INVESTIGACION DE LAS SIETE CASCADAS DE NARANJAL EL TURISMO RURAL Un refugio para disfrutar de la naturaleza Es otro mundo, sí, un planeta encapsulado en la neblina, lejos de la contaminación ambiental y el ruido de las ciudades, donde el camino es rocoso y te sostienes a través de las raíces de grandes matapalos rodeados de fernan sánchez, robles, platanillos, guayacanes, entre otras especies de árboles. En este sendero Sebastián Briones, un niño de 7 años, junto con su familia recorren pequeños riachuelos que vienen del río Minas, observan mariposas azules, hormigas gigantes y una diversidad de aves. Están en el Bosque Protector Cerro de Hayas para conocer las Siete Cascadas, un atractivo turístico de Naranjal a solo una hora y media de Guayaquil. El bosque tiene más de 600 hectáreas de naturaleza y es muy probable, según lugareños, que su nombre signifique Lamento del Inca, porque se cree que en la cúspide del bosque que forma parte de la cordillera Molleturo hubo hace mucho tiempo un cementerio indígena, aunque hay otras leyendas que hablan de yacimientos de oro en ese sector. Actualmente pertenece a la cooperativa 23 de Noviembre, ubicada en el kilómetro 4 en la vía Naranjal-Machala y ha logrado convertirse gracias al emprendimiento de sus comuneros en un lugar turístico que atrae a extranjeros, pero en especial a turistas de Guayaquil y Cuenca por su cercanía. Es jueves, cerca del mediodía, y la familia de Sebastián que viene del sur de Guayaquil ha emprendido el recorrido tras pagar el ingreso al bosque. El viaje fue improvisado, lo que le encantó a Sebastián, porque ese día pudo disfrutar de una aventura y ahora tiene una historia para compartir con sus compañeros en la escuela. Belén Aróstegui y su novio Jorge Sáenz de Viteri junto con Masiel Alvarado, Eva Fernández y los niños Paula, Sebastián y Matías caminan alrededor de 30 minutos para llegar a la primera cascada. Se detienen un momento para tomarse fotos y grabar videos. Han ido preparados, llevan zapatos cómodos y otra muda de ropa para cambiarse. Félix Ponce de la operadora turística Destino Libre, y el guía nativo Gustavo Gutiérrez los acompañan en el sendero. La familia avanza y pasa por la segunda cascada, comienzan a tocar el agua, está templada, pero aún no se animan a bañarse. La primera en tocar el agua es Masiel Alvarado, dice que el agua está fría, pero igual se sumerge. En los primeros puntos hay escaleras que ayudan a los turistas a avanzar hasta la tercera cascada, al ser un poco profunda, los niños descansan en las rocas y juegan con el agua, pero luego son llevados por Jorge hacia el centro de la piscina natural, pero les da un poco de miedo la caída de agua. Más adelante hay cuerdas y grandes rocas que han sido colocadas estratégicamente por los emprendedores moradores de la cooperativa 23 de Noviembre para agilitar el paso a los turistas, aun así puede resultar un poco difícil para los más pequeños que fueron ayudados por Jorge y el guía Gustavo. Pasan la cuarta cascada y avanzan hasta la quinta, tiene casi cuatro metros de profundidad, y Félix, quien ha estado innumerables ocasiones en el lugar, se anima a saltar para grabarse con su cámara Gopro. Al llegar a la sexta cascada Jorge comparte el escenario con su enamorada Belén y recuerda que fue precisamente en una cascada cuando se le declaró hace cinco años durante un recorrido por cascadas en Bucay. “Estábamos saliendo, yo pensé las semanas y los meses anteriores cómo lo iba a hacer, entonces pensé: las cascadas en Bucay... hacía mucho frío, había neblina, lluvia, el rocío de la cascada y le dije: La vida es como la naturaleza, hay días con sol, otros de frío, y asimismo tenemos que estar juntos, y temblando Belén me respondió con un sí”. Esta vez fue Belén quien lo sorprendió y grabó con su celular aquel recuerdo. Jorge piensa que el viaje es extraordinario y que Ecuador tiene mucho que ofrecer en turismo. Belén planea regresar con sus amigos, mientras que Sebastián dice que este es su lugar favorito en el mundo. Aún quedaron pendientes por visitar dos cascadas porque este lugar tiene en total nueve. Datos En 1969 el Bosque tropical húmedo Cerro de Hayas, donde se