio desearían tener 10 tallas
menos, el 0.65%( alumna) desearían tener 8 tallas menos, el 1.94%
(alumnas) 7 tallas menos, 5.16% (alumnos) 6 tallas menos, 4.52%
(alumnos) 5 tallas menos, 9.68% (alumnos) 4 tallas menos, 10.97%
(alumnas) 3 tallas menos, 9.68% (alumnos) 2 tallas menos, 12.26%
(alumnas) 1 talla menos.
El 9.68% (alumnas) están conforme con su imagen corporal, y no
desean cambiarla.
El 12.26% (alumnas) desean tener 1 talla mas, 8.39% (alumnas)
desearían tener 2 tallas mas, 7.74% (alumnas) 3 tallas mas, 4.52%
(alumnas) 4 tallas mas, 1.94% (alumnas) 5 tallas más.
Grafico 10.14 Diferencia entre la imagen real y la imagen deseada en hombres
20
El 3.13% (1 alumno) desearía tener 10 tallas menos, 3.13% (1 alumno)
desearía tener 7 tallas menos, 3.1% (1 alumno) 6 tallas menos, 3.1% (1
alumno) 4 tallas menos, 12.5%( 4 alumnos) 3 tallas menos, 15.6% (5
alumnos) 2 tallas menos, 12.5% (4 alumnos) 1 talla menos.
El 12.5 % de los alumnos participantes está conforme con su imagen
corporal.
3.1% (1 alumno) desearía tener una talla más, el 6.3% (2 alumnos) 2
tallas mas, 15.6% (5 alumnos) 3 tallas mas, 3.1% (1 alumno) 5 tallas
mas, 3.1% (1 alumno) 6 tallas más.
4. Resultados de la prueba SCOFF
Tabla 10.2 Resultados de la prueba SCOFF en mujeres
ResultadoPruebaSCOOFa
Frecuencia
Válidos
Porcentaje
Porcentaje
válido
Porcentaje
acumulado
Positivo
62
40.0
40.0
40.0
Negativo
93
60.0
60.0
100.0
155
100.0
100.0
Total
a. Sexo = Mujeres
21
Grafico 10.15 Resultados de la prueba SCOFF en mujeres
El 60% (alumnas) participantes en el estudio dieron negativo el test de
SCOFF. Lo cual significa que no presentan trastorno de la conducta
alimentaria. El 40% de las mujeres participantes dio positivo el test de
SCOFF, lo que significa que presentan algún trastorno de la conducta
alimentaria.
Tabla 10.3 Resultados de la prueba SCOFF en hombres
ResultadoPruebaSCOOFa
Frecuencia
Válidos
Positivo
11
Negativo
21
Total
32
a. Sexo = Hombres
22
Porcentaje
34.4
Porcentaje
válido
Porcentaje
acumulado
34.4
34.4
65.6
65.6
100.0
100.0
100.0
Grafico 10.16 Resultados de la prueba SCOFF en hombres
El 34.38% de los hombre participantes en el estudio dieron negativo en
el test de SCOFF, lo cual significa que no presentan trastorno de la
conducta alimentaria.
El 65.63% de los hombres participantes en el estudio dieron positivo en
el test de SCOFF, por lo que presenta algún trastorno de la conducta
alimentaria.
5. Detalle de la prueba SCOFF
Grafico 10.17 Item 1 Mujeres
23
El 16.13%(25 alumnas) de las mujeres dice haberse sentido enferma por el
estómago lleno el 83.87% (130 alumnas) dice que no.
Grafico 10.18 Item 1 Hombres
24
El 16.63% (5 alumnos) de los hombre dice haberse sentido enfermo por sentir
el estómago lleno, el 84.38% (27 alumnos) dice que no.
Grafico 10.19 Item 2 mujeres
25
El 43.23% (67 alumnas) de las mujeres dice sentirse preocupada por controlar
cuanto come , el 56.77% (88 alumnas dice que no.
Grafico 10.20 Item 2 hombres
26
El 43.75% (14 alumnos) de los hombres dice sentirse preocupado por controlar
lo que come, el 56.25% (18 alumnos) dice que no.
Grafico 10.21 Item 3 mujeres
27
El 18.06% (28 alumnas) de las mujeres afirman haber perdido más de 6kg en
un periodo de 6 meses, el 81.94% (127 alumnas) no.
Grafico 10.22 Item hombres
28
El 12.50% (4 alumnos) de los hombres afirma haber perdido más de 6kg en un
periodo de 6 meses el 87.50% (28 alumnos) no.
Grafico 10.23 Item 4 mujeres
29
El 35.48% (55 alumnas) de las mujeres cree que esta gorda aunque otros
digan que está demasiado delgada, el 64.52% (100 alumnas) no.
