Gustavo Hurtado A. 18.664.654-1 Dentro de los cientos de miles de grupos organizacionales que se pueden observar de manera local, existe uno que es muy común para quienes suelen viajar largas distancias dentro o a las cercanías de Chile, es decir, el terminal de buses. Si bien existe una basta cantidad de estos terminales dentro del país, el análisis se hará en uno en específico, el terminal de buses sur ubicado en Santiago, comuna de Estación central. Dentro de la inmensa cantidad de elementos que se pueden encontrar dentro del terminal, se pueden mencionar los vendedores de las empresas de buses. Estas personas que, con una vestimenta aparentemente formal y seria, suelen vociferar por todo el terminal los servicios que sus empresas entregan, nombrando los lugares a los que se dirigen y sus horarios, y, además, ofrecen precios más económicos que sus competidores, incluso, accediendo a regatear con tal de vender los asientos de sus buses, pero se puede apreciar como en ciertas ocasiones son los mismos vendedores quienes se quedan con las ganancias extras que puedan percibir, sin hacer registro de ello en las bases de datos de la compañía. Este proceso de regateo se realiza debido a que, para obtener un mayor beneficio económico, lo ideal es partir con un bus que tenga todos sus asientos vendidos, por lo que, si quedan pocos asientos a ser utilizados, se suele realizar una rebaja sobre ellos para que así la máquina parta a máxima capacidad. Incluso, a veces se venden sobrecupos dentro del bus y hay quienes deben irse de pie, pero quienes aceptan el servicio con esas condiciones, lo hacen pensando en poder llegar antes a su lugar de destino. Si bien los elementos antes mencionados pertenecen al grupo organizacional como tal, hay supuestos básicos que se comparten por quienes interactúan en esta organización. Estos supuestos van más allá de lo que se suele ver a simple vista, o que se pueda preguntar a quienes son partícipes de este terminal. Uno de estos supuestos básicos tiene una profunda relación con una creencia que se tiene en Chile acerca de que es el “más pillo”, el “más vivo”, quien sale adelante. No siempre importa si se está pasando llevar a otra persona, o si es ilegal la acción que se está cometiendo, mientras se pueda obtener el mayor beneficio posible, es suficiente y razonable seguir adelante. De esta manera, si una persona no cuenta con un estricto control de sus acciones, suele aprovecharse de esta situación y buscar la manera de ganar más.