encuentran las Siete Cascadas, fue declarado como Bosque Protector. El 60% de aves que hay en la provincia del Guayas se encuentran en el Bosque Cerro de Hayas. Tiene un promedio de 30 a 50 visitantes por día. En los días de feriado aumenta a 800 turistas en un solo día. Costo Si decide viajar solo puede tomar un bus en la terminal terrestre de Guayaquil por $ 3 que le llevará hasta Naranjal. En el cantón puede tomar un taxi hacia la cooperativa 23 de Noviembre. El costo puede llegar a los $ 5. Allí paga la entrada al Bosque Cerro de Hayas. Para adultos: $ 2. Niños hasta los 12 años: $ 1. La operadora Destino Libre (contacto: 0939541858) ofrece un tour por $ 50 que incluye transportación (ida y vuelta), ingreso a las Siete Cascadas con acompañamiento de guía, observación de Naranjal desde el mirador El Tigre, más un almuerzo típico que puede ser trucha o seco de pato o gallina. Recomendaciones No llevar perros ni otras mascotas No llevar jabones No llevar bebidas alcohólicas ni cigarrillos No está permitido hacer fogatas Prohibido el ingreso de objetos cortopunzantes Cuidar de la naturaleza Llevar zapatos cómodos, protector solar, repelente, una muda de ropa y toalla No llevar comida preparada Está permitido llevar snacks de cualquier tipo en empaques cerrados, así como bebidas en envases Llevar los desperdicios en una bolsa, no arrojarlos en el bosque Abierto de lunes a domingos de 08:00 a 15:00 (I) https://www.eluniverso.com/noticias/2018/10/17/nota/7004342/siete-cascadas-naranjal-refugiodisfrutar-naturaleza El trabajo de investigación permite analizar la influencia de las facilidades turísticas orientadas a niños y adolescentes para la realización de turismo de aventura de este segmento mediante un estudio de mercado a fin de presentar una propuesta dirigida a la creación de un modelo de campamento en Guayaquil, Provincia del Guayas. Dentro de la investigación se desarrollan diferentes teorías donde se indican que los factores principales para el desarrollo del niño y adolescente, es un ambiente natural, captando todo lo de su entorno, también se conoce las problemáticas que se presentan en la actualidad como las drogas, la tecno adicción, padres que desatienden a sus hijos y no encuentran un lugar de recreación que contrarreste esto y fortalezca su personalidad. Se investiga información sobre la historia de los campamentos hasta la actualidad. Se obtienen datos de la población con aplicación de formularios y la realización de entrevistas y los resultados, padres interesados, la demanda insatisfecha con necesidades de un lugar de esparcimiento con itinerarios donde se desarrolle la actividades de turismo proponiendo un campamento turístico donde se desea impulsar algunos sitios de Guayaquil así como fomentar en ellos el disfrute de la naturaleza y adicionalmente canalizar su tiempo de ocio en actividades que estimulen su desarrollo personal. El Ecuador es un país con mucha diversidad, lo que representa oportunidad para el desarrollo turístico a gran escala, generando una actividad económica importante en este rubro y plataforma para emprendedores, que a su vez crean fuentes de empleo. Lo que motiva a realizar la investigación es encontrar facilidades turísticas para desarrollar turismo de aventura en la ciudad de Guayaquil dirigido a un segmento de mercado de niños y adolescentes ofreciendo actividades de recreación y acercarlos a la naturaleza. Se realiza un estudio para identificar los destinos turísticos que se dispone Guayaquil integrándolos en los itinerarios de la propuesta, donde se les brinde la oportunidad de vivir nuevas experiencias y se conviertan en actividades turísticas a ofrecer. El tema elegido pretende mostrar la importancia de la atención a los niños y adolescentes que están expuestos a diario a la violencia que se presenta en los medios de comunicación colectiva Por ello El Ministerio de Turismo del Ecuador está creando planes y programas dirigidos a niños y adolescentes, estimulando el turismo de visitas a ciertos lugares de la ciudad de Guayaquil (Cabrera, 2014). Pero se desea llegar más allá de un día de visita a un destino. Con la finalidad de buscar nuevas propuestas turísticas por