Tabla 10.24 Item 4 hombres
30
El 37.50% (12 alumnos) de los hombres cree que esta gordo aunque otros
digan que está demasiado delgado, el 62.50%(20 alumnos) no.
Grafico 10.25 Item 5 mujeres
31
El 20.65% (32 alumnas) de las mujeres afirman que la comida domina su vida,
el 79.35% (123 alumnas) no.
Grafico 10.26 Item 5 hombres
32
El 18.75% (6 alumnos) de los hombres afirman que la comida domina su vida,
el 81.25% (26 alumnos) no.
33
CAPÍTULO 11: DISCUSIÓN
Después de evaluar la frecuencia con la que se presentan los trastornos de la
conducta alimentaria encontramos que el 40%de las mujeres estudiadas dio
positivo el cuestionario SCOFF, lo cual supone la presencia de algún trastorno
de la conducta alimentaria. En los hombres el porcentaje fue menor, el 35.% de
los varones estudiados dio positivo el cuestionario SCOFF. Resultados que
coinciden con la mayoría de estudios, que aseguran que estos trastornos se
presentan con mayor prevalencia en las mujeres. (17) Desgraciadamente estas
cifras de TCA no pueden ser comparadas con otros estudios nacionales, ya
que existen estudios previos. Cabe destacar que este estudio evalúa, mediante
un cuestionario la presencia de un TCA pero este tipo de screening presenta un
valor predictivo positivo relativamente bajo, por lo que los casos identificados
como positivos la mayor parte de las veces no son reales y deben ser
confirmados con una entrevista personal. (17)
Algunos estudios sugieren que la prevención de los TCA deben realizarse
desde una visión integrada y abordarse junto a problemas de obesidad y
sobrepeso, ya que en muchas ocasiones el tratamiento para revertir la
obesidad suele desembocar en algún TCA. Este estudio muestra, basados en
el IMC que el 5.2% de las mujeres estudiadas tienen sobrepeso, y el 18.18%
de los varones también. En un estudio realizado en el Zamorano, Honduras
en el 2012 con 315 estudiantes universitarios por Bayas Arévalo AV se
encontró una prevalencia de sobrepeso 32,7%, mayor a la encontrada en el
presente estudio. (18)
Es importante destacar que se trata de un estudio realizado en población
estudiantil y la alta participación fue debido a los eficientes medios de
divulgación, y la motivación de los participantes para formar parte del estudio.
Se determinó el Índice de insatisfacción de la imagen corporal y el índice de
distorsión de la imagen corporal debido a que la percepción de la imagen
corporal guarda una estrecha relación con los TCA. En vista de que vivimos en
una sociedad que tiene a asumir que una dieta sana es sinónimo de baja en
calorías y que un cuerpo sano es el que carece de depósitos adiposos. (1) La
población especialmente la juvenil tiende a sobreestimar y anhelar cuerpos
delgados y a modificar la percepción de su propia imagen corporal. En el caso
de este estudio solamente el 13.55% (21 mujeres) de las mujeres tienen una
percepción acertada de su imagen corporal es decir se consideran de la talla
que realmente son. En contraste con los hombres el 31.25% (10 alumnos)
tienen una percepción acertada de su imagen corporal es decir se consideran
de la talla que realmente son.
También es posible analizar los resultados según el índice de insatisfacción de
la imagen corporal, que en el caso de las mujeres el 9.68% esta satisfecha con
su imagen corporal y el porcentaje restante desearía cambiar de talla. En el
34
caso de los hombre el 12.5% de los estudiados está conforme con su imagen
corporal el porcentaje restante desearía cambiar de talla. Un estudio similar en
Colombia revela que el 91% de sus participantes mostro satisfacción con su
imagen corporal, mientras que el 9% manifestó lo contrario (19)
Los trastornos de la conducta alimentaria son patologías biopsicosociales que
deben ser atendidos desde la atención primaria en salud, debido a su posición
privilegiada para su precoz detección. Entre más rápido se diagnostica y se
trata un TCA el pronóstico del paciente será más esperanzador. Queda claro
que el tratamiento debe ser abordado por un equipo especialista
interdisciplinar. Y que los programas de prevención deben integrar todos los
factores predisponentes y precipitantes para llegar a ser eficaces. (13)
35
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Este estudio de investigación permitió conocer basados en el índice de
masa corporal (IMC) y los instrumentos de tamizaje SCOFF la prevalencia de
trastornos de la conducta alimentaria de los alumnos de la carrera de Química
y Farmacia y servirá de referencia para estudios posteriores, ya que abre las
puertas a nuevas líneas de investigación que persigan estudiar el
comportamiento alimentario, un tema en tendencia debido a su estrecha y
conocida relación con la buena salud.
