ÉTICA BÍBLICA CÁPITULO I-III SINTESIS TANIA CLEMENTE PÉREZ PASTOR MAURO Las preguntas de la ética Capítulo I Para que nuestra conducta sea digna la aprobación, Debe ser buena en tres sentidos el fin, el motivo, y el medio. ¿A que nos está llamando y capacitando Dios? Dios quiere manifestar su soberanía y su poder. El acto soberano de Dios en que, a través del espíritu Santo, capacita al oyente al responder al evangelio con arrepentimiento, fe y obediencia. La meta final de nuestro llamado es la vida eterna, el premio celestial, el reino de Dios y la gloria de Dios. Hemos sido llamados a pertenecer a Cristo a vivir una vida Santa y seguir su ejemplo en sufrimiento por causa de justicia. Por la misericordia de Dios, nosotros llamamos a ni porque nos amó. Nosotros le amamos a Él porque él nos amó primero. Así como Jesús presentó su cuerpo en sacrificio voluntario por nosotros, al ser vivificados por el espíritu de Dios, debemos ofrecernos voluntariamente y activamente a Dios como sacrificios de gratitud y alabanza. El servicio cristiano no es mera actividad sin pensar, por simple cumplimiento del deber; involucra la mente y no sólo el corazón y la voluntad. Lo bueno es la voluntad revelada de Dios. Agradable o aceptable, y el Dios de paz … Os haga a aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo el en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo. Por lo tanto, lo bueno es hacer lo que es agradable delante de él. La voluntad de Dios es perfecta o completa, la percepción moral de Dios mismo, pero expresada de tal manera que un ser humano puede imitarla. La meta de la santificación es la percepción de la naturaleza humana, que ha sido creada a la imagen de Dios. La ética cristiana es el estudio de la vida que se conforma a la voluntad de Dios -el estilo de vida que es bueno, que agrada a Dios, y que perfeccionan la naturaleza humana. Nosotras podemos conocer la voluntad de Dios a través de la palabra de Dios ya que es clara y suficiente para cumplir este propósito, para que el hombre sea preparado para toda buena obra. Tenemos que discernir la voluntad de Dios. El enfoque bíblico de los valores es que son objetivos y normativos. La Biblia supone que debemos buscarlos y desearlos, porque son valiosos. Sólo el espíritu Santo produce el deseo de demostrar estos valores con nuestra vida. Cristo es la encarnación definitiva de la excelencia moral. Por lo tanto, la ética cristiana es el estudio del estilo de vida que se conforma a la voluntad de Dios, que se ha revelado en Cristo y en las escrituras, siendo iluminado por el Espíritu Santo. Así que el propósito principal de la vida cristiana es la gloria de Dios; el motivo principal de la vida Cristina es el amor hacia Dios; y la norma principal de la vida cristiana es la voluntad de Dios, revelada en Cristo y en las escrituras. Página