la ausencia de turismo aventura para niños y adolescentes donde el niño pueda pernoctar más de un día fuera de su territorio habitual, logrando interacción con el medio ambiente. La creación de establecimientos en la ciudad de Guayaquil con lugares acondicionados para prestar todos los servicios, así mismo investigar qué actividades se prefieren realizar con la naturaleza, donde además va en 2 búsqueda de experiencias al aire libre, desarrollar en ellos el sentido de conservación del medio ambiente, rescatar valores, el ajuste a lo que la naturaleza exhibe para que la práctica turística sea de forma divertida y fortalezca su consonancia con lo natural, creando cultura donde el sistema turístico funcione sin impactos negativos y la conservación sea parte de un compromiso social, proyectando a corto plazo turistas con otros valores respecto al cuidado y conservación del medio ambiente en la localidad de Guayaquil. El cantón Naranjal se encuentra a 91 kilómetros de la Guayaquil. Lo atraviesan los ríos Tura, Cañar, Naranjal, San Pablo, Balao Chico y Jagua. Al cantón se lo conoce por las cascadas que se encuentran en los alrededores. Turistas extranjeros y nacionales visitan este espacio natural. Las 7 cascadas de Naranjal están en el bosque protector del Cerro de Hayas, en el recinto Coop. 23 de Noviembre. En la cooperativa existe una gran variedad de flora, fauna y paisajes hermosos. La entrada al bosque protector tiene un costo de $2 adultos y $1 niños. También se ofrece servicio de guías para un máximo de 10 personas por guía. Los recorridos inician desde las 08h00 hasta las 15h00 y pueden durar 3 a 4 horas. Recorrido por las cascadas de Naranjal Para llegar a la primera cascada primero se atraviesa las aguas del río Minas. La cascada posee una piscina natural de 1,20 de profundidad y una altura de 4 metros. Las familias con niños pequeños disfrutarán de esta parada. La segunda cascada tiene una caída de 6 metros de alto y una piscina de 2 metros de profundidad. Para llegar se suben las escaleras de metal que hay en el lugar. Desde la tercera cascada el camino se complica pero los escenarios naturales lo compensan. La caída es de 14 metros de altura y la piscina es de 7 metros de profundidad. Para llegar a la cuarta cascada se asciende un tramo con cuerdas y raíces de árboles. La cascada es de 6 metros de altura y carece de piscina. La quinta cascada se la considera un parque acuático. Los turistas que llegan hasta el punto realizan clavados en una caída de 6 metros. Es una buena forma de refrescarse por la travesía. En la sexta cascada se requieren cuerdas para realizar el ascenso. Tiene una caída de 4 metros y una piscina natural. Las familias pueden realizar fotografías grupales. En la séptima cascada se puede observar una caída de 22 metros de altura. Aquí los turistas disfrutan del paisaje tras el largo recorrido que han realizado. Los habitantes de la comuna 23 de Noviembre, del cantón Naranjal, aseguran que la excursión que brindan a los turistas que desean recorrer las 7 cascadas en el bosque protector del cerro de Aya (también conocido como de Hayas) es “toda una aventura”. El argumento es muy real. El sitio está ubicado a 91 km de Guayaquil y tiene grandes atractivos naturales. La verdadera travesía inicia en una garita en la comuna 23 de Noviembre a la que se llega avanzando 3 kilómetros por un camino lastrado que comienza en el km 5 de la vía Naranjal-Machala. La cooperativa muestra una gran diversidad no solo cultural sino de fauna y flora. Desde la entrada, un cristalino riachuelo da la bienvenida a los turistas. Ahí Nely Pérez aprovecha las mañanas para lavar la ropa de su esposo. La golpea contra una piedra y restriega con un cepillo. “Aquí llegan turistas de todos lados y de todas las edades. Algunos no conocen el sitio y otros arriban en sus bicicletas para refrescarse y escalar las poco exploradas cascadas”, dice la mujer mientras un grupo de gansos la rodean. Una aventura diferente Miguel Tigre, presidente de la cooperativa, asegura que la prioridad de los habitantes de la zona es garantizar la buena atención a los turistas para que estos regresen y den buenas referencias del lugar. “De