Al concluir esta investigación se cumplieron los objetivos propuestos de valorar
el estado nutricional de los estudiantes en base a su IMC, conocer la
prevalencia de los TCA en la población universitaria estudiada y la distorsión
que perciben acerca de su figura corporal. Los universitarios son una
población muy importante para hacer una labor de promoción de estilos de
vida saludable.
Las mujeres estudiadas manifiestan los siguientes resultados según su IMC: El
0.6% de las alumnas presenta una delgadez severa (1 alumna), el 1.9% (3
alumnas) delgadez moderada, 7.1% (11 alumnas) delgadez no muy
pronunciada, 67.7% ( 105 alumnas) normopeso,
15.5% (24 alumnas)
preobeso, 5.2% (8 alumnas) obesidad tipo I, 1.3% (2 alumnas) obesidad tipo II,
0.6% (1 alumna) Obesidad tipo III.(Tabla 10.6 y Grafico 10.9)
Los hombres estudiados manifiestan los siguientes resultados según su IMC: El
6.95% de los alumnos participantes en el estudio presentan delgadez no muy
pronunciada (2 alumnos), el 64.17% normopeso (15 alumnos), el 18.18% son
preobesos (10 alumnos) y el 6.85% presentan obesidad tipo I( 5 alumnos).
(Tabla 10.6 y Grafico 10.8)
Más de la mitad de
los alumnos participantes tiene buen estado
nutricional de acuerdo al IMC ya que tienen normopeso. (120 alumnos)
Las mujeres revelan según la figura corporal de Gardner, en la distorsión de la
imagen corporal: el 3.87% de las mujeres (6 alumnas) se perciben 5 tallas por
debajo de su talla real, 7.10% (11 alumnas) perciben 4 tallas menos de la real,
16.77% (26 alumnas) perciben 3 tallas menos de la real, 11.61% (18 alumnas)
perciben 2 tallas menos de la real, 21.29% (33 alumnas) perciben 1 talla menos
de la real. El 13.55% (21 alumnas) perciben la misma talla que tienen. (Tabla
10.7 Gráfico 10.11)
El 9.03% (14 alumnas) perciben 1 talla más de la que realmente tienen, el
9.03% (14 alumnas) 2 tallas más, el 7.10% (11 alumnas) 3 tallas más y
finalmente solo el 0.65% (1 alumnas) de las alumnas se percibe 4 tallas más de
las que tiene.
Los hombres muestran según la figura corporal de Gardner, en la distorsión de
la imagen corporal: el 6.25% (2 alumnos) se perciben 6 tallas menos de la que
36
realmente tiene, 6.25% (2 alumnos) perciben 4 tallas menos, 12.50% (4
alumnos) perciben 3 tallas menos, 6.25% (2 alumnos) perciben 2 tallas menos,
el 12.50% (4 alumnos) percibe unas talla menos. El 31.25% (10 alumnos)
perciben la misma talla que tienen. El 9.38% (3 alumnos) de los alumnos
perciben 1 tallas más de la que realmente tienen, el 9.38 % (3 alumnos) dos
tallas más, el 3.13% (1 alumnos) percibe 3 tallas más y el 3.13%(1 alumnos)
perciben 4 tallas más. (Tabla 10.8 Gráfico 10.12)
Las mujeres exhiben los siguientes resultados en relación a la insatisfacción de
su imagen corporal: El 0.65% participantes en el estudio desearían tener 10
tallas menos, el 0.65% desearían tener 8 tallas menos, el 1.94%- 7 tallas
menos, 5.16%- 6 tallas menos, 4.52%- 5 tallas menos, 9.68%- 4 tallas menos,
10.97% -3 tallas menos, 9.68%- 2 tallas menos, 12.26%- 1 talla menos. El
9.68% están conforme con su imagen corporal, y no desean cambiarla. El
12.26% desean tener 1 talla mas, 8.39% desearían tener 2 tallas mas, 7.74%3 tallas mas, 4.52%-4 tallas mas, 1.94%- 5 tallas más. (Tabla 10.9 Gráfico
10.13)
Los hombres exhiben los siguientes resultados en relación a la insatisfacción
de su imagen corporal: El 3.13% (1 alumno) desearía tener 10 tallas menos,
3.13% (1 alumno) desearía tener 7 tallas menos, 3.1% (1 alumno) 6 tallas
menos, 3.1% (1 alumno) 4 tallas menos, 12.5%( 4 alumnos) 3 tallas menos,
15.6% (5 alumnos) 2 tallas menos, 12.5% (4 alumnos) 1 talla menos. (Tabla
10.10 Gráfico 10.14)
El 12.5 % de los alumnos participantes está conforme con su imagen corporal.