nosotros depende la buena o mala imagen que genera este sitio. Tratamos de que el turista esté seguro y tenga comodidades”. Tigre asegura que se consiguió que los guías sean lugareños, en especial los fines de semana y feriados que es cuando se incrementan las visitas. El costo de ingreso a este bosque protector es de $ 2 para los adultos y de $ 1 para niños. El servicio de un guía cuesta $ 20. Cada guía puede llevar grupos de máximo 10 personas, según la condición física y las edades. La gastronomía es otra forma en que los comuneros aprovechan la llegada de los turistas. Ofrecen platillos típicos de esta zona del país y jugos de naranja, mandarina o limón, según la temporada. Los costos van desde los $ 3 hasta los $ 4 por cada preparación, refirió Tigre. Las caminatas duran un promedio de 30 minutos hasta llegar a la primera cascada. Arribar a las siguientes les toma entre 10 y 12 minutos. El recorrido dura mínimo 3 horas y máximo 4, dice Gustavo Gutiérrez, quien trabaja en el lugar. “De lunes a viernes mantengo los senderos limpios de hojas, ramas o troncos para que las culebras no tengan opción a esconderse. Así los turistas no sufren problemas o sustos. Además me dedico a ser guía turístico”, asegura el hombre de 29 años que gana $ 100 semanales por su labor. Para la familia de Carlos Pin Cedeño visitar este sitio fue una alternativa al tradicional viaje a la playa. Pin hizo el viaje hasta la tercera cascada, junto a su madre, esposa e hijos sin la ayuda de un guía. “Había escuchado de este lugar pero no pensé que fuese así. Hay mucha vegetación es fácil ver aves y otros animales pero para la próxima ocasión contrato a un guía” dijo. Los ruidos de la fauna y la caída del agua dan un encanto especial a un destino poco explorado y que está listo para recibir a los más exigentes aventureros. El cantón Naranjal es una entidad territorial subnacional ecuatoriana, de la Provincia de Guayas. Se ubica al sur de la Región Costa. Su cabecera cantonal es la ciudad de Naranjal, lugar donde se agrupa gran parte de su población total. Su territorio tiene una superficie de 2.015 km² y su población de 53.800 habitantes. La Independencia de Naranjal Al conocerse del movimiento libertario del 9 de Octubre, de proclamar ha Guayaquil como estado independiente, los naranjaleños más notables entre los que figuraban don José María Andrade, don Jerónimo Santacruz, don Salvador Robledo, don José Antonio Maure, don Tomás Ordóñez, don Manuel Alcívar, don Rafael Unda, don Juan Alvear y muchos otros activistas, se reúnen en la casa parroquial, pues contaban con la benévola aceptación del párroco cuencano, Rvdo. Manuel Bernardo Enderica, el día 14 de Octubre para decidir sobre la proclama de adhesión a Guayaquil Se aprovecha de la misa solemne del día 15, en honor de Sta. Teresa de Jesús, patrona de España, para convocar a los pobladores, frente a la iglesia y se preveía una patriótica locución del Sr. Santacruz, se da lectura al acta de la independencia, (Archivo de cabildos de Guayaquil), por la cual se declara la adhesión de Naranjal a la causa de la libertad proclamada en Guayaquil; se toma un juramento solemne a todos los presentes, por el cual prometen su lealtad, sus personas y sus bienes a la noble causa. Este fue el pronunciamiento unánime del pueblo de Naranjal a la causa de la independencia. De inmediato la junta designó al Sr. Jerónimo Santacruz como su delegado especial y partió deprisa a Guayaquil ara informar a la junta suprema y depositar en manos de su presidente el acta de adhesión. En el pueblo se organizó con armas y medios propios de una columna de voluntarios denominada "guardia de la libertad", cuya misión principal era la de vigilar el camino de Cuenca y tener informado al gobierno de Guayaquil. Esta misma columna engrosada con mayores elementos, unida a las de Taura y Yaguachi tuvo su primer baño de sangre en Chone, donde derrotaron a las avanzadas españolas enviados por Aymerich desde Alausí. El delegado Sr. Santacruz formó parte de la representación de Naranjal para la sanción del reglamento del gobierno, que fue como la primera constitución del Estado Libre de Guayaquil, realizada el 8 de noviembre de 1.820. Organización territorial La ciudad y el cantón Naranjal, al igual que las demás localidades ecuatorianas, se rige por una municipalidad según lo estipulado en la Constitución Política Nacional. La Municipalidad de Naranjal es una entidad de gobierno seccional que administra el cantón de forma autónoma al gobierno central. La municipalidad está organizada por la separación de poderes de carácter ejecutivo representado por el alcalde, y otro de carácter legislativo conformado por los miembros del concejo cantonal. El Alcalde es la máxima autoridad administrativa y política del Cantón Naranjal. Es la cabeza del cabildo y representante del Municipio. El cantón se divide en parroquias que pueden ser urbanas o rurales y son representadas por las Juntas Parroquiales ante el Municipio de Naranjal. Parroquias Urbanas: Naranjal Parroquias Rurales: Jesús María San Carlos Santa Rosa de Flandes Taura Limitaciones del Cantón Naranjal AL NORTE: Limita con el cantón Durán, AL SUR: Limita con el cantón Balao, AL ESTE: Limita con las provincias de Cañar y Azuay, AL OESTE: Limita con Guayaquil Símbolos del Cantón Escudo El escudo del cantón naranjal simboliza la gloria, la libertad, la paz y la riqueza del cantón. Bandera La Bandera está constituida por listones verticales de color verde, rojo y blanco Geografía El cantón Naranjal está ubicado al suroeste de la provincia del Guayas. Limita al Norte con los cantones Durán y El Triunfo; al sur con el cantón Balao; al este con las provincias de Cañar y Azuay; y al oeste con el Golfo de Guayaquil. Los ríos del Cantón de Naranjal que atraviesan el cantón son el Tura o Boliche, con su afluente el Culebras, que riega el norte del cantón, los ríos Cañar y el Naranjal que atraviesan el cantón y al sur corren los ríos San Pablo, Balao Chico y Jagua en cuyas aguas viven peces como el barbudo, vieja, bocachico y ratón. Biodiversidad En cuanto a flora en el sector existen chisparo, matapalo, cade, clavellin, laurel, guaba de río. También existen plantas de roca como la toquilla de roca, begonias silvestres, helechos epifitos, caña guadua, entre otros. La fauna es muy variada, entre los se encuentran guantas, conejos, loros, diversos tipos de monos; también hay una gran diversidad de anfibios e invertebrados. Atractivos Turísticos y Fechas Cívicas Las Chozas Las mismas que están hechas con hojas de bijao y caña, donde los visitantes pueden detenerse para probar los platos típicos de la cultura Shuar, como el ayampaco de pescado, pollo, guanta y res; y otros propios de esta región de la Costa, como es el arroz con pollo, seco y pescado frito. La cascada Tuna que se encuentra a dos horas del Centro Shuar, una espectacular caída de agua de 20 m de altura, en donde cuenta la creencia shuar, de 17h00 a 18h00, es muy probable observar espíritus buenos que purifican a quienes se le aparecen. Las Piscinas el centro shuar tiene dos piscinas grandes. La primera tiene 1 metro de profundidad y una temperatura es de 40º. La segunda tiene 1,50 metros de profundidad y una temperatura es de 40º. En el sitio cuenta con vestidores y varios chorros de agua fría y caliente.4 15 de Octubre El memorable acontecimiento histórico del 15 de octubre de 1820 se suscitó la Independencia de Naranjal, ya que se consideraba parte de la jurisdicción de Cuenca, el cual tubo mayor relieve al Estado Libre de Guayaquil tan pronto de su Independencia. 07 de Noviembre En esta fecha se suscitó la Cantonización de Naranajal en el año 1960 Actividades Festivas En este cantón se realiza los rodeos montubios en los meses de Octubre y Noviembre, inclusive se realizan lidia de gallos. Comidas Típicas Lomito de Cangrejo Este es uno de los platos típicos en el cantón naranjal, el cual es paracido al lomito saltado, pero se le añade pulpa de cangrejo, papitas fritas y nabo Seco de Pato Este plato se lo sirve con arroz, maduro o patacones; es uno de los platos típicos del cantón naranjal Turismo El principal atractivo turístico del Cantón Naranjal es la Reserva Ecológica "Manglares de Churote". En este manglar de la formación vegetal que se desarrolló en zonas litorales de los países tropicales, en aguas salinas influenciadas