El 3.1% (1 alumno) desearía tener una talla más, el 6.3% (2 alumnos) 2 tallas
mas, 15.6% (5 alumnos) 3 tallas mas, 3.1% (1 alumno) 5 tallas mas, 3.1% (1
alumno) 6 tallas más.
Para las mujeres estudiadas según el cuestionario SCOFF: El 60% (62
alumnas) participantes dieron negativo el test de SCOFF. Lo cual significa que
no presentan trastornos de la conducta alimentaria. El 40% (43 alumnas) de las
mujeres dio positivo el test de SCOFF, lo que significa que presentan algún
trastorno de la conducta alimentaria. (Tabla 10.11 Gráfico 10.15)
Para los hombres estudiados según el cuestionario SCOFF: El 65.63%(
alumnos) de los hombres participantes en el estudio dieron negativo en el test
de SCOFF, lo cual significa que no presentan trastorno de la conducta
alimentaria. El 34.38% (alumnos) de los hombres participantes en el estudio
dieron positivo en el test de SCOFF, por lo que presenta algún trastorno de la
conducta alimentaria. (Tabla 10.11.1 Gráfico 10.16)
Es recomendable realizar estudios que den seguimiento a la población que
registró trastornos de conducta alimentaria y que se incluya la determinación de
ingesta de nutrientes, evaluación bioquímica del estado nutricional y la
evaluación clínica para tener un visión completa del estado de salud, para
dar paso al tratamiento.
Continuar monitoreando el estado nutricional de aquellos alumnos que
presentaron IMC diferente al normopeso y valores positivos para el cuestionario
SCOFF.
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Crear institucionalmente estrategias para la prevención y control de
hábitos alimentarios con la finalidad cultivar una buena conducta alimentaria no
sólo en los alumnos sino de toda la comunidad universitaria.
Establecer institucionalmente opciones para el consumo de dietas saludables,
de fácil acceso y precios consientes para los alumnos y empleados
universitarios (comedores universitarios) en donde la alimentación sea diversa
y equilibrada para evitar el peso insuficiente, el sobrepeso y la obesidad.
Es recomendable, en cuanto a la inconformidad con la figura corporal, donde
los medios de comunicación juegan un papel sumamente importante, estos
pueden convertirse en la herramienta adecuada para desarrollar programas
preventivos, que redefinan la concepción de belleza y ayuden a menguar la
inconformidad de la imagen corporal.
Bridar educación nutricional, Con relación a las charlas sobre el peso, estas se
deben minimizar en lo posible, evitar al cien por ciento burlas sobre el peso.
Desarrollar sanciones claras en los centros educativos respecto a las burlas
sobre el aspecto físico y el peso.
Asimismo desarrollar iniciativas que eduquen a la población juvenil de centros
educativos en la disminución agresión verbal, y que procuren un ambiente
saludable.
Es fundamental fomentar los hábitos saludables en los universitarios como ser
la ingesta
de agua, micronutrientes, macronutrientes y realizar
frecuentemente actividad física, crear programas de vida saludable
permanentes para que puedan integrarlos en su vida, como un nuevo estilo y
que puedan conservarlos a lo largo de su existencia. Los adolescentes no
deberían someterse a regímenes alimenticios extremos, sino más bien procurar
una dieta balanceada, y ejercicio físico moderado.
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39
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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GLOSARIO
ANEXOS o APÉNDICES
ANEXO 1. Versión española de la encuesta SCOFF (García, Sanz-Carrillo, &
Ibanñez, 2005)
Nombre:
Sexo:
Edad:
1.
¿Tiene la sensación de estar enfermo/a porque siente el estómago tan
lleno que le resulta incómodo?
SÍ
2.
SÍ
3.
SÍ
NO
¿Está preocupado porque siente que tiene que controlar cuánto come?
NO
¿Ha perdido recientemente más de 6 kg en un período de tres meses?
NO
4.
¿Cree que está gordo/a aunque otros digan que está demasiado/a
delgado/a?
SÍ
NO
5.
¿Diría que la comida domina su vida?
SÍ
NO
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ANEXO 2. ESCALA DE EVALUACIÓN DE LA IMAGEN CORPORALGARDNER (Campayo, Fernández, Rodriguez, & Martínez, 2003)
Primero, la paciente señala con una “P” la silueta que representa la percepción
actual de su imagen corporal y con una “D” la silueta que desearían tener.
Posteriormente, el entrevistador señala con una “R” su estimación de la imagen
corporal real del paciente. La diferencia entre la imagen corporal percibida y la
deseada se considera el Índice de Insatisfacción de la imagen corporal, y la
diferencia entre la imagen percibida y la Real se considera el Índice de
Distorsión
de la imagen corporal. No se han establecido puntos de corte.
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