por las mareas. Los árboles que prosperan en este medio pertenecen a la familia Rhizophorraceae. Es un ecosistema limitado por las más altas mareas de agua salobre donde crece diversa flora, el árbol de mangle es uno de ellos además de una variada fauna de cangrejos, conchas, ostiones, mejillones, jaibas, ect. Centro Shuar de Aguas Termales El Centro Shuar consta con una diversidad de animales exóticos además es reconocido por sus famosa aguas termales y su alto poder curativo, ellos poseen la cultura indígena Shuar representan sus costumbres con rituales a su Dios, son muy amigables. El Centro Shuar de Aguas Termales está ubicado a 8 Km. de la vía Panamericana, pasando el cantón Naranjal, a la entrada de Balao Chico, a una hora y media de Guayaquil. Reserva Ecológica Manglares Churute La Reserva Ecológica Manglares Churute es uno de los Patrimonios Naturales de la Provincia del Guayas, es un atractivo en donde aún se conserva un manglar lleno de fantasía e historias, leyendas de una montaña encantada, envuelta en los trinos de los pájaros y monos aulladores, Churute apunta al mundo como un destino turístico. La Reserva Manglares Churute se encuentra en el cantón Naranjal, a 45 minutos en carro desde Guayaquil en la vía a Machala. Cerro Hayas El Cerro de Hayas, es uno de los atractivos turísticos de Naranjal provincia de Guayas, está ubicado en las estribaciones de la cordillera de Molleturo. Se encuentra a 670 metros sobre el nivel del mar. Cuenta con una variada vegetación Por lo que su ubicación se localiza en las estribaciones de la Cordillera Molleturo al Sur del Cantón Naranjal, en el Km. 4 de la vía Naranjal Machala a la izquierda. Cuenta con una Flora de Platanillo, bijao, helechos, cadillos, bromelias, heliconias, camachos, orquídeas, palmas. Adheridos al suelo están los líquenes, musgos, hongos y piñas, además plantas medicinales y contra insectos. Transporte Sus vías de acceso están asfaltadas en buenas condiciones, las siguientes cooperativas tienen este destino: Rutas Orenses, CIFA, PULLMAN y SAN, el viaje dura una hora y veinte minutos desde Guayaquil. Producción Naranjal es una zona agrícola. Se cultiva cacao, tabaco, caña de azúcar, arroz, café, banano y gran variedad de frutas. Es importante la existencia de maderas industriales. En las extensas zonas de pastizales se cría ganado vacuno y caballar. La crianza de chanchos y de aves de corral, es un reglón económico muy importante del cantón. En las montañas de Naranjal hay monos, tucanes, loros, guatusas y otros animales. De su comida se destacan los platos a base de cangrejo y las bebidas a base de cacao, caña, jugo y yogurt.7 Productos y cosechas del Cantón Naranjal El Cantón Naranjal es una tierra fértil, donde la agricultura constituye uno de los rubros más importantes en la economía, ya que posee una riqueza cultural y natural muy poco aprovechada para forjar el desarrollo socio-económico de los habitantes a través del turismo. La producción agrícola y de pesca en el cantón Naranjal, puede ser utilizada como vía para el turismo de esta ciudad, pero se debe identificar la competencia potencial del cantón y crear estrategias que hagan de Naranjal una zona altamente atractiva y competitiva. Su producción también genera a personas oriundas o residentes de Naranjal empleos directos e indirectos según la afluencia de turistas. Esto sin duda alguna mejora la calidad de vida. El comercio local es una de las actividades que genera muchas divisas, encontrándose un comercio dedicado a la compra y venta de los productos que provee de insumos necesarios para la actividad camaronera, agrícola y ganadera. Sin embargo, esta no es aprovechada. https://es.wikipedia.org/wiki/Cant%C3%B3n_Naranjal Inmerso en la naturaleza: Las 7 cascadas de Naranjal ESCRITO POR: ANDRÉS GARAY A solo hora y media de Guayaquil está la aventura que estás buscando. En el cerro de Hayas está uno de los más populares atractivos turísticos del cantón Naranjal. En la cordillera de Molleturo encontrarás uno de los bosques protegidos del país, de clima húmedo con increíble flora, fauna, árboles frondosos y espesa vegetación, prepárate porque eso indica que has llegado a las 7 cascadas de Naranjal. En este lugar lleno de misticismo y leyendas, se dice que en la cúspide de la vertiente hay enterradas grandes cantidades de oro y más de uno de sus habitantes corre el rumor de que ovnis visitan frecuentemente la punta de este cerro. Es más, muchos de ellos aseguran que en las noches pueden ver extrañas luces que aparecen en la cima. La escalada a las cascadas es un recorrido de aproximadamente 4 horas – ida y vuelta – a través de senderos propiamente señalizados y subiendo casi 250 metros sobre el nivel del mar desde la primera a la última vertiente. Si te atreves, podrás meterte en una de las pozas de cada cascada, que se forman a través de las caídas de agua y riachuelos. Podrás nadar y también dejar que fuertes chorros de agua te den un buen masaje natural. Es un viaje de aventura, destreza, que tiene cierta exigencia física pero que fácilmente la puedes disfrutar con amigos o con tu familia. El recorrido nunca se vuelve aburrido y los comuneros se han organizado para ofrecerte un momento lleno de diversión. Es más, por un costo adicional puedes solicitar el servicio de guía que te acompañe durante el camino y te explique con mayor detalle los atractivos y características del lugar. Las fotos hablan por si solas, la altura y espesor de sus árboles te rodearán durante tu visita, la exuberante vegetación y la gran cantidad de escaleras naturales, cada una con sogas que sirven de pasamanos, te harán olvidar que estás en la Costa ecuatoriana y que te traslades, por un momento, a la Amazonía. Llegar a las tres primeras cascadas tiene cierta facilidad. Atravesarás pequeños riachuelos para luego toparte con la primera vertiente de 4 metros de altura y poca profundidad de su poza que la vuelve ideal para que los más pequeños de la familia se diviertan. La verdadera aventura comienza a partir de la tercera cascada, que tiene una caída de 14 metros y 7 metros de profundidad en sus aguas donde será imposible no querer nadar. Mis cascadas preferidas, comienzan desde la cuarta. Ayudándote por cuerdas, deberás escalar un empinado sendero en medio de raíces que sobresalen del suelo y exigirán mucho de tu destreza pero te aseguro que vale la pena. La cuarta cascada pone a prueba tu agilidad. Para llegar a ésta, debes subir por un sendero muy empinado (aproximadamente 60° de inclinación) con la ayuda de sogas y ramas. La cascada en si no tiene mucha profundidad, pero su potente chorro sirve para relajarte y disfrutar del poder de un masaje natural. La quinta cascada es la preferida por muchos ya que puedes lanzarte clavados desde lo alto de las rocas que la rodean. Las cascadas que siguen, son mucho más grandes y altas, donde también encontrarás grandes piedras y podrás descansar, comer algún snack y admirar caídas de agua de hasta 22 metros de altura. Existen dos cascadas adicionales, que no son de fácil acceso, por lo que se ha limitado su paso. En el recorrido escucharás aves como colibríes, golondrinas, lechuzas entre otros, además hay insectos, reptiles y mamíferos que también rondan el lugar, pero se esconden al ver humanos. Los habitantes de esta cooperativa se han organizado para ofrecer todo lo que este viaje necesita para ser inolvidable. El valor cultural del sector así como el compromiso de quienes viven ahí, se ve reflejado en la limpieza del lugar, los puestos de comida a lo largo del inicio del sendero, donde encontrarás, choclo y maduro asado, seco de gallina y arroz con menestra y carne. Seguro querrás probarlos luego de haber disfrutado del paseo. https://www.viveviajando.ec/destino/cascadas-de-naranjal El cerro de Hayas, en el cantón Naranjal, propone un sendero natural sembrado de hermosas cascadas que brotan con rugidos desde la montaña. Primera recomendación: llevar zapatos para caminar en la montaña y, sobre todo, ingresar en el río Minas. La profundidad es mínima (máximo hasta la rodilla), pero olvídese de que la excursión en el cerro de Hayas es un paseo por el centro comercial. Nada de eso. Tiene que estar pilas para caminar sobre las rocas de ese tímido afluente, escalar con cuerdas y tomar senderos empinados entre la vegetación. Pero también debe estar con los sentidos atentos para pasarla genial. El recorrido a las siete cascadas del cerro de Hayas se localiza a una hora y media de Guayaquil. Se toma por el puente de la Unidad Nacional rumbo a Naranjal, poblado que se atraviesa para avanzar 5 kilómetros por la vía a Machala hasta llegar a un desvío a mano izquierda, bien señalizado con el nombre del cerro, hacia un camino secundario de 2,8 kilómetros de extensión, que nos deposita en el recinto Cooperativa 23 de Noviembre. Ese es el punto de partida para la excursión a pie. Se pagan $ 2 por persona por el ingreso (niños de 7 a 11 años es $ 1), $ 1 por vehículo y $ 20 en caso de requerir guía, que puede atender a grupos de hasta 20 personas. Bien vale pagar ese valor para tener a un experto en el paseo. Más facilidades Esta es la segunda oportunidad que visitamos las siete cascadas del cerro de Hayas. La primera vez fue en abril del 2012. En esa ocasión no había parqueadero y se notaba la ausencia de facilidades para el tránsito de los visitantes en la montaña. Ahora luce distinto. El parqueadero tiene guardianía, hay comedores que venden seco de gallina, alquilan botas de caucho o zapatos de lona para los turistas ($ 1,50) y se han multiplicado las cuerdas y escalones que ayudan en los ascensos. Incluso se observan tramos con relleno de cemento, simulando rústicas veredas, para brindar más comodidad. La caminata comienza con una breve explicación del recorrido en el puesto de información, en donde hay que registrarse con una cédula de identidad. El paseo total requiere entre 3 y 4 horas, dependiendo del tiempo que el visitante dedique a tomarse fotos y bañarse en las cascadas. Por ello, el horario de ingreso todos los días es desde las 08:00 hasta máximo las 15:00. Aquí les presentamos una guía para conocer mejor este atractivo de la naturaleza, con información brindada por nuestro guía Luis Jadán (esto demuestra las ventajas de contratar al guía). Primera cascada. Para llegar a esta caída de agua, el sendero nos lleva primero a atravesar las transparentes aguas del río Minas. Sus rocas ayudan al cruce, pero también pueden provocar resbalones. Esta primera cascada es pequeña, de unos 4 metros de altura, con una piscina natural de 1,20 de profundidad, perfecta para familias con niños que no quieren complicarse mucho. Pero es mejor siempre supervisar el baño de los pequeños. Segunda cascada. Se asciende un poco más para llegar a esta caída de 6 metros de alto, con piscina natural de unos 2 metros de profundidad, apropiada para jóvenes que sepan nadar. Para continuar hay que subir por escaleras verticales de metal. Tercera cascada. Aquí comienza lo complicado. También lo más espectacular. Esta caída tiene unos 14 metros de altura y suele convocar a los nadadores más expertos, porque la poza tiene unos 7 metros de profundidad. Cuarta cascada. Para avanzar hasta aquí hay un tramo complejo que asciende por cuerdas y raíces de los árboles. Esta cascada de 6 metros es muy recomendada para las fotos, ya que no tiene piscina natural, solo una poza de baja profundidad. Quinta cascada. Aquí vienen los clavados. Al llegar a este punto, los bañistas escalan para darse un chapuzón en esta cascada de 6 metros de altura, que se convierte en un parque acuático. Hay que tener precaución. Sexta cascada. Tenemos en esta zona otro tramo que requiere cuerdas para el ascenso hasta llegar a esta caída de agua de 4 metros. Las familias cuentan con amplio espacio para descansar y tomarse fotos. La caída alimenta una agradable piscina natural. Séptima cascada. Llegar hasta acá es el premio. Mínimo han pasado 70 minutos desde que se comenzó a caminar, así que sin duda se llega agotado después del ascenso. Los bañistas disfrutan al observar este salto vertical de 22 metros de altura. Las familias descansan en las rocas. Octava y novena cascadas. ¡Sí, hay dos cascadas más! Aunque el destino se llama 7 cascadas del cerro de Hayas, existe este espectacular bono. La octava (unos 20 metros) se luce con dificultad junto al sendero, y no brinda acceso. Pero la novena se muestra fantástica con su salto de 16 metros para seguir gozando http://www.larevista.ec/viajes/viajemos/visita-a-las-cascadas-